El día de la boda llegó. Todos los trabajadores del palacio iban y venían terminado de organizar los últimos detalles mientras que los novios permanecían separados puesto que se estaban preparando. La gente del pueblo no habían sido invitados pero si verían a la pareja cuando estos salieran afuera para saludar aunque solo fueran unos minutos.

Era un día hermoso, todos deslumbraban felicidad puesto que habían algunos extranjeros dando vuelta por el pueblo debido a que eran invitados de la boda pero la gente no eran los únicos felices por tal acontecimiento. En una de las habitaciones, se encontraba la princesa Adin junto a la reina y todas las sirvientes, se estaban encargando de preparar a la novia. Por otro lado, el rey invitaba a todos los nobles vecinos a su castillo y les daba la bienvenida. Sin embargo, había un joven quien no se encontraba tan emocionado por la unión como en un principio. 

—Estoy algo nervioso —comentó Yoongi a Namjoon mientras permanecía al lado de su padre— Seokjin y Adin han estado esperando este día desde hace mucho, pero hay un problema que me ha puesto inquieto.

—¿Qué ocurre? —Namjoon observó como Yoongi miró a su padre hablar con otros guardias y sigilosamente, se alejaron un poco de la muchedumbre—

—Anoche fui a ver como se encontraba Seokjin y noté que su emoción no era la misma de hace un año, incluso presiento que está arrepentido.

—Lo dudo, ambos sabemos cuánto ama a la princesa Adin, ¿Por qué ahora dudaría?

—Eso es lo que me preocupa, diría que se encuentra confundido por sus gestos cuando está con Adin y con... —Yoongi se calló de inmediato.

—¿Con quién? Dime —Namjoon esperaba oír cierto nombre salir de los labios de Yoongi.

—Eso ahora no importa —Yoongi suspiró— yo hablé con él anoche, pero no fue capaz de decirme que le ocurría.

—Quizás solo está nervioso, yo también lo estaría.

—Tal vez si alguien le dice lo que él quiere escuchar, cambie de opinión —Yoongi miró fijamente a Namjoon pero este desvió la mirada— debo irme o mi padre se enojara conmigo, nos vemos adentro —Yoongi se fue a su puesto dejando a Namjoon pensativo.

—No puedo creer que estés a punto de contraer matrimonio, ¿Sabes lo que eso significa? Muy pronto deberás asumir tu puesto en el trono —el rey sonrió— deberás convertirte en rey de Abyss.

—Estoy listo para eso, padre.

—Lo sé, tu y Adin son capaces de llevar el reino adelante —el rey le dio dos palmadas a Seokjin en su hombro y prosiguió a salir de la habitación no sin antes soltar una frase— Te quiero en la ceremonia en 3 minutos.

Seokjin suspiro cuando escuchó la puerta de su cuarto cerrarse. El joven príncipe se pregunta porque empezaba a dudar de su decisión, ¿La razón? no la sabía y en su interior, tampoco quería saberlo. Luego de cerrar sus ojos y respirar profundo unas tres veces, decidió salir e ir hacia su boda. Seokjin podía sentir los nervios floreciendo de a poco y al ver a muchas personas en el salón, temía que su voz temblara al momento de hablar. Creía que podía manejarlo si solo se concentraba en sus padres, quienes estaban parados frente a quien iba a unir en matrimonio a la princesa y a él, sin embargo, su poca tranquilidad desaparece cuando cruza miradas con Namjoon. Seokjin solo pensaba en lo elegante que se veía en la vestimenta que él pidió hacer y en la cercanía que compartieron dos noches antes. El príncipe quería seguir observando al sastre pero su vista se alejó de él cuando sintió una delicada mano tomar la suya. 

Kim Adin estaba a su lado, con un hermoso vestido y una sonrisa resplandeciente en su rostro, por un instante el nerviosismo de Seokjin desapareció cuando la vio junto a él.

—¿Estás listo, amor? te ves espléndido —Seokjin sonrió ante el cumplido de su pareja y aquello fue lo que necesitaba para tranquilizarse y recordar el porqué estaba a punto de casarse.

—Tu luces preciosa —ambos jóvenes se sonrieron y empezar a caminar juntos hacia el frente del salón para así comenzar la ceremonia.

Kim Namjoon esperaba que Seokjin lo mirara al pasar por su lado pero eso no ocurrió, lo que le hizo recordar que no debía pensar en tales cosas, ni siquiera sabía porque esperaba aquellas acciones de parte del príncipe.

Una hora pasó y Namjoon juraba que las voces se oían algo aisladas para él mas su concentración volvió en el momento que escuchó aquellas palabras salir de Seokjin.

—Acepto.

—Acepto —repitió Adin.

Gritos retumbaron por todo el lugar afirmando que la ceremonia ya había concluido y que finalmente, Kim Seokjin y Kim Adin estaban casados.

La fiesta dio inicio y todos empezaron a disfrutar de la música y de las comidas que la reina mandó a preparar. Namjoon estaba junto a su abuela y su madre, quien con todo su esfuerzo había decidido asistir a la boda ya que aún se encontraba enferma. La música creaba un ambiente digno del momento, al igual que los vestuarios de todos los nobles. Namjoon estaba feliz porque varios príncipes y princesas se le habían acercado para confirmar si él era el creador de los atuendos de los novios.

Luego de unas horas, Yoongi se acercó a Namjoon —¿Has podido hablar con Jin?

—No, está ocupado saludando a los invitados y bailando con la princesa —Namjoon miró a Yoongi con determinación— Es su responsabilidad, debe hacerlo.

—Tienes razón, aún así... se que está buscando el momento oportuno para acercarse a hablar con nosotros, al fin y al cabo somos los únicos amigos cercanos que tiene.

—Una vez supo decirme que tenía contacto con otros príncipes.

—Por supuesto, pero no como conmigo y bueno... ahora contigo.

—Aunque eso ya se terminó —Namjoon ahora miraba a Seokjin bailar en la pista con Adin mientras reían— Ahora que mi trabajo terminó, no tengo motivos para volver cada mañana al palacio.

Namjoon escuchó como Yoongi empezó a reírse, lo que llamó su atención.

—Creí que eras más inteligente —Yoongi tomó una copa de ponche y luego miró a Seokjin.- Ni creas que Jin te dejará ir así como así, estoy seguro que estará pensando en miles de excusas para que continúes trabajando aquí —dejó la copa en la mesa más cercana y se fue sin decir ni una palabra más.

La fiesta continuaba y Namjoon ya se había despedido de su madre y su abuela, quienes se fueron algo temprano por el cansancio que sentía la madre del sastre, sin embargo, Namjoon decidió quedarse hasta el final de la fiesta. 

Dos toques en su hombre hicieron que se volteara para ver al responsable, encontrándose con el apuesto príncipe.

—Cuando vi a tu madre salir hace unas horas pensé que también te habías retirado sin despedirte —Seokjin traía un vaso de ponche consigo— ¿Gustas? —le ofreció el vaso, al principio, Namjoon dio ademán de negarse pero terminó aceptando al ver los insistentes ojos del príncipe.

—La bebida está deliciosa, muchas gracias —Namjoon dio dos tragos antes de seguir hablando.- pensaba irme pero la fiesta es agradable.

—Me alegro que te hayas quedado, no había tenido la oportunidad de conversar contigo en toda la noche —Seokjin miró sus manos antes de soltar lo que estaba pensando— Te ves muy elegante esta noche, de seguro has conquistado el corazón de varias muchachas, incluso aseguraría que de varias princesas.

—Dudo que alguien de la realeza se fijara en mí, no sería muy oportuno Namjoon percibió que Seokjin iba a contestar aquello cuando se vio interrumpido por otra persona.

—Sería una lástima que los estúpidos nobles no pudieran notar su evidente belleza, joven sastre —Namjoon sintió una mano en su hombro— Yo si me fijaría en usted.

—¿Qué haces aquí Jimin? Adin dijo que no vendrías —Seokjin se encontraba serio— De hecho, es la primera vez que te veo en la noche.

—Fui a dar una vuelta por el pueblo antes de venir, sabes que soy muy curioso pero de todas formas, pude apreciar cada momento de la ceremonia, mi querida hermana lucía realmente hermosa.

—Vaya, ¿Al fin decidiste hacer las paces con Adin? Creí que aún seguías molesto por el trono.

—Esas cosas quedaron en el pasado Hyung, aprendí de mis errores y Adin estuvo conversando conmigo hace varias semanas.

—Estoy feliz de que puedan tener un buen trato entre ustedes —Seokjin miró hacia la princesa que se encontraba algo lejos de ellos— Podrías pasar un agradable tiempo con ella.

—Lo haré, me quedaré por un tiempo ¿No te molesta, verdad Hyung?

—Claro que no, a pesar de tus problemas con Adin, nosotros nos llevamos muy bien y siempre fue así —Seokjin puso su mano en el hombro del joven.

—Me pone feliz saber que aún recuerdas nuestros momentos compartidos y que Adin no haya interferido en nuestra amistad —Jimin sonrió algo tímido— Debo irme a conversar unas cosas con mi padre pero... —ahora su vista se fijó en Namjoon— ten en cuenta lo que te dije, me gustaría poder conocerte un poco más en estos días que me quedaré por aquí —Jimin sonrió y se fue.

—¿Es el hermano de la princesa?

—Es una larga historia, prometo contarte algún día —Seokjin pasó su mano por su nuca un tanto nervioso— Espero que no hayas creído en las palabras de Jimin, es decir, debió haber estado jugando.

—Entiendo, si las mujeres del pueblo no se fijan en mí, no voy a esperar que lo haga un príncipe... ¿O sí?

Namjoon notó como Seokjin miraba a la gente evitando cualquier contacto directo con la mirada del sastre.

—Quién sabe —respondió sin mirarlo.

—¿Y usted sabe? —ahora los ojos de Seokjin sí se concentraron en los de Namjoon.

—Y-yo em... —Seokjin sonrió nervioso— estoy seguro que encontrará a alguien muy pronto.

—Podría ser Jimin —Namjoon rió pero se detuvo al ver la cara seria de Seokjin.

—No, él no —Seokjin miró al suelo por unos segundos— ¿Acaso te gustan los hombres?

Hubo un silencio de tres segundos sumamente incómodos para Namjoon pero él pudo notar como Adin se acercaba a ellos así que aprovecho para dar por finalizada la conversación con una última frase.

—Claro que no, nunca he sentido nada por un chico —Namjoon se dio la vuelta y se fue aunque antes de retirarse pudo observar como Seokjin tragó fuertemente y su labio inferior tembló por un segundo.

Namjoon sentía que ya era hora de abandonar el palacio y... a Seokjin.