Kai's POV.

Desperté como cada mañana, alrededor de las ocho. Estaba tan cansado por los días anteriores que me sorprendió llegar a la cocina. Ignoré la nube de humo proveniente de la estufa y caminé hacía el refrigerador. Estaba vacío. No esperaba que hubiese comida en el Bounty. Recién habíamos combatido contra Morro y desalojado del Gran Sabiduría por lo que el Navío estaba igual a como lo habíamos dejado. Y tras la batalla en Stiix quedamos tan cansados que sólo nos dio tiempo de comprar unas cuantas cosas en una tienda.

Lancé un bufido. Tendría que comer la porquería que hubiese cocinado Cole.

Me senté junto con mi hermana, Jay y Zane en la mesa. Me sorprendió no encontrar a Lloyd, ya debería estar despierto. En realidad había insistido en dormir solo ésa noche. Gracias a Morro sus pesadillas habían aumentado, por lo que se despertaba en la noche gritando. Cuando sugirió dormir en otro lado casi nadie se opuso. Realmente me sentía mal por el enano. No me gustaba dormir plácidamente cuando tal vez él no lo hacía en toda la noche...

-Bien, está listo -Cole llegó a la mesa y colocó en el centro una sartén que desprendía un olor extraño-. Disfruten.

Nya, Jay, Zane y yo agitamos nuestras manos para despejar la espesa cortina de humo. Estaba tan hambriento que fui el primero en tomar la cuchara y servirme el desayuno en el plato.

Tomé los cubiertos, listo para comenzar a comer, pero me detuve en seco. Sobre el plato de porcelana había una cosa extraña completamente negra. Comencé a moverla con el tenedor y al sentir su textura se me fue el hambre al instante.

-Eh... creo, creo que iré a ver cómo está Lloyd... -dije y salí disparado de la cocina.

Cuando llegué a la habitación de Lloyd toqué la puerta con los nudillos. No hubo respuesta. Volví a tocar, insistente.

-¡Lloyd! ¡Ya está el- - ¿El qué? En realidad no sabia como llamarlo- el experimento de Cole!

No obtuve respuesta.

Abrí la puerta, sin más. Al dar un paso dentro de la habitación me sorprendió el estado en el que se encontraba. Las cobijas estaban desordenadas y había cosas tiradas en el suelo. La única ventana parecía haber sido abierta de golpe a causa del viento. Era un completo desastre.

Corrí apresuradamente al baño. Estaba empezando a ponerme nervioso. Me tambalee al tiempo que me sujeté del lavabo para no caer de cara. Me puse rojo por la ira. Casi me tropiezo con... ¿Lloyd?

El rubio estaba sentado bajo el umbral de la puerta, rodeando sus rodillas con sus brazos y mirando un punto fijo en la pared. Tenía un aspecto espantoso. Unas ojeras horribles descendían de sus ojos, los cuales estaban hinchados y rojos, como si hubiese estado llorando. Me senté a un lado suyo y lo moví ligeramente del hombro.

-Lloyd.

Parpadeó y me miró.

-¿Que pasó?

-Una pesadilla, es todo -respondió, con un toque de fastidio. Enarqué una ceja. Nuca había escuchado a Lloyd así.

-¿Y qué le pasó a tu cara?

El ninja verde abrió los ojos como platos y se puso de pie al instante, provocando que casi me fuese hacia atrás.

-¿¡M-mi cara!?

Sé miró con nerviosismo en el espejo sobre el lavabo y suspiró.

-Son solo ojeras...

No me pareció que aquello fuese dirigido hacia mí. Más bien parecía que lo decía para tranquilizarse a sí mismo.

Me puse de pie y miré su reflejo en el cristal.

-¿Qué sucede? -exigí saber.

-No es nada.

Sus ojos verdes estaban fijos en mi reflejo. Claro que no le creí.

-Lloyd.

-¡YA TE LO DIJE, NO ES NADA!

Retrocedí un paso, extrañado. Lloyd tomó aire y cerró los ojos.

-Kai, ¿Puedes salir? Tengo que ducharme.

Me quedé en donde estaba, aún conmocionado. No era habitual que Lloyd gritara, menos a uno de nosotros.

-¡Kai, sal!

Volví a abrir los ojos como platos. Lloyd lanzó un bufido.

-¿Sabes qué? Iré al otro baño.

Algo extraño le estaba sucediendo a Lloyd, no podía dejarlo irse sin decirme qué le pasaba.

-Lloyd, espera -lo detuve en cuanto llegó a la puerta-. Tienes que decirme qué sucede. ¿Algo está mal?

-¡Te diré que está mal! ¡TÚ! ¿¡Por qué no sólo me dejas tranquilo!?

Me empujo con brutalidad contra la pared del pasillo. Quise usar mi mano para detener el golpe. Un crujido, algo se rompió. Sentí una inmensa ola de dolor. Lloyd abrió mucho los ojos y se miró las manos, como si no pudiera creer lo que había hecho, lo que él me había hecho. Salió corriendo de allí.

Algo le sucedía al ninja verde, y me preocupó que fuese lo que fuese pudiese herir a alguien más.... o a él mismo.

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Hola! Pues he aquí la segunda parte. Soy muy mala 😖
Creo que ésto se está extendiendo más de lo que creí. Talvez hasta termine siendo otra historia más en forma 😂

¿Qué opinan? ¿Les está gustando? ¿Quieren que termine en un par de capítulos más o lo alargo unos cuantos más?

Los quiero, ¡Feliz fin de semana!

No pierdan la máscara!