-Y otra vez aquí. -La chica observo el cielo despejado de la Villa.

-Debemos ir a la ciudad goron. Pero antes necesitaremos provisiones, vayamos a comprar algunas cosas. -Link observó una tienda mientras que la chica asintió.

El hylian se dirigió a una tienda en la que vendían armas, como bombas, bombuchus, flechas, escudos etc. Mientras que la peliblanca se dirigió a la tienda de pociones que estaba en frente de la que había entrado Link. Ella cerró la puerta suavemente y se dirigió al mostrador observando la mercancía.

- ¡HOLA HOLA HOLA HOLA HOLA! -Una energética chica apareció repentinamente de atrás del mostrador saludando a la peliblanca, la mujer contaba con cabello azul chicle algo ondulado y grandes gafas, además de que su vestimenta era algo rara.

La albina solo dio unos pasos hacia atrás al ver cuán animada estaba su vendedora.

-Muy buenas tardes, valioso cliente, ¿buscas algo en específico? Tenemos de todo, desde el corazón de un wolfo, hasta el riñón de un dodongo. -Ella no dejaba de sonreír emocionada. - ¿Qué es lo que quisieras? -Ella parpadeo un par de veces.

Waitter arqueo una ceja. -Quisiera que tuvieses un botón de silencio para que te calles.

La chica rió. -Oh que gracioso comentario señorita, pero no soy un robot. -Su expresión cambio a una de terror. - ¿¡O tal vez si lo soy y viví toda mi vida engañada!? ¡Pero que terrible tragedia!

La peliblanca dio un suspiro. -No vine a escuchar dramas de ti, vine a comprar pociones para el mana.

La chica peliazul parpadeo dos veces rápidamente. - ¡Pociones para el mana! ¡Pero qué gran adquisición hará! ¡Y ahora en la compra de dos pociones se puede llevar un pescado gratis!

Waitter acerco el cuello de la blusa de la vendedora hacía una daga que tenía en mano, la chica observo sorprendida aquella arma mientras que la albina la observaba seria. -Dije que quería una poción de mana en este momento, no me hagas tener que hacerlo de la manera mala, a menos que quieras sentir titanio en tu garganta.

La vendedora trago saliva, pero no demostró miedo. -Señorita, en esta tienda se prohíben las armas de titanio, pero si tiene de acero inoxidable entonces puede cambiarla sin compromiso. -Respondió observandola sonriente.

¿Qué persona en su sano juicio haría un comentario así en una situación como esa?

Waitter acerco más el arma punzante. -No pregunte tu opinión, solo dame lo que he venido a buscar.

-Con gusto, en este momento le proporcionaré su ansiada poción, señorita. -Waitter la soltó del cuello haciendo que la chica buscará la poción.

-Aquí esta señorita, puede llevársela sin pagar, tómelo como un regalo por haberla hecho esperar. -Aquella sonrisa energética volvió a aparecer en ella.

-De todas formas, no iba a pagar por ella. -La hylian tomo su producto y salió de la tienda.

La vendedora sonrió de oreja a oreja mientras que incomprensiblemente el color de su cabello y altitud del mismo cambiaban al igual que el color de sus iris. -Que... Interesante persona. -Su voz dejo de ser tan aguda...

Una vez que la chica salió de aquella tienda se encontró con el rubio afuera esperándola. -Tardaste mucho como para solo comprar una poción.

-La persona que me atendió casi quería decirme la historia de su vida, así que la hice entrar en razón para que me diera lo que pedía.

Link la observo con los ojos entrecerrados. -La mataste ¿verdad?

-Si, la mate, ¿Qué no aprecias las manchas de sangre de mi ropa? ¿O el cuchillo lleno de jugo de persona? -Ella respondió con sarcasmo.

Link se encogió de hombros. -Solo me aseguro.

Ellos estaban a punto de marcharse cuando repentinamente Waitter observó un negocio que le llamo la atención. -Link, sígueme. -Ella lo tomo del brazo y lo jalo, aunque no pudo moverlo.

- ¿Qué pasa? ¿a dónde quieres llevarme? -Pregunto el rubio confundido.

La albina seguía jalándolo sin poder lograr movimiento. -Voy a prostituirte para ganar dinero.

-... ¿Qué? -Link se zafó de su agarre.

-Tranquilo, me asegurare de que paguen bien por ti.

El observo a Waitter con cara de ¿Qué demonios? –No es momento de tus tonterías. Tenemos que ir a la montaña de la muerte.

- ¿Y después podre prostituirte?

-No. -Respondió serio.

La albina volteo su ojo. -Solo era broma. -Ella toco el hombro de Link haciendo que desaparecieran de ahí.

En un abrir y cerrar de ojos ambos hylians llegaron a la entrada de la ciudad goron. Con cuidado ellos entraron en la mencionad, un misterioso silencio se dejó escuchar en el lugar. No se podía percibir a ningún goron rodando como siempre. Esto podía significar que se encontrarían en el templo del fuego atrapados.

- ¡Darunia! –Grito Link con fuerza, pero no tuvo respuesta, al parecer sus sospechas eran ciertas.

La albina pateo una piedra. - ¿Acaso estas jugando a decir palabras sin sentido?

-Tenemos que ir al templo del fuego. Deben estar presos ahí. -Habló sin escuchar la oración de su compañera al mismo tiempo que se dirigía hacia la cámara donde Darunia se debía de encontrar.

La chica lo siguió- ¿Como estas tan seguro de que se encuentren allá?

-Es una corazonada.

-Hey, no sé si ya te lo haya dicho, pero yo y el calor no nos llevamos bien, ya la pasé mal en el desierto y templo del fuego no es algo que me llame la atención. -La chica se cruzó de brazos.

El hylian la miro. -Los gorons están en peligro, debemos ir.

-Ah –Suspiró en un tono de cansancio-. La albina siguió a Link a donde estaba la recamara de Darunia y empujaron la estatua que conducía directamente al cráter de la montaña.

El rubio se abaniqueo un poco. -Si que está caliente.

Waitter lo miro. -Es un volcán, obviamente está caliente. –Ella toco al hylian. -Kálypsi. -Recito como un leve susurro lo que provocó que un destello transparente cubriera el cuerpo de ambos. -Con esto estaremos frescos.

El rubio ya no se sentía acalorado. -Es de mucha ayuda que sepas magia.

La chica observo hacía el suelo, pero no contesto, en su lugar comenzó a caminar. Link la observó arqueando una ceja, pero se limitó a caminar también.

...

Ya en el templo ambos entraron a la sala de la izquierda, donde se va directamente a la sala del jefe. Link se percató de que Darunia no estaba delante de la puerta como en el futuro. Fue entonces que recordó algo.

Si tenía que pasar el templo del fuego otra vez entonces eso significaba que el jefe final sería Volvagia, Link frunció su ceño, no podía ser, le aterraba la idea de tener que enfrentarse otra vez con su amigo, y matarlo sería aún más doloroso para él.

El rubio apretó los puños con fuerza, de la presión sus nudillos se tornaron blancos. -Waitter, ve a rescatar a los gorons, yo me encargo del jefe. -Su voz era fría.

La mencionada observo su rostro, se podía percibir fácilmente que algo le pasaba y no era momento para contradecirlo más bien, debía de ayudarlo.

-No. -Ella contesto indiferente, obviamente aquello le importo un bledo.

-Yo me tengo que encargar del jefe, necesito que tú salves a los gorons. -Volvió a decir serio.

La chica vio la expresión seria y preocupada del rostro de Link.

<<Interesante>> -Ella pensó.

-Parece que el asunto con el jefe de este lugar es tan importante que me dejas estar sola con los gorons, quien sabe si alguno de ellos salga con vida. - la chics se encogió de hombros.

-Te lo pido, de verdad tengo que asegurarme de algo. -Rogo el hylian.

Waitter dio un suspiro. -Me deberás un favor después de esto, yo no hago nada de a gratis.

El rubio le dio una sonrisa calmada. -Gracias. –Después de decir eso Link rápidamente se dirigió a la sala donde se encontraría con el jefe de la mazmorra.

La albina observo por un momento la puerta hacia la que el rubio había entrado. -Idiota, hasta un tonto se daría cuenta de esa sonrisa falsa. Mas te vale que no mueras. -Al terminar esa frase se retiró al interior del templo del fuego.

...

Un calor infernal se pudo sentir en aquella sala.

A pesar de traer la barrera de su compañera aún podía sentir a las abrazadoras llamas. Link caminó lentamente por la habitación. Esta tenía en el centro un agujero con magma ardiendo, si se observaba con atención, de alguna manera el piso del lugar parecía un montón de almas en pena acercándose al infierno. Claro que el chico no se percató de eso.

Link limpió el sudor de su frente y caminó por la habitación sin bajar la guardia. Mientras observaba su entorno un pensamiento llego a su cabeza.

<<El fuego es hermoso, pero, a la vez es envidioso, destruye todo lo que encuentra bello a su paso para solo él pueda destacar.>> -Pensó él, pero después rio levemente. <<Seguramente eso me hubiese dicho Navi si estuviera aquí>>

La mirada del rubio bajo al suelo del lugar, ahí había encontrado una obsidiana. Era común encontrarlas en los volcanes.

Cuando estuvo a punto de tomarla un gran sonido se pudo escuchar proveniente de la lava acompañado por un gran rugido.

El hylian observo sorprendido y con su espada en mano observó la escena, algunas gotas de la lava salpicaron por la tierra, haciendo que esta se tornara aún más oscura de lo que de por si ya estaba. Link alzó su cabeza para ver que era aquello.

Aunque ya se lo esperaba, de alguna manera se sorprendió.

Un dragón con un cuerpo largo y delgado junto con cabellos de fuego, sin duda alguna, era Volvagia.

<<Otra vez no, otra vez no... ¿Qué hice mal?>> -Pensaba observando como el dragón se enroscaba en sí mismo y le lanzaba una llamarada de fuego.

Link chasqueo su lengua y comenzó a correr esquivando por completo aquella ráfaga de llamas. - ¡VOLVAGIA! ¡SOY YO, LINK! -Gritó lo más alto que pudo, pero aquel dragón no lo escuchaba y solo se dedicaba a atacarlo.

- ¡NO TE DEJES CONTROLAR POR GANONDORF! ¡RECUERDA QUE ERES MI AMI-! Se interrumpió tratando de esquivar otro ataque.

Fue entonces cuando se percató de algo que lo dejo helado...

En ningún momento fue amigo de aquel dragón, el regreso otra vez a su época y se había olvidado por completo de Volvagia.

Jamás se conocieron en esta época, por lo tanto, aunque el dragón reaccionara, no sabría quién es él.

-Oh no... No... cometí un error. -El hylian observó a Volvagia con una mirada de shock al ver que el mencionado había lanzado más llamas hacía él, pero no se había dado cuenta hasta que estas ya estaban más cerca de él. Solo pudo poner sus brazos frente a su rostro y esperar al impacto.

No obstante, antes de que estas llegaran al rubio un rugido de dolor vino de parte del dragón haciendo que este se sumergiera en la lava, Link quito sus brazos de su rostro y observó hacía su derecha por reflejo.

Waitter estaba parada en la entrada de la sala con su mano estirada, como si hubiese lanzado algo. Link la miro sorprendido. - ¡No lo lastimes! -Le advirtió.

La chica volteo a verlo al mismo tiempo que arqueaba una ceja. - ¿Por qué? -Pregunto con voz indiferente.

-Volvagia él... No sabe lo que hace, tal vez podemos devolverlo a la normalidad, si, tal vez podamos, solo necesito pensar en una manera. -El rubio menciono esas palabras algo desesperado.

Waitter dio un leve suspiro. -Eso es un dragón, no una persona, no te escuchara.

-Tal vez lo haga, tengo que intentarlo. -Nuevamente aquella desesperación se pudo notar en su mirada.

-Tienes que matarlo. -Le corrigió la albina.

-Él es mi amigo, uno muy preciado, tenemos que hacerlo entrar en razón. -Link replicaba con preocupación.

Aún sabiendo que posiblemente no funcionaría, el hylian quería hablar con él, era de alguna manera, una petición egoísta.

La albina percibió que la preocupación del rubio era sincera, un recuerdo vivido vino a su cabeza.

- ¡Waitter, por favor ay-....!

Esto hizo que su corazón se acelerara por la adrenalina al igual que su cabeza palpito en dolor, con una mano tomo su área frontal de la misma.

-Si de verdad es tu amigo entonces mátalo, así acabaras con su sufrimiento. -Habló aun tomándose la cabeza, esa situación le había recordado un momento amargo.

Link abrió sus ojos tanto como pudo, aunque no le pareciese, era verdad, él debía de caer en cuenta de que Volvagia ya no volvería jamás, puesto que su amistad con él nunca paso. -Soy de lo peor. -Se dijo a sí mismo en modo de susurro.

-Ese dragón ya es uno de los esbirros de Garnulfo, juraste proteger Hyrule no importa quien sea quien la amenaza, debes vencerlo, es momento de que pongas estas palabras a prueba. -La peliblanca lo tomo del hombro. -El destino del mundo depende de ti ¿Sacrificaras a todo el mundo por salvar a un alguien? o ¿sacrificaras a alguien para salvar a todo el mundo? -Link solo cerro los ojos con fuerza y chasqueo la lengua, tenía razón, él debía salvar Hyrule, para ello tendría que sacrificar a su preciado amigo. Aunque le había sorprendido que Waitter dijera aquellas palabras, no era común en ella.

Cuando Link estuvo a punto de decir algo, nuevamente aquel sonido se dejó escuchar, Volvagia se había recuperado por completo. El hylian seguía algo dudoso si tomar la vida de esa pobre criatura, pero sabía que no tenía opción.

Con un nudo en la garganta el hylian tomo su arco colocando una flecha en este y apuntando hacía el dragón, la peliblanca lo observó. -Yo lo distraigo, tu intenta apuntarle. -Al terminar de decir eso Waitter corrió hacía la mira de Volvagia.

Link suspiró levemente y aun inseguro disparó hacía el dragón, pero no le dio, esto hizo que chasqueara su lengua y nuevamente cargara otra flecha en su arma, la peliblanca por su parte esquivaba los ataques sin dificultad, aunque su resistencia no duraría mucho y el hylian lo sabía.

Nuevamente otra flecha fue disparada.

Y, tuvo el mismo trayecto que la anterior.

- ¿Qué demonios te pasa? ¡Dale de una endemoniada vez! -Grito la chica.

- ¡Es lo que intento! -Respondió él.

Nuevamente, flecha, tras flecha, tras flecha fueron disparadas, pero, ninguna daba a su objetivo, Link no entendía el porqué de su mala puntería, él no era así.

Volvagía se enrosco en sí mismo y se acercó con velocidad a la chica, ella quedo acorralada en una parte de la habitación, así que no tendría posibilidades de escapar. En un acto de reflejo tomo uno de sus cuchillos y cuando estuvo lo suficientemente cerca del dragón se lo encajo profundamente en toda la córnea.

Volvagia dio un alarido de dolor y golpeo con fuerza el techo con su cabeza. Esto hizo que volviera nuevamente a esconderse en la lava. Link se maldijo a el mismo por no poder haber hecho nada, con fuerza golpeo la tierra roja del lugar, luego su mirada viajo a donde se encontraba su compañera.

Ella estaba jadeando y con las manos en sus rodillas, era de verse, fue entonces cuando sus ojos se percataron de algo.

Una roca comenzó a caer al suelo, más específicamente en la dirección en la que estaba Waitter, Link gritó en reflejo. - ¡MUEVETE DE AHÍ!

La peliblanca lo observo confundida y alzó su cabeza hacia arriba, pero lo único que pudo hacer fue abrir su boca.

Todo paso tan lento.

Los gritos de Link le eran inaudibles, todo en su alrededor le era inaudible e inanimado, el tiempo en ese momento para ella fue como se estuviese en cámara lenta, lo único que pudo oír fue lo que parecía ser el sonido de sus huesos romperse.

Y, un estruendo se dejó escuchar por toda la sala.

Link abrió su boca tanto como pudo al mismo tiempo que corría hacía donde se encontraba ella.

- ¡WAITTER! -Le grito con fuerza Link hincándose a su lado.

Ella tenía de la cintura hacía debajo de su cuerpo aplastado por aquella piedra. Link tomo su cabeza con su mano y la sacudió un poco llamándola varias veces.

Una leve tos dejo la boca de la chica con algo de sangre. - ¿Qui...eres... Ca...llarte? -Habló con las pocas fuerzas que le quedaban.

Link suspiro en alivio. -Estas bien...

-Si... el significado... de... estar bien... para... ti... es... estar... aplastado... entonces... estoy de maravilla. -Su mirada estaba perdida.

El hylian puso una mano en su boca. -Si tan solo hubiese apuntado bien... Si tan solo pudiese retroceder el tiempo.

Y esa era la palabra clave.

Si, tiempo, ¿Cómo había podido olvidar que podía controlarlo?

Con rapidez comenzó a buscar entre las cosas de su alforja, pero, un sonido hizo que aquella búsqueda se diera prisa.

Volvagia había vuelto a salir de aquella fosa de lava. Link por fortuna había encontrado a tiempo la ocarina.

-Te salvaré, no te dejaré morir por mi culpa. -Habló mientras ponía la ocarina en sus labios.

Pero no se había dado cuenta de que la chica ya ni siquiera parpadeaba...

Volvagia con rapidez -Y con uno de sus ojos cerrados y sangrante- se acerco hacía el rubio. Link por otra parte podía sentir como su corazón latía con fuerza al sentir como poco a poco el dragón se acercaba a él y que si se equivocaba en las notas podría costarle la vida.

la re fa

la re fa

la do si

sol fa sol

Por fortuna, toco correctamente las notas de aquella mística canción.

Y todo se tornó blanco para él.

Repentinamente el hylian abrió sus ojos tanto como pudo y observó su entorno.

-Eso es un dragón no una persona, no te escuchara. -Ella observó como el rubio observaba la sala. -Y creo que se de otro animal que no escucha. -La albina se cruzó de brazos.

Link la observo como si no la hubiese visto en mucho tiempo. -Wai-.

Fue interrumpido por el rugido de Volvagia quien salía de la lava. -Yo lo distraigo, tu intenta apuntarle. -Al terminar de decir eso Waitter corrió hacía la mira de Volvagia.

Link tomo su arco y lo apretó con fuerza. -Solo... Piensa que descansará en paz si haces esto... -Se dijo a él mismo y, con un nudo en la garganta cargo la flecha en su arma.

Levemente la soltó.

Esta impacto en la que parecía ser la nuca de Volvagia, esto hizo que diera un alarido de dolor y volteara hacía donde se encontraba Link. Mientras él cargaba la otra flecha el dragón se acercaba con velocidad hacía su ubicación.

El rubio todavía tenía ese nudo en la garganta, pero aún así estaba preparado para disparar. Cuando Volvagia se encontraba ya un poco más cerca de él Link disparó la flecha.

Esta dio directamente en la frente del dragón haciendo que volviera a rugir y fue en ese momento que Link aprovecho para sacar su espada y darle el golpe final.

-Perdóname, amigo. -Y con eso Link levantó la espada y la dejó caer con fuerza sobre la cabeza del dragón.

El hylian cerró sus ojos al mismo tiempo que escucho el sonido como si una sandía cayese desde muy alto y se rompiera.

Link abrió los ojos cuando termino, de reojo observó al dragón ya inerte frente a él. El hylian cubrió su boca al verlo de esa manera. -Lo siento... No pude salvarte de nuevo. -Dijo en voz baja.

La chica de cabello blanco se acerco a Link y observó el cuerpo del dragón, Link aún no podía creer que hace algunos minutos atrás ella estuviese aplastada y sin vida....

La expresión del hylia reflejaba congusion, Ya no estaba acostumbrado a tratar con el tiempo. - ¿Estas bien?

Ella arqueo una ceja en respuesta. - ¿Por qué no debería estarlo?

Link suspiró en alivio, a pesar de que a veces ella podría molestarlo y él casi quisiera arrancarse el cuero cabelludo, aún así, le alegraba que no estuviese muerta.

Sin pensarlo el rubio la abrazó con fuerza, su labio inferior tembló levemente. -Me alegra que sigas con vida. -Le dijo en un leve susurro.

La chica por otra parte le correspondió con un cariñoso puñetazo en el abdomen del rubio. Link se separo de ella tosiendo y tomando aire. -Vuelve a hacer eso y despídete de tus brazos. -Habló indiferente, aunque ella sintió una repentina sensación de déjá vu.

-Que... Tierna. –Dijo Link intentando recuperar el aliento.

-Vaya, ¿así que fueron ustedes quienes vencieron a Volvagia? esto se merece una goro-celebración. -Una voz se dejó escuchar por la sala repentinamente, esta le pertenecía a el líder de la raza goron, Darunia quien había entrado a la habitación.

-Les pido disculpas por no poder hacer nada-goro, pero gracias a la ayuda de esa chica pude salvar a mi gente de ser comida-goro. -Dio una sonrisa y le dio una palmada en la espalda a Link, el héroe cayó al suelo de la fuerza y el goron le brindo una sonrisa a la albina.

-No hay de que Darunia. -El rubio dijo volviendo a recuperar el aliento después de aquellos mortales golpes consecutivos.

-Oh, parece que me conoces, seguramente eres un caballero de la reina Zelda y te ha hablado sobre mí. -Le sonrió.

Y nuevamente el rubio olvido aquel detalle. Era tan despistado que olvidaba que no debía de decir los nombres de algunas personas...

-De ahora en adelante serás mi hermano por habernos ayudado, muchas gracias.

La albina por otra parte volvía a sentir aquella sensación de déjá vu al igual que recordó lo que Link le había dicho, su cabeza en ese momento se encontraba muy confusa.

Fue ahí cuando Darunia comenzó a brillar como lo hizo Nabooru, lo que significaba que era el siguiente sabio. - ¿Qué le pasa a mí cuerpo-goro? -Dijo observando su cuerpo rocoso con una expresión de confusión. Poco a poco él se estaba volviendo transparente.

-Tranquilo, eres el sabio del fuego, es por eso que estas desapareciendo. -Le explico el rubio. Pero Darunia no pudo escucharlo ya que él ya había desaparecido por completo. Nuevamente aquel brillo ilumino aún más la sala y los llevo hacia la entrada del cráter.

La albina suspiro. -Ya tuve suficiente con el fuego.

El hylian se estiro. -No estuvo tan mal.

La chica toco el puente de su naríz. -Si vuelve a haber más fuego te dejare solo.

-Haz como quieras. -Le respondió indiferente.

Y hasta ahí llego su alivio por verla viva otra vez.

La albina solo miro con los ojos entrecerrados, pero ignoro su respuesta. - ¿Y ahora a dónde?

Link pensó un poco. -Probemos con el templo del agua ahora, se encuentra en el lago Hylia.

-Bueno, por lo menos no es fuego. -La albina toco el hombro del hylian.

- ¿Por qué no te gusta el calor?

-Es... sofocante. -Ella se encogió de hombros.

-Ya veo. -Le respondió el chico limpiándose el sudor con su antebrazo.

-Kínisi. -Waitter recitó aquel hechizo de teletransportación susurrando las palabras.

Y así los dos se dirigieron a su siguiente parada: El lago Hylia.

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Wuuuuu otro capítulo, xddd a ver si subo otro :v hoy estoy siendo bastante productiva.

*Time*