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—Jinnie... debes decirme que mierda está ocurriendo aquí.

Seokjin alzó su rostro, sus ojos llorosos, la punta de su nariz estaba roja y sus labios temblaban. Miles de cosas pasaron por su cabeza pero solo dos palabras, totalmente contrarias a lo que deseaba decir, salieron a la luz
—Estamos secuestrados. 

Namjoon no emitió palabra. Su boca estaba abierta del asombro pero su mano no dejaba de acariciar la espalda de Seokjin, de manera involuntaria. Cuando el rey quiso hablar, tres guardias lo llamaron, solicitando su presencia en el salón principal. 

Ambos se levantaron pero uno de los oficiales habló con tono alto —Solo, debes venir solo. 

Seokjin asintió —No te preocupes Nam, iré a tu cuarto en un rato. Espérame allí. 

—Jin, si algo malo ocurre ahí dentro, grita y prometo venir a buscarte. 

El rey acarició la mejilla del otro Kim y sonrió para calmarlo. Seokjin sabía que no había nada que ya no pudiera aguantar de aquel grupo. Las torturas habían sido parte de su vida durante esos cinco largos años. 

Cuando llegó, Jungkook lo esperaba sentado en el trono con Baek a su lado y Adin en su propio trono. No había nadie más en el salón que ellos. 

—Tengo que hacer un viaje y Adin se ofreció para acompañarme. Baek también irá conmigo porque lo necesito para arreglar unas cosas pero luego volverá. Esto no quiere decir que estarás solo, al contrario, alguien más quedará al mando. Por este tiempo, no quiero que salgas al pueblo ¿entendiste?

—E-entiendo.

—Eso es todo, salimos a la noche. 

Baek siguió a Jungkook a la salida mientras Adin no despegaba su vista del suelo. Seokjin se acercó a ella —¿Te está obligando a ir o decidiste ir por tu cuenta? 

—Yo quise ir.—Adin sonrió y con una mirada llena de determinación, miró a su esposo— Encuentra una manera de sacar a Jungkook del poder, por favor.

—Dijo que alguien quedaría a cargo. 

—Lo sé pero debes intentarlo. Namjoon está aquí, tiene que saber la verdad y juntos... encuentren la manera de liberar Abyss.

—Adin…

—Retendré a Jungkook el mayor tiempo que pueda en aquel viaje pero no te demores. 

Ambos se miraron, con cariño y en busca de una cálida esperanza. 

—Pude verlo, el final de esta tortura está cerca. 

—¿Después de tantos años tu don pudo mostrarte algo?

Adin asintió sonriendo —Llegó el momento. 

Namjoon abrió la puerta de su cuarto cuando escuchó los golpes en señal de llamado. La sonrisa de Seokjin le provocó un cariño indescriptible en su corazón. El rey venía con Taehyung, el pequeño príncipe frotaba sus ojos con cansancio, puesto que ya era de noche. 

—Quiero dormir papi. 

—Puedes acostarte en mi cama. Namjoon le ofreció amablemente y Taehyung aceptó de inmediato. 

El pequeño príncipe le pidió un beso de buenas noches a su padre y este no lo dudo. Tras taparlo con las colchas, apagó la luz y luego se acercó a Namjoon —¿Podemos hablar? —susurró para no molestar a Taehyung. 

Namjoon acomodó dos sillas cerca de la ventana y se sentó en una. Para su sorpresa, Seokjin se sentó en su regazo. Tras estar varios minutos en silencio, solo mirándose y sonriendo tímidos, el rey habló —Cuando volvimos de aquel viaje ellos ya habían tomado el reino. Descubrimos que no había guardias merodeando los muros y cuando entramos a palacio sigilosamente, encontramos a muchos hombres junto a Adin y con un Jimin herido, lo habían golpeado minutos después que él entró corriendo a palacio. 

—Son el grupo que...

—Sí, son ellos. 

—Baek se presentó y nos dio todas las órdenes que debíamos acatar. Tenía tanto miedo y me hubiera gustado tener el valor para poner resistencia. 

—¿Ellos te obligaron a separarte de mí?

Seokjin asintió y luego se escondió en su cuello para llorar —No solo de tí sino también de Yoongi y Jimin, los hemos visto pocas veces durante estos cinco años. Ellos están en palacio pero en otra habitación —Seokjin dejo un beso en el cuello ajeno para luego murmurar sobre la piel. Le contó sobre todos los avances en Abyss, sobre los tratados que ahora mantenían con reinos que él no conocía. Habló del extraño comportamiento de Yoongi, de cómo Jimin peleaba con Adin las pocas veces que podían verse. Le contó de Jungkook. 

Namjoon frunció el ceño.
—Cuando Tae lo nombró creí que se trataba de una simple coincidencia, sobre todo al decir que era un primo lejano tuyo. Hablé con Jungkook días después de que llegué a Serendipity. Compró unos libros sobre la historia de Abyss y me dijo que vendría aquí unos días y quería investigar sobre el reino. Sabía que estaba mintiendo porque ya lo había visto en tu casamiento, de hecho, hablábamos de él esa noche. Me contaste que Jungkook siempre estuvo enamorado de Adin. 

—Jungkook no es mi primo, Adin le dijo eso a Taehyung para que no haga preguntas y sobre lo que dijiste, tal vez Jungkook estaba fingiendo. Es un gran actor, a veces parece amable y en otras es cruel sin dudarlo —Namjoon asintió dudoso. Suponía que para ser líder de un grupo como aquel era porque de inocente no tenía nada a pesar de su edad. 

Seokjin le habló sobre quién era en realidad Baek pero mintió sobre todo el daño que le había hecho durante esos años. Finalmente, decidió hablar de su hijo. 

—Un día, Baek nos dio la orden más difícil de concretar. 

Jung Baek y otro hombre entraron al lugar con una sonrisa siniestra. —Este mes nos ha servido para organizar todo lo que haremos en Abyss y dejame decirte que se volverá un reino poderoso así que te sentirás orgulloso por ese lado, sin embargo, les traemos una tarea que ustedes llevarán a cabo dentro de un tiempo pero se los comunicaré ahora para que vayan procesando la información.

El rey y la reina se miraron confundidos y ansiosos por la respuesta. 

—Deben tener un hijo. El grupo ha decidido que lo mejor para continuar en el poder es enseñarle desde pequeños a los herederos sobre su posición y que deberán obedecernos sin dudar. 

Una vez que Baek terminó de hablar, Seokjin no sabía cómo reaccionar tras escuchar aquello.

—Tuve que hacerlo. 

—Shh...entiendo —Namjoon acariciaba el cabello de Seokjin. 

—Yo no quería. Le dije a Baek y él solo se rió. En ese momento supe que no tenía opción.

—¿Cómo se lo tomó Adin? 

Seokjin bufó —Al principio se negaba totalmente y eso me hacía feliz pero una tarde mantuvo una conversación con Baek, hasta el día de hoy sigo sin saber de qué hablaron. Sin embargo, la posición de Adin cambió de repente y la idea de tener un hijo ya no le parecía descabellada. Intenté hacerla entrar en razón pero ella insistía que era lo mejor sobre todo porque de esa menera podríamos arreglar nuestro matrimonio. Adin aún tenía las esperanzas de encender aquel amor que ya había desaparecido, por lo menos para mí. Le expliqué con paciencia que dicha idea era una estupidez y que yo jamás volvería a amarla como ella deseaba. Se negó e insistió. Mi negativa se mantuvo durante semanas pero Baek debió tomar medidas para obligarme. 

—¿Qué medidas? —Namjoon no quería pensar lo peor. 

—Eso ya no importa porque Baek terminó ganando —los ojos de Seokjin se encontraron con los de Namjoon y un pechero apareció en sus labios. —Fueron muchas veces en las que lo intenté pero siempre terminaba alejandome. No quería, se sentía inapropiado y yo me sentía sucio. No conseguía excitarme ni un poco y tomar aquel cuerpo me hacia sentir mareado y tampoco estaba muy seguro de como hacerlo. 

Namjoon asintió entendiendo el punto. 

—Jamás había tocado a Adin y tú fuiste mi primera vez. Ella era virgen —Seokjin jugaba con sus dedos para calmar su nerviosismo porque contar todo frente a Namjoon le daba vergüenza y miedo por como este pudiera reaccionar— Adin aseguraba no haber quedado embarazada luego de haber tenido sexo como tal. Recuerdo haber llorado de la frustración porque sabía que debía pasar por aquel proceso de nuevo y no me gustaba para nada. Finalmente quedó embarazada después de la segunda vez. 

—No fue tu culpa cariño — Namjoon dejó un corto beso para darle apoyo. 

—Pero las cosas se pusieron peor. Durante el embarazado, me aleje de Adin, no hablaba con ella en todo el día. Me sentía traicionado por ella pero me sentía aun peor conmigo mismo por ser tan inútil. Mi indiferencia le hizo saber a Adin que hablaba en serio cuando le advertí que las cosas no cambiarían entre ella y yo aun si había un hijo entre medio. Eso pareció molestarle, su trato conmigo se oscurecio. Cuando se enojaba, me culpaba del embarazado. 

"—¡Tu tienes la culpa! Debiste ser un hombre y ponerle frente a la situación. Yo solo quería recuperarte y ahora... ¡Ahora cargo con un bebe que ninguno querrá! —La reina se desplomó en los brazos de su esposo, lloró y con unas débiles palabras, condenó al rey en un eterno dolor— Aún no estaba lista, me has arrebatado algo íntimo."

—Lo juró Namjoonie, yo no abuse de ella —Seokjin susurraba para no despertar a Taehyung pero sus sollozos eran ruidosos e inevitables—Cuando Taehyung nació, Adin se mantenía al margen. Lo alimentaba y bañaba, eso era todo. Fui yo quien cuido de él y aunque fue difícil no me arrepiento porque Adin se equivocó. Puede que no haya querido tener un hijo pero si amo a Tae, lo amo con mi alma y es una de las razones por las que aún sigo aqui con vida. 

Namjoon no sabía como se sentía Adin pero sus acciones habían lastimado tanto a Seokjin que le molestaba, le molestaba muchísimo aquella mujer. Apartó a Adin de su mente para concentrarse en Seokjin. Limpió las lágrimas y empezó a repartir muchos besos en el rostro del rey, sacandole algunas risitas tímidas en el proceso. Namjoon no quería que siguiera torturandose por eso, debía mostrarle que él no estaba enojado con él y respetaba sus decisiones porque entendía que a veces las personas actuan de cierta forma porque alguien los influyó, no siempre eramos libres al elegir que hacer y Seokjin había sido, junto a Adin, una victima más. 

—Perdoname, por favor perdona a este inútil rey. 

Namjoon tomó su barbilla para levantar su cabeza y con suavidad lo besó, profundo y lento. Buscó la manera de brindarle cariño, soporte y también una disculpa. Su mano reposaba en la nuca y con la otra acariciaba la zona en donde el corazón late sin cesar. Con un susurro, pronunció las palabras que su interior anhelaba gritar a los cuatro vientos pero que por el momento, quedarían encerradas en esas cuatro paredes —Te amo, te amo tanto que soy capaz de dar la vida para liberarte de este sufrimiento. Haré lo imposible para verte feliz y espero desde lo más profundo, que me perdones por haberme rendido, por haberme ido sin saber por lo que estabas pasando. No eres un inútil, eres maravilloso y me aseguraré de ayudarte a descubrir que tan grandioso rey puedes ser.

Seokjin sentía su corazón latiendo con desesperación y las lágrimas salían una tras otra. Aquellas palabras habían sido melodías para sus oídos. Cada frase produjo una corriente eléctrica en su cuerpo que le brindaba la esperanza para salir adelante —Te amo Kim Namjoon. 

Escribí esto muchas veces y aun sigo inconforme :(

Con esto, doy por terminada la maratón ✨ espero que lo hayan disfrutado.
Las cosas van buscando su fin de a poco ;)

Ahora.. ¿Alguien noto que es la primera vez que Namjoon y Seokjin se dicen 'Te amo'? 👀

<❤>