"El sacrificio de hoy, será tu fuerza mañana."

Un mes más había pasado y Seokjin no podía creer los cambios tan rápidos que Jung Baek pudo hacer en su reino. Para empezar, había mandado a despejar tres grandes perímetros del bosque para crear cosechas con semillas que ellos tenían de otros reinos, por lo que trajo productos que en Abyss eran imposibles de conseguir pero ahora los tenían cultivados ahí y muy pronto podrían ser utilizados para el pueblo y para el comercio, además, un día trajeron crías de animales para agrandar las granjas. Por otro lado, con el dinero que ellos ya poseían, lo invirtieron en un espacio de entrenamiento para reclutar jóvenes del pueblo y así convertirlos en guerreros, aumentando secuaces para ellos. Si esto sigue así, Abyss empezaría a obtener grandes ganancias por todas las inversiones que habían hecho y eso significa más poder e influencia entre los demás reinos. 

Al final del día, Seokjin se preguntaba si esto era muy malo como lo creía hace dos meses cuando todo empezó, ya que su miedo era que el pueblo sufra las consecuencias de los mandados de Baek pero se equivocó, al menos por el momento..la gente solo estaba saliendo beneficiada y por lo que vio de Jung, no parecía ser un hombre que lastimaría al pueblo, sino más bien como alguien que busca poder. Quizás Seokjin ya estaba perdiendo sus esperanzas de ser libre que busca cosas positivas en sus captores en vez de pensar en una solución y Adin no ayudaba mucho, ya que también pareció quedar cegada por los logros de Baek que empezó a decirle a Seokjin que al final no todo era malo. Aún así, el rey no dejaba de pensar en Namjoon. Todas las noches se dormía pensando que se despertaría a mitad de la noche por unos ruidos en su ventana y que al abrirla se encontraría con el sastre esperando por él, pero eso nunca pasó y en su interior dudaba que pasara. Perdido en sus pensamientos, Yoongi entró a su habitación acompañado de uno de los oficiales, al instante, Seokjin notó una sonrisa en el rostro de su amigo que lo desconcertó. 

—Baek quiere hablar contigo sobre unos libros que necesita de tu biblioteca —Yoongi guiño un ojo disimuladamente y el rey entendió de inmediato qué significaba aquello— Vamos, quiere que se los des ahora.

Seokjin asintió y salió de su cuarto acompañado de los otros dos para ir hacía la enorme biblioteca. Al llegar, Jung estaba ahí esperándolo y al verlo, le sonrió —Me alegra verte Kim, como sabes, estamos especializandonos en la historia de tu reino y estoy buscando tres libros en específico pero no los encuentro por ningún lado ¿Por qué?

—Em... Namjoonie solía estudiar aquí así que usaba los libros y muchas veces se los llevaba a su casa, incluso yo le permití quedarse con ellos si quería. Probablemente los libros que buscas los tenga él.

—¿Libros tan importantes? Tienen secretos que solo tu familia y la de Adin deben saber.

—No te incumbe saber porque hice lo que hice.

Jung sonrió y asintió —Bien, quiero esos tres libros de vuelta... Tráelos

Los ojos de Seokjin parecieron llenarse de un brillo esperanzador de poder ver a Namjoon de vuelta, pero su ilusión pareció romperse cuando el hombre río —Espero que no estés pensando que te dejaré ir solo, al contrario, irás acompañado de mis hombres para asegurar que no hables de todo. 

El rey sonrió porque a pesar de que estará vigilado, el hecho de ver a su amado aunque sea unos minutos era más que suficiente. Seokjin asintió y se fue a cambiar.

Kim Namjoon estaba terminando unos arreglos del traje de un vecino cuando escuchó el golpeteo en la puerta. Desanimado, abrió la puerta para encontrarse con el dulce rostro de Seokjin, aunque venía acompañado de otros cuatro hombres con malas caras, situación que hizo ponerlo incómodo. 

Namjoon suspiro y con cortesía, habló —¿Se le ofrece algo mi rey? 

Seokjin sonrió y pensó que iba a llorar, pero se obligó a sí mismo a controlarse —Buenas tardes Namjoonie, ¿Cómo has estado? yo... sé que dije hace un tiempo que podías quedarte con los libros que quieras de mi biblioteca pero resulta que necesito tres en específico por su suma importancia, ¿Podrías prestarmelos por un tiempo? —Seokjin intentaba por todos sus medios no correr hacia los brazos del sastre.

