II. Fantasmas Y Recuerdos
Esa mañana, Jungkook despertó muy temprano y tomó la biblia que guardaba en un rincón de su habitación. El demonio lo observó con una mueca y luego siguió su paso sigilosamente.
───No me sigas. ───Le advirtió el humano, se puso la gabardina café y miró de reojo a su nuevo compañero de cuarto antes de salir.
Taehyung resopló, siendo un demonio de una posición tan alta, no estaba asustado de pisar un lugar santo. Ni siquiera un serafín se atrevería atentar contra él, ya que su existencia misma pesaba más en la balanza que la de cualquiera de ellos. Caminó cerca de Jungkook, quien no le prestó atención incluso cuando estaba dentro del establecimiento caminando junto a él como si nada. El lugar estaba vacío, solo habían dos hombres sentados en los asientos frente al altar, ambos miraron inmediatamente al demonio que caminaba tras su antiguo compañero.
───Pero qué ───Jadeó el más bajo, levantándose de su lugar.
───Jungkook, qué sucedió ahora. ───Bufó el que estaba sentado aún, cerró la biblia y se puso de pie perezosamente. ───Este demonio está tan arraigado a tu cuerpo que puedo sentirlo mezclado con tu aroma.
El exorcista se sentó en la banca que estaba atrás de su compañero rubio exaltado y el pálido perezoso. Taehyung analizó a los dos humanos y arrugó la nariz con desprecio antes de asomarse al oído del humano para susurrarle:
───Podría hacer cenizas sus almas. Será mejor que no sean descorteces conmigo.
Jungkook le envió una mirada fugaz y abrió la biblia entre sus manos.
───Hice un contrato con él. Es temporal, no hay de qué preocuparse. ───Se limitó a decir, alzando la mirada hacia sus compañeros, quienes no miraron al demonio directamente por miedo a hacer algo incorrecto.
───Es de un rango alto. ───Meditó el pálido. ───Solo a ti no te destituirían por algo así. Jimin y yo ya estaríamos fuera. ───El primero asintió, apretando los labios y escondiéndose atrás del mayor. Taehyung rio en silencio, enviándole una mirada divertida al pequeño humano.
───El pastor dijo que no permitirá más imprudencias de mi parte. ───Respondió. ───Está obligado a dejarme en este puesto hasta que termine el año biciesto. Supongo que ser su favorito tiene más ventajas de las que creía.
Yoongi alzó una ceja, la tranquilidad en Jungkook era normal, pero ese demonio no solo estabas sujeto a su cuerpo, si no que viéndolo bien también sujetaba algo mucho más profundo en Jungkook, lo cual debería ser preocupante para su amigo. Le envió una mirada a la presencia escalofriante, pálido como un papel, alto y de ojos negros como el carbón, cuánto tiempo habría estado siguiendo a Jungkook y por qué.
───Qué clase de contrato has hecho con él. ───Espetó.
Jungkook alzó la vista hacia Yoongi y se puso el dedo índice en los labios.
───Es un secreto.
═════•°✝°•═════
Poco a poco Jungkook se acostumbró al demonio que lo había seguido durante un mes, a excepción de las veces que desaparecía sin razón aparente.
Una noche, el aire se volvió liviano alrededor, Jungkook supo que Taehyung se había ido, entonces aprovechó para recurrir a su viajo amigo, Namjoon. Tocó el timbre de la casa y el susodicho salió a los segundos para estrecharlo en un fuerte abrazo.
───Yoongi me lo ha dicho todo. ───Dijo aún abrazando el cuerpo del más bajo. ───Estás loco. Cómo pudiste hacer un contrato cuando todos te acechan.
Namjoon miró alrededor en busca de la presencia demoníaca de la que Yoongi le habló, a pesar de haberse retirado del grupo de exorcistas, la habilidad de percibir cosas antinaturales era algo que nunca desaparecería de él.
Tiró de Jungkook dentro de su casa y lo cómodo junto a él en el sillón para revisar su respiración y cualquier tipo de marcas en su cuerpo.
───No es una posesión. ¡De verdad hiciste un trato de alma, idiota! ───Exclamó al terminar su revisión.
───Namjoon, no tuve escapatoria. Era mi hermana o yo
Su amigo apretó los labios con impotencia. Jungkook sonrió y palmeó su mejilla.
───Vine a pedirte que regreses al grupo. Solo durante los últimos meses.
───No.
Se levantó sin que Jungkook pudiera detenerlo, el menor frunció las cejas y trotó tras el más alto.
───Es luna roja este año. ───Informó parándose a un lado de Namjoon, este intentó ignorarlo arreglando las cosas de su escritorio. ───Necesitamos energía fuerte. Namjoon, tú eres increíblemente fuerte.
El castaño rio y volvió hacia él.
───No lo haré. Me prometí que no volvería a hacerlo. ───Esquivó la mirada decepcionada de su ex-compañero. ───Una vez que me desprendí de esa parte de mi energía, las voces me seguían a todas partes, no podía dormir por las noches y mi mente colapsaba de vez en cuando. No puedo volver.
Jungkook frunció las cejas y asintió tristemente.
───No soy tan fuerte como tú, Jungkook. Las almas no me dejarán en paz ni un solo día el resto de mi vida si vuelven a encontrarme. ───Tomó las manos del pelinegro y apoyó su frente entre ellas. ───He rezado por tu bienestar cada día, cada noche y madrugada. ───Besó sus manos y las estrechó con dulzura. ───Qué Dios te mantenga a salvo por mí.
El contrario pasó saliva.
───Qué Dios te mantenga a salvo por mí, Namjoon.
═════•°✝°•═════
Los primeros años de exorcista, fueron duros para Jungkook, sin embargo, logró adaptarse luego de un tiempo y recibió varios halagos por ello, había gente que se retiraba y nunca llegaba a acostumbrarse realmente, ese fue el caso de Namjoon.
Namjoon lo entrenó y cuando vio que su alumno logró explotar todo su potencial, tomó su retiro y nunca más volvió. Jungkook notó que durante el trabajo, las almas se pegaban a la energía de su maestro, no había un descanso nunca al convertirse en un faro para ellas. Lo mismo pasó con Jungkook, solo que él se llevaba bastante bien con las grises sensaciones de tener almas a su alrededor, de alguna forma no era del todo molesto.
Su aprecio por Namjoon nunca desapareció, era tan preciado para él que daría lo que fuera para que no fuese perturbado una vez más.
───¿Pensativo? ───Comentó el demonio sentado en el sillón frente a su cama.
Cierto, Jungkook se había quedado mirando al suelo durante un largo rato.
───Estoy algo cansado, debe ser por cierta sanguijuela que me drena la energía cada vez que puede. ───Comentó, mirando por debajo de las pestañas al demonio que le sonreía divertido.
───Mmmmh, yo diría que no es eso. ───Taehyung se cruzó de piernas alargando más su sonrisa. ───Tiene que ver con el humano que visitaste anoche.
Por supuesto, no podría escaparse de su vista incluso cuando no estaba cerca.
───Quizá... ───Acarició el rosario entre sus manos.
───Él te lo dio. ───Aseguró, señalando el rosario.
───Sí, fue él. ───Sonrió ladino. ───Durante mi primer día, él mato a un demonio frente a mí usándolo y cuando terminó me lo lanzó diciendo: "Cuando puedas hacer lo mismo usando esto, estarás listo".
El demonio no estaba realmente interesado en la historia, si no en la forma en la que Jungkook sonrió fácilmente con la mención de una sola persona.
───Ustedes sienten demasiado. ───Soltó. ───Viven tan poco que es fácil conformarse con cualquier evento particular.
───Es correcto. El dilema está en si eso es bueno o malo. ───Gateó fuera de la cama y se acercó a Taehyung con pasos lentos. ───Somos seres efímeros, lo más valioso para nosotros siempre serán los recuerdos. ¿No tienes algún recuerdo que nunca quieras olvidar?
El demonio alzó las cejas ante la primera pregunta que el humano le había hecho.
───¿Recuerdos? Tengo muchos, desde el día en el que la tierra se envenenó hasta hoy, pero ninguno es valioso, podría olvidarme de todo y no me arrepentiría. ───Respondió para satisfacer la curiosidad del contrario.
El exorcista se detuvo frente a él y lo miró con los ojos abiertos de par en par.
───¿Has vivido tanto tiempo como Dios? ───Se inclinó, deseoso de saber.
Taehyung se carcajeó cubriéndose la boca.
───Estás tan obsesionado con él.
───Supongo que son cosas que no debería saber.
Dio un paso hacia atrás, reprimiendo toda su curiosidad, pero su mano fue tirada fuertemente y no se detuvo hasta que su rostro estuvo frente al de Taehyung.
───No soy omnipotente, nací mucho después que mis hermanos y cuando los humanos se volvieron seres más controlables para ellos mismos. ───Respondió con la mirada fija en el rostro ajeno.
Jungkook parpadeó y ladeó la cabeza alejándose un poco.
───Olvidaba que tu rango tampoco es tan alto. ───Los pensamientos volvieron a llegar como un huracán.
───Dime lo que oculta tu mente. ───Los ojos de Taehyung brillaron. ───Es curioso que formules preguntas distintas a las que he respondido durante siglos.
───Preferiría no hacer más preguntas. ───Respondió, desviando la mirada. El demonio frunció las cejas y tomó su mentón con una mueca interrogante.
───¿No quieres saciar tu pequeña sed de conocimiento humano?
───Quiero morir en la ignorancia para que los pensamientos no me atormenten en vida. ───Jungkook se alejó desenrrollando el rosario de sus manos bajo los intensos ojos del demonio.
El exorcista había tenido varias oportunidades de acercarse a Taehyung para herirlo o hacer algo y tener la oportunidad de matarlo, sin embargo, no hizo nada en lo absoluto. Taehyung sintió la necesidad de ser él quien le hiciera preguntas al humano, descubrir el enigma que guarda en su rostro pacífico, desentrañar los sentimientos revueltos que escondía en su corazón y luego aplastarlo para llevarse su alma.
Incluso cuando su presencia se volvió gélida con esos deseos surcando en su interior, Jungkook no se asustó ni mucho menos lo miró extrañado, simplemente se recostó como un muerto en su cama y cayó dormido ante el demonio que podría apropiarse de su cuerpo si quisiera.
¿Por qué este humano estaba cargado de resignación? Cómo si supiera todo lo que debía y ya no le tuviera miedo a lo que venía para él, algo peculiar en cualquier ser inmortal.
Taehyung se deslizó fuera del sofá cuando la respiración del humano se volvió lenta. Cuando Jungkook dormía y Taehyung estaba cerca, las sombras acechaban la casa y las protecciones se debilitaban, Taehyung ayudó ahuyentando a las almas mientras Jungkook dormía para poder absorber su energía sin interrupciones.
Observó la piel pálida del exorcista, sus pestañas oscuras y los labios entreabiertos, tan relajado que Taehyung se sintió fascinado por esa expresión en calma teniéndolo junto a él. El pulso de Jungkook era bajo y constante, una vez más, Taehyung se dejó embelesar por la persistente energía retumbando junto al pulso del humano, puso sus dedos sobre la piel del cuello blanquecino, sintiendo el latido lento.
Se arrodilló junto a la cama y posó sus labios sobre la piel desnuda, respiró y bebió del vigor del retumbar. Los humanos tenían ese atractivo: estaban vivos y sus cuerpos cálidos. Aunque Taehyung nunca había conocido a un humano con los latidos tan pausados como los de Jungkook, el pulso de los humanos se acelera ante cualquier experiencia que los altere, Jungkook tenía ese sentido muy poco desarrollado, su corazón no se alteraba fácilmente y en ocasiones Taehyung lo comparaba con las personas que pasaban junto a ellos en las calles y el exorcista se veía completamente fuera de lugar.
───Tan vivo, pero tan muerto. ───Susurró contra la piel antes de levantarse y sentarse a su lado en la orilla de la cama.
Podría indagar sencillamente en el libro de la vida del humano, pero sería más divertido descubrirlo por sí mismo, mientras se embriagaba más con la presencia misteriosa del exorcista.
═════•°✝°•═════
El capítulo es corto pero contundente con lo que se debe saber hasta el momento. Pido paciencia 💋
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro