Emiliano Bonventre.

Estaba acostado, con los ojos abiertos, pero mis pensamientos en lo lejos, cada minuto miraba a Emily, que estaba en la camilla, con un tubo en su boca y conectada a todo tipo de aparato que se le cruzaba.

El quejido hace que me levante rápidamente, al igual que Amaris.

- Emiliano...

La voz rota de Emily hace que mi corazón se rompa en millones de pedacitos.

- Emily... - la miro, mis ojos dejan caer gotas de lágrimas.

- Dónde estoy? - dice mirando a todos lados con suavidad.

- En el hospital pequeña - habla su madre - te trajimos aquí apenas pudimos.

Los ojos de Emily dejan caer lágrimas de dolor, el brillo de sus ojos ya no está, está completamente perdido.

- Adib? - pregunta mirándome.

- En casa con tu padre y los niños - sonrio - el está bien.

Eso es como si le quitará un gran peso de encima, ya que ay respiración vuelve a la normalidad.

- Que sucedió?

- Lucia trato de cumplir su palabra de asesinarte - digo lentamente - pero falló.

- Emiliano.... Ni Adib, ni tu, ni yo estaremos seguros hasta que ella muera - dice con las lágrimas a flote.

- Lo se...

- Ella debe morir - dice su madre derrepente - Ella y esa peli roja.

- Lo se, de esos nos encargaremos apenas Emily esté bien - digo mirándola fijamente - Ellas moriran.

- Las asesinaremos - dice mirándome ahora - Promete que si las vas a asesinar, yo seré quien te acompañe.

- Lo prometo.

Tres años después

La media noche cayó profunda y silenciosa, Emily ya estaba completamente recuperada y me había encargado de hacer de ella un arma letal, fuerte y sigilosa.

La ropa negro y pegada nos ayuda con el camuflaje mientras ingresamos a la zona principal de la mansión Dumont.

Emily fue muy buena a la hora de aprender a golpear, noquear e incluso romper alguna parte del cuerpo sin la necesidad de matarlo al instante.

El viento frío nos soplaba la cara, la peque estaba pendiente de los movimientos de los guardas de Lucia, a la espera de atacar.

- Emily - La llamo antes de empezar con lo que vinimos a hacer - Por favor, mucho cuidado.

- Claro que sí amor, no te preocupes.

Dicho esto toma la dirección opuesta a la mía, desde lo lejos puedo ver cómo sale de su escondite enfrentándose a tres hombres a la vez, mientras que yo me encargo de los otros que piensan ir a ayudar a sus compañeros.

- Quedan los de adentro - informa ella - entras por delante y yo por atrás.

Asiento a su orden, pues ella en este momento es superior a mi y nadie podrá contradecirlo.

Camino sigilosamente a la puerta delantera y cuando entro, los cuerpos yacen en el suelo y Emily me mira sonriente mientras juega con su arma.

- Bien, a la próxima entra con más cuidado y no disparando a diestra y siniestra - me cruzo de brazos hablando en voz baja.

- Y quien te dice que entré asi? - enarca una ceja.

- No me he demorado ni dos minutos en entrar y ya están muertos - refutó.

- Cállate y acepta que ahora soy mejor que tú - Dice autoritaria.

Ven?
Letal y demandante, así me gusta más.

Caminamos a paso segura escaleras arriba, cada uno con la mochila que lleva en su espalda, cargando los instrumentos que utilizaremos.

Al llegar a la habitación entramos lentamente y la peque se arrodilla en el suelo quitándose su mochila y sacando el somnífero líquido que solo las dormirá unos minutos.

Me larga un pañuelo mojado y ella toma otro, nos acercamos lentamente, ella toma a Lucia del cabello y pone el pañuelo justo en su nariz, haciendo que ella forcejee y obligatoriamente Emily tira de su cabello hacia atrás para que Lucia no tenga mucho movimiento.

Mientras yo hago lo mismo con Charlotte, Emily sienta a Lucia en la cama, tomando sus manos y amarrandolas al cabecero de este, yo sigo sus pasos.

Al tenerlas ya listas, me dirijo al interruptor de luz, encendiendolo rápidamente mientras que Emily toma una mesa corriendola cerca de la cama.

Su recoge su cabello en una coleta, ya que en los últimos tres años no se lo a vuelto a cortar y ahora lo tiene por debajo de los hombros.

- Ven aquí - me llama - siéntate.

Camino hasta la silla donde ella me espera, al sentarme Emily se ve deseosa.
Y mis especulaciones se torna ciertas cuando se sienta sobre mi regazo, haciéndonos quedar cara a cara y me besa con deseo.

Mis manos automáticamente se van a su trasero estrujandolo.
Mi ereccion comienza a ponerse dura, pero somos interrumpidos por el quejido de una mujer.

Ambos volteamos a ver al mismo tiempo, para darnos cuenta de que la chica que está quejándose es Lucia.

- Lucia! - saluda Emily levantándose de mi regazo - Que bueno que despertaste.

- Que coño sucedió? - pregunto cerrando sus ojos con fuerza.

- Hay querida, todavía no ha sucedido nada, esperemos a que tú amada se despierte si? - mi chica la mira con suficiencia.

- Que le han hecho? - chilla - ¿Que le dieron?

- Nada Lucia, ya cállate y esperemos - esta vez soy yo quien habla.

A los dos minutos Charlotte comienza a quejarse también, tratando de mover sus manos pero eso le resuelta en vano.

- Que? - nos mira y su mirada asesina nos atraviesa - Sueltenme!.

- No Charlotte, cállate - Habla Emily.

La rabia de la pelirroja incrementa y comienza a decir palabras hirientes dirigidas a Emily.
Quien está de su lado de la cama mirándola fijamente.

- Vas a matarnos? - dice Charlotte - Eso llenará el vacío de tu corazón Emily?.
Y tú Emiliano - dirige su mirada hasta mi posición - Supongo que Emily no te ha dicho que ni te quiere ¿Verdad?

- Eso es algo que a ti no te interesa Charlotte - habla mi peque

- Claro que no, pero pobre Emiliano, Emily, tener una relación con una persona que no es capaz de siquiera expresar lo que siente.

- QUE TE CALLES!!

Emily pierde el control y se dirige rápidamente a la mesa donde ha organizado los instrumentos.
Lucia la mira con una sonrisa en su labios.

- Emily por favor - vuelve a hablar la pelirroja - tú no eres capaz de matar ni una mosca.

- Está retandome? - Dice Emily con una sonrisa de suficiencia - Vamos a ver que opinas después de ver esto.

Emily se acerca a Lucia quien borra su sonrisa de forma automática y sus ojos brillan con ese destello que jamás había visto.

Miedo.

Eso era lo que ella refleja en sus ojos.

- Pero porque dejaste de sonreír? - Dice Emily - Ven te ayudo para que tú sonrisa se vea más grande y bonita

Emily se sienta encima del regazo de Lucia, y con el cuchillo que tiene en su manos lo acerca lentamente a él rostro de Lucia, el cual está pálido, del miedo que demuestra.

— Bien! — grita Charlotte al ver lo que Emily pretende hacer — Bien, si eres capaz.

— No me interesa que digas Charlotte, ahora silencio.

Emily posa el cuchillo en el final de la línea de la boca de Lucia en el lado derecho y con fuerza comienza a hacer el corte haciéndolo subir hasta casi llegar a su oreja.

Los gritos de Charlotte y las lágrimas de Lucia mientras emily la mira con una sonrisa de satisfacción me llenan.

— Emiliano — demanda Emily — Encárgate de Charlotte, mi prioridad aquí es está perra.

Emily prosigue con los cortes en el rostro de Lucia, mientras que yo solo me fumo un cigarrillo viendo atentamente a Charlotte imaginando cada cosa que pienso hacerle.

Enciendo la vela encima de la mesa, dejando que la gran vara de metal con punta circular que en el medio está la EB² que con Emily encargamos a hacer para esta ocasión.

— Hay Charlotte — digo mirándola mientras piso la colilla del cigarro — Que bien estarías si hubieras estado siempre de nuestro lado.

— No, heriste a Lucia y eso es imperdonable — me habla con fuerza.

— Y tu heriste a Emily — «Tanto física como mentalmente» pienso — y eso para mí también es imperdonable.

Al tener presente que la vara ya está caliente, la tomo con un trapo y la acerco al pecho de Charlotte, mentiras está la mira con miedo.

— Esto — señaló las letras que pienso marcarle — Es para que todo el mundo sepa que la familia Bonventre ha Sido quienes se han encargado de vosotras.

Y como si fuera música para mis oídos, los gritos de Lucia y Charlotte, son lo único que se pueden escuchar atraves de esas cuatro paredes.

******
Hola!!!!

Como están?
Espero que muy bien después de leer este capítulo...

Quiero decirles que estoy muy emocionada y triste a la vez por haber terminado está hermosa historia.

Espero y la hayan disfrutado mucho al igual que yo.

Y.... Díganme, creen que merecen extras de escenas? Si es así, díganme cuáles.

Sin más que decir nos veremos en otra ocasión!.

Os quiero mucho

Cuidaos!!!!

Con cariño....

Mayra ❤️