El sol iluminaba los heteróclitos espacios de las islas hirvientes y el aroma a rocío en el aire le transmitía calma a la bruja de pelo bicolor que caminaba por el bosque dirigiéndose a la casa búho. Amity se dirigía hacia ese lugar porque tenía que contarle a Luz dos cosas muy importantes, número 1: El contenido de los archivos de la última misión; y número 2: Había una nueva ubicación en el mapa.

La humana se encontraba en su habitación releyendo uno de sus libros de Azura, cuando la chillona voz de Hooty la desconcentró, el carismático adorno de puerta parecía estar gritando algo, Luz agudizó su oído y entonces escuchó:

—¡¿Crees que puedes superar el estilo "Hoot Hoot", intrusa?!

Entonces una voz conocida para la latina respondió.

—¿Qué?, no, ya te dije que no quise golpearte, no sabía que...

«¿Acaso esa era la voz de Amity?», Luz asomó su cabeza por su ventana para escuchar más claramente.

—¿Crees que puedes atacar a Hooty y no sufrir las consecuencias?

—Ya te dije que... No importa, regresaré después...

Era Amity sin lugar a dudas. La humana bajó a toda velocidad y abrió la puerta mientras escuchaba al búho-adorno exclamar:

—Eso es, mejor huye, si no quieres que este búho te... —Hooty fue interrumpido por la acción de Luz.

—¿Amity? —llamó.

La mencionada se giró al escuchar su nombre.

—Luz —Pensó en que lo más probable es que escuchara el incidente—, no tenía idea de que tu adorno de puerta estaba vivo.

—¿Hablas de Hooty?

El nombrado estiró su cuerpo.

—Me golpeó, Luz —se quejó.

—¿Has pensado en que puede que lo halla hecho porque eres una puerta?

Hooty se quedó en estado reflexivo.

—¡Entra! —invitó la alegre humana mientras miraba a la bruja—, a no ser que solo pasaras a saludar, no es que estés obligada a entrar ni nada —rio incómodamente al no estar segura de cuales eran las intenciones de la bruja al ir a la casa búho.

La bruja de pelo bicolor avanzó de nuevo hacia la entrada y Luz le dio espacio para que entrara.

—¿Está tu... Tutora? —Amity todavía recordaba a la bruja que estuvo dispuesta a dejar que la bestia en la nieve se comiera a sus hermanos para que ella pudiera escapar.

—Eda se fue con King a conseguir especias mágicas para intentar potenciar su poción, la habría acompañado, pero la semana fue agotadora así que decidí quedarme y no hacer nada —explicó.

—Ya veo —una parte de Amity no quería arruinar el día de descanso de su amiga, pero entonces ¿Qué excusa tendría la bruja para justificar su visita?

—¿Quieres algo de beber?

—Sí, gracias.

Las dos se sentaron en el mueble de la sala y Luz preguntó amablemente:

—¿A que se debe esta agradable visita? —Sorbió de su jugo. Aunque la latina tenía el presentimiento de que tendría que ver con lo del día anterior, lo que deseaba era que le respondiera que sólo vino para leer con ella, o para hacer roleplay.

—Pues, quería contarte qué es lo que tenían los archivos que nos llevamos en la última misión.

—¿Algo sobre tu padre?

—No... —empezó con tristeza— Pero, tenían información bastante... ¿Delicada? —Amity no sabía como describir lo que había descubierto, ya que no lo entendía por completo.

—¿Qué encontraste?

—Descubrí que el mago que nos atacó en la tienda de muebles era uno de los nuevos concejales del presidente del senado, junto con el otro uniformado, son hermanos.

—¿Crees que esté bien?

—Pues, si pude sacarte a ti del control de ese iudex probablemente a él también lo hayan salvado —La bruja sacó el archivo del que hablaba del morral que trajo consigo—. Mira —exhortó.

Luz leyó por partes el documento y después levantó una ceja en señal de que había algo raro en el archivo, releyó lo que no entendía, pero siguió sin verle la lógica.

—Aquí dice que el presidente del senado asesinó a los padres de los hermanos ¿Por qué se harían sus concejales entonces?

—Sigue leyendo —respondió.

La humana hizo lo que se le dijo y entonces cambió su expresión a una que mostraba algo de miedo.

—El-El los mató cuando los hermanos eran solo niños... Los crio como si fueran suyos.... Que, turbio —dijo con disgusto.

—Eso no es lo más tétrico, ese "senado" considera como crimen el tener una relación romántica con alguien del mismo sexo, han matado a personas por ello ¿Puedes creerlo?

Cuando Luz escuchó eso no pudo evitar pensar en su mundo y en como había lugares en los que aún te podían condenar a muerte solo por no tener la orientación sexual más común.

—¿Aquí es normal tener una relación con alguien de tu mismo género? —tanteó.

—¡¿En el mundo humano no lo es?! —respondió algo alarmada.

—Pues... hoy en día sí lo es, y eso me alegra mucho, pero en mi dimensión aún hay personas que creen que es un delito contra su religión o que no es natural —dijo con la mirada baja, como avergonzándose por su especie.

—Oh. Aquí en las islas hirvientes también hay algunas personas a las que no les agradan ese tipo de relaciones, pero a la mayoría le da igual; sin embargo, estoy segura de que incluso a las personas a las que les desagradan estas cosas jamás matarían a alguien por eso...

—Bueno, créeme cuando te digo que los humanos somos buenos encontrando cualquier razón para matarnos entre nosotros.

—No creo que seas una humana cualquiera —La bruja respondió instantáneamente.

Luz se sonrojó por algún motivo, pero decidió cambiar el tema.

—¿Y qué más encontraste?

Amity decidió zanjar el tema también al creer que podía llegar a incomodar a su amiga.

—Esto es lo más raro que encontré —dijo mientras sacaba otro conjunto de papeles de su morral.

La humana recibió los documentos y les hecho una hojeada, pero no los entendió del todo.

—Y esto es...

—Es una resolución —dijo Amity.

—Oooh —La humana hizo fingió que entendía, pero al final sucumbió ante la duda—. Y eso es...

—Es un documento que aprueba una propuesta del senado —dijo captando al instante que la humana no entendió su primera respuesta.

—Y lo que aprueba es el... —leyó un poco más del archivo— ¿"El plan de reducción a la normalidad"'? —dijo con tono de duda al no saber a que se estaba refiriendo el documento.

—El archivo no dice nada muy específico sobre que es exactamente lo que se está aprobando, lo que me sorprende es quién lo aprueba —afirmó la bruja haciendo énfasis en la última parte—, ese "plan de reducción a la normalidad" está aprobado con el sello imperial.

—¿Significa que el emperador aprobó algo relacionado con ese raro "senado"?

—Eso es lo que no entiendo... Dudo que el emperador tenga alguna relación con esos psicópatas, sin embargo, ese sello es muy difícil de falsificar —Se puso una mano en la quijada mientras reflexionaba—, si pudieron hacerlo deben estar tramando algo muy, muy grande —finalizó.

—Sea lo que sea, viniendo de ellos, no puede ser nada bueno —dijo Luz mientras bajaba los papeles—. A tu padre le será muy útil esta información cuando regrese —dijo sonriente.

La mirada de la bruja se volvió a enfocar y se encontró con su alegre amiga, devolvió el gesto antes de decir:

—Tienes razón —Aunque Amity se había convencido de que hacía esto única y exclusivamente por ella misma, todavía había una parte de ella que quería que su padre estuviera orgulloso de ella.

—¿Eso es todo lo que había? —preguntó Luz.

—También había algunos archivos extremadamente detallados sobre como torturaron a algunos brujos por "incumplir el código de moralidad", aunque considerando lo que ellos consideran como delito, dudo que ese tal código de moral tenga algo de moral para empezar.

—Es una pena que ya no estén los otros mapas, ahora ya no podremos encontrar la relación que tiene tu padre y el senado.

Este comentario le causó repelús a la bruja, porque sabía lo que la humana le diría una vez supiera lo que le estaba por informar.

—Eso es lo otro por lo que vine... —Amity prefirió que el cristal se explicara por sí sólo, así que lo extrajo de su alforja y lo activó.

Luz revisó el holograma proyectado y después de hacer un ruido de sorpresa dijo:

—¡Apareció una nueva ubicación! —exclamó—, y la próxima reunión es... —leyó la fecha— ¡¿Hoy?!

Amity solo asintió. El ceño de la humana se frunció mientras parecía pensar en algo que la molestaba.

—Pues es un problema, porque no sé como decirle a Willow y Gus que vengan aquí...

Amity mentiría si dijera que no quería la ayuda que le podían dar los otros dos brujos, aunque no se sentiría muy bien interrumpir su fin de semana.

—Si tan solo tuviera uno de esos pergaminos mágicos... —deseó Luz— ¡Espera! Amity, tú tienes uno de esos pergaminos, ¿puedes mensajear a Gus y Willow para que vengan?

Después de una incómoda espera para que Willow y Gus aceptaran la solicitud de amistad de Amity para que pudiera enviarles mensajes, fue Luz la que terminó enviándoles audios en los que les pedía que fueran a la casa búho con urgencia y que trajeran sus máscaras, todo a través del pergamino de su amiga.

La bruja y la humana pasaron el tiempo de espera a que vinieran sus amigos examinando la ubicación y viendo que harían para entrar al a ubicación de la siguiente misión, Luz estaba emocionada por el lugar al que irían esta vez.

—¡Hola, chicos! —saludó Hooty cuando dos brujos se acercaron a él.

—Hey Hooty, ¿podemos pasar?

—¡Pasen! —respondió el búho mientras abría— ¿Me incluirán en su aventura otra vez?

—Lo sentimos, pero no podemos hacer que camines sin un conjuro con el poder de la luna —dijo Willow.

—Ouuuh —respondió desilusionado.

—¡Chicos! —saludó la humana.

—Espero no estar arruinando su fin de semana —dijo una apenada Amity.

—Pues ha sido una semana cansada —comenzó Gus cerrando la puerta—, pero en este punto hasta nosotros queremos saber que tienen que ver el senado con tu padre.

—En ese caso... ¡Les encantará el lugar al que iremos hoy! —exclamó la humana.

Los recién llegados se juntaron en el sillón de la sala para escuchar lo que la bruja de pelo bicolor tenía que decirles.

—... ¿Así que la nueva reunión es en el Hotel Willard? —inquirió Willow.

—¡Amity me dijo que ese hotel tiene 10 estrellas! —se alegró Luz.

—Es el más exclusivo en todas las islas hirvientes —confirmó Gus—, no creo que podamos entrar fácilmente...

—Por eso quería pedirte un favor —habló Amity— ¿Podrías hacer que nos viéramos como personal del hotel?

—Dalo por hecho —respondió el brujo mientras guiñaba.

—Gracias. Como les dije, esta vez el almacén de archivos se encuentra en el Penthouse, usar el teleportador principal sería demasiado obvio, porque ese da directamente a la sala de reuniones, por lo que Luz y yo pensamos que lo apropiado será ir por las escaleras para incendios.

—Suena bien —dijo Gus.

Willow se tomó algo de tiempo antes de decir:

—Por lo que sucedió la última vez... lo mas probable es que la seguridad esta vez sea otro brujo ¿No es cierto?

—Es lo más seguro —respondió Amity.

—La última vez no tuvimos ninguna oportunidad contra... —Willow no terminó pues fue interrumpida por la humana.

—Se me ocurrió algo para evitar que eso suceda —anunció—, la última vez estábamos en un lugar oscuro, por lo que no estaba segura de si mi collar estaba activado o no, pero ahora será distinto, en caso de que tengamos un enfrentamiento... ¡Yo seré su escudo humano-anti-magia hasta que ganen la batalla!

Amity se llevó la palma a la frente, ya le había dicho a Luz que con o sin el collar eso era peligroso y aún así la humana no había dudado en ofrecerse.

La bruja de pelo grisáceo sonrió ante lo que dijo su amiga.

—¿Son dos minutos de invulnerabilidad los que te da ese collar no?

—Correcto —dijo Luz mientras asentía.

—Ahora solo hay un pequeño detalle —comentó Amity, resignada a la valentía de la latina—, todavía faltan algunas horas antes de que inicie la reunión, el hotel está casi vacío ahora mismo, por lo que sería algo difícil entrar sin ser descubiertos, sin embargo, busqué en la cuenta de Penstagram del hotel y encontré que harán una fiesta prácticamente a la misma hora que inicia la reunión...

—Es entonces cuando entraremos —afirmó la humana con seguridad.

—¿No es algo... muy conveniente? —sospechó Willow.

—Es altamente probable que el senado esté detrás de esa fiesta, de hecho, probablemente quieren asegurarse de que vallamos, para poder atraparnos —confirmó la bruja de pelo bicolor.

—Si no pudieron hacerlo hasta ahora —comenzó Luz—¸dudo que esta vez lo consigan.

La confianza con la que decía este tipo de cosas era definitivamente lo que le brindaba al grupo las fuerzas físicas y mentales para poder continuar con estas misiones suicidas.

—Pero... ¿Qué haremos hasta entonces? —preguntó Gus.

La humana quiso responder rápidamente pues pensó que sería algo fácil de responder, pero se detuvo en seco antes de hacerlo al darse cuenta que, de hecho, no tenía idea de como matar el tiempo hasta la hora indicada.

—¿Alguien sabe jugar hechipoker? —preguntó Amity con algo de timidez.

Los otros dos brujos voltearon a verla con ojos inquisitivos.

Después de Gus y Amity intentaran explicarle a Luz y Willow las reglas básicas de la mejora manera, el juego comenzó, con bruja de pelo bicolor como crupier, ella había traído una baraja de estas cartas pues tenía pensado jugar con Luz, ella ya sabía que había ido bastante temprano a la casa de la humana, pero no considero que esta fuera a llamar a Gus y Willow tan rápido.

Ronda a ronda los tres jugadores hacían su mejor esfuerzo para poner cara de póker, sin embargo, casi siempre terminaban riéndose. Amity trataba de ayudar un poco a las otras dos chicas e involuntariamente (o al menos así era como ella lo veía) le dio al menos dos victorias fáciles a la humana.

—¡Vamos, no es justo! Ustedes tienen a Amity de su lado —se quejó el brujo mientras tiraba sus cartas en la mesa de mala gana.

—De hecho —dijo Amity mientras veía las cartas que el brujo arrojó—, hubieras ganado esta ronda con esa mano.

Gus, sonrió de modo extraño mientras un sufría de un pequeño tic en uno de sus párpados.

—Creo que deberíamos tomar un descanso —dijo Luz para calmar al brujo—, ¿Algo para comer suena bien? —preguntó tratando de calmar a su amigo.

—A mi me suena genial —añadió Willow sonriendo y dejando sus cartas a un lado.

El ilusionista respiró profundo y se calmó.

Luz fue a la cocina y regresó con bocadillos para compartir entre todos mientras jugaban con las cartas, después, disimularon lo mejor posible el hecho de que arreglaron la siguiente ronda para que fuera ganada por el brujo. Conversaron de muchas cosas mientras jugaban y la pasaban bien, el tiempo vuela cuando te diviertes y cuando el cuarteto se dio cuenta faltaban apenas 30 minutos para el inicio de la fiesta en el hotel Willard.

—Creo que ya es hora —dijo Gus mientras veía como su reloj-monstruo lo mordía a modo de alarma.

Aunque ya estaban muy cómodos ahí no habían olvidado lo que harían esa tarde, así que el cuarteto se encaminó hacia el prestigioso hotel.

Una vez en el lugar, Luz se maravilló por lo alto y bellamente decorado que era el edificio, al menos en la apariencia, definitivamente se merecía las 10 estrellas que literalmente brillaban debajo de donde estaba finamente escrito su nombre. El hotel en sí no era solo el edificio, sino que era también toda la parte trasera de este, que estaba cercada con un muro protegido con magia para no poder atravesarse.

El grupo rodeo el hotel y se dispuso a entrar por la parte trasera del muro, Willow los levantó a todos del suelo usando una gruesa rama, Gus lanzó una pequeña piedra que recogió del suelo para averiguar si había algún tipo de barrera mágica invisible, y ya que esta pasó sin problemas el grupo saltó hacia el otro lado, aterrizando en una abominación creada por Amity, que, aunque algo sucio, también fue efectivo.

Amity hizo que su abominación se fuera, y después de sacudirse los restos de esta, el grupo analizó exactamente el lugar donde estaban y rápidamente llegaron a la conclusión de que estaban detrás de un pequeño almacén de mantenimiento.

—Necesito ver como va vestido el personal para hacer que nos parezcamos a ellos —dijo Gus.

—No creo que sea un problema —respondió Luz, asomándose por uno de los lados del almacén.

Frente a ella, estaba una piscina gigante, alrededor de esta había una gran cantidad de invitados y trabajadores del hotel, que vestían smokings blancos y corbatas de moño muy elegantes. La humana se maravilló por como lo bellamente decorado que estaba el lugar, cada mesa, cada calefactor; el que lo hubiera decorado se preocupó por que cada cosa tuviera congruencia y se viera bien al lado de la otra.

Lilith estaba disfrutando de la reunión, de hecho, estaba en medio de una interesantísima conversación con el senador Lehmus cuando notó algo extraño a lo lejos, enfocó su mirada en esto y... «¿Era esa la "alumna" de mi hermana?, ¡¿Qué está haciendo aquí?!», dijo para sus adentros.

—Discúlpeme, senador, pero acaba de surgir una urgencia que debo atender —habló sin siquiera mirar al brujo. Se encaminó hacia donde creía haber visto a cierta humana.

El brujo del grupo también se asomó y tomó nota mental de como deberían ser las ilusiones esta vez, los otros 3 lo miraron atentos mientras él parecía concentrarse para realizar una proeza. Gus cerró los ojos, levantó ambos brazos y se dispuso a hacer un enorme círculo de hechizos con las puntas de sus índices, una vez lo cerró un brillo los envolvió a todos por un momento, cuando se desvaneció, todos parecían no solo mayores, sino que también tenían trajes iguales a los del personal del hotel.

