Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

C.4: La marca lo dice todo.


Niña del agua

Corrí y corrí, sin mirar atrás. Tenía mucho miedo, pero aun así no dejé que me venciera. No ahora. No ahora, que ella me persigue. Ya no estoy segura aquí, deberé irme, escapar antes de que me mate. Pero... no quiero abandonarla*, sé que es la persona que más sufrirá por esto. Qué lástima. Desearía estar ahí, tener más tiempo para despedirme siquiera.

En el camino, empecé a llorar. No puedo evitarlo, después de todo ella tenía razón, soy una cobarde y debilucha. Pero ahora mismo no puedo darme el lujo de disminuirme, admitir que tiene la razón. Sentí su abrumadora presencia tras de mí. Sin voltearme o detenerme, me atreví a preguntar:

— ¿Por qué me haces esto? Yo sólo intentaba forjar nuestra relación. ¿Acaso no te importa la felicidad de nuestra madre? —pregunté, antes de que mi voz se quebrara.

Ella lanzó una carcajada irónica. Juro, que aunque no la esté viendo, sonríe.

— ¿Y quién dijo que... eres mi... —pregunta, casi con asco y añade—: ...hermana?

— ¿Qué dices? Yo...

— ¡Nada de nada, estúpida chiquilla! —exclamó antes de ponerse justo en frente de mí e intentar golpearme. Pero, mi cuerpo reaccionó más rápido que ella y, la empujé hacia atrás. Eso fue lo suficientemente fuerte como para colmar lo que quedaba de su "paciencia"—. ¡Tú! Sólo has sido un estorbo desde que llegaste. ¡Te odio! Desde lo más profundo de mi ser. Te acogí en mi casa, y ¿así me agradeces? No, eres una...

— Pero, ¿qué... dices? —susurré, sin fuerzas.

Luego, caminó hacia mí, y me tomó del cuello. Tardé en reaccionar. Me estaba quitando el aliento y mis forcejeos fueron en vano.

— Su... suéltame... por favor... te lo... rueg– ¡ah! —Empezó a reír de forma desquiciada al escucharme rogar por mi vida. Me contralló hacia la pared. Comencé a llorar, no puedo creer que esto esté pasando, creo que moriré.

~Dos días antes. Mientras tanto, al otro lado del mundo~

Maya

Todo resultó ser como me lo imaginaba. Un maravilloso submundo acuático, lleno de maravillas increíbles que sólo existen en los cuentos. Esa es, la descripción exacta de lo que veo justo ahora.

Sé que no me será fácil adaptarme a las condiciones del mar. Pero ahora no es momento de concentrarse en mi introducción a la vida marina; acabo de llegar y lo primordial es encontrar un sitio en donde pueda descansar. De lo contrario, podré desfallecer en cualquier momento.

— Por experiencia sé que la noche "envejece" bastante rápido cuando te sientes desprotegida. Siendo realista no creo poder encontrar albergue en un sitio tan grande y... sin dinero... —susurré en voz casi inaudible. Soy consciente de que cualquier información que divulgue en territorio enemigo puede ser usada en mi contra—. Aunque ahora mi aspecto sea –posiblemente– similar al de ellos, mi pelo sigue siendo blanco**.

Decidida, me dispongo a entrar. Con ojos curiosos, observé cada cosa que me rodeaba. Estaba confusa al ver tantos colores y especies distintas.

Qué raro. No veo seres con forma humana. ¿Dónde estarán?

— Las cosas no serán tan fáciles como calculé —dije, lamentándome—. Debo encontrar un lugar adecuado para esconderme, y descansar durante la noche. Un sitio además que me proporcione la serenidad perfecta para seguir las fases de mi plan.

Así que fui en busca de un sitio tranquilo y acogedor. Por aquí o por allá, tengo la certeza de que lo encontraré. Luego de un rato, me percaté de que algo jalaba de mí. De nuevo, mi mano izquierda empezó a doler. En verdad, había hecho caso omiso a tal sensación, desde que el brazalete apareció allí; pero en este instante, empieza a caer en lo desagradable.

— ¿Qué sucede? —pregunté, al ver que la molesta sensación no disminuía ni aumentaba. Solo, seguía ahí. De repente, la pulsera volvió a irradiar luz. Esta vez era blanca, y cada vez brillaba más y más—. ¡No!, llamaré la atención si sigues haciéndolo.

La oscuridad marina es penetrante. Pero aun así, puedo ver sin esfuerzos lo que me rodea, e incluso con bastante claridad, literalmente. No sé si esto sea un efecto del brillo que emite el amuleto; aunque no recuerdo haber atravesado el mar con su ayuda.

Sea o no de esa forma, debo ser cautelosa. Tal accesorio me hace llamar la atención en exceso: siendo una extraña en estos lares, puedo ser considerada una intrusa, por lo que me verán como una potencial sospechosa. De alguna manera debo detener a...

— ¿A quién o qué vas a detener? ¿Seré yo la que provoque esa reacción por parte de mi amuleto? —pregunté, con ironía.

Las palabras que salen sin previo aviso de mi boca, me dejan estupefacta. Sinceramente no sé qué está pasando con el brazalete, pero sea lo que sea, es ahora parte de mí, y sólo responde a las peticiones de mi corazón.

— Eso es.

Encontré una cueva.

Sin perder tiempo, me aproximo hacia ella e, iluminando el área con mi luz, me aseguro de que no haya nada ni nadie dentro.

— Aquí estaré protegida —digo antes de entrar y obstruir el sitio con una gran piedra. Mi error.

La pulsera dejó de emitir luz y la temperatura bajó drásticamente.

— Creo que no debiste hacer eso, querida. —Justamente después del aterrador suceso, escuché un retorcido y atemorizante susurro femenino.

Pero no tengo miedo. No estoy sola.

— Muéstrate —digo, con potestad e ignorando la excesivamente baja temperatura.

— Jo jo, qué niñita tan valiente ¿no? —Aguardó un poco y prosiguió—: te estoy observando.

Eso quiere decir que, aunque siento su presencia, ella no está aquí.

— Siempre y cuando no interfieras en mis planes no tendrás problemas —dije sin bajar el volumen.

La voz desconocida emitió un gesto de desacuerdo. ¿Quién te crees que eres? Seguramente estará pensado ahora mismo.

— Recuerda que, a pesar de eso... yo sé tu pasado. —Su voz era lenta y pausada, casi sarcástica—. Y puedo divulgárselo a cada una de tus "amigas en apuros".

En ese instante la tensión en el ambiente desapareció, junto con «ella». Supongo que, ahora tengo una enemiga. Pero antes de que pueda decir cualquier cosa –e incluso falso testimonio– sobre mí, debo llegar a las niñas del elemento antes que ella.

Aunque... Ni siquiera yo, sé algo sobre mi pasado. No me conozco.

Como ese es mi deseo de corazón en estos momentos, el brazalete volvió a irradiar luz. Pero esta vez, una verde azulado.

— ¿Qué es eso? —pregunté con cierto escepticismo debido a la imagen que empezaba a formarse en mi cabeza al ver el color.

Ese tono era su cabello. Luego su piel y ropa estuvieron presentes y a la vez no, frente a mis ojos.

— Acaso es esa mujer que... —Me interrumpí y dije—: No. No es ella. Su aura no se siente estremecedora.

Lo que vi me dejó boquiabierta.

Era una niña, de más o menos mi edad, quizás algo mayor que yo. Su pelo azul verdoso se esparcía por toda la pequeña cueva. Sus ojos cerrados le daban ese peculiar toque de inocencia.

Está indefensa. —Concluí con rapidez.

Cuando pude descifrar el significado de la figura, se deformó hasta convertirse en una escena... brutal.

Una de asesinato.

— Si yo... deseé conocer mi pasado... esto es... ¡puede ser!...

Aunque. No creo en la posibilidad de haber matado a alguien. Debo estar malinterpretando la situación. O, tal vez mis temores e inseguridades acerca de mi verdadera identidad están consumiéndome hasta crear ese perfil falso de mí. De asesina.

Sin embargo, mis hipótesis rápidamente son desmentidas cuando veo eso en su frente. Empezó a emitir un cegador brillo que, incluso, opacaba el de mi amuleto. De tal forma que me vi obligada a cerrar los ojos. Cuando el resplandor se esfumó, los abrí. La perturbadora escena también había desaparecido. Y además, me encontré con, mí misma tumbada en el suelo. Había sido un sueño.

Todo lo fue desde el instante en que oí a la mujer de tono macabro, hablar.

— Así que... ¿cómo o cuándo, me quedé dormida? —pregunté a mí misma mientras me incorporaba hasta sentarme en el piso—. Nada había sido real ¿cierto? Pero... se sintió como si lo fuera y, recuerdo todo como si lo hubiese vivido.

Pero, sea o no un sueño, me quedaron varias incógnitas con respecto a lo que vi. No pude distinguir con exactitud qué era eso en su frente. Quisiera saber qué significaba esa chica siendo ahorcada. Y ¿por qué justo ahora se presenta a mis ojos esa?...

— ¡Premonición!

Ahora todo cobra sentido. Si empiezo a unir cada suceso como si fuere un rompecabezas... Ya lo entiendo.

— Esa mujer de voz espeluznante me dio una advertencia. Debe ser por... ¡algo que está a punto de pasar! Y no debe serle nada conveniente —murmuro, con entusiasmo—. Luego, está esa chica de cabellos azul verdoso siendo ahorcada y, después se esfuma la figura que hace un intento por herirle cuando, ella empieza a esparcir luz. Esperanza. Sí. O más bien, nadie puede oscurecer su resplandor. Y posteriormente, está la marca en su frente. ¿Marca real? —cuestiono, dudosa—. Más bien... marca elemental. Del agua. ¡Del agua! Ella es la niña agua, la niña del océano.

La marca lo dice todo.

— Debo encontrarla antes de que sea tarde. Sé que tanto ella como yo tenemos un adversario que, a toda costa querrá impedir que podamos hacerles saber la verdad al mundo: la reina Asméredid ha vuelto a nacer. Tenemos encontrarla. Y buscar a las demás chicas. Juntas.

----------

No se refiere a "ella"

** El pelo blanco simboliza la nada. Al igual que el «color» del aire.

¡Espero que te guste la historia! Si es así, ¡VOTA y COMENTA! Gracias por tu ayuda.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro