Haruto mira hacia adelante encontrándose con lo que esperaba, un par de de ojos que se transforman en finas líneas. Muy a diferencia de lo que los demás piensan de los ojos pequeños, a el le parecian sumamente interesantes. El como estos escondian sentimientos, encasillados en un profundo misterio. Las personas que lo poseian, siempre le paresian las mas difíciles de leer. Jeongwoo era una de estas, por supuesto el chico lo era. Mas el japones estaba completamente dispuesto, a dedicar toda su vida a desvelar aquellos misteriosos ojos.

_ ¿En que estas pensando? _Jeongwoo rompe el silencio con una pregunta precisa.

Haruto revuelve su mirada, ocupándola en los labios del coreano. Estos esbozan una venidera sonrisa y aquello lo hace morir de amor. Quiere besarle, besarle por el resto de la visita. Sonrie de vuelta, con solo pensarlo de pasada. Ordena su frase, pero esta se vuelve inconclusa en su mente. Como si no fuese capaz de formular juicio correcto, frente al chico que esta ante su ser. Se da porvencido y decide ser lo mas sincero que puede. Algo crudo talvez, pero sincero.

_Simplemente...en ti, siempre pienso en ti. Nunca consigues salir de mi mente, esa es toda la verdad. _ Haruto repara.

Jeongwoo se le queda mirando al japones. _Mentiroso..._

Haruto sonrie para Jeongwoo. _Quieres que te diga lo que estaba pensando acerca de ti ¿No es asi? _

_Lo quiero y lo deseo también. _Jeongwoo suelta.

Jeongwoo deja mas que una frase, una pregunta. Tirada al aire, escudriñando el juicio del japones. Es talvez solo el hecho, de que quiere picarle. Aun no se acostumbra a soltar esa constante pelea de poderes, probablemente nunca lo hara. Tan divertido que, es casi la base de su relación. O lo que sea que tenga con el japones, lo que sea, pero es bueno.

Haruto respira profundamente. _Solo refirmaras lo obvio. _

_ ¿Que? _Jeongwoo se le queda mirando al japones.

Haruto se encoge de hombros, para luego acercarse a Jeongwoo. Lo suficiente como para que, sus manos se encarguen de dar mimos. Haruto sabe que es mas que bien recibido, por la manera en que Jeongwoo cierra sus ojos y suspira. Tan pesadamente que hasta, puede sentir atravez de el toque. Este va desde la linea de sus orejas, hasta la linea de su mandibula. Casi le recorta los dedos, razgos tan finos que parecen irreales. Haruto para de contemplar y siente la necesidad de volver a su suma sinceridad. Tan absurda que, no es capaz de escucharse a si mismo con antelación. Tan solo se prepara para soltar la frase, esa habitual frase.

_ ¡Que te amo con locura! _ Haruto suelta.

Jeongwoo tiembla, casi a los compas de lo incansables latidos de su propio corazón. A este punto de la conversación, ya sabe a donde van todos los argumentos del japones. Jeongwoo siente como su cara quema, debido a la ardiente sangre que recorre sus venas. No puede soportarlo mas y termina por evitar la mirada del japones. Respira pesadamente y castiga sus labios con suma ansiedad. Tratando de pensar en una frase menos hiriente, una mas esperanzadora.

_Haruto ya...habíamos hablado sobre esto. _Jeongwoo murmura entre dientes.

Haruto respira profundamente. _Y te he estado dando todo aquello que me pediste...pero no puedo evitar querer darte mucho mas. _

Jeongwoo vuelve su mirar hacia el japones, este le mira fijamente. Como si nunca hubiese quitado sus ojos de él, como si estuviese mas que decidido. Jeongwoo no puede culparlo cuando, el también desea lo mismo. Toma el agarre del japones y luego, deja un ligero beso en sus nudillos. Un gesto pequeño, pero, que, entre ellos, se ha vuelto mas que significativo.

_Sabes que es lo que mas quiero, quiero ser tuyo mas que nada... pero..._Jeongwoo se vuelve cabizbajo.

_Por favor no lo digas, no digas que no eres... suficiente para mi. _Haruto cita las intenciones de Jeongwoo casi de memoria.

Jeongwoo hace una mueca, es como un ciclo sin fin. Sus males perdiendose tan lentamente, es como si su futuro tuviese fecha de caducidad. Miedo de que el japones, algún dia se canse de esperar. Mas tiene que ser sincero, para evitar arrepentimientos futuros.

_Solo estoy siendo sincero contigo, aun no me siento lo suficientemente bueno. No quiero hacete daño con mi inestabilidad, lo que yo realmente quiero, es ser alguien que te complemente. Crecer juntos como pareja y talvez algún dia..._Jeongwoo se le quedo mirando al japones.

_Algún dia tendremos una relación sana. _Haruto completo aquella frase.

_Se que debes estar cansado de mi repertorio, pero..._Jeongwoo jadeo.

_Sabes que no lo estoy Jeongwoo, solo temes que algún dia lo este..._ Haruto niega rotundamente. _ Soy pasciente cuando se trata de ti, lo he sido desde el dia uno. _ Haruto resalto la ultima frase. _ Desde que eramos enemigos, cuando quise ganarme tu amistad. _ Haruto hizo una pequeña pausa. _El enamorarme de ti, no es mas que otro paso hacia tu corazón. Tenerte sigue siendo un anhelo, que no me permitiré minimizar. Tus vales todo en esta vida, sigues siendo mi otra mitad. _

Jeongwoo se le quedo mirando a Haruto. _Empiezo a pensar que tienes razón. _

Haruto ladeo su cabeza. _ ¿Sobre lo de que eres mi otra mitad? _

Jeongwoo asiente con los ojos cerrados, imaginándose cada retazo de sus sueños. Momentos al azar se proyectaron, como si de un dejavu se tratase. Recuerdos que lo habían regresado al pasado, estando en el presente. Sueños que le permitieron alcanzar, algo que pensó que habia perdido para siempre. Un regalo que al principio no comprendio, pero que termino aceptando como un tesoro.

