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Capítulo 2

Jeongwoo sintió como los rayos de luz acribillaban su vista, el canto de los pájaros taladraba sus oídos y las cobijas acaloraban su cuerpo. La sensibilidad de sus sentidos no era su mejor amiga, cuando se trataba de el día después de una bien merecida celebración. El cuerpo estaba más que listo para mostrar todos los efectos secundarios de sus excesos, cosa que no podía evitar, aunque quisiese. Jeongwoo no era capaz dejar esa vida de fiestero, la había tenido desde que empezó el instituto y ya no había vuelta atras.

Jeongwoo sentía la incomodidad en su cuerpo, pero siguió durmiendo a pesar de todo, talvez el descanso se llevaría toda su resaca. Jeongwoo tanteo entre las sabanas hasta encontrar el control del aire acondicionado, le costó encontrarlo su buen par de segundos, pero termino consiguiendo prender el aparato. La agradable temperatura se fue apoderando de su cuerpo, se metió entre las sabanas para evitar la luz del sol. Jeongwoo seguía teniendo sus airpods en las orejas, se limitó a encenderlos para evitar escuchar a los molestos pájaros.

Jeongwoo se empezó a quedar dormido otra vez, la verdad es que, ya era experto en manejar resacas, sabía exactamente que tenía que hacer. Todo iba muy bien en su basurero, es decir, su habitación. Claro que, la paz le duro muy poco, cuando su hermana abrió la puerta con la fuerza de un huracán y la traqueo contra la pared emitiendo un eco espantoso. Jeongwoo termino escuchando todo a pesar de los audífonos, trato con todas sus fuerzas de fingir que seguía dormido, pero Moonhee ya se sabía ese juego.

_Levántate borracho. _

Moonhee se dedicó a jalarle las sabanas a su hermano, mientras que este forcejeaba para que no se las quitase. Moonhee era considerablemente alta, también era atlética, así que no le costó quitarle las sabanas a su hermano. Jeongwoo termino rodando de su cama hasta el piso, junto con la sabana y un par de almohadas.

_ ¿Me quieres matar? _Jeongwoo chillo.

_Levántate antes de que nuestros padres piensen que te dio un coma etílico. _

_ ¿Por qué debería levantarme temprano? _Jeongwoo se froto la cara con ambas manos. _ Es fin de semana Moonhee. _

_Todos nos levantamos temprano a empacar para la mudanza, todo eso mientras tu roncabas. _Moonhee hizo señas mientras hablaba.

_ ¿Para la que? _

_Mu-dan-za. _Moonhee dividió la palabra en silabas.

_No lo sabía. _Jeongwoo murmuro, estaba desorientado. No sabía si era por el golpe, por estar con resaca o por ambas cosas.

Moonhee rodo los ojos en blanco, termino con una mirada severa. _ ¡Como ibas a saber! Si nunca paras un pie en casa. _

_Habla más bajo, me duele la cabeza. _Jeongwoo se tapó las orejas con dos almohadas.

_Es porque tienes resaca, te la mereces por borracho. _

_Moonhee... _

_Levántate de una vez o yo misma te bañare con agua fría. _Moonhee amenazo.

Jeongwoo vio como la puerta era cerrada, de la misma forma que fue abierta. Nada le quito más la calma que eso, a veces su hermana era una persona muy severa, pero sabía que solo quería cuidarlo. Jeongwoo se compuso del suelo para ir a tomar un baño, muy consciente de que tenía que ser frio, para hacerlo ver lo más sobrio posible.

Jeongwoo entro al cuarto de baño sin mucha ropa que quitarse, siempre dormía con pocas piezas encima, especialmente si llegaba borracho. Jeongwoo sintió su piel pegajosa, tenía licor regado en partes de su cuerpo y su cabello olía a cigarrillo. Se tomó un tiempo para ver su rostro en el espejo, dejo salir un gran suspiro al reconocerse a sí mismo, de una manera totalmente irreconocible. Las ojeras que reposaban a lo largo de sus orbes, sus labios resecos y el rastrojo en su mentón. Jeongwoo era de piel morena, pero esta estaba un tanto decaída. Se limitó a meterse en la regadera con agua fría, su sensible yo se molestó de inmediato.

_Mier..._ Jeongwoo se mordió la lengua para no terminar la grosería.




Jeongwoo bajaba las escaleras mientras trataba de acomodar su cabello húmedo, el cual no estuvo dispuesto a arreglar. Jeongwoo había demorado mucho tiempo componiendo su rostro, para que no se notase lo destruido que estaba. Lucia ropa casual y no su habitual traje de vagabundo. Jeongwoo se dirigió a la cocina con una cara de descontento, que consistía en un ceño fruncido, que se combinaba con una nariz arrugada y unos labios en puchero.

_Mamaaa..._Jeongwoo arrastro la palabra hasta llamar la atención de su madre. _ Moonhee dice que nos estamos mudando, dile que es una menti... _

Jeongwoo paro en seco cuando vio a su alrededor, todo estaba en cajas, la casa estaba media vacía. Jeongwoo abrió sus ojos al cien por ciento, su boca se formó en una o. Miro a su padre Doojoon, a su madre Hyeyoon y a su hermana Moonhee. Jeongwoo se había quedado sin palabras, espero a que alguno de ellos dijese algo, alguna cosa como que era día de los inocentes, pero ni siquiera era el día de los inocentes.

_Nos estamos mudando cariño. _ Hyeyoon hablo apaciblemente.

_Eso es más que obvio. _Jeongwoo silbo. _ ¡Que les vaya bien! _Se encogió de hombros y se dio media vuelta. _Me regreso a los cuartos de la universidad. _

_ ¿A dónde crees que vas? Tu vienes con nosotros. _Doojoon llamo la atención de su hijo.

Jeongwoo paro en seco. _ ¿Que? _

_Me he propuesto ahorrar dinero y mantener a mi familia unida. Te vas a mudar con nosotros, despídete de tu vida en esos cuartos. _

_No quiero. _Jeongwoo aflojo el cuerpo tirándose al piso.

Dooyoon se paró frente al chico mientras este estaba en el piso, negó con la cabeza mientras miraba a su hijo, para luego mirar a su esposa.Combatió entre si debía encargarse del berrinche de su ya bien crecido hijo o dejar que su otra hija solucionase el problema. Se decidió en dejar a su hijo ser, más quería ser claro con sus ideales, quería pasar tiempo con su familia, a las buenas o las malas y eso incluía todo tipo de artimañas de padre empalagoso.

_Deja de hacer un berrinche. _

_Pero..._

_Sin peros. _Dooyoon sentencio. _Levántate del piso, la decisión está tomada. _




Jeongwoo no había sido más que un niño consentido durante toda su vida, incluso con su intento vida independiente, después de todo era un niño de mami y papi. Jeongwoo no se sorprendía de que sus padres hayan cortado su falsa independencia de un solo tajo, al final del día, era un despilfarrador de dinero, un peligro para sí mismo. Jeongwoo no pasaba tiempo con la familia, prefería pasársela de fiesta con sus amigos, que no eran tan amigos, si no estaban bebiendo o entrenando.

Jeongwoo se rego en su cama, cerró los ojos mientras pasaba sus manos a través de su cabellera. Quería gritar muy fuerte en esos instantes, pero no mostraría más inmadurez frente a sus padres, si les seguía la corriente unos meses, talvez podría conseguir hacerles creer que podía seguir siendo "Independiente". Jeongwoo se colocó una almohada en la cara, termino acallando un grito a todo pulmón ¿A quien quería engañar? eso era algo imposible. Jeongwoo era incapaz de ocupar su tiempo en otra cosa que no fuese divertirse, si jugaba vóley como lo hacía, era porque le divertía, no podía decir lo mismo de sus estudios, mucho menos de ponerse a trabajar.

Le molestaba tener que mudarse con sus padres, aparte recibiría menos dinero cuando viviese con ellos ¿Cómo rayos sustentarían que necesitaba dinero para irse a beber o para viajar a donde se le diera la gana? Jeongwoo estaba perdido, su fiesta se había acabado, por lo menos hasta que supiese que hacer. Jeongwoo tomo su celular entre sus manos, lo apago de golpe apenas vio las notificaciones, no quería explicarle a nadie su sorpresiva mudanza, ni siquiera quería imaginar a donde se mudaría la familia o en qué universidad tendría que inscribirse.




