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CAPÍTULO CUATRO
❝ɪs ᴛʜɪs ᴛʜᴇ ʀᴇᴀʟ ʟɪғᴇ? ɪs ᴛʜɪs ᴊᴜsᴛ ғᴀɴᴛᴀsʏ? ᴄᴀᴜɢʜᴛ ɪɴ ᴀ ʟᴀɴᴅsɪᴅᴇ, ɴᴏ ᴇsᴄᴀᴘᴇ ғʀᴏᴍ ʀᴇᴀʟɪᴛʏ❞
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📌 Mirkwood. Hawkins, Indiana
🗓 1 de abril de 1986

AQUELLA SENSACIÓN ácida que corría y quemaba a través de su torrente sanguíneo era una que tuvo la desgracia de sentir, por lo menos, unas veinte veces en su vida, aunque en ocasiones se hacía la idea de que habían sido muchas más; pero como quiera que fuese, en cualquier escenario en el que se presentara, Will Byers jamás podría acostumbrarase a ella.

No obstante, sí que podía sentirla acercándose silenciosamente, como un espectro que repta por el suelo hasta atraparlo en la prisión que era su propio cuerpo.

Primero se manifestaba en un estado de parálisis temporal muy similar a la catalepsia, donde de lo único que era realmente consciente era el sonido acompasado de sus latidos uno a uno.

Boom... boom... boom

Sabía que aún respiraba, porque de otra forma no seguiría vivo, aún cuando no era capaz de percibir nada más, ni siquiera sus propias respiraciones. Todo esto hasta volver a despegar la piel de sus párpados, para de esa forma, caer en cuenta de que volvía a sumergirse en otra de sus pesadillas.

Había pasado un largo tiempo desde la última vez que sus ojos se encontraron con el mismo crescendo rojo infierno que pintaba el firmamento, entrelazado con la niebla azul que a duras penas le permitía ver el suelo por el que caminaba. La temperatura ambiental había descendido alarmantemente, mientras una espantosa cantidad de quejidos empezaron a llegar de todos lados.

Siendo presa de su propio miedo a un nivel desconcertante, Will se obligó a tragar con fuerza. Basado en su experiencia, una parte en su interior esperaba temerosa a que él apareciese en cualquier momento. Expectante a ver los tentáculos en forma de gigantescas patas de araña aproximándose en cuanto notara su presencia.

Él siempre lo notaba...

Pero estando tan débil como Will continuaba sintiéndolo bajo la piel ¿Por qué parecía entonces estar tan pero tan cerca y a la vez tan pero tan lejos?

Por una parte resultaba confuso, y por otra era como si los filamentos de Vecna se hubiesen extendido hasta esparcirse por todos lados, recibiéndolo con un desfile de relámpagos y truenos que retumbaban con fuerza desde las alturas.

Y allí, en medio de un espejismo casi invisible, había una figura delgada, forrada en ropas largas.

Sus cabellos oscuros flotaban como los tentáculos de la legendaria Medusa, cubriendo su rostro de una forma casi aterradora, y ella le pedía que se acercara, moviendo su mano delicadamente hacia sí misma.

"¿Madre?" pensó Will para sus adentros, pero la niebla regresó de un segundo a otro, deslizándose desde el cielo hasta la tierra y cubriéndolo todo de un humo rojo electrizante que se acercaba a gran velocidad.

Estiró el brazo para cogerla, pero aunque la alargó todo cuanto pudo, su mano se cerró vacía.

De pronto, las venas dentro de su cuerpo empezaron a palpitar con gran fuerza. Will podía sentirlas a punto de reventar, presionando y presionando hasta hacerlo desfigurar su rostro de forma dolorosa. El aire dejó de llegar a sus pulmones cuando un tentáculo en forma de raíz surgió de la tierra y rodeó su cuello como si fuera un látigo. Inmovilizándolo a esperas de que lo que sea que estuviera dentro de él saliera de una vez por todas.

No puedo...

No puedo respirar.

Una serie de voces se escucharon de fondo, dejando un hilo de siete susurros mortales que daban vueltas y más vueltas en su cabeza, haciéndolo querer despertar con todas sus fuerzas.

Y entonces lo hizo.

Se reincorporó de golpe sobre la cama con el corazón martilleándole descontroladamente, ahogando un grito que nunca llegó a romperse contra sus dientes.

Azorado, se dio cuenta de que ya no se encontraba en la habitación de su hogar en Lenora Hills, sino de vuelta en la de Hawkins. Las paredes se le hicieron familiares, aunque seguían completamente vacías debido a que nadie se atrevió a comprar la casa luego de la mudanza, muchos alegando que se trataba de una edificación pobre que conducía a la locura de quienes la habitaban.

Claramente nunca llegarían a olvidar a las personas que vivieron en ella antes de abandonarla.

Lentamente, el adolescente se bajó del catre en donde pasó la noche durmiendo (cortesía del ático de Steve Harrington) y caminó lentamente hacia la cocina bajo los efectos de un ligero dolor de cabeza. Allí se encontró con la presencia del muerto/resucitado/y ahora nuevo prospecto de padrastro Jim Hopper preparando algo en la sartén, y apenas un segundo después, la de su madre entrando como un rayo por el umbral con los brazos ocupados.

━Los Iggins están dejando el pueblo, también los Cooper, y los Kramer. Acabo de verlos salir en auto hacia la autopista, así que aproveché para chequear si dejaron algo que nos sirviera en el refrigerador ━depositó las tres bolsas cargadas sobre la superficie de la encimera, causando que el ex alguacil del pueblo la mirara con sorpresa.

━¿Qué es todo esto? ━preguntó, viéndola sacar todo tipo de cosas de dentro. Desde alimentos enlatados hasta paquetes de galletas saladas y dulces por igual ¿Acaso pensaba alimentar a todo un ejército?

━Oh, es algo que definitivamente creo que nos hará mucha falta. Un pequeño préstamo. Estoy segura que no les importará... ━hizo una seña para restarle importancia, pero al notar la expresión guasona en el rostro del hombre se detuvo━ ¿Qué?

Hopper no pudo evitar la sonrisa que apareció en su rostro:

━Realmente las circunstancias te han convertido en una criminal de primera. Aunque no es que ya no lo fueras antes.

━¡Oye, dame las gracias al menos! ━ella le propinó un ligero golpe en el hombro━ Soy la única que ha arriesgado su vida invadiendo propiedades ajenas para conseguir suministros en orden de sobrevivir a este infierno. Además, no es que a ellos les vaya hacer mucha falta. Ahora ayúdame a guardarlo todo, venga.

Entornando los ojos como si no tuviese remedio, Hopper comenzó a sacar algunas de las cosas que traía envueltas en papel plástico para guardarlas en la alacena. Lo que le hizo recordar que en días anteriores los Wheeler habían donado varios suministros para el tiempo que la familia Byers decidiera pasar allí nuevamente. Pensó que tal vez había sido un alivio para ellos encontrar algunas linternas y viejos faroles de queroseno en orden de suplantar la luz eléctrica en las noches, pero más que nada tener el fogón de gas en la cocina y las sartenes olvidadas en la cabaña del bosque.

De pronto, en medio de su búsqueda, su mano pareció toparse con algo que lo hizo fruncir el entrecejo con extrañeza.

━Joyce...

━¿Uhm?

━¿Quieres decirme como nos va a ayudar esto a sobrevivir al fin del mundo? ━él le mostró el trozo de tela rojo escarlata que se había quedado mirando por largos segundos, provocando que las mejillas de la aludida se tornaran de un color muy parecido.

━Bueno... eso... yo... ejem, se veía bastante bonito y me pareció una lástima dejarlo allí colgado ━ella le arrebató el vestido de un tirón para doblarlo y meterlo rápidamente de vuelta en la bolsa━ Antes no tenía dinero para comprarme uno, con tantos gastos: hipoteca, alimento, ropa para los niños... así que pensé ¿Para qué desaprovechar la oportunidad?

━No te he visto vestir algo así desde el Instituto.

━Y no lo hago, pero una voz interior me dijo ¿Qué vas a usar en esa cita que tienes pendiente, Joyce? ¿A Hopper le gustaría verte usando los mismos pantalones o este vestido nuevecito?

━Aw ¿Tu voz interior pensó en mí? ━inquirió con una ceja elevada, y ella lo miró de forma reprobatoria

━Controla esas manos Jim, Will está durmiendo en la habitación.

━Solo estoy evaluando los terrenos ━se justificó con una sonrisa traviesa━ Ahora no puedo dejar de imaginarlo. Nosotros, en una cena, sin niños merodeando, con la banda tocando de fondo ¡Oh, qué delicia!... y por supuesto, el premio de la noche serías tú viéndote extremadamente sexy en ese vestido rojo.

━Vaya. Lo tienes todo muy vivo en tu cabeza.

━¿No lo tienes tu? ━preguntó, evocando una época en su memoria que lo hizo empezar a tararear la letra de una vieja canción━ I feel the Earth move under my feet. I feel the sky tumbling down...

La progenitora de Jonathan y Will se cubrió el rostro con ambas manos, pero no por mucho tiempo antes de que él la obligara a seguirlo.

━Oh no...

━Baila conmigo Joyce ━pidió tomándola de las manos, a la vez que ambos se movían al ritmo de una banda imaginaria━ Ooh, baby, when I see your face, mellow as the month of May. Oh, darling, I can't stand it when you look at me that way.

Si raras eran las circunstancias en las que se encontraban, mucho más raro era escuchar al antiguo jefe de policía de Hawkins cantar una canción de Carole King y bailar libremente como si se encontrara en su fiesta de Fin de Curso. Joyce apenas podía reaccionar de su repentino ataque de risa, preguntándole una y otra vez qué mosca le había picado, pero él la silenció con un beso, provocando que esta se echara a reír mientras la guiaba en medio de su simulada pista de baile.

No era el típico vals de pareja que uno pudiera imaginarse, sin la balada lenta o el abrazo por los hombros. Pero cuando él la hizo girar sobre su propio eje en el preciso instante que el clímax de la canción se acercaba, la castaña pensó que el haberse embarcado en aquella travesía a Rusia con el insoportable de Murray había valido cada segundo. Porque mientras ambos estaban así, no existían monstruos, ni bases secretas, ni nada que los perturbara... y eso, era simplemente perfecto.

━Mamá...

Ambos se separaron abruptamente cuando escucharon la voz del menor de sus hijos a pocos metros. Will los observaba desde el umbral de la puerta con los brazos cruzados y una débil sonrisa, aunque no lo suficientemente ancha como para disfrazar los rastros de un mal sueño.

Joyce sintió sus mejillas arder, a pesar de que no los había pillado haciendo nada impropio

━¡Cariño! No sabía que estabas despierto.

━Lo estaba, pero no quise interrumpirlos.

━No digas boberías, niño. Ven ━Hopper lo invitó a sentarse en la simulada mesa que habían traído━ ¿Quieres desayunar? Hago un especial de waffles que es para chuparse los dedos.

Percibiendo el sonido de su estómago retorciéndose debido al hambre, al joven no le quedó de otra que aceptar gustoso aquel tardío desayuno. Últimamente parecía ser como si las pesadillas estuvieran drenando sus energías de a poco, despertando con más sueño del que tendría a la hora de irse a dormir.

Momentos después, la puerta de la casa fue abierta tras un chirrido leve, y dos figuras aparecieron por ella cargando con otra tumbona que habían tomado prestada de la piscina comunitaria.

━¿Jonathan? ━la mayor se acercó a la entrada para asegurarse que se tratara de su primogénito, quien en efecto, le regaló una suave sonrisa mientras era ayudado por Jim a meter el objeto dentro de la casa.

Tras él, el rostro machacado pero adorable de Nancy Wheeler lo siguió de cerca. Tenía una mochila colgando del hombro y varias mantas encima que depositó en los brazos de Joyce nada más verla.

━Buenas días, señora Byers ━saludó, intentando que su tono de voz no sonase tan cansado como su aspecto deplorable mañanero. Aunque ahora que lo pensaba ¿En qué tiempo del día estaban exactamente?

━Nancy, parece que no han dormido en toda la noche.

━Pues ha sido algo así ━interrumpió su hijo mayor, quien tras darle un ligero apretoncito en el hombro a Will, se acercó para colocarse junto a su novia━ Fuimos a despedir a Argyle y luego hicimos una parada en el hospital para ver a Max.

━¿Y cómo está? ━Joyce se mostró preocupada por el estado de la niña.

━Igual, supongo. Lucas está con ella ahora para que Susan pudiese ir un momento a Forest Hills, se niega a separarse de su cama. Pero eso no lo es todo...

El hecho de que el joven disminuyera el volumen de su voz al pronunciar esto último hizo que tanto la señora Byers como Hopper intercambiaran miradas de notable preocupación. Sabiendo de antemano que cuando esto sucedía, era que se avecinaba una fuerte revelación.

Afortunadamente para Jonathan, su novia le tomó la delantera.

━Hay muchas personas siendo trasladadas a varios hospitales del condado, además de los afectados por el terremoto ━informó━ La nueva atmósfera parece estarlos enfermando.

Casi por instinto, el rostro de Will se fue apartando lentamente hacia la ventana. El cielo se había oscurecido desde aquella tarde de su regreso a Hawkins para no volver a mostrar el Sol otra vez, con una nube de humo que iba cada vez más por encima de sus cabezas, trayendo consigo una lluvia leve de esporas que parecían estarse mezclando con el aire al punto de tener que cubrirse el rostro cada vez que decidían salir de allí.

━¿Y Ce? ━fue lo primero que preguntó al salir de su momentáneo trance.

━En casa con Mike ━respondió Nancy nerviosamente━ Supuse que luego de haberle contado todo a mamá sería mejor que se quedaran los dos con ella en lo que nosotros nos encargamos de lo demás. Está algo... histérica.

━No es para menos ━agregó Jim, pensativo━ Creo que nosotros también deberíamos hacerle una visita.

Su sugerencia hizo que Joyce abriera los ojos desmesuradamente:

━¿Como? ¿Para que le provoques un infarto cuando te vea entrar por su puerta? ¿Acaso te volviste loco Hopper?

━Tal vez, explicarle el por qué aún sigo vivo haga que las cosas que le contaron tengan mayor sentido ━argulló, y a decir verdad, no es como si a Karen le quedaran más opciones para creer.

Ya estaba consciente de que la novia de su hijo era una ex huérfana con poderes telequinéticos y existía un mundo paralelo al suyo lleno de bichos y un loco super poderoso que en gran medida había iniciado todo ese desastre ¿Qué más podría sorprenderle a esas alturas?

━¡C... C... Código Rojo! ━se escuchó de pronto, provocando el sobresalto colectivo de todos los presentes en el salón━ ¡R...Repito, tenemos un... Cod... Código Rojo!

Will frunció el entrecejo confusamente, al tiempo que sus ojos iban a parar al radio de larga distancia que Dustin le había prestado y el cual él mismo dejó la noche anterior sobre la encimera.

━¿Mike? ━preguntó una vez hubo tirado de la antena hacia arriba. Su mejor amigo sonaba desesperado desde la otra línea.

━¡Hasta que al fin contestas! ━exclamó━ Will ¿Ce está ahí con ustedes? Cambio

Con una mueca de desentendimiento, el llamado Zombie Boy negó rotundamente como si este pudiera verlo.

━No. No lo está ¿Por qué? ¿Sucedió algo? Cambio

━No estaba en la habitación de Nancy cuando mamá fue a buscarla ━habló con desesperación━ T-Temo que... haya desaparecido.

Antes de que Will pudiese siquiera asimilar el peso de la información en su cerebro, Hopper tomó el trasto electrónico de su manos a una velocidad antinatural y presionó el botón central para asegurarse de que Mike pudiese escuchar su voz alto y claro.

━Tienes cinco segundos para decirme dónde demonios se metió mi hija, Wheeler. O juro por América que alguien saldrá muerto hoy, y te doy un adelanto ¡SERÁS TÚ!

📌 Hospital de Hawkins, Indiana
🗓 Mismo día

Lucas separó su vista del libro que había estado leyendo en alto cuando notó la cabellera pelirroja de la ex señora Hargrove en el interior del cuarto.

Traía el pelo recogido en un moño a medias, dejando uno que otro mechón suelto que le cubría las orejas y parte de la frente. La misma coloración enrojecida de días anteriores continuaba sin abandonarle los ojos, más el temblor de sus manos, aunque leve, demostraba al chico que esta había vuelto a beber en el tiempo que estuvo fuera del hospital.

━Muchas gracias por quedarte con ella, Lucas ━Susan le dio una sonrisa amarga y nerviosa, cubriéndose todavía más con el abrigo que traía puesto━ Y perdóname por la tardanza. Se me pasó mirar el reloj y no tengo idea de qué hora ha de ser.

━Diez en punto, pero no se preocupe. Sabe que no me molesta pasar tiempo acompañando a Max.

El moreno se volteó para ver a la joven que descansaba indefinidamente sobre la camilla, estática, cubierta lo mismo de máquinas que de yesos, tan carente de color como la ciudad en esos momentos. Lucía tan pálida, para nada tan llena de vida como la niña que había conocido hace años montando su patineta.

Las circunstancias que los habían llevado hasta ese momento lo hicieron arrepentirse tanto de haberla involucrado en ese mundo, muy a pesar de que sus amigos quisieran convencerlo de que no era su culpa. Tal vez Max siempre hubiera estado en las miras de Vecna, o tal vez no, y era eso precisamente lo que atormentaba la mente del mayor de los hermanos Sinclair.

━Debí haber estado allí ━escuchó decir a Susan, y cuando volvió a mirarla, la vio secándose las lágrimas con brusquedad━ La descuidé demasiado, en un tiempo en el que más me necesitaba. Debí estar ahí para ella y no dejarla.

El chico agachó su mirada, no muy seguro de qué podría decir al respecto para consolarla. Por mucho tiempo observó a Max hundirse en su propia depresión, en parte por la culpa de la muerte Billy, y por otro lado debido a la situación en casa con una madre alcohólica y un padre ausente.

No podía hacer nada más que darle la razón a lo que decía.

━Todos afrontamos el dolor de formas distintas ━pronunció en baja voz━ Lo importante es seguir aquí en pie para ella... por si decide despertar.

━¿Y qué pasa si no lo hace?

━Lo hará ━aseguró con voz firme, no había nada de lo que estuviese más seguro que de eso━ En algún momento.

Un pequeño ronroneo se escuchó de a su lado, proveniente de la persona que ocupaba la butaca contigua a la que se encontraba Lucas.

Dustin se removió incómodo entre sueños, lo que obligó a su amigo a zarandearlo ligeramente para hacerlo despertar.

━Oye Dust. Despierta compañero ━murmuró con insistencia, justo en el instante que el apellidado Henderson abrió los ojos y echó un vistazo alrededor para ajustar su visión al entorno.

━¿Qué hora es? ━preguntó tras un enorme bostezo, echándole un vistazo al reloj en su mano derecha━ ¿¡Las diez y cuarto!? ¡Le prometí a Suzie-pooh que la llamaría a las nueve! Oooh va a estar tan furiosa...

Aprovechando el pequeño despiste de su amigo, Lucas le dio un empujoncito por los hombros cuando este recogió su mochila de la silla y se disculpó con la madre de Max para regresar a casa. Sus padres y Erica estarían preocupados por haberlo dejado pasar la noche en el hospital, y para ser sinceros, tanto él como Dustin necesitaban un baño de espuma con urgencia.

►Inmediatamente el interior del cuarto se sumió en un silencio espectral, mientras que Susan, superada por el cansancio de días enteros dando viajes del parque de caravanas al hospital, dejó caer su cabeza en el borde de la cama hasta quedarse profundamente dormida.

Minutos después de esto, las luces del techo empezaron a pestañear misteriosamente, y si alguien se hubiera atrevido a entrar, habría quedado espantado de descubrir el movimiento de los ojos de Max bajo sus párpados cerrados. De derecha izquierda, como el péndulo de un reloj cuco...

El tiempo pasa, la consume inevitablemente ¿Cómo rayos llegó a acabar así? Un cuerpo lívido sin actividad cerebral siendo un amplio sinónimo de la palabra vacío, pero ese día, estando destinado a convertirse en algo más...

Una niña aparentemente muerta, que recibe en medio del caos un soplo de aliento de vida.

Despierta

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GRACIAS con mayúsculas a TheWalkyrie por el banner gif de Eleven que pueden ver al final del capítulo.

A que está hermoso ❤

Y con respecto a lo que acaba de pasar en este cap.... ¿Algo que decir?