_Nunca te dije esto, pero, aparecias constantemente en mis sueños. De alguna forma u otra, cuando seguias siendo mi enemigo. Sueños relacionados con nuestra niñez, muy arraigados a los encuentros que tuvimos. Es como si mi mente. _Jeongwoo dejo la frase en el aire.

_Hubiese tratado de que me recordases. _ Haruto completo aquella frase.

_Al principio no lo entendia, pero, cuando me confesaste todo sobre el pasado. _ Jeongwoo jadeo. _Joder yo no supe como, como podía conectar todo tan perfectamente. _ Jeongwoo hizo una pequeña pausa. _ Como puntos de un dibujo, que se vuelven bellos trazos. Nuestra historia se convirtió en un retrato, una tan efímeramente palpable. Abrumante como mil demonios, mi corazón pego un vuelco vivaz. _Jeongwoo miro fijamente a Haruto.

_Nuestra historia esta trazada desde hace mucho, líneas de luz que iluminan al amanecer. Aun lo recuerdo claramente, los deseos que pedimos aquella vez. Se que algún dia se concederán, sigo creyendo en el cielo. _

Haruto recordo el pasado y también parte del presente. Los deseos que habia pedido al cielo junto con Jeongwoo, desde niños hasta adultos. Cada uno mas significativo que el otro, pero todos, tenían el mismo propósito. Mantenerse juntos, a pesar de las adversidades de la vida.

Jeongwoo suspiro. _El cielo esta de nuestro lado, realmente lo esta, pero.._ Jeogwoo se queda en el aire. _ ¿Habra un final feliz en esta historia? ¿Habrá sonrisas en nuestros rostros por el resto de nuestros días? _ Jeongwoo devuelve su vista hasta el japones. _Tu lo has dicho, solo aquel cielo lo sabra. _Jeongwo arrastro aquella ultima frase.

_El fue capaz de volvernos a unir, estoy seguro que se esforzará en que nunca nos alejemos otra vez. _ Haruto flasheo una sonrisa fugaz. _ Mira que nuestro odio se convirtió en amor..._Haruto pico a Jeongwoo.

Jeongwoo le dio una mirada al japones. _Y yo que planeaba odiarte de por vida. _

_Querrás decir amarme. _Haruto corrigio de inmediato.

Jeogwoo abrió la boca, listo para decir lo contrario, mas no pudo siquera pronunciar, aquella venidera mantira. Amaba al japones, lo amaba mas que nada. Lo amaba tanto que, lo garabateaba en sus días solitareos y hasta habia conseguido dibujarle decentemente. Era absurdo decirlo, pero, la soledad le habia sentado de maravilla a su lado artista. Estar enamorado solo era la cereza del pastel, sus paredes eran testigos de aquella arte.

_Amarte suena mejor. _

Jeongwoo saco su libreta de dibujos y se dedico a rasgar su primera hoja. Casi se la sabia de memoria, supo que estaba en lo correcto cuando la diviso. Hecha en una bonita hoja, llena de trazos de carbón. Tan rustico, pero a la vez, tan delicado. Vio el dibujo y sintió cosas. Era la primera vez que, sentía calma.

_ ¿Desde cuando dibujas con tanta alma? ¿Quien te enseño con tanto amor? _ Haruto colo su sugestivo comentario.

Jeongwoo escucha las palabras del japones, obviamente este le mira fijamente. No lo mira de vuelta y solo, mantiene el dibujo tomado entre sus dedos. Sonrie tímidamente, para luego atreverse a mirarle. Se encoje de hombros y sonrie con sencillez.

_Un japones que juraba odiarme, pero que termino amándome de por vida. _

Jeongwoo vio al japones reir y eso fue suficiente para el. Esa sonrisa enorme, que brindaba una hermosa vista de sus perfectos dientes. No recordaba al japones con tan perfecta dentadura, pero, no se quejaba del nuevo Haruto. A diferencia del pasado, parecia haber cambiado para bien. El japones habia dejado el cigarro hace ya unos meses, abrazando una adicción por la goma de mascar. Todo parecia ser un proceso, pero Jeogwoo no tenia problemas con ello.

_El dibujo es hermoso Jeongwoo. _

Haruto saco a Jeongwoo de sus pensamientos, se dedico a disfrutar de como le desordenaba la cabellera. Jeongwoo levanto la hoja, para luego dirigirla hacia el japones. Con esa exprecion timida, que solo el japones merecia ver.

_Es para ti. _Jeongwoo hablo casi en un hilillo.

_ ¿Para mi? _Haruto silvo.

Haruto vio asentir al coreano, mientras dejaba el dibujo en sus manos. Haruto se dedico a verlo y era un retrato de él. Parecia estar dándole un vistazo al amanecer, por la forma en como pequeños rayos de luz, iliminaban cada detalle de su rostro. Cada uno de esos detalles, parecia haber sido plasmado con una exactitud perversa. Como si Jeongwoo se hubiese pasado meses estudiando su rostro, como si supiese adecuadamente todas y cada una de sus expresiones. Haruto estaba ensimismado, su piel se erizo a tutiplei.

Jeongwoo se le quedo mirando al japones. _Nunca he sido capaz de dibujar a nadie en mi vida, tu eres la primera persona a la que he dibujado. Y aunque no quiera dejar ir este dibujo, creo que lo mereces mas que nadie. _ Jeongwoo se le quedo mirando fijamente al japones. _ Gracias por enseñarme que dibujar se hace con el corazón, Wattanabe Haruto. _

Haruto se le quedo mirando al coreano, quien le miraba de vuelta. No hizo falta siquera preguntar y dejo un beso en una de sus mejillas, luego otro mas en la sobrante. Una sonrisa de parte del coreano, por la forma de agradecerle. Este no escatimo en devolver el beso, pero en sus labios. Fue casto, ya que ambos estaban en el parque del lugar. Levantaron una que otra mirada, pero solo era simple curiosidad hacia su amor. Haruto se acerco al oido del coreano, dispuesto a secretear algo.

_Te amo. _ Haruto susurro.

Jeongwoo se alejo un poco, se le quedo mirando al japones. Una sonrisa en su rostro, que no pudo evitar complementar. Jeongwoo movio sus labios hasta formar una sonrisa de medio lado, acercándose un poco al japones. Lo miro con ojos brillosos, mientras trataba de no reir como un bobo. Un bobo enamorado, sin remedio alguno.

_Yo también. _ Menciono ligeramente.

Moonhee se encarga de pasar su tarjetilla, como ultimo paso para desabordar el autobús. Autobus que ha decidido tomar, porque ha sido la única forma de llegar rápidamente al lugar. Ese lugar al que Yoshinori la habia citado y del cual resguardaba cierta suspicacia. Suspicacia que se refirmo, cuando salio de aquel autobús. Escucho como este se hiba en un sonido habitual y la dejaba a la deriva en frente al estudio.

_Esto no puede ser una simple casualidad de parte de Yoshinori. _

Moonhee murmuro entre labios, lo suficientemente audible. No sabia exactamente porque lo habia hecho, pero estaba segura de que le estaba hablando a alguien. Talvez a su yo del pasado, la cual habia sufrido tanto en aquel lugar. El salón de baile de ballet, en el cual se incribio con esa pasión por la danza.

Amor a primera vista, que aun seguía conservando por aquel arte. Si tan solo aquel amor, no hubiese sido tan exigente con su cuerpo. O mas bien, si tan solo ella no hubiese sido exigente. No, no podía inhibir los estigmas que ya había en su mente. Era solo una niña que era feliz bailando, no entendia como las cosas habían terminado tan mal. Un problema alimenticio, realmente no fue lo primero que se le vino a la mente, al ver a hermosas mujeres danzar. Ella solo queria ser bella, una bella mujer.

Moonhee sintió un pequeño cosquilleo en su mejilla, unas lagrimas necias resbalaban por su morena piel. Era entonces cierto, la manera en como el pasado seguía doliendo. Estar en aquel lugar, solo hacia todo mucho mas doloroso. Mas trato de seguir, seguir caminando. Como habia seguido con su vida, a pesar de todo el daño recibido. Enjuagando sus lagrimas constantemente, como lo hacia en esos momentos. Entro al lugar con la cabeza en alto, justo como cuando decidio salir de aquel infierno.

Moonhee miro por doquier, cada rincón le traía recuerdos de su infancia. Algunos recuerdos eran hermosos, otros simplemente, no tanto. Moonhee decidio quedarse con los buenos, mientras entraba a un salón muy familiar. Esos trece escritos en letras doradas, seguia intacto. El lugar estaba vacio, asi que decidio entrar a curiosear.

Dando pasitos curiosos, se termino adentrando en el lugar. Cuando se dio cuenta, estaba ovillada en su esquina preferida. Dio un suspiro al darse cuenta de aquello, mientras se dejaba llevar por el momento. Se relajo lo suficiente, hasta que se sintió preparada para abrir sus ojos. Lo que no esperaba al abrirlos, era que alguien estuviese frente a ella viéndola fijamente. Una chica, para ser mas exactos. La chica ladeo su rostro mirando a Moonhee un poco mas, hasta que finalmente dio indicios de hablar.

_Hola... _

La chica saludo, Moonhee se le quedo mirando. No era tan joven la verdad, mas bien una especia de adolecente. Con un tutu precioso recorriéndole la cintura y un característico bun lleno de laca. Dejaba ver su rostro a la percfeccion, incluso cuando la chica no aceptaba mucho el contacto visual de Moonhee. Como si estuviese insegura de su rostro, Moonhee hizo una mueca ante esa inseguridad. Moonhee no la culpaba, pero le dolia los estigmas que habia visto de buenas a primeras. Le tomo tan poco notarlos, tanto que le asustaba.

_Hola. _Moonhee finalmente respondio.

_Mi nombre es Moon. _La chica se atrevio a decir.

Moon hizo un pequeño saludo, de esos que expresaba respeto hacia mayores. Seguia evadiendo esa mirada de Moonhee. Mientras ocupaba sus manos en una mania, que consistía en apretarlas en puños de vez en cuando. Moonhee noto la maña, pudo ver como esta se restregaba las palmas de las manos con sus uñas. Moonhee trato de ignorar aquello, incluso cuando tenia unas severas ganas de detenerla. Colocar sus manos sobre las de Moon y evitar que esta siguese raspándose las palmas.

_El mio Moonhee. _Moonhee completo la conversa.

Moonhee sonrio después de responder, como tratando de darle confianza a la chica. Tal parece que sirvió de algo, porque esta se termino sentando. Llego a mirar su sonrisa por un corto tiempo y una hipnosis aparente. Luego simplemente se coloco timida y regreso a ese jugueteo de sus manos. Luego se sento rápidamente y miro por la puerta principal impaciente. Haciendo una mueca al ver que seguía igual, que como cuando habia entrado al lugar. Moon dejo de ver hacia la puerta y regreso una fugaz miradilla hasta Moonhee.

_ ¿Estas esperando a alguien tambien? _Moon dijo de la nada.

Moonhee sonrio para Moon. _Tecnicamente si. _

Moon sonrio como si de un reflejo se tratase, sin darse cuenta siquera. Fue raro para ella, fue raro sentirse agusto de la nada. Moonhee era una completa desconocida, pero le llego a dar un aura de hermana mayor. Una hermana mayor, siempre habia deseado una. Que fuese tan bonita como la chica a su lado, cuya sonrisa parecia dejar de lado la iluminación natural del lugar.

_Podriamos esperar aquí juntas, si lo deseas. _Moon planteo.

Moonhee se le quedo mirando a Moon. _Seguro. _

Ambas se acomodaron como si fuesen a esperar un largo tiempo, como si la conversación entre ambas estuviese solo comenzando. Se miraron al una a la otra y ambas concordaron una sonrisa. Moonhee mantuvo el contacto visual, que le regalaba de a poco Moon. Tratando de hacerla sentir agusto y pudiesen seguir la conversación. La vio encogerse de los hombros y mirar hacia la puerta una vez mas.

_ ¿Por de casualidad estas esperando a tu novio? _Moon pregunta de la nada.

Moonhee parpadea varias veces. _ ¿Por que lo preguntas? _

Moon se encoje de hombros. _Porque luces como que estas esperando a tu novio. _

Moonhee niega castamente. _En realidad estoy esperando a mi mejor amigo. _

Moonhee esperaba cualquier reacción de la chica, todas menos una sonrisa de su parte. Ella se acerco mas a donde estaba y sus hombros casi se rozaron. Moonhee se resalto ante aquello, la chica se señalo a si misma con entusiasmo. Moonhee fruncio el ceño ante ello, pero la dejo ser. Era refrescante el cambio, la chica parecia estar tomándole confianza.

_Yo también. _ Moon dijo con emoción.

_ ¿En serio? _Moonhee se le quedo mirando a Moon.

Moon asintió animada, estaba a punto de hablarle sobre el porque esperaba a su amigo. Casi a punto de formular sus palabras, hasta que la puerta del lugar fue abierta. Moon miro casi por inercia, para luego mirar una vez mas. El habia llegado de repente, mentiría si dijese que no habia robado su atención. Moon decidio no mirarle de mas y volver su mirada hasta Moonhee. Ella la miraba algo extrañada, si que decidio decirle. Casi en formato de secreto aparente, se acerco hacia la chica.

_Es ese que viene justo ahí... _ Moon secreteo.

_ ¡Oh! _Moonhee asintió.

Moonhee miro al chico en cuestión y parpadeo por lo deslumbrante que era. Imposible que luciese asi siendo solo asiático, habia algo en este que exclamaba extranjero. Intrepido talvez, por la manera en que este caminaba hacia donde estaban.

_El es muy amable conmigo, siempre esta cuaidando de mi. _ Moon hizo una pequeña pausa. _ Creo que me gusta, pero no se lo digas a nadie. _ Moon se le quedo mirando a Moonhee. _Me lo prometes, por favor hazlo. _

Moonhee quedo petrificada, habia dejado de mirar al chico hace ya un rato. Este se acercaba peligrosamente, le sorprendia como la chica habia secreteado sus sentimientos con tanta rapidez. Solo le quedo asentir rápidamente, asentir y seguir procesando todo.

_Lo prometo. _ Moonhee solto.

_Se esta acercando, recuerda no decir nada. _Moon se apresuro a decir.

_Solo ve.... _Moonhee hizo un gesto de sellar sus labios.

Moon la miro con una sonrisa complice y luego volvió su exprecion a una mas plana. No tan plana como desearía, no podía negar como sus ojos brillaban. El estaba ahí, con esa sonrisa llena de sencillez. Nada impresionante para los demás, pero sumamente única para ella. Camino hasta el con rapidez, dejo a Moonhee unos buenos pasos hacia atrás. Lo suficiente como para estar en el marco de aquella puerta, a unas pisadas del chico.

_Moonie... _

Moon se le quedo mirando a el chico. _Jay Jay... _

_Finalmente te encuentro, traje algo de agua para ti. _

Moon observo como el chico abria el bote de agua para ella y luego se lo tendia. Le costo un poco de tiempo comprender que toda la maroma era para ella, se habia distraído en solo quedársele viendo al chico. Lo tomo con algo de vergüenza, fingiendo que no habia tomado su tiempo en aceptarlo.

_Eres muy lindo, gracias por tratarme. _ Moon se permitio sonreir ligeramente.

Jay Jay se le quedo mirando a Moon. _Yo...de nada. _

Jay Jay trago hondo mientras seguía mirando, tratando de recordar que otra cosa venia a hacer. Talvez solo era traer la bendita agua y solo estaba buscando desesperadamente alguna otra excusa para quedarse. La sola idea le avergonzó, casi apunto de ruborizarse. Sus amigos tenían razón, cuando decían que era como la mascota de Moon. Siempre buscando su atención y protegiéndola. Mas no podía evitarlo, sentía que nadie mas podria hacerlo tan bien como él.

_Te veo en la salida entonces. _ Moon fue coloquial.

_Ahi nos vemos. _ Jay Jay asintió cabizbajo.

A Moon le parecio tierno aquello, pero no hizo nada al respecto. Mucho menos se atrevio a darle un beso de despedida a su amigo, por mas habitual que parecia. Espero a que este se fuese pero, el seguía ahí esperando. No entendia como su amigo no entendia ni una sola señal de su parte, ni siquera las mas obvias.

_Anda a practicar ¿Si? _ Moon cambio el tema.

_Despidete bien. _ Jay Jay hablo como si nada.

Moon paniqueo por lo alto que lo dijo, miro a los lados para cerciorarse de que nadie habia escuchado. Luego miro al chico y finalmente negó con freneci. Ignorando la mirada fija del chico, que se acercaba con naturalidad.

_Mejor en otra ocacion, porque ahora mismo... _

Jay jay termina haciendo un puchero. _Pero..._

_Adiosss. _ Moon alarga la frase.

Lo ve rayar aquellos ojos color miel, luego simplemente, atenta en robarle un beso. Lograndolo al primer intento, sonrie victorioso antes de irse. Casi corriendo abandona el lugar, como el chico extrovertido que es. Moon solo ruega no estar tan roja, aun tiene que enfrentar a Moonhee.

Moon regresa algo, por no decir muy avergonzada. La mirada que le hace Moonhee es incriminante, pero sabe que la merece. Es lo mas parecido a esa mirada de una hermana mayor, que ha recibido en su vida. Es la primera vez que alguien la ve recibir un beso de Jay Jay y espera que se quede solo asi.

_Creo que le gustas. _Moonhee suelta.

_ ¿Qu-e? _Moon tartamudea.

_Seguro le gustas. _Moonhee asegura.

Moon se vuelve a sentar junto a Moonhee, para luego respirar profundamente. Les lanza una mirada a medias y luego se vuelve cabizbaja. Deseando que las palabras de Moonhee sean verdaderas, realmente desearía que fuese asi.

_Eso es practicamente imposible, soy demasiado poca cosa para el. El solo es amable conmigo, provablemente porque me tiene lastima. _Moon hace un amargo.

_ ¿Lo escuchaste de los demás o es lo que piensas? _Moonhee se le queda mirando a Moon.

Moon se queda en el aire. _Lo escuche de los demás. _

Moonhee resopla. _No los escuches, a ninguno de ellos. Solo te quieren ver triste, porque te tienen envidia. No dejes que esos comentarios te afecten, vales mucho mas de lo que ellos creen. Y tu te mereces el amor de quien amas, si este algún dia desea darte ese amor. _

Moon se le queda mirando a Moonhee. _Talvez tengas razón...talvez. _

_Creeme que, es exactamente asi. Lo se por que, alguna vez fui como tu. _ Moonhee se le queda mirando a Moon. _Insegura de mi misma, hasta el punto de no creer que merecia amar. Lo que queria estaba justo frente a mis ojos, pero mi baja autoestima no me dejaba ver. No quiero que pierdas cosas como yo, asi que trata de seguir mi consejo ¿Si? _

Moon se queda pensativa. _Crees que algún dia logre ser lo suficientemente valiente como para sincerar mis sentimientos ante Jay Jay. ¿Lo crees asi? _

_Yo ya creo en ti, solo falta que tu creas en ti misma y en todo lo que puedes ser capaz de conseguir. Lo que sea que quieras, estoy segura que lo mereces mas de lo que crees. _Moonhee sonrio.

_Moonhee... _

Moonhee fruncio el ceño, reconociendo aquella voz. Al mirar solo se sercioro, Yoshinori en persona. La miraba desde lejos, saludo tímidamente. Moonhe saludo de vuelta, se habia olvidado completamente de a lo que habia venido inicialmente.

Moonhee llevaba ya un par de veredas caminadas junto al japones, en una conversación que solo se daba en miradas. Sus manos unidas, hombros rozándose de vez en cuando. El atardecer daba una hermosa vista, del horizonte al que se dirigían. Perdiendose entre aquellos lugares, que le pertenecían a la academia.

_Nunca te pregunte como me encontraste... _Moonhee le dio una mirada a Yoshinori

_Un chico japones me ayudo con ello. _Yoshinori solto.

Moonhee fruncio el ceño. _ ¿De que chico hablas? _

_ Un estudiante de esta academia, creo que su nombre era Jay Jay. _Yoshinori explico.

Moonhee asintió algo anonadada, de como todo se habia conectado extrañamente bien. Aun seguía teniedo esa extraña teoría, que habia llegado a su mente al ver al par de chicos. Le recordo a Yoshinori y a ella, a pesar de que no tenían las mismas edades. Talvez por las cosas en común, probablemente era eso.

_Ahora lo entiendo todo, casi todo. _

Yoshinori miro a Moonhee. _ ¿Casi todo? _

_Aun sigo sin entender porque, me citaste aquí. _Moonhee se le quedo mirando a Yoshinori.

_Creo que lo entenderas al paso. _ Yoshinori solto.

_ ¿A que te refieres con el paso? _Moonhee fue curiosa.

Yoshinori se encojio de hombros. _Mira a tu alrededor ¿No te trae recuerdos? _

Moonhee dejo de mirar al japones y dirigio sus ojos hacia cada parte del lugar. Las que su vista le permitio ver y los recuerdos que le permitio atraer. Casi se quedo sin aliento, al darse cuenta del lugar al que habían llegado. Las imágenes del pasado, convinandose con las del presente.

_Es el jardín de las bailarinas, solia venir aquí a ver la luna nueva. Justo después de practicar, mientras esperaba que mi madre viniese a buscarme. _ Moonhee sonrio ante el recuerdo. _ La instructora solia mirarme desde lejos, preguntándose porque me gustaba tanto ver aquella luna. _ Moonhee suspiro profundamente. _ Y es que ella solia escucharme tanto a mi, todas y cada una de mis palabras. Era algo asi como, la primera amiga que tuve. _

Yoshinori busco la mirada de Moonhee. _Pense que yo era tu primer amigo. _

_En relidad fuiste mi primer amor. _Moonhee fui sincera.

_ ¿Que? _Yoshinori parpadeo varias veces.

Moonhee sonrio mientras miraba al japones, casi como si fuese un reflejo. Siempre que le miraba, era la misma reaccion. Como si el solo verle, le trajese una suma felicidad. Yoshinori era su lugar feliz, ese en el que se sentía realmente bien. Sin preocupaciones de estereotipos o expectativas que lograr a la perfeccion.

_No hay otra forma de definir lo que sentí al verte, fue amor a primera vista. Y aunque se que tu no sentiste lo mismo, eso no hizo que mi amor se disipase. _ Moonhee se volvió cabizbaja. _ Creo que, al contrario, se volvió mas fuerte. Lleno de esa ilusión, de que algún dia me mirases. Sonieses y pensases, ella es linda. _Moonhee revolvió su mirar de vuelta al japones.

Moonhee sintió las lagrimas traicioneras, esas que regresaban con cada pensamiento de insuficiencia. Se suficiente para todos, siempre habia sido su objetivo. Tanta presión le habia generado aquello, que aun le seguía doliendo el alma. Dolia porque, complacer a todos era algo imposible.

_Eso sucedió Moonhee, sucedió, pero nunca lo supiste. _ Yoshinori acaricio el rostro de la coreana. _Sucedió mientras paseaba por aquí y me escondia entre los arbustos. Lo suficientemente alejado, como para estar conmigo mismo. _ Yoshinori hizo un amargo. _ Mientras lloraba porque mis padres ya no se amaban, mientras rezaba por volver a Japón y abrazar a mi madre. _ Yoshinori miro fijamente a Moonhee. _Fuiste tu, Moonhee, aquella que me hizo sonreir al verle, sonreir y pensar, que eras la chica mas linda del mundo. Mientras le hablabas a la luna nueva, cada una de esas noches. _

Moonhee se le quedo mirando a Yoshinori. _ ¿Por que nuca te acercaste? Talvez no nos hubiese tomado tanto tiempo, estar como estamos ahora, talvez no te hubiese hecho sufrir. _ Moonhee negó con pesadez. _ Sabes que me volvi muy ciega y que, me tarde mucho tempo en reconocer tu amor. _

Yoshinori hizo un pequeño silencio, pensativo. No supo que responder siquera. Le tomo algo de tiempo, formular una respuesta. Una respuesta que, debio haber formulado hace mucho. Solo esperaba que aquella respuesta, fuese aceptada por la chica. Que no fuese demasiado tarde, para alcanzar aquella luna nueva.

