cuatro
louis es un omega peculiar.
bastante simple a su parecer.
y él realmente tiene la teoría de que es un omega bastante básico, pero no tiene ningún problema con eso.
creció en un ambiente lleno de omegas que le ayudaron a conocer todo lo que necesitaba conocer acerca de la vida, alfas y que era lo que él quería para el futuro.
sus padres son dos omegas, billy y manny.
omegas fuertes que le demostraron que los estereotipos son bastante estúpidos.
todos los omegas tienen la decisión de decidir qué es lo que quieren ser o hacer con sus vidas, y eso estaba bien.
¿quieres ser un omega líder de una compañía de alto nivel?
¡perfecto! ¡te apoyo, hermano!
¿quieres ser un omega que hornea pasteles y se queda en casa con sus cachorros?
¡asombroso! quiero probar tus pasteles y tomar té contigo y tus cachorros.
¿quieres vivir de la aventura?
¡eso es genial! te recomiendo visitar grecia en verano.
el punto es que louis considera que todos los omegas deben decidir qué quieren ser y no ser juzgados por lo que sea que quieran hacer.
la vida es muy larga y llena de diversidad.
el conocer a una persona y juzgarla no es algo en lo que louis sea un especialista.
pero aun así se considera un gran observador.
le da curiosidad la belleza que se encuentra en cada uno. le encanta observar los detalles internos y externos de las personas que lo rodean. sus perfecciones e imperfecciones.
especialmente las de harry.
ese alfa de cabellos rizados, ojos alegres y sonrisa rosada.
alfa con suéteres suaves y actitud tímida que intrigaba al omega.
¿por qué harry tenía esa timidez al hablar?
¿por qué sus ojos siempre vagan de un lugar a otro, perdiendo los detalles esenciales de lo que sea que estaba viendo?
¿por qué este semestre había cambiado tanto?
le agrada el harry que conoció hace unos meses en esa clase de historia del arte.
le agrada ese alfa perdido entre el impresionismo y el post-impresionismo.
ese es el alfa al que quiere acercarse.
no a ese alfa de actitud egocéntrica, con el ego tan inflado como una palomita de maíz.
él ya conocía muchos alfas así, como matthew.
a él no le interesa conocer otro matthew, él quiere conocer a harry styles.
el alfa lindo y amable.
no un imbécil de categoría cinco.
eso mismo pensaba mientras estaba en el salón de dibujo y representación.
le causaba un poco de estrés pensar en cómo aún no sabe si es el indicado para sus clases. se siente torpe con sus pinceles, poco talentoso y con una gran carencia de imaginación a la hora de la entrega de sus proyectos.
claro que objetivamente hablando es talentoso, no por algo lo eligieron para entrar al programa de arte en su universidad.
pero no puede evitar ser inseguro acerca de lo que crea, a pesar de que sus profesores aman su trabajo.
—no importa cuantas veces yo te diga que es perfecto, louis. si tu no lo crees, entonces nunca dejarás de dudar de tus habilidades. —su maestro le habló con seriedad mientras ponía un reluciente 100 en su rúbrica de evaluación. —eso termina con todos los artistas, louis.
el omega se secó las lágrimas traicioneras que escaparon de sus ojos.
aun así el estrés era grande.
su dibujo no era perfecto.
él veía los bordes imperfectos, manchas donde no las había y un rostro sin forma.
—mierda... —el omega sollozó suave al ver la hora.
9:00 pm.
claro que no había más personas en la universidad a esa hora.
solo su cerebro poco talentoso y la goma para borrar que había desgastado.
sus feromonas de tristeza comenzaron a llenar la sala.
¿qué le iba a decir a sus padres?
¡perdón! ¡no tengo talento!
mientras el omega pensaba en cómo su futuro caía a pedazos frente a él porque no había un rostro que dibujar, golpes suaves se escucharon en la puerta.
el omega chilló y limpió sus lágrimas cuando la gran puerta del salón fue abierta.
rizos y aroma a manzanas verdes con una pizca de canela entraron al salón.
—¿lou? —el alfa se escuchaba preocupado y su mirada se sorprendió al ver al suave omega limpiando sus lágrimas. —¿qué sucede, lou?
el alfa se acercó y revisó el rostro del omega buscando alguna herida o algún indició de lo que sea que le pasaba al omega.
—hola, ricitos. —el omega sonrió triste y dejó su lápiz a un lado. —t-todo bien... solo fue un problema tonto.
harry le dio una sonrisa dulce y sin darse cuenta sus brazos estaban rodeando al omega que escondió su rostro en su pecho.
—si te hizo llorar no es tonto, louis. —el alfa se alejó un segundo y sintió sus mejillas calentarse. —si necesitas hablar, aquí estoy.
el omega sonrió.
ese era el harry que le agradaba.
—creo que apesto para el arte. —el omega vio con asco el retrato frente a él. —no lo logró hacer bien. soy un fracaso.
harry frunció el ceño al ver el retrato frente a él.
era perfecto.
—louis... esto es perfecto. —el alfa dijo asombrado. —de verdad, esto es asombroso. le dio una sonrisa emocionada. —los trazos, las facciones y los detalles.
louis negó y se sentó exhausto en el banquillo frente a él.
—no sé porque no puedo verlo como tú lo ves... o como lo ven mis profesores —susurró. —o en general todos los demás... tal vez esto del arte no es para mi.
harry lo vio con preocupación y negó muchas veces.
—el semestre pasado creí que iba a reprobar química orgánica básica. —vio a los ojos al omega. —sentía que todos eran mejores que yo y que sí no servía ni siquiera para la clase de química básica entonces debía de abandonar mis sueños en ese momento, estaba haciendo a mi madre desperdiciar su dinero y ya sabes... esas mierdas de miedo al fracaso.
louis le prestaba atención al alfa frente a él que jugueteaba con un lápiz entre sus dedos.
—¿qué hiciste?
harry hizo una mueca.
—le dije a mi madre que quería dejar el programa y regresar a holmes chapel a vender pan. —le guiñó el ojo a louis que le dio una risita tímida.
el alfa sonrió.
—gran solución, styles... —louis tenía un tono burlesco en su voz.
—yo también lo creía en ese momento. —el alfa rió. —pero mi madre me gritó por el teléfono diciéndome que dejará de dudar de mí mismo y que "estudiara hasta que se me cayera el trasero".
louis rió.
—veo que resultó. —el omega le dio una sonrisa dulce al alfa frente a él.
el rizado asintió.
—fui el mejor de mi clase. —sonrió. —y todo ya estaba en mi cerebro. —subió los hombros y vio al omega frente a él. —louis, lo que quiero decir es que... eres bueno, no te autosabotees a ti mismo diciendo que no eres suficiente. —vio al omega con atención, deteniéndose lentamente en los lunares de su rostro y la longitud de sus pestañas. —eres suficiente, lou. por algo estás aquí.
el omega sonrió y le dio un abrazo al alfa frente a él.
—gracias, ricitos. —susurró. —eres bueno con las palabras.
el alfa sintió nervios por la cercanía del omega.
—l-lo sé. —tartamudeó.
el omega sonrió y se separó del alfa.
harry era muy bonito, el omega pensó.
su mirada tímida viajaba por el salón y sus manos se escondían por el suéter grande que usaba.
el omega sonrió con ternura.
—harry, ¿quieres salir a una cita conmigo?
el alfa se quedó boquiabierto frente al omega de sus sueños.
4/10
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