El bosque no parecía tan tenebroso al estar junto a un grupo bastante grande. Se nos habían sumado Taeyong junto a su novia Celine, Lucas y Sunha.

Todos iban parloteanodo ridiculeces excepto Mark, Yoongi y yo, que nos manteníamos al margen, el primero estaba un poco borracho y mi mejor amigo me hacía compañía abrazando mis hombros. Era cierto eso que las primeras horas de la mañana eran las más frías, pronto sería el alba y nosotros aún no habíamos llegado al internado y todo por culpa del tonto de Johnny, debíamos ir andando.

Me dolían los pies, era lejos, en buen momento elegí ponerme unos tenis, no como mi hermana que iba con esas botas de tacón que cada vez que la miraba me incomodaban.

Hestia y Jungkook lideraban el grupo siendo los primeros, guiando el camino. ¿Desde cuándo se llevaban tan bien? ¿Será otro de los amigos de mi hermana? Pero él me había besado y hasta me masturbó en aquel lugar.

Ugh. ¿Qué hacía pensando eso?

Lo único que debía preguntarme ahora era cuánto quedaba de camino. Estaba harta de caminar.

Pero no podía pensar mucho teniendo a esos dos al frente riéndose de no sé cuál chiste del chico, incluso le había dado la chaqueta a Hestia. Ash, lo odio.

- Por favor, que alguien me cargue - fui la primera en rendirme, creo que tenía ampollas en mis pies.

Los ojitos de Mark enseguida me enfocaron y sonrió con las mejillas rojas.

- Ven noona, creo que podría llevarte un ratito - se ofreció él, aunque Yoongi no hizo ningún amague para alejarse de mí.

¿Qué rayos era el noona ese? Él se agachó frente a mí dispuesto a cargarme, no me cansaría de decir que era un amor.

- Yo podría llevarla más tiempo que tú - alcé una ceja cuando Jungkook se acercó a mí, por inercia retrocedí rechazandolo.

- Yo la llevo, soy su mejor amigo - sonreí al escuchar a Yoongi, aunque alguien por ahí no le sentó bien aquello pues enseguida comenzó a dramatizar.

"Con que mejor amigo, eh."

Fueron los pensamientos de mi hermana, no podía creer que se pusiera celosa por eso.

- ¡Kookensio cárgame! - exigió ella - ¡Ese es tu deber de mejor amigo!

¿Quería molestar a Min con eso? Qué mal estaba Hestia pensando que eso le haría algo a él.

- Siento mi corazón romperse con la traición - fue el turno de dramatismo de Johnny.

Hestia no paró de pucherear y alzar los brazos en dirección a Jeon para que la cargara tal cual una niña. ¿No era yo la cansada?

- ¿Y quién me carga a mi? - inquirió Sunha con una sonrisa divertida mirando a Lucas que se hacía el que miraba una "interesante" roca tratando de que no fuera él el elegido.

"Qué no diga mi nombre, que no diga mi nombre"

Me reí al leer sus pensamientos, ese era otro tonto más.

- ¡Lucas no huyas! - gritó la chica en dirección al chico que ya había comenzado a correr lejos de ella.

Taeyong dió unas palmaditas llamando nuestra atención, cada vez que agitaba sus manos salían chispitas de fuego de ellas, era extraordinario admirarlo.

- Deberíamos descansar un rato aquí mismo. De todas formas ya no llegaremos antes del amanecer - y tenía mucha razón el pelirrojo.

Todos nos sentamos en el césped que parecía haber sido cortado hacía poco, tenía un poco de rocío, pero eso no nos importó a ninguno, hasta que la bruta de mi hermana se sentó delicadamente – nótese mi sarcasmo – sobre una piedra.

"¡Mierda! Me la metí. Ay Dios mío me duele culo. ¡Uno ni sentada puede estar carajo!"

Me tuve que reír de lo que se decía internamente, el karma era una perra. Cuando la volví a mirar me observaba como si fuera a matarme.

"Contigo aquí ya uno ni privacidad tiene."

Eso me hizo reír el doble, Yoongi que se había sentado a mí lado me pellizcó haciéndome parar de reír, pensarían que estaba loca.

- ¡Juguemos "Yo nunca he" - chilló Johnny poniendo una botella en el centro del círculo que habíamos formado al sentarnos.

- Uy yo pongo las bebidas - levantó la mano Lucas sacando una botella y vasitos de no sé dónde.

- La regla es simple, al que le toque el pico de la botella dice: Yo nunca nunca - explicó el que había sugerido el juego.

- No intenten decir mentiras porque puedo leer sus mentes y sabré quién miente - entrecerré los ojos mirándolos uno por uno.

- Uno no - tosió mi mejor amigo dando la alusión de que en efecto no podía leerle la mente a Jungkook.

Debía investigar sobre ese chico.

Johnny giró la botella, ésta señaló a Mark.

- Yo nunca nunca me he escapado de casa - dijo el chico tierno, ay que me lo como.

Todos dimos un trago a nuestras bebidas, exceptuando el menor que se sonrojó apenado. Johnny le empujó con un pie y volvió a hablar.

- Tú no sirves para ésto Mark. Es así: Yo nunca nunca he hecho un trío.

Todos nos miramos a las caras buscando quién sería el que bebería, cuando estaban a punto de hacer girar nuevamente la botella, Hestia bebió.

¿Pero qué carajos? Decidí no meterme en su mente porque sabía que me daría repugnancia sus pensamientos, como casi siempre sucedía. ¿Por qué mi hermana era tan diferente a mí.

- ¿Qué? - le gritó John - ¿Cuarteto? - volvió a beber - ¿Quinteto? - otro trago - ¿Sexteto? - más tragos vinieron después de eso.

Era una promiscua, a ver, que yo había tenido sexo antes, pero con mi novio y otro chico pero no había participado de una orgía, mis principios detestaban esas cosas, como las que hacía mi difunta madre.

- Basta, basta. A éste paso Hestia se emborrachará primero que todos - se metió Sunha, pero tenía una sonrisa perturbadora en su rostro que no me dió buena espina - ¿A cuántos te has tirado a la vez?

- Estaba tan borracha que no lo recuerdo. Unos veintialgo, treinta...

- ¡Eres mi ídola! - chilló la chica abrazándola.

¡Qué puto asco! Y luego no quería que Yoongi le dijera puta, pero es que ella no estaba aparentando nada bueno frente al chico. Una mueca se hizo presente en mí rostro, creí que iba a vomitar.

- Has deshonrado mi sangre - dije haciendo reír a todos, a mí no me daba gracia sinceramente, Lucas volvió a girar la botella - ¡Me toca! - chillé eufórica, tenía que poner a alguien en apuros, miré a Johnny expectante, se iba a cagar - Yo nunca nunca he dejado una anaconda de cincuenta metros en el baño de mis amigas.

Logré hacerle subir los colores al chico por la vergüenza. Se dió un trago y parecía no querer seguir jugando ya. La botella señaló ésta vez a Jungkook que sonrió ladinamente. ¡Ay no!

- Yo nunca nunca me he besado con alguien de éste grupo - dijo Jeon.

¡Carajo! ¿No podía quedarse calladito?

Taeyong, Celine y Sunha se dieron un trago. La novia del chico se puso roja de la rabia cuando vió aquello.

"Amor, tú novio me hizo un oral exquisito."

Esa había sido Sunha.

- ¡No pienses en eso! - chillé en su dirección con una mueca. Esto era lo que no me gustaba de leer las mentes, me podía encontrar con cualquier barbaridad.

En el último momento, cuando ya iban a girar la botella nuevamente decidí darme un trago al mismo tiempo que Jungkook. Parece que nadie se lo esperaba porque incluso hasta mi mejor amigo me observó anonadado.

- What?! - gritó mi hermana, yo solo bajé la cabeza, el plan era que nadie se enteraría joder - ¡Tú me enorgulleces! - le dijo a Jungkook abrazándose a él.

¡Traidora!

- ¿Yoongi y Hestia no van a beber? - inquirió él - No, caray he despilfarrado mi turno  por nada.

Mi mejor amigo y mi hermana se miraron, él con neutralidad, ella actuando una sonrisita inocente.

"No Kookie, la niña me dejó con una erección."

Abrí los ojos como platos al escuchar aquello.

"¿Te dejaron con el tren estacionado? Ya me contarás luego" - le dije.

"Tú también tienes cosas que contarme al parecer."

¡Rayos! De ésta no me libraba.

Fue el turno de Lucas y sonrió perversamente, no podía ser nada bueno lo que fuera a decir.

- Yo nunca nunca he ido a Casiopea - soltó, a mí se me heló la sangre.

Todos los recuerdos se aglomeraron en mi cabeza poniéndome nerviosa. Ese era el burdel en el que trabajó mamá. ¿Él había estado allí? Hestia me miró completamente en shock.

"¿Le dijiste algo a ese idiota?" - me habló ella. Era el colmo que me preguntara eso, cuando yo era la que más deseaba alejarme de todos esos asquerosos recuerdos.

"¡Claro que no!"

Apreté la mandíbula, estaba enojada, entonces comenzamos una guerra mental.

- Dejen de pelearse con la mente - regañó mi amigo.

- ¿Cómo sabías? - inquirimos ambas.

Los únicos que no bebieron fueron Mark, Celine y Sunha. Todos los demás habían entrado en aquel infierno.  Me enfadé al darme cuenta que seguirían iendo personas a dicho lugar repugnante. ¡Asco!

- Bueno, bueno, Celine, es tu turno - ésta vez en la cara de Lucas no había rastro de perversidad ni burla, parecía apenado por alguna razón.

- Yo nunca nunca he excitado a un hombre con un baile - la chica soltó aquello mirándome a mí y a mí hermana.

Quería hacernos pasar por unas prostitutas, ella había sacado sus propias conclusiones.

Hestia y yo por supuesto que habíamos hecho aquello, nos gustaba bailar y lo hacíamos genial, desgraciadamente era lo que habíamos heredado de Aris. Ambas bebimos y todas las miradas cayeron sobre nosotras, ésto era el colmo, no quería que pensaran algo que no era sobre nosotras.

- Mi turno - sonrió sádicamente Hestia cuando la botella le apuntó a ella - Yo nunca nunca le he sido infiel a Taeyong.

Solo eso bastó para que se desatara una guerra de miradas asesinas entre las dos chicas, así que decidí hacer mi pequeño aporte porque ya me estaba cansando todo el tema, además que su mente era como agua cristalina para mí, podía ver todo allí y sí, había engañado a su novio.

- Celine es tu turno de beber - exigí con una sonrisa macabra.

- ¡Par de putas! - vociferó ella.