Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

46: El pueblo

Namjoon, junto a Hoseok, caminaba por el pueblo con una canasta llena de postres. Su sonrisa era falsa pero hacía su mayor esfuerzo para no llorar de la frustración. Ver a Seokjin irse con ese hombre para hablar a solas le produjo miedo y enojo por no saber que podía pasarle al rey porque a pesar de no discutir sobre las evidentes heridas en la espalda de Seokjin, respetando su espacio, Namjoon comprendió el trasfondo de aquello y pensar en eso le revolvía el estómago. Sin embargo, Seokjin regresó a la habitación tranquilo, le contó que el desconocido era el guardia que Jungkook había dejado a cargo. De hecho, Namjoon se lo imagino pero sin dudas no esperaba estar "de vacaciones" por esas semanas porque ese desgraciado no quería verlo. Al principio se negó pero Seokjin le dijo que era una buena oportunidad para comenzar a reunir a los ciudadanos y convencerlos de la rebelión. Ahí se encontraba, invitando a los pueblerinos a degustar de un postre y una charla reveladora. No dijo todo, solo aclaro que algo malo estaba ocurriendo en el reino y que Kim Seokjin necesitaba ayuda. 

No se sorprendió cuando la gente se reía, incapaces de creerle pero al menos eran amables y escuchaban toda la historia. Hoseok también hacía lo que podía pero no recibía los mejores resultados. 

No perdieron las esperanzas porque decir parte de la verdad era solo el primer paso, estaban seguros que sería más creíble cuando el mismísimo rey saliera a contar su versión. 

—Hijo…¿Cómo puede Abyss estar en peligro? Eres extranjero ¿verdad? Nuestro reino goza de riquezas y el rey Kim está en la categoría de los más poderosos— La anciana seguía amasando mientras Namjoon intentaba explicarle. 

—Señora, entienda. Las cosas no son como usted cree. 

Hoseok llegó y sacó al profesor de ahí antes de verlo explotar de la rabia, su paciencia parecía haberse perdido. 

—Déjala, cuando venga Jin lo volveremos a intentar. 

—¿Por qué son tan ciegos? 

—Namu, no es fácil. Ellos viven en una fantasía, lo que pasa dentro del palacio queda ahí. Nosotros tampoco sabíamos lo que ocurría.

Namjoon lo miró con una expresión aterradora para Hoseok, quien no lo había visto así antes. —No me lo recuerdes, suficiente tengo vivir con esa culpa.

—Lo siento.

—Como sea, volvamos a casa— Ambos hombres, agotados y decepcionados, entraron a la casa en busca de comida. Hana alimentaba a Sunny y Yoongi escribía en una carta. 

—¿Yoongi? ¿Qué haces aquí?— Namjoon quiso acercarse a leer la carta pero el mayor puso su mano cubriendo el papel. 

—Es...para J-Jimin. 

—¿Son pareja?— Hoseok intentaba no reírse pero Hana lo notó y le dio un golpe en la nuca. 

—Estoy aquí porque debo reclutar nuevos sirvientes para palacio por pedido del idiota que Jeon dejó a cargo, aunque claramente no estoy aquí por eso. 

—¿Y Jinnie? 

—Está buscando la forma de salir pero desde mi punto de vista, no podrá. Ese imbécil se cree el líder de todo y no es más que un simple subordinado. No va a dejarlo solo. 

—Quiero volver a palacio, debo estar con Jinnie. 

—Nam, ya lo hablamos. Tenemos solo dos semanas para convencer al pueblo y entrenarlos, Jin podrá cuidarse solo— Hoseok peinaba a su hija con evidente dificultad.

—Hablaré con ese hombre para convencerlo de una salida al pueblo, le diré que será mejor si Jin es quien busca a los empleados; hay más confianza con los ciudadanos si el mismo rey busca a sus trabajadores personales.

Namjoon tomó la mano de Yoongi y este se desconcertó.
—Saca a Jin de ahí, por favor. 

Yoongi asintió y salió de la casa. 

—¡Rey Kim! ¡Gracias por las grandes exportaciones! 

Seokjin saludaba al pueblo con una sonrisa pero su piel temblaba; consiguió salir aunque tres guardias iban a su lado, sin perderle pisada. Buscó con la mirada a Namjoon o Hoseok pero no visualizó a ninguno. Su rostro se relajó cuando vio a Yoongi acercarse. 

—Esta gente aún cree que soy el guardia personal de Kim, voy a estar con él en cada casa ¿Entendieron?— Yoongi pareció cambiar mucho tras el ataque pero definitivamente su mirada intimidante permaneció intacta. Los guardias asintieron pese a la preocupación. 

Seokjin y Yoongi ingresaron a la primera casa, la del pastelero, y cerraron la puerta. Dos de los hombres rodearon la casa para prevenir cualquier escape y el restante se asomó a la ventana cercana a la cocina para oír la conversación; pero fue interceptado por un desconocido, que aprisionó su boca para impedir cualquier sonido delator y con fuerza, golpeó su cabeza contra el piso. El hombre, aturdido, miró a su agresor pero no lo reconoció. 

—Tu trabajo termina aquí.— Namjoon ató sus manos y junto a una tela que tapaba los labios ajenos, lo dejó en un rincón en espera de la señal de Hoseok. Este llegó arrastrando al otro hombre con evidente dificultad. 

—Solo queda el que está al frente de la casa. 

—Cuando Jinnie nos de la señal. 

Hoseok asintió. Pasaron unos minutos hasta que Yoongi abrió la puerta trasera. —Estamos listos— Namjoon y Hoseok entraron con los dos guardias a la casa y una mujer anciana los acompañó hasta un cuarto pequeño repleto de productos destinados a la pastelería. Los dejaron ahí y fue Seokjin quien abrió la puerta de adelante para invitar al otro guardia a pasar, este último no pudo ocultar su confusión pero aceptó, de todas formas le convenía, así podía escuchar sin problemas lo que el rey dijera. Un hombre anciano le sonrió al guardia y lo llevó hacia la cocina, aparentemente para ofrecerle algo de beber; pero Namjoon y Hoseok estaban esperándolo para atacar y dejarlo encerrado junto a sus dos compañeros en aquel diminuto cuarto. 

—Me sentí como un hombre joven, tanta adrenalina corre por mis venas— Reía el anciano mientras abrazaba a su mujer. 

—Muchas gracias por escucharme— Seokjin hizo el ademán de arrodillarse ante la pareja pero estos se negaron de inmediato y lo ayudaron a enderezarse. 

—No tiene porque hacer esa acción su majestad, nos emociona demasiado que haya venido a nosotros para pedir ayuda, es todo un honor. 

Seokjin sonrió intentando no llorar. Cuando pensaron el plan, Kim supo que la primera persona a la cual hablaría sería el pastelero, quien siempre había hecho puras delicias para sus cumpleaños y era un fiel amigo de su padre, sin dudas le creería. 

—Nos gustaría escuchar toda la historia su majestad —La mujer sonrió mientras señalaba los papeles que Yoongi les fue mostrando con pequeñas frases como “Abyss está en peligro” “Ayúdenos” “Debemos encerrar a los guardias, ellos son los enemigos”, mientras Yoongi mostraba esto a los ancianos, Seokjin hablaba cualquier cosa para despistar al guardia que intentaba escuchar la conversación; por suerte, la pareja entendió el mensaje y les siguió la corriente. 

Seokjin asintió y los cuatro jóvenes se sentaron para que el rey pudiera contar todo lo sucedido. Durante el relato, Namjoon no quitó su mano del rey, algo que captó la atención de la mujer pero lo disimuló. Yoongi no hacía contacto visual con los dueños de la casa, solo miraba al suelo y Hoseok degustaba una rebaja de pastel de chocolate, sin prestarle mucha atención a la conversación. 

Finalmente, Seokjin terminó de hablar y el pastelero suspiró con evidente dolor. —Jamás imaginé que mi reino pasaría por algo así, los extranjeros suelen comentar sobre un cierto grupo que se encarga de atacar a los reinos pero suponía que mentían. 

—Mi padre nunca quiso contarles sobre ese tema porque no quería alarmar, tampoco sabría que su inútil hijo dejaría a Abyss desprotegido. 

—¿El señor Kim no está enterado de esto?

—No, mis padres están viviendo cerca del reino de Uhgood pero tengo entendido que han estado recorriendo otros reinos. 

—Rey Seokjin, haremos lo que sea para ayudar —La mujer sonrió.— nosotros nos encargaremos de avisar a varias personas del pueblo.

—Perfecto, esta mañana quise hablar con algunos de ellos pero no me creyeron.
—Namjoon esperaba que la pareja pudiera convencer a más.

—No se preocupes, yo me haré cargo. —El hombre dio unos golpecitos en el hombro a Kim. —¿Qué vamos a hacer con esos guardias? 

—Por ahora déjenlos ahí. Vendré esta noche a buscarlos. Yoongi tomó la iniciativa para salir del lugar y seguir en otras casas. Namjoon y Hoseok corrieron a donde estaban los guardias para tomar “prestado” parte del uniforme y así colocarlos por encima de la ropa para pasar como guardias del grupo. 

Los cuatro salieron rumbo a la casa del panadero y así siguieron por el resto de la tarde. Algunos les creían y otros no, pero el impacto definitivamente cambió con la presencia del rey Seokjin. 

Una semana después.

Restregó sus ojos y un bostezo salió sin pensarlo. Taehyung ni siquiera había dormido lo necesario porque fue despertado cuando aún era de noche por el profesor Kim. Al principio se asustó al verlo pero todo rasgo de miedo desapareció cuando este le sonrió y le susurró palabras cálidas "hay que irnos, tu papá está afuera". Taehyung dudó pero algo en su interior le decía que nada malo ocurriría. Mientras se cambiaba, observó a Namjoon guardando en un bolso algo de ropa y unos pocos juguetes. 

—¿A dónde iremos? ¿Y mi papá?

—Jinnie está afuera, junto a Yoongi. Nos esperan cerca de mi habitación. 

—¿Por qué viniste tú a buscarme?

—Porque soy el único que puede sacarte de aquí— Namjoon tomó la mano del niño y juntos salieron del cuarto. —Escúchame, esto es como un juego, debes seguirme sin hacer ruido y si ves a algún guardia, dímelo de manera silenciosa. Tenemos que salir sin que nadie nos vea.

—¿Por qué? 

Namjoon suspiró nervioso.
—porque no te dejarán salir de noche y tu papá sí quiere ¿A quién le haces caso tú?

—A mi papi. 

—Entonces vamos— Taehyung tomó la manga de la camisa de Namjoon y le dio un tirón.
—¿Qué ocurre?

—No se aleje mucho, por favor. 

—Claro que no Tae. 

El camino fue complicado pero no imposible, Yoongi se había encargado con anterioridad de desplazar algunos guardias a otras posiciones con el “mandado” del hombre a cargo. Esto no era cierto pero con los años, Yoongi entendió que los miles de guardias distribuidos en palacio eran simples marionetas bastante fáciles de convencer, incluso llegó a pensar si eran estúpidos o solo vivían aterrados de cometer algún error que les causara la muerte, así que solo hacían todo los que alguien les dijera, por supuesto, si la persona era lo suficiente inteligente como para manipularlos y Yoongi era todo un experto en eso. 

Namjoon cruzó el último pasillo cuando un guardia frenó justo enfrente de la ventana que usarían para salir. Taehyung temblaba a su lado pero permaneció en silencio, intentando no defraudar al mayor que había confiado plenamente en él. Otro oficial llamó a aquel hombre para vigilar otra área, Namjoon no lo pensó demasiado y salió corriendo sin soltar a Taehyung hacía la ventana. Ayudó al niño a salir y luego siguió él. Estaban afuera. 

Llegar hacia donde se encontraba Seokjin y Yoongi no les resultó tan complicado como imaginaron, sorprendentemente la suerte estaba de su lado. 

—Papi— Taehyung susurró mientras corría para luego saltar a los brazos del rey, este último lo abrazó con fuerza. 

—Mi niño ¿Nada sucedió durante el camino? 

—No, Namu me cuidó muy bien.

—Lo sabía— Seokjin le sonrió a Namjoon para darle las gracias. —Bebé, necesito encargarte una tarea importantísima. 

Taehyung abrió la boca de la emoción. Seokjin no pudo evitar reír de la ternura que su hijo demostraba. 

—¿Ves ese hueco?— señala el lugar por donde él había usado para escapar con la intención de buscar a Namjoon hace unos años. Fue tapado pero Yoongi se encargó de romperlo de nuevo días atrás. —del otro lado hay un amigo de papá, se llama Hoseok y está con su esposa e hija. Ellos necesitan salir de Abyss por unos días para...emm...buscar un medicamento ¿Podrías acompañarlos?

—P-pero no puedo ir solo, ¿No puedes venir conmigo?

Seokjin dejó un beso en la frente del niño. —No TaeTae, tengo unas cosas que hacer.

—¿Y mamá? Ella se enojará conmigo por salir de casa.

—Tu mamá ya lo sabe y ella también quiere que vayas. Piensa esto, hay una bebé del otro lado que tiene miedo de estar en la oscuridad ¿Por qué no la proteges? Podrías jugar con ella también, se llama Sunny. 

—Hana es una mujer muy buena, cuidará bien de ti— Namjoon comentó para animar a Taehyung. 

El niño miró nuevamente a Seokjin y este sonrió. —Por favor, confía en papá. Y-yo estaré esperándote, lo prometo. 

—Esta bien, te quiero mucho. 

—Yo te amo muchísimo mi príncipe— Seokjin volvió a abrazar a su hijo para luego ayudarlo a salir por el pequeño agujero. 

Cuando el silencio invadió el ambiente, Seokjin sintió las dulces palabras de Namjoon a su lado. —Estará bien.

—Sí, terminemos con esto— Lo besó con delicadeza, saboreando cada rincón de la boca ajena. 

—Recupera tu corona.

Hi people !
¿Cómo están para ver el muster? 😍

Espero que les guste el capítulo.
Ya falta muy poco para que esta historia termine.

<❤>

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro