—Vayamos al centro comercial, necesito comprar algo de ropa— Dijo Jennie.

—Tú siempre necesitas comprar ropa— Changbin le brindó una mirada burlona a su amiga, quien en seguida le dio una mirada ofendida.

—No es que quiera. Nunca se sabe cuando puedas conocer al amor de tú vida en un centro comercial— Se justificó.

—Que excusa tan patética.

...

—¿Qué te parece este vestido?— Dijo desfilando para Changbin, quien estaba sentado.

Él miró a la chica con aburrimiento, ya se quería ir.

—Está hermoso, compralo y ya vámonos.

—De toda la ropa que me he puesto, todas te parecen hermosas — Dijo la chica dándole una mirada de odio a el chico.

El chico iba a responderle, pero su teléfono comenzó a sonar.

—¿Hola?, Si. Está bien, voy para allá— El chico colgó —Mamá necesita ayuda para armar un tocador, adiós.

La chica se despidió de él. Jennie quedó sola, por lo cual decidió irse sin comprar absolutamente nada.

Estaba caminando para ya salir del centro comercial, hasta que sus ojos logran divisar a dos personas, pero su mirada estaba en aquel chico.

Piel pálida, labios delgados, rojos y en forma de corazón, mandíbula en forma de V, ojos negros, nariz puntiaguda y cabello castaño, el chico era muy lindo, tal vez el chico más lindo que ella halla visto.

Para su mala suerte, se encontraba con una chica que al parecer era su novia debido a como la abrazaba y daba mimos. Su teoría se confirmó cuando vio que sus labios se palmaron con los de la chica. Se sintió algo decepcionada, pero seguía viendo la escena.

La chica se encontraba de espalda y el chico de frente.

El chico cerró sus ojos disfrutando del beso con su novia, pero él abrió sus ojos haciendo contacto visual mientras que besaba a la chica. Jennie sintió un extraño calor en el cuerpo, ¿Qué estaba sintiendo?

Frotó sus muslos en busca de alguna fricción, estaba imaginando que era ella quien besaba a ese chico tan guapo. Sacudió rápidamente su cabeza al darse cuenta de lo que estaba pensando.

Sus ojos seguían haciendo contacto visual con los de el chico, algo que la estaba volviendo loca.

Jennie no lo quería aceptar, pero en ese momento, ella quería ser la chica que él estaba besando, aunque sea por solo un segundo...

El chico se separó de la chica, rompiendo el contacto visual con jennie y ahora centrándose en la chica.

Hablaron un par de cosas que por la distancia en la que estaban Jennie no logró escuchar. Lo siguiente que vio fue al chico irse junto con la chica agarrados de la mano.

Soltó un suspiro de decepción.

—¿Qué esperabas, Jennie?, ¿Qué dejara a su novia y te hablara?, que patética— Se dijo a sí misma para luego irse de el centro comercial.