La mañana se pasó muy rápido, a Jeongwoo le toco cargar más cajas, de las que cargo cuando se mudó a los cuartos de la universidad. Jeongwoo no tenía más que un par de piezas de ropa, sus útiles escolares y cosas de aseo personal. Los cuartos de la universidad de Seul, no daban muchas ganas de tener muchas cosas en la habitación, por lo que Jeongwoo siempre llevaba todo a cuestas. Eso facilito mucho las cosas, llevaba su maleta cuando regreso de la celebración, no tendría que volver a la universidad por sus cosas, ni enfrentarse a ningún tipo de despedida, Jeongwoo odiaba las despedidas.

_Jeongwoo. _

_ ¿Si mamá? _Jeongwoo paro de golpe para escuchar a su madre.

_En la mesa hay algo para ti. _

Jeongwoo vio cómo su madre señalaba directamente a la mesa del comedor, en esta se encontraba una sopa de miso. El plato lucio humeante en su espera, casi de manera socarrona, demostrándole que había sido descubierto. Hyeyoon era perspicaz , se había dado cuenta de la hora de llegada de Jeongwoo y del aspecto con el que había amanecido. Preparo la sopa de miso, más que como un gesto, fue una advertencia.

Jeongwoo apretó la mandíbula, miro a su madre. _No tenías por qué hacerlo. _

_Si yo no lo hago ¿ Quién lo hará por ti? _ Hyeyoon se acercó a su hijo y ocupo una mano en su rostro.

_Puedo cuidarme solo. _Jeongwoo bajo la mirada, ni siquiera podía verla a los ojos.

Hyeyoon levanto el rostro de Jeongwoo para que la encarase. _Eso no es lo que dice tu cara, consume todo lo que está en el plato, te hará sentir mucho mejor. _

Hyeyoon soltó el rostro de Jeongwoo, reprimió una mirada de tristeza, no quería seguir incomodando a su hijo. La mujer se limitó a alejarse poco a poco, estaba a punto de irse, cuando Jeongwoo tomo su mano. Hyeyoon se giró a ver a su hijo, él tenía esa característica mirada de arrepentimiento, que no solía combinar con sus ojos rasgados.

_Mamá. _

_Dime. _ Hyeyoon le regalo una sonrisa a su hijo.

_Gracias. _Jeongwoo sonrió de vuelta.

_Soy tu mamá, nunca lo olvides. _

Jeongwoo asintió mientras soltaba la mano de su madre y esta se iba a empacar el resto de las cajas. Jeongwoo se sentó en la mesa a comer su sopa, lo hizo con calma, sus manos a aun temblaban. Su madre lo veía en transparente, ya no podía ocultarlo. Tenía problemas con la bebida, talvez la tenía, un poco, solo un poquitito. Jeongwoo se atoro con un simple sorbo, también debía tragarse sus pensamientos, para que su madre no los leyese a su antojo.




El viaje en auto fue un largo sueño, lastimosamente olvido acomodar su cuello y termino despertándose a mitad del viaje. Su padre conducía como en los viejos tiempos, esos en los que iban a la granja y se quedaban todo el verano a vacacionar. Jeongwoo sonrió ante el recuerdo, la verdad es que extrañaba a su familia, especialmente a su hermana.

_ ¿Estás pensando en tu enamorada? _Moonhee despertó a Jeongwoo de su ensueño.

Jeongwoo cabeceo, estaba somnoliento. _Cierra la boca Moonhee, sí que fastidias. _

Moonhee le dio un zape a Jeongwoo. _Soy mayor que tú, así que me respetas. _

Jeongwoo se quejó y se sobo la cabeza. _Me duele la cabeza, déjame dormir en tu regazo. _Jeongwoo se fue acomodando más cerca de Moonhee.

_No. _Moonhee se cruzó de brazos, empujo a Jeongwoo con sus hombros.

_Por favor. _Jeongwoo jamaqueo a su hermana.

_Te aguantas. _

_Moonhee. _Jeongwoo chillo.

Moonhee miro a su hermano de reojo, este la miraba con esos ojos lastimeros, la hacían querer llorar, su hermano seguía siendo un niño, pero atrapado en el cuerpo de un hombre. Se supone que debía ser una hermana mayor que cuidara de su hermano, pero más parecía que lo estaba consintiendo y en cualquier momento su responsabilidad se le saldría de las manos.

Moonhee negó repetidas veces, una mueca surco su rostro. _Solo esta vez. _ Tomo la cara del chico. _ Mira nada más esas ojeras. _ Se acercó a olerlo. _ Apestas a alcohol. _

Jeongwoo le tapó la boca a Moonhee. _Baja la voz, se supone que no bebí tanto. _

Moonhee se zafo de Jeongwoo. _Mamá te hizo sopa de miso esta mañana, ella solo hace eso cuando te ve moribundo. _

_Cierto. _Jeongwoo silbo.

_Jeongwoo. _Moonhee sonó severa.

_¿Si?_

_Piensa en esto como un nuevo comienzo, no puedes seguir comportándote así. _

_ ¿Así como? _Jeongwoo se hizo el desentendido.

_Jeongwoo. _Moonhee persistio severa. 

_ ¿Cómo un inmaduro? _Jeongwoo sugirió, dando en el clavo.

_El primer paso es aceptarlo. _ Moonhee explico con preocupación. _ ¿Lo aceptaras? _

_No. _Jeongwoo sonrió absurdamente, se lo tomo como un chiste.

Moonhee rodo los ojos en blanco. _ ¿Sabes qué? Mejor duérmete, hablaremos cuando se te pase la borrachera. _

Jeongwoo le hizo caso a su hermana, no porque fuese un buen hermano, sino porque estaba exhausto. Si, así le llamaban los borrachos a la borrachera, estar exhausto y si no puedes preguntarles. Jeongwoo se relajó en el regazo de su hermana, justo como cuando era un niño y nada le importaba demasiado. Jeongwoo se sentía protegido cuando su hermana estaba cerca, pero nunca había sido capaz de demostrárselo con palabras. Jeongwoo era un chico de palabras profundas, más no estaba acostumbrado a decirlas.

Moonhee llego a decirle que era porque nunca se había enamorado, Jeongwoo se empeñó en negarse con tan solo quince, pero ya tenía veinte y seguía siendo el mismo. Jeongwoo nunca se había enamorado, nunca le habían roto el corazón. El chico siempre escapo de esas experiencias, ahora parecía ser demasiado tarde, como para no enamorarse avasalladoramente y que su corazón se rompiese en mil pedazos. Pasaría porque tenía que pasar y eso le picaba en lo más profundo de su conciencia.




Jeongwoo caminaba entre una gran cantidad de burbujas, estas revoloteaban a su alrededor y brillaban en colores contra la luz. Se preguntó quién era el que estaba produciendo tal cantidad de burbujas y fue ahí cuando llevo sus ojos a lo que parecía ser un niño. El niño soplaba las burbujas sin cesar, soplaba tantas burbujas, que cubrían su cara completamente. Jeongwoo se puso curioso ante aquel niño y decidió acercarse para descubrir quién era. Cuando Jeongwoo se acercó lo suficiente, empezó a explotar las burbujas, con el fin de descubrir el rostro del niño. Jeongwoo fue descubriendo, intento descubrirlo poco a poco, era capaz de ver el cabello azabache, le faltaba poco para ver la cara de su compañero de juegos, pero justo antes de explotar las burbujas que faltaban, termino despertando de golpe.




Jeongwoo supuso que los sueños habían vuelto, esos en los que jugaba con su amigo de infancia, del que no podía recordar más que sus momentos compartidos. Cada que intentaba descubrir su aspecto, el sueño terminaba de un solo golpe. Jeongwoo no tenía ni a quien preguntarle, ya que para esos tiempos lo cuidaba su abuela, la cual había fallecido hace años. Jeongwoo se terminó acostumbrando a esos repentinos sueños, llevaba teniendo esos sueños hace dos años, pero estos iban y venían entre los meses.

