Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

𖥔 66 𖥔

Habían pasado ya un par de semanas desde que se juntaron por primera vez en el hogar del mayor, semanas en las cuales Jeongguk empezó a frecuentar muy seguido aquella gran casa, haciendo que su relación se hiciera mucho más íntima.

Apenas Jimin decía que tenía día libre, el menor ya se encontraba tocando la puerta.

Le gustaba tanto pasar tiempo en su hogar. Era todo tan cálido y bonito, además que el ambiente olía al perfume de su mayor, se sentía como en el paraíso cada vez que ponía un pie en la vivienda. A parte que evitaba ver a la cara a su madre, siempre que lo hacía recordaba las duras palabras que había dicho la otra vez e imaginaba lo decepcionada que se sentiría ella al conocer su verdad.

Obviamente sus sentimientos por Jimin crecieron aún más, y era imposible evitarlo con lo cariñoso que se comportaba el mayor con él. Había agarrado mañas como acariciarle el pelo, abrazarlo de la nada y darle todo lo que pedía, y no podía quejarse porque no le desagradaba aquel tipo de afecto, pero seguro algún día le agarraba un paro cardíaco por lo rápido que hacía latir su corazón cada vez que se le acercaba.

Aquella tarde fue igualmente a la casa del mayor, no tenían mucho de qué hablar esta vez, por lo que decidieron jugar un par de partidas de aquel juego que hizo que se conocieran en primer lugar. A Jeongguk le sorprendió al inicio saber que Jimin tenía más de un computador, pero después supuso que era obvio con la cantidad de dinero que poseía.

Era divertido jugar de esa manera, ya que podía apreciar en vivo y en directo las reacciones del más bajo cada vez que moría o iban perdiendo, lo cual le daba risa y ternura.

El mayor estaba jugando en el escritorio, mientras que el menor estaba sobre la cama con el portátil que le prestó. Nunca antes había tenido la oportunidad de tener en sus manos una laptop gamer, se sentía extraño pero a la vez le encantaba la velocidad con la que podía jugar sin la necesidad de bajarle los gráficos. Tal vez si algún día se animaba a trabajar ahorraría para comprar uno de esos, seguro el computador que le dio el gobierno cuando tenía doce años ya no aguantaría mucho tiempo más.

ㅡOh el jungla weón, ya me enojé. ㅡPegó un ligero salto al oír la voz de Jimin, pensó tanto tiempo que se olvidó por completo que estaban a medio de una partida.

ㅡYo cacho que mejor nos rindamos no más, ya me aburrí de esto. ㅡAsintió estando de acuerdo con la molestia ajena, aunque en parte sabía que en realidad estaba algo distraído y que eso estaba afectando a su rendimiento.

Tiró la votación para que su equipo pudiese rendirse, sin embargo soltó un quejido al apreciar como sólo tuvo dos votos a favor, los cuales claramente correspondían a los de ellos mismos.

Continuaron la partida bastante tensos, deseando que terminase pronto, pero igual pusieron de su parte para poder ganar, ya que de todas formas llevaban tres juegos seguidos en los cuales ninguno habían ganado, una derrota más sería demasiado decepcionante. No se dijo ninguna palabra en un buen rato, el sonido de los teclados y los clicks en el ratón era lo único que se podía escuchar en la habitación, estaban bastante concentrados.

Después de unos minutos de andar batallando, se relajaron al apreciar como en la pantalla se anunciaba la victoria, cosa que no esperaban hace unos minutos pero los llenaba de orgullo.

ㅡAl fin, conchesumare. ㅡJeongguk suspiró, levantándose de la cama con emoción, dando un pequeño salto.

ㅡ¡Lo logramos! ㅡJimin también se levantó de su asiento, yendo a abrazar al menor con fuerza, sorprendiéndolo tanto que hizo que cayeran sobre el colchón. ㅡErí demasiado seco.

ㅡNah, no lo hubiese logrado sin ti. ㅡRió por la emoción del mayor, causándole ternura. Correspondió al abrazo enterrando su cabeza en su hombro, aprovechando de sentir un poco más del aroma ajeno.

Jimin se acomodó sobre el cuerpo del menor sin soltarlo, separándose unos centímetros para poder mirar su rostro.

ㅡYa me aburrí de jugar, ¿querí hacer algo más? ㅡpreguntó arreglando un mechón de pelo que Jeongguk tenía despeinado.

ㅡ¿Algo como qué? ㅡEntró en pánico, tenía al mayor demasiado cerca de su rostro, pero de verdad demasiado cerca, y no podía evitar fantasear en que él lo besaba al fin.

ㅡNo lo sé, ¿hay algo que querai hacer? ㅡBueno, sí tenía una idea en mente, pero no podía decirlo en voz alta.

El menor mordió el interior de su mejilla, observando a los ojos al chico que tenía encima suyo antes de bajar la mirada a sus labios.

¿Qué tan grande era la probabilidad de que lo odiara si le robaba un beso? Lo deseaba tanto, pero no se quería arriesgar.

Suspiró alejando esos pensamientos, con la intención de separar al mayor de su cuerpo, sin embargo la intensa mirada que le estaba dando lo atrapó.

ㅡ¿Por qué tení que ser tan lindo? No entiendo. ㅡLa dulce voz de Jimin hizo estremecer su cuerpo, sacándole un gran suspiro mientras su rostro comenzaba a arder.

No pudo responder nada, no podía formular ninguna palabra. Su mente quedó embobada en la expresión del mayor. La manera en la que lo observaba le hacía sentir tan precioso, pero no podía ilusionarse más, eso le haría mucho daño.

O eso creía, ya que él no sabía que el contrario también estaba teniendo un gran debate mental en ese momento.

Jimin sentía un impulso gigante, uno que no comprendía, ni siquiera era capaz de reconocer lo que estaba sintiendo. Sólo que, tal vez, sus instintos lo estaban llevando a algo que quería hacer desde hace ya un tiempo.

Sentía que desde que comenzó a juntarse más seguido con el menor lo había empezado a ver de manera distinta, tal vez se debía a que creyó por mucho tiempo que aquel rostro era el de una chica, pero no entendía por qué seguiría viéndolo de esa forma conociendo ya la verdad. ¿Será que empezó a gustarle el real Jeongguk y alejó completamente la idea femenina que tenía de él? Debía confirmarlo de alguna manera.

Acercó su rostro hacia el del menor, con la intención de comprobar si aquella cercanía no le molestaba a sí mismo, pero no se esperó que el contrario cerrase los ojos ante la acción, como si estuviese esperando que pasara algo más.

Ahí pudo entender bien aquel deseo que había crecido dentro de él, le sorprendió verse en esa situación, mas no le disgustó para nada.

Cerró los ojos igualmente, cortando la distancia que había entre los dos hasta sentir sus labios rozando contra los del más alto, pudo sentir las manos ajenas ansiosas sobre su espalda, por lo que se apresuró a juntar por completo sus bocas.

Era una sensación nueva, nunca había besado a alguien antes, pero no podía negar el hecho de que le encantó. Acariciar sus labios contra los de Jeongguk se sintió mucho más suave de lo que pensó, y eso sólo hizo que su estómago fuese invadido por un agradable cosquilleo.

Después de unos segundos se separó, soltando una pequeña carcajada al darse cuenta que el menor tenía la cara completamente roja, se le hacía tan adorable.

ㅡ¿Me diste un beso? ¿O será que ya estoy delirando? ㅡpreguntó el menor algo perdido, sin creer aún lo que acababa de pasar.

ㅡChuta, yo estoy seguro que sí te lo di, capaz necesites otro para que te convenzas que de verdad pasó. ㅡrió dejando un pequeño besito en la mejilla ajena.

Jeongguk abrió los ojos procesando lo que había pasado, no le cabía en la mente que de verdad estuviese sucediendo, seguro estaba dentro de un sueño. Pero, sólo para confirmar le dio igualmente un torpe y corto beso en los labios a su mayor, separándose con sorpresa al darse cuenta que estaba despierto.

O sea, Jimin lo había besado y no era producto de su imaginación...

Y ahora no tenía idea de cómo reaccionar.

Lo único que atinó a hacer fue sentarse en la cama, provocando que el más bajo tomase algo de distancia, lo observó unos segundos tratando de decir algo, pero nada llegó a su mente. Se sentía tan avergonzado.

ㅡUhm, creo que ya es hora de que me vaya, si llego tarde a mi casa mi mamá me va a retar. ㅡFue lo único que pudo decir, sintiéndose demasiado arrepentido después de eso.

ㅡOh... ¿Querí que te vaya a dejar? ㅡsugirió acariciando su mejilla.

ㅡNo, tranquilo, voy a tomar micro.

Estaba huyendo y no entendía el porqué. Si bien sentía algo de miedo de lo que pudiese pasar después, no comprendía por qué necesitó tanto huir, pero tras salir de la casa de Jimin lo único que deseó fue correr hasta su propio hogar y encerrarse a gritar de la emoción que sentía, procesando aún la información de lo ocurrido sin saber que dejó al mayor demasiado confundido y apenado, creyendo que había hecho algo mal.


Me tardé un poco más en este capítulo, pero lo prometido es deuda 💋💋💋

YAAA, OPINIONES??????

dejen sus comentarios, amo leerles 🤭💕

Nos vemos en el próximo capítulo 🫣

10/09/2023

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro