Capítulo 4
Ya había vuelto a casa, no sabía cómo mirar a sus hermanos a la cara, que podía decirles?
Lisa: -algo triste-
Cuphead: -se acerca a ella- ¿Lo lograste?
Mugman: -él si notaba su cara decaída- ¿Pasa algo?
Lisa:....-simplemente se pone de rodillas y los abraza, derramando lagrimas- perdonenme....no pude hacer nada...De verdad, lo siento...
Ambos hermanos le correspondieron el abrazo, entendían el por qué Lisa no pudo hacer mucho por ellos.
Cuphead: No... Fue mi culpa
Mugman: ...Hiciste lo que pudiste...
Cuphead: Gracias por intentarlo..
Lisa: -los ve- oigan...se que lo que les tocará hacer es peligroso...solo...asegúrense de regresar con vida.
Cuphead: ¡Lo prometemos!
Mugman: ¡Puedes contar con eso!
Lisa: -sonrie y los abraza-
Luego llegó el anciano tetera y le contaron lo que pasó. Acto seguido les confió una poción mágica que los ayudaría a enfrentarse a lo que venía. Luego de entrenar, los hermanos taza se fueron a cumplir con recolectar los contratos.
Lisa: -ella fue a despedirlos y los vio irse-....Espero que puedan lograrlo...
más tarde
Ahora con sus hermanos con su misión de recolectar contratos, se dispuso a pasear por el bosque. Sola y tranquila, aunque extrañaba ver las ocurrencias de Cuphead, y también a Mugman diciéndoles que tengan mucho cuidado.
Por ahora, solo tenía que esperar a que regresen con vida.
Mientras tanto en el casino
The Devil: -ya había conseguido la información que quería y por suerte, ya sabía cómo quitarle la espada, o al menos eso creía- ¡Dice!
King Dice: ¿Si, jefe?
The Devil: Tengo un pequeño trabajo para ti, aparte de recolectar los contratos de esas tazas. Tendrás que quitarle la espada a esa mocosa.
King Dice: ...Tengo una duda, ¿esa cosa no me va a arder?
The Devil: Solo lo hace si yo estoy ahí. Así que tú ve a robar la espada y no sigas cuestionando...
King Dice: y.. ¿Si ella se da cuenta?
The Devil: ¡¿Crees que lo sé todo?! ¡¡Tu solo haz lo que sabes hacer! Manipular, engañar, yo que se!! ¡¡Solo tráeme la maldita espada!!! ¡El destino de este casino está en juego!
King Dice: -esciente y mediante un movimiento, desaparece en el suelo.
Volviendo con nuestra protagonista
Lisa: -estaba echada en el césped, mirando hacia el cielo. El paisaje de la pradera, se veía tan hermoso. Por ahora debía mantenerse calmada, sabe que sus hermanos son valientes y podrán lograrlo- Ahh...¿Chicos, donde estarán?...
Estaba tan concentrada mirando el cielo que no se percató que alguien al lado suyo apareció.
King Dice: Déjame adivinar, ¿Intentando despreocuparte de lo que le pueda pasar a esos mocosos tazas?
Lisa: ¡Ah! -pegó un grito del susto, pero al ver que era dicho dado, se fue calmando y se sentó en el césped- Oye, que buen susto, ¿Desde cuando estabas aquí?
King Dice: Desde hace unos segundos, querida. -sonríe, no era su intención intentar coquetear, pero debía admitir que ella se veía muy linda e inocente.
Lisa: Bueno...tal vez, suelo ser algo distraída -dijo mientras se avergonzaba por dentro.
King Dice: No te disculpes, de hecho, me disculpo yo por hacer que tan hermosa señorita se sobresalte de esa manera -sonríe, sonaba de manera caballerosa, mientras que se sentaba a su lado.
Lisa: -se sonroja un poco por el cumplido- ...Oye, me siento halagada, de verdad, pero creo que trabajas para el diablo, ¿te envío para decirme algo?
King Dice: de hecho, vine por qué me caíste bien.
Lisa:...¿Te caí bien?
King Dice: -asiente- aparte de no ser temerosa, tienes muchas agallas. Y es muy raro ver eso por aquí.
Lisa: Bueno ...como te dije yo no soy tan valiente...pero gracias por venir a verme. -sonríe-
King Dice: -al ver esa sonrisa, no pudo evitar ponerse medio arrepentido y nervioso por estar aqui por algo muy diferente a lo que ella cree, de reojo, veía la espada que llevaba Lisa y pensó en alguna manera de quitársela- y dime, querida ...¿Dónde conseguiste esa cosa?
Lisa: Oh, ¿Esto? -muestra su espada- No es tan difícil de explicar, solo lo encontré en una piedra. De ahí, se volvió parte de mi. No tengo idea alguna de donde viene.
King Dice: -muy intrigado- Debo decir que nunca antes había visto tal objeto...con esa luz radiante de pureza...¿Puedo verlo?
Lisa: -asiente y le muestra dicha espada-
King Dice: -se acerca a echar un vistazo a aquella espada- Oh, wow, si que parece ser de luz...pura...-al haberse acercado, por un momento olvido sus malas intenciones y luego vio a Lisa.
Lisa: No tengo ni idea de como es que llegò...pero...de algún modo...me pareció verlo antes...-al mirar el horizonte, como atardecía, mientras una suave brisa en el viento se hacia presente- Ojalá mis hermanitos se encuentren bien...así que...¿Te puedo pedir un favor? -cuando hizo la pregunta, volteó a ver a Dice, su mirada luce preocupada.
King Dice: -al verla preocupada, asumió que lo que fuese a pedir, sería importante. Se supone que no debería, pero siempre fue un hombre de palabra, sobre todo con sus clientes. No estaría mal hacer una pequeña excepción- Claro, ¿Cuál es ese favor?
Lisa: Escucha...presiento que en algún momento, mis hermanitos no solo se enfrentaran a ciertos habitantes de la isla Tintero...-dijo viéndolo, el dado con eso ya podía suponer que a quienes estaba haciendo alusión- El Diablo no se va a contener, y los matará si se niegan...así que solo te pido esto a ti...por favor...no permitas que algo malo les pase...
King Dice: -al escuchar lo que pidió, solo suspiro con alguna que otra resignación- Lisa...No puedo simplemente, no pelear, pero...te puedo asegurar una cosa...-la tomo de las manos y observándola con aparente determinación- Puede que se vuelvan capaces de enfrentarse al mismísimo Diablo, odio decir esto, pero solo soy uno de sus lacayos. No voy a hacer mucha diferencia, debo de dar todo de mi para que mi jefe no me haga algo peor...Entiendo que no me quieres pedir que sea derrotado fácilmente...
Lisa: Solo...no les hagas algo grave...-sus ojos, tenían esa expresión preocupada cada vez mas notorio, se notaba que le preocupaban sus hermanitos más de lo que imagina.
King Dice: No intentare matarlos de verdad, lo prometo. Y se que puedes confiar en eso, por que siempre cumplo con lo que prometo...-aclaró, eso ultimo lo dijo por si la chica escuchaba cosas malas sobre él, y para saber que no iba a cambiar de opinión.
Lisa: Te lo agradezco, de verdad. -sonríe y le abraza casi llorando- Creí que te negarías ante tal pedido, pero de verdad, ¡Gracias!
King Dice: -se sorprendió ante aquel abrazo, no supo como reaccionar, era la primera vez que le daban uno- S-si, claro...
Luego de un rato, Dice recordó a que exactamente habia llegado. Le preocupaba hacer esto y que ella ya no confié en él, pero si no lo hacia, su vida se pondrá en peligro. No tuvo mas opción que hacer algo muy egoísta...Elegir su vida.
King Dice: oye emm...necesito algo...espero, no decepcionarte ni nada...pero...¿podrías darme u espada? -cuestiona con cierto nerviosismo.
Lisa: -su expresión en ningún momento cambio a de ira o dolor- Oh, la verdad no me esperaba esto, pero, si la necesitas para salvar tu vida. -se lo da- Puedes entregársela al cuernitos. -sonríe con calma.
King Dice: ¿Ehh? ¡Aguarda un segundo! -esperaba cualquier reacción de enojo y traición excepto eso- ¿me lo das? ¿Simplemente me lo das? Ten en cuenta que esto es una especie de traición, cosa que no quiero hacer por mi propia cuenta...¿Y aun así, me lo das?
Lisa: -asiente- Tu mismo lo dijiste, ¿No? No es tu intención, el Diablo te fuerza a hacer esto...no quiero causarte problemas negándome.
King Dice:...¿algún truco detrás de esto?
Lisa: ningún truco, si vas con las manos vacías te darán un buen regaño. Y no quiero que pase, así que, puedes llevártelo.
King Dice: -toma la espada y extrañamente no le ardió mucho cuando se levantaba. Antes de irse, vio a la chica con cierta incredulidad y luego se fue.
Lisa: -estaba feliz, no le importaba mucho si aquel dado venía de parte del diablo, pero debe admitir que es agradable.
Sin embargo, a su lado había una flor con una cara de asombro por toda esta situación.
???: ¡¿Dejaste que se lo llevará?! -exclamó con cierto asombro
Lisa: -voltea a verlo, debe admitir que tampoco esperaba que alguien viera todo esto- Oye, ¡hola! No te vi por aquí, ¿Quién eres?
???: Perdón por el susto, soy Cagney Carnation. -se presenta- Lo siento si fui algo intrusivo, solo que estaba por aquí, y vi todo eso, y te juro que estaba por sacarte de ese "lío", que ya veo que no lo fue.
Lisa: Quería ayudarlo, no podía dejar que el diablo le haga algo por mi culpa.
Cagney: Pero, ¿Sabes quien es ese, verdad? Es la mano derecha del Diablo, es uno de sus más peligrosos lacayos...¿Segura no te arrepientes? -cuestionó con cierta preocupación.
Lisa: -niega- No, soy consciente de esto, y se que no fue adrede. -contesta tranquilamente.
Cagney: Me sorprende el buen corazón que tienes. En fin, me voy, un gusto hablar contigo...solo un consejo, no te fíes de él, es muy peligroso, por mas que no lo aparente...por cierto, ¿Tienes algún nombre?
Lisa: Soy Lisa -sonríe- Mucho gusto conocerte.
Cagney: Espero que no se me olvide, ¡adiós! -y se fue, mediante la tierra.
Lisa: -se quedó a mirar el cielo un poco más, estaba medio anocheciendo y los colores eran hermosos-
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro