Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 26: Stella Valente, eres mi rival.

Perdí el rastro de quién era yo por... no lo sé, pareció una jodida eternidad. Aunque, debo confesar, que me resultó atroz apenas abrir los ojos y encontrarme con mi madre llorando a mi lado, sacudiéndome a cada rato, sin darme cuenta de nada, ella sólo me abrazo con mucha fuerza.

- Oh, dios mío... -sollozó- creí que nunca despertarías...

- Uh... ¿qué pasó? -consulté, aterrado, ¿por qué ella estaba así?

- No respirabas y tus latidos eran muy débiles, oh, llevo una media ahora aquí tratando de despertarte y nada. Que bueno que ya estás bien... -me soltó y limpió sus lágrimas- Ya es muy tarde, son las ocho, estás llegando atrasado al colegio.

- ¿Tanto dormí? -pestañeé varias veces, joder, me dolía mucho la cabeza y los ojos los sentía demasiado pesados.

- Sí, ve a ducharte rápido mientras yo te preparo el desayuno, ¿sí?

- No tengo hambre... -mentí, mi estómago se revolvía y rogaba por comida.

- Vas a comer igual -ordenó y se fue de la habitación.

Suspiré, agotado. Me puse de pie y me tomé un paracetamol, vi la hora y joder...¡¿trece putas horas dormí?! Es que juro que no me lo creo, porque no sentí que dormía ni descansaba, más bien, me sentía algo así como muerto.

Ojalá y así me haya quedado.

Me tuve que duchar por las malas, sintiendo pena por mi mismo, estoy todo cortado y huesudo, sé que estoy demasiado delgado, no obstante, me niego a comer porque el miedo me supera y tampoco considero que sea ahora necesario para mi, quiero hacerlo pero me da miedo porque no quiero subir demasiado de peso, ser gordo y que Lars me odie, aparte, la gente se preocupará más por mi si dejo de comer, por tanto, van a dejar de odiarme y querer asesinarme -sí, aveces los humanos quieren matarme, lo sé porque sus miradas lo dicen-, para ser compasivos conmigo. Tiene lógica.

Me vestí con un suéter delgado para no morirme de calor en las clases, jeans rasgados y zapatillas de lona gastadas. No tenía ganas de arreglarme, sequé de mala gana mi cabello. No quise desenredar el horror que estaba formándose entre mis rizos Mi pereza me superaba por mucho, no quería ir, el miedo también influía en mis emociones, los de mi clase se burlarán de mi porque soy gay y me gusta Lars. Para rematar, la estúpida de Stella quedó en mi clase y tendré que soportarla todo el semestre.

Me limité a sólo desayunar té y medio pan tostado con mantequilla, nada más, con eso en todo el día sobreviviré. Llené una botella de litro y medio de agua para meterla dentro de mi mochila, lo más probable es que esté expuesto al sol y eso me haría necesitar más agua de la normal, allá puedo rellenarla para tener mis tres litros diarios de agua.

Mi madre fue a dejarme a la escuela para dejar constancia de porqué llegué tarde y me dejaron pasar hasta mi salón.

Me senté en el pupitre de adelante, solo. En la otra esquina del salón, también al frente, estaba Lars, solo también.

Al poco rato entró una chica a la sala, no hacía falta decir quién era...

- Chicos, tenemos a una alumna nueva desde Italia -dijo el profesor-, por favor, señorita, preséntese a la clase.

- Bueno, me llamo Stella Valente -dijo con una gran sonrisa, no vestía como zorra pero sin duda lo era, al parecer era rockera, tenía una camiseta de Nirvana sin mangas y unos shorts morados. Seguro ni conoce esa banda y cree que es una marca de ropa, sí, es eso, menuda puta-. Tengo catorce años y vengo desde Italia para continuar con mis historias, me encanta el rock y el metal, y ah, amo mucho a mi novio Lars, ¿ok?

Varios la recibieron con comentarios positivos, claro que la conocían, si todos en facebook podían ver las mil y un fotos que colgaba con su novio hasta en la ducha -y no es joda-, me molestaba que la recibieran tan bien. ¿Les habrá mostrado mi foto con poca ropa a los de mi clase? Que rabia...

Más de alguna vez sentí, u oí mejor dicho, que mis compañeros se reían. Obviamente lo hacían de mi, yo lo sabía, ¿era por la foto, verdad? ¿O descubrieron que me gusta Lars? Mierda, no lo sabía, me veía muy feo yo hoy, era obvio que se reían de mi, no había otra.

A la hora del recreo, me iba ocultando entre las sombras -sí, los fantasmas que me quieren matar, formé alianza con ellos para volverme invisible- para espiar a Lars, ver qué cosas le decía a Stella y a mi no. Muchas cosas... Lars no tenía miedo de besarla en público y claro, conmigo siempre se iba a ocultar, ¿es que yo le daba vergüenza? ¡Maldita sea!

Él se mostraba mucho más cariñoso, ¿por qué? Eso me dolía demasiado, K insistía en que me suicidara y L dijo que dejara de espiarlos, yo no podía deternerme, necesitaba sufrir porque demasiada calma me da asco aveces.

- Amor, ¿conoces a ese chico raro que nos espía de hace rato? -dijo ella con ese acento tan... ew. Me daba asco, no es que esté siendo xenófobo con los italianos, el problema no son ellos, lo es esa perra.

- Ehh... ¿hablas de Kirk? ¿Uno de cabello rizado? -ella asintió y él hizo una mueca- Si te digo la verdad, no me lo vas a creer.

- Vamos, cariño, dime.

- Kirk es... mi ex novio, ¿vale? Está un poquito mal de la cabeza, eso es todo, no tiene amigos, pero nada más, seguro ahora actúa de manera extraña porque quiere llamar la atención y conseguir amigos, qué sé yo.

Oh, eso me dolió mucho...

- Espera, ¿cómo? ¿Es tu ex? -ella se rió muy fuerte- ¡No te creo!

- Es en serio, estuvimos como dos meses y sí, con él perdí la virginidad, Stella, querida, sé que pensarás feo de mi pero... sabes que te quiero mucho, no es que yo siga pensando en él ni nada, hace más de tres meses que lo dejé porque estaba muy loco, parecía esquizofrénico. Así que... no te preocupes por él, seguro está buscando amigos, sólo ignóralo y va.

- Vale, aunque no podré hacerlo del todo al comprobar una hipótesis que tenía...

- ¿Qué? ¿De qué hablas?

- En las vacaciones, él te envió una foto suya con poca ropa... creo que todavía le gustas.

Lars abrió los ojos impresionado.

- ¿Qué? ¿En serio? ¿Y por qué nunca me dijiste? Joder, es que... -parecía shockeado, demasiado.

- Es que no sabía quién era el chico que te mandó la foto, creí que se había equivocado de número porque no lo tenías en tus contactos.

- Ah, es que... borré todas nuestras conversaciones para evitar que tú supieras lo mío con él, maldita sea, me daba vergüenza contarte... -hizo una mueca.

- Entonces... ¿no sientes nada por él, verdad? Que bueno que me haz contado de todas formas, eso significa que soy alguien en que puedes confiar.

- Claro que ya no siento nada, y obvio, confío en ti porque te amo demasiado.

Le dio un apasionado beso en los labios.

Yo me sentía muerto.

Permití que las lágrimas cayeran por mis mejillas, a cántaros. 

Salí corriendo de allí para encerrarme al baño a llorar, algo me decía que las sombras ya no me estaban protegiendo. Afuera del baño oía risas por montones, ¡se reían de mi porque me rechazaron! Joder, ¡qué crueles! ¿Qué les hice yo para recibir semejante castigo? ¡Los odio a todos!  El ser humano está en mi contra, como me gustan las pijas, ¡me aborrecen hasta hacerme llorar y desear la muerte con locura! ¡Malditos!

Saqué mis audífonos de mis bolsillos y me los coloqué, en mi celular puse:"The Show Must Go On" de Queen.

A medida que sonaba la canción yo iba dejando fluir sin miedo la tensión de sentimientos mía. Es que... me describía a la perfección.

En la parte del coro, reventé de manera fatal, me tiré al suelo y cubrí mi rostro con ambas manos, estaba avergonzado, joder, quedaban como diez minutos de recreo todavía, las clases no terminaban hasta las cuatro, quiero irme ya, ¡no lo soporto!

Nunca una letra me llegó tan profundo:

"Whatever happens, I'll leave it all to chance
Another heartache, another failed romance
On and on, does anybody know what we are living for?
I guess I'm learning, I must be warmer now
I'll soon be turning, round the corner now
Outside the dawn is breaking
But inside in the dark I'm aching to be free
The show must go on
The show must go on
Inside my heart is breaking
My make-up may be flaking
But my smile still stays on..."

Al finalizar la canción, me levanté y limpié mis lágrimas. Me cercioré que fuera del baño en que estaba, frente al lavabo, no hubiera nada para poder salir con los ojos llorosos sin que nadie me molestara.

Hinchados, rojos y doloridos eran mis ojos, mi nariz roja e hinchada también... ah, ¿alguna vez Lars llegó a considerar atractiva toda esta mierda que hay en mi? Juro que me doy asco.

A las tres y media, la psicóloga de la escuela pidió que Lars y yo fuéramos a la sala de psicopedagogía para iniciar este semestre con las sesiones de terapia que teníamos. Él sin problemas se levantó y fue para allá, yo... me negué por completo, no quería hablarle, L me lo ordenaba así que debía acatar a esa orden.

La psicóloga insistió y yo mantuve mi compostura rebelde, negándome de brazos cruzados con el vago argumento de que yo psicológicamente estaba bien porque L y K me lo decían, me ponía bastante agresivo además, ¿cómo no? ¡Mis compañeros también me obligaban a salir del salón y yo no quería! ¡Yo no debía ir a un mismo lugar con Lars, no! Con suerte soporto estar en un mismo salón con él en clases, menos podré estar en una terapia compartida.

La profesora intervino y dijo que mejor yo no saliera para que no hubieran interrupciones, me sacó en cara de que me fue mal en su examen final y que yo debía estudiar más. Vale, asunto resuelto, excepto porque los sucesores del gordo mamón de Randy -o sea, me refiero a Dewie y Jonnathan-, se pusieron a hablar a mis espaldas, diciendo que soy un marica, que sólo quiero llamar la atención, que estoy demente, entre otras cosas que me dolían.

Tampoco estuve muy atento en la clase de física, joder, que vieja cabrona la profe, me caía fatal. No quería estar en su clase, odiaba su jodida asignatura, no quería estar en este lugar rodeado de humanos asquerosos que no hacen más que hacerme sufrir. Me negué a tomar apuntes, hacer tareas y todo ese cuento, vaya, es que estaba muy lateado por este asunto del corazón roto, quería irme a mi casa rápido para poder llorar tranquilo.

Finalmente eran las cuatro y salí de clases corriendo, no sé si habrá sido real o no -vamos, que apenas salí me fumé un cigarrillo en el baño y de ahí salí a la calle, que el tabaco me hace alucinar, ¿sabían?- pero vi a Lars asomándose por la puerta de la sala de psicopedagogía, me miraba con pena al parecer, eso me heló la sangre y mi estómago se revolvió mucho, mis mejillas tomaron calor con fuerza. Que feo soy, no quería que me viera...

Llegué hasta mi casa corriendo y sintiendo mi corazón en la garganta, como si estuviera atragantándome con él. 

Algo que no hacía de hace meses, tocar guitarra, la conecté al amplificador y dejé que la creatividad fluyera en aquel momento de tranquilidad, el día de hoy los fantasmas fueron amables y dijeron que saldrían a dar una vuelta, dijeron que tendría tiempo hasta las nueve para tocar guitarra y masturbarme sin que nadie me haga comentarios por nada.

Aproveché mi instante creativo para componer algunos riffs e intentos de solos de guitarra. Tenía ganas de componerle alguna canción a Lars para plasmar todo lo que llevo oculto dentro y sólo puedo demostrar mediante las lágrimas. No podía y se quedaban en intentos fallidos llenos de miseria y rencor.

Maldita sea, no soporto este mundo, lo he dicho como mil veces, no obstante, lo juro, no doy más...

Un cuarto para las nueve me fui a acostar arropado hasta arriba por si las sombras lograban localizar mi casa y así no me encontraran. Los otros fantasmas estarían allí molestando, no obstante yo no sufriría el riesgo de ser arrastrado a la cuarta dimensión.

Tras haber sido un día lleno de sufrimiento, me quedé dormido de inmediato, gracias a dios.

Claro, para luego despertar por un mensaje de Whatsapp enviado a las tres de la mañana.

Era un audio.

De Lars.

Frustrado, porque por fin había logrado conciliar el sueño por mi cuenta en tantos meses, un idiota viene a interrumpir mi sueño profundo con un audio de cinco minutos.

- Em... ¿Hola? Espero no haberte despertado, aunque tú siempre sueles estar despierto a estas horas, bueno, vale, quería... quería decirte algo. ¿Ok?

Hubo un pequeño silencio.

- Quiero dejarte por aclarado que eres una persona maravillosa, no me arrepiento para nada de haberte conocido, eres increíble, inteligente y también muy guapo. ¿Vale? Era casi imposible no enamorarme de ti porque tenías todo lo que yo deseaba, de hecho, sigues teniéndolo, eres perfecto, ¿lo sabías? Bueno, el punto es que... me da una enorme pena que lo nuestro haya terminado.

Hice una mueca, mi corazón latía muy rápido por todos esos halagos.

- Te quiero, te amo, te adoro... y no sabes cómo. Pero... joder, ¿cómo lo digo? Seguro ya lo notaste pero yo... tengo a alguien más, a una chica igual de inteligente que tú, que tiene un bonito cabello como tú, que es divertida y linda como tú... la conocí poco tiempo después de que termináramos, coincidimos de inmediato, era imposible no resistirme a ella porque tiene lo mismo que tú tienes, un encanto natural tremendo.

Mordí mi labio inferior, abatido.

- Lo lamento mucho, no sé si tú sentirás algo por mi a estas alturas, han pasado muchos meses pero tengo el pequeño presentimiento de que te estoy hiriendo. No es mi intención, sabes que te amo todavía, es en serio, te amo pero ella... a ella también, no puedo dejarla porque... porque... porque Stella se sentiría muy mal, no quiero hacerla sufrir, eso me partiría el corazón, no sé... no me arriesgo a nada, aparte, tú siempre lloriqueabas que no querías que nadie te molestara porque te gustan los chicos... Bueno, ahora hagamos como si nada para que no te molesten, no estaré contigo para que no te molesten, para evitar que los demás te hagan sufrir y así me ahorro también el sufrimiento de mi preciosa novia...

Mi almohada comenzaba a humedecerse con mi llanto silencioso.

- Así todos ganamos y somos felices, ¿no? Tranquilo, te he visto solo... recuerda que yo te amo, ¿vale? No te sientas mal y no creas que no tienes a nadie porque yo si te quiero, si necesitas un abrazo o algo, dime y yo iré hacia a ti. Pero recuerda: a Stella no la dejaré, yo te amo pero a ella más... Joder, es complicada la cosa, ¿ok?