—Son tuyos, no tienes porque pedirlo. Ahora los traigo —Namjoon dejó la puerta abierta y se fue hacia su cuarto. Seokjin sintió la necesidad de entrar pero fue interrumpido por la abuela de Namjoon, quien le negó la entrada con una sonrisa muy falsa —Con todo el respeto del mundo su majestad, le pido que piense detenidamente en si desea algo más que Namjoon tenga de su hogar para que se lo devuelva y así no volver aquí, no quiero que tenga contacto con mi nieto —la mujer hizo una inclinación y volvió a sonreír, llenando de terror a Seokjin. 

Namjoon apareció con los tres libros y se los entregó. El rey quiso rozar sus dedos cuando tomó los libros pero el sastre retiró su mano impidiendo aquel tacto. El joven rey sintió un nudo en su interior y tambaleo un poco al querer impulsar su cuerpo hasta poder abrazar a Namjoon pero se detuvo, ocasionando una tos forzada por uno de los hombres que lo escoltaba, dando a entender que era hora de irse a casa.

—Fue lindo verte Joonie, te extraño y...

Namjoon cerró la puerta en su cara y sus palabras quedaron en el aire, para luego oír como aquellos hombres se reían y se burlaban de él, pero eso a él no le importaba ya que la tristeza de verse rechazado por la persona de la cual está enamorado es torturante y es lo único que ahora resuena en su cabeza. 

Por otro lado, la abuela de Namjoon murmuraba para sí misma incoherencias para los oídos de Namjoon mientras cocinaba una sopa como cena. La mujer suspiró cansada como si hubiera tenido una batalla en su mente todo este tiempo, así que respiró hondo y se sentó al frente de su nieto —No quiero que lo veas nunca más, ni a él ni a nadie que esté involucrado en palacio, ¿Me oíste Nam? Sé que no lo sabes, pero el palacio oculta un secreto y soy consciente de que no es bueno meter a la gente en la misma bolsa pero creeme cuando te digo que no todos en palacio son tan buenos como lo muestran.

—¿De qué hablas? Abuela... ¿tomaste tu medicina hoy? siento que estás empezando a delirar.

La abuela le pegó con un trapo en la cabeza a Namjoon —No me trates de loca muchacho, yo sé lo que digo y creo que ya tienes la edad suficiente para saberlo también.

Namjoon asintió y agarró su cuchara para tomar su sopa como un niño que espera su cuento de dormir. 

—Para entender todo, debo empezar desde el comienzo. Como ya habrás estudiado en historia, hay múltiples reinos que gobiernan distintos sectores de la tierra. Desde los inicios las guerras fueron motivo de conquista y poder, aquellos reinos débiles eran conquistados por otros y desheredados de sus tierras, por eso, era vital que cada uno tuviera aliados y así formar alianzas inquebrantables, la más conocida..el matrimonio arreglado. Sin embargo, yo voy a concentrarme solo en dos reinos, Abyss y Uhgood.

Namjoon se quedó un momento pensando en el nombre del segundo reino ya que juraba haberlo leído en uno de los libros que Seokjin vino a buscar, si tan solo hubiera tenido tiempo de leerlos completos. 

—Ambos reinos estaban muy cerca uno del otro pero en ese entonces, Abyss poseía muchas riquezas mientras que Uhgood carecía de ellas y podía decirse que estaban a punto de perder todo si algún otro reino poderoso decidiera atacarlos. Pero... había algo especial que ellos tenían, un don que había sido adquirido de generación en generación. Toda la familia real contaba con el don, ellos podían ver sucesos del futuro, pero... eran trágicas.

Namjoon elevó una ceja confundido —No entiendo.

La abuela resopló —Si me interrumpes tampoco entenderás, en fin, quizás era por las tierras que poseían o porque simplemente eran muy creyentes en la magia que gran parte del pueblo eran curanderos, brujas o como quieras llamarles. Así es, la mayoría seguía tales prácticas por lo que la familia real no se quedó atrás y sumado con aquel don que ellos ya traían por generaciones, se decidieron por buscar una solución a sus problemas tomando ventaja de eso aunque claro, nadie quería juntarse con ellos debido a que nadie les creían y trataban a Uhgood como locos o farsantes, pero... todo cambió cuando una inocente princesa se enamoró de un apuesto príncipe.

