15: Ladrón
Los meses pasaban y Adin no sabía qué más hacer para captar la atención de su esposo. Las horas que compartian juntos eran muy pocas a comparación de cuando aún Seokjin no conocía a Namjoon, pero todo cambió con la llegada del sastre. Al final del día, Adin terminaba frustrada y con miles de pensamientos en su cabeza que no tenían respuestas, ¿Por qué pasan tanto tiempo juntos? ¿Qué hacen en todas esas horas compartidas? ¿Por qué ya no me ve con los mismos ojos que antes? ¿Acaso ya no siente nada por mi? ¡Imposible!
—Tengo que encargarme de este asunto, sea como sea —Adin no tenía problemas en hablar en voz alta debido a que, como siempre, Seokjin no se encontraba ahí con ella... sino con el sastre en la enorme biblioteca.
Por otro lado, Seokjin deslumbraba felicidad porque faltaban solo tres meses para la coronación. El rey había podido conseguir un poco más de información sobre aquel malicioso grupo y agregando el duro entrenamiento que Seokjin había recibido en esos meses, sentía que el tiempo era adecuado para que su hijo tome el trono, cumpliendo con su año de espera.
El día era lluvioso y el frío se colaba por las enormes ventanas del palacio pero dos jóvenes disfrutaban del calor que la biblioteca brindaba. Namjoon se encontraba leyendo y Seokjin durmiendo a su lado.
No habían mantenido una conversación entre ellos en esas dos horas que venían compartiendo juntos pero estar al lado del otro era más que suficiente para sentirse acompañados y cómodos. Si bien Namjoon estaba muy concentrado en su lectura, percibió que alguien había entrado al lugar pero el silencio absoluto hizo que no le diera importancia y siguiera en su lectura.
Una hora después, Seokjin abrió los ojos y sonrió al ver que Namjoon seguía a su lado.
—Vaya, que grato es despertar y ver a un apuesto hombre junto a uno —Seokjin rió al ver el sonrojo de Namjoon sabiendo que este cambiaría el tema de conversación.
—Falta poco para tu coronación por eso quiero pasar el mayor tiempo que pueda contigo, porque una vez que seas rey... ya no podremos estar juntos tanto tiempo, por no decir casi nunca —Namjoon dejó el libro y se apoyó en el respaldar del sillón para ver mejor a Seokjin—Serás un gran rey Jin, se cuanto has aprendido en este año.
El joven príncipe asintió y su instinto le dijo que se acercara aún más a Namjoon y dejar reposar su cabeza en el hombro del sastre —Promete que no desaparecerás luego de la coronación así como hiciste en la boda.
Namjoon negó ante el comentario de Seokjin y cerró sus ojos, disfrutando del momento.
El sastre llevó dos libros nuevos a su casa para leer un rato antes de dormir, sin pensar en el problema que tendría al día siguiente.
Cuando faltaban solo dos pasos para entrar a palacio, un guardia frenó el paso del sastre y le negó la entrada. Confundido, Namjoon pidió una explicación pero el guardia no le respondió.
Sin embargo, el joven no iba a rendirse tan fácilmente. Espero por casi cuatro horas sentado en una tienda justo al frente de palacio pero aún así no obtuvo una solución. Ya cansado de esperar, Namjoon regresó a su hogar. Su abuela le pregunto el porqué había vuelto tan temprano y él le explicó la situación.
Al día siguiente Namjoon volvió a ir a palacio y nuevamente los guardias le negaron la entrada pero tuvo suerte ya que Yoongi iba saliendo de palacio y lo vio. Al instante, el chico se acercó a él y lo saludo.
—¡Hey! ¿Por qué no has venido ayer? Era miércoles y me dejaste plantado para tus lecciones —Yoongi le dio una palmada en la espalda— Además, no fui el único que estuvo esperando por ti, si sabes a quien me refiero —Namjoon asintió sonriendo y le explicó lo que pasó el día anterior.
Yoongi no entendía porqué el joven había pasado por esa situación, él no tenía ninguna orden de prohibirle el paso a Namjoon y sabía muy bien que ni Seokjin debía estar enterado porque ayer estuvo esperándolo todo el día. Con una sonrisa, Yoongi le hizo una seña a Namjoon para que le siguiera aunque el sastre se sentía algo incómodo porque enseguida los guardias le volvieron a negar la entrada pero solo basto que Yoongi se acercara a uno de ellos y le hablara en voz baja cerca del oído para que el guardia asintió nervioso y le permitiera a Namjoon entrar.
—Lamento mucho que hayas pasado por eso, me encargaré del problema en cuanto vuelva a palacio. Ahora te llevaré con Jin para que no tengas algún inconveniente —Namjoon asintió y siguió a Yoongi hasta la habitación de Seokjin y Adin.
El guardia tocó la puerta y a los segundos apareció Adin, con una mirada molesta.
—¿Qué haces aquí? —Adin cerró la puerta bloqueando la vista hacia la habitación.
—¿Hay algún motivo por el cual no podría estar aquí? —Yoongi hablaba con respeto pero a la vez sonaba duro, actitud que Adin captó al instante.
—Si, Yoongi —Adin sonrió sabiendo que el guardia ya debió haber adivinado al responsable de no dejar entrar a Namjoon —Fui yo quien prohibió que él entrara a palacio, ¿La razón? Ha abusado de nuestra amabilidad y nos ha robado —La sonrisa de Adin mostraba seguridad en sus palabras mas la confusión de Yoongi ponía en aprietos a Namjoon.
—Yo no robé nada, lo juro.
Yoongi iba a protestar pero Adin tomó la palabra —En la biblioteca faltan dos libros muy importantes para la historia de Abyss, pero además, no son los únicos ya que han sido reportados varios libros desaparecidos durante el año —Adin miró a Yoongi y a Namjoon al mismo tiempo— Todos sabemos que el sastre es quien más tiempo pasa en la biblioteca y antes de él, esto nunca había pasado.
Namjoon miro al suelo incómodo y habló en voz baja —El príncipe me dio la autorización para sacar libros si quería.
—¿Mi esposo? Lo dudo, él sabe lo importante que son los libros para la familia real, incluso hay algunos que ni deberías poder leer por ser confidenciales.
Yoongi miró a Adin con súplica —Podemos preguntarle a Jin y sacarnos la duda —La princesa negó y se disculpó al momento que entró a la habitación y cerró la puerta, dejando a ambos confundidos.
—Lo siento, pero la princesa no quiere que él esté aquí joven Yoongi —el guardia que se mantuvo parado al lado de la puerta sin decir nada, tomó palabra para echar a Namjoon del palacio.
Namjoon asintió y se dio la vuelta para irse pero Yoongi lo frenó y le dijo que buscarán a Seokjin para arreglar el problema. En un principio a Namjoon no le agrado la idea porque ya se sentía fuera de lugar e incómodo pero Yoongi insistió y lo llevó casi arrastras. Finalmente, encontraron a Seokjin en la cocina esperando la cena.
Cuando el príncipe vio a Namjoon entrar a la cocina sintió una alegría inmensa, lo cual lo inquietaba un poco porque solo había pasado un día sin verlo y ya tenía la gran necesidad de ver a Namjoon.
—¿Por qué no viniste ayer? Tenía una cosa importante que hacer y quería que formaras parte.
Yoongi le dijo a Seokjin lo que paso con Adin y Namjoon pudo jurar que la molestia en Seokjin era más que evidente.
—Iré a hablar con Adin en este instante y luego —señaló a Namjoon— Tu y yo haremos algo —el sastre asintió y siguió a Seokjin pero Yoongi los despidió diciendo que tenía unas cosas que hacer y se fue.
—No puedo creer que Adin haya hecho eso —Seokjin estaba realmente molesto. Antes de acercarse a la habitación que compartía con la princesa, Seokjin cortó la distancia con el sastre y lo abrazó— Te pido disculpas por lo de ayer, de haberlo sabido, eso nunca hubiera pasado.
Namjoon, quien no sé esperaba tal acción, sostuvo a Seokjin en sus brazos con más fuerza —Solo agradezco que esto no se siga malinterpretando, yo simplemente confíe en tu palabra de llevarme algunos libros a casa, juro que los voy a devolver.
—Recuerda que pedí que te quedaras con ciertos libros porque los consideraba especiales y sabía que iban a gustarte —Seokjin se alejó de Namjoon y le sonrió— Esos no debes devolverlo, son tuyos.
Siguieron caminando hacia la habitación y una vez allí, Seokjin abrió la puerta encontrándose con la muchacha peinando su cabello.
—Tenemos que hablar Adin —Seokjin tomó el brazo de Namjoon y lo empujo dentro de la habitación con él, ya que este no tenía intenciones de entrar— ¿Por qué culpaste a Namjoon de robar los libros de la biblioteca? Quiero que recuerdes que yo le di la autorización para llevarse los libros que desee a su casa.
—Entiendo, pero hay algunos que no han sido devueltos.
—Si se los quiere quedar, que lo haga Adin, yo se lo permití —Seokjin se acercó a la princesa y le habló al oído— Lo que hiciste estuvo muy mal amor, no fue muy cortés de tu parte y quiero que sepas, que no me gusto para nada tu actitud —el príncipe se alejó de Adin y volvió a hablar en voz alta— Aún no somos reyes y este sigue siendo mi hogar, por favor, quiero que me consultes antes de tomar una decisión que involucre a otros Adin —Seokjin sonrió y salió de la habitación con Namjoon siguiendole.
—Vamos, quiero hacer algo —el príncipe llevó al sastre a un enorme salón de baile, encontrando a Hoseok esperandolos.
El pintor le explicó a Namjoon que fue llamado por Seokjin para pintarlos a ambos en su libro, donde Namjoon ya había sido retratado con anterioridad.
Hoola! Espero que esten muy bien 💖
El capítulo que sigue me gusta mucho xD ojalá lo disfruten
Los quiero ✨
<❤>
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