Yoichi estaba listo. Tenía al mejor equipo que pudo reunir para enfrentarse a Rin y recuperar a Bachira, Ni bien fueron trasladados a la cuarta fase, se dispuso a ir en búsqueda de su antiguo compañero y desafiar a su nuevo equipo a un partido. Grande fue su sorpresa cuando vio a Rin y Bachira salir juntos del campo de entrenamiento.

- Hey Bachira - Su mirada era decidida, en cambio el castaño lucía sorprendido - Estuve buscándote.

- Isagi...

- Como lo prometí, vine a robarte de vuelta - Esta vez se dirigió al más alto - Juguemos Rin.

......

Lograron pasar al equipo rojo con las reacciones químicas que habían estado entrenando durante esos días. Chigiri estaba a punto de marcar el primer gol cuando un apagón interrumpió el juego. Todos quedaron paralizados ante la oscuridad que los rodeó.

- ¿Qué ocurrió? - Murmuró Isagi, caminando a tientas por el campo para intentar encontrar a alguno de sus compañeros. La luz volvió segundos después pero menos intensa que de costumbre, parecían ser las luces de emergencia.

- Esto es un mensaje de urgencia, dejen lo que estén haciendo y vayan a reunirse en el salón principal de la primera planta, repito, esto es un mensaje de urgencia, dejen lo que estén haciendo y vayan a reunirse en el salón principal de la primera planta - La voz femenina que salió de los altavoces los alertó. Estaban en medio de un partido importante y aun así los interrumpieron por un simple anuncio. No sabía el motivo pero Isagi tenía un mal augurio.

- Dejemos esto para luego - Chigiri fue el primero en romper el silencio pero el equipo rojo se adelantó en abandonar el campo, Rin encabezando la fila. Se perdieron por el pasillo de salida y más atrás los siguieron los miembros del team White.

Cuando Isagi cruzó el umbral ligeramente iluminado por una sutil luz roja, una figura conocida lo esperaba no muy alejado de la entrada.

- Han mejorado mucho en el poco tiempo que no he estado cerca, Isagi.

- Bachira - Isagi se acercó y ambos retomaron el camino - Aún no has visto nada, no pienso perder contra tu equipo.

- Veo que estás decidido, me gustaría decirte que quiero ver eso, después de todo estás aquí para recuperarme - Sonrió el castaño - Aunque igual no la tendrás tan fácil, no pienso perder, egoísta.

- Sería aburrido si simplemente te dejaras vencer después de todo.

Bachira soltó una leve carcajada para luego pasar su brazo por el hombro de su compañero, rival en ese momento - Mentiría si dijera que no te extraño Isagi, ser compañero de Rin-chan es aburrido - Murmuró - Además ya no tengo a quién alimentar.

- ¿Sí? Pues yo no extraño verte rondar por los vestuarios desnudo - Bromeó - Ahora mi equipo es más normal y tranquilo, no tenemos alborotadores como tú - Mintió, logrando un puchero desilusionado en el rostro de Meguru. La verdad lidiar con Chigiri, Nagi y Barou en un mismo cuarto era mil veces peor que solo tener que cuidar de Bachira, pero eso no se lo haría saber al chico. Definitivamente también lo extrañaba, después de todo para eso estaba ahí, necesitaba traerlo de vuelta a su lado.

Antes de darse cuenta habían llegado a su destino.

Lo primero que notó es que estaban todos los miembros restantes de blue lock. Varias caras conocidas y otras no tanto.

Los antiguos miembros del equipo Z se encontraban también en el salón, algunos juntos y otros con sus equipos actuales. Isagi se fijó en Naruhaya. ¿Qué hacía él en ese lugar? Pensó que había sido expulsado tras perder en el partido de 2 vs 2 que tuvieron contra él y Barou. Casi como si lo hubiera llamado con la mente, el castaño se giró y lo vio. Enseguida se acercó al dúo con una alegre sonrisa.

- ¡Isagi, Bachira! - Saludó y observó la vestimenta de ambos - Ustedes siempre juntos aun cuando son de equipos contrarios, sí que se han hecho cercanos aquí.

- Naruhaya ¿Por qué sigues aquí? - Cuestionó Isagi sin medir el filo de su lengua.

