Jeongwoo se sumía en ese característico tintinear de las maquinas, jurando que nunca se había sentido tan solo entre cuatro paredes. Los hospitales seguían siendo su lugar menos favorito, había prometido no volver a pisarlos nunca más. En esos momentos Jeongwoo, había roto miserablemente aquella promesa. Cerro los ojos en vergüenza completa, los mantuvo así por un momento. Trato de ignorar cada sonido alrededor, relajarse en su propia soledad. Tratar de encontrar ese valor, para manejar su desastre de sentimientos.

_ ¿Cómo estas hermanito? _

Jeongwoo apretó sus ojos al escuchar la voz, se trató de convencer a sí mismo. Debía ser algo en su mente, su hermana no se podía haber enterado. Una caricia en sus ojos lo desmintió, tuvo que abrirlos de inmediato. Cerciorándose de que era ella, era su hermana Moonhee. Lo miraba fijamente a los ojos, mientras los de ella tenían lagrimas secas. La imagen le rompió el corazón, ella seguía siendo su hermana.

_Prometo que sobreviviré. _Jeongwoo habla en un hilillo.

_Me encargare de que eso suceda. _

Moonhee tiende su mano hasta tomar la de su hermano, entrelazándolas con fuerza. Demostrando que sigue siendo su hermana mayor y que se debe a si misma a su tarea. Proteger a su hermano debe ser siempre su prioridad, sin importar los sacrificios que haga. Reconfortarle en los momentos difíciles y aceptar cada error que comete como humano.

_No tienes que ser tan necia. _Jeongwoo murmura por lo bajo.

_No quiero que te pase nada malo otra vez. _La voz de Moonhee se resquebraja.

Jeongwoo la ve en un semblante diferente a todos los anteriores, ella luce como si se estuviese rompiendo poco a poco. Lo peor de todo es que, no sabe específicamente que hacer. La frustración lo haría decir tantas cosas, pero ninguna de ellas parece poder ayudar a la chica. El daño ya está más que hecho, se lamenta tanto.

_Yo tampoco quiero seguir sufriendo o hacer a otros sufrir. _Jeongwoo siente como su voz tiembla.

_Deja de pensar en lo que sienten los demás por un momento. _Moonhee habla apaciblemente.

La chica limpia las lagrimar que corren en los orbes de su hermano, como si sus orbes no estuviesen iguales. La imagen parece llena de ironía, pero las cosas son como son. Moonhee siempre cuidara de su hermanito mayor, sin importar el porqué.

_ ¿Que? _ Jeongwoo suelta.

_Es hora de que le prestes atención a tus propios sentimientos. _Moonhee explica lentamente.

Jeongwoo niega rotundamente. _Reprimirlos se me da mucho mejor. _

_Te estás haciendo mucho daño Jeongwoo. _Moonhee mira fijamente a Jeongwoo.

_No. _ Jeongwoo siente como su voz se quiebra.

Moonhee se acomoda para brindarle refugio a Jeongwoo, justo entre sus brazos. Como cuando solo eran unos niños y Jeongwoo siempre lloraba en su pecho. Esta vez era parecido, pero mucho más doloroso. Los problemas de un adulto, no eran comparación con los de cuando eran unos niños. Moonhee lo sentía en su pecho, tiritando del miedo. Empapando sus lágrimas en su blusa, tan cabizbajo.

_Jeongwoo mírame, por favor. _ Moonhee ruega.

Jeongwoo se despega de mala gana, para llevar su atención hasta su hermana. Escucha esa lluvia repentina, tan característica de la estación. El invierno está cada vez más cerca, con su cruel frio amenaza la soledad. Esa que ocupa los corazones rotos, matándolos poco a poco.

_ ¿Que? _Jeongwoo hace un amargo.

_Jeongwoo no puedes seguir así..._ Moonhee jadeo. _ No puedes seguir ignorando lo que pasa aquí en tu cerebro, ni lo que pasa aquí en tu corazón. _ Moonhee señala ambos lugares. _No puedes seguir tratando de inhibir tus sentimientos con alcohol. _ Moonhee mira fijamente a Jeongwoo. _ ¿Que vendrá después Jeongwoo...? ¿Drogas? ¿La muerte? _ Moonhee traga hondo. _ ¿Sabes qué...? Ahora que lo pienso bien, no soy yo a la que le debes pedir perdón, sino a ti mismo. Te has estado engañando todo este tiempo y es hora que te pidas disculpas. _ Moonhee acaricia el rostro de su hermano. _ Ojalá te logres perdonar a ti mismo, como ya yo lo he hecho contigo. _

Mashiho remecío su cuerpo, con ayuda del trapecio en el que estaba. De a poco solamente, no quería agitarse demasiado. Tenía un mensaje que dejar y un viaje al cual ir. Tenía que mantener su cuerpo debajo de la capota que ocupaba, debido a la llovizna que surcaba el lugar. Seguía esperando la llegada de alguien, esperaba que se hiciese presente.

_ ¿Me llamaste Shiho? _

Mashiho escucho aquella voz, se giró solo un poco. La persona que había hablado, se encontraba en el trapecio a su lado. Solo fue cuestión de verla unos segundos, para que las memorias le llenaran sus pensamientos. Mashiho sonrió de a poco, recibiendo una sonrisa de parte de la chica.
_Jiwoo. _Mashiho hablo en un hilillo.

_Ha sido un tiempo. _Jiwoo se le quedo mirando al japonés.

Mashiho se tornó cabizbajo. _Si. _

Una simple conversación entre viejos amigos, se había extendido durante casi una hora. Entre todo lo que no se habían contado durante su lejanía, hasta la razón por la que ambos estaban ahí. Entre silencios cómodos y sonrisas medianas. Sus trapecios remeciéndose de a poco y el característico sonido de la llovizna. Todo fluyo divinamente, como si el tiempo no hubiese pasado.

_Vuelve a explicarme porque me entregas esta carta. _

Jiwoo sostuvo la carta entre sus manos, esta estaba sin sellar. En ningún momento sintió ganas de darle una ojeada y dudaba que sentiría algo así. Podía estar celosa de que los Park le hayan arrebatado la atención del japonés, pero también entendía que este estaba enamorado. Estar completamente enamorado, ella había olvidado esa sensación. Si le preguntasen como se sentía, probablemente no lograría describirla con precisión.

Mashiho suspiro. _Porque tengo miedo. _

_Creo que tú ya no tienes nada que temer. _Jiwoo soltó.

Mashiho se quedó pensando en aquello, talvez la chica tenía un poco de razón. Ya no tenía por qué tener miedo, no tenía específicamente nada que perder. Todo lo que alguna vez había tenido, ya estaba echado a la deriva. Muy lejos de su alcance y evidente manipulación. En pocas palabras, finalmente era libre.

_Ojalá mi mente pensase lo mismo en estos momentos. _

A pesar de toda su resolución mental, había ese pequeño problema. Un pequeño pero punzante agujón, que inyectaba ese miedo en sus pensamientos. Incapaz de librarse de este, sin dejar de estar en aquel lugar. Porque todo lo recordaba a lo que había perdido, todo lo hacía ver como un perdedor. Era hora de irse de aquel ambiente, empezar una nueva vida.

_ ¿De qué tienes miedo Mashiho? _Jiwoo se le quedo mirando a Mashiho.

Mashiho se le vino a la mente una sola cosa y esa cosa era Jihoon. Sabía que era la única persona capaz de, hacerle reconsiderar sus decisiones. Esa era la razón por la que había dejado la carta, más que por encontrarle con Lia. Sabía que ellos no estaban juntos y que probablemente Jihoon seguía solo.

_De enfrentarme a sus ojos otra vez, de no poder ser capaz de seguir mi vida sin ellos. _

Jiwoo jadeo. _Amar parece algo muy difícil. _

Donde sea que lo viese, el amor parecía la más difícil de las batallas. Desde los libros que leía, hasta las películas que veía. Jiwoo no presencio una demostración verdadera, que no incluyese dolor de por medio. Si el amor era así de doloroso, sabía que no quería amar. Dudaba que alguien fuese a convencerle de lo contrario, dudaba siquiera tener su propia historia de amor. Una que fuese de verdad, después de todo el karma que vivía.

Mashiho se le quedo mirando a Jiwoo. _Eso depende de ti. _

_ ¿De mí? _Jiwoo hizo un mohín.

_Si. _

_ ¿Por qué? _Jiwoo se le quedo mirando a Mashiho.

Mashiho miro a la nada. _Amar es algo que debe empezar en ti, debes aprender a amarte primero a ti mismo. Si no lo logras simplemente tú, nunca serás capaz de amar a otras personas. _

_ ¿Crees que yo pueda ser capaz de lograr ello? _Jiwoo busco la opinión del japonés.

Mashiho se le quedo mirando a Jiwoo. _Creo que lo has estado haciendo bien. _

_ ¿Que? _Jiwoo frunció el ceño.

