Michael

Siempre ha estado en mis planes la idea de hacerle el amor a las mujeres, a mi mujer y  darle todo lo que yo sé que necesita o darle incluso lo que me pida. Pero esta chica era distinta, ella solo quería hacerme sentir malditamente bien, ni siquiera se preocupo por sus necesidades solo se fijó en que yo tuviera lo que necesitaba.. fue una de las mejores en la cama, y no me arrepiento de haber dejado que ella tomará posesión de mi.

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Mis amigos me hablaron de una chica a la que solían ver cada tres o cuatro meses, ella era una de las mas buenas que habia en el grupo pero aun asi yo no la habia visto ni una sola vez. Cabello largo hasta la cintura se movia con el viento, mientras que ella con su suave forma de caminar meneaba todo su cuerpo. Sentí como mi amigo se emocionó un poco al verla contonearse de esa forma, sus muslos se veían grandes en aquel jean ajustado que dejaba una hermosa vista de su anatomía, sus pechos pequeños pero lindos se marcaban atraves de aquella camiseta que llevaba, sin brasier.

- Hey, T/n ¿Donde estabas tardaste mucho? - Jim, uno de mis grandes amigos la abrazó y luego me miraron.

Me sentí nervioso y sonreí con timidez, jamas me habia sentido intimidado por una chica de este tipo.

- Estaba arreglando unas cosas con el imbecíl de Kevin, por cierto necesito dinero para el taxi. - puso una mano en su cintura.

Esa actitud, me hacia desear castigarla por comportarse de esa forma tan irrespetuosa y osada.

- No tengo dinero, no traje.  - dijo el revisando sus bolsillos.

Me llegó como anillo al dedo, tal vez podria negociar con ella para invitarla a tomar un cafe o algo.

- Yo tengo, ¿cuanto necesitas? - dije sacando mi billetera.

- Solo veinte, y muchas gracias desconocido del cual me aprenderé el nombre. - sonrió y tomó el billete.

La vista de su trasero era increible, ¿como seria tenerla en posición canina y sentirla? me mataba la curiosidad de sentir todo su cuerpo.

- Gracias, y dime tu nombre. - sonrió.

- Michael. - contesté.

Ella asintió y miró a Jim.

- Debo irme a casa, pero apuesto a que les gustará ir a tomar algo. - me miró y guiñó su ojo.

- Oh, claro que si.

Tenia todo planeado, iba a tomarla y hacerle conocer el placer de una forma que nunca ha sentido antes. Pasé la mano disimuladamente por mi bulto y la miré.

- ¿Gustas ir por un café?

- ¿Café?, Vamos a un hotel, ya se que es lo que deseas. - mordió su labio.

Creo que ya sabe todo lo que mi retorcida mente piensa, me tensé un poco y asentí.

- Mi auto está por aqui. -  comencé a caminar y ella me siguió. - Adelante. - dije abriendo la puerta.

- Gracias. - dijo y su trasero rozó suavemente mi entrepierna.

Demonios, no puedo soportarlo.

Subió al auto y a los minutos estaba aparcando en el hotel, aunque preferiría mil veces mi casa.

- Gracias. - le dije a la recepcionista despues de tomar la llave de su mano.

Caminamos hacia al ascensor, el silencio era algo incomodo pero la lujuria se sentia en el aire o al menos yo, podia sentir como me quemaba por dentro.

- ¿Estas duro? - preguntó mirandome a un lado del ascensor.

- ¿Mmm? - dije algo nervioso.

- Callate. - mordió su labio y se acercó a mi.

Me quedé muy quieto pero comencé a entrar en panico cuando su mano apretó mi bulto, solté un pequeño, casi inaudible gemido y ella sonrió, comenzó a frotar mi pantalón y yo comencé a calentarme mas.. yo suelo tomar la iniciativa.  Se dió la vuelta y comencé a menear su trasero en mi duro miembro, tomé su cadera y ella quitó mis manos de ahi, crei que era para apartarme pero las puso sobre sus pechos. Sentí sus pezones erectos atraves de la camiseta sin sostén y comencé a sentir mi cabeza dando vueltas, su trasero estaba aplastando literalmente contra la pared del ascensor y se separó un poco, rapidamente llevé mis manos a la cremallera de mi pantalón hasta que sentí el timbre del ascensor indicando que ya habia llegado al piso que necesitabamos.

- Carajo. - dije por lo bajo.

- Shh.. - una pequeña risita brotó de sus labios, esta chica disfruta ver como sufro.