_ ¡Ya! _Moonhee grito.

_ ¿Qué quieres ahora? _

Jeongwoo despertó de aquel sueño, con la misma cara atónita de siempre. Recibió un golpe en su cabeza, se dio de cuenta que había babeado la falda de su hermana. Jeongwoo coloco mala cara hacia su hermana, pero volvió a acurrucarse en su regazo. El quería dormir un poco más, pero ya habían llegado a su destino.

_Babeaste mi falda. _

_ ¿Ya llegamos? _Jeongwoo hablo con voz de recién levantado.

_Mira a tu alrededor, por supuesto que sí. _

_Lleva mi débil cuerpo hasta mi nueva habitación. _Jeongwoo fingió desmallarse.

_Corta la mierda hermanito, será mejor que levantes tu trasero. _Moonhee ajito en cuerpo de su hermano para que se despertase por completo.

_ ¿Ese es el ejemplo de lenguaje que me quieres dar? _Jeongwoo se levantó con cara de ofendido.

Moonhee rodo los ojos en blanco. _Me pones de los nervios, sácate de encima. Mi falda es un desastre, todo por tu culpa. _

_Sé que no soy el único que duerme sobre ella ¿No es así? _Jeongwoo levanto sus cejas con diversión.

Moonhee sonrió mientras negaba. _Yoshi es diferente, él no es un baboso, como tú. _

_ ¿Los amigos hacen eso? Me acabo de enterar. _

_Deja de picarme, Yoshi es como un hermano. _

Moonhee se bajó del carro, dejando solo a Jeongwoo. Jeongwoo se acostó en el asiento de atrás mientras ella tomaba sus cosas, dudo unos segundos en decir lo que quería decir, pero se atrevió a arriesgar su vida, solo para molestar a su hermana.

_¿Deberíamos preguntarle a él? _

_ ¿Perdón? _Moonhee se apartó la cabellera azabache del rostro.

_Nada. _Jeongwoo puso cara de inocente y lo peor es que Moonhee se la creyó.




Jeongwoo cargaba un montón de cajas hasta su nueva casa, debía admitir que era bonita, lo suficiente como para hacerlo olvidar su berrinche. La cosa era que, extrañaría su universidad, extrañaría su viejo equipo. Jeongwoo no sabía que haría sin el vóley, no era capaz de dejar de jugar por más de un día. Hablando de vóley, casi se le cae la caja de las manos, cuando vio la cancha de vóley de los vecinos.

La cancha resaltaba en la parte de atrás de la propiedad, lucia muy profesional como para venir incluida con la casa, probablemente la habían anexado a los planos principales. Su mentalidad de arquitectura parecía estar dando frutos, pudo deducir muchas cosas con tan solo un vistazo. Le dio otro vistazo a la cancha, logro divisar a un chico que practicaba.

_Ese tipo se parece a... _ Jeongwoo relaciono violentamente cuando este se giró y creyó ver a alguien que conocía. _ No, ni en un millón de años Jeongwoo, estás viendo cosas donde no las hay. _ Jeongwoo sacudió sus cienes, talvez estaba pensando demasiado en Haruto, que hasta lo veía en todas partes. La competitividad de su corazón, seguro era eso.

Jeongwoo se dio por satisfecho con sus asunciones y siguió su camino de vuelta a la casa. Siguió el trajín por horas, hasta que la familia termino. La cosa es que, solo era meter las cajas, aun tocaba ordenar todo al siguiente día. Jeongwoo pensó como su padre se estaba tomando en serio lo de ahorrar dinero, como si la fábrica que tenía su familia no diese suficiente dinero, si es que eran jodidamente ricos, pero su padre siempre había sido un tacaño. El padre de Jeongwoo era un tacaño, pero Jeongwoo era experto en tacaños o eso era lo que pensaba hace unas horas atrás.