Namjoon iba recordando algunas pinturas del libro que vio, en donde una niña y un niño salían bailando y riendo. Ambos llevaban ropas finas y caras, por lo que Namjoon intuyó que podían ser aquellos niños de los que su abuela hablaba. 

—La princesa era del reino de Uhgood y el príncipe era de Abyss, ellos se conocieron cuando la muchacha estaba visitando el pueblo de Abyss de manera encubierta y le tomó solo segundos para chocar mirada con el joven y por arte de magia, sus encuentros fueron más seguidos y el tiempo los convirtió en amigos hasta que los años cambiaron dichos sentimientos en algo más profundo. Cuando los padres de la niña se enteraron de lo que ocurrió, la convencieron de enamorar al príncipe con magia para evitar que se olvide de ella y así..poder conseguir un matrimonio arreglado y una unión entre dos reinos que llevaría a Uhgood al poder. Pero claro, la niña estaba tan enamorada que no lo permitió así que sus padres utilizaron a alguien más para llevar el plan... a la hermana gemela de la princesa. La manipularon y la obligaron a desposar al príncipe, siempre fingiendo ser su hermana para que el joven no se diera cuenta de la farsa.

Namjoon rascó su cabeza y suspiró. —Sigo sin entender.

La abuela volvió a golpearlo con el trapo —Que te esperes dije —suspiró— Como decía, cuando la princesa supo del plan, intentó advertirle al príncipe pero ya era muy tarde, este había caído en los encantos de la hermana gemela. La joven quedó destrozada y llena de ira, esperó años hasta poder escabullirse en palacio y envenenar a su hermana. Los reyes de Abyss quedaron sorprendidos, incluyendo el príncipe. La joven fue desterrada de ambos reinos y olvidada por su familia, mientras que los reyes de Uhgood continuaban su farsa para mantener a Abyss en la palma de sus manos ¿Sabes que les dijeron a los padres del príncipe unas tres noches antes de aquel suceso? Los reyes de Uhgood confesaron sus dones y sobre una visión que había tenido la hermana gemela "Una muerte que traerá una unión eterna", al principio los reyes de Abyss no les creyeron pero al ver a la joven fallecer ante sus ojos y al bebé que había dado a luz días antes, las dudas quedaron disueltas. Fue entonces, que decidieron juntar por la eternidad a los próximos herederos y herederas en matrimonio para forjar una unión entre Abyss y Uhgood.

Namjoon volvió a interrumpir a su abuela y juraba que la cara de molestia de la mujer era sumamente graciosa —Espera ¿Por qué decidieron tal acuerdo? por lo que veo Uhgood era un reino peligroso y... ¿Qué pasó con la princesa que quedó desterrada? ¿Por qué las visiones eran específicamente trágicas?

—Bueno, el acuerdo lo decidieron porque Abyss era fuerte y le convenía que sus futuros herederos tuvieran a su lado a alguien que supiera sucesos del futuro, aun si eran malos. Era una estrategia, Nam. Ahora, las visiones son así por algún motivo incierto, incluso se cree que hay otros reinos o familias que cuentan con personas con dones acerca del futuro pero desde otra perspectiva, quizás sucesos exitosos o reveladores... no lo sé. En cuanto a la princesa, ella huyó y se infiltró en un pueblo de otro reino cercano para comenzar una nueva vida.

—A pesar de todo la joven si era buena, solo que sufrió al ser separada de su amado.

—Si, mi abuela era muy fuerte y apasionada —La mujer sonrió y a Namjoon pareció darle un tic.

—¿Cómo que tu abuela? Me volví a perder... —Namjoon respiró hondo y siguió preguntando— La princesa... ¿Era tu abuela? Eso quiere decir que...

—¿Qué tenemos sangre real? Sí, sin embargo, hay algo más —La abuela tosió y aclaró su garganta— La reina Adin es descendiente del reino Uhgood.

Si no entienden algo, no se preocupen. Esta parte se irá profundizando un poco más a medida que avance la historia. 💜

Espero que les guste.

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