El cuarteto decidió que se pondrían sus máscaras una vez estuvieran en el Penthouse, se dispusieron a dar la vuelta cuando vieron a algo, o mejor dicho, a alguien que había visto todo con una expresión de total sorpresa... Era uno de los verdaderos empleados de Willard, el boquiabierto mesero dejó caer la bandeja que llevaba y comenzó a alejarse con nerviosismo, pero antes de que se fuera Amity habló.

—¡Abominación, levántate!

La criatura se bloqueó el camino del brujo que acababa de ver algo que no debió y lo atrapó entre sus brazos, el mesero se retorcía, pero sus gritos por ayuda no fueron escuchados por nadie ya que el monstruo morado lo amordazó.

El grupo se acercó al pobre brujo sin saber que hacer exactamente.

—¡No puede ser, ni siquiera llegamos a entrar al edificio y ya nos descubrieron! —dijo Willow con molestia.

—¡Shhh! —la calló Amity, pues no quería que el mesero se supiera todavía más de la situación.

—No me "shushees" —respondió la otra bruja.

—Me parece que el mesero ya vio suficiente como para que también tuvieras que revelarle que queremos entrar al hotel.

La bruja de pelo grisáceo estuvo por objetar cuando la voz de la humana se lo impidió.

—Silencio todos —ordenó la humana, silenciando incluso los intentos del empleado por pedir ayuda— ¿Escuchan eso?

El imponente ruido de unos pasos acercándose a su ubicación llegó a los oídos de todos, parecía que alguien que usaba tacones altos estaba por llegar.

Los cuatro se miraron sin saber que hacer, la situación iba a ser inexplicable para cuando el extraño llegara, ¿Cómo justificarían 4 "meseros" tener a uno de sus compañeros atrapado con una abominación mientras discutían sobre qué hacer con él?, no podían simplemente amordazar a quién los descubriera o hasta los invitados comenzarían a sospechar, el grupo entró en pánico mientras intentaban pensar en que hacer.

Lilith estaba por llegar al almacén cuando juraría que escuchó un «¿Y por qué yo tengo que hacerlo?», al girar por la esquina del almacén se topó con uno de los meseros del lugar parado de espaldas, este giró lentamente, como si deseara que la tierra lo tragara. El rostro del mesero que estaba frente a la líder del aquelarre del emperador se le hacía extrañamente familiar.

—¿Está todo bien? —cuestionó Lilith—, creí escuchar un...

—¡Todo esta bien! —respondió Gus sin dejar a la bruja terminar—, estimada... invitada —terminó sin saber como referirse a la recién llegada.

La "estimada invitada", levantó una ceja por el raro actuar del camarero, volteó hacia todos lados, buscando a la humana que pensaba haber visto y al no encontrarla decidió solo asegurarse de que el mesero con el que estuviera bien.

—¿Está seguro? —inquirió la bruja mientras se asomaba para ver lo que estaba detrás del brujo.

Gus casi comenzó a temblar y volteó para ver como habían solucionado lo que pasaba allí, entonces vio como la abominación de Amity ya no estaba allí, en su lugar vio a sus 3 amigos agachados frente a alguien en el suelo... «¡¿Willow lo amordazó con plantas?!, por favor que no se de cuenta, que no se de...»

—¿Está bien tu compañero? —preguntó Lilith al ver al personal arrodillado frente a lo que parecía otro mozo.

—¡Está perfectamente! —mintió el brujo mientras intentaba evitar que la otra viera más—, sólo... se desmayó por falta de aire...

La líder del aquelarre se alarmó al escuchar eso.

—¡Por Dios! ¿Puedo ayudar? Estoy entrenada para...

«¡Maldición!», pensó el brujo

—¡No será necesario! —exclamó. Gus pudo ver la incredulidad en el rostro de la bruja, en ese momento supo todo empeoraría si no se calmaba e intentaba actuar de modo normal, respiró y prosiguió— El personal del hotel está capacitado para estas situaciones, le aseguro que mi compañero estará sirviéndola en unos momentos. Mientras tanto, no debería perderse de la fiesta que está por allá —dijo fingiendo una sonrisa y rezando para que la gota de sudor en su frente no se deslizara hacia abajo.

Lilith al principio pensaba que la situación era sospechosa, pero después de lo que le dijo el mesero ese pensamiento se esfumó; quien no estaría nervioso si uno de sus compañeros se desmaya en el hotel más prestigioso de toda la isla, si esto se supiera habría un escándalo, por lo que lo más seguro era que no quisiera su ayuda para no agravar más la situación. Al final la bruja solo atinó a despedirse.

—En ese caso, me retiro —se giró para volver a la fiesta— permiso.

Unos segundos después Gus se llevó la mano al pecho mientras lanzaba al aire el suspiro de alivio más grande de toda su vida, después se acercó a ver exactamente como habían solucionado sus amigos el "pequeño problema". Al acercarse observó a las dos brujas y humana estáticas frente al aún nervioso y amordazado mesero.

—¿De verdad no se les ocurrió algo mejor que atarlo con lianas y arrodillarse a su alrededor? —cuestionó con enojo.

—No es nuestra culpa que este sea un callejón sin salida —afirmó Willow, describiendo la pequeña parte trasera del almacén.

—No sé que hubiera pasado si no se me ocurría lo de que un mesero se desmayó por falta de aire —dijo Gus.

Las tres intercambiaron miradas de incredulidad por como esa mentira había funcionado.

Después de dejar al pobre mozo dentro del almacén y deseando que no se liberara mientras ellos seguían ahí, el cuarteto avanzó con cautela hacia el imponente edificio. Se separaron porque sería extremadamente raro ver a 4 mozos caminando juntos hacia el edificio y se reunieron en la entrada, ahí pudieron ver el ajetreo que había en el interior de la recepción del hotel, que estaba más o igual de llena que el exterior, había mozos entrando por lo que no fue difícil mezclarse entre ellos.

Llegaron una parte más oculta donde estaba la escalera de emergencia y se alegraron de que ningún otro inconveniente interviniera en su camino. Todos se desanimaron mientras subían las interminables escaleras de caracol.

Cuando finalmente llegaron al piso más alto se tomaron unos segundos para retomar el aire, se pusieron sus máscaras y entraron. Frente al grupo había un deslumbrante pasillo, parecía el de una mansión lujosa delante de este había un gran salón vacío cuyos bellos pilares de arquitectura barroca eran armoniosos a la vista.

Amity revisó el mapa y el grupo siguió con extrema cautela, sintiendo que en cualquier momento serían emboscados, quizás por un monstruo, quizás por un brujo, o quizás por ambos. A medida que se acercaban al almacén de archivos sus pulsaciones se elevaban, y la calma que había mientras caminaban por los lujosos corredores solo les hacía pensar que lo peor estaba por llegar.

Finalmente llegaron a lo que según el mapa era el almacén de archivos, aunque vacilante al principio, Amity fue la que abrió la puerta temiendo que algo los estuviera esperando adentro, pero una vez lo hizo, en el interior de la habitación no vio nada más que un archivador prácticamente igual al de los otros lugares. El incauto cuarteto entró a la habitación y entonces...

Una vieja canción llenó el silencio, frente a lo que parecía una casa familiar en una zona urbana cualquiera, las personas en el interior del lugar eran ajenas a esta. Una melodiosa voz acompañó la música cantando:

3 huerfanitos, un, dos, tres

Luz, Willow y Gus se asomaron por árbol.

Sin un hogar y su mundo al revés

Los 3 aparecieron tristes en lo que parecía un orfanato.

¡Pero un Brujo los adoptó!

Un brujo de pelo rubio recibió a los 3 con los brazos abiertos.

Una familia les regaló

Todos se abrazaron en la sala de la casa.

Sonriendo, aprendiendo, amando sin fin

¡Cada día más feliz!

En un intermedio musical, aparecieron todos compartiendo actividades familiares.

Perdidos y ahora estamos ya...

¡Ululando!

Klein, Gus y Willow estaban en la mesa del comedor hablando sobre algo.

—...Por lo que tenemos que revisar las cuentas con más cuidado —decía el brujo rubio.

Luz se asomó por la entrada de la cocina y preguntó:

—¿Qué está sucediendo aquí?

—Tenemos una reunión de familia —respondió Klein.

—Oh, ya veo, y excluyen a la humana ¿No? —Se escucharon risas—. Supongo que no soy parte de la familia.

—Luz, pensamos que estabas viendo "She-Ra y las princesas del poder" —dijo Gus mientras veía a su hermana.

—No, lo apagué. No soportaba a Sea Hawk y sus canciones —afirmó la humana.

—Pero a Sea Hawk le encanta quemar barcos —acotó Willow.

—¿Y a quién no? —dijo Luz.

Las risas enlatadas volvieron a sonar.

—¿Quieren dejar de hablar de "She-Ra" por un momento? —inquirió el brujo rubio.

—¡Claro que sí! —afirmó Luz para después cantar— ¡Fuerte hay que ser!, con todo el valor.

—Todo el valoooor —coreó Gus. Risas otra vez.

—Queremos continuar con la reunión —dijo Klein.

—Entiendo, la reunión a la que no fui invitada —se quejó Luz.

—Es sobre el presupuesto familiar —explicó el Brujo.

—¿Y qué creías que yo iba a hacer? —comenzó la humana— ¿Dominar la conversación? ¿Ser una molestia?...

—No, Luz nadie cree que...

—¿Hacer sugerencias sin ningún sentido? ¿Interrumpirlos a todos?

—Nunca dijimos que...

—¿Impedir que otro diera su opinión?

—¡Luz! —exclamó para parar la verborrea de su hija.

—¿Sí?

—Puedes venir a la reunión —dijo mientras la invitaba a entrar.

—No, gracias —dijo la humana mientras se retiraba.

Risas sin parar.

Minutos después, la reunión familiar continuaba.

—...Por eso creo que debemos ahorrar más en la electricidad —afirmó el brujo mayor.

—Yo apago la tele cuando no la estoy usando —se enorgulleció Gus.

Luz se acercó a la cocina otra vez y aportó a la conversación.

—Y yo apago la secadora cuando me levanto.

—Eso está muy bien Luz... Espera... ¿La secadora? ¿Y para qué la enciendes?

—Para que me acompañe mientras duermo.

Carcajadas.

—¿Qué? ¿8 horas son demasiadas? —añadió la humana.

—Sí —respondió su padre, con seriedad.

—¿Y si la pongo en ropa delicada?

—No la enciendas —dijo tajante— Continuemos con el próximo problema... Alimento —comenzó.

—Voy por unas galletas —anunció Luz.

—Creo que no están todos conscientes del costo de los alimentos —prosiguió Klein.

—¡Se acabaron las de vainilla!, sólo quedan de chispas de chocolate —añadió la humana.

—Sin mencionar, todo lo que se consume en la casa —habló mientras miraba a Luz.

—¿Pasha algño malo? —dijo con la boca repleta de galletas.

—Te estas comiendo todo el alimento —le respondió Gus.

—¿Todo el alimento? —inquirió la humana.

—Con excepción de lo que cae al suelo —dijo Willow viendo todas las migajas que desperdigaba Luz.

—Está bien, comienzo a comprender de qué se trata la sesión —comenzó la latina—, todos me consideran un parásito.

—Nadie te considera un parásito —dijo su padre.

—Entonces, ¿Una saqueadora?

—Saqueadora es más adecuado —confirmó el brujo mayor.

—¿Qué les parece "depredadora"? —dijo Gus.

—¿Dónde escuchaste eso? —preguntó Willow.

—Así es como le dijiste la semana pasada —respondió el pequeño brujo.

—Conque esas tenemos —dijo Luz.

—Dejémoslo en parásito y continuemos —sugirió la bruja.

Las risas se dejaron oír otra vez mientras todo se oscurecía por un momento.

Cuando todo se iluminó otra vez, los 3 se encontraban en la escuela, tomando clases de anatomía.

—Elymas magus sapiens —decía el profesor mientras usaba a Gus como ejemplo de su especie—, el brujo moderno, como ven camina totalmente erguido, tiene pulgares opuestos y es conocido porque...

—Le pone nombre a su ropa interior —interrumpió Amity, haciendo que todos en la clase se rieran.

—Puede sentarse alumno. Evolucionamos de los magus neandertalis. Ahora, ¿Alguien puede decirme que había antes de los magus neandertalis? —preguntó a la clase.

Amity levantó su mano y esperó fervientemente que el profesor la señalara para responder.

—Existían los compuestos prebiológicos del mar de sangre —dijo orgullosa.

El resto de la clase no entendió la respuesta de la bruja de pelo bicolor.

—Lo que su compañera quiso decir es que hace millones de años estábamos esperando la forma de vida inferior que saldría arrastrándose del fango...

—Ya llegué —dijo Luz mientras entraba tarde a clase, todos sus compañeros se rieron por como completo la oración del profesor—. ¿Qué?

—El maestro estaba hablando de ti —dijo Amity para molestar a Luz.

—Estaba con el profesor de ilusiones, ¿me perdí de algo? —preguntó la humana al profesor.

—200 años de evolución, humana —respondió mirándola.

Esta vez las risas no fueron de sus compañeros.

Todo fundió a negro otra vez, cuando la luz se hizo una vez más, todos estaban en el comedor.

—¿Irás a lo de esta noche? —Boscha le preguntó a Amity.

—No sé si mis padres me dejen —respondió neutral.

—¿Por qué no haces lo que yo? —inquirió la bruja de 3 ojos—, decirles que vas a un viaje de prácticas de "astrología".

—¿No será astronomía? —corrigió.

—Vaya, mis padres me ponen menos atención de la que pensaba —respondió sonriente.

Carcajadas.

—Será divertido —dijo la bruja de pelo verde confirmando que iría a la fiesta que daría Skara esa noche.

El timbre sonó y todos comenzaron a retirarse de la cafetería, a medio camino Willow se chocó con Boscha por accidente.

—¡Mira por donde andas, cuatro-ojos! —dijo la bruja de pelo magenta.

—Fue un accidente, lo siento...

—No te disculpes, Willow —exhortó Luz— ¿Quién te crees para hablarle así a mi hermana?

—Alguien que no cree que un sinónimo de buceo es museo, humana incompetente —dijo Amity mientras se volteaba para apoyar a Boscha.

Luz comenzaba a molestarse.

—Todos cometemos errores —se defendió la humana.

—Algunos más que otros —respondió la bruja de pelo bicolor viendo a Luz de pies a cabeza y después riéndose.

La bruja de 3 ojos se rio con la otra y se dispuso a marcharse, pero la humana no se dejaría pisotear así como si nada, se acercó a Amity y le dijo:

—Al menos yo, no soy una oxigenada engreída —Lo que dijo la humana hizo que varios brujos se voltearan a ver la discusión.

Y una Blight jamás pierde una discusión. Amity se giró y vio a los 3 hermanos, Willow y Gus tenían la cabeza baja y parecían no querer estar ahí, pero Luz parecía lista para una pelea.

—Escúchame bien, humana, nadie me habla así...

—Pues yo sí —replicó Luz.

Amity hizo un círculo de hechizos con su mano creando una pequeña porción de hielo debajo de los 3, haciendo que estos tropiecen y caigan dolorosamente.

—Como estaba diciendo, nadie me habla así, mucho menos un trío de perdedores adoptados —finalizó para después irse.

Todos los que veían se comenzaron a reír de los hermanos, quienes intentaron levantarse, pero se resbalaron en el intento, volviendo a caer y avivando las carcajadas de sus crueles compañeros.

La bruja de pelo bicolor ya se había alejado bastante, se giró sólo un segundo para regocijarse con los daños causados y entonces vio a Luz, vio en sus ojos como apenas podía contener el llanto, como la humillación que acababa de sufrir la estaba lastimando, entonces fue cuando algo se movió dentro de Amity e hizo clic, ¡Algo no está bien!, dijo para sus adentros, ni siquiera estaba segura de que era, pero algo con seguridad no estaba bien, quiso entonces correr hacia la humana que despreciaba para poder consolarla; se dispuso a hacerlo, pero no pudo pues todo se puso oscuro de un momento para otro.

«¿Pero qué...?», la cabeza de la bruja de pelo verde había comenzado a doler, y todo lo que había frente a ella era oscuridad, no hubiera notado la diferencia entre tener los ojos abiertos o cerrados si no fuera porque los cerró con mucha fuerza, entonces sus recuerdos regresaron y ella sintió que la había caído un balde de agua helada, como si acabara de despertar de un profundo sueño. «¡¿Qué diablos pasó?!» ,Amity aun estaba asimilando las memorias que recuperó, entonces recordó donde se supone que estaban. «Estábamos entrando al almacén y entonces...», por mucho que se esforzara no lograba recordar que había pasado después, los únicos recuerdos que tenía después de eso eran una serie de chistes malos y estar en un lugar que era aterradoramente normal. Aunque estaba aterrada, se concentró en respirar, la oscuridad era abrumadora, pero de un momento a otro todo se volvió a iluminar y las pupilas de la bruja se contrajeron violentamente a consecuencia de la luz.

Cuando su vista regresó, observó que ahora se encontraba en la mansión de Skara, en medio de una fiesta, a su lado estaba Boscha y aunque sus labios se movían, Amity no escuchaba nada, era como si sus oídos estuvieran bajo el agua. Al observar con detenimiento a la bruja de 3 ojos notó algo que hizo que se le pusieran los pelos de punta, la "Boscha" que estaba a su lado ahora parecía más un horrible maniquí deforme que hacía esfuerzos para mover sus tétricos labios.

Asustada retrocedió y no pudo evitar temblar al notar que todos los seres que la rodeaban eran parecidos a este, tristes imitaciones cuyas hórridas expresiones apenas poseían un vestigio de las personas que se supone que eran. La bruja estaba por entrar en pánico cuando a lo lejos vio a alguien que no era un maniquí, «¿Luz?».

—¡Luz! —la llamó gritando mientras corría hacia ella y esquivaba a los maniquíes, por un momento temió que la humana no pudiera escucharla, pero este temor desapareció cuando la nombrada dejó su ávida conversación con uno de los maniquíes para voltear a verla.

—¿Qué quieres, Amity? —inquirió de mala gana.

Aunque se desconcertó un poco al inicio, la bruja de pelo bicolor no tardó en darse cuenta de que Luz aun estaba atrapada en la extraña ilusión.

—Luz, esto no es real —le dijo con preocupación,

La humana puso una expresión de total confusión, como si eso no era lo que se suponía que Amity le dijera.

—Sólo mira a tu alrededor, ninguna de estas personas es real —dijo mientras usaba su brazo para enseñar el gran salón.

La latina ahora parecía más asustada que confundida.

—Tienes que creerme —rogó la bruja de pelo bicolor.

Luz se giró hacia la "persona" que estaba parada a su lado.

—Mírala bien Luz, es un monstruo —dijo.

El ceño de su amiga se frunció.

—¡¿Insinúas que mis amigos son monstruos?! ¿De eso se trata tu juego? —dijo molesta.

—¡¿Qué?!, ¡no!, yo sólo...

—Amity, ya me humillaste a mí y a mis hermanos frente a toda la escuela ¿Qué no es eso suficiente?, ¿de verdad me odias tanto como para acercarte sólo para insultar a mis amigos?

Aunque la bruja sabía que no era su Luz la que decía esto, no podía evitar sentirse algo dolida por sus palabras.

—No, Luz...

—¡Déjame en paz! —gritó la humana y comenzó a alejarse.

La bruja de pelo bicolor no se quedaría impotente ante esto, tomó a Luz del brazo, la forzó a girarse para verla a los ojos y le gritó mientras las lágrimas se asomaban.

—¡¡¡Esa no era yo!!! —Amity vio los ojos avellana de Luz, y notó como sus pupilas se agrandaban.

La humana se quedó estática por un segundo, de algún modo la sinceridad en el desgarrador grito de la bruja le demostró que decía la verdad. Aunque no estaba segura de exactamente a que se refería con eso de que nada era real, Luz intentó responder, pero antes de que lo hiciera todo se oscureció otra vez.

Amity notó que ya sostenía el brazo de su amiga y ese condenado fondo negro comenzaba a volverla loca, afortunadamente no pasó mucho hasta que todo se encendió otra vez y ahora la bruja se encontraba en un salón de clases vacío.

Tardó unos segundos en volver en sí cuando vio a Luz pasar por el vitral de la puerta de la clase.

—¡Luz! —dijo mientras se acercaba a la puerta y se disponía a abrirla, sin embargo, algo se paró frente a esta y cuando Amity levantó la mirada...

La bruja soltó un grito al ver a la criatura, retrocedió y tropezó con una de las carpetas, se golpeó la cabeza contra otro pupitre y su mirada se nubló.

Una agitada respiración llenó el almacén de archivos, era la de la bruja de pelo bicolor, que acababa de despertar totalmente sobresaltada miró a su alrededor, pero el alivio de estar otra vez en un lugar real desapareció cuando vio la perturbadora escena a su alrededor. El archivador seguía ahí, pero ahora estaba tirado como si lo hubieran empujado con una fuerza brutal, sin embargo, eso no era lo que aterraba a la bruja, lo que lo hacía era el hecho de que había aparecido un pentagrama rojo en el suelo del almacén, en el medio levitaba con los ojos en blanco, alguien sobre el que Amity había leído, era Klein, el segundo concejal del presidente del senado, la bruja notó el parecido entre este y su hermano, también recordó la primera vez que los vio cuando ella y luz entraron a la biblioteca.

La bruja de pelo bicolor estaba en una de las 5 puntas de la escalofriante figura, frente a ella estaba Luz, inconsciente, al igual que Willow y Gus, quienes también dormían profundamente en las otras dos puntas, cuando vio lo que estaba frente al brujo rubio, le dieron nauseas pues la última punta del pentagrama estaba ocupada por la criatura que vio antes de despertar.

Se paró con dificultad y se alegró un poco pues esa cosa parecía igual de dormida que sus amigos y el brujo que presumiblemente les había hecho eso, la habitación apestaba terriblemente y Amity sabía porque: la criatura en el pentagrama era un Angelus Reprobi, un ser divino caído en desgracia y corrupción oscura; y a diferencia de las criaturas que llamaban "demonios" en la isla este era de verdad peligroso, solo un hechicero de altísimo nivel podría traer tal vil ser al plano terrenal.

Se acercó a Luz con cuidado y trató de despertarla, la llamó muchas veces, pero no funcionó, sin importar cuanto la agitara, el despertar de su amiga no parecía un evento próximo.

Amity lo intentó con todos sus amigos, pero no consiguió nada, se llevó las manos a la cara y entró en desesperación, quiso llorar cuando vio a Luz inconsciente, quiso quebrarse y resignarse al hecho de que finalmente había ocasionado la muerte no solo de Luz sino de todos sus amigos también; pero no lo hizo, tenía que ser fuerte, por Gus, por Willow, por Luz, por ella misma.

Entonces recordó algo.

—¡El amuleto de Luz! —exclamó, aunque nadie escucho su determinado grito.

Rápidamente cubrió el amuleto de Luz con su mano y lo activó, este brilló fuertemente, pero nada sucedió después.

—¡¿Qué?!, se suponía que... ¡¡¡¡¡Aaaaaaah!!!!! —gritó con furia, estuvo a un segundo de estrellar el amuleto contra el suelo cuando se le ocurrió algo.

Una última recurso desesperado, un chapoteo de hombre ahogado.

—Si esto no funciona —caminó hacia su lugar en el pentagrama— al menos podré disculparme con ustedes —finalizó mientras se echaba en el suelo.

La bruja apretó el amuleto con todas sus fuerzas, la adrenalina hizo que no sintiera que se había cortado, con su otra mano hizo un círculo de hechizos.

—Agnus Dei —pronunció mientras el hechizo hacía su trabajo y la ponía a dormir.

—¿Tuvo un buen sueño, señorita Blight? —dijo el maestro mientras unas carcajadas se escuchaban de fondo, esta vez Amity también las escuchó.

La bruja de pelo bicolor giró rápidamente, y observó la manó en la que tenía el amuleto, suspiró aliviada al ver que este efectivamente vino con ella. Se paró sin decir nada, con una mirada preocupada observó a todos los "alumnos de la clase" y su corazón se aceleró al notar que no estaban ni Luz ni sus "hermanos".

—¡$%&#/=! —trató de maldecir, pero un pitido ocultó sus palabras.

—¡Señorita Blight, no toleraré ese vocabulario en mi clase! No sé qué le sucede, pero...

El maestro no pudo terminar pues Amity ya se había ido del salón.

Cuando atravesó la puerta del salón la bruja se sobresaltó al ver que no lo único que había frente a ella era ese fondo oscuro aterrador, entonces recordó que aunque a veces tardaba, cuando la iluminación volviera estaría en otro lugar, lo único que le quedaba era intentar encontrar a Luz en alguna de esas locaciones.

Tuvo que esperar durante bastantes cambios de escenario y aguantar muchos chistes malos, pero prefería eso a ver como eran esas ilusiones de verdad. Finalmente, su oportunidad llegó, había aparecido con Boscha caminando por una vereda cuando notó que estaban frente una casa.

—Esos huérfanos tendrán mucho que limpiar cuando términos con esto —dijo Bosca con una gran bolsa llena de huevos.

Amity vio la casa que estaban por "atacar" y entonces su corazón dio un vuelco, al fin había dado con Luz, estaba justo ahí, a través de la ventana vio como la humana cambiaba el canal de la televisión. La bruja de pelo bicolor ni siquiera se molestó en mirar a la falsa Boscha y simplemente caminó hacia la pintoresca casa, abrió la puerta sin tocar, pero cuando se dispuso a entrar al interior de la vivienda, alguien detuvo su camino.

—Es de mala educación entrar sin tocar, jovencita —dijo el brujo rubio con ambas manos en la cadera.

La bruja levantó la mirada y se estremeció al reconocer al sujeto, lo más extraño era esta vez no llevaba puesto el uniforme, esta vez vestía unos pantalones caqui y un suéter amarillo con rayas en el que se podía leer: "Amo a mi familia".

—¿Quién es, papá? —dijo Luz levantándose del sillón.

«¡¿Papá?!», exclamó Amity para sus adentros y después tragó saliva con nerviosismo, «Este tipo está enfermo», pensó al ver la enorme sonrisa que tenía el brujo en el rostro, «¿Sabrá que me di cuenta de todo?».

La humana caminó hacia la entrada y vio a Amity, su mirada cambió a una de molestia, pero afortunadamente la bruja pensó rápido.

—¡Soy tu amiga, Amity! —exclamó tratando de sonreír.

Risas de fondo se escucharon.

—¿Es cierto eso, hija? —preguntó con alegría.

Luz se mostró confundida pero la bruja se aseguró de que esta no dijera nada comenzando una conversación con el brujo rubio.

—Si me permite señor, la verdad es que últimamente no he sido la mejor amiga del mundo. Por eso entré de ese modo, de hecho, le agradecería muchísimo si dejara que su hija saliera conmigo un momento para disculparme de modo apropiado —dijo sonriendo mientras disimulaba lo rápido que latía su corazón.

—Me entristecería mucho si mi pequeña Luz perdiera una amiga, pero no puedo obligarla así que.... ¿Qué dices, mi niña? —dijo mientras voleaba a verla.

Amity palideció, por lo visto Klein aun no había notado nada, pero si Luz le decía otra cosa probablemente todo se vendría abajo, lo único que la bruja pudo hacer, fue mirar a la humana y rogarle con la mirada.

—Iré —Fue lo único que dijo Luz antes de acercarse a la puerta.

—Está bien, pero no llegues después de las 8 —dijo con tono juguetón mientras guiñaba un ojo.

Las voces de fondo hicieron el típico sonido infantil que hacen los niños cuando molestan a alguien porque creen que le gusta una persona.

Cuando Amity y Luz salieron de la casa Boscha ya no estaba afuera. La bruja tomó a la otra chica de la mano y la guio lo más lejos de esa casa que pudo, afortunadamente en ningún momento se oscureció todo otra vez.

—Es suficiente —dijo la humana mientras se detenía—, dime que es lo que quieres, la única razón por la que tú puedes ser amable conmigo es que necesitas un favor ¿No es así?

—Luz, escúchame... ¿Recuerdas lo qué te dije ese día en la casa de Skara?

La humana estaba por negar, pero los recuerdos vinieron apenas Amity los mencionó.

—Sí, supongo que... Sí...

—Lo que te voy a decir sonará descabellado, pero te juro por lo más sagrado que es verdad —La bruja tomó aire antes de continuar—, nada de lo que sucede en este mundo es real, el tipo al que llamas "padre" es en realidad un brujo muy poderoso que de algún modo hizo un trato con un demonio para mantenernos atrapados en este extraño mundo.

—Oh, ya veo —dijo Luz con una mano en el mentón.

—No somos las únicas atrapadas aquí, tus hermanos en realidad son nuestros amigos, Luz tienes que recordar... Estábamos en medio de una misión para encontrar información sobre mi papá...

—Déjame detenerte ahí, Amity —interrumpió la humana—. Mira, no sé donde se estén ocultando tus amigos, pero no voy a caer en esta broma, aunque es una buena historia ¿Se te ocurrió a ti sola?

—¡Luz! Esto no es una broma, mis únicos amigos aquí son Willow, Gus y tú. El resto de las personas de aquí, son ilusiones creadas por el demonio...

—Mira se que debe ser difícil para ti aceptar una derrota, así que digamos que caí ¿Sí?, puedes decirles a tus amigos que me lo creí todo y que me hiciste hacer una tontería o algo así, pero yo me voy a casa —dijo con enojo mientras se volteaba para irse.

—¡Luz! —llamó con ferocidad haciendo que la humana voltee—. No te vayas porque nunca regresarás, sé que piensas en mí cuando piensas en ella —añadió.

A la humana le asustó un poco la primera parte, pero la segunda, la hizo sentir extraña.

—¿Ella? —inquirió girándose totalmente.

—Emily... —dijo mirando al suelo, Amity no quería llegar a eso, pero en ese momento parecía la única manera de hacer que Luz regresara.

—Emi... —La humana no pudo terminar pues los recuerdos regresado a su cabeza le ocasionaban un gran dolor, no solo físico, sino también emocional.

Luz se llevó las manos a la cabeza y cerró los ojos con fuerza, se resistió, si esas memorias le traían dolor entonces no las quería, así que reprimió esos sentimientos, tratando de socavar el dolor; pero fue como intentar tapar el sol con un dedo. Sus fútiles intentos por olvidar no rendían frutos, de hecho, solo parecían hacer que aumentaran la cantidad de recuerdos entrantes, entonces llegó a la parte en la que Amity y ella se hacían amigas, las reuniones en el club, las máscaras, la primera misión, la charla en la tienda de muebles, entonces la humana gritó:

—¡No!, no... Yo soy Luz Damnum una humana adoptada por un brujo, tú eres Amity Blight, una bully, ¡Tú odias a mis hermanos! ¡Tú me odias!, ¡Tú...! ¡Tú...! —Luz levantó su brazo y señaló a la bruja, pero antes de que terminara la frase, Amity tomó su mano suavemente y le sonrió.

—No es así —dijo con calma—, ya no, tú me cambiaste, Luz... Tú me diste una segunda oportunidad, una segunda vida —afirmó manteniendo su agarre.

Los vidriosos ojos de Luz se abrieron, lo aceptó, lo aceptó todo, tanto lo malo como lo bueno y entonces pudo recordar todo, parpadeo un poco antes de asimilarlo y tomar la mano que la bruja había puesto en su brazo.

—¡Amity! ¿Qué? ¡¿Qué pasó!?, recuerdo que entramos al almacén, pero luego... No ¡No puedo recordarlo!

—Yo tampoco, pero sé que ahora mismo estamos en una ilusión creada por... —La bruja no terminó la frase pues distinguió al Angelus Reprobi acercándose a toda velocidad, parecía furioso.

Con agilidad activó el collar que ahora estaba en su cuello, tomó la otra de Luz y rezó por que su plan haya funcionado.

La luz del colgante las envolvió a ambas y al siguiente parpadeo estaban en el mundo real.

La latina tardó unos segundos en mirar a su alrededor e interpretar la situación, después de eso lo único que salió de sus labios fue:

—¡¿Qué diablos?!

—No se exactamente cómo, pero de algún modo Klein hizo un trato con ese... Demonio. —Lo último lo dijo para ahorrarse la explicación de lo que era exactamente la criatura—. Nadie tiene suficiente magia para hacer un sueño ilusorio tan complejo... Debe ser por eso invoco a esa cosa.

Después de una expresión de disgusto al recordar que ese tal "Klein" se había hecho pasar por su padre en el sueño, Luz habló con preocupación.

—¿Qué hacemos ahora?

Amity abrió la mano en la que tenía el collar antes de decir:

—Tengo que a Willow y Gus de regreso —dijo con determinación.

En ese momento, la criatura comenzó a gruñir levemente, como si quisiera levantarse; el brujo rubio por su lado también parecía estar comenzado a exaltarse.

—Debe estar por notar que ya no estamos allí —conjeturó, la bruja.

—¿Cómo los traigo de vuelta? —cuestionó Luz.

—Iré yo, Luz...

—No —negó instantáneamente—, tú debes aprovechar para buscar entre los archivos —dijo mientras señalaba el archivador y los papeles que estaban desperdigados a su alrededor—. Presiento que Klein va a notar mi falta mucho más rápido que la tuya, si vuelvo ahora podré ganar suficiente tiempo como para sacar a Gus y Willow.

—Luz... —Amity quería replicar, quería decirle por milésima vez que era peligroso y que había una gran probabilidad de que no pudiera regresar, pero si algo había aprendido de la humana en todo este tiempo, es que una vez pone la mirada de determinación que tenía en esos momentos ya no había nada en el mundo que la hiciera cambiar de opinión. La bruja se resignó y respiró antes de explicarle— Ten —le pasó el amuleto—, usaré un hechizo de sueño en ti para enviarte a la ilusión, pero antes de ir tienes que desear con todas tus fuerzas que el amuleto valla contigo ¿Está claro?

—Más claro que el agua —dijo sonriendo valientemente.

—He tomado algunas clases de magia de ilusiones, así que estoy segura de que no podrás sacarlos si no recuerdan al menos un poco de quienes son en realidad, nadie sale de una ilusión si no lo desea realmente. Lo del collar fue una suposición mía porque la verdad ni siquiera sé cómo es que yo logré salir, pero comprobé mi teoría contigo, si logras mostrarles el engaño y lo activas dentro de la ilusión deberías poder sacarlos —finalizó.

La humana se acomodó en su sitio y la bruja se le acercó, la miró a los ojos y preguntó:

—¿Lista?

Luz asintió y cerró los ojos. Después de aplicar el hechizo, la bruja sintió una punzada en el pecho, en verdad deseaba haber tomado la decisión correcta.

Entonces vio como el brujo rubio que levitaba en medio del pentagrama parecía calmarse, «Luz tenía razón», pensó Amity, «sólo espero que pueda salir de allí». Miró a su inconsciente amiga con preocupación, sin embargo, recordó que cuando se trataba de sus amigos no había nada que la humana no pudiera hacer, así que confió en que en unos minutos todos estarían de regreso a la realidad y comenzó a buscar entre los desperdigados archivos.

Mientras tanto Luz, abrió los ojos encontrando que es estaba en el callejón donde había estado hace unos minutos, se alegró de encontrar el collar en su mano. «Se siente extraño saber que nada de esto es real», dijo para sus adentros. Recién recordó que el brujo parecía estar por despertar en el mundo real, por lo que corrió de vuelta a su "hogar".

Al entrar se alegró de ver a Willow y Gus viendo la tele tranquilamente, estaba por acercarse cuando cierto brujo de pelo rubio le habló.

—¿Cómo te fue con tu amiga? —preguntó de modo amable.

El miedo se abrió paso por su espalada, pero la humana no podía darse el lujo de ponerse nerviosa, no en ese momento.

—Arreglamos las cosas —trató de sonar lo menos sospechosa.

—Me alegra oír eso —Klein revolvió cariñosamente el cabello de la latina—. Bien niños, voy a salir, no hagan un desastre mientras no estoy en casa —dijo con tono juguetón.

—Sabes que nunca lo haríamos, papa —dijeron los brujos que estaban en el sillón.

—El fontanero que reparó las tuberías el día que inundaron la casa no piensa lo mismo —afirmó mientras se iba.

Unas risas llegaron hasta los oídos de Luz, quien espero unos cuantos segundos antes de correr hacia donde estaban sus amigos para hablar con ellos.

—Chicos —miró a los lados aun dudando de si el brujo se había ido—, escuchen con atención, este lugar no es real, estamos atrapados en una ilusión y...

—Luz, ¿De casualidad Amity te pidió que tomaras algo llamado "píldoras felices?, porque si es así te aseguro que no eran dulces —Dijo Gus para luego voltear hacia un lado y sonreír. Luz pudo observar cómo alrededor del brujo, haciendo ruido de brillitos, aparecían unas letras que decían: "Gus lo hizo de nuevo".

—¿Qué fue eso? —preguntó la humana por lo que acababa de observar.

—¿Qué fue qué? —respondió el brujo sin entender.

—¡Eso!, acabas de girarte y sonreír sin ninguna razón mientras unas letras aparecían frente a ti.

Por alguna razón lo que dijo la humana hizo que el brujo se sintiera totalmente fuera de lugar, como si no se supusiera que Luz dijera eso.

Un ligero dolor de cabeza comenzó en la sien de Gus mientras decía:

—No... No sé de qué estás hablando —dijo comenzando a sudar.

Luz recordó que a sus recuerdos los precedió un fuerte dolor de cabeza, por que supuso que había conseguido un avance.

—¿Willow tú viste las letras? —preguntó para ver si obtenía el mismo resultado.

—La verdad, es que apoyo la teoría de Gus de que Amity te dio "píldoras felices" —Las risas de fondo claramente audibles para Luz volvieron a sonar.

—No puedes decirme que no escuchaste esas risas —dijo la latina mientras se giraba tratando de encontrar la fuente de estas.

—¿Qué? —inquirió la bruja de pelo grisáceo.

—Hay unas risas que suenan cada vez que alguien dice un chiste malo —habló Luz, más para ella misma que para Willow —. Risas cuando hay un chiste malo —repitió mientras se ponía a pensar donde había visto eso antes—, y un cartel en frente alguien diciendo que "lo hizo de nuevo" —La humana abrió los ojos y sonrió cuando las piezas encajaron en su cabeza— ¡Estamos en una comedia mediocre de los 90s! —anunció.

Lo que dijo Luz incomodó a los otros dos brujos, quienes no podían entender el porqué de esto.

—¿No lo ven? —preguntó la humana.

Sus "hermanos" se miraron entre sí y notaron lo incómodos que estaban, algo no estaba bien y no entendían que era.

—Piénsenlo, ¿no notaron que lo único que pueden decir son pequeñas frases que suelen ser el remate de algo que dijo alguien más?

En este punto el dolor de cabeza del brujo aumentó su intensidad haciendo que se llevara una mano a la frente.

—Estas series siempre tienen personajes planos que apenas tienen algún desarrollo durante toda la serie... Díganme —ordenó— ¿Pueden recordar algo importante que les haya hecho crecer como personas?

Esta vez fue Willow quien se llevó una mano a la frente en señal de dolor.

—Hay pruebas por todas partes, solo hace falta ver como es esta casa —anunció mirando los chillones colores del decorado interior de la morada—. Por como son las cosas en las islas hirvientes, dudo que exista un lugar como este ahí. Chicos, tienen que recordar, no nos queda mucho tiempo mucho tiempo, tenemos que salir de aquí —dijo con tono suplicante.

Los dos brujos apretaron sus párpados y entonces la humana cayó en cuenta de algo, «Un momento... En las islas hirvientes nadie tiene televisores, ni siquiera saben que son, por lo que no existe la tele por cable, por lo que nunca existieron las comedias de los 90s... Aunque, supongo que no necesitas haber visto alguna para pensar que es raro que aparezcan letras frente a ti y unas risas después de cada cosa que dices», concluyó.

Las memorias de Willow y Gus regresaron, Luz había roto la narrativa del lugar donde estaban y eso no le gustaba para nada a una criatura infernal que merodeaba por los alrededores de la casa.

—Mi cabeza está dando vueltas —afirmó Willow mientras se frotaba la frente tratando de apaciguar el dolor.

—¿Qué... qué sucedió? —dijo el brujo mientras se recuperaba de lo que acababa de suceder.

—No hay tiempo, ¿Si quieren salir de este mundo ilusorio verdad? —preguntó tontamente.

—¡Sí! —respondieron al unísono.

—Mi cabeza está dando vueltas —afirmó Willow mientras se frotaba la frente tratando de apaciguar el dolor.

—Entonces, tómense de las manos —exhortó.

Los brujos se pararon del sillón y obedecieron.

Luz tomó la mano de Willow y se dispuso a activar el amuleto, pero el sonido de la puerta abriéndose la asustó.

—¿Qué están haciendo, niños? —preguntó Klein al encontrar a sus hijos tomados de las manos en mitad de la sala.

—Un... —comenzó la humana— ¿Ritual satánico? —respondió sonriendo nerviosamente.

Las carcajadas sonaron una vez más y todos las escucharon exceptuando al brujo rubio.

—Ja, ja, ja —dijo el brujo— Ahora en serio ¿Qué estaban...

No terminó la oración debido a que Luz no perdió más tiempo y activó el collar para después tomar la mano de Gus. Una brillante luz envolvió al trio, lo último que vieron antes de regresar a la realidad fue a Klein corriendo hacia ellos con una expresión de preocupación absoluta.

Los 3 abrieron los ojos y se levantaron del suelo sorpresivamente, encontrándose con una Amity buscando entre un archivado tirado en el suelo, la bruja de pelo bicolor detuvo su tarea y sonrió ampliamente al ver a sus amigos despiertos otra vez.

—¡Chicos! —dijo con alegría viendo al aun enmascarado grupo, volteó a ver a la humana— Luz, ¡lo lograste! —Amity recogió su mochila, que contenía algunos archivos ya, y se acercó a abrazarla con fuerza.

Luz solo sonrió mientras se asombraba de como cada vez era más común que fuera la bruja de pelo bicolor quien iniciaba los abrazos.

Los recién levantados brujos pusieron una expresión de desagrado total al ver todo lo que se encontraba en la habitación.

—Por todos los... —comenzó Willow—, ¿eso es un...?

—Sí —respondió Amity antes de que la otra bruja terminara su pregunta.

—Eso explica el olor —dijo Gus mientras movía una mano frente a su cara para tratar de disipar el pestilente aroma— ¿Cómo es que...?

Un horrible chasquido interrumpió al brujo, había sido el ruido del cuello de Klein, quien había abierto los parpados, revelando unos ojos totalmente blancos.

—Te lo cuento en el camino —dijo Amity abriendo la puerta del almacén, como evidente gesto de que era hora de irse.

El grupo salió y aun aturdido giró hacia la izquierda, Amity sacó el cristal y revisó el mapa, después de verlo se detuvo en seco.

—¡Es para el otro lado!

El grupo estaba por girar cuando la puerta del almacén salió disparada contra la pared por una fuerte explosión, de la habitación salió Klein totalmente furioso, bloqueándoles el paso.

—¡Tendremos que encontrar otra salida! —dijo Gus asustado.

El grupo continuó su huida hacia la única dirección que les quedaba, Willow, no podía usar su magia, pues no había forma de hacer llegar la raíz de una planta desde el suelo hasta el Penthouse del hotel. Nota mental: «Traer semillas la próxima vez», pensó la bruja de pelo grisáceo.

El brujo rubio comenzó a lanzar, hechizos hacia el cuarteto mientras gritaba con impotencia.

—¡Los maldigo, pequeñas alimañas! —Lanzó un hechizo que creó poderosos rayos eléctricos.

Luz notó que le iba a dar sin lugar a duda, por lo que se pegó a una pared dejando que los que estaban detrás de ella la adelantar.

—¡Luz! ¡¿Qué haces?! —El corazón de Amity se detuvo por un segundo al ver como la humana se paraba dispuesta a recibir el impacto.

La latina activó su collar y toda la electricidad se convirtió rápidamente en inofensiva luz. La humana reanudó su huida esta vez sirviendo como escudo de los variados que usó el brujo para atacarlos.

Pronto el grupo llegó al final del pasillo, donde sólo había un vitral desde el que se podía observar la parte trasera del edificio. Antes de que se quedaran acorralados, Willow abrió la puerta más próxima a ellos y todos entraron mientras la humana seguía usando el colgante para evitar que los alcanzaran desde púas de metal gigantes, hasta mortales llamaradas.

Los cuatro observaron que habían entrado a una de las gigantes habitaciones del piso más lujoso del hotel, miraron alrededor y entonces Amity confirmó lo que más temían.

—Chicos... Aquí no hay salida.

Los 3 se quedaron estáticos por el miedo, mientras escuchaban como incluso sin poder verlos, su perseguidor seguía lanzando hechizo a diestra y siniestra.

—¡Por allá! —gritó Luz señalando una puerta al azar, sin ninguna otra opción el grupo entró, cerró la puerta con seguro y al girarse notaron que habían elegido el peor lugar de todos: Un balcón.

Estaban por entrar en pánico y comenzar a gritar cuando escucharon como la puerta de la habitación se abría con un estruendo.

—¡Sólo quería una familia! ¡Sólo quería que todos fuéramos felices juntos! ¡¡¡Pudimos serlo!!! ¡No saben cuanto me costó convencer a mi padre de que me dejara hacerlo!, pero ustedes bastardos ¡¡¿¿Tenían que arruinarlo todo no es así??!!

Los 4 estaban temblando contra la puerta sin saber que hacer, Luz se asomó y observó cuan alto estaban, miró hacia abajo y notando que cualquier cosa era mejor a permitir que ese brujo los atrapara, volteó hacia los 3 que seguían aterrados, quienes al ver la expresión que tenía en su rostro palidecieron aún más.

—Es esto o dejar que ese tipo nos mate de un modo horrible —afirmó.

Amity estaba por objetar, cuando escuchó a Klein destruir brutalmente una puerta cercana a la suya.

El cuarteto se subió al borde de la gruesa barandilla de mármol del balcón, temblando.

—Sólo... No miren abajo —dijo Luz en un inútil intento de subir los ánimos.

—¡¡¡¿Cómo se supone que no miremos abajo si estamos por saltar?!!! —exclamaron los otros 3.

—Chicos, si este es el fin, quiero decirles que... —Gus no pudo terminar por el grito que sonó desde el interior de la habitación.

—¡¡¡¡¡Así que ahí es donde se ocultaban, pequeños pedazos de mierda!!!!

Los 4 se miraron una última vez mientras escuchaban como la puerta explotaba, sin ninguna otra salida, saltaron desde el balcón de un edificio de 15 pisos.

El brujo apenas pudo ver las espaldas del cuarteto mientras se lanzaban, con rabia en los ojos, retrocedió para tomar vuelo y entonces chocó con algo. Se giró dispuesto a destruir a sea lo que sea que lo hubiera interrumpido, cuando notó que se había chocado con algo que lo estuvo siguiendo desde que salió del almacén de archivos...

La bestia hizo un horripilante y agudo chillido mientras abría sus fauces preparándose para triturar. El edificio era muy alto, por lo que ninguno de los invitados en el primer piso pudo escuchar los desgarradores gritos de dolor de Klein.

El tiempo parecía congelado conforme la gravedad hacía su trabajo y acercaba cada vez más al equipo a su destino. Mientras caían, no eran sus vidas lo que pasaba frente a los ojos de los 4, sino el recuerdo de lo que había sucedido después de que entraron al almacén de archivos.

El grupo entró a la habitación, sin notar que del lado de las bisagras había un mago que los esperaba pacientemente y una vez estuvo seguro de que entraron todos activó un hechizo que generó un pentagrama en suelo y antes de que cualquiera reaccionara, los puso a dormir. Eso no era todo, después de eso cada uno de los niños apareció más negro que la noche más oscura y frente a ellos, lo único que estaba era el Angelus Reprobi, este abrió su hocico. pero contrario a lo esperado, de este salió una melodiosa voz.

—¿Hola? —La voz de la criatura hizo eco en el vacío— ¿Hay alguien ahí?, solo asiente si puedes escucharme —Los 4 asintieron al notar que, por alguna razón, estaban demasiado cansados como para mover la boca, voltearon para buscarse entre sí, pero hallaron que cada uno estaba solo frente al monstruo— ¿Hay alguien en casa? —El demonio se movió más cerca— Vamos, ahora... He oído, que te sientes mal. Bueno, puedo aliviar tu dolor y ponerte de pie de nuevo. ¡Relájate!, necesitaré algo de información primero, sólo cosas básicas... ¿Puedes mostrarme dónde te duele?

En ese momento, muchos momentos dolorosos pasaron frente a los ojos de cada uno de los chicos e incluso algunas lágrimas encontraron su camino al exterior, pero el llanto no duro mucho porque la criatura lo calmó haciendo uso de unos versos.

—No hay dolor, te estás desvaneciendo. Un barco distante, humo en el horizonte, solo puedes volver por momentos... Tus labios se mueven, pero no puedo escuchar lo que dices.

La pesadilla cómica noventera comenzó después de ese poema.

Para los 4 fue un recuerdo algo perturbador, se hubieran sentido mejor de no haberlo recuperado, pero era algo tarde para lamentarse por eso pues finalmente aterrizaron...

El agua estaba helada, y se quedaron a milímetros de chocar con el fondo de la piscina, el cuarteto desconocía que habían estado dormidos por casi una hora, así que cuando hicieron la bola de cañón más grande que vería el Hotel Willard, las ilusiones que Gus creó para ocultarlos desaparecieron al contacto con el agua. Apenas reaccionaron al shock del final de la caída nadaron hacia arriba, Willow se levantó un poco la máscara de gas para poder respirar y al observar a su alrededor pudieron notar como habían mojado a todos los que estaban en la fiesta, desde los invitados hasta a los trabajadores. Antes de que la de por sí mala situación empeorara, nadaron hacia el borde y corrieron hacia la parte posterior del almacén por donde habían entrado.

Una enredadera y una abominación más tarde el grupo llegó al otro lado del muro exterior del hotel.

Sin embargo, había algo que ninguno de los chicos había notado y es que la empapada Lilith logró reconocer a uno de ellos, a Willow, Gus y Amity solo los reconocía cuando llevaban puesto el uniforme de Hexside, pero ese polo blanco y morado con una capucha con orejas de gatito, era algo bastante característico de cierta humana; al día siguiente, la líder del aquelarre del emperador tendría una seria charla con su hermana.

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Heyy, soy yo su querido escritor, me tardé bastante en este capítulo, pero  fue increíblemente divertido de escribir, espero que al menos uno de los chistes malos le halla dado gracia, a mi la verdad, todos ¿Qué quieren que les diga? me rio de cosas muy tontas supongo.

¿Disfrutaron el cap o fue un poco tedioso?

Como habrán notado, este capítulo tiene como nombre 3 canciones, por eso es tan largo, estoy muy feliz con el resultado. Si no escuchan estas 3 canciones se estarán perdiendo de 3 obras maestras, ok no, eso depende de gustos, pero de verdad se las recomiendo.

Comfortably Numb - Pink Floyd

The Adults are Talking -The Strokes

Second Life with Emily-Peach Pit

Ahora, la sección de curiosidades:

Por cierto, de verdad me pregunto ¿leen esta sección siquiera?, pregunta seria xd, con que una persona lo haga yo ya estoy feliz.

-Para empezar les diré como se relacionan estas canciones con el capítulo: La más obvia es Comfortably Numb, que básicamente es como estar drogado y viviendo en un sueño, además, todo lo que les dice el Angelus Reprobi a los chicos es en realidad la primera estrofa y parte del coro de la canción, espero que halla quedado bien; The Adults are Talking está porque cuando la escuché por primera vez, mi cerebro se imagino en el coro a dos personas discutiendo (no le pregunten porque, porque ni él lo sabe) y luego rellené ese espacio con Luz y Amity, de hecho parte de su diálogo está en la canción, a ver si alguien lo encuentra; por último, la última canción es la que menos se nota, pues no está explícitamente, sin embargo, el mensaje de la canción es lo que le dice Amity a Luz para traerla de vuelta, Second Life with Emily habla sobre como la llegada de alguien cambia a la otra persona, dándole "una segunda vida".

-El capítulo era demasiado largo y como trabajo en Word y luego recién lo pongo aquí, el puto Wattpad se suele comer palabras, tildes y otros signos de puntuación así que si encuentran algún error, díganme y lo corregiré en el futuro.

-El nombre del hotel es en realidad el segundo nombre del fundador de la cadena de hoteles "Marriot". 

-Ahora, sobre los chistes malos de la comedia noventera, por mucho que me gustaría adjudicarme el crédito por ellos, la verdad es que la mayoría son de: Alf, Sabrina la bruja adolescente y Aprendiendo a vivir, que son comedias de entre los 80 y 90, las primeras dos series me encantaban cuando era pequeño y la última la encontré buscando en Internet.

-La foto que usé para el demonio, me salió en tumblr, en un blog de un chico que se cree satánico por publicar fotos "perturbadoras" no busqué mucha info, pero estoy casi seguro de que es de un SCP o algo así, si saben cual es, díganme.

-El hechizo de sueño de Amity es de mis favoritos, porque del latín tiene dos significados: "Agnus Dei" puede traducirse como "canción de Cuna", pero también como "Cordero de Dios", lo cual es gracioso porque Amity lo está usando para meterse en una ilusión demoníaca.

-Angelus Reprobi significa "ángel caído".

-Espero que les halla gustado la referencia a She-Ra que hay en el cap.

-El siguiente capítulo también será largo (creo) y bastante (demasiado) intenso, así que hypense, pero no mucho porque no quiero decepcionarlos. 

Sin más que decir recuerden: A los hombres plata los matan las balas lobo y

Yo no existo