07: two kids met in the void
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CAPÍTULO SIETE
❝ɪᴛ's ᴛᴡᴏ ʜᴇᴀʀᴛs ʟɪᴠɪɴɢ ɪɴ ᴛᴡᴏ sᴇᴘᴀʀᴀᴛᴇ ᴡᴏʀʟᴅs❞
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📌 Hawkins, Indiana.
🗓 26 de diciembre de 1984
EN LA CABAÑA del abuelo de Hopper reinaba el silencio, aquella noche de diciembre de 1984 cuando la nevada más inesperada del año había atacado Hawkins. Él estaba sentado en el sillón y Ce en el sofá, todavía arrebujada entre las mantas mientras observaba algo en la media distancia.
Era tarde. Medianoche pasada para ser precisos, pero no sucedía nada. Ninguno tenía planes para el día siguiente, dado a que los niños, todos, se encontraban visitando familiares fuera de la ciudad, así que podían dormir hasta tarde los dos. Pero Hopper no estaba seguro de que fuera a poder conciliar el sueño, y la pequeña a su lado lo sabía.
Después de todo lo que le había tenido que contar tras tanta insistencia por su parte, referente a lo ocurrido con un caso policial en Nueva York durante el verano de 1977. El jefe de policía temía el no haber sido lo suficientemente cuidadoso con su historia, o tal vez haber ido demasiado lejos. Ella era una niña, y la historia era siniestra, daba miedo aún sin las partes que había censurado. Pero eso quizá no fuera algo malo. A los niños les gustaba pasar un poco de miedo... si se sentían seguros. Pero ¿qué podía ser más seguro que aquello? Hopper había salido de allí indemne a pesar de haberse enfrentado al asesino. Ya había dejado claro que Gallup estaba bien, al igual que la que fue su compañera por aquel entonces la inspectora Rosario Delgado, una verdadera señora con los cinturones bien puestos, y Once disfrutó de todos y cada uno de los relatos con absoluta fascinación.
━Oye, mira ━empezó a decir Hop, pero se calló cuando la castaña alzó la vista y lo miró con ojos brillantes.
━Gracias.
Aquella expresión sincera consiguió confundirlo solo un poco, llevándolo a frotarse la cara con una mano, tal vez por el cansancio, o quizás por algo más que lo venía molestando desde que la vio aparecer con la caja de los archivos para ponerlos encima de la mesa.
━Yo... Vale, claro, si tú lo dices. Solo quería pedirte perdón por contarte esta historia. A lo mejor eres demasiado pequeña.
Ce enderezó la espalda y lo miró algo desconcertada.
━No. He aprendido... ayudaste a la gente. Pero ¿Por qué estabas triste?
━¿Yo? ¿Triste?
━Sí. Salvaste a muchas personas ━repuso la niña━ Pero...
━También vi morir a otros.
Instintivamente, la mirada de Hopper recayó en sus manos, con las que jugueteaba sobre su regazo. Tampoco había sido sencillo para él recordar. Le estaba revelando todo un mundo nuevo, por supuesto, además de una faceta de él completamente distinta. En aquel entonces lo había hecho lo mejor que había podido, pero no quería mentir. No pretendía hacerse pasar por lo que no era delante de ella.
Pero Ce... Oh ella estaba tan absorta.
━Eras un héroe ━le dijo, ladeando la cabeza al igual que un cachorro━. Los héroes son buenos.
Su padre adoptivo soltó una risilla queda.
━Eso es verdad, pero creo que me pasé la mayor parte del tiempo intentando salir de un lío u otro y vivir para contarlo. Y mira, enana, ser un héroe está muy bien y es muy bonito, pero las cosas no se hacen por eso. Nadie debería querer serlo. Lo único que hay que querer es hacer lo correcto. El heroísmo no es un trabajo; ser poli es mi trabajo. Ser poli es lo correcto para mí, y por eso lo hago; tanto ahora como entonces. Era mi trabajo, e intenté hacerlo bien.
Convencida y exhausta, la castaña asintió, luego abrió su boca para liberar un largo bostezo, y a pesar de que el hombre quiso resistirse a bostezar por contagio, terminó haciendo una mueca que provocó la risa de la menor. Así que al final, se rindió y se estiró.
━Vale, enana. A la cama. Tienes permiso para dormir hasta tarde, pero tampoco te pases, ¿De acuerdo? No quiero que lo de trasnochar se convierta en una costumbre.
Tras un asentimiento, Ce se liberó de las mantas para emprender camino derecha a su habitación, por supuesto, detendiéndose un segundo ante la mesa roja y recogiendo la carta Zener, que seguía metida en su bolsita para pruebas. Hopper hizo una pausa para observar cómo su hija miraba la carta antes de volver a meterla en el archivador de Nueva York y cerrar la tapa.
Después entró en su cuarto y la puerta se cerró a su espalda sin que nadie la tocara.
Silencio. Otra vez. Justo lo que necesitaba.
Afuera la nieve seguía cayendo, empañando los cristales de la ventana mientras los ojos reparadores de la niña viajaban alrededor del cuarto en su búsqueda. Pronto localizó la venda bajo la cama, hacia donde se dirigió antes de caer como peso muerto sobre las acolchadas mantas.
Los rizos de cabello castaño que habían comenzado a alizarse con su crecimiento se desparramaron encima del colchón, y el corazón de Ce latía alocadamente por la impaciencia, combinada con la emoción de todo lo que Hopper le había justo relatado y que deseaba, desesperadamente, compartir con alguien más.
Pronto se enderezó en posición india, la venda de tela cubriendo su campo de visión a la vez que trataba, con notable afán, de concentrarse en el ruido blanco de la radio hasta sentir que desaparecía.
━Llegas treinta minutos tarde.
La expresión decepcionada de Elliot fue lo primero que vio al caer de lleno en el Vacío, siendo este un punto colorido en medio de aquella vasta extensión interminable de nada.
Ambos se encontraban sentados de piernas cruzadas sobre una fina capa de agua apenas perceptible. Once agachó su semblante avergonzada, aunque no demostrándolo lo suficiente.
━Lo siento. Estaba escuchando una historia ━se excusó, sabiendo que el mencionar esta última palabra lograría atraer el interés del niño y borrar la molestia ocasionada por su tardanza.
Y no se equivocó.
━¿Sobre qué? ━preguntó Elliot después de unos segundos de batallar contra su propia curiosidad. Los brazos continuaban cruzados, pero su rostro ligeramente ceñudo había empezado a suavizarse. Ce lo tomó como una buena señal.
━Mi padre.... Hopper ━le dijo, y pronunciar cada letra de dicha palabra se sintió raro, pero gratificante━. Antes creía que era aburrido, pero después de hoy pienso que es muy guay.
━¿Y de qué iba?
━Policías y asesinos.
━Oh, Carrie ama ese tipo de historias. Se las pasa leyendo toda la tarde encerrada en su habitación. Dice que el horror es más interesante que cualquier otro género y por eso le gusta, pero mamá la sigue regañando cuando la ve señalar los párrafos con un marcador ━rió, haciendo que el entrecejo de su amiga se frunciera confusamente ante la mención de alguien completamente desconocido.
━¿Y ella quien es?
━Mi hermana, o bueno... media hermana ━explicó━ Ya no nos llevamos tan bien como antes, ni siquiera en la escuela. Ando solo la mayor parte del tiempo cuando mamá no está.
Once no entendía si la idea de imaginarlo como un niño solitario le resultaba triste, o simplemente le causaba cierto alivio de pensar que ella era la única persona que tenía para hablar. Eran un pedacito oculto de la vida del otro, pero que a veces quería mantener como solo suyo. Aunque si se ponía a pensarlo, este era un deseo muy egoísta de su parte dado a que ella tenía más amigos y él no.
━¿Por eso hablas conmigo? ¿Porque te sientes solo?
━Me gusta hablar contigo ━se apresuró a decir con sinceridad, rectificando después━ Me gusta hablar contigo porque eres mi amiga.
Los labios de Ce se curvaron en una mueca entristecida.
━Los amigos no mienten.
━Y no lo hago. Yo nunca miento lo juro.
━Entonces ¿Por qué no puedo contarle a los demás sobre ti?
A pesar de que lo habían hablado disímiles veces, que ella continuara haciéndole la misma pregunta era un indicio de que realmente le agradaba la idea de compartir su existencia con alguien más, y que, además, le perturbaba el hecho de seguir mintiendo. Porque Mike decía que los amigos no mienten, y aún, ella era muy buena guardando secretos. Bien podría ir en contra de la promesa hecha y decirle a su padre que había otro experimento vivo en Estados Unidos, pero no quería decepcionarlo o perderlo. No siendo lo único parecido a un igual que tenía en el mundo.
Porque nadie más sabía lo que era ser como ella... excepto él.
Al notar la sombra que se apoderó del rostro de Ce tras formular su interrogante y no recibir respuesta, Elliot suspiró. No le gustaba ser la razón de su pena.
━Mamá cree que no es seguro. Por eso hay reglas en casa, y las reglas la ayudan a protegerme. Incluso cuando no son nada divertidas ━explicó, y a pesar de que no era lo que deseaba escuchar, a ella no le quedó de otra más que asentir a medias. Debía entender los motivos de la preocupación de la madre de Elliot, porque a la larga, era lo mismo que sucedía con Hopper.
"Nosotros no corremos riesgos. Son estúpidos, y nosotros no lo somos" le dijo una vez, apenas días después de llevarla a la cabaña. Le había dado solo tres reglas básicas, reglas que debía seguir para mantenerse a salvo y protegida. Reglas que ella no cumplió al final, y grandes problemas terminó buscándose gracias a ello.
━No te enojes, por favor ━pidió Elliot con voz suplicante━ ¿Sabes? Puede que aún no le hablara a mamá sobre ti, pero yo creo que le agradarías.
━Ya, yo también creo que le gustarías a los chicos ━Ce se encogió de hombros, regalándole una sonrisa tranquilizadora que fue correspondida automáticamente.
►Al final del día, ninguno de los dos podía pasar mucho tiempo enojado con el otro. Si algo los incomodaba, terminaban buscando una solución para arreglarlo, o uno se atrevía a dar el primer paso para expresar una disculpa. El caso era mantener aquella amistad intacta como lo único realmente sano que les quedaba de un pasado que se esforzaban por enterrar, y que, sin embargo, jamás los dejaría de perseguir.
De haber tenido otra edad en ese momento, los dos se habrían cuestionado más de una vez hasta donde irían a parar con aquel secreto, pero siendo tan jóvenes, poco más que niños, apenas se limitaban con interrogantes absurdas. Vivían el momento de a poco. No había espacio para dudas.
En un momento, Elliot metió una mano en su bolsillo y hayó, efectivamente, el trozo de papel doblado que había guardado en su ropa a esperas de encontrarlo en la otra dimensión.
━Mira, te traje esto... ━le mostró mientras lo desdoblaba ansioso, y Ce estiraba la cabeza en su dirección como si quisiera ver qué contenía.
━¿Qué es?
━Lo hice hoy en la tarde, mientras terminaba el último período ━se deslizó por el suelo hasta quedar a su lado, su presencia siendo apenas como un escalofrío o un fantasma. La castaña frunció el entrecejo━ La Sra. Hall dijo que podíamos escribir algo salido de nuestra imaginación y yo creé mi propia historia.
La observó abrir mucho los ojos, atónita. Esa misma noche había descubierto lo mucho que amaba las historias.
━Alucinante. ━exclamó━ ¿Me lo puedes leer?
━Por supuesto.
Elliot no supo cuanto tiempo les quedaba antes de que sus energías acabaran siendo drenadas a causa del uso de sus poderes, pero no permitió que tal pensamiento fuera un impedimento para aprovechar ese instante con su mejor amiga.
Así que, aclarándose la garganta, con la cabeza de Ce apenas apoyada en su hombro, inició la lectura de su impresionante historia sobre un caballero, una bruja y una maldición que caía sobre un reino entero.
📌 Hawkins National Lab, Indiana
🗓 1 de abril de 1986
En lo que la luz de la linterna iba y venía con la histérica pelirroja que no paraba de balbucear palabras sin sentido mientras se sujetaba la cabeza al igual que si estuviera volviéndose loca, Once se agachó junto al cuerpo inconsciente del muchacho, cuyos mechones oscuros se le habían pegado a la cara y los cuales se apresuró en apartar con delicadeza.
En la oscuridad le resultaba una tarea difícil comprobar si se trataba realmente de él, pero a medida que los segundos pasaban, cada uno más intenso que el otro, la mano de Ce viajó hasta su muñeca izquierda. Allí donde residía la verdad que su consciencia ya no podía negar.
Tuvo que contenerse para que la avalancha de emociones no se apoderase de ella nada más ver el tatuaje: Nostalgia, alivio, alegría recién descubierta... había llegado a creer que no volvería a verlo en su vida, y sin embargo, el destino parecía querer seguirla sorprendiendo con eventos dichosos a la par de catastróficos.
Una sonrisa, tan amarga como el jugo de limón que probó sin el consentimiento de Joyce mientras preparaba el desayuno de su hogar en Lenora, se coló entre sus labios mientras trataba por todos los medios de no sollozar delante de aquellas dos chicas que no conocía en lo más mínimo.
Una de ellas, la pelirroja, continuaba caminando de una esquina a otra mientras murmuraba "Esto no está pasando, esto no está pasando, esto no está pasando" repetidas veces, evitando el cadáver del demogorgon como si este pudiera contagiarle algún tipo de enfermedad rabiosa.
En todo ese tiempo, en el cual se mantuvo demasiado perdida en sus recuerdos como para querer despertar, Ce apenas fue consciente de la sangre que se deslizó hasta mancharle la punta de los dedos. Y ella se quedó mirándola, sin aliento.
━Está sangrando...
━¡Por supuesto! ━espetó una desesperada Carrie, quien había perdido el miedo y cayó de rodillas junto a su hermano para abrazarlo, casi como si quisiera protegerlo de ella━ Esa cosa lo dejó caer cuando empezó a convulsionar y se lastimó. Necesita ayuda urgente...
Ce se mordió los labios, percatándose de la genuina preocupación de la joven hacia Elliot ¿O debía llamarlo Doce? A esas alturas ni siquiera sabía si ellas estaban enteradas de quién era realmente, o mucho menos de a donde se habían venido a meter.
━Lo lamento ━murmuró apenada, y cuando se puso en pie para darle algo de espacio, la mirada de Carrie la siguió fijamente.
Aquella chica los había salvado. Los había salvado usando las mismas habilidades de su hermano ¿Acaso eso quería decir que también era una...?
No. Tuvo que parpadear varias veces para apartar las lágrimas que empezaron a nublarle la visión. Creía haber visto ese rostro en alguna parte, solo que ahora se encontraba demasiado nerviosa como para reconocerlo ¿Tal vez en una fotografía? ¿Una cinta o...? ¿Un dibujo?
━¡Vale ya está bien! ¡¿QUIEN MIERDAS ES ELLA Y QUÉ COJONES ERA ESA COSA?! ━chilló Rachel al salir de su trance finalmente. Tenía los ojos tan abiertos que podrían bien haberse escapado de sus cuencas━ ¡Mierda, mierda, y más mierda! Este tipo de cosas no pasan en Salem. No tendríamos que haber salido de allí para empezar. Pues si toda esa cantidad de militares están patrullando en las afueras por algo debe ser ¿No? ¿Y qué pasará si hay más como ese bicho? ¿O si nos vuelven a perseguir para cobrar venganza? Peor ¿Y si nos matan ¡¿QUÉ PASA SI YA MATARON A VUESTRA MADRE?!
En medio de todo esta perolata, Once se había acercado a ella en silencio y, sin pensárselo mucho, la abofeteó en la cara sin previo aviso.
Tal acción dejó sorprendidas tanto a Carrie como a la misma Rachel, quien la miró con una mano sobándose la zona afectada de su mejilla.
━¡¿Pero quién te crees para atacarme de esa manera?! ━espetó indignada. La castaña solo atinó a responderle con obviedad:
━Gritas demasiado.
━Bueno, yo tampoco sé quien eres, pero tengo que agradecerte ━intervino Carrie, todavía sosteniendo un pañuelo que había sacado de su bolso púrpura contra la sien de su hermano. Acto seguido, se volteó hacia la apellidada Corrigan━ De nada nos sirve tu histeria en este momento, Rachel. Necesitamos conseguir ayuda para Elliot y no debemos perder más tiempo.
━Oh no actúes como si tuvieras todo bajo control Carrie, hace solo un instante tú también estabas gritando conmigo cuando... esa cosa... ¡Agh! ━gritó frustrada, y ante esto, tanto la rubia como su salvadora intercambiaron miradas entre sí.
━¿Mouthbreather?
━Básicamente.
━¡Ya... dejen... de parecer... CALMADAS! ━Rachel volvió a agitar los brazos━ Esto está mal. Todo está terriblemente mal. Se suponía que solo íbamos a buscar a vuestra madre, pero luego todo se volvió extrañísimo cuando incluyeron al gobierno, los experimentos y toda esa mierda ultrasecreta que nadie debe saber ¿Y se supone que ahora también hay bestias con cara de flor carnívora sueltas por ahí? ¡¿Qué clase de mala pesadilla es esta?!
Deseando que no fuera real ni por un segundo, Once suspiró. Sus ojos recayeron en el cadáver del monstruo a solo unos metros.
━Tu misma ni siquiera haz visto la mitad de todo.
Si Carrie llegó a escucharla, no se mostró muy afectada por el significado que podían o no traer aquellas palabras, pues se encontraba mucho más preocupada porque la herida de Elliot había parado de sangrar, pero él aún continuaba inconsciente.
━Está pálido. Necesitamos llevarlo con un médico, tal vez lleve puntos de sutura.
━Muy bien, intentaré controlarme solo por ahora. Pero tú... ━Rachel clavó sus ojos en la castaña, quien no le transmitía mucha confianza, pero en esos momentos era su única opción━ Vas a decirnos donde queda el hospital, y que sea antes de que toda esta situación me provoque un derrame cerebral porque claramente no me encuentro muy cuerda.
La aludida no supo como responder al instante. Su cabeza iba a mil por minuto, asustada debido al estado de Elliot y contagiada por el miedo de ambas chicas, quienes la miraban directamente como si tuviera todas las respuestas del mundo.
━Creo que nos queda demasiado lejos ━tartamudeó. No iba a arriesgarse a pisar un hospital. Aquel era el sitio en el que menos le apetecía estar en esos momentos━ Pero podemos ir con Joyce. Ella sabrá qué hacer. Siempre sabe qué hacer.
No hubo tiempo para dudas ni peros, ya luego tendrían oportunidad para preguntar todo lo que se les viniese a la cabeza. Pero ahora, lo más importante era salir de allí a toda pastilla.
Carrie buscó la mirada de Rachel a una velocidad increíble, exhalando aire con fuerza.
━Tu conduces.
Si el General Beaver hubiese sido una persona supersticiosa, habría tenido miedo nada más pisar los alrededores de Hawkins, pues viendo de frente y con sus propios ojos el desastre que arrasó con media comunidad, sumiéndola en la desesperación de la incógnita y la desgracia, era difícil no convencerse de que algo maligno se hubiera adherido a sus costuras.
Es que sólo se debía echar un vistazo panorámico para darse cuenta de que todo se veía bastante jodido.
La Torre del viejo campanario de la iglesia central era ahora una montaña hecha de ladrillos y escombros malolientes y quemados. El equipo de bomberos había logrado detener el fuego en días anteriores, pero incluso así, todavía quedaba algo de humo saliendo de su interior. Beaver suponía que esto era debido al agujero que formaban las cuatro grietas en forma de X, por el cual asomó la cabeza inquisitivamente, habiéndose arrepentido nada más apreciar la profundidad oscura que podría tragárselo con solo poner un pie donde no debía. Porque sí, el vértigo nunca fue una debilidad fácil de ocultar.
Misma mierda, diferente día, pensó con frustración. No existía nada que pudiera sorprenderlo ya, y lo cierto es que su trabajo tampoco presentaba un puesto muy halagüeño, y menos cuando lo enviaron a una misión que no le incumbía para empezar. Pero todo en la vida era relativo, ¿no? Recibir la orden inmediata de transportarse hacia allí había sido como una divina patada en las bolas por parte de su superior, literal, con todas las malas experiencias que tuvo ligadas a casos presuntamente paranormales, desde platillos voladores y monstruos en el bosque, aquel sitio podría ser, tal vez, la misión más realista que le hubiese tocado hasta el momento. Aunque sí, parecía un paisaje salido de las historias de H.P. Lovecraft o Mary Shelley.
Macabro, si es que esa palabra quedaba dentro de su definición. Si embargo, lo que resultaba bastante curioso era la facilidad con la que sus habitantes podían caer, muy estúpidamente, en la creencia de lo absurdo.
Estaba claro que las personas se acostumbraban mucho a la idea de que en un pueblecito tan simpático no podía suceder nada demasiado malo, solo para que luego pasaran cosas como esa y terminaran creyendo que era todo obra de Satanás.
El general volvió a mirar hacia los camiones que trasladaban a las personas, algunos víctimas y otros ya cubiertos bajo una capa de naylon negro. Tantos misterios no podían ser solo una casualidad ¿O sí? Sus pensamientos recayeron entonces en la niña de la que Sullivan le había hablado ¿Acaso realmente un ser tan extraordinario vendría a refugiarse precisamente allí? ¿Al hoyo del diablo? ¡Solo si estuviera realmente loca! Aunque negarse a las posibilidades no lo haría cumplir con las órdenes recibidas.
Otra cosa es que poseía la absoluta seguridad de que nadie más podría darle una respuesta a todo lo que estaba pasando, y si tenía que llegar a ella sobrebasando cadáveres; entonces lo haría.
