Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

[29] Min-Jeon

Jeon Jungkook

Estoy comenzando a pensar que estas son las vacaciones de invierno más aburridas en toda mi vida: mis amigos están trabajando durante todo el día, y Jimin, quien no trabaja, pero está con el amargado de su novio, no contesta mis mensajes ni llamadas, así que estoy solo como un idiota frente a la tumba de mi madre, tiritando de frío. 

Es miércoles, hoy Taehyung empezaba con sus rondas de trabajo y no ha podido acompañarme aquí como antes habíamos previsto. Solo espero que todo este tiempo en el que no podemos estar juntos, valga la pena al menos. De verdad deseo que Tae pueda estabilizarse y que ese maldito de Jackson lo deje en paz. 

— Mamá, no tienes idea de por las cosas que estoy pasando en este momento — acarcio la lápida como si fuera el cabello largo y alisado de mi madre, hace muchos años atrás. No suelo hablarle a la tumba, eso es cosa antigua, lo hacía cuando era un niño torpe que creía que su madre estaba justo a su lado, escuchando atentamente las idioteces que tenía para decirle, pero hoy, no sé porque necesito hablarle a la nada. — Conocí a alguien de quien seguramente no estarías orgullosa, como papá, supongo que... — largo un profundo suspiro y luego me paro a observar la inscripción en la lápida, es espeluznante leer el nombre de mi madre ahí — Pobre Taehyung... él solo quiere hacer de su vida algo mejor ¿sabes, ma? y nadie, lo entiende, salvo yo.  Quisiera poder ayudarlo, pero poco puedo hacer, salvo comprar un arma para defenderlo. — esto último lo digo en broma, ni de coña consigo un arma por más que sepa disparar. 

— Quizás sí, deberías hacerlo, Jeon — una voz profunda resuena detrás de mi espalda, provocandome un escalofrio, luego un salto hasta que mi corazón se calma por la sorpresa, para luego voltearme y divisar a Min Yoongi detrás de mí. 

— ¿Yoongi? — me acerco a él para saludarlo, aunque me da poca confianza su sombría mirada — ¿Qué estás...?

— Vine a ver a mi padre. — contesta seco señalando unas tumbas lejos de donde nosotros nos encontramos, casi por la misma fila que la de mi madre. — resulta que la estupida de mi hermana se olvidó de traer flores nuevas hace más de un mes. No tienes idea de lo mucho que me encabrona eso. 

—Eso es... — busco una palabra adecuada, pues yo no suelo hablar con Yoongi más que un par de saludos informales por las mañanas al entrar en instituto. — muy irresponsable. 

Él asiente con la cabeza. 

— Creía que estarías con Jimin. — Yoongi niega. 

— Yo creía que tú estarías con él. Hace como dos días que no me contesta... — dice sin observarme. 

— A mi tampoco me contesta... — lo observo curioso y él repite lo mismo conmigo. 

Entre ambos hay un momento de silencio sepulcral. El cementerio lleno de matices grises a juego con el cielo y las nubes cargadas de lluvia, nubosidad y humedad, no me dan una sensación para nada  agradable. 

Yoongi empieza a caminar y yo lo sigo. 

— ¿Hablas con los muertos? — pregunta lanzando una risa burlona. 

— A veces. — contesto de la misma forma. 

— Así que estás con Taehyung ¿eh?  Yo que tú me consigo un arma, Jeon. 

— ¿Acaso escuchaste todo lo que dije? — lo observo de costado mientras caminamos juntos a la entrada del cementerio, ya casi llegamos para salir de aquí. 

— Exacto. Todo. Te vi ahí, iba a saludarte pero empezaste tu discurso meloso y, no iba a asustarte. Quizás te morias de un paro o algo. — también lo dice en broma, pero su humor es negro y bastante seco. Nada de lo que dice me da risa — Pero, oye, enserio, consiguete un arma si no quieres que te maten. 

— ¿Y tú qué sabes? — pregunto de una casi enojandome cuando cruzamos la puerta del cementerio. 

El misterioso Min Yoongi me mira con recelo al caminar las cuadras para salir a la avenida. Llegamos al callejón que da a la calle principal para volver al centro de Omelas. 

— Taehyung está en la mafia Lions, metido hasta la cabeza, con unas grandes deudas que supongo ya habrá pagado. Arrestado fuera de la ciudad cuando era niño pero alguien misterioso siempre pagaba sus fianzas por robos menores, y sí, a pesar de que no lo podía arrestar por ser menor, lo hacían de todas formas con la excusa de que "es peligroso" y bla, bla, bla, cosas de policías, tú sabrás. Te digo — dice mirándome de reojo, pero me clava la mirada fuertemente en ese momento — no se lo llevaron los servicios sociales por poco. Siempre escapando de todo el mundo. — alza sus hombros — que bueno, ahora que creció que quiera tomar otro camino, pero le será difícil. 

Abro los ojos ante las cosas que me está contando, sin poder creerlo freno a Yoongi a mitad de cuadra. 

— ¿Cómo sabes todo eso? ¿Eres agente del fbi o qué rayos, Yoongi? — cuestiono descolocado. 

— Nada de eso — agita su mano derecha negando mis preguntas — soy su ex. Salíamos hace — se queda pensando por unos segundos — dos años, literalmente. Terminamos cuando yo repetí curso, osea el año pasado. Mucho tiempo ya, pero creeme que aun no me olvido de él, parece ser que... él si se olvidó de mí. 

Okey, no quiero tener esta conversación ahora. 

— Yo era la persona en la que más confiaba — continua él — hasta que apareció ese tarado de Jackson, seguramente lo conoces. 

— Espera un segundo. — lo tomo del brazo cuando él quiere seguir su camino — ¿Jackson ya lo molestaba desde antes? Creía que... era solo porque yo soy el hijo del sheriff, ya sabes, puede ser que Jackson crea que Taehyung lo delatara y tendrá ventaja porque yo soy hijo directo de la justicia, ¿si me entiendes?

— Ja, que incrédulo. — Yoongi se acerca a mí y me toma del cuello para que yo quede a su altura, su fuerza bruta me sorprende por lo intimidatoria que puede llegar a ser — ese hijo de perra lo único que quiere es joder al pobre rubio. Está obsesionado, creeme. Y Taehyung no lo sabe, lo que es más, ni siquiera se ha percatado de eso. — Yoongi me acerca más a él y yo intento apartarme, pero no me basta, su aliento a menta choca con  mi respiración nerviosa — él no lo sabe, porque se lo he estado ocultando durante mucho tiempo, pero creeme, Jeon, será mejor que te mantengas alejado de Jackson y la mafia, lo que más puedas. Y, hagas lo que hagas, ni se te ocurra por el amor de Dios y el puto Satanás, dejar a Taehyung a merced de ese loco. Le faltan varios tornillos, debes creerme.

Yoongi se aparta de mí mientras yo solo me sobo la garganta de su agarre. Eso fue una gran advertencia, misteriosa y espeluznante. 

— ¿Vas a querer la pistola, si o no? — cuestiona ladeando la cabeza. 

Me lo pienso por unos segundos y antes de contestar me aclaro el tono de voz. 

— Eso quisiera, pero por desgracia, no podría siquiera llevarla conmigo — juntos caminamos y en el trayecto me doy cuenta que Yoongi no se dirige a ningún lado en específico, de hecho parece estarme siguiendo, así que como el hotel donde Taehyung debe estar trabajando ahora queda cerca de donde estamos, me encamino hacia ahí. 

—  Te acostumbras, o dejas que te dañen. En simples palabras, Jungkook — su tono se endurece — ¿Eres la presa o el cazador?

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro