Hombre en estado de ebriedad atropelló a dos estudiantes. La chica se encuentra con lesiones leves, mientras que el chico quien la salvó, falleció en el lugar de los hechos.

Vaya, ¿tan repentino había sido todo? Esperaba que al menos mi muerte hubiera sido mientras te salvaba como un héroe, pero lo más seguro era que mis pies se hubieran enredado y solo de suerte te empujé.

Quise reírme, pero no pude. Cualquier rastro de felicidad en mí parecía haberse extinguido.

¿De eso trataba la vida? ¿De darte lindos recuerdos que de a poco se irían esfumando para después dejarte abandonado en las penumbras de las soledad?

¿Para qué te conocí si después iba a doler tanto?

¿De qué servía que siguieras a un lado de la tumba si ni siquiera me podrías escuchar?

Tomé una de las marchitas flores mientras le arrancaba los pocos pétalos que le quedaban. Esto de marchitarse era muy doloroso, mejor le ahorraba un poco de sufrimiento solo sacándole los pétalos de una vez.

Era mejor así. Rápido y sin tanto dolor. No como mi situación, que seguía viéndote sin poder hacer nada.