━Señor... ━uno de los soldados se detuvo a sus espaldas. Beaver se frotó el puente de la nariz con cansancio.
━Informe.
━El último vehículo de carga partió hacia Roane hace aproximadamente cinco minutos. Callahan dirige al escuadrón que realizará el asedio rutinario.
━Eso está bien.
El soldado hizo una breve pausa, tal y como si estuviese considerando darle aquella información adicional:
━Otra cosa son los tres jóvenes que llegaron esta mañana en una camioneta.
━¿Qué con ellos?
━Aún no regresan...
Las facciones del general se tensaron luego de escuchar esto. Excelente, realmente excelente.
Los chicos del familiar enfermo, los recordaba bien. Habían sido los únicos, además de los periodistas, que se habían atrevido a entrar a la ciudad por propia voluntad. A esas horas probablemente ya se estarían metiendo en algún problema, como todo lo que los adolescentes sabían hacer. De seguro escucharon los rumores del pueblo maldito y vinieron a comprobar que fuese cierto ¡Otro problema con el que cargar a cuestas!
Pero Beaver no tenía tiempo ahora para pensar en eso. Cosas más urgentes requerían de su total atención.
━Hágale saber al teniente coronel Sullivan que necesito un favor suyo. Si es que pretende mantenerme aquí con todos estos soldados y científicos hasta que descubran de qué va todo este lío.
━¿Y esto es, señor....?
El pelinegro se volteó de regreso hacia el campanario, y al elevar el semblante hacia el cielo, se percató que más de esas esporas blancas, similares a un copo de nieve, empezaron a caer nuevamente desde las alturas. El cielo se había plagado de nubes negras, y desde su posición pudo sentirse el retumbar de un trueno en la lejanía.
Tal vez sí que había una persona que supiera tanto como esa chiquilla después de todo.
━Quiero que traigan de regreso al Dr. Owens.... pues me voy figurando que lo necesitaremos pronto.
AAAAAAAAAAHHHHH
Guess what?
Owens está vivo!!!
Ya va que en la última temporada no nos revelaron mucho sobre cómo acabó el pobre, así que en mi historia desempeñará un papel importante, al igual que el General Beaver 👨✈️ Que sepan que este será uno de los muchos villanos que encontraremos a medida que vaya avanzando la historia, y eso que solo vamos por el filo del principio. No se hacen una idea de lo que se viene, mi gente!!!
Also IMPORTANTE ACLARACIÓN 📣: El flashback que vieron al inicio del capítulo pertenece a uno de los libros canónicos de la serie de Stranger Things y el cual está centrado en Hopper. El título es A Oscuras en la ciudad, y toma lugar entre las temporadas 2 y 3. En él, Hop le cuenta a Once sobre un caso de asesinato que investigó junto a otros compañeros cuando aún formaba parte del Departamento de Policía de Nueva York en 1977. So, dado a que quiero ser lo más fiel posible al universo de ST en este fic, se me ocurrió que tal vez podría conectarlo.
Los que no sabían sobre los libros canónicos de la serie, quiero informarles que sí existen y tienen mucha información que en la serie por falta de tiempo y/o porque no es muy esencial no nos otorgan.
Entre ellos están:
1. Mentes Peligrosas (Suspicious Minds) que nos cuenta la verdad sobre la madre de Once, Terry Ives, y el cómo se hizo voluntaria para participar en los experimentos dirigidos por Brenner.
2. A Oscuras en la Ciudad (Darkness on the Edge of Town), centrado en la vida de Hopper antes de Hawkins y que ya os he explicado.
3. Seis (Six). Una historia centrada en el proyecto MK Ultra, donde conocemos la historia de la adolescente de diecisiete años, Francine, otra de los experimentos retenidos en el Laboratorio de Hawkins antes de la llegada de Once.
También están otros como "Max, la fugitiva", "Robin, la rebelde", "Lucas en la cuerda floja" y "El vuelo de Ícaro" (que se estará sacando próximamente) los cuales son más centrados en la historia de ciertos personajes como Max, Robin, Lucas y Eddie.
Por tanto, si eres fan de Stranger Things y realmente quieres conocer más a fondo su universo te invito a leer estos libros.
Capítulo dedicado a redwinterton. Porque se lo merece y porque su AU de Eddie Munson es TOTAL.💖
Anyways, gracias por leer. Voten y comenten qué les pareció. Nos leemos pronto,
Debbie 🎸
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