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The march to war 2

Desde lo alto de las montañas, en lo limites del territorio de los Gremory; los cinco miembros restantes del equipo Noble, observaban la gran mansión de esta familia de demonios. Luego de reunirse tras dispersarse y perder a los grupos covenant enviados detrás de ellos, captaron la señal del nuevo miembro de su equipo proviniendo de la imponente mansión.

-Ven lo que yo veo -dijo Noble cuatro, Keniichi.

-Una imponente mansión en un mundo alejado del resto de las colonias en una galaxia desconocida, parece ser del siglo XIX -dijo Korra, noble 2.

-Dott, ¿a donde nos trajiste? -pregunto el líder noble a su IA.

-No tengo idea comandante, marque un curso aleatorio como usted me pidió -explicaba la IA -la única información que tengo de este lugar, es que se trata del sector Koprunu, una galaxia muy distante a las aledañas donde se establecieron colonias de la UNSC, o insurreccionistas. Este planeta recibió el nombre de Zerus, por alguna razón la unión terrestre decidió abstenerse de hacer colonias en este sector por algún motivo, es todo lo que puedo decirle comandante.

-Veo ya sabemos, debemos llevar el mapa con el jefe maestro -dijo Kenichi, colocando su escopeta detrás de su armadura.

-¿Y abandonar a Issei? -cuestiono Akatsuki Ousawa, noble cinco -es miembro de nuestro equipo.

-Salvar lo que queda de la humanidad es mas importante que salvar a uno de nosotros, debo recordarte para nos convirtieron en spartans -iniciaba la pelea con el mas grande su equipo.

-De que sirve que la salvemos si no podemos salvarnos entre nosotros -argumento contra su compañero.

-¡Basta los dos! -grito Takashi, Noble uno -no tenemos forma de llegar con el jefe ni con la UNSC, el covenant nos siguió hasta aquí y no se detendrán hasta encontrar esto -saco un pequeño chip donde almacenaba a Dott, a la vez; ella almacenaba el mapa robado -la única forma de regresar es robando una nave covenant capaz de dar saltos desliespaciales.

-¿Que te hace pensar que hay una nave covenant con esa cualidad cerca? -pregunto Tatsuya, noble tres.

-¿Vieron la cantidad de phamtons y spirits que bajaron para hacer el barrido? -Issei no fue el único al que lo siguió el covenant -significa que hay una nave covenant con esa cualidad, orbitando este mundo de seguro.

-Como planeas que lleguemos a esa nave sin un carro que nos lleve -protesto Korra.

-Rescatando a Issei -dijo Takashi -activo la señal March to war, una señal abierta, capaz de ser sintonizada por el covenant. Lograste triangular su posición cuando la detectamos -miro a Korra -significa que esa nave también debió hacerlo.

Sin perder mas tiempo, comenzaron a movilizarse en descenso de la montaña hacia el territorio Gremory. Pensando en aquella nave covenant en orbita de este planeta asignado como Zerus. El comando de la nave se organizaba y discutía sobre el siguiente paso que darían contra los spartans y recuperar el archivo plagiado.

-No deberíamos llamar al resto de la flota del inquisidor -pregunto el alférez de la nave a su capitán.

-Y hacerle entender que no pudimos solos contra unos cuantos demons -respondió sarcástico el elite.

-Lograron eliminar a mas del sesenta por ciento de las tropas que enviamos a la superficie planeta para atraparlos cuando se separaron -replegó el segundo al mando.

-Lo que les enviamos no es nada comparado con lo que les enviaremos en este momento -dijo el elite de mayor rango en la nave. Tenia un nuevo plan que llevar, uno que según sus expectativas, iba a traerle la gloria delante del didacta, el líder del covenant -lograron triangular el origen de esa señal -hablaba de la canción que sonaba en señales abiertas en todas las frecuencias.

-Listo -respondió uno de sus oficiales.

-Bien, que nuevas tropas se alisten para salir, preparen la nave para descenso orbital, iremos en persona a por esos demons -indico.