Jeongwoo se dejó caer en el sillón, se sentía exhausto. Estaba a punto de tomar una buena siesta, cuando el timbre de la puerta principal sonó. Jeongwoo se hizo el desentendido, pero el timbre seguía sonando, es que había personas insistentes y se lamentó por eso.

_Jeongwoo, ve a abrir. _ Hyeyoon grito desde uno de la cocina.

_ ¡Que valla Moonhee! _Jeongwoo grito de vuelta.

_Moonhee fue a verse con Yoshinori, deja de ser tan flojo. _

_No quiero. _Jeongwoo se acomodó en el sillón, dispuesto a ignorar a su madre.

_No me hagas contar. _

_Bien. _

Jeongwoo se levantó pesadamente, muy pesadamente camino y se plantó como una roca en la entrada. Le toco abrir la puerta, ni siquiera se molestó en mirar por las cámaras. Una vez ocupo sus ojos en esa persona, sintió que se le bajaba la presión o más bien se le subía la presión, no estaba muy seguro de lo que sentía.

_No hagas como que no sabes que eres mi vecino, te vi observándome mientras jugaba. _

Haruto le dio una mirada de arriba abajo a Jeongwoo. El japonés ocupaba un pastel entre sus manos, pero sin esa característica sonrisa de bienvenida, que te dan los vecinos al mudarte. Jeongwoo ignoro el hecho de que Haruto lo repaso con la mirada, el había hecho lo mismo hace un rato. Jeongwoo se concentró en el pastel de red velvet que estaba justo al frente.

_Así que eras tú. _Jeongwoo sonó coloquial.

Haruto parpadeó varias veces, tratando de tener paciencia. _Traje un pastel de bienvenida, debo aclarar que me obligaron, en mi vida te regalaría un pastel. _

Jeongwoo se encogió de hombros, mientras seguía hipnotizado por el pastel. _Pastel es pastel, anda dámelo. _

Haruto alejo el pastel de las manos de Jeongwoo. _Prefiero dárselo a tus familiares, no confió en ti. _

_ ¿Por qué? _

_Somos enemigos, nos odiamos. _Haruto murmuro.

Jeongwoo dejo que una sonrisa surcara su rostro, una muy maliciosa, para ser exactos. _Pues te jodes, porque el pastel es para tus nuevos vecinos y eso me incluye a mi también. _

Haruto respiro profundamente, se resignó por completo. _Tienes razón, tómalo. _

Jeongwoo tomo el pastel de las manos de Haruto, el cual pudo sentir una especie de electricidad cuando sus dedos se rozaron, algo así como una calma antes de la tormenta. Jeongwoo sonrió una vez más mientras miraba el pastel, el cual lucia delicioso a simple vista, pero se le ocurría hacer algo con este, algo mucho más delicioso que comerlo.

_No ya no lo quiero, puedes comerlo tú . _

En un movimiento certero, Jeongwoo estampo el pastel en el rostro de Haruto. Jeongwoo vio como el pastel se deslizaba de sus manos, luego se deslizaba en la cara de Haruto y caía al piso de un porrazo. Jeongwoo trato de mantener un rostro serio, pero termino explotando en risas mientras veía a Haruto estar totalmente petrificado. Haruto estaba a punto de partirle la cara a Jeongwoo o por lo menos la idea ya había surcado su subconsciente. Solo era cuestión de ejecutar una paliza en esa cara, pero cuando la puerta principal fue abierta, por lo que parecía ser la madre de Jeongwoo, sus ilusiones se terminaron yendo al caño.

_ ¿Qué es lo que exactamente está pasando aquí? _ Hyeyoon se quedó atónita ante la escena.

Jeongwoo se giró con una mirada inocente, su risa desapareció de golpe. _Tropecé mientras el vecino me entregaba el pastel y terminé estampándoselo en la cara. _

Hyeyoon miro todo con total incredulidad, pero decidió darle un voto de confianza a su hijo. _  ¿Es eso verdad chico? _

_Si... _Haruto mintió, no sabía porque, solo lo hizo.

_Lamento mucho lo que mi hijo hizo, a veces es un poco... _

_No se preocupe, lo sé de antemano. _

_ ¿Entonces se conocen? _ Hyeyoon indago, era una mujer curiosa.

_No... _Jeongwoo contesto.

_Si... _Haruto contesto.

_Más o menos. _Jeongwoo dijo entre dientes.

Hyeyoon los miro a los dos sin entender demasiado. _Entra a casa con mi hijo, él te ayudara a limpiarte. _

_ ¿Yo? _Jeongwoo chillo.

_ ¿El? _Haruto chillo.

_En efecto. _




Haruto caminaba junto a Jeongwoo a lo largo del pasillo principal de la mansión, no tenía idea lo grande que era la propiedad, nunca le había prestado demasiada atención, hace mucho que nadie vivía alado de su familia. De todas las personas, tenía que ser Jeongwoo, tenía la peor de las suertes. Llegaron a lo que parecía ser una cocina, mas no tenía muchas cosas instaladas, la casa parecía estar en remodelación y mudanza al mismo tiempo.

Jeongwoo se detuvo mientras señalaba el lugar. _ ¿Lo hacemos en la cocina? _

_ ¿Que? _

_Limpiarnos el pastel. _Jeongwoo bufo.

_ ¡Ah! _ Haruto se sonrojo. _ Su-pon-go que sí. _Le costó unir la respuesta, su mente estaba volando.

Jeongwoo se le quedo mirando a Haruto. _ ¿Qué pensaste? _

_Nada... _Haruto esquivo la mirada de Jeongwoo.

_Define nada. _Jeongwoo analizo a Haruto.

_Córtala Park. _

_ ¡OK! _ Canturrio Jeongwoo. _ Puedes ir primero, lávate en el fregador. _

_Espera un momento. _

_ ¿Que? _

_Tú me ensuciaste. _Haruto sonrió con superioridad. _ Tú me limpiaras. _

_ ¿Enloqueciste Watanabe? _Jeongwoo silbo.

_La que va a enloquecer es tu madre, cuando sepa la travesura que me hiciste. _

_Me estas poniendo entre la espada y la pared. _

_Me temo que sí. _

Jeongwoo oprimió sus reverendas ganas de matar a Haruto, no es como que era alguna novedad. _Tú ganas, nada mas no te acostumbres, no volverá a pasar. _

Jeongwoo toma el hombro de Haruto y lo sienta en una de las sillas de la cocina. Decide tomar un paño limpio para limpiar el rostro de Haruto, pero una vez que acerca el paño al rostro, este lo toma de su muñeca para detenerlo. Ambos se quedan así unos segundos, mientras se miran intensamente.

_Se cuidadoso. _Haruto siseo.

_Suelta. _Jeongwoo siseo.

Jeongwoo trato de zafarse del agarre, pero termino acercándose más a Haruto, sus cuerpos estaban relativamente cerca. Jeongwoo trago hondo ante la mirada de Haruto, porque era la primera vez que estaba tan cerca de esta, era aún más imponente a centímetros de distancia. Haruto se concentró en como la manzana de Adán se movía a lo largo del cuello de Jeongwoo, sabía que lo había puesto un tanto nervioso. Haruto soltó el agarre con rapidez, Jeongwoo no se lo esperaba del todo.

_No estamos en la cancha ¿Por qué insistes en seguir jugando? _Haruto alego.

_No estamos en la cancha ¿Por qué insistes en que eres el ganador? _Jeongwoo contrataco.

Jeongwoo tomo el mentón de Haruto y paso el paño a lo largo del rostro. Jeongwoo intento concentrarse en limpiar el rostro del japonés, incluso bajo su fuerte mirada. Ni en un millón de años, se imaginó ser el vecino del japonés, mucho menos, estar limpiando su rostro en esos momentos. Las manos de Jeongwoo llegaron a temblar un par de veces, no era de metal y no necesitaba tener más de dos dedos de frente para aceptar que Haruto era guapo. Todo eso no lo hacía odiarlo menos, no iba a cambiar absolutamente nada o eso era lo que él creía.  





Me demore mucho en escribir este capitulo, se supone que lo tenia que subir pare el cumpleaños de Jeongwoo.

Feliz cumpleaños a Jeongwoo, incluso si son tardios. 


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