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XI. Nuevos conocimientos y desodorantes.



+ capitulo dedicado a @abiihoran4 +






          —Presten suma atención al itinerario de esta noche, —dijo Niall, sacando un par de post-it de su bolsillo, ordenadas por colores para no confundir ninguna—. El primer punto a seguir sería, —se aclaró su garganta— vestirse adecuadamente para la ocasión.

Se observaron entre sí y dieron varias vueltas en su lugar para confirmar el hecho de que se encontraban totalmente presentables. Camisas manga larga y pulidos zapatos negros. Y gel.

Solo un poco, claro.

El rubio prosiguió —Bien. ¿Estómagos repletos?

Todos asintieron y tocaron sus panzas a modo de respuesta, recordando el pollo demasiado cocido hecho por Louis y Niall, el cual casi sufre quemaduras de primer grado por culpa de Louis y su casi inexistente conocimiento sobre el manejo de una estufa.

— ¿Protección?

Todos alzaron la ceja, revelando su confusión.

—Ya saben, desodorante.

— ¿Quieres saber si me he puesto calzones limpios también? —preguntó retóricamente Louis, riendo con los otros chicos, menos Niall que lo observaba con las dos cejas arriba—. ¡Por supuesto! ¿Qué crees que soy? ¿Un cavernícola?

—Bueno pues, la pregunta no estaba de más, —dijo, —Y llegamos al final. ¡Ta da! —sonrío—. Bueno, no, ¿llevan sus celulares o algún modo de comunicación?

—Todos menos Liam, —dijo Harry, riendo y burlándose—. El está fuera de moda.

—Tu cabello está fuera de moda, pareces la versión nerd de Jesucristo en el siglo veintiuno.

Harry rodó sus ojos, —mi agenda no me deja tiempo disponible para hacer cosas sin importancia como para ir a una barbería.

—Tu agenda solo está ocupada por aprender a bailar salsa y ser adorable, no creo que te tome mucho tiempo sabiendo que nunca lograrás hacer lo primero, ¡Tus caderas no son latinas, mi hermano! —rió, haciendo enojar al mencionado.

—Bromea el que tiene como mejor amiga a su computadora, —chilló el ruloso, sacándole la lengua y golpeando su mano levemente.

Golpe que fue devuelto, y devuelto, y devuelto.

— ¡Oh, por el amor al cacao! ¿Quieren calmarse? —Interfirió Niall, colocándose en el medio de los dos chicos, —Que salvajes, arruinaran la noche-- ¡Louis, ayúdame! ¡Deja de grabar!

Louis se retorcía de la risa tras su celular, —Es que es muy gracioso, ¿Quieren verlo en cámara rápida?

— ¡A ver! —chillaron los tres y se colocaron detrás de Louis para ver el vídeo.

—Tu voz es similar a una ardilla, —exclamó Louis, riendo.

— ¿Y cómo sabes tú que las ardillas tienen el tono de voz así? —se cruzó de brazos Liam, cuestionando a su amigo.

—Esta mañana, encendí el televisor y apareció un comercial sobre una película de ardillas cantantes, —dijo, —Fue gracioso. Y biológicamente imposible.

— ¡Chicos! Quiero llorar —chilló Niall, estirando la piel de su rostro—. Estamos seis minutos tarde, ¡Seis minutos!

— ¡Al ataque! —Corrió Harry hacia la puerta de entrada—. ¡Síganme los que quieran escuchar música en exceso y terminar apestando como cerdos!

— ¡Te dije que te aplicará suficiente desodorante, Harry Styles!



[++]




Al final de toda la conversación sobre los distintos componentes de variados desodorantes y demás anti-olores-desagradables, los muchachos decidieron salir y explorar a pie la belleza de la ciudad, lo cual no era problema alguno ya que al sitio a donde se dirigían quedaba relativamente cerca, veinte minutos aproximadamente. O al menos eso decía Google Maps en el celular de Louis.

Dejando a un lado a Google y sus derivados, los chicos, al adentrarse cada vez más a la ciudad quedaban maravillados por las cantidades de luces que alumbraban de manera casi perfecta cada rincón de aquella ciudad.

— ¿Cuánto creen que paguen de electricidad en ese edificio? —señaló Harry a uno de los tanto edificios que se alzaba con el nombre Trump en toda la parte superior de la edificación; el cual se iluminaba con millones de luces doradas, las cuales le hacían llamativo a la vista de los cuatro pares de ojos curiosos.

—Excelente pregunta. Pero puedo asegurarte que la mayoría de los rascacielos en el mundo tienen ese famoso sistema de energía proveniente del sol, extraída por los paneles solares colocados, en su mayoría, en la parte superior del edificio, —respondió ágilmente Louis, asintiendo levemente—. Se ahorran unos cuantos dólares y cuidan al planeta.

—Me siento cavernícola al no querer unirme a su interesante conversación por estar tremendamente nervioso por lo que pase esta noche, —exclamó Niall, observando el oscuro cielo—. No hagan tonterías, chicos.

—Por experiencia propia, inserte aquí la cantidad de libros que he tenido el placer de leer, —sonrío Liam, — Nunca hay que acercarse a los muchachos corpulentos y pasados de copas. ¡Absolutamente todo sale mal cuando sucede! No quiero que mi vida se convierta en un absurdo cliché.

—Pareces nena, —rió Louis, — ¿También lees fan ficción de Sherlock Holmes?

—Pues no, son muy mal escritas.

—Tus respuestas no te ayudan, Liam. —dijo Harry, riendo.

— ¡Vale! Hoy fue declarado día de Molestar a Liam cuando te plazca y como te plazca. Perfecto.

—Guárdenlo en sus calendarios, chicos, —chilló Niall, sacando su teléfono y fingiendo que lo hacía verdaderamente.

Liam gruñó. —No son de mi agrado.

Harry le pellizcó una mejilla, —eso no te lo crees, me amas, soy irresistible.

—Lo admito, eres totalmente irresistible. Pero no eres mi tipo, —alardeó Liam, girando su rostro dramáticamente.

— ¡Claro que no es su tipo! Su tipo son curvilíneas, de cabello negro y de nombre Olivia, y con el pequeño detalle de que sean comprometidas.

—Ahora, verdaderamente me molestaste, Louis. Mide tus palabras la próxima vez que quieras hablarme, —firmemente asintió y se adelantó a ellos, caminando un poco más rápido.

—Me siento triste ahora, —dijo el ruloso—. ¡Liam, prometido! ¡No me dejes! No quise molestarte, perdóname o moriré por el sufrimiento proporcionado por tu odio, —lo abrazó y dejó caer su peso sobre él, haciéndole imposible seguir andando—. ¡Louis gigante cobarde! ¡Ven y discúlpate!

—Liam, fue mi error mencionarla. Siempre arruino todo, es algo natural, quiero que me perdones, —hizo puchero, y lo abrazó al igual que Harry.

A la voz de "Sonrían" sintieron una fuerte luz envolviéndolos en medio de la calle, la cual provenía del celular de Niall, quien les tomó una fotografía.

El rubio sonrío, observando la linda foto. —Tengo que conseguir un álbum para fotografías, como el que tenía Anita. Donde estaban sus amigos y novios de su secundaria.

—Qué lindo, ¡Apuren sus sosegados y lentos pasos! Falta poco para llegar —exclamó Harry, tratando de envolverlos a todos con sus brazos para tratar de empujarlos.

—El ruloso está ansioso, —dijo Liam—. Eso rima.

Harry asintió sonriendo, y todos siguieron caminando, hablando de tema triviales, como el ciclo casi infinito de asfalto y como se voltea una tortilla sin quedar con quemaduras de tercer grado en el intento. Tanto la piel como la tortilla.

—Bueno, pienso que con la práctica...

— ¡Llegamos! —chilló alegremente Liam, observando el nombre del establecimiento y comparándolo con el que aparecía en el teléfono de Louis.

—Bueno chicos, si no salgo vivo de esto, les recuerdo que siempre los quise muchísimo. —afirmó Niall, variando su vista desde el nombre de local hasta volver a los chicos.

Una tipografía gruesa mostraba atractivamente el nombre del lugar en colores blancos, negros y rojos en sus distintas tonalidades. 


Fall.


—El nombre me produce temor, —susurro Harry, colocándose más cerca de Niall.

— ¡Entremos! —chilló Louis, siendo el primero en subir las escaleras que daban a la entrada principal. Todos, rápida y obedientemente lo siguieron.

Pagaron la entrada y por fin entraron a ese lugar que nunca imaginaban que alguna vez en su vida llegarían a pisar.

Un exuberante bar en toda la cúspide imaginaria de Las Vegas.

Mucha música y calor en el ambiente, llegando a ser un poco asfixiante para ellos, pero trataron de empujar esos malos sentires y por fin salir de su zona de confort.

— ¡Es muy emocionante la música! —gritó Harry, tratando de que sus amigos lo escucharan.

En cada rincón del lugar sonaban mezclas tras mezclas de músicas que lograban el objetivo el cual era emocionar a cualquier persona. Hasta al más rígido. (En este caso hablábamos de Liam)

—Vayamos hacia allí, —señaló el rígido un lugar de la gigantesca barra que se encontraba en el centro superior del lugar—. Se supone que allí se piden las bebidas.

Todos caminaron con cuidado de no lastimar o pisotear a alguien, lo cual no hicieron con ellos.

—Mi zapato se ha ensuciado, —dijo Niall, admirando el pisotón en su zapato recién lustrado.

—Yo mismo los limpiaré mañana en la mañana, —dijo Louis, sentándose en una de las sillas disponibles de la barra—. Esa melodía es muy emocionante. Siento que sufro taquicardia.

—Tengo sed, —habló esta vez Liam, llamando la atención de un barman que se veía agradable—. Señor, ¿Qué nos recomienda para empezar? —cuestionó el morocho, dejando elegir al señor que se encontraba detrás de la barra, ya que desconocía totalmente sobre el tema del alcohol y sus formas de preparación.

—Un buen Vodka es la solución a todo, —exclamó el señor, acomodando rápidamente algunos vasos que se encontraban dispersados alrededor de su espacio de trabajo.

Harry levantó su ceja, —Perdone pero... ¿Qué es el Vodka?





+ me tardé en actualizar, lo siento ): pero bueno, ahora su escritora es ganadora de The Insanity Factor ah, el concurso de portadas *aplausos* bueno, ¿no les suena la ultima parte conocida? *moon face* buenis, el grupo de whatsapp tiene cupos todavia, recuerden enviar su nombre + numero con codigo de area. hice un sorteo para la dedicacion, so, si quieren una comenten. no olviden los ask de los chicos: sherlockhoran, nutsharry, louistacos, batmanpay y northwestyles. ¡saluditos, besitos, que nos leemos en la proxima +

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