Fuimos hacia el numero de la habitación que nos ordenaron y cerré la puerta con traba, necesitaba sentir mi miembro dentro de ella, necesitaba sentirla humeda y oirla gemir.

- Vamos a la cama. - dije posandome detras de ella.

- Shhh.. ponte esto. - de sus manos colgaba una banda para cubrir los ojos y la miré confundido. - Si quieres que lo hagamos debes ponertelo.

No hubiera aceptado esto, pero ya no podia aguantar y en cualquier momento me masturbaría aqui y me iría.

- Quitate la ropa y recuestate en la cama, debo ir por unas cosas al baño, ¿si? - asentí en silencio.

Tenia esa cosa cubriendo mis ojos y no podia ver nada, pero aun asi comencé a quitarme la ropa hasta quedarme como dios me trajo al mundo. Me recosté lentamente y tomé mi miembro entre mis manos, quiero tener un orgasmo ya mismo pero quiero con ella.. debo esperar.

- Quita esa mano de ahi. - susurré y yo puse mis manos a mis costados.

- ¿Que es lo que pasa aqui? ¿por que te hago caso?

- Porque estas excitado y un hombre asi hace cualquier cosa. - sentí un lado de la cama hundirse y eso indicaba que estaba sobre la cama.

Estaba tan emocionado y ansioso, sentí como una chorro de un liquido helado caía sobre mi miembro y mi vientre.

- ¿Que es eso? - pregunté algo nervioso.

No dijo nada hasta que sentí como con sus manos frotaba lentamente mi estomago hasta lentamente bajar, todo mi cuerpo quemaba nunca nadie me habia hecho esperar tanto.

- Dime.. ¿que es lo que quieres? estoy muriendo, necesito algo de sexo. - me quejé.

El silencio me hacia sentir tan nervioso y asustado, sentí como un peso se posaba en los costados de mi cabeza y al levantar mis manos sentí sus piernas.

- Quiero que hagas que me venga ante de contestar eso. - susurró con su dulce voz.

Dios mio, creo que sabe como hacer caiga a sus pies. Sentí su feminidad cerca de mis labios y los abrí, sus manos se posaron en mis muslos hacia atras necesitaba ver como estaba pero no queria quitarme la mascara, esto es distinto y excitante a la vez.

- Lame, chupa, haz lo que quieras y si no te gusta solo intenta algo mas.. hasta que sientas que llegue al climax. - asentí.

¿Una mujer dandome ordenes? demonios, necesito tenerla debajo de mi y hacerla gemir. Comencé a sentir su feminidad en lengua, me encantaba el sabor y sentir como su cuerpo se movía con cada toque de mi lengua, comencé a lamer su zona v y comencé a oír gemidos, esto hacia que todo el calor volveria a mi, levanté mis caderas con algo de rapidez, mis piernas temblaban pero aun asi no podia dejar de lamer su vagina.

- Vamos, nene.. estoy cerca.. - dijo de forma pesada.

Comencé a sentir como mi espalda dolia, necesitaba eyacular en ella ahora mismo. Comencé a fingir penetraciones con mi lengua en su zona v y lentamente comencé a sentir como esta se mojaba cada vez mas hasta sentir como sus muslos apretaron un poco mi cabeza.

- Oh, demonios.. - dijo y lentamente se quitó de encima.

Lo habia logrado, ella habia tenido un orgasmo y yo estaba mas duro que una roca.. necesito de ella, lo necesito.

- Por favor, ahora dime que pretendes...

- Satisfacerte, es lo unico. - una de sus manos agarró mi miembro y lo apretó haciendo que soltara un gemido pesado.

- Por favor, entonces hazlo.. - supliqué.

Sus manos comenzaron a masturbarme despacio, acariciando mis bolas y haciendo que mi miembro se pusiera mas duro.

- Oh, nena... esto es.. vamos mas rapido, necesito esto. - dije  como en un grito.

Ella paró, yo no podia con esto.

- Al demonio, ya me cans... oh dios mio...

Sus labios estaban en mi miembro, comencé a sentir su lengua lamiendo mi glande y lentamente el calor comenzaba a aumentar.

- Esto es realmente grande. - dijo con una voz ronca.

Metió mi miembro a su boca y yo comencé a sentir que el cuerpo se me calentaba, mis miembro estaba mas duro que nunca y lentamente sentí como mi cuerpo comenzaba a temblar, sabia que el orgasmo estaba cerca, necesitaba tener uno ahora mismo.

- Levantate de la cama.

- Esto debe ser una broma... - susurré molesto.

- Hazlo o de lo contrario no te dejaré correrte.

- Yo no debo pedirte permiso para hacerlo. - dije intentando continuar con mi acción.

- Hazme caso, creeme que te encantará... quitate la banda de los ojos.

Le hice caso, al fin podia verla y sentí que el orgasmo se avecinaba aun mas al ver a terrible obra de arte frente a mi, su cuerpo es tan ardiente y me tiene ardiendo ahora mismo. Me levanté de la cama algo mareado y me paré a un lado de la cama, ella aun seguia arrodillada sobre la cama.

- Lo proximo te encantará... - dijo sonriendo y comenzando a masturbarme nuevamente con sus manos.

Tiré mi cabeza hacia atras, ya estaba tan cerca y la miré, no queria quitar la mirada de ella, sus manos se movian cada vez mas rapido y mis caderas involuntariamente tambien lo hacian necesitaba sentir el climax.

- Oh.. cariño... - dije sintiendo como todo mi semen caía de a chorros por mi pene.

Lo puso sobre su rostro y lentamente comenzaron a caer las gotas en su boca en su pecho, la imagen era tan ardiente. Mordió sus labios y luego pasó su lengua sobre ellos quitando cualquier señal de lo que mi climax le habia dejado.

- Ahora deberas cargarme contra la pared, no te separes de mi. - dijo levantandose y poniendo sus piernas alrededor de mi cadera.

Yo no podia mas, estaba exhausto pero estaba tan insistente que no pude evitar quejarme por mis adentros.

- No puedo.. está dormido. - dije algo avergonzado.

- Haremos que despierte, no te avergüences.. yo estoy mojada, necesito que lo sientas. - dijo y bajé mi mirada a su feminidad.

Mordí mi labio, me encantaba ver sus cuerpos.. las mujeres son tan perfectas, pero ella es superior. 

- Yo se que puedes. - susurró en mi oido.

Lentamente me senté sobre la cama con ella a los costados de mi cadera.

- Eres perfecto, desde que te vi supe que me harias sentir tan bien y esperaba hacerte sentir igual... - susurró en mi oido.

Su mano se posó sobre mi miembro y lentamente lo acarició, cerré mis ojos sintiendo como su mano lo hacia.

- Tu cuerpo es hermoso y haces maravillas con tu lengua, demuestrame que sabes como utilizarlo, dimelo. - susurró excitandome.

- Yo... yo.. - susurré sintiendo como el cuerpo se me tensaba nuevamente. - Sé..

- Dilo, vamos. - dijo mientras lentamente se ponia sobre mi pene, ahora erecto.

- Yo sé como usarlo.. - dije de una vez y la tomé levantandola y apegandola a la pared.

Comencé a penetrarlo suavemente contra aquel muro, sintiendo sus manos apretar mi espalda y sus gemidos en mi oido, habia esperado tanto que me sentia tan sediento de esto. Comencé a penetrarla como un loco, el choque de nuestros cuerpos hacia que todo mi ser se excitara y yo simplemente estaba apunto de estallar con tanto placer. 

- Metelo.. rapido.. - susurró en mi oido.

Me di la vuelta y la apoyé sobre la cama, ahora le demostraría de que estaba hecho. Elevé sus piernas a mis hombros y tuve la hermosa vista de su cuerpo, mis manos comenzaron a jugar con su feminidad mientras que comenzaba a penetrarla nuevamente, sus pechos se movian al compas y sus reacciones hacian que me mojara aun mas, llegué a un punto tan alto que comencé a penetrarla como si no hubiera un mañana, nuestros gritos invadian la habitacion y su orgasmo estaba tan cerca como el mio.

- Dime que te lo hice bien.. - suspiré.

- Lo hiciste bien, debemos repetirlo. - susurró mientras se agarraba fuertemente de las sabanas.

Me vine dentro de ella y estaba tan exhausto, valió la pena que me haya hecho esperar tanto..

- Siemore estaré aqui si necesitas a alguien para satisfacerte. - dijo besando mis labios de forma apasionada.

Luego de eso se marchó, yo estaba exhausto ni siquiera queria levantarme de la cama.. la mejor noche de todas la pase con ella.

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Espero que lo hayan disfrutado.

Escucharon wap? weno asi andaba yo ah se crean lol

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Estaré atenta por si quieren tirarme sus ideas para mas imaginas.