Mitavi, no sé si esto era lo que querías pero fue lo que me salió XD

Espero que les guste~

Petición de: Mitavi_Chan

Habían estado explorando "Ciudad Creepy" cuando el piso de repente cedió, haciendo que Ink y Bendy cayeran con un grito a lo que parecía ser un pozo medio escondido con mucha agua en su interior. Los demás no pudieron evitar reír un poco ante aquello, mientras el par gruñía entre dientes. El agua a la que habían caído era de un verde oscuro, casi negro, y olía realmente horrible allí.

-Oleremos mal durante días- gruño Ink sin poder evitarlo, alzando las orejas.

-Espero que no...- Bendy agarro las manos ajenas, sonriendo ligeramente. -...esto huele tan horrible que siento que se me va a caer la nariz...¡y ni siquiera tengo una!- ambos rieron ante aquello, la coneja haciendo girar las orejas y empezando a volar con el demonio aferrado a ella hasta poder salir del pozo, viendo con falso enojo hacia sus amigos, quienes se estaban esforzando en dejar de reír. -Me alegro que el espectáculo les guste~- se cruzo de brazos apenas sus pies estuvieron en tierra firme.

-L-Lo siento m-mucho- Mickey tosió un poco, logrando ahogar su risa.

-Son malos, todos ustedes- bufo ella.

-Esta bien, esta bien...lo siento- Félix sonrío, sacando un par de toallas de su bolso. El par acepto el gesto, tomando las toallas para secarse un poco, notando en ese momento que el olor empezaba a desaparecer lentamente.

-Mejor volvamos al castillo- Oswald hizo un gesto, señalando la dirección por donde habían venido.

-Si, apestan- sonrío Cup con diversión, su hermano riendo ligeramente a su lado.

-No tanto como tu, Copita- le saco la lengua. Empezaron a caminar pero el par apenas pudo dar unos pocos paso cuando de repente se sintieron mareados, un punzante dolor viniendo desde sus pecho y extendiéndose rápidamente por todo sus cuerpos. -Oigan...- trago en seco, sintiéndose algo entumecido de repente. Se dejo caer al suelo, en posición fetal, acurrucándose con un gemido.

-...no me siento muy bien- ella hizo una mueca, un nudo formándose en su garganta. Tenía un mal presentimiento.

-¿Qué esta...?- se voltearon a verlos, deteniéndose en seco y abriendo los ojos con gran sorpresa. Podían ver como el color negro del pelaje de Ink empezó a desaparecer hasta volverse blanco como la nieve, al mismo tiempo que su ropa se volvía oscura. Sus dientes parecían volverse afilados, algo negro inundando sus ojos rápidamente y sus pupilas volviendo de un color rojo brillante.

-¿Ink?- la llamaron con algo de duda, ella estaba quieta en su lugar, tiesa.

-Ho...- parpadeo un par de veces y, de repente, simplemente sonrío y ellos retrocedieron un paso, temerosos. No se veía como una sonrisa amable o divertida, si no más bien aterradora. -¿Quieren jugar~?- rio, un escalofrió recorriendo el cuerpo de los presentes. Ella hizo un gesto muy familiar con la mano pero en vez de su usual martillo colorido, había lo que parecía ser un hacha de colores oscuros. Eso no era nada bueno. -A mi amigo le gustaría tener muñecos nuevos~-

-¿M-Muñecos?- Mug tembló.

-¿A-Amigo?- tragaron en seco cuando una alta figura se paro tras la coneja. Era de color negro y se veía algo esquelético, de largas extremidades y con dedos en forma de garras, podían reconocer los cuernos de Bendy pero estos se veían algo largados y deformados, con una gran sonrisa llena de dientes afilados y las frente cubierta en tinta que aun goteaba pero algo rojo brillaba a través de lo negro, de seguro era uno de sus ojos.

-¡Juguemos~!- rio alegremente y entonces, los demás reaccionaron. Corrieron como locos, sin saber a donde se dirigían pero con el objetivo de huir de quienes hace no mucho tiempo eran sus amigos. No sabían lo que había pasado exactamente pero esperaban que pudieran solucionarlo.