_Cuida bien de todo cuando me valla. _

Mashiho se levantó del trapecio como si nada, Jiwoo se le quedo mirando con esa expresión extrañada. Sin entender la naturalidad del japonés, después de decir esa frase tan extraña. Frase que no sonaba tan extraña, cuando a su mente vino Junkyu. Jiwoo jadeo mientras unía cabos, pero negó casi de inmediato. Mashiho no podía suponer su cercanía con el chico, de esa manera. Jiwoo negó rotundamente, pero su cara ya ardía lo suficiente. Coloco su larga cabellera para medio cubrir su rostro, mientras alcanzaba a el japonés.

_Mashiho. _

Mashiho se giró para darle su atención a la chica, mientras esta jugaba con la carta entre sus manos. Jiwoo no supo decir nada en especial, solo tomo su mano castamente. Lo miro fijamente a los ojos y este solo la miro de la misma forma. Con esa mirada que usaba para reconfortarla y luego decirle que agradecía su amistad.

_Gracias por todo Jiwoo. _

Jiwoo suspiro ante la frase misma, no pudo evitar abrazar al japonés. Este se dejó como de costumbre, reconfortándose en su pecho. Incluso cuando había pasado mucho tiempo, seguía siendo de lo más natural. Juro que su amistad con Mashiho, era inmune a cualquier cosa y eso solo la motivaba a seguir siendo su amiga. Incluso si era en la distancia, siempre iba a estar ahí para el japonés.

Jiwoo está en ese primer día de trabajo, ese que nunca pensó que llegaría. por lo menos no trabajando de asistente. Se suponía que era una humilde maestra de prescolar. Pero ahora se miraba a sí misma en ese lugar, mientras mantenía un café helado en mano. Era lo que había pedido su jefe, de solo pensarlo se le arrugaba el estómago. Junkyu siendo su jefe, era su pesadilla hecha realidad. Lo miraba y simplemente lo odiaba.

_Míralo ahí, posando divinamente para las cámaras, no tienen que hacer tan evidente que sus visuales son superiores. _ Jiwoo resoplo. _ No puede ser que le esté coqueteando a la camarógrafa, ella podría ser su madre. _

_Hola. _

Jiwoo se giró sobre sus talones, viendo un par de chicas frente a ella. Eran tan altas y delgadas, que bien podía confundirlas con modelos. Si no fuese porque sus tarjetas decían secretaria, hubiese supuesto antes de hablar. Jiwoo saludo cortésmente como lo exigía su trabajo, estaba acostumbrada a las formalidades. Sus padres seguían siendo asquerosamente ricos, solo que ya lo estaba olvidando. No había pisado Hong Kong desde hace años, le gustaba mucho esa realidad.

_Hola. _

_Tú debes ser la nueva asistente de Park Junkyu. _

Una de las mujeres respondió, Jiwoo miro su identificación. La chica se llamaba Karina, el nombre le pareció americano. La tal Karina acomodo su larga cabellera con naturalidad, Jiwoo considero preguntarle qué productos utilizaba. Su cabellera brillaba como el amanecer, a pesar de ser negra como la noche.

_Si. _Jiwoo se animó a responder.

_No sabes lo afortunada que eres en ser su asistente, él es tan guapo en persona. _ La chica suspiro. _ ¿Cómo soportas verlo sin desmallarte? ¿Cómo es que puedes hablarle sin tartamudear? _

Jiwoo se fijó en la otra chica en cuestión, mientras consideraba seriamente la salud mental de la chica ¿En serio estaban tratando con el mismo Park Junkyu? porque ella lo encontraba tan normal. Jiwoo sacudió sus pensamientos de una u otra forma. Concentrándose en leer el nombre de la chica, tan extranjero como el anterior. La chica se llamaba Giselle, definitivamente eran extranjeras. Incluso cuando tenían esos característicos ojos rasgados, había algo de americana en ellas.

Karina le dio un codazo a su amiga, se le quedo mirando como si la regañara. Jiwoo solo pensó en ello, como la cosa más necesaria del mundo. Todos necesitamos una amiga que nos quite la estupidez, de los embrujos a los que los hombres nos hacen caer.

Karina volvió su atención hacia Jiwoo. _Te vimos estar alrededor de él con mucha naturalidad, se nota que eres muy profesional ¿De qué universidad te graduaste? Se nota que eres muy joven. _

_Yo... _Jiwoo se quedó en el aire.

De tantas preguntas que le habían hecho, realmente no sabía qué hacer. Ya había recibido una larga lista de reglas a cumplir en su contrato, contrato que había firmado sin leer ninguna. Jiwoo se arrepentía de no leer nada, pero no creía que las cosas se pusiesen horribles. Probablemente Junkyu la despediría en menos de una semana o eso era lo que más deseaba.

Karina rio falsamente. _Creo que te abrumamos con tantas preguntas. _

_Elije la que más te plazca responder. _Giselle apuro a Jiwoo.

Jiwoo mordisqueo su labio inferior. _ ¿Me creen si les digo que no hay nada que envidiar en mí? _

_No. _Sentencio Karina.

_N-o. _Deletreo Giselle.

_Jiwoo. _

Jiwoo pego un saltito ante aquella voz, sintiendo un poco de culpabilidad. Sin saber porque exactamente se sintió así, llevo su vista hasta donde venía esa voz. Dando una ojeada, que no le permitió ver la expresión de Junkyu. Supuso que era su típica cara estoica, parecía que no tenía otra expresión casual.

_ ¿Él te llama por tu nombre? _

Jiwoo asintió con cautela. _Si. _

Jiwoo miro la expresión de ambas chicas, cambio completamente en un chasquido. Ambas mirándose como siendo cómplices de sus pensamientos, mientras Jiwoo solo puso cara de no saber un comino. Pensó seriamente en preguntarles cual era el rollo, pero estaba más preocupada por como su espalda era quemada por cierta mirada.

_Ahora entiendo todo. _Karina silbo

Giselle pego una pequeña risilla. _Tu secreto está a salvo con nosotras. _

_ ¿Que? _Jiwoo chillo.

Jiwoo esta vez no se resaltó, sino que se le quedo mirando a ambas chicas. Si era lo que ella estaba pensando, entonces debía aclararles. De ninguna manera estaba metida en algo con Junkyu, ya suficiente con ser su sirvienta en la empresa. Jiwoo abrió la boca para aclarar de inmediato, pero no pudo reunir una frase sutil. Más bien quería decir una frase, incrustada de muchas groserías.

_Jiwoo. _

Jiwoo casi rueda sus ojos a la enésima llamada de parte de Junkyu, de repente se le pareció al mismísimo Junpyo. Definitivamente eran iguales, igual de mamones los dos. Ella había elegido Jihoo a por algo, él era el chico perfecto. Ella jamás entendió como Jandi podía ser tan tonta, solo por un tipo así de arrogante.

_Disculpen que... _Jiwoo se disculpó en un gesto.

Karina hizo un gesto elegante con una de sus manos, ya que con la otra sostenía unos papeles. Tan elegante como su rostro mismo, Jiwoo se le quedo mirando por un rato. Ya habría tiempo de explicarles el malentendido, mas tenía que ser lo más pronto posible. No quería rumores de ella en su empresa, mucho menos si estos no eran reales.

_No te preocupes lindura, nosotras tenemos que seguir trabajando también. _Karina guiño un ojo para Jiwoo.

_Buena platica. _Giselle canturreo.

Jiwoo asintió mientras se despedía a la velocidad de la luz, mientras esperaba que Junkyu no la sigues llamando sin parar. Camino hacia donde estaba mientras lo maldecía, probablemente lo estaba haciendo mucho aquel día. Cuando finalmente llego con sus pequeños pasitos, se plantó justo al frente de Junkyu.

Junkyu se encontraba sentado sobre el borde de una de las mesas del lugar, esas en la que se encontraba todo el maquillaje. Parecía haber tenido un descanso, mientras su maquillaje era retocado. Jiwoo observo como Junkyu le hacía un gesto a la maquilladora y esta se iba casi de inmediato.

_ ¿Es esto lo que quieres? _Jiwoo soltó.

Junkyu miro de arriba abajo a la chica _Por ahora. _

Junkyu alargo su brazo hasta el brebaje, tomándolo en un movimiento. Se aseguró de acercarse lo suficiente a la chica, mientras la miraba con curiosidad esas expresiones en ella. Junkyu decidió rozar sus dedos con los de la chica, pudo sentir como estos se alejaron en un reflejo.

_ ¡Ok! _

Junkyu diviso el brebaje, se veía decente. Nunca revisaba lo que pedía, pero con Jiwoo nunca se sabía. La chica era un tanto juguetona, por lo que recordaba en secundaria. No sabía si había cambiado, pero tenía un presentimiento de que no. Solo hacía falta ofrecerle la mano, para que esta tomase hasta el brazo. 

Junkyu le dio una mirada a Jiwoo. _ ¡Estoy sediento como un demonio! ¿Por qué rayos te tardaste tanto? _

_Estaba hablando con esas mujeres de allá. _Jiwoo señalo a las secretarias.

Junkyu bufo. _Pensé que eras más astuta. _

_ ¿Que? _Jiwoo frunció el ceño

Junkyu se le quedo mirando a Jiwoo. _ ¡Cómo se te ocurre hablar con las más chismosas de la compañía! _

_Yo... _Jiwoo encogió los hombros.

_No vuelvas a dirigirles la palabra. _Junkyu sentencio.

_No les dije nada importante. _Jiwoo soltó.

Junkyu hizo una mueca. _Ella no necesitan mucho para crear un escándalo. _

_ ¿Entonces porque simplemente no las despiden? _Jiwoo silbo.

Junkyu respiro profundamente, contemplando si decirle o no a la chica. Después de pensarlo un tiempo corto, decidió que era necesario. Jiwoo era tan adinerada como él, seguro sabia guardar secretos como cualquier hija de magnate.

_Son amantes de los accionarios de la empresa, su puesto está asegurado aquí por un buen rato. _

Jiwoo asintió ante la bomba que había soltado Junkyu, nada que no haya escuchado antes. Su padre también tenía una joven amante, que podía estar cerca de su edad. Sentía asco de solo pensarlo, pero al menos su padre se había separado de su madre. Ahora seguían viviendo en la misma casa, solo por malditas apariencias.

_ ¡Ok! _

_Trajiste lo que te pedí ¿No? _

Junkyu señalo el brebaje que tenía en sus manos y Jiwoo agradeció que este cambiase el tema. Realmente no quería ponerse a llorar por las andanzas de su padre, no quería recordar lo falso que era al fingir que amaba a su madre. Jiwoo se concentró en recordar lo esencial, cumplir con su trabajo.

_Lo hice. _ Jiwoo soltó.

_Buena chica. _Junkyu silbo.

Junkyu pego un sorbo al americano, pero este paso con dificultad. Una mirada de Junkyu hacia la chica, quien aún esperaba su respuesta. Una mueca que refirmo las facciones de su rostro, que lucía sutilmente cabreado. Junkyu se levantó ambas cejas mientras respiraba profundo.

_ ¿Sabe bien? _Jiwoo se le quedo mirando a Junkyu.

_Sabe horrible. _Junkyu soltó.

_ ¿Y ahora que hice mal? _Jiwoo chillo.

_Sabes muy bien que no me gusta lo dulce. _

Junkyu devolvió el vaso hacia la chica, este apenas había sido sorbido una vez. Jiwoo resoplo mientras lo veía en sus manos, lo apretó tratando de contener su rabia. Tenía que hacerlo antes de que, mandara al chico a la mierda. En serio quería hacerlo, pero, sus labios no pudieron evitar ser al menos sarcásticos.

_Se nota. _Jiwoo silbo.

_ ¿Que? _Junkyu alzo la voz.

Jiwoo miro fijamente a Junkyu. _Pudiste habérmelo recordado. _

_Es tu trabajo recordar cada cosa que te diga. _

Jiwoo bufo. _ "¡Que te lo quites!" _

Jiwoo recito una de los miles de frases indecentes, que le había dicho Junkyu. Observo como este miraba hacia los lados, antes de fijar su mirada en ella. Acercándosele en sobremanera, hasta quedar a centímetros de su rostro. Jiwoo no quito su cara en ningún momento, se permaneció seria ante la situación. No daría su mano a torcer, mucho menos frente a un Park.

_Deja de hacer una escena. _Junkyu mordió.

Jiwoo le dio una mirada de muerte a Junkyu. _Metete tu trabajo de mierda por... _

_ ¡Ya! _Junkyu alzo la voz.

_Por el trasero. _Jiwoo grito.

Sus manos actuaron casi por inercia, traqueando el brebaje en el piso. Este salpico por todo el piso, llegando a emitir un ruido tremendo. Todos en el lugar voltearon a verlos, pero ninguno de los dos miro. Jiwoo se dedicó a caminar fuera del lugar, mientras quitaba del camino a personas que ni conocía.

_Kim Jiwoo. _

Junkyu alzo la voz para la chica, pero esta hizo caso omiso a su llamado. Junkyu miro alrededor, todos lo miraban con la boca abierta. Era la primera vez que alguien, le ponía en su lugar frente a todos.

Doyoung llevaba un buen rato conversando de esto y de lo otro con Jihoon. Desde sus terapias para recuperar su hombro, hasta de la escena que había pasado con Junkyu y su nueva asistente. La conversación de la lesión no tenía mucho de qué conversar, especialmente porque el pelirrojo, solía acompañar a su hermano a la terapia.

Terminaron hablando un poco más de las interacciones, entre Junkyu y Jiwoo. Conversaron lo que había sucedido con cautela, incluso cuando no tenían que hacerlo. Todos en el lugar hablaban de lo mismo, ahora que Junkyu se había ido a cambiar.

_ ¿Crees que la despida? _Doyoung le dio una miradilla a Jihoon.

Doyoung noto como Jihoon miro a la nada y aprovecho para mirar su propia ropa. Para la sesión de fotos ocupaba ropa bastante cubierta, pero no lo suficiente como para ocultar las cortadas de sus manos. Estas aún estaban frescas, incluso cuando habían ocurrido durante la madrugada. Las cubrió con las mangas de su camisa de seda, esperando que Jihoon no las notase. Ya suficiente había sido mentirle a una de las maquiladoras, quien había descubierto las cortadas.

_No lo hará. _Jihoon silbo.

Doyoung volvió su atención hasta Jihoon. _ ¿Cómo estas tan seguro de ello? _

_Junkyu es así... le gusta sufrir. _

Doyoung escucho aquella frase, se escuchaba muy segura desde los labios de su hermano. Doyoung considero en creerle, Jihoon conocía muy bien a Junkyu. Talvez esa era la cosa más letal de su recurrente rivalidad, que también había hermandad entre ambos. Se habían criado juntos, conocían cada cosa del otro.

_Talvez. _Doyoung soltó.

Doyoung tomo sus cosas antes de irse, tenía muchas cosas que hacer. Tenía que ir a la casa de los Jung, verificar que Dohwan no haya tenido otra crisis. Cuando lo dejo en la casa de sus abuelos, el chico aun temblaba en consecuencia de su crisis. Tuvo que acompañarlo en hasta su cuarto, quedarse a su lado hasta que se calmase. Doyoung lo dejo profundamente dormido, después de que el chico aceptase tomar su medicación.

_ Detente ahí un momento Doyoung. _Jihoon busco la atención de Jihoon.

_Tengo algo de prisa Jihoon. _Doyoung aseguro.

_Necesito preguntarte algo antes de que te vallas. _

Jihoon busco la mirada del pelirrojo, este ya tenía todas sus pertenencias acomodadas. Este parecía tener prisa por ir a los cambiadores, probablemente porque conservaba la ropa de las fotos. Jihoon considero en dejar que este se cambiara, pero era una valiosa oportunidad para que se escapase.

Doyoung era muy inteligente al escaparse, algunas veces, ni siquiera sabía dónde rayos estaba el pelirrojo. Tanto que tuvo que contratar a alguien que lo cuidase y en parte lo vigilase. Espero que su hermano estuviese más cuidado con ello, pero fueron otras cosas de las que reparo.

_ ¿No puede ser en otro momento Jihoon? _Doyoung hablo rápidamente.

_No..._ Jihoon sentencio. _ ¿No te parece que ya has engañado a tu familia lo suficiente? _

Doyoung trago hondo. _ ¿Que? _

Jihoon miro hacia los lados. _Te daré la oportunidad de que me digas lo que estás haciendo. _

_No sé de qué estás hablando. _Doyoung miro fijamente a Jihoon.

Jihoon solo se quedó mirando a su hermano, sin poder creer lo que estaba presenciando. Sabía muy bien que Doyoung le estaba mintiendo, debido a las pruebas que había conseguido. Mas si no fuese por esas pruebas, le hubiese sido difícil de aceptar. Doyoung miraba a los ojos mientras te mentía, con ese rostro prendado de la más pura inocencia. Era casi imposible que dudases de él, era casi imposible que no quisieses ponerte de su lado.

_Has estado saliendo con ese perdedor llamado Junghwan. _Jihoon mordió.

_Jihoon... _Doyoung trato de calmar a su hermano.

Jihoon miro fijamente a los ojos a su hermano. _Tengo pruebas Doyoung, pero eso no es lo que importa. Es la forma en como tus ojos brillan, supondré que no me estoy equivocado en juzgarte. Tú falta de palabras solo lo reafirma todo Doyoung y eso es lo que más me cabrea de todo esto. Siempre te quedas callado para defender a los demás, siempre pones a los demás sobre ti. _

Jihoon exploto en un completo enojo, ya no había manera de disimularlo. Incluso cuando estaban hablando para el otro, sus expresiones no disimulaban nada. Todos se le quedaron mirando, pero a ambos parecía importarle un comino. Especialmente a Jihoon, quien era el más obvio en sus expresiones.

Doyoung se le quedo mirando a Jihoon. _Es porque a diferencia de ti, yo no tengo preferencias. _

Jihoon bufo sonoramente. _Por supuesto que no las tienes, siempre quieres complacer a todos. _ Jihoon ladeo su rostro hacia Doyoung. _ ¿O tú me dirás si las cosas han cambiado? Esa relación abierta que tienes con Dohwan..._ Jihoon levanto ambas cejas. _ ¿Ya le dijiste a Junghwan que el juego es de tres? ¿O aun sigues pensando que no se enterara? _

Doyoung le picaron los labios por gritarlo, por gritar que ya no salía con Dohwan. Quería gritar a los cuatro vientos que Junghwan era suyo, pero simplemente no podía. No quería saber lo que su familia haría, si se enteraba de su relación con Junghwan. Al final del día el chico, seguía siendo alguien con un pasado muy oscuro. Sin dinero suficiente para ocultarlo, sin ese privilegio que tenían todos los adinerados.

_El..._ Doyoung lucho con esa necesidad de hablar de más. _ ¿Sabes qué Jihoon? _Doyoung se le quedo mirando a Jihoon. _ Eres la persona menos adecuada para darme consejos en mis relaciones y lo sabes. _

_ ¡Ya...! _Jihoon alzo la voz.

_Deja de meterte en mi vida. _Doyoung le dio una mirada a Jihoon.

Eso fue suficiente para que Doyoung se cansase de todo, no quería hablar una sola palabra más con Jihoon. No sabía exactamente como había conseguido esas pruebas, pero ya no podía hacer nada al respecto. Incluso cuando había sido muy cuidadoso, había fallado miserablemente. El sol nunca se había podido ocultar con un solo dedo, como su amorío con Junghwan.

_Park Doyoung. _Jihoon grito.

Todos alrededor miraron fijo hasta Jihoon, esto hasta que Junkyu llego al lugar. Dándole una mirada de muerte a todos, logro que cada quien volviese a lo suyo. Después de conseguir aquello, se dirigió a su hermano mayor. Tomándolo de los hombros con cuidado, mirándolo directamente a los ojos.

_Jihoon... _

Jihoon hizo una mueca. _ ¿Qué demonios? _

_ ¿Qué está pasando entre ustedes dos? _Junkyu exigió de inmediato.

Jihoon resoplo violento. _Doyoung acaba de confirmarme que sale con ese perdedor de Junghwan. _

Junkyu solo se quedó pensando, pero no le tomo mucho hacerlo. Ni siquiera le preocupaba tal perdedor, sabía que no era suficiente para su hermano. Doyoung era joven, era rico y bien parecido. Junghwan no tenía ni la mitad de lo que tenía su hermano, tarde o temprano, el pelirrojo se daría cuenta. Como lo había hecho con todos esos caprichos que adquiría, todos y cada uno eran por el mismo propósito. Esa disputa constante de poderes que tenía con su prometido, a ver quién era capaz de poner más celoso al otro.

_Déjalo. _Junkyu soltó.

_ ¿Que? _

_Si es un capricho... se va a aburrir tarde o temprano. _Junkyu aseguro.

Jihoon se le quedo mirando a Junkyu. _Tengo el presentimiento de que esta vez no es... ningún capricho. _

Jiwoo arrastra las pertenencias de Junkyu de mala gana, preguntándose porque tiene tantas. Sus otros hermanos apenas llevaban un bolso con lo necesario, mientras que Junkyu se había llevado la mitad de su habitación. Jiwoo empezó a pensar que lo había hecho apropósito, según lo que le había comentado Doyoung.

El hecho de que Junkyu nunca traía más cosas que ellos, que era la primera vez que lo hacía. Jiwoo había hablado muy bien con el pelirrojo, incluso había deseado ser su asistente. Doyoung era el único de los hermanos Park, que no era un completo arrogante. Muy a diferencia de Junkyu, que era el más arrogante de todos.

_ ¿Cómo puede ser tan arrogante? _Jiwoo soltó finalmente.

_ ¿Quién es tan arrogante? _

_Junk-yu... _Jiwoo respondió sin pensarlo mucho.

Jiwoo pensó que solo era su imaginación preguntándole, hasta que se dio de cuenta que simplemente no. Jiwoo soltó la bolsa con todo, cerciorarse de la presencia de alguien en el lugar. Jiwoo se giró para encarar a esa persona, divisando a un radiante rubio. El mayor de los Park se encontraba frente a ella, mientras sostenía un cigarrillo entre sus dedos. Lo calo furtivamente frente a sus ojos, para luego dejar ir el humo a la deriva. Jiwoo se le quedo viendo con la boca abierta, preguntándose cómo se podía ver tan bien. Estaba fumando un cigarrillo, se suponía que la practica era asquerosa.

_ ¡Ok! _

Jihoon tiro el residuo del cigarro al suelo, sin importarle mucho la acción. Jiwoo vio a su alrededor, había incluso cámaras. Eso solo explicaba claramente algo, los Park seriamente se sentían en las nubes. Haciendo lo que les veía en gana, sin importarles lo que decía la sociedad. Ocultar sus travesuras solo era cuestión de pagar, se había venido dando cuenta con el tiempo. Los envidiaba divinamente, porque talvez tenían la misma millonada, pero no los mismos padres.

Jiwoo se le quedo mirando a Jihoon. _ ¿No me vas a decir nada por decir que tu hermano es un arrogante? _

_ ¿Por qué te regañaría por decir algo que es verdad? _Jihoon silbo.

_Deberías estar del lado de tu hermano. _

_Sinceramente prefiero estar de tu lado. _Jihoon levanto ambas cejas.

_ ¿Por qué? _Jiwoo agudizo su mirada hacia Jihoon.

Observo la complexión de Jihoon, sin duda cada Park tenía su brillo. Incluso debajo de todas esas mañas de niño rico, que tenían cada uno de los chicos. Jiwoo vio como el chico se encargaba de tomar el bolso del suelo, para luego tendérselo a la mano. Jiwoo lo acepto casi hipnotizada, era extraño ver a el mayor de los Park en esas.

Jihoon sonrió de medio lado. _Porque tu haz sido la única persona, capaz de sabotear las manipulaciones de mi hermano. _

_ ¿Lo dices por lo que paso hace un rato? _Jiwoo unió cabos.

_Si. _

_Entonces espero no te moleste que lo siga haciendo. _Jiwoo silbo.

Jihoon se le quedo viendo a la chica, parecía muy decidida a arruinarle la vida a Junkyu. Ninguna novedad aparente, sabía perfectamente que ya lo había hecho. Jihoon aún se recuerda a sí mismo, consolando a Junkyu por su primer corazón roto. Justamente había sido esa chica, la que le había destrozado el corazón a su hermano. Junkyu no se recuperó muy bien de aquel desamor, más bien, nunca volvió a ser el mismo. De ese pequeño e inocente Junkyu del pasado, ya no quedaba nada.

_Hay una delgada línea entre el amor y el odio. _Jihoon se le quedo mirando a Jiwoo.

Jiwoo trago hondo. _ ¿Por qué dices eso tan de repente? _

_Porque ustedes me recuerdan a esa frase. _

Junkyu y Jiwoo eran la perfecta definición de enemigos, que solo estaban a un paso de ser amantes. Jihoon podía ver eso a kilómetros de distancia, pero parecía que su hermano y la chica, no pensaban igual. Jihoon sintió algo de superioridad en saberlo, como si pudiese predecir el futuro.

_Jihoon. _

_ ¿Que? _Jihoon le dio su atención a Jiwoo.

_Creo que los únicos amantes aquí, son el destinado y el destinatario de esta carta. _

Jiwoo saco una carta del bolsillo de su faldón, Jihoon solo se le quedo viendo. La carta tenía su nombre en ella, era de color rosa viejo. Jihoon no quiso hacer conclusiones, sin antes preguntar a la chica. Podía ser cualquier cosa y no quería malinterpretar absolutamente nada.

_ ¿A qué te refieres con ello? _

_Esta carta es de Mashiho, para ti. _Jiwoo explico apacible.

_Jiwoo. _Jihoon no supo que más decir.

_Kim Jiwoo. _

Un grito de parte de Junkyu, rompió la armonía del momento. Jihoon no dudo en darle una miradilla de muerte, este los miraba fijamente desde la entrada de estacionamiento. Estaba en su auto, esperando a la chica con la puerta abierta.

_Tengo que irme. _

Jiwoo tomo las manos de Jihoon y dejo la carta sobre estas. Jihoon solo la tomo por inercia, mientras se le quedaba mirando a la chica. Jiwoo pudo notar la mirada perdida de Jihoon, esta estaba incrustada de ilusión. Esta tenia esta mirada desde que sostuvo la carta, demostrando algo seguro. Aun tenia esos sentimientos por el japonés, aún quedaba algo en el fondo de ese frio corazón.

_Jiwoo. _Jihoon habló rápidamente.

_ ¿Que? _Jiwoo le dio su atención a Jihoon.

_Gracias. _