[13] Heridas emocionales.
[Jeon Jungkook]
Las heridas emocionales son la peor de las torturas. Sigo creyendo en esa frase.
Mis lagrimas no paran de salir mientras me observo al espejo: estoy ruborizado de tanto estar llorando, lo he estado haciendo sin ser capaz de acabar, simplemente no puedo. Tengo esta sensación extraña cerca de mi estómago, que viaja con cada lágrima hasta llegar a mi garganta para quedarse allí atascada.
Un nudo.
No lo soporto.
Siempre me he considerado una persona que no resiste ningún tipo de dolor, ni físico, mental o emocional, en simples palabras el dolor para mi es algo incontrolable.
Y me duele saber que nadie me quiere cómo su pareja, no me gusta estar solo. Pero, maldita sea la vida, luego llega este chico con sus radiantes cabellos de oro, ojos color del cielo, mirada sensual y segura, todo lo que a mi me atrae. Pero esa dicha llega con el peor de los defectos.
Y es que no puedo darle más vueltas al asunto. No tengo mas vueltas que darle, siempre analizo todo desde principio a fin, pero en mi cabeza se arman un montón de situaciones horrendas, donde yo sufro, y no quiero.
Yo solo deseo sentirme amado por alguien.
Quizás Taehyung es ese alguien.
Pero el chico está metido en algo sumamente peligroso, él es territorio prohibido para mí. No solo por mi seguridad sino por la de mi padre ¿Qué pasaría si estoy involucrado emocionalmente con Taehyung y el llegase a alardear sobre mi persona con sus compañeros o amigos de la mafia? ¡Mi vida se acabaría por completo!
Yo se y tengo muy en claro que hay más opciones de chicos allí afuera. Pero también doy por seguro que ningun otro me hará sentir de esta forma. A pesar del miedo, la presencia de Taehyung tiene algo, un "no se qué" especial.
Pero él es peligroso, no es el chico correcto. Pero... ¿Quién será el hombre perfecto para mí entonces?
Me seco las lágrimas inmediatamente al escuchar dos toques suaves en la puerta de entrada. Mis ojos están hinchados de tanto llorar, mis labios tiemblan por querer parar, pero aun así me siento herido y sin salida.
¿Por qué te tuve que haber conocido Kim Taehyung? Si tan solo hubiera aceptado tu maldito trago y el baile, y no te hubiera dejado traerme a casa, todo estaría bien. Pero ya es demasiado tarde para lamentarlo.
Al dirigirme a la puerta me encuentro con Jimin de espaldas al portón, trae consigo su mochila.
— Oye Jungkook ¿Ya empezaste con el proyec...? — cuando voltea a verme su pregunta queda en la nada. — ¡¿Qué te pasó?! — corre a abrazarme, pero ahora es lo que menos necesito, si lo hace seguiré llorando y no quiero, ya estoy exhausto, solo quiero tomar una siesta. Lo aparto lentamente y lo dejo pasar a la casa, en silencio. Me siento en la mesa y tomo un vaso de agua, Jimin se sienta frente a mí dejando su mochila tirada en el suelo. — Kookie...
Me sobo la nariz antes de hablar, pero la voz se me corta.
— ¿Nunca has comenzado a enamorarte de quien... no deberías? — mis lágrimas amenazan otra vez con brotar de mis ojitos cansados, pero mi yo interno y fuerte no lo permite, por más que eso haga crecer el nudo en la garganta.
Jimin me toma de la mano, dando un apretón amistoso.
— Nunca me he dado el lujo de enamorarme, ni siquiera sé qué se debe sentir estando enamorado. Supongo que mariposas en el estómago, es lo que todos dicen ¿no?
Es eso... mariposas en el estómago, solo que las mías están volando muertas dentro de mí.
— Nunca te has enamorado... — repito su frase mirándolo incrédulo. Claro, era de esperarse, para mi amigo todo es atracción espontánea y temporal. Pobre de Yoongi. — Lastima que yo sí.
— Ya te he dicho que lo siento por no corresponder tus sentimientos hacia mí. Creía que ya lo habías superado, despues de todo, eso sucedio hace como dos años, o más. — frunce el entrecejo pensando en esos años — ¿Dos y medio, quizás? — cuestiona agudizando su voz, dubitativo.
— No, Chimmy... tú ya no me gustas de esa forma.
— ¿Entonces qué sucede? No me dirás que es por lo del chico rubio ¿o sí?— me ofrece una sonrisa calmada, como si con eso pudiera darme ánimos — Vi que te fue a buscar hoy, es un bombón ¿no lo crees? Considerate afortunado de haberlo conocido, nunca he visto a un chico tan bello como él. Por cierto, ¿Cuál es su nombre? — pregunta sirviéndose un vaso de agua, hasta ahora me percato que ni siquiera tuve tiempo de hacerle saber el nombre del chico con el que estoy saliendo.
— Kim Taehyung.
— ¡Hasta su nombre es sexy! Animate Jungkook, te mereces a ese chico. ¿Estás así por él verdad? ¿Qué sucede, dijo algo malo? — niego con la cabeza. — ¿Entonces?
Resoplo triste antes de contestarle con la verdad.
— No puedo estar con él... — admito triste anhelando todo lo contrario, mientras escondo mi cabeza entre mis manitos, refregándose los ojos por las lágrimas que caen, de repente la suavidad de mi camisa se vuelve un ardor y me detengo solo para observar a mi amigo con los ojos hinchados — ayer la pasé tan bien con él, pero no estoy seguro de que haya sido real, ¡Todo fue culpa del alcohol!
— Jungkook el alcohol te hace soltarte, disfrutar, y ser un poco más libre. Literalmente te mata las neuronas, hace que todo fluya con más tranquilidad, con más realidad.
Niego con la cabeza.
— Yo no debo estar con él.
— Pero me parece que es lo que necesitas — contraataca mi amigo, mientras me da otro apretón en la mano, ni si quiera me había percatado de que estaba formando un puño.
— Imposible...
— Jungkook — adapta su voz a un tono más grave y serio, cosa rara en él — escúchame, te diré esto como tu mejor amigo: ¡No puedes tener miedo a nuevas experiencias! la vida se trata de eso, de experimentar y explorar. Tú estás demasiado tiempo encerrado en tu zona de confort que son los estudios y la música. Nunca sales a ningún lado, eres un bicho de biblioteca, y no digo que eso esté mal, pero debes empezar a cambiar un poco, porque la vida no siempre es perfecta, normalmente es todo lo contrario. Algún día la vida va a darte otra paliza, y no sabrás cómo enfrentarlo. Un consejo: arriesgate y dejate amar, al fin y al cabo, es lo que más necesitas.
— ¡No puedo dejarme amar por él! No puedo... no puedo... no debería. — repito como un loco, comenzando a llorar hasta que siento el cuerpo de mi amigo rodarme por los hombros en un abrazo lleno de comprensión.
— Explicame por qué crees eso, quizás puedo darte otro consejo. No soy un adivino que saca a relucir tus problemas, Kookie.
Lloro pegado a su hombro, tragando saliva en un intento por recomponerme y dejar de llorar. No puedo aguantarlo.
— ¿Tú estarías con alguien peligroso? — pregunto en un hilo de voz. — ¿Serías capaz de sentir algo fuerte por alguien incorrecto?
— No lo sé Jungkook, ya te lo he dicho, yo no me enamoro, me divierto solamente. Tengo toda una vida por delante para estabilizarme y conseguir una relación seria, y quizás una familia, ya sabes que soy bisexual, no tengo problemas ni prejuicios.
— No puedes ayudarme... — suelto de su abrazo y tomo un poco de agua, Pero Jimin sigue rodeándome con un brazo, ahora está sentado a mi lado. — Dejemos el tema ¿sí?
— Como digas, Kookie. — él también toma agua — vine para que me ayudes con el proyecto del volcán radioactivo, no sé cómo empezar.
— Dejame ir a buscar los planos de mi maqueta. Yo tampoco la comencé a armar.
Cuando llego a mi cuarto antes paso por el baño y me lavo la cara, me coloco un poco de perfume para levantar mis animos, pero al llegar a mi habitación, afuera de la ventana encuentro un ramito de flores rosas, con una nota.
"Tienes miedo, lo comprendo, pero no soy el vándalo que crees. Siento haberte molestado"
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro