𝑪𝒂𝒑𝒊́𝒕𝒖𝒍𝒐 𝑫𝒊𝒆𝒄𝒊𝒔𝒊𝒆𝒕𝒆, 𝑴𝒂𝒏𝒂𝒅𝒂 

- ¿Alli? - Lydia no puede creer lo que ve. Su corazón se siente como si estuviera latiendo muy dolorosamente, su garganta se aprieta con la emoción reprimida y su visión se vuelve borrosa por las lágrimas. Ella parpadea para alejarlos con un resfriado y su mejor amiga que enterró hace años le sonríe vacilante.

- Lydia - La voz de Allison se entrecorta, tiene que aclararse la garganta ya que sus emociones también se apoderan de ella. - Lidia, soy yo - Cuando Allison da un paso adelante, Lydia tropieza hacia atrás y choca con Malia, quien agarra a la pelirroja por el codo y le gruñe a Allison. Se congela antes de doblar las rodillas con cautela, dejar el arma a sus pies y levantar las manos para mostrarles que no quiere hacer daño.

- ¿Quién? ¿quién de ustedes dos puede detectar mejor las mentiras?

Nadie dice nada de inmediato, pero el niño de ojos amarillos finalmente levanta la mano.

- Soy.

- ¡Liam! - Malia responde, pero él no le presta atención.

Nuevamente, Allison sonríe vacilante mientras lentamente da un paso hacia él.

- Niña, ¡¿qué diablos estás haciendo?! - Dean camina detrás de Allison y nuevamente ella le quita el agarre.

- Necesito tu mano - dice Allison. Cuando Liam extiende su mano con cautela, Allison la coloca justo en su yugular donde él puede sentir los latidos de su corazón contra su palma. - Tus oídos deberían ser lo suficientemente buenos, pero quiero que lo sientas cuando te diga la verdad - El niño traga saliva nerviosamente mientras mira por encima del hombro, pero Malia y Lydia ya lo observan de manera curiosa. Cuando su atención vuelve a Allison, ella dice - Mi nombre es Allison Argent. Mi alfa fue una vez True Alpha McCall. Morí, pero luego un ángel llamado Castiel me resucitó - Persiste un silencio conmocionado, por lo que continúa con un breve - Hay mucho más que contar, pero prefiero contarlo solo una vez para que todos tengan que estar juntos.

Pasan unos momentos y luego Liam vuelve a mirar por encima del hombro, con los ojos muy abiertos.

- Ella está diciendo la verdad - Lydia inmediatamente comienza a llorar y Liam se vuelve hacia Allison, retomando su mano lentamente.

- Lo siento - sonríe tímidamente. - Beacon Hills ha estado en silencio durante un tiempo y estamos esperando a que pase el próximo monstruo. En realidad, nos espera algo de drama.

- Lo entiendo. Si los roles invirtiéramos, yo también estaría en guardia - Las palabras apenas salen de la boca de Allison cuando se encuentra con los brazos atados a los costados mientras Lydia se arroja sobre ella, la pelirroja envuelve a Allison con fuerza en un abrazo.

- Eres tú. Realmente eres tú.

- Sí, Lyds - se ríe. - Soy yo.

Lydia da un paso atrás, los ojos llorosos brillan mientras solloza y deja que sus dedos pasen por el rostro de Allison. Siendo la buena deportista que es, Allison le permite obtener toda la seguridad que necesita.

- Conmovedor, de verdad - Dean se queja de repente - pero ¿deberíamos preocuparnos? Lo último que recuerdo, los ojos azules en un lobo era algo malo.

Inmediatamente, Malia gruñe.

- Soy un coyote, no un hombre lobo.

- Pft. Si estás tratando de asegurarme que no eres una amenaza, dulces mejillas, eso no era algo por lo que preocuparme.

- ¡Tipo! - Sam grita. Malia gruñe esta vez, chasqueando los dientes a Dean mientras sus ojos brillan con un azul vibrante.

Lydia salta para intervenir y Allison gira hacia Dean.

- No es su culpa, en realidad no. Esas muertes fueron accidentes.... - Malia gruñe una vez más, gruñendo un poco cuando Lydia la hace callar y Allison sonríe disculpándose - pero si quieres más detalles, me temo que esa es la historia de Malia.

- Sí, y no estoy muy interesado en compartir historias tan personales con hombres que no pueden evitar que sus dedos se muevan sobre el gatillo - Ante su mirada intencionada hacia las armas que aún apuntaban en su dirección y en la de Liam, Allison suspira.

- Lo siento por ellos - se disculpa. - Somos cazadores y solo necesitaban asegurarse de que no eras del tipo asesino. Mis amigos - dice mientras se encoge de hombros hacia Dean y Sam - no quieren hacer daño a la manada. Lo prometo.

- De acuerdo - Es Lydia quien acepta después de un momento de vacilación. - Está bien - traga saliva antes de recuperarse. - Tenemos que decírselo a los demás.

- Bueno, ese era el plan, pero ustedes lo descarrilaron. Mi papá se fue a la ciudad y se suponía que debíamos permanecer ocultos hasta que nos llamara. Creo que estaba tratando de reunir a la manada o algo así e iba a explicar lo que pudo antes de que yo entrara en la habitación.

- Sigues diciendo nosotros, pero no estoy seguro de quiénes somos - reflexiona Lydia. - ¿Exactamente con quién te has asociado?

- Ah, claro. Lydia, conoce a los Winchester. Sam y Dean, conoce a Lydia, Malia y Liam...? - El beta asiente, sonriendo levemente y después de las breves presentaciones, Allison no puede evitar mirar con curiosidad a Liam. - Así que eres el primer beta de Scott. Recuerdo que Derek dijo algo sobre eso.

- ¡¿Hale lo sabe?! - Lydia chilla antes de que Liam pueda decir algo. - ¿Cómo lo sabe Derek y cuánto hace que lo sabe?

Allison sonríe con aire de culpabilidad, pero antes de que diga una palabra, suena un pitido en el teléfono. Todos se miran unos a otros, preguntándose de quién es cuando Sam le da un codazo a Dean y Dean se da cuenta de que es suyo. Sacando su teléfono, Dean lee el texto en su teléfono antes de informar a los demás.

- Uh, Chris quiere que empecemos a dirigirnos hacia la casa de los McCall.

Lidia asiente. Luego, volviéndose hacia Malia y Liam, se dirige a ellos.

- Terminen de patrullar y reúnanse de nuevo en casa de Scott. Si Allison y sus amigos están de acuerdo, los acompañaré.

- Sí, por supuesto - Sam acepta de inmediato, lo que hace que Allison sonría con cariño y Dean ponga los ojos en blanco.

Lydia mira con curiosidad entre Sam y Allison, dejando de lado ese momento para una fecha posterior. Malia y Liam salen corriendo después de asegurarse de que Lydia está bien, y Dean comienza a pisar fuerte en su camino de regreso al Impala. Los hermanos se sientan al frente mientras Allison y Lydia se deslizan hacia el asiento trasero, ambas chicas navegando desde atrás y irritando los nervios de Dean mientras se dirigen a la casa de Scott. Cuando llegan allí, varios autos están estacionados afuera y Allison de repente se pone más que un poco nerviosa.

- Oye - Lydia llama en voz baja. Cuando Allison se vuelve hacia ella, la pelirroja sonríe tranquilizadora. - Va a estar bien - Sam y Dean salen del vehículo solo para esperar pacientemente afuera, dándoles a las chicas un poco de privacidad. - No hay nada de qué preocuparse, Alli. Es solo la manada.

- Sí, lo sé, pero morí, Lydia. Estaba muerta. Han pasado algunos años para ti, pero han sido muchos más para mí.

Cuando Lydia no tiene nada más que decir, Allison duda por unos momentos más. Eventualmente suspira y abre la puerta del auto con Lydia deslizándose detrás de ella, y cuando Sam y Dean le preguntan en voz baja si está bien, Lydia toma la mano de Allison en señal de apoyo y comienza a tirar de ella por la acera hacia la puerta principal hasta una casa muy familiar.

A medida que se acercan a la puerta principal, Allison no puede evitar mirar por encima del hombro. Sam y Dean le ofrecen sonrisas alentadoras, y muy pronto Allison mira hacia adelante cuando escucha que se abre la puerta principal.

Chris se queda allí, sonriendo con fuerza y ​​dejando la puerta abierta para que entren.

- Todos están adentro.

Cruzando la puerta principal y entrando en un lugar que curiosamente hace que el corazón de Allison duela, agarra la mano de Lydia aún más fuerte. Se oyen murmullos cuando Lydia los acerca y Allison se aleja un poco para que Lydia se detenga. La pelirroja frunce el ceño, pero es Sam quien viene al rescate.

- Está bien. Estás bien. Todos estamos aquí para ti - Él le dice mientras sus manos se aferran a sus hombros, murmurando justo al lado de su oído. - Si necesitas irte, nos iremos, pero primero debes verlos. También son tu familia, Allison - Ella asiente débilmente y mientras reúne su coraje una vez más, Lydia le sonríe a Sam en señal de agradecimiento. Luego, cuando Allison asiente escuetamente como diciendo que está lista para continuar, Lydia los guía a través del arco y todas las conversaciones cesan de inmediato.

Mirando nerviosamente alrededor de la habitación, Allison se encuentra con las miradas atónitas de algunos rostros muy familiares y una pareja que no conoce. Scott y Kira están sentados uno al lado del otro, sentados en el borde de sus asientos con las rodillas tocándose. Los ojos llorosos de Scott casi inmediatamente, pero está demasiado aturdido para hacer un movimiento. Stiles está boquiabierta, sentada con dos personas que nunca había visto antes, y John y Melissa están parados contra la pared con otra cara desconocida mientras las lágrimas brillan en los ojos del padre de Stiles y la madre de Scott.

Nadie dice una palabra y, sorprendentemente, es el padre de Stiles, John, quien se tambalea primero.

- ¿Allison?

Ella traga y sonríe con fuerza.

- Alguacil.

Él se burla con incredulidad antes de alcanzarla y envolverla en un fuerte abrazo, su movimiento rompe el hielo para que todos salgan de sus estados de aturdimiento. Melissa McCall es la siguiente, con la cabeza llena de rizos que rebotan moviéndose de un lado a otro mientras camina hacia Allison. Sus manos están juntas sobre su nariz y boca, aunque a medida que se acerca, las deja caer y Allison recibe una sonrisa debajo. Melissa se ríe húmedamente mientras toma el rostro de Allison, luego la abraza y se aferra.

Allison le devuelve el abrazo, riéndose húmedamente también. Aunque cuando Melissa sigue adelante y Stiles y Scott están parados frente a ella, su sonrisa se desvanece. Las lágrimas caen más rápido mientras observa cómo ambos luchan con sus emociones, más aún cuando se da cuenta de cuánto han madurado desde la última vez que los recordó. Stiles se aferra a ella primero, sus lágrimas caen silenciosamente mientras los mejores amigos se aferran el uno al otro, pero es cuando Scott se mueve y la envuelve delicadamente en un abrazo antes de estrechar el abrazo cuando ella realmente se derrumba. Las lágrimas son cualquier cosa menos alegre como las de los abrazadores anteriores, y los dos ex-amores sollozantes se aferran el uno al otro. Son un desastre de sollozos, pero las lágrimas finalmente disminuyen.

- ¿C-cómo? - Scott croa una vez que pone un poco de espacio entre ellos.

- Es una historia loca - solloza Allison. - Uno que preferiría no tener que repetir de nuevo, así que creo que deberíamos esperar a Malia y Liam. Pero mientras esperamos, me gustaría presentarles a algunas personas - Mientras hace una pausa, se limpia las mejillas manchadas de lágrimas y mira por encima del hombro para sonreír a los dos hombres con los que nadie más que Allison y Chris parecían estar protegidos. - Todos, conozcan a Sam y Dean Winchester.

Una vez que se vuelve a contar la historia de Allison, se vuelve a hacer un silencio atónito. Se habían derramado algunas lágrimas, pero solo después de que todos habían superado su shock inicial de ángeles y demonios que realmente existían. Heaven and Hell fue una historia difícil de contar, pero la cicatriz compartida de Dean y Allison es suficiente para hacer que los humanos normales que no pueden detectar mentiras a través de los latidos del corazón crean en lo que se les dice.

Nadie sabe qué decir después de una historia tan trágica, pero Stiles y Scott en realidad se ven horrorizados, y John y Melissa miran a sus hijos con preocupación.

- ¿Eso-eso nos va a pasar a nosotros? - Stiles traga. - Scott y yo también tenemos la oscuridad. ¿Iremos al infierno cuando muramos?

- ¡No! Dios, no - suelta Allison.

- Fue un accidente - comienza Sam vacilante. - El alma de Alli está enviado al infierno", aclara mientras todos lo miran. - Los ángeles normalmente están al acecho de qué almas están siendo destinados al Cielo, pero con Dios desaparecido y el Cielo en guerra... el alma de Alli se deslizó sin que nadie se diera cuenta.

- Dios todavía está ausente sin permiso, pero los ángeles han organizado una especie de sistema ahora - confiesa Dean. - Cas y sus amigos saben del sacrificio que ocurrió aquí hace años y de los niños que arriesgaron todo por su familia, así que los ángeles te visitarán un día y te quitarán la oscuridad o estarán en el cuidado de tu alma cuando pateas el balde.

- Amigo - gime Sam y un par de personas resoplan divertidas ante la explicación contundente de Dean.

Todos están hacinados en la sala de estar, los miembros más jóvenes de la manada (Liam, Hayden y Mason) descansan en el suelo para dejar asientos libres para los demás. La conversación disminuye con bastante rapidez y todos se quedan pensando en lo increíble. Luego, después de un tiempo, la gente comienza a pararse y moverse.

Scott termina frente a Allison de nuevo, dejándola de pie antes de tirar de ella en un abrazo aplastante. No dice nada mientras su rostro presiona el costado de su cuello, solo respira un aroma que recuerda de hace mucho tiempo y que ahora ha sido contaminado con solo un toque de azufre y.... ozono.

Allison deja que Scott tenga su momento, sus manos acariciando arriba y abajo de su espalda. Aunque cuando mira alrededor de la habitación, encuentra a Kira haciendo todo lo posible para no mirarlos. Kira parecía tan segura de sí misma antes, pero ahora, mientras observa a Scott aferrarse a Allison, la chica que todos sabían que era el primer amor de Scott, Kira parece la chica incómoda y nerviosa de su primer año de secundaria. Se ve feliz por Scott, lo hace, pero también hay dolor persistente en sus rasgos y Allison de arrepentirse se siente culpable por ponerlo ahí.

Alejándose lentamente, le da una palmadita a Scott en la mejilla y se ríe. Lydia está abrazando a su amigo nuevamente, Stiles también, y luego se hacen las presentaciones adecuadas. Allison conoce oficialmente a Malia, Liam, Hayden, Mason y Jordan Parish. Luego, cuando Allison llega a Kira, la chica asiática sonríe con cautela y Allison se ríe mientras tira de Kira de su asiento.

- Luchamos juntos una vez, Kira. Creo que eso merece un abrazo - Las dos chicas se abrazan, Allison apretando lo suficiente para demostrar que no hay resentimientos entre ellas. Sin embargo, cuando se aleja, Allison mira a Scott antes de volver a mirar a Kira y guiñarle un ojo.

Confundida, Kira observa cómo Allison sigue sonando antes de retroceder para quedar entre los Winchester. Luego, lentamente pero seguramente para que Kira entienda, Allison desliza su mano en la de Sam y entrelaza sus dedos.

Los ojos de Kira se abren como platos cuando la comprensión surge y es Lydia quien atípicamente grita.

- ¡Lo sabía!.

A medida que avanzaba la noche, los humanos del grupo congregado comenzaron a relajarse. Todos hacen todo lo posible para ocultar su fatiga a favor de que todos alcancen a Allison, pero la segunda vez que Allison bosteza ampliamente y apoya la cabeza en el hombro de Sam, Chris da por terminada la noche.

- ¿Dónde te quedarás? - pregunta Melissa McCall. - Lo último que recuerdo, Chris vendió todo aquí en Beacon Hills.

- Tenemos una habitación libre aquí - sugiere Scott.

- También en mi casa - admite John Stilinski. - Tenemos otra habitación libre y un sofá cómodo si alguien está interesado.

- En realidad no me importaría aceptar la oferta de uno de ustedes - Allison y los Winchester miran a Chris, y el hombre se encoge de hombros. - ¿Qué? Sé que Derek nos dio el reinado completo de su loft, pero Dean se quedó con el único dormitorio real y ustedes dos - hace un gesto entre Sam y Allison - preferiría no ser testigo de estar todos... en pareja.

Mientras Chris hace una mueca, la manada de McCall se ríe y las mejillas de Allison se calientan mientras trata de ocultar su rostro detrás del hombro de Sam. Dean se ríe y golpea el hombro de su y Sam solo suspira.

- No sé cuántas veces tendré que disculparme, señor, pero...

- Suficiente - resopla Chris, sonriendo. - Me gustas, Winchester, pero Allison sigue siendo mi hija. Es difícil no ver a la adolescente que enterramos en lugar de la joven en la que se ha convertido.

- Entonces, sí - comenta Dean mientras la habitación de repente se vuelve sombría al recordar el entierro de Allison - si eso es todo, deberíamos irnos. Estamos a solo una llamada de distancia si alguien necesita algo.

- O, ya sabes, solo un viaje en auto. Estoy bastante segura de que todos aquí saben cómo llegar a la casa de Derek. Lo visitamos con bastante frecuencia antes - sonríe Allison. Scott, Stiles, Lydia y Kira le devolvieron la sonrisa, sin duda los recuerdos los inundaron de todas las veces que se metieron en problemas en casa de Derek. - Nos encontraremos mañana - les dice. - Quiero saber todo lo que me he perdido.