𝑪𝒂𝒑𝒊́𝒕𝒖𝒍𝒐 𝑫𝒐𝒄𝒆. 𝑼𝒏 𝑬𝒔𝒑𝒆𝒄𝒕𝒓𝒐

Allison se queda sin energía y retrocede varios pasos mientras mantiene las manos en alto para bloquear el próximo ataque. El sudor gotea desde la línea del cabello, el cabello que cuelga de su cola de caballo pegado a la parte posterior de su cuello. Rápidamente bloquea un golpe salvaje cruzando ambos antebrazos justo a la izquierda de su cara, pero cuando empuja hacia atrás con todo su peso, pierde el equilibrio y termina girándose para darle la espalda a su atacante. Un brazo la envuelve por detrás, el antebrazo de su atacante presiona contra su tráquea mientras la otra mano de su atacante agarra la parte posterior de su cabeza para que esté estrangulada.

Los segundos pasan mientras lucha y la falta de oxígeno comienza a convertirse en un problema, por lo que, en un esfuerzo de último segundo, Allison se presiona de puntillas antes de dejar caer su peso hacia adelante con la esperanza de tirar a su atacante sobre su espalda para arrojarlo sobre su espalda. propio. Pero como es demasiado débil, no tiene tanta suerte.

- ¡Tío-tío! - Ella toca.

Sam se ríe y la deja ir, y Allison se tambalea hacia adelante solo para doblarse por la cintura y descansar las manos sobre las rodillas dobladas.

- Eso es ahora seis tap outs.

- Sí, bueno, sería más fácil si no fueras tan alto - jadea.

- Los malos vienen en todas las formas y tamaños, Alli. Está bien admitir que estás un poco oxidada.

- Cállate la boca. Vamos de nuevo.

La diversión de Sam crece, pero él hace lo que ella le pide. Vuelve a adoptar la postura de un atacante mientras Allison se toma un momento para recuperar el aliento. Cuando está lista, Allison se centra y luego se pone de pie en toda su altura, asintiendo brevemente para indicar que está lista.

Sam se lanza, golpeando con los puños que Allison bloquea fácilmente con sus antebrazos. Él avanza, lo que la hace retroceder, pero Allison es inteligente y lleva a Sam por la habitación en lugar de arrinconarla.

- Detente. Aguanta. ¡Atrás! - Allison gruñe con cada golpe.

Ella patea, apuntando a la ingle de Sam, lo que lo hace tropezar hacia atrás antes de que pueda conectar. Ella salta hacia adelante, usando la palma de su mano para empujar poderosamente hacia adelante para que se conecte con dureza en el centro de su pecho. El aliento sale de Sam por el fuerte golpe y es su turno de retroceder mientras Allison avanza. Ella golpea con tanta precisión, pero Sam es perfecto para bloquear cada golpe hacia su cabeza y costillas. Sin embargo, dada la diferencia de altura, lo deja vulnerable a golpes en los riñones y la ingle.

Ella termina aprovechando el hecho de que Sam tiene miedo de que le golpe en la ingle con las rodillas, y Allison se ríe mientras lo empuja hacia atrás.

- Está bien, eso es suficiente de tu parte.

La próxima vez que Allison intenta darle un puñetazo en el pecho, Sam atrapa una de sus muñecas. Se sobresalta por el cambio repentino y ataca con el otro puño, pero Sam también lo atrapa. Él empuja hacia atrás la parte superior de su cuerpo, doblándola hacia atrás mientras engancha un pie detrás de su tobillo izquierdo para hacerla tropezar y golpear el suyo. Pero cuando él suelta sus muñecas para que caiga sola, Allison lo sorprende juntando sus manos detrás de su cuello y arrastrándolo hacia abajo con ella.

Usando la gravedad y todas sus fuerzas, Allison vuelve a rodar con un pequeño salto breve y presiona sus pies en el estómago de Sam para enviarlo rodando sobre ella. Ella se las arregla para lanzarlo sobre su espalda, y mientras continúa rodando con su impulso, él aterriza con un ¡empujón! y ella aterriza descuidadamente tirada encima de él con una risa sorprendida. Allison se coloca rápidamente en posición, de modo que se sienta a horcajadas sobre su estómago y sujeta sus propias muñecas contra el suelo junto a su cabeza.

Con el pecho agitado, se ríe triunfalmente y se contonea en señal de victoria. Solo cuando mira a Sam en toda su gloria sudorosa, descubre que sus pupilas están un poco demasiado abiertas para su actividad de combate. No solo eso, sino que él tiene problemas para mantener el contacto visual con ella y ella descubre que su mirada sigue bajando hacia sus labios y su pecho que está contenido simplemente en un sostén deportivo.

- ¿Sam....? - Ella traga.

Sorprendido, su mirada se lanza hacia arriba para encontrarse con la de ella.

- ¿Sí?

No hay ni una pizca de vergüenza en su expresión y cuando su mirada se desliza hacia sus labios una vez más y ella inconscientemente se lame el labio inferior, refleja el acto. Ella se mueve de nuevo cuando lo siente doblando las rodillas en su espalda para plantar los pies en el suelo, y es entonces cuando se da cuenta de cómo se vería su posición para un espectador. La temperatura parece volverse un poco más cálida y una espesa tensión parece nublar el aire entre ellos.

Esta vez es Allison quien mira los labios de Sam y es ella quien parece inclinarse un poco más hacia él mientras su agarre en sus muñecas se aprieta, pero antes de que se pueda hacer algo sobre el momento en que los dos se encuentran...

Dean entra.

- Vamos - gime el mayor Winchester. La atención de Allison se dispara y lo encuentra parado en la puerta del pequeño gimnasio, con un gran baúl negro a sus pies. - Realmente no necesitaba saber que mi hermano era tan sumiso.

Sam se ríe sorprendentemente cuando Allison se sonroja, finalmente baja la cabeza y se desliza fuera de Sam antes de ponerse de pie. Ella le ofrece a Sam una mano y él la acepta, pero en lugar de soltarla de inmediato, su agarre persiste segundos más de lo que se considera normal. Dando un apretón tranquilizador a la mano de Allison, encuentra su mirada solo para encontrar a Sam dándole una sonrisa cariñosa antes de soltarla y aclararse la garganta mientras se dirige hacia Dean.

- ¿Qué hay en el maletero?

Decano se encoge de hombros.

- No estoy seguro. Charlie llamó y me dijo que la encontrara a mitad de camino. Dijo que era una orden de Alli.

- Oh - Allison de repente se anima, olvidando su vergüenza. - ¿¡Ya entró!?

- Uh, ¿qué entró?

- ¡Tráelo dentro! - Ignora por completo la pregunta de Dean y se dispone a secarse el sudor de la cara y el cuerpo, y a beber una botella de agua. Sam se encuentra con la mirada gruñona de Dean y se encoge de hombros, y Dean resopla antes de levantar el baúl y llevarlo más adentro de la habitación solo para dejarlo en una de las mesas auxiliares. - Yo, uh, sé que ustedes están bien abastecidos de armas, pero estas son algunas cosas que no tenían.

Intrigado, Dean inmediatamente se dispone a abrir el maletero. Sam se para a la izquierda de su hermano y Allison salta sobre la mesa a la derecha de Dean.

- ¿De dónde sacaste estas cosas? - pregunta Dean, sacando frascos de pólvora negra y entregándoselos a Sam para que los inspeccione, luego saca caja tras caja de balas de plata.

- ¿Y qué es exactamente esto? - Sam frunce el ceño y abre un frasco para oler el polvo.

- Esto - dice Allison, recogiendo otro frasco de polvo negro - es ceniza de montaña. La ceniza de montaña funciona como sal para lo sobrenatural. Forra las puertas, las ventanas o haz un círculo con ella y una criatura sobrenatural no puede cruzarla".

Decano sonríe.

- Bonito.

- Y esto - dice, recogiendo frascos de un polvo amarillo tenue y un polvo púrpura - es acónito en polvo. Dependiendo de la especie que uses y la cantidad, puede ser letal para un hombre lobo.

- Excelente.

Se ríe del entusiasmo de Dean, luego señala las balas y abre un compartimento para mostrar algunas puntas de flecha.

- Todos estos son de plata pura e infundidos con ceniza de montaña y acónito. Dispares lo que dispares, se enfrentarán a un mundo de dolor insoportable, así que dispara con prudencia.

- No es que no apreciemos esto, pero ¿de dónde sacaste todo esto? - Sam se pregunta. - ¿Y cómo lo pagaste? - Saca lo que parece ser una pequeña lámpara solar de jardín y Allison se la quita de las manos.

- Mi papa - Ambos hermanos se tensan y dirigen su atención a Allison, con los ojos ligeramente abiertos. - Oh, relájate. Definitivamente todavía no estoy lista para mi pasado, por eso hice que Charlie se acercara. Ella se ha comunicado con varias comunidades de cazadores y ha compartido solo una fracción de su conocimiento para que sepan que ella es el verdadero negocio. Luego eventualmente la llevó a la tienda en línea de golosinas de mi papá, el sitio web que ya le había dado desde que lo recordé, junto con una lista de lo que quería, y ella ordenó para mí. Era un poco caro, así que estoy definitivamente en deuda con ella durante mucho tiempo.

- Ah, okey - Sam y Dean se toman un momento para dejar que todo se asiente, luego Sam hace un gesto hacia el extraño dispositivo que todavía tiene en sus manos. - Entonces, ¿qué es eso?

Allison sonríe mientras su mirada cae sobre él, sus dedos ya buscan el botón que sabe que está allí. Al presionarlo, su sonrisa florece cuando pulsa una luz azul-blanca.

- Es un emisor sónico. En este momento, está emitiendo un sonido que es doloroso para el oído de un hombre lobo. Puedes ahuyentarlo o usarlo para acorralar a un hombre lobo donde quieras. Solo es cuestión de dónde colocas el emisor si quieres acorralarlo en una ubicación específica.

- Oh, hombre - se ríe Dean, una sonrisa que florece lentamente. - Me gusta cada vez más tu decisión de quedarte con nosotros. No puedo esperar para probar algunas de estas cosas.

Allison descansa un par de días y deambula por el búnker mientras se vuelve a familiarizar con numerosas armas. Dean entra y sale del búnker, pero ni Allison ni Sam le hacen caso. Aunque al tercer día regresa, irrumpe en el búnker y asusta tanto a Allison como a Sam, que se habían sentado uno cerca del otro y hojeaban los libros.

- Oigan, tortolitos, reúnanse y preparen una maleta. Tengo un concierto para nosotros y estamos en un límite de tiempo corto aquí. Hay un espectro a solo dos pueblos en esa comunidad de ancianos y tenemos que matarlo esta noche antes de que pierdan a otra persona.

- ¿Un espectro? - Sam pregunta, golpeando suavemente el tobillo de Allison para que se mueva, sus pies se han posado en el borde de su asiento. - ¿Cómo te diste cuenta de eso?

Decano se encoge de hombros.

- Me aburrí. Miré a mi alrededor, hice mi propia investigación. Supuse que en esta cacería finalmente podríamos ver a nuestra pequeña Argent en acción.

Ante el movimiento de cejas de Dean, Allison resopla y comienza a cerrar los libros para guardarlos.

- Por supuesto que lo hiciste. ¿Tengo algún tipo de prisa o puedo ir a vestirme con la ropa adecuada?

- Equipo adecuado, pero no tome demasiado tiempo.

Allison asiente y mientras Sam sigue preguntando a su hermano sobre en qué se están metiendo, ella se despide para ir a vestirse y elegir sus armas.

- Entonces, ¿en qué exactamente me estoy metiendo aquí? - pregunta Allison, colocándose anillos de daga chinos en los muslos.

Dean y Sam se habían burlado de su atuendo completamente negro, pero fue ella quien se rió de su tartán y mezclilla. Aunque obviamente sobresaldría como un pulgar dolorido a la luz del día y los hermanos se mezclarían, era ella quien parecía más profesional de los tres con su carcaj atado a su espalda, dagas enfundadas en su muslo y un arco en la mano. Sin embargo, por suerte para ella, no saldrían hasta que el sol se hubiera ido.

- Probablemente una gran pelea - dice Dean.

- Vas a querer estar atenta a un pincho que está ubicado en la muñeca del espectro. Buscará pincharte en un punto débil detrás de tu oreja - le dice Sam, moviéndose en su asiento para mirar hacia el interior. asiento trasero - Dado que los espectros se alimentan de fluidos cerebrales, el pico inyecta altas dosis de dopamina para hacer que tu cerebro sea más... delicioso, supongo.

- Bruto.

- Sí - asiente Dean. - Además, si pones las manos en el pincho, rómpelo por la mitad. Se rompen fácilmente.

- Entendido.

Continúan conduciendo con la música de Dean a un nivel bajo, y no es hasta que ingresan a la comunidad cerrada que algo se da cuenta de Allison.

- Uh, no sea una decepción, pero ¿cómo exactamente vamos a encontrar el espectro? Si estamos esperando gritos, lo más probable es que lleguemos demasiado tarde y si continuamos arrastrándonos en el auto, alguien llamará a la policía o la guardia comunitaria sobre nosotros.

- Os lo dije, chicos - Dean bufa. - Hice la investigación. Ya sé a qué casa llegará el espectro - Ante el silencio de Sam y Allison, pone los ojos en blanco. - La comunidad ya ha tenido dos muertes. Revisé los registros del hospital y encontré el nombre de un anciano que estaba sospechosamente enfermo y tenía dopamina en su sistema cuando no debería estar allí. Y escucha esto - continúa. emocionándose mientras presenta las respuestas que trabajó duro para obtener por su cuenta. - Tienen una enfermera a domicilio. Una enfermera en la que la esposa del enfermizo no le cae muy bien y dice que la mujer es un monstruo, pero ningún funcionario la está tomando en serio porque es vieja y muestra signos de demencia.

- Pobre señora - murmura Allison.

El automóvil pronto se arrastra hasta detenerse y los ocupantes del automóvil se quedan mirando hacia una pequeña casa de dos pisos. Allison está preocupada por cómo van a entrar y si esta supuesta enfermera en realidad es el monstruo que Dean cree que es, pero tan pronto como el auto está estacionado, es un torbellino de actividad.

Los Winchester hacen que el allanamiento de morada parezca un día cualquiera y no una actividad ilegal, y Allison pronto se encuentra parada en una cocina oscura mientras los hermanos inmediatamente comienzan a husmear.

- ¿Tipo? - ella murmura. - No estoy seguro de estar bien con esto.

- ¿De qué estás hablando? - pregunta Dean.

- Allanamiento de morada - aclara. - Y el hecho de que no sabemos con certeza si esta enfermera es el monstruo que estamos buscando.

- Mira, estoy seguro - resopla Dean. - Y el allanamiento de morada debería ser pan comido. Quiero decir, eres un cazador. Estoy seguro de que has estado en muchos lugares en los que no se suponía que debías estar antes.

- Bueno, sí - admite Allison. - Pero los lugares en los que entramos siempre estaban vacíos. No había una pareja de ancianos durmiendo arriba y listos para llamar a la policía.

Sam de repente parece inquieto y Dean gime.

- Está bien, ¿de acuerdo? Salvaremos a la pareja, mataremos al espectro y luego seguiremos nuestro camino feliz. La pareja estará tan agradecida de que les hayamos salvado la vida, no tendrás que preocuparte por ningún policía.

Allison frunce el ceño y Sam se acerca sigilosamente a ella, tocándole el brazo y ofreciéndole una pequeña sonrisa. Ella lo devuelve y sigue mirando a su alrededor.

Sam y Dean son los únicos dos con linternas, por lo que Allison los sigue con el arco bien sujeto en la mano. Se topan con una habitación de invitados, una habitación de invitados vacía que parece habitada, y Dean murmura sobre el paradero de la enfermera. Y justo cuando Allison está a punto de cuestionar de nuevo si la enfermera es sospechosa o no, el vidrio se hace añicos y un aullido femenino congela a los tres cazadores.

- No. ¡Por favor, no lo hagas! ¡AYUDA! - Hay otro grito antes de que la voz en cuestión se apague, y luego un gemido bastante fuerte llega a sus oídos desde abajo.

- Todavía creo que esta enfermera - pregunta Dean, haciendo un gesto alrededor de la habitación, - ¿no es la que necesitamos para emboscar?

Allison pone los ojos en blanco mientras Dean corre a su lado para subir las escaleras de dos en dos. Sam le hace un gesto para que la siga y Allison rápidamente busca detrás de su cabeza una flecha para apuntarla. Suben los escalones como un trueno justo a tiempo para escuchar a Dean disparar bala tras bala seguido de otro aullido de sorpresa.

Dentro del dormitorio, Dean está sacando el cargador de su arma y alcanzando otro en la parte trasera de la cintura de sus jeans. Hay un anciano en la cama, obviamente débil y delirante mientras trata de alcanzar a su anciana esposa que está desplomada en la silla junto a su cama. Una mujer rubia con una bata blanca se burla y da un paso hacia Dean, pero Allison deja volar su flecha.

La flecha silba, pasa justo en frente de la cara de la rubia solo para asustarla y darle a Dean suficiente tiempo para recargar. Pero en lugar de sobresaltarse, la mujer simplemente se agacha debajo de la flecha que sobresale en la pared y le da un revés a Dean antes de centrar su atención en Sam y Allison.

Donde la mujer se ha detenido, hay un tocador con un espejo ovalado justo al lado de ella. Y para demostrar su condición de monstruo, si enviar a Dean volando con un solo golpe no fuera suficiente, Allison vislumbra la verdadera cara podrida del espectro en el reflejo del espejo.

Colocando otra flecha, Allison se adentra más en la habitación para mantener la atención del espectro en ella.

- Saca a la pareja de aquí - le dice Allison a Sam. Pero cuando Sam se mueve para hacerlo, el espectro le sisea y él se tambalea hacia atrás.

Allison suelta otra flecha de advertencia, está cortando el bíceps del espectro y quemándolo ya que las puntas de las flechas de Allison son de plata pura. Mientras el espectro sisea, Sam se lanza hacia la pareja de ancianos para asegurarse de que estén bien.

El espectro se abalanza sobre Allison entonces, atrapando a la cazadora por sorpresa y arrancando el arco de las manos de Allison. Los dos luchan y luchan entre sí, y solo se separan cuando la punta de la muñeca del espectro se desenvaina para defenderse.

- Hazlo a tu manera, entonces - Allison se burla mientras mira el pico con cautela. A ciegas, alcanza las fundas de sus muslos y desenvaina dos dagas de anillo chinas. Sus dedos índices se enroscan a través de los bucles, voltea y gira las dagas con destreza antes de agarrarlas con fuerza y ​​adoptar una posición de lucha.

El espectro golpea primero y Allison bloquea fácilmente los golpes de la criatura. No es una gran pelea, no realmente, y el espectro parece depender únicamente de su pico para herir gravemente a Allison. Pero cuando el pincho se engancha en la chaqueta de Allison, ella recuerda cuando Dean dijo que los pinchos se rompían fácilmente. Así que Allison suelta rápidamente una daga y agarra la punta en la mano, luego la rompe con una pequeña sonrisa victoriosa.

El espectro chilla y Allison aprovecha la oportunidad para usar la otra daga y clavarla debajo de la barbilla de la criatura. Sam de repente tira de ella hacia atrás y Allison rápidamente busca su arco cuando el espectro aún vive, luego coloca una flecha y suelta el proyectil de punta plateada en el corazón del espectro.

Mientras el espectro cae muerto, el lado izquierdo de Allison jadea y la adrenalina sigue ardiendo en sus venas. Sam vuelve a controlar a la pareja de ancianos ya que la mujer parece finalmente recuperarse, y llora de alivio cuando Sam la desata y le asegura que todo está bien, que ella y su esposo están a salvo. Cuando la mujer se pone de pie y se tambalea hacia la cama para estar con su esposo, Sam camina hacia Allison y la abraza con fuerza.

Ella se derrite en su abrazo, suspira y deja que la tensión se alivie de sus músculos.

- Ese fue un buen trabajo de daga que estabas haciendo - reflexiona en voz baja.

Allison resopla.

- ¿Sí? ¿Disfrutas del espectáculo?

- Definitivamente.

Allison se ríe y Dean aprovecha ese momento para gemir y finalmente despertar. Mientras se sienta y mira alrededor de la habitación, su mirada se detiene en Allison y Sam, quienes todavía están en un abrazo que levanta las cejas.

- Uf - murmura Dean mientras se pone de pie y se niega a molestar a su hermano y Allison en este momento. - ¿Me perdí toda la pelea?

- Sí - Ella sonríe. - Estuve espectacular. Estás en el turno de la cena durante la próxima semana, ya que caíste como un saco de papas con un solo golpe.

- ¡Oye! Fue un golpe duro, ¿de acuerdo?

- Mhm.

- Lo que sea. Vámonos. El monstruo está muerto, los civiles son buenos y tengo hambre. Necesito pastel.

- Por supuesto que sí - Sam rueda los ojos. - Estoy conduciendo.