_Por alguna extraña razón, preferí venerarte desde lejos. Fue comodo para mi durante años, pero nunca fue suficiente para mi corazón. _ Yoshinori jadeo. _ La necesidad de amarte, nunca se desvanecio. Ni, aunque quisiese, ni, aunque haya luchado por apartarme de tu lado. Era como si el destino, se encargase de arrastrarme hacia ti cada vez. Cada vez que volvías a estar sola, yo estaba ahí. Cuando ellos no podían estar para ti, no dudaba en ocupar ese lugar. Moonhee yo, simplemente naci para estar para ti. _ Yoshinori asegura. _ Y no me molesta aquello, porque estar contigo, es todo lo que esta bien en esta vida. Que seas mi novia es lo que deseo, que finalmente suceda. Despues de tanto tiempo yo, finalmente debo decírtelo. _Yoshinori arrastra aquella ultima frase.

Moonhee sonrie castamente. _ ¿Te acuerdas esa vez que te bese, aquel primer beso? Lo hice sinceramente ¿Sabias? _ Moonhee se le queda mirando a Yoshinori. _Dije que no habia nadie en este mundo capaz de amarte de la misma forma que yo lo hacia. Lo dije porque en el fondo, no queria que existiese alguien que te amara mas que yo. _ Monnhee mordisqueo su labio inferior. _ Entonces lo sospeche, sospeche que te queria de una forma diferente. Senti miedo de perder lo que teníamos, sentí miedo de que mis sentimientos talvez, nunca se habia ido. _ Moonhee hizo un amargo. _Y lo empecé a arruinar todo, hasta que acepte mi realidad. Despues de tanto tiempo, finalmente puedo aceptarlo por completo. _ A Moonhee se le resquebrajo la voz. _ Aceptar que quiero ser mas que tu amiga, que no otra cosa mas en el mundo, que ser tu novia, Yoshi. _

Moonhee no puede limitar mas esa distancia, que ha mantenido desde dia uno. Se deja llevar por lo que a deseado, lo cumple al unir sus labios con los del japones. Jura que es casi mágico, como se acoplan el uno al otro. El beso extremadamente lento, no deja su andar por nada. Es un baile que ambos, desean bailar a su propio ritmo. Con sonrisas de por medio y caricias venideras.

Dejandose llevar por el ambiente del atardecer y los sonidos de las aves que deambulan por los aires. Casi en las nubes, el beso se desvanese en ambos. Separándose de a poco, se miran fijamente. Por primera vez en sus vidas, algo llena ese vacio. Todo lo que han tenido durante tantos años, finalmente se vuelve en ese anhelado suficiente. Todos los otros suficentes, se vuelven inecesarios. Es el uno al otro, todo lo que alguna vez llegaron a necesitar.

Doyoung estaba paralizado en si mismo, fingiendo escuchar el hablar de su madre. No habia llegado a mas de medio dia en su casa y ya queria salir corriendo de ahí. Toda la situación habia sido completamente incomoda y sumamente humillante. Incluso cuando todo lo que escuchaba era real, seguía repudiando esa idea de que los demás sintiesen esa lastima por el. Sinceramente odiaba que lo viese de esa forma, odiaba en lo que se habia convertido. Lo que siempre habia sido, pero que se esforzó tanto por ocultar. Doyoung era una victima, una victima del abuso.

_ ¿Por que no dices nada...? _Irene hablo con desesperación.

Doyoung se resalto al escuchar aquella voz y su nada se desvanecio por completo. Regresando a esa realidad, en la que su madre seguía siendo tan insistente. La vio con lagrimas en los ojos, estas parecían no secarse nunca. Se sintió horrible ante la imagen, solo deseo que todo ese infierno se acabase. Su madre no merecia sufrir de esa forma, simplemente no lo merecia. Doyoung siempre lucho porque ella nunca se enterase, lucho hasta las ultimas consecuencias. Nada de ello habia funcionado, era como si no hubiese salida alguna a sus males.

Doyoung jadeo. _No hay nada que decir...madre. _

_Necesito saber como ocurrieron las cosas, necesito saber porque lo ocultaste por tanto tiempo. Necesito que me cuentes la historia, que me trates como lo que soy, como tu madre Doyoung. _ Irene hablo en un hilillo.

_Leiste cada frase de mi diario, no veo que otra cosa quieras saber. Lo sabes todo madre, absolutamente todo. _ Doyoung murmuro entre dientes.

Irene miraba a su hijo, incluso cuando este la ignoraba olímpicamente. Buscaba su mirar de todos modos, en un constante deseo por descubrir que sentía. Doyoung era demasiado bueno ocultando sus sentiemientos y apenas lo habia notado con aquel diario. El pelirrojo disfrazo cada uno de sus males, con el poder que ejercían sus brillantes sonrisas.

Irene trago hondo. _ ¿Por que insistes en no hablar sobre ello? Sabes...sabes que necesitas hacerlo. No te estoy pidiendo que lo hagas por mi, te estoy pidiendo que lo hagas por ti mismo. _

Doyoung finalmente mira a su madre y suspira avasalladoramente. Como si ya no le quedaran fuerzas, para seguir la conversación. Talvez es asi, talvez simplemente ya no puede. No le quedan mas mascaras de felicidad, solo tiene esa larga colección de rostros de tristeza. Desearia poder hacer mas, pero es solo un deseo vacio.

Doyoung mira fijamente a su madre. _Porque quiero olvidalo toda madre, como si nunca hubiese sucedido. Talvez asi mi alma, mi cuerpo, puedan convertirse en lo que fingi ser por décadas. _

Irene niega rotundamente. _No puedes pretender que yo también olvide, no me pidas que sea tan ciega, como lo he sido todo este tiempo. _

_No te estoy pidiendo nada madre, en realidad, nunca te he pedido nada, siempre estuve bien por mi cuenta. _

Doyoung habla en un hilillo, mientiendo vilmente. Como si no se hubiese anclado a Dohwan desde que tenia uso de razón, desarrollando una dependencia física y emocional, que posiblemente aun no superaba. Era enfermizo, pero, le habia ayudado a sobrevivir. En ese mundo en el que vivía, en el que nadie podias confiar.

_Como puedes ser tan egoísta con tu madre Doyoung. _ Irene reniega.

Doyoung se le queda mirando a su madre, mientras sus labios tiemblan al compas del temblar de sus ojos y porbablemente el resto de su cuerpo. Sus ojos se recubren en lagrimas y no sabe cuanto las pueda contener. No le apetece complacer a su madre, ni su imperio de la perfección. Esta harto de fingir ser ese Doyoung, esta harto de ser algo que su madre creo.

_Tu eres la que siempre pide, pide sin importarle lo que los demás sientan. _ Doyoung se le resquebraja la voz. _ ¿Alguna vez pensaste en tus hijos mas aya de como trofeos? _ Doyoung se le quedo mirando a su madre. _ No lo creo madre, porque lo único que haz hecho es moldearnos a la perfección. Moldearnos para exibirnos perfectos ante la sociedad de porquería, a la que nos toco pertenecer. _ Doyoung deja ir un lamento. _ Todo el mundo piensa que somos perfectos, cuando solo somos unos perfectos mentirosos. _ Doyoung hace una pequeña pausa. _ Y yo ya me harté de todo este teatro montado por esta familia, no quiero ser participe de esto nunca mas, renuncio a ser un Park. _

Doyoung se levanta de su cama e ignora a su madre. Ella se queda petrificada en la orilla, pero sus ojos siguen vivaces en su hijo. Mirando fijamente, como si quisiese controlar sus movimientos. En otra ocacion talvez, hubiese bastado para que el pelirrojo flaquease. Mas en esos momentos, este solo se dedico a tomar su abrigo. Irene se asaro al verle y se levanto de inmediato. Un caminar apurado para alcanzar a enfrentar a su hijo, quien tenia sostenida la perilla de la puerta.

_Doyoung.... _ Irene grito. _Doyoung si cruzas por esa puerta realmente no volveras a ser un Park, no volveras a tener nada de lo que nuestro apellido te pueda proporcionar. _ Irene jadeo. _Entiende que esta familia debe... _

Doyoung le dio una mirada contundente a su madre, de esas que se resumían en una simple respuesta. Su rostro completo expresando un simple no. Doyoung estaba orgulloso de negarse a algo en su vida, con tanta seguridad. Incluso cuando su cuerpo completo temblaba, incluso cuando se sentía a morir.

_No... _ La voz de Doyoung temblo. _Prefiero quedarme con lo que queda de mi dirgnidad... ser libre de este infierno en el que he vivido por años. _

Irene no dijo absolutamente nada, Doyoung agradeció aquello. Ella abrió la boca después de un rato, pero el cerro casi de inmediato. Se atrevio a alargar su mano y tomar su rostro. Doyoung se dejo hacer, mientras la miraba con ojos vidriosos. A ella le temblaban las manos, sus lagrimas rodaban destrozándole el maquillaje.

_Doyoung..._Irene miro fijamente a su hijo.

_Por favor... déjame ir. _Doyoung hablo en un hilillo.

Junghwan escucha unos toques en la puerta principal de su casa, ellos son constantes en sus oídos. Casi de manera desesperada, aumentan en un sonido chirriante. Junghwan se apresura abrir la puerta, ignorando lo tarde que es. Imaginandose que es talvez Jeongin, el suele escapar de la policía ocultándose en su casa. Queda cerca del lugar en donde suele robar o vender sustancia ilícita. Junghwan resopla al solo imaginarlo, con su exprecion malévola de siempre. Espera verla al abrir la puerta, pero es otra cosa lo que encuentra.

_Do..._

Junghwan no puede terminar la frase siquera, el pelirrojo le abraza de repente. Con una fuerza descomunal, se aferra a su cuerpo como si su vida dependiese de ello. Un silencio se da entre ellos y luego el ambiente se llena de lamentos. Junghwan puede sentir las lagrimas de Doyoung tocar su piel descubierta, estas son frias como el invierno mismo.

_Te necesito ahora mismo... _ Doyoung suelta. _Te necesito mas que nada, por favor no me abandones. Junghwan, ya no me queda nada mas, estoy completamente solo. _ Doyoung habla en un hilillo.

Junghwan lo abraza de vuelta, ocupando una de sus manos en aquella cabellera rojiza. Acaricia con sumo cuidado, mientras hace un pequeño sonido que suele calmar al pelirrojo. Junghwan no sabe exactamente lo que ha pasado, pero no soporta el hecho de ver a su chico asi.

Junghwan respira profundamente. _Tanquilo amor yo, estoy aquí para ti. Sabes que te amo demasiado, yo nunca te dejaría a la deriva.

Junghwan seca la cabellera roja de Doyoung, ya es casi una paractica frecuente. El pelirrojo se deja hacer, mientras suspira por el trato que resive. A Junghwan se le hace parecido a un conejillo, que solo necesita mucho amor. Doyoung lo mira de reojo, para luego acercar el rostro hasta su pecho.

Aspirando su aroma, logra hacer que su piel se erice por completo. Deja un beso fugaz y luego lo mira desde aquella distancia que los separaba. Junghwan lo observa de pie, mientras este le mira sentado. Se atreve a tomar el rostro del pelirrojo y acariciar sus mejillas de a poco.

_Amor. _ Junghwan busca la mirada de Doyoung.

Doyoung entrecierra los ojos. _ ¿Que? _

_Me parte el corazón verte de esta forma, dime por favor que ha sucedido. _

Doyoung se vuelve cabizbajo, como si hubiese recibido una especie de regaño. Sabe que sus conductas recientes, solo evidencian su necesidad de afecto. No se miente asi mismo, se esta derritiendo ante el toque del menor. Se apega mas a este sin importarle verse necesitado, sabe que esta vez es lo mas correcto. No es para nada esa dependencia enfermiza, que llego a sentir por Dohwan.

_Simplemente no pude resistir mas este teatro, en el que he actuado toda mi vida. Estoy harto Junghwan, harto de fingir ser perfecto. _ Doyoung arrastra su ultima frase.

Junghwan se le queda mirando a Doyoung. _Eres muy fuerte Doyoung. _

Doyoung hace una mueca. _En realidad soy muy débil. _

Junghwan toma de lleno el rostro de Doyoung, lo guía hasta que pueda mirarle fijamente. Niega rotundamente ante la mirada del pelirrojo, luego ocupa un beso entre los cabellos de su frente. Luego regresa a sus caricias y esa mirada fija. Doyoung lo esta mirando mientras parpadea con pesadez, luciendo algo sueñoliento. Ha sido un dia duro para el pelirrojo y las caricias no ayudan mucho.

_Claro que no lo eres, no eres ninguna de las cosas malas que te han dicho para manipularte. Olvida todo lo que alguna vez escuchaste, bórralo de tu mente de una buena vez. Tus vales mucho mas que tu exterior y nadie tiene derecho a decirte lo contrario. Eres el ser con el alma mas preciosa, eres el principe noble de esta historia. _

Doyoung mira fijamente a Junghwan. _ ¿Por que me dices cosas tan hermosas? _ Doyoung se vuelve cabizbajo. _ Ni siquera me las merezco. _

Junghwan niega rotundamente. _Las mereces mas que nadie en este mundo...creeme cuanto de lo digo. _

Doyoung suspira pesadamente. _Gracias por ser tan comprensivo conmigo, otra persona no hubiese soportado todo mi mal. _

_Tu no tienes la culpa de todo el daño que te hicieron Doyoung, tu solo fuiste una victima. _ Junghwan se le queda mirando al pelirrojo. _Pero ya no mas Doyoung, ya no permitiré que te sigan haciendo daño. _

Junghwan fija su mirada hacia el pelirrojo, desliza sus manos provocando un suave toque. Desde la cabellera del pelirrojo, resbalando hasta llegar a aquella manzana de Adan. Contiene su rerspiracion cuando se detiene en esta, contemplando como si de una obra de arte se tratase.

Junghwan decide seguir con sus caricias, por lo menos hasta que Doyoung toma su mano. Este logra detenerle, se le queda mirando fijamente, como si estuviese leyéndolo tal libro. Junghwan solo se deja hacer, talvez su rostro diga mas que mil palabras. Esas palabras que sus labios, aun no se atreven a siquera susurrar.

_ ¿Que? _Doyoung suelta.

_Puedo cuidar bien de ti ahora, darte todo lo que te mereces. _Junghwan sigue su hablar.

Doyoung le da una mirada a Junghwan. _No entiendo lo que tratas de decir Junghwan, creo que todo lo que has hecho por mi es mas que suficiente. Que estes a mi lado me basta para saber que me amas y..._Doyoung frunce el ceño. _ ¿Hay algo mas que deba saber? _

Junghwan traga hondo. _Primero necesito que prometas que no te asustaras por lo que te dire y te adelanto que es una larga historia. _

Doyoung hace una pequeña pausa. _Te escuchare entonces. _

Junghwan dice lo que tiene que decir, una conversación que le debía al pelirrojo. Para sorpresa de Junghwan, el pelirrojo se muestra atento y compresivo ante la historia. Una virtud del pelirrojo, que esta seguro que muchos envidian. Doyoung cuenta con esa gran empatía, que suele profesar en momentos difíciles. Colocandose en los zapaton de cada persona, incluso cuando estos le resultan sumamente apretados. La conversación pasa de medias a la recta final. Doyoung sigue conservando esa mirada inexpresiva, los rasgos de la familia Park se evidencian en él.

_ ¿Como sabes que no es otro estafador? _Doyoung rompe el silencio.

Junghwan hace una drastica pausa. _No tengo nada que perder Doyoung. _

Doyoung resopla. _Tienes un punto. _

_Tambien te estoy pidiendo tu opinión. _Junghwan se apresura a decir.

Doyoung niega absurdo. _Seras todo un adulto mañana, creo que puedes tomar esa decision por tu cuenta. _

Junghwan parpadea varias veces, lo habia olvidado completamente. Su cumpleaños numero veintiuno estaba a la vuelta de la esquina. Junghwan sintió como su estomago se arrugaba ante la idea, otra razón para reafirmar su obligatoria partida hacia América.

Casi podía escuchar a ese extraño abogado, que no paraba de decirle lo afortunado que era. Junghwan negó para si mismo, aun seguía teniendo problemas para confiar en cualquiera. No tenia otra opción, mas que aferrarse en aquellas que le habían demostrado lealtad.

_Necesito de tu opinión de todos modos, la necesito porque... quiero que me acompañes en este viaje. _Junghwan solto.

Junghwan solto aquella petición, mientras miraba al pelirrojo a los ojos. Este solo se le acerco, casi sintió el contraste de sus respiraciones. Doyoung se le quedo mirando, como si contemplase si lo que habia escuchado era correcto. Junghwan dejo que el silencio le respondiese al pelirrojo. Este respiro profundamente, mientras mordisqueaba sus labios. Junghwan agradeció ese gesto, el pelirrojo parecia estar contemplando la propuesta.

_ ¿Realmente quieres que viaje contigo a America? _

_Por favor. _

Junghwan se quedo esperando aquella respuesta, espero a pesar de no tener sus esperanzas completas. Espero por lo que creyo fueron siglos, mientras observaba el rostro del pelirrojo. Este seguía con esa exprecion pensativa, que lo estaba matando de la incertidumbre. No fue sino hasta el ultimo momento de su cordura, que el pelirrojo finalmente volvió a mirarle. Fijamente hacia sus almendrados ojos, que se regocijaron con aquella atención. Junghwan sabia la respuesta, la sabia sin siquera escucharla. 

Hola de nuevo, ha pasado mucho tiempo. Lo siento por ausentarme, pero mis obligaciones aumentaron notablemente en estos ultimos meses. Apenas tenia tiempo pare escribir y eso me bajo los animos a 0.Tengo miles de borradores a media y no puedo esperar a mistrarselos. Fueron meses dificiles, pero ya casi estoy terminando todos mis proyectos. Deseenme suerte. 

Este capítulo lo hice con mucho amor y creo que se nota en los dialogos, hay mucho amor en esta entrega, sin duda. Coloque Only de Lee Hi, creo que explica muy bien el encontrar el amor verdadero. Tambien hay muchas referencias de libros, he encontrado escritoras que me han inspirado muchisimo.