Marzo 2018
Nos encontramos en Oscorp Tienda 733, era un día cualquiera antes de abrir las puertas a los clientes y a los demás compañeros. Zoe Valentine había llegado con la gerente Anne Anderson, ambas habían llegado, cerraron ambas puertas de la sucursal con llave y se encerraron en la oficina gerencial. La gerente Anne Anderson tomó un folder que estaba en su escritorio, lo abrió y sonrió
-¿Es esta la investigación de Margaret Charlotte?- preguntó la gerente Anne, Zoe asintió con la cabeza -¿Qué pasó ese día?- preguntó la gerente Anne Anderson
-Alexander me siguió y entró a la bodega- dijo Zoe, la gerente Anne no quitaba la mirada de Zoe, por su parte, la chica se estaba poniendo muy nerviosa -Descubrió todo lo relacionado con Charlotte y las arañas- dijo Zoe, la gerente Anne Anderson negó con la cabeza, estaba demasiado enojada pero no quería demostrarlo hacia Zoe -No sé que tanto más descubrió- dijo Zoe
-¿No sabes?- preguntó Anne Anderson
-No, porque cuando llegué iba a abrir el folder- dijo Zoe recordando
-¿Y la araña que tenias afuera?- preguntó la gerente Anne Anderson -Ayer entré a esa bodega y te falta una araña- dijo la gerente, Zoe asintió con la cabeza, ella sabía sobre aquella araña que ya no estaba
-Lo sé y le prometo que esa investigación no saldrá de esa bodega- dijo Zoe, la gerente Anne miró a la chica con ojos furiosos
-Por tu bien- dijo la gerente Anne. Era claro que ambas tenían algo planeado con esa investigación, Margaret Charlotte y Norman Osborn habían descubierto muchas cosas en sus años, hicieron cosas extraordinarias con el veneno de araña, y ahora Anne Anderson y Zoe Valentine querían usarlas a su favor.

Mientras tanto, Alexander Thibault había estado practicando con sus poderes los días pasados. Ha estado saliendo en las noches para escalar muros y perfeccionar sus grandes saltos, tenía una gran fuerza, por lo menos para levantar un automóvil pequeño, la mordedura de araña había aumentado sus habilidades y sus sentidos. Hoy, en la mañana, antes de ir a trabajar andaba escalando los muros de su habitación, su habilidad para hacerlo había mejorado bastante, cada día era las agil, más rápido y más fuerte, sentía mucho poder en su interior, pero aún así él sentía que faltaba algo.
Estaba en la esquina de su habitación mientras escalaba los muros, cuando de pronto, vió a una pequeña araña tejiendo su telaraña. La pequeña araña miró a Alexander colgado del techo, se acercó a él como si fuera un amigo. Normalmente cuando una araña se siente en peligro, huye o ataca, pero en este caso, la pequeña araña se acercó al chico. Alexander aún sin superar su aracnofobia, trató de alejarse, la pequeña araña, al ver su reacción negativa, se alejó de ahí. Confundió, Alexander se bajó del techo, pero ver a la pequeña araña tejiendo su telaraña le dió una gran idea de que era lo siguiente que tenía que hacer, así que surgió una gran idea de crear unos dispositivos que le permitían lanzar telarañas a voluntad. Así que pensó en sacar las cápsulas de la tienda Oscorp para fabricar sus lanza telarañas.
Más tarde, Alexander bajó para desayunar, bajó tan rápido las escaleras que espantó a su tío Benjamin que estaba desayunando en el comedor de la casa
-¡Wow! ¡Hijo!- exclamó su tío asombrado -Cada día te ves mejor- dijo su tío Benjamin, Alexander asintió con la cabeza
-Sí, he estado practicando- dijo Alexander
-Sí, me lo imagino- dijo su tío Benjamin -Con esas salidas nocturnas que haces- dijo tomando su taza de café
-Me concentro más- dijo Alexander. Salió de su casa y se dirigió a tomar el autobús que lo llevaría al centro de Manhattan, donde está la sucursal Oscorp 733.
Más tarde, se encontraba en su sucursal trabajando, junto a sus amigos Daniel Ocaña y Noah Lazo, los chicos se encontraban haciendo inventarios para ver que todo estuviera completo. Una nueva compañera entró a los mostradores de la medicina controlada, Noah Lazo la observó y frunció el entrecejo. La chica usaba lentes, tenía unos ojos cafés muy bonitos, el pelo castaño, de tez blanca, y de estatura promedio
-Hola, la gerente Anne me mandó para acá- dijo la chica -Soy nueva, mi nombre es Denisse- dijo la chica, los tres chicos estrecharon la mano
-Bienvenida Denisse- saludó Noah Lazo -Ellos son Alexander y Daniel Ocaña, yo me llamó Noah Lazo- dijo y estrechó la mano de la chica. En eso se acercó Zoe Valentine con su tabla en la mano, al verla, Alexander y Daniel Ocaña torcieron los ojos
-Ella es Denisse, la gerente Anne me pidió que la entrenarán ustedes ya que no quiere problemas con Louis Thompson- dijo Zoe Valentine, Noah Lazo asintió con la cabeza. Zoe dió media vuelta y se fue de ahí.
Daniel Ocaña se acercó a Alexander
-Amigo, ¿Volveremos a ir a la lucha libre?- preguntó Daniel Ocaña, en la ocasión anterior Alexander fue con sus amigos a la lucha libre profesional, vieron a La Vibora luchar contra Cena, y a Hunter H luchar contra Roman, habían disfrutado el evento
-Vi que pusieron un reto abierto para los rookies- dijo Noah Lazo
-Ah si- exclamó emocionado Daniel Ocaña -Los 3 mil dólares si vencias a Roman en 3 minutos- dijo Daniel Ocaña mientras acomodaba su mercancía. Alexander lo vió como una gran oportunidad de ganar dinero y apoyar a sus tíos en la cuestión monetaria, al final, sería como un ingreso extra, además de que probaría sus poderes y sus lanzadores de telaraña
-La próxima semana será- dijo Noah Lazo, Daniel Ocaña volteó a ver a Alexander, Noah Lazo se acercó a Denisse para empezarle a enseñar
-Y escuché que Dulce Valene irá a la lucha libre ya que descansa Louis- dijo Daniel. Alexander se emocionó pero trató de no darlo a notar
-Pero entre Dulce Valene y yo no hay nada- dijo Alexander, Daniel Ocaña carcajeó
-¡Por favor Alex!- exclamó Daniel -He visto como se miran a espaldas de Louis- dijo Daniel carcajeando. Alexander estaba enamorado de Dulce Valene pero por temor a que Louis Thompson le fuera a hacer algo, no le decía nada, y para él mejor, no tenía que lidiar con problemas amorosos.
Después de unos minutos, Alexander logró su cometido y era agarrar unas cápsulas de la tela de araña la cual guardaban en la bodega de la sucursal, entrar fue fácil, burlar a Zoe Valentine también fue fácil, salir fue un problema pero lo logró usando el aire acondicionado, escalando los muros y entrando en el ducto de aire acondicionado. Había agarrado cuatro cápsulas de tela de araña, una sola contenía cientos de metros del cable ligero, así que, tenia mucho material para comenzar a experimentar.

Esa misma noche, Alexander se encontraba en su habitación, estaba experimentando con unos relojes y unas muñequeras de metal que tenía guardadas, añadió un poco de las cápsulas de la tela de araña que encontró en la bodega, increíblemente una sola cápsula contenía cientos de metros del cable ligero y era una telaraña bastante fuerte y resistente. Conectó el viejo reloj con la muñequera y con unos botones creó un disparador, metió las cápsulas de tela de araña y logró su objetivo. Así que comenzó a experimentar, uno de los obstáculos que encontró es que las telarañas no salían, se quedaban atascadas, otro de los obstáculos era que la muñequera no conectaba con la telaraña. Después de muchos intentos, Alexander lo logró, el chico había logrado crear sus lanzadores de telaraña y una telaraña demasiado resistente, Alexander estaba ansioso por probarlos, se levantó de su escritorio donde los había creado y miró uno de los periódicos que tenía en su cama, periódicos que había adquirido en la sucursal. Abrió el periódico y miró un anuncio, la lucha libre profesional abría una convocatoria y una recompensa, si derrotaban o aguantaban 3 minutos en el ring con el campeón mundial completo, Roman, ganarían 3 mil dólares, recordó que era la recompensa de la que Daniel Ocaña hablaba
-¡Alex!- exclamó su tío Benjamin, el tío tocaba la puerta para poder entrar
-Un segundo tío- dijo Alexander, metió los lanzadores de telaraña en su armario, después cambió la página de su computadora para poner unos videos. Una vez sin sospechas, Alexander abrió el seguro de la puerta. Su tío Benjamin entró a su habitación
-¿Estas bien Alex?- preguntó su tío, Alexander asintió con la cabeza, subió ambos pulgares
-Todo marcha de maravilla tío- dijo Alexander sonriendo
-¿Cómo te va en el trabajo?- preguntó su tío. Alexander le contó a grandes rasgos que era lo que hacía dentro de la sucursal de Oscorp, mencionó que ha recibido ayuda de Daniel y de Noah Lazo
-Han sido buenos días- dijo Alexander -A pesar de que están Louis y Zoe pero todo va bien- dijo Alexander sonriendo, su tío Benjamin asintió con la cabeza
-Si te sientes mal o llegas a sentir alguna molestia, házmelo saber- dijo el tío Benjamin, Alexander asintió con la cabeza
-Sí, tío, gracias- dijo Alexander
-Me preocupa que hace unos días has estado saliendo en las noches, no me cuentas a veces nada y creo que te peleaste en el trabajo- dijo su tío, Alexander frunció el entrecejo y negó con la cabeza
-No, ese tal Thompson comenzó el pleito- dijo Alexander
-Ten cuidado con lo que haces, a veces siento que te estás convirtiendo en alguien diferente- dijo el tío Benjamin, Alexander solo sonrió. De pronto un silencio incómodo se hizo -¿Y? ¿Hay alguna chica involucrada?- preguntó el tío Benjamin, Alexander apretó ambos labios, pensó en Dulce Valene, pero lo único que ocurría con esa chica era que estaba enamorado de ella, no había nada más entre ella y él
-Es complicado- dijo Alexander nervioso
-Estas cosas siempre van a ser complicadas- dijo su tío Benjamin -¿Y cómo se llama ella?- preguntó su tío
-Dulce Valene- dijo Alexander
-Y ¿Ella es la novia de Thompson?- preguntó su tío, Alexander asintió con la cabeza, su tío solo suspiró -Si que es complicado- dijo riendo
-Lo sé tío- dijo Alexander sonriendo
-Recuerda que no pelees en el trabajo- dijo su tío Benjamin haciendo hincapié en que tuviera cuidado con Louis Thompson quien quería golpearlo -Yo también pasé por alguna relación amorosa- dijo el tío Benjamin -Pasé por los mismos cambios que tu- dijo el tío Benjamin, Alexander de pronto recordó todos los poderes que estaba adquiriendo, carcajeó por un momento
-No creo que haya sido igual- dijo Alexander riendo
-Cuando tenía tu edad, en la escuela había un chico que me molestaba todo el tiempo- dijo el tío Benjamin -Le decían Big show- dijo el tío recordando mientras carcajeaba
-¿Y luego?- preguntó Alexander -¿Qué pasó con el Big show?- preguntó ansioso, el tío Benjamin carcajeó mientras contaba su historia
-Tuve la oportunidad de golpearlo, de pelear a puño limpio con él- dijo su tío -Pero no lo hice- dijo el tío Benjamin, Alexander frunció el entrecejo confundido
-¿Por qué no lo hiciste?- preguntó Alexander
-Recorde las palabras de mi madre- dijo el tío Benjamin -Un gran poder conlleva una gran responsabilidad- dijo su tío Benjamin, Alexander asintió con la cabeza. El chico veía a su tío con una gran figura paterna, era el padre que nunca pudo tener. Su tío se iba a ir de la habitación pero Alexander lo detuvo
-Te quiero mucho tío- dijo Alexander, su tío solo sonrió
-Yo también te quiero mucho- dijo su tío y ambos se abrazaron.

En los días siguientes Alexander llevó sus lanzadores de telaraña al trabajo, en sus horas libres estaría probando sus poderes y los lanzadores. Alexander subía a los edificios y miraba para abajo, listo para usar sus lanzadores de telaraña, pero siempre temeroso, era una gran altura para aventarse a columpiar edificios; así que se bajaba escalando con mucho miedo. Por muchos días decidió dejarlo así y no intentar nada.
La semana transcurrió normal, aparte de todo, se estaba preparando para luchar en el ring de lucha libre profesional, tenía que aguantar 3 minutos al campeón Mundial Completo, confiaba plenamente en sus instintos y en su sentido arácnido, que era la punzada en su cabeza que le avisaba del peligro. El atuendo que usaría sería una sudadera roja, un pants azul, unos tenis azules y unos guantes de portero de fútbol soccer, para proteger su identidad usaría una máscara de luchador roja.
El día por fin llegó, el día de trabajo fue muy largo, Alexander se estaba preparando para enfrentar a Roman por los 3 mil dólares. Mientras estaba en el trabajo, la niña nueva, que estaba bajo la tutela de Noah Lazo, Denisse, no quitaba la mirada de Alexander, el chico solamente le sonreía y seguía con su trabajo, Alexander alzaba la mirada y veía a Dulce Valene seguir con su trabajo, para su suerte, Louis Thompson había descansado, por lo que no estaba en la sucursal y podía admirar más tiempo a Dulce Valene.
En la noche, cerraron la sucursal, la gerente Anne Anderson y Zoe Valentine revisaban las pertenencias de los colaboradores al salir, cerciorarse de que no se llevaran nada. Noah Lazo, Daniel Ocaña, Andriu, Pammelyne, Estefany, Denisse y Dulce Valene tomaron un taxi que los llevaría a la arena de la lucha libre profesional. Noah Lazo vió que Alexander no subió
-¿Alex?- preguntó Noah Lazo -¿No vas a venir?- preguntó Noah, Alexander asintió con la cabeza
-Si, solo que tengo que encargarme antes de algo- dijo Alexander -Adelantense, yo los alcanzo- dijo, Noah Lazo asintió con la cabeza, subió al taxi y se fueron, Dulce Valene volteó a verlo, rápidamente le quitó la mirada. Alexander llegaría después a la arena para entrar por la puerta de aspirantes a luchar, pero antes marcó por teléfono a su casa para avisarle a sus tíos que llegaría tarde. Contestó su tío Benjamin
-Hola- contestó Alexander
-(Teléfono) Hola Alex ¿Ya vienes a la casa?- preguntó su tío
-No, de hecho iré a la lucha libre con mis amigos del trabajo- dijo Alexander, un silencio se hizo y Alexander frunció el entrecejo
-(Teléfono) No Alex, no me gustaría que fueras- dijo su tío, Alexander frunció el entrecejo otra vez
-¿Qué? ¿Por qué no?- preguntó Alexander
-(Teléfono) Es muy tarde y se me hace muy peligroso que andes tan tarde en la calle- dijo su tío Benjamin
-Pero tío, ¡Ya compré la entradas!- exclamó Alexander, un silencio más se volvió a hacer presente y un suspiro se escuchó
-(Teléfono) Ya lo tenías planeado y no nos dijiste nada- dijo su tío, Alexander negó con la cabeza
-Pero no es la primera vez que voy- dijo Alexander
-(Teléfono) No me interesa Alexander, te quiero aqui en una hora- dijo su tío Benjamin enojado. Alexander solo torció los ojos y colgó el teléfono. Por un momento sintió un enorme enojo, pero, después pensó en que ahora él tenía poderes, no había nadie quien le dijera que hacer o que no hacer, así que tomó un taxi y se dirigió a la arena.
Mientras iba en el taxi, se aseguraba de que los lanzadores de telaraña funcionaran a la perfección y sin ninguna falla, estaba enojado pero canalizó todo su enojo para hacer la mejor actuación en la lucha libre, sabía que al llegar a casa le esperaría un gran castigo pero decidió ya no pensar en eso. A la vez le daba miedo que sus amigos del trabajo lo estarían viendo sin saber que era él. Rápidamente se cambió de atuendo, se puso su traje improvisado de luchador, se haría llamar a sí mismo, La Araña Humana.
Entró por la puerta trasera de la arena, temeroso porque todos los luchadores que estaban ahí se veían muy fuertes, rudos y con cara de malos, pasó por una sala y llegó a un cuarto donde había una chica en un escritorio anotando a todos los que enfrentarían a Roman, en frente había una gran fila de luchadores amateurs y semi profesionales que esperarían una oportunidad para vencer a Roman. Después de un rato formado, Alexander pasó y la chica lo miró, carcajeó por un momento por el atuendo improvisado del chico
-Amigo, no eres Rey Misterio para luchar contra él- dijo la chica
-Aún así anoteme- dijo Alexander, la chica volvió a carcajear
-La EWWC no se hará responsible de ningún daño físico o fractura que estoy segura vas a sufrir- dijo la chica, Alexander asintió con la cabeza -Y estás participando voluntariamente- dijo la chica, Alexander asintió con la cabeza
-Si, estoy consciente- dijo Alexander
-¿Cuál es tu nombre?- preguntó la mujer
-La Araña Humana- dijo Alexander y la mujer volvió a carcajear, le parecía un nombre ridículo pero lo anotó.

La acción en el ring era emocionante. La arena era demasiado grande, la rampa de entrada al ring era larga con una gran pantalla que mostraba lo que pasaba en el cuadrilátero. La gente gritaba demasiado, había buenos luchadores, la lucha entre Cena y Strowman fue impactante, Cena acabó con una costilla rota, fue llevado de emergencia al hospital más cercano. La lucha entre Hardy Brothers y Boys of the Destruction fue emocionante, El Enterrador traicionó a su hermano la Máquina Roja al final de la lucha causando la victoria de los Hardy Brothers, y después, La Vibora derrotó a Hunter H y a Brian Danielson ganando el Campeonato de EWWC. Los chicos de Oscorp estaban emocionados, miraban y disfrutaban la lucha
-¿Dónde está Alexander?- preguntó Denisse, Noah Lazo negó con la cabeza
-No sé, me dijo que tenía que hacer algo antes- dijo Noah, Dulce Valene apretó ambos labios.
La música de entrada de Roman sonó, la gente comenzó a abuchear, era un heel. En la terminología de lucha libre, el luchador heel es quien hace el papel de malo, y por consiguiente es el odiado por el público. Así que la gente abucheaba a Roman
-¡Están listos para la siguiente ronda!- preguntó el anunciador, Justin Roberts, Roman subió al cuadrilátero, se subió en la esquina y alzó su campeonato, la gente lo abucheaba -El siguiente competidor es un principiante, si resiste los 3 minutos o derrota a Roman ganará la suma de 3 mil dólares- dijo el anunciador Justin Roberts.
Rápidamente se metió tras bambalinas, uno de los ayudantes le dió el papel para anunciar el nombre, Justin lo miró, frunció el entrecejo. Alexander estaba listo para salir
-¿La Araña Humana?- preguntó Justin, el ayudante frunció también el entrecejo
-Pues así dice- dijo el ayudante.
Justin Roberts salió otra vez a la arena, la gente estaba ansiosa por conocer al competidor de Roman, los chicos de Oscorp también estaban emocionados
-Les presentó al sorprendente hombre araña- dijo Justin Roberts señalando a la rampa de salida de los luchadores, Alexander apareció con su atuendo, su sudadera roja, su pants azul, sus tenis azules, y su máscara roja. Alexander saludó a todos temerosamente, se acercó a Justin Roberts y le dijo
-Dijo mal mi nombre- dijo Alexander, Justin Roberts frunció el entrecejo
-Está mal ese nombre, no tiene sentido- dijo Justin Roberts -Hombre araña se escucha mejor- dijo Justin, Alexander caminó hacia el ring. Los chicos de Oscorp miraban emocionados el comienzo de la lucha
-3 dólares a que Roman vence a ese hombre araña- dijo Denisse, Noah Lazo frunció el entrecejo, Dulce Valene sonrió, a pesar de todo, ella se sentía triste ya que no estaba Alexander con ellos viendo la función de lucha libre, lo que ellos no sabían es que él era el hombre araña.
Alexander entró al ring y miró a Roman temeroso, en ese mismo instante la celda infernal bajaba hacia el ring. La celda infernal era una jaula completa que media 7 metros de largo y cubría todo el cuadrilátero. Alexander miró aterrado, lucharía enjaulado contra Roman por esos 3 mil dólares, tenía que vencer a ese luchador que por apariencia se veía muy atemorizante
-¡Esperen! ¡No me dijeron que lucharía en jaula!- exclamó Alexander, pero de poco sirvió, Roman entregó su campeonato al referee quien hizo sonar la campana, el reloj en la pantalla comenzó a correr
-¡No te escaparás mariquita!- exclamó Roman quien se acercó para golpearlo, Alexander hizo caso de su sentido arácnido y esquivó el golpe del luchador, lo tomó por un brazo y se lo torció. Roman quiso patear a Alexander pero esquivó el ataque, Roman quiso golpearlo una vez más pero Alexander usó sus lanzadores de telaraña para esquivar una vez más al luchador. La gente en el público exclamó al ver esa maniobra, jamás habían visto eso, los chicos de Oscorp se quedaron atónitos.
Roman tomó por sorpresa a Alexander, lo golpeó en la cara y con el antebrazo lo derribó, luego lo tomó por el cuello y comenzó a azotarlo contra la jaula. Alexander cayó adolorido a la lona. Roman preparaba su movimiento especial al cual lo llamaba “Golpe de Superman” el cual consistía correr desde una esquina, saltar y golpear muy fuerte a su oponente.
Alexander rápidamente reaccionó y volvió a usar sus lanzadores de telaraña para esquivar el famoso Golpe de Superman de Roman. Alexander tomó a Roman por el cuello con el antebrazo y saltó haciendo una maniobra conocida, Roman cayó al suelo adolorido, rápidamente Alexander cubrió a Roman adolorido, el referee contó sobre la lona y Alexander venció a Roman
-¡Damas y caballeros! ¡Nuestro vencedor!- anunciaba por el micrófono Justin Roberts -¡El sorprendente hombre araña!- exclamó Justin Roberts. Alexander no lo podía creer, miró la pantalla principal, había vencido a Roman en menos de 2 minutos, acababa de vencer a un Campeón Mundial Completo, usando sus poderes arácnidos y sus lanzadores de telaraña, se sentía orgulloso de sí mismo, y a su vez, poderoso e invencible.
En el público los chicos de Oscorp aplaudian, Dulce Valene sonrió, a pesar de que sintió la ausencia de Alexander ahí en la grada con ellos, se sintió atraída por el luchador araña
-Me debes 3 dólares- dijo Noah Lazo a Denisse, la chica torció los ojos pero sabía que le debía a su compañero
-Lo sé amigo, lo sé- decía Denisse decepcionada, Noah Lazo solamente carcajeó.

Más tarde, Alexander fue tras bambalinas, se quitó la máscara y fue a los vestidores. Luchadores como Strowman, Hunter H, La Vibora, El Chico Rompecorazones, Jeff Hardy y Brian Danielson felicitaron a Alexander por haber vencido a Roman.
Rápidamente Alexander tomó una ducha, miró el reloj y se vistió con su uniforme de Oscorp, guardó su atuendo de luchador en su mochila.
Fue a la oficina para reclamar su premio, adentro de la oficina habían cuatro personas, un contador quien tenía todo el dinero de las entradas, Vincent Kennedy y su hija Stephanie Kennedy quienes eran los dueños de la empresa luchistica, y Paul Heyman quien era el cazatalentos. Paul se acercó rápidamente a Alexander
-Alexander Thibault, el hombre araña- dijo Paul, el chico asintió nervioso -Soy Paul Heyman y soy el que hace firmar los contratos- dijo Paul, Alexander sonrió, no sabía exactamente lo que estaba pasando
-Si, creo conocerlo- dijo Alexander, Paul Heyman asintió con la cabeza
-Tienes agallas y esos aparatos que usas en las muñecas son otra onda- dijo Paul Heyman sonriente, Alexander sonrió, sus lanzadores de telaraña fueron todo un éxito entre los espectadores de la lucha contra Roman
-Yo mismo los creé- dijo Alexander, Paul Heyman los miró detenidamente, estaba impresionado por el trabajo que había hecho el chico
-Te ofrezco un contrato de 2 años con apariciones en los shows semanales en televisión- dijo Paul Heyman, Alexander se quedó perplejo, no se esperaba que le dieran esa oferta
-¿Contrato de 2 años?- preguntó Alexander
-Contrato de 20 millones de dólares, por cierto- dijo Paul Heyman, Alexander se quedó pensando, 20 millones de dólares que arreglarían su vida y la de sus tíos. Nervioso por lo que había sucedido en el ring, decidió denegar la propuesta, no se sentía listo para subirse una vez más a un ring de lucha libre profesional y menos televisado, que le diría a sus tíos, adicional sabía que no vería tan seguido a sus tíos y mucho menos a Dulce Valene, aunque no se sentía a gusto para empezar a hablarle gracias a Louis Thompson.
-Gracias- decía Alexander -Pero no, no lo necesito- dijo el chico, Paul Heyman se quedó anonadado
-Thibault, sería increíble tenerlo en los shows semanales- dijo Paul Heyman, Alexander negó con la cabeza
-Solo quiero los 3 mil dólares de la lucha de hoy- dijo Alexander, Paul Heyman comenzó a molestarse, el chico solamente quería su paga de la lucha de ese día
-Pues que crees, solamente te voy a dar 500 dólares- dijo Paul Heyman dándole los billetes, Alexander frunció el entrecejo enojado, miró enojado a Paul -Largate de aquí araña- dijo Paul. Alexander enojado
-¿500 dólares?- preguntó Alexander -El anuncio decía 3 mil dólares- dijo Alexander
-No, porque lo venciste en 2 minutos- dijo Paul Heyman, Alexander negó con la cabeza, estaba decepcionado, había luchado en vano, estaba triste, enojado y decepcionado
-Eso no es justo- dijo Alexander enojado, Paul Heyman sonrió cínicamente
-La vida no es justa niño- dijo Paul Heyman, Alexander dió media vuelta y salió enojado de la oficina de los Kennedy.
Alexander iba caminando hacia el ascensor, había ganado la lucha contra Roman pero Paul Heyman, el cazatalentos de la empresa luchistica solamente le dió 500 dólares para hacerle la vida imposible por no firmar el contrato de 2 años que le estaba ofreciendo.
Mientras iba caminando al ascensor, escuchó que alguien iba corriendo por detrás de él. Su sentido arácnido se activó, aquella punzada interior que le avisaba de peligro inminente, Alexander volteó y vió a un hombre corriendo con una bolsa llena de dinero, era un ladrón que iba corriendo de la oficina, detrás de él iban dos policías armados
-¡Detengan a ese sujeto!- exclamó el policía, Alexander solamente se hizo a un lado y dejó pasar al hombre
-Lo siento amigos, solamente soy un ciudadano común- dijo Alexander, detrás de él venía Paul Heyman nervioso, era obvio que aquel ladrón le había quitado a la fuerza el dinero a Paul, el hombre venía nervioso, sudoroso, tembloroso y a la vez sentía enojo ya que era el dinero de las entradas de aquella noche. Paul Heyman miró a Alexander
-Lo pudiste haber atrapado- dijo Paul Heyman enojado, le reprochó a Alexander el no haber detenido al ladrón -¡Escapó con la mitad de los ingresos idiota!- exclamó Paul enojado, Alexander solamente lo miró
-A veces la vida no es justa amigo- dijo Alexander muy satisfactoriamente, Paul Heyman solamente miró al chico, enojado, pero sabía que Alexander le había devuelto el favor. Paul solamente dió media vuelta y se marchó. Alexander miró como se iba Paul enojado.

Más tarde Alexander iba de camino a su casa, le esperaba un enorme castigo, tenía muchos mensajes perdidos de Noah Lazo, Daniel Ocaña y Andriu, quienes le preguntaban si no iba a asistir al evento de lucha libre profesional. Alexander miraba esos mensajes y carcajeaba ya que él si estuvo ahí pero ellos no lo sabían. Tenía mensajes perdidos de su tío Benjamin y su tía Morgane, Alexander suspiró y solo esperó llegar a su casa para escuchar a sus tíos regañarlo.
Alexander llegó a su casa, había dos patrullas afuera de su casa, Alexander se asustó demasiado, no sabía que estaba pasando así que rápidamente se acercó corriendo. Uno de los policías tenía una libreta en la mano, uno de los vecinos estaba testificando ante el policía lo que había pasado
-No puede pasar- dijo uno de los policías, Alexander se acercó rápidamente, alcanzó a ver una ambulancia involucrada -¡Atrás!- exclamó el policía, Alexander vió a su tío Benjamin en el suelo, con una herida de bala
-¡Es mi tío!- exclamó Alexander acercándose, miró a su tío moribundo en el suelo, era una herida profunda, la persona que lo hizo fue con toda la alevosía para robar al hombre mayor
-¿Dónde estuviste chico?- preguntó el policía, Alexander lo miró, las lágrimas comenzaban a salir de sus ojos
-En el trabajo- contestó Alexander -¿Qué pasó?- preguntó Alexander, el policía suspiró
-Un ladrón entró a casa de tu tío, robó el automóvil y le disparó- dijo el policía, uno de los vecinos seguía testificando ante los demás policías
-¿Y mi tía Morgane?- preguntó Alexander
-Sufrió un pequeño desmayo, está en la ambulancia- dijo el policía. Alexander sostuvo la mano de su moribundo tío, momentáneamente abrió los ojos y miró a Alexander arrodillado ante él, llorando por lo que había sucedido
-¿Alex?- preguntó con voz entrecortada su tío Benjamin, Alexander asintió con la cabeza
-Aquí estoy tío Benjamin- dijo Alexander, el tío sostuvo la mano de su sobrino, Alexander lloraba demasiado, estaba muy triste, se sentía impotente ante la situación, y se culpaba a sí mismo por haber ignorado a su tío por teléfono
-Cuida a Morgane- dijo el tío Benjamin y falleció soltando la mano de Alexander, el chico tragó saliva, negó con la cabeza y recostó su cabeza sobre el hombro del cadáver de su tío, lloraba demasiado, sentia demasiada tristeza, comenzó a recordar una vez más la llamada que hace unas horas le hizo a su tío, y se lamentó otra vez haberlo colgado así. Rápidamente uno de los policías se reunió con el resto
-Ya tienen al ladrón al sur de Queens- dijo el policía, Alexander había escuchado eso, tenía mucha ira, mucho enojo y mucha rabia, sabía que tenía que hacer pero no lo haría él, sino el Hombre Araña.
Alexander corrió lejos de ahí, sacó su sudadera roja, se puso su máscara roja y encendió sus lanzadores de telaraña, iban a ser útiles. Alexander corría por las calles, escalaba muros y usaba sus habilidades para encontrar el automóvil robado de su tío huyendo de la policía.
De pronto escuchó sirenas y vió al automóvil café de su tío correr a toda velocidad por las calles de la ciudad, Alexander escaló uno de los muros y subió a la azotea, pensó que sería más fácil perseguirlo por los aires balanceándose con sus telarañas como lo hacían las arañas para llegar de un lugar a otro. Con lo que no contaba es que nunca había usado sus lanzadores de telaraña para balancearse, era la primera vez que lo hacía, muchas veces hizo el intento pero siempre le dió miedo hacerlo. Esta vez, tenía que hacerlo, quería capturar aquel ladrón asesino. Parado en la azotea de un edificio disparó su telaraña de un edificio a otro, primero miró al vacío, asustado por la altura, su corazón le palpitaba demasiado rápido y suspiró demasiado, tragó saliva y en un intento desesperado se aventó y sostuvo la telaraña, con su otra mano disparó otra telaraña, sintió el viento en su rostro, la adrenalina del momento, lo estaba logrando.
Mientras se columpiaba por medio de los edificios perseguía al ladrón con el automóvil robado de su tío, los policías perseguían al automóvil con sus patrullas, Alexander sintió miedo de no lograr lo que quería hacer. De la nada, aparecieron otros dos automóviles quienes chocaron contra las patrullas obstruyendo el paso para que el ladrón pudiera escapar, pero con lo que no contaban era con que Alexander iba tras su captura, tanto los policías como los maleantes vieron a Alexander columpiandose con sus telarañas, se quedaron atónitos al verlo.

De un momento a otro el ladrón se detuvo en una casa abandonada, se bajó del automóvil y salió corriendo, Alexander pudo notar que el ladrón llevaba una bolsa con dinero. Alexander se detuvo y entró a la casa abandonada, temeroso de no saber a quien o que se iba a encontrar.
Adentro de la casa, Alexander caminó sigilosamente, era un pasillo poco iluminado y sucio, escaló por el techo para hacer menos ruido, pero dos maleantes salieron de la nada y apuntaron con sus armas
-¡Un raro quiere entrar a nuestra guarida!- exclamó uno de ellos, Alexander bajó y golpeó a uno de ellos en la cara, lo azotó contra la pared noqueandolo, el otro maleante disparó de su arma pero Alexander esquivó los disparos, usó sus lanzadores de telaraña para retirar el arma del maleante, enojado golpeó su cara noqueandolo.
Alexander siguió caminando entre pasillos, vió que más que una casa era una bodega grande donde había muchas cajas de madera donde habían drogas, armas y metanfetaminas, era una banda que se dedicaba al robo a mano armada y a la compra venta de drogas ilegales. Alexander se quedó atónito por lo que estaba viendo
-¡Miren!- exclamó una voz de uno de los maleantes -¡El raro quiere jugar!- exclamó, eran cuatro hombres armados. Alexander retiró sus armas con sus lanzadores de telaraña, era muy hábil para esquivar disparos y golpes, aunado a que su identidad estaba protegida por la máscara de luchador que llevaba. Alexander golpeó y derrotó a los maleantes y corrió adentrándose más en ese tétrico lugar. Escaló muros y entró por el ducto del aire acondicionado hasta que por fin encontró al ladrón que asesinó a su tío Benjamin. El ladrón estaba asustado porque sabía que alguien se había metido a buscarlo, así que no soltaba su arma de fuego. Alexander bajó del ducto del aire acondicionado y golpeó fuertemente al ladrón en la cabeza, con su lanzador de telaraña arrebató el arma de fuego, lo golpeó en la cara y lo aventó contra una mesa
-¡No me hagas nada por favor!- exclamó el ladrón asustado
-¡No!- exclamó Alexander -¿Acaso mi tío te dijo lo mismo?- preguntó Alexander furioso, volvió a golpear al ladrón en la cara a tal grado de hacerle sangrar la boca. Alexander se detuvo por un momento, enseguida, reconoció al ladrón, era aquel ladrón que se había metido a la Arena de la Lucha libre profesional a robar el dinero, aquel ladrón que salió corriendo de la oficina de Paul Heyman perseguido por dos policías, aquel ladrón que Alexander se negó a detener
-¿Ya me reconociste?- preguntó el ladrón
-Eres el ladrón de la lucha- dijo Alexander. Recordó que en ese preciso momento, pasaron por su lado, el policía le pidió ayuda para detener al ladrón y él respondió que era un ciudadano común
-Si, soy yo- dijo el ladrón con una sonrisa macabra en su rostro -Adiós fenómeno- dijo el ladrón, Alexander torció la mano del hombre haciendo que soltara el arma. En eso, cinco policías entraron al lugar con arma en mano, Alexander estaba asustado, pensó que se lo llevarían a él también por estar ahí con el ladrón
-¡Alto!- exclamó uno de los policías -¡Jackson Bryce apodado Montana quedas arrestado!- exclamó el policía -Por los delitos de allanamiento de propiedad y asesinato- dijo el policía sin dejar de apuntar. El ladrón miró a Alexander que quería venganza de la muerte de su tío, el ladrón carcajeaba demasiado
-¡Tomen esto payasos!- exclamó, aventó una granada de humo que aturdió a todos, Alexander se dejó llevar por su sentido arácnido, se introdujo en el humo generado por la bomba, corrió unas escaleras arriba, se encontró con más maleantes a quienes derrotó fácilmente.
Llegó a la azotea del lugar, pero aquel ladrón realmente había escapado. Alexander estaba enojado, furioso, tenía mucha ira en su ser, aquel tipo que asesinó a su tío Benjamin había escapado
-¡Quieto!- exclamó uno de los policías que habían llegado a la azotea del lugar. Alexander se aventó del edificio y con sus lanzadores de telaraña se balanceó de regreso, no tenían ninguna intención de luchar contra policías.

Alexander se desvió del camino, subió a lo más alto de la Torre Chrysler, se sentó en una de las águilas de metal que salían de lo alto de la Torre. Alexander estaba muy triste, su principal figura paterna había sido asesinada por un ladrón de poca monta, pero se culpaba por el hecho, primero por abandonar a su  y segundo por ser un ladrón que él mismo tuvo la oportunidad de detener en la Arena de Lucha Libre. El chico lloraba a mares, se sentía devastado por el hecho, pero juró por su vida que ningún ciudadano de Nueva York sufriría lo mismo, usarías sus poderes y habilidades para proteger a la gente inocente de la Ciudad y no para andar como figura pública o presumiendo, así que, juró que encontraría al asesino de su tío.
Alexander recordó las palabras de su tío Benjamin, aquellas palabras que jamás olvidaría “Un gran poder conlleva una gran responsabilidad” y las tomaría como ejemplo a seguir para ser el héroe que Nueva York espera.