- Al parecer no estás feliz de verme - Se cruzó de brazos pero aun mantuvo una sonrisa en su rostro - Aunque no te culpo, yo también pensé que me iría luego de ese partido.

- ¿Qué pasó exactamente Isagi? - Bachira no estaba al tanto de lo que había vivido su amigo luego de haber sido alejado de él.

- Bueno luego de que te fueras al equipo de Rin, Nagi y yo tuvimos un partido contra Barou y Naruhaya.

- Y perdimos, así que Isagi escogió a Barou y yo quedé eliminado - Hizo comillas con sus dedos en esta última palabra.

- De nuevo lo siento, pero volvería a escoger a Barou.

- No te preocupes, sin rencores.

- Aún no sé qué haces aquí - Isagi seguía sin comprender.

- Cierto, hay otra prueba para los perdedores de la segunda fase, solo saldrá uno victorioso y podrá seguir en Blue Lock - Explicó, señalando a algunos chicos cerca de ellos - Hay algunos de aquí que han sido eliminados pero están pasando por el comodín al igual que yo.

- ¿Comodín? - Preguntaron a la vez los miembros del equipo blanco y rojo. Naruhaya solo asintió.

- Así se llama esa prueba.

El azabache desvió la mirada para inspeccionar el terreno, pudo localizar a su equipo junto con Reo y Kunigami, se alegró de ver a ambos ahí. Estaba a punto de acercarse cuando la voz e imagen de Ego en la enorme pantalla se lo impidió.

- Bienvenidos diamantes sin pulir. Seguro se estarán preguntando el motivo por el cual los he reunido aquí - Todos comenzaron a murmurar y Ego aclaró su garganta para mantener la atención centrada en él - El proyecto Blue Lock queda cancelado a partir de ahora.

Las quejas no se hicieron esperar, aclamando por un motivo lógico por el cual de la nada todo lo vivido en ese lugar quedaría atrás y no valdría nada para ellos.

- Sí que son molestos - Murmuró Ego - Si quieren un motivo, aquí está - El video que mostró a continuación dejó helado a más de uno. Tokio se había venido abajo. Las calles estaban paralizadas, varios vehículos estrellados o volcados, humo saliendo de varios edificios, cadáveres tirados en el asfalto y lo más preocupante, personas siendo devoradas por otras. Una reportera explicó brevemente la situación desde un estudio. Al parecer todo se debía a un virus que no llevaba más de una semana recorriendo el país y el extranjero. La mujer explicó que no se sabía nada del origen de este pero que la forma más común de contagio era a través de rasguños o directamente mordidas hechas por los infectados. Explicó algunos de los síntomas como fiebre alta, pérdida de color en la piel, desmayos y faltas de aire, acabando en la muerte, no obstante este era el inicio de la verdadera naturaleza del virus. Una vez muerto, el infectado revivía y se comportaba de manera agresiva, atacando a cualquier ser vivo que encontrara en el camino, tanto humano como animal y devorándolo hasta su muerte. Ego regresó a la pantalla y observó los rostros de incredulidad de su audiencia.

El lugar quedó en un silencio abrumador hasta que uno de los participantes del proyecto decidió hablar.

- ¿Qué tipo de broma es esta?

¿Broma? Ego odiaba las bromas.

- Esta es la nueva realidad - No podían creer lo que acababan de ver, era simplemente imposible que en menos de una semana Japón se hubiera ido a la mierda - Presten atención, Blue Lock suele abastecerse una vez por semana, hace una semana exactamente nadie ha venido a reponer los suministros que los mantienen con vida en este lugar. Supongo que deducen que no queda mucho alimento en el edificio. Por estar en una zona montañosa, el virus aún no ha llegado a este lugar. Pueden quedarse aquí o simplemente salir e intentar llegar a la ciudad, el camino es largo y tedioso. No creo que alguno de ustedes sobreviva ahí fuera, menos serían capaces de soportar lo que les espera en la capital. Ustedes deciden que hacer a continuación. Ya no es mi responsabilidad lo que pase con sus vidas. Llegó el momento de demostrar de qué están hechos sus egos fuera del campo.

Las puertas se abrieron a continuación y el cartel con la palabra "salida" se iluminó.

- Son libres ahora - Dichas sus últimas palabras, se cortó la conexión.

Todo el lugar se vino abajo. Una avalancha de personas corrió hacia el pasillo, algunos siendo golpeados y hasta pisados cruelmente por sus compañeros. Los gritos desgarradores de los chicos en el suelo hicieron que Isagi retrocediera, jamás pensó que vería tal caos.

Bachira fue empujado por uno de los chicos que tiraron al suelo, siendo arrastrado el castaño con él. Isagi se apresuró a sacar el cuerpo herido del otro adolescente para ayudar a su amigo a ponerse de pie antes de que fuera arrastrado al mar de pisadas a su alrededor.

- ¿Estás bien Bachira? - Isagi lo miró preocupado y el castaño solo pudo asentir en respuesta. Rápidamente el de orbes azules lo tomó de la mano y lo arrastró por uno de los pasillos vacíos. Ni siquiera se percató de que Naruhaya les seguía de cerca hasta que divisó la puerta hacia uno de los vestuarios. Una vez los tres estuvieron dentro, cerró con seguro y se permitió respirar profundo.

Naruhaya fue el primero en sucumbir ante el pánico. Comenzó a caminar de un lado a otro mientras se agarraba el rostro, como si quisiera dejarse las uñas incrustadas en la piel, era evidente que estaba aterrorizado. Todo aquello era surrealista.

Isagi en cambio se sentó en el suelo, recostando su espalda en la húmeda pared. Sus manos temblaron pero las cerró en puños, evitando que sus nervios le jugaran en contra, tenía que mantenerse calmado para pensar en un plan. Bachira agarró una de sus manos y lo miró con incertidumbre. De fondo solo podía oír la voz de Naruhaya diciendo "esto es una pesadilla" una y otra vez.

Tal vez el chico estuviera preocupado por su familia.

Cierto, su familia. Isagi no había tenido tiempo de pensar en sus padres, ni siquiera sabía si estaban a salvo o no. Eso lo descolocó aun más, la última vez que les había escrito había sido hace más de una semana, antes de que Japón se viera envuelto en esta situación.

- Cálmate Isagi, tu familia seguro está a salvo - ¿Cómo supo siquiera en lo que estaba pensando? Bachira no lucía muy preocupado, tal vez ni siquiera entendió la gravedad de la situación. Era imposible que estuviera tan relajado ante un escenario tan incierto.

- Tú luces demasiado calmado - Murmuró - ¿No te preocupa tu familia?

- Mentiría si dijera que no estoy preocupado por mi madre, pero la conozco, sé que ella sabe cuidarse sola. Es imposible que algo así pueda con ella - Isagi no creyó del todo en sus palabras. A pesar de su apariencia serena, sus ojos parecían a punto de romperse en llanto. Tomó su agarre y lo apretó con un poco de fuerza, intentando darle algo de ánimo, aunque no sabía si era para el castaño o para él mismo.

- ¿Qué haremos chicos? - Naruhaya preguntó de la nada e Isagi intentó centrar su mente y pensar las cosas en frío. Se puso de pie bajo la mirada de sus compañeros.

-Según la reportera de aquella noticia, el virus se transmite por mordidas y rasguños. Tenemos que armarnos con lo que podamos conseguir, no podemos dejar que esos infectados nos lastimen - Llegó a la conclusión rápidamente - También sería buena idea ir en búsqueda de los alimentos restantes y luego decidir qué haremos, si quedarnos o intentar buscar una mejor opción, de todas formas no creo que ir a la ciudad sea lo correcto, ese lugar sería una muerte asegurada.

- Me parece buena idea - Bachira lo apoyó - ¿Tú qué dices Naruhaya?

- Yo solo quiero volver a casa - El chico se abrazó a sí mismo mientras sorbía su nariz y dejaba que varias lágrimas recorrieran sus mejillas.

- Isagi acaba de decir que es peligroso ir a la ciudad, no sabemos bien como está la situación allá - Bachira le recordó pero el chico pareció ignorarlo.

- Puedes venir con nosotros y luego puedes irte por tu cuenta si prefieres pero ahora mismo creo que estar solo no es lo más sensato. Ya viste la estampida que se armó en cuanto abrieron las salidas - Isagi intentó hacerlo entrar en razón. Naruhaya lo miró con dudas pero luego de unos segundos asintió.

Bachira asomó su cabeza por el pasillo medio oscuro - Creo que ya todos se fueron.

- Bien, es hora de salir.