Escalofriante y deprimente las palabras que salieron del spartan. Exactamente como el lo dijo, era algo inimaginable lo que conto, e imaginarlo, era mucho mas imposible. Luego del interrogatorio fue arrojado a una celda dentro de los territorios de la casa Gremory. Sin embargo no era vigilado por un simple grupo de soldados como al principio. Conociendo su fuerza, los dos siervos de Rias fueron puestos como guardia adicional contra el humano. Había amanecido un nuevo día

-Supongo que no lo dejaras ir -dijo Zecticous a su hijo acompañándolo por los pasillos de la casa luego de escuchar que ordenara que lo arrojaran a una celda en el calabozo de su territorio. Eran escoltados por varios soldados y varios de sus siervos.

-No nos arriesgaremos a que mas de esas cosas vengan -exclamo el Mahou Lucifer.

-Conservarlo dará el mismo resultado -le respondió.

-Quiero saber unas cosas antes de liberarlo. Como saber donde estuvo la humanidad todo este tiempo, y que eran esas cosas que trajo -la daba curiosidad, a la vez que preocupación por su gente.

-¡Oni-sama! -Rias llego corriendo detrás de ellos, hasta alcanzarlos.

-Rias ¿que pasa? -pregunto Sirzechs.

Recupero el aliento y pensó bien sus palabras.

-Que es lo que vas ha hacer con él -le cuestiono.

-Porque te preocupa -quería evadir las cuestiones de su hermanita, así que reanudo su caminata.

-Solo quiero saber -los seguía desde atrás -escuchaste lo que dijo, su gente esta en peligro -comento.

-Estaba en el interrogatorio Rias, así que escuche todo lo que tenia que decir -exclamo -lo liberare, luego de unas cuantas preguntas mas.

-No deberíamos ayudarlos -detuvo la marcha de su hermano y su padre una vez más.

-Dime porque deberíamos ayudarlos -exclamo Sirzechs ante el pedido sin razón de su hermana -su especie desapareció durante la gran guerra y ahora reaparecen como si nada en nuestro mundo con esas cosas como amenaza. Además, viste su potencial, pudo derrotar fácil a tus siervos y a los monstruos de anoche.

-Y dejaras pasar esto como si nada -dijo Rias, molestando a su hermano con sus insistencias -aunque lo dejes ir, que nos asegura que se ira con esas cosas detrás de él, o que tan siquiera podrá irse, apareció de esa cosa en llamas desde una abertura en el cielo.

-Rias... -a veces le desesperaba su pequeña hermana hasta el tope, este momento era uno de esos.

-No te interesa saber donde estuvo su especie todo este tiempo o porque han decidido aparecer de este forma... -siguió, pero no pudo continuar, dado la reina de Sirzechs apareció una vez mas, también; interrumpiendo la conversación de los tres Gremory.

-Disculpen que los interrumpa -apareció Grayfia por uno de los corredores de los pasillos -Lucifer-sama, llego un mensaje del consejo, requieren de su presencia.

Escuchando la notificación, solo pudo suspirar y de eso, mirar a su pequeña hermana, por fin pudo detener las interrogantes de Rias. Pero escuchando la repentina solicitud del consejo, dedujo que se le harían cuestiones de lo ocurrido esa noche previa.

-Debo ir -dijo y se aparto de su familia -Rias, mantente alejado de él.

Para ser la Sekiryuutei, no iba a acatar esa orden, aunque viniera de su hermano. Bajo hasta las mazmorras, en búsqueda del soldado que lucho a su lado contra las así llamadas fuerzas del covenant. Como guardias en turno, encontró a dos de sus siervos. Los dos mismos que quisieron enfrentarlo y terminaron contra el concreto de los muros.

-Kiba, Koneko -saludo al acercarse.

-Rias-sama -regreso el rubio caballero ha su señora en nombre de los dos.

Se acerco a la celda sin barrotes, bloqueado por un hechizo que limitaba su estadía en el pequeño cuadro de dos metros por dos y medio. Vio al súper soldado sentado en un rincón con su mano izquierda sobre su pierna, sosteniendo su rostro. Parecía estar tranquilo ahí dentro, pues sus ojos estaban cerrados, pero no estaba durmiendo.

-¿Ha hecho algo desde que lo dejaron aquí? -pregunto.

-Se ha mantenido tranquilo desde que esta adentro -dijo Yuuto -no ha dado problemas como antes.

Pensativa, quería saber las respuestas a las cientos de preguntas que surgieron en ellas desde que dijo él que era un humano. No iba a esperar el permiso de su hermano para conocer de ellos.

-Déjennos a solas -pidió su señora.

-Pero las ordenes de Lucifer-sama... -exclamo.

-Se lo que dijo mi hermano, no te preocupes, yo responderé ante él -dijo Rias con una sonrisa de oreja a oreja.

Obedeciendo la petición de su ama, ambos siervos se retiraron. Solos, ella miro al así spartan. Quien seguía con la misma expresión a pesar de poder escuchar y entender lo previo.

-Hola -saludo Rias, sin embargo Issei no movió ni un dedo ante el saludo -se que no estas durmiendo, así que no finjas -no tuvo mas opción que abrir los ojos. -Hola, me llamo Rias Gremory, así que eres un humano... -se presento como es debido, luego de ser interrogado con magia por obra de su hermano, una vez mas el spartan no iba a responder, simplemente se limito a mirarla en silencio -vamos puedes hablar conmigo...

-Si lo que quieres es saber de mi tendrán que usar esa cosa de antes -dijo Issei, sacudió a Rias por un momento -además, mi nombre ya lo sabes, Issei Hyoudou, spartan beta 312.

-Lo de antes, fue porque atacaste a mis siervos -respondió sin perder la compostura ante el soldado -pero no importa, estoy dispuesta a olvidarlo. Ahora dime, humano...

-¿Porque dices eso como si fuera algo nuevo para ti? -pregunto Issei casi burlándose de ella -¿que? ¿es la primera vez que ves a un humano?

-Si -su respuesta, confundió a Issei, pero gracias a su entrenamiento ella se mantuvo inalterado -tu especie desapareció luego de la gran guerra de las facciones.

-¿Guerra de las facciones? -pregunto Beta 312.

-El mas grande conflicto que ha habido entre los mundos mágicos: ángeles, demonios y ángeles caídos. Luchando por tener la supremacía luego de Dios fuese asesinado por los dos dragones celestiales... -le interrumpió su narrativa.

-¿De que carajos me estas hablando? -intrigo a Rias -¿una guerra entre... ángeles, demonios... dragones?

-¿Se te hace raro?

-Si. De donde yo vengo, todo eso que mencionas no son mas que criaturas de cuentos de fantasía que cuentan los padres a sus hijos para tener esperanzas -dijo Issei.

-Esto te parece de fantasía -dijo presumida y saco a relucir sus alas negras de murciélago.

Casi deja boquiabierto a Issei, aun así, logro que este se levantara y se acercara a ella, asombrado de lo que veía.

-Entonces no estaba alucinando -dijo el spartan -¿Donde nos trajiste Dott? -se pregunto así mismo.

-¿Quien? -pregunto.

-Nada -volvió a mirar a Rias -cuéntame mas de esa guerra de las facciones...

Alegre, ya que cambiaria palabras con el soldado estaba a punto de hablar con él como quería finalmente cuando una figura de autoridad que respetaba mucho apareció mas rápido de lo que esperaba.

-Compañera -hablo Ddraig desde la mano de su portadora, cosa que sorprendió mucho a Issei.

-Rias -hablo esta persona.

-¡Papá! -le tomo por sorpresa.

-Que haces aquí abajo -no espero respuesta de su hija -se dijo que te mantuvieras alejada de él.

-Solo quería saber...

-Basta -dijo su padre -subamos, tienes visitas -comento.

-Esta bien... -acato la orden, aunque quería oponerse.

Sin siquiera despedirse, tuvo que dejar al spartan atrás, con un montón de preguntas que tenia para él, así como muchas otras preguntas que tenia para él.

-Que fue eso ultimo -que una voz saliera de la mano de la chica fue muy extraño, con lo poco y mucho que ya había visto ahí.

No obstante, su hermano ya reunido con los miembros mas importantes de las facciones del consejo de los demonios. Terminaban de discutir un punto muerto que dejaron la ultima reunión, para pasar al verdadero motivo por el cual se habían reunido. Sirzechs sabia que era pronto para tocar el tema.

-Cambiando de tema... -decía uno de los demonios -tal vez no se hayan enterado, pero ayer se registro una anomalía en nuestro mundo.

Tocando este tema desconocido para la gran mayoría.

-Hablas de la extraña maquina que apareció en el cielo ayer por la tarde -dijo un miembro del clan Sitri.

-Precisamente -dijo el concejal que toco el tema inicial.

-¿De que están hablando? -así como este, muchos otros miembros del lugar comenzaron a especular sobre este tema, preguntándose que se trataba todo esto, queriendo una explicación, el hombre se los dio.

-Verán miembros del consejo -y mediante un circulo mágico, proyecto ante todos, una grabación que tomo del evento -ayer por la tarde una extraña criatura apareció en el cielo, cubierta de fuego que tan pronto como apareció de este agujero... -la ruptura desliespacial -estallo en miles de pedazos. Aun no parezca nada grave, debemos preguntarnos quien fue el responsable de enviar esta... criatura a nuestro mundo y que pretendía hacer con ello.

-¿Estas diciendo que alguna de las facciones pretendía atacarnos? -comenzaron a especular y a ponerse paranoicos.

-¿Porque nadie reporto esto? -dijo otro concejal.

-Quien fue el clan mas cercano que presencio el evento, porque no lo reporto antes -cuestiono otro.

-No se reporto para evitar esto -hablo Sirzechs, levantándose de su asiento, antes de que se agitaran mas las cosas de lo que ya se estaban agitando -ya he preguntado a las demás facciones al respecto, ninguna se adjudica lo ocurrido, desconocieron el tema cuando se los pregunte.

-¿No será porque quieren ocultar lo que saben? -comenzó a levantar la conspiración uno -seguramente es obra de los ángeles, ellos siempre han estado detrás de nosotros lanzando ataques constantemente desde que se supo que los longinus de los dragones celestiales están en nuestro poder.

La tensión se aviva entre los miembros del consejo mientras tres de los cuatro mahous respiraban profundo en la paciencia de como el mayor de ellos intentaba calmar todas las conspiraciones inventadas en el momento. Volviendo con la menor de los Gremory, fue llevado por su padre hacia la sala donde la persona que menos quería ver, estaba ahí.

-¿Raiser? ¿Qué haces aquí? -pregunto Rias cuando lo vio tomando de un té que trajo Grayfia para él cuando estaba a la espera de la princesa carmesí de la destrucción..

-Que no puedo tu prometido venir a visitarte de vez en cuando -dijo con ese tono engreído que suele tener el heredero del clan Phoenix.

Dejo la taza de te a un lado y se levanto del sillón para caminar hacia la chica y tomara de la cintura como si fuera suya.

-¡¿A y ahora que pretendes?! -detestaba que la tomara así, como si fuera un objeto, mas de lo que ya el consejo la consideraba.

-Solamente quería ver mi reflejo en tus preciosos ojos... -recibió un golpe en el estomago por parte de la chica.

Desde hace varios años, ellos habían sido comprometidos por obra del consejo dado sus cualidades mágicas. Pero la chica había hecho cuanto se podía para esa decisión fuera replanteada y se deshiciera, pero hasta el momento no había funcionado ninguno de sus planes, así que lo único que la mantenía en control era torturar de vez en cuando a Raiser cuando intentaba dominar a Rias.

-Ya enserio -el Phoenix cayó de rodillas por el dolor y la falta de aire que le provoco semejante golpe -¿a que viniste esta vez?

-Me entere de que algo extraño paso ayer aquí en tu territorio -despacio, se levanto y se puso de pie, alejándose dos pasos de la chica -así que vine para preguntar si fue verdad o un simple rumor.

-¿Que fue lo que escuchaste? -pregunto Rias.

-Dicen por ahí que una especie de maquina en llamas apareció del cielo por un portal y que estallo sobre tu territorio -relato lo que le han contado -y que cuando oscureció, se vieron luces como de linterna en el cielo de tu casa -dijo Raiser, sorprendiendo a la chica de que haya obtenido tal calidad de información.

-Aunque podía decirte al respecto, no puedo, no me lo permitirían -dijo frustrada.

-¿Ordenes de tu hermano? -comento -hay quienes dicen que fue obra de la facción del cielo como responsables.

-No fueron los ángeles -exclamo Rias, tenia las ansias de que contarle alguien de Issei -te lo diré, pero no vayas a decirle a nadie -miro serio al Phoenix.

Afuera de la mansión, dos mas de los siervos de Rias estaban sentadas de la fuente en la entrada de la gran casa de sus amos. Asia, tenia a su pequeño dragón y familiar en sus brazos mientras dormía plácidamente. A su lado, su compañera y pieza reina de Rias, Akeno.

-Ara ara~ es tan tierno cuando duerme -dijo por el pequeño dragón.

-Le gusta que lo cargue así -dijo Asia apenada con tal alago que le dieron -a propósito, Akeno-san. ¿Qué paso con el hombre la armadura de ayer?

-Cierto -la pequeña Asia desconocía que fue arrojado a una celda por obra de Lucifer -Lucifer-sama ordeno que fuera encerrado. De hecho, Koneko-chan y Kiba-kun están como guardias de su celda, por eso no están con nosotros.

-Me pregunto como estarán sus heridas... -comento pero quiso pasar desapercibida, pero fue escuchada por Akeno.

-Ara ara Asia, no me digas que te preocupa -se burlo un poco de la pequeña demonio vestida de monja.

-¡Akeno-san no es lo que cree! -dijo ruborizada de que pensaran que se enamoro o algo así del spartan a pesar de ver su rostro cuando le curo antes -es solo que, me sorprendió que se levantara muy pronto, su corazón no dejaba de latir, Rias-onesan dijo que fue atravesado por una espada, me sorprende que no muriese a pesar de perder mucha sangre. Debió de estar dormido por lo menos unos tres días antes de despertar.

A pesar de que su Sacred gear tiene la facultad de sanar heridas de grandes magnitudes, es imposible que el dolor que sintiese los que curaba, se borrara tan pronto.

-Es verdad, a todos nos impresiono que se pudiese levantar tan pronto -comento la vestida de sacerdotisa.

Justo cuando todo parecía estar tranquilo, una gran sombra comenzó a cubrir la tierra donde estaban. Al principio creyeron que se trataba de una gran nube que tapaba los rayos del sol, pero cuando elevaron la vista y de escuchar un ligero zumbido metálico desde arriba; el temor comenzó a hacerse presente. Era la nave de clase destructor de tipo pesado del covenant, la "Gloruis Land"; bajo muy cercano a tierra de este mundo llamado Zerus, su presencia fue mas llamativa que de la fragata en llama que apareció el día anterior. Esta ve, no solamente los Gremory presenciaron la nave, sino gran parte de la población de los demonios. Hombres, mujeres y niños de todas las edades.

-¿Que esta pasando? -se pregunto Rias al percatarse de la extraña sombra que cubría su casa y que a todos sus siervos les llamaba la atención. Saliendo junto a Raiser, vieron la inmensa nave en el aire, manteniéndose inmóvil en el momento.

La presencia de tal entidad, llego hasta los oídos del consejo, pues un soldado irrumpió el lugar para dar a conocer la noticia a los mayores mahous.

-Mis mahous -se postro ante los cuatro mahous antes de darles la noticia.

-De pie -dijo Sirzechs y el soldado acato -¿que es lo que pasa?

-Venga a ver -exclamo nervioso, pues no sabia como describirlo con palabras lo que descendió del cielo esta vez.

Unos cuantos minutos mas tarde, fuera del gran edificio del consejo, los demonios vieron de primera mano a la gran astro nave del covenant estática y a la distancia en el aire. Todos cuestionándose que era y que iba a hacerles.

-¿Que es eso? -pregunto Raiser al ver el destructor.

-Tal vez él sepa... -susurro Rias, pero pronto salió de sus propios pensamientos y miro a sus dos siervos que se levantaron del borde de la fuente al presenciar la maquina color violeta -¡Asia, Akeno!

-¡Rias! -exclamo al voltear a ver a su señora.

Dentro del destructor, el comando del puente de la nave miraba a través de las cámaras apuntando hacia el sitio de donde provino la señal del casco de Issei.

-"¿Es el sitio de donde provino la señal?" -pregunto el shanguelio en su idioma.

-"Confirmado señor, es de este lugar de donde surgió la señal" -dijo uno de sus oficiales.

-"Es un asentamiento humano" -dijo el alférez al ver la transmisión -"creí que ya no quedaban mundos humanos, no dijeron que este lugar estaba deshabitado".

-"Deben ser de los que escaparon de sus mundos cuanto purificamos sus planetas, entonces por eso vinieron a este sector los demons" -dijo el capitán -"pues ya que estamos aquí, hay que purificar este planeta".

Rias había hecho que todos los siervos de su familia, se adentraran a la casa cuando entendió que la nave solo iba a por ellos, todo por haber almacenado al spartan dentro de su casa. Pero cuando solo faltaba ella, gracias al dragón que le yace por dentro...

-¡Compañera por detrás! -grito Ddraig.

Al voltear, solo pudo ver como cinco banshees venían en picada contra ella, soltando disparos de sus cañones de plasma.

-¡Rias! -grito Raiser al ver que era blanco de las pequeñas maquinas de covenant.

Sin embargo no solo la casa Gremory era atacada, las pequeñas comunidades de los siervos de su familia también eran blancos del ataque. Desde el consejo, Sirzechs podía escuchar como atacaban su clan y la preocupación por su familia no pudo ser ocultada.

-¡Lucifer-sama! -el mismo soldado de antes estaba a las ordenes del mahou Lucifer.

-Movilicen las milicias, quien quiera que sean, serán derrotados -dijo el mahou bajando las escaleras manteniendo su profesionalidad al margen de su preocupación personal.

Desde los calabozos de la casa Gremory, el spartan aun bajo la vigilancia de Koneko y Kiba, pudo escuchar el bombardeo de los banshees covenant a través de las paredes. Así como el mismo suelo donde fue arrojado temblaba ligeramente por la misma causa.

-¿Que esta pasando arriba? -pregunto Koneko al sentir y oír lo mismo.

-Están atacando, debieron seguirnos... -hablo el spartan acercándose al limite de su celda, tratando de mirar hacia la salida del corredor.

-¿De que estas hablando? -cuestiono fiero el espadachín de la princesa carmesí.

-Atacan a la superficie con banshees primero para marcar objetivos, en unos cuantos instantes habrán Phantoms y Spirits desplegando tropas muy cerca -dijo Issei -la única forma de evitar que los maten es sacándome de aquí.

-No sabemos que esta pasando, pero no por ello te liberaremos de aquí -exclamo Kiba -Koneko, vigílalo hasta que regrese -dejo a cargo a la peliblanca.

-BOOST -se escucho la voz de Ddraig proporcionando la energía que su compañera necesitaba para disparar su dragon shoot desde el núcleo de su pecho por parte de la armadura de su balance breaker contra las hordas de naves banshees, pasaron de ser cinco a cincuenta en un instante. Derribando cuatro con la ráfaga que apunto hacia el destructor, disparo que fue recibido por el escudo de energía de la nave -parece que esa cosa tiene un escudo propio -dijo el dragón.

-Al igual que estas... cosas -dijo Rias, pronto se dio cuenta que los banshees tenían un escudo encima, aun era mas leve comparado al del crucero, seguía siendo un problema.

Una ráfaga de plasma comenzo a caer sobre ella desde su derecha, un banshee le estaba atacando. Cubriendo su rostro ante la lluvia del enemigo, no vio claramente como Raiser mediante una gran llamarada con la que derribó a la nave caza de atmósfera.

-¡Llamas Phoenix! -escucho la pelirroja el nombre del ataque seguida de una explosión, los disparos intensos del plasma se detuvieron -¡tonta no debes quedarte parada sin más!

-¡Lo tengo controlado imbécil! -devolvió el insulto.

Mirando su hogar. Vio Rias como los siervos habían levantado una barrera mágica alrededor de la casa para protegerse. Mientras los reducidos soldados de su mundo que protegían la casa, disparaban con sus tridentes contra los banshees, y a los phantoms y spirit que estaban descendiendo. Liberando las tropas de tierra para buscar al spartan y el mapa.

-¡Infantería enemiga! -grito un soldado.

-¡Preparados paea el combate! -indico fuerte el sargento que lideraba.

Desde el punto enemigo. Un comandante menor de los elites dirigia al enorme escuadrón de mas de 100 soldados mixtos de su religión en este asalto.

-"Sin piedad con los blasfemos" -dijo a sus capitanes, activando sus dos espadas de energía.

-"¡Matenlos!" -grito uno de sus oficiales al resto de tropas. También ocupaba una espada como arma principal.

La gran ola de enemigos cargo contra los guardias de la casa, infundiendo miedo en sus corazones ante los gritos de los elites.

-¡Son demasiados! -dijo uno de los soldados, podían huir pero salvarse en ese momento significaría morir a manos del mahou Lucifer cuando se enterara de que abandonaron su puesto. Pero no se dieron cuenta que este ataque frontal era una distracción. Aunque una barrera de magia cubría la casa, solo los protegía de los múltiples disparos de plasma, no les iba a función contra una infiltración por parte de un escuadrón zealot que bajaron desde un phantom camuflado.

Poniéndose al frente de ellos, Rias con su balance breaker iba a guiarlos en la pelea.

-¡Mantengan sus posiciones! -dijo la Sekiryuutei -podemos vencerlos.

-¡La Sekiryuutei esta con nosotros, no podemos fallar! -se escucho el grito entre los soldados.

-¡Gran llamarada! -grito Riaser arrojando el disparo de fuego en gran magnitud, estando en el aire con sus alas de Phoenix desplegadas, gritos de dolor y explosiones del metano proveniente de los tanques de gas de los unguy se hicieron presentes como resultado de su ataque -conviértanse en ceniza.

Asombrando a Rias y al Phoenix, los elites gracias a sus escudos salieron ilesos y seguían con la carga, detrás los jackals gracias a sus escudos circulares lograron librarse del fuego. Solo los unguy y los brutes perecieron. Ya que ellos se quedaron atrás, comenzaron a disparar contra los soldados, recibiendo como represalia los disparos de sus tridentes mágicos, dejando sus posiciones para atacar al enemigo. Al aproximarse, los elites también abrieron fuego.

Los elites resultaron ser mas eficientes que los soldados de los demonios, atravesados con las espadas de energía, o por el impacto del plasma de la infantería o las unidades aéreas. Caían rápidamente.

-Carajo -maldijo Rias -Ddraig dame poder.

-BOOST -se escucho la voz del dragón rojo.

Impulsada por los pequeños reactores detrás de su armadura, Rias cargo contra la horda de elites. Directamente contra el líder.

-Ven a mi... ¡ASCALON! -la espada bendecida por Dios, estaba en posesión de la Sekiryuutei.

En lo que esperaba derribarlo de una sola estocada. Gracias a sus dos espadas, detuvo el ataque al formar una X que contraresto el ataque, sorprendiendo a Rias por que también la detuvo a ella.

-Malditos -regreso su espada y con una ataque lateral desvio el ataque del shanguelio, mandándolo a volar con una patada seguida desde el otro lado. Por sus laterales, dos mas de los elites con sables. Uno logro atravesarlo fácil con Ascalon mientras que al otro lo corto en diagonal de abajo hacia arriba -¡se atreven a atacar a mi familia!

Regreso el elite mayor y de nuevo logro detener el ataque de Ascalon.

-"Humana. ¿Eres la nueva arma que han fabricado?" -pregunto en su idioma el shanguelio.

-No entiendo lo que dices -contraataco y rompió la defensa del elite.

Mientras ella enfrentaba a la mayoría de elites. Raiser era atacado por los banshees y por los jackals en tierra. Eran enemigos formidables, mas los jackals gracias a sus escudos de mano.

Dentro de su casa, su madre podía ver como su hija estaba al frente de la defensa de su hogar; la preocupación como su madre, apareció.

-Rias... -dijo Venelana.

-Lord Gremory -Akeno y un grupo de siervos se acercaron al padre de su ama -déjenos ir a apoyar a Rias.

Sin saberlo, cinco zealots camuflados avanzaban lentamente por la sala en búsqueda del mapa, y de los spartans que se los habían robado. Escuchando la conversación, cuatro de ellos comenzaron a rodear a los padres y siervos Gremory, esperando el momento adecuado para dispararles a quemarropa. De no ser por Asia, todo el esfuerzo de Rias por protegerlos habría sido en vano.

-¡Venelana-sama! -grito Asia al ver la sombra translucida acercándose a la matriarca Gremory.

Cuando ella miro a la pequeña alfil, su esposo logro distinguir a la figura, levantando su arma contra su esposa.

-¡Cuidado! -con su mano abierta, un circulo mágico apareció y con su poder, arrojo al elite contra la pared.

-"¡Elimínenlos!" -los cuatro, se desicieron de sus camuflajes.

Algunos lograron ponerse a cubierto escudos gracias a círculos mágicos que invocaron, mas otros los ocuparon para contratacar a los elites, unos cuantos no tuvieron la misma suerte, fueron victimas del plasma de sus rifles, o apuñalados por sus espadas de energía.

-Akeno-san... -la pequeña Asia estaba detrás de la reina.

-¡No te levantes! -grito repeliendo los disparos.

Kiba iba a mitad de pasillo cuando noto la extraña figura translucida del quinto Zealot.

-¿Quien eres? -pregunto Yuuto desenfundando su arma.

Sin hablar, libero una espada de energía sin quitarse ese camuflaje. Recordando que subestimo al spartan cuando lo ataco anteriormente, invoco una segunda espada. Deduciendo la forma de su enemigo, el choque de sus espadas comenzó a sonar al punto de donde salió el caballero Gremory. Koneko, manteniendo su posición lograba escuchar el plasma gracias a sus características como nekomata, combinadas con el choque de las espadas, no pudo evitar ponerse alerta. Issei, también pudo escuchar y deducir pronto la situación.

-Zealot... -susurro -escucha -hablo a Koneko -sácame de aquí.

-No -respondió como solo ella sabe hacer.

-Ellos vienen por mi -de alguna forma sabia que venían a por el gracias a la señal March to war -mataran a todos en este lugar hasta encontrarme, tal vez hasta todo el planeta -dijo Issei -la única forma de evitarlo es sacándome.

Dudando, la blanca nekomata podía oír como los disparos y choques de espadas, venían hacia ellos, cada vez, mas y mas rápido.

-¡Vamos tienes que sacarme! -insistía y ella se oponía, pero la duda la consumía -¡Hazlo o todos moriremos! ¡¿Que esperas?!

Los zealot venían hacia ellos, por lo que oía, sus conocidos no eran rivales para el enemigo, ¿ella lo sería? O solo Issei podría vencerlos...




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