Negué, sabiendo que él no me vería y aún así proseguí llorando.

- Recuerda, yo te amo.

No...

- Te adoro.

No. Cállate.

- Eres una persona increíble, espero que puedas irte muy bien por tu propio camino y logres salir adelante sin mi, al igual que yo logré irme por mi camino y conseguí a alguien tan maravillosa como mi novia.

Maldito.

- Bueno, sólo eso quería decirte... buenas noches, espero que puedas descansar, lindo, te quiero mucho y espero que logres entender todo ésto que te acabo de decir, ¿sí? Te quiero...

Lleno de rabia, arrojé mi celular contra el suelo, haciendo que la batería salga disparada y la carcasa también. La calma había desaparecido, no, el sufrimiento de nuevo no... el deseo suicida, que bello es... matar... debo... no... yo.

Jadeaba, reía jugando con mis muñecos, imaginando que ese audio no existió y yo me pasaba el rollo de que Lars regresaría a mi, en medio de la oscuridad, yo jugaba con mis muñecos, haciendo que se besen y tengan mucho sexo desenfrenado.

Reía, con lágrimas, pero yo reía, no porque fuera gracioso, sino, porque estaba perdiendo la cordura, dolía tanto que sólo quería quedarme allí, jugando el resto de mi vida porque no me animaba a que los fantasmas se despertaran y que en el colegio me molesten. No...yo quería jugar, así me mantenía feliz.

Lars, yo también te amo, y sí, quiero casarme contigo. Seamos felices por siempre, por favor, ese es nuestro verdadero final, ¿no? ¿Qué tú te alejaste de mi y que tienes a una zorra posser de novia? No, eso no es real, es un sueño, Lars, tú todavía me perteneces, nuestro final es que seremos viejitos juntos y casados, ¿ok? 

Lars, tú me amas y yo te amo, porque somos novios todavía, ¿cierto? Tú nunca terminaste conmigo, querido, que mal sueño tuve todo este tiempo. Oh, te amo, joder, Lars, eres un amor... ¡Te quiero!

¿Tendremos hijos o no? ¡No lo sé! ¿Cómo los llamaremos? ¡No, Larsie, que Lars Junior no cuenta como nombre!  Vale, vale, que uno se llame Lars Junior y... ¿los otros? Sí, yo quiero tres hijos contigo, ¿te molesta? Ah, vale, que bueno que no, porque no quiero incomodarte. Bueno, de ahí vemos como le ponemos a los otros niños, ¿ok?

Buenos días, Lars, debo levantarme ya para ducharme e ir a la escuela, no quiero llegar tarde como ayer y pasar vergüenza. De ahí sigo jugando contigo en mi verdadera vida, el sueño feo en que Lars me rechaza, ya lo dije, es un sueño, voy para allá a ese sueño feo porque L me lo ordenó, cuando llegue a casa iré a la realidad para que sigamos con nuestro romance eterno, ¿ok?

----

Nota: Ayy ;--; ok, mentí un poco con respecto a que en este capítulo mejoraría, les prometo que en el próximo sí o sí va a mejorar c:

Joder, sé que no les interesa del todo, pero hoy me siento muy productiva, subí capítulo de esta novela, de Infected mind and skin (otra novela Klars) y de Disposable Heroes (fanfic romance con Lars), eso, me siento productiva C:

Ahora, para no aburrirlas más, les aclaro que en multimedia puse "1000 times goodbye" de Megadeth porque era la canción que más se adecuaba a la temática del capítulo y... la chica que aparece en la imagen, ni idea quién es, la vi en Tumblr y quise tomarla de ejemplo para el personaje de Stella en cuánto lo físico, eso, no planeo ofender a nadie si es que esa chica de la fotografía es alguna chica famosa que conozcan C:

Eso, espero que les haya gustado el capítulo.

Besos y abrazos pa' todas ♥


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro