"Tengo esta sensación de estremecimiento, puedo sentirla. Nuestros ojos se han encontrado, sin esconderse, ¿puedes sentirlo?. Acercándonos, tú y yo. Oh cariño, esto es perfecto."
—Kim Dong Han

Las luces de neón envolvían el cuerpo de Jungkook mientras bailaba sobre aquella pequeña plataforma y Taehyung no podía dejar de pensar que su novio se veía realmente cómodo dejándose llevar por el sonido de la música, los sábados el local que generalmente se llenaba de baile elegante y coreografías complicadas dejaba paso a un ambiente más joven y desinhibido donde algunos de los bailarines de Sehun podían conseguir un dinero extra animando la fiesta con sus movimientos improvisados y su vestuario llamativo. Nadie en su sano juicio o con la vista bien definida se atrevería a nombrar a alguien mejor que Minhyuk en aquello, él llenaba el lugar con su sola presencia pero a los ojos del jinete este era demasiado obvio y escandaloso, quizás porque Kook era quien era o tal vez por su forma de bailar más libre, él prefería mirar a su pareja.

Había muchos bailarines allí, todos ellos lo hacían bien pero para Taehyung ninguno se comparaba a Jungkook. Sus movimientos demostraban que no había coreografía previa, se limitaba a cerrar los ojos y disfrutar de la música durante la hora completa que su jefe le permitía trabajar allí. A pesar de que era difícil hacerse con un hueco de animador durante los sábados, había un motivo notable por el cual el hermano de Yoongi siempre lo conseguía. Era distinto a los demás, guapo, atraía las miradas de la gente que se agolpaba en la pista de baile y sinceramente Tae no podía comprender porqué Sehun sólo le daba una mísera hora. Su chico parecía el rey del mundo sobre aquella plataforma.

Cuando Jungkook bajó de la plataforma el jinete pudo notar sin problema alguno su expresión tristona. El disfrute había acabado para él y a juzgar por su mirada eso en cierta manera lo decepcionaba.

—Ya podemos irnos - dijo el hermano de Yoongi acercándose a la zona de la barra en la que Taehyung había estado sentado.

—No pareces querer irte, y yo todavía no me he divertido lo suficiente - Taehyung dejó escapar un pequeño puchero involuntario - ¿Por qué nos vamos tan pronto?

—Tengo que estudiar y… - Jungkook tuvo que acercarse a su oído para hablar por encima de la fuerte música, circunstancia que el jinete aprovecho para tomarlo por la cintura y empujarlo de vuelta a la pista de baile.

—Venga Jungkook, unos minutos más no te mataran. Mira a la gente, quieres irte cuando todos empiezan a llegar, tengamos un poco de diversión.

Jungkook bufó mirando a Taehyung, podía notar la cercanía que habían tomado mientras el chico lo empujaba hacia el tumulto de gente así como las manos de este presionando la piel de su cintura. Tenía que luchar entre la tentación de quedarse y la responsabilidad, cada sábado deseaba poder disfrutar un poco más pero se obligaba a sí mismo a cumplir con su deber. Sin embargo ahora tenía un gran hándicap obstaculizando todos sus objetivos y este no parecía fácil de hacer cambiar de opinión.

—Taehyung… - protestó.

—Solo unos minutos Kook, no tienes nada de qué preocuparte. Mañana es domingo, podrás retomar tus estudios sin ningún problema. De todos modos no tendrás un solo examen hasta dentro de semanas, estudias cada día. Unos minutos menos no serán cruciales en tu caso.

—Aún así…

Aunque Jungkook pretendía negarse de nuevo, supo por cómo el jinete lo miraba que aquello había sido más una orden indirecta que un intento de convencerlo. No habría manera de sacarle aquello de la cabeza así que cedió, unos minutos no podrían hacerle tanto daño. ¿Taehyung tenía medio punto de lógica al menos?

Fuera como fuese antes de acabar de pensar en una respuesta su cuerpo ya se estaba moviendo al ritmo de la música con las manos de Taehyung aún en su cintura. La gente de su edad se preocupaba tan sólo por aquello que les concernía justo en esos instantes , estaban en el medio de todo y aún así nadie parecía prestarles demasiada atención. Jungkook no pudo evitar sonreír ampliamente mientras cerraba los ojos sintiendo la leve mordida que Taehyung dejaba ahora sobre una de sus clavículas dispuesto a crear una marca, bastaron unos segundos para que los labios del jinete dejasen paso a una lenta lamida y una succión seductora de la piel de su cuello, podía sentir cada movimiento del jinete mientras los dos se balanceaban al ritmo de la música. Kook realmente empezaba a disfrutar ese tipo de besos en el cuello, los chupetones eran un efecto secundario sin importancia a comparación con lo bien que se sentía la experta boca de Tae dejando largos y húmedos besos en sus clavículas.

Cuando abrió los ojos pudo notar como las personas disfrutaban de la música junto a sus amigos y parejas, le resultó casi extraño entender que en ese preciso instante él era solo un chico más en aquella monumental fiesta de sábado noche, alguien de veinte años todavía joven, alguien que tenía el derecho de disfrutar un poco. Entonces enterró su mano en el cabello de Taehyung y tras dejar escapar un gemido lo acercó más a su cuello encantado con la atención y los besos que este le dedicaba mientras bailaban. La música explotaba en sus oídos con estruendosa fuerza. De alguna manera se sentía un adolescente normal y corriente, eso le gustaba lo suficiente como para olvidar los estudios por unos minutos… Quizás por un par de horas.

—Jungkook borracho un sábado por la noche - Yugyeom silbo impresionado mientras ayudaba a Taehyung a sujetar al hermano de Yoongi quien se tambaleaba con una sonrisa tonta en los labios - ¿No es su noche de estudio intensivo? Casi no duerme los fines de semana.

—Todas son noches de estudio intensivo - Taehyung frunció el ceño agarrando a Jungkook por la cintura - Por eso creí que sería bueno verlo desconectar pero ha bebido demasiado.

Yugyeom sonrió felizmente, incluso si su amigo había bebido de más y acabado borracho, todavía era un progreso pensar en este teniendo un poco de vida.

—Sinceramente, Jungkook no aguanta mucho el alcohol. Se emborracha con poco, sin embargo esta es la primera vez que acaba embriagado debido a que se lo estaba pasando bien. No sé si es por ti o porque simplemente necesitaba tener un tiempo de diversión pero estoy feliz de todos modos porque mi amigo no se ha encerrado con café para estudiar durante toda la noche. Necesita este tipo de cosas de vez en cuando, yo también estudio duro pero tengo mis propios momentos para desconectar al contrario de él.

Taehyung sonrió felizmente, le gustaba saber que no era el único loco que pensaba que Jungkook tenía que relajarse un poco con los estudios. Sus notas eran impecables pero seguía descuidando su sueño y vida diaria con tal de poder estudiar más, a veces creía que el chico estaba realmente obsesionado debido al miedo de perder la beca que le ayudaba a poder seguir estudiando en la universidad. Él no quería que Kook perdiese nada, solo estaba intentando que este encontrase un punto intermedio en el que sus estudios no lo convirtieran en un maldito robot. Maldita sea, podría pagar esa universidad si hiciese falta con tal de darle un poco de tiempo y espacio a Kook para vivir su vida. Unos minutos al día era suficientes, todo el tiempo libre de este se iba entre libros.

Yugyeom lo ayudó a llevar a Jungkook hasta el salón de su apartamento y tras eso salió de la casa pues al igual que Kook este trabajaba en el local de baile los sábados por la noche, la única diferencia es que tenía un horario más fijo que el del hermano de Yoongi.

—Quiero besos - Jungkook hizo un puchero que casi derrite a Taehyung allí mismo y lo observó estirando los brazos para lograr llegar hasta él mientras se tambaleaba. Parecía un niño pequeño que acaba de aprender a andar.

—Estás borracho Kookie, vamos a darte una ducha.

Jungkook negó infantilmente mientras envolvía los hombros de Taehyung con sus brazos y acercaba su boca a los labios de este para buscar contacto. El jinete sonrió y le dedicó un leve beso cariñoso que hizo a Kook protestar. Este quería más contacto.

—¿Por qué eres tan atractivo? - Jungkook preguntó con un puchero mientras uno de sus dedos acariciaba la marcada barbilla del jinete hasta realizar un camino hacia su labio inferior.

—Deberías ducharte y despejarte un poco, si después de eso sigues queriendo besos, te los daré.

Jungkook negó envolviendo con más fuerza sus brazos alrededor de Taehyung. Solo había dos posibles reacciones para él cuando se emborrachaba, podía volverse la persona más mimosa e insoportable del mundo o bien el chico más depresivo. Yugyeom había lidiado en alguna ocasión con ambas versiones de su personalidad embriagado y aunque su amigo solía ser paciente a menudo acababa desistiendo de la tarea de cuidarlo.

Taehyung no entendía bien porque Jungkook se comportaba de un modo tan infantil y aunque lo adjudicaba al alcohol, le gustaba creer que quizás una pequeña parte de ese chico realmente quería su atención de forma sincera, no solo motivado por la borrachera.

—A la ducha Jungkook - sonrió mientras se desprendía de los brazos del hermano de Yoongi y lo empujaba hacia el baño. Las tornas habían cambiado repentinamente y ahora era él quien se veía obligado a cuidar de Kook.

Jungkook suspiró levemente mareado y se dejó hacer cuando Taehyung le quitó la ropa para que se metiese en la ducha, el agua tibia comenzaba a deshacer su burbuja alcoholizada pero la calor en su estómago seguía presente. Seguía necesitando contacto con el jinete debido a que los numerosos besos que habían compartido mientras bailaban en el local encendieron cada rastro de su ser y cuerpo.

—Entra conmigo - su voz era ronca por la necesidad de un poco de atención y la mirada de Taehyung sobre su cuerpo lo empeoraba todo.

Taehyung sonrió levemente todavía apoyado en la puerta del baño y negó. Realmente habría aprovechado esa oportunidad en otra ocasión pero en ese preciso instante sabía que Jungkook todavía seguía, incluso levemente, bajo los efectos de la bebida.

—Hoy tendrás que solucionar esa erección solo bebé - dijo antes de salir del baño y cerrar la puerta.

Jungkook olisqueó el aire y sintió sus tripas crujir, ni siquiera recordaba cuando se había dormido o cómo había llegado a casa y se había metido en su cama. Las imágenes eran nítidas en su mente hasta el momento en que comenzó a beber en el local la noche anterior, sabía que había estado bailando con Taehyung durante un tiempo y que después de eso ambos bebieron algunos chupitos, tras aquello… Todo se había disipado. No recordaba absolutamente nada.

Aún con la mente confusa el olor de comida volvió a llegar hasta su nariz y se relamió los labios hambriento, sentía un leve dolor de cabeza que sin duda indicaba que tal vez el motivo de su confusión radicaba en que había bebido más de lo que podía soportar y él realmente soportaba muy poco alcohol. Con un suspiró se levantó de la cama dispuesto a atacar lo que quiera que fuese esa comida que atraía la atención de su estómago de forma inevitable.

Unos pasos hacia la cocina le sirvieron para identificar al responsable de tal delicioso olor, Taehyung estaba cocinando algo mientras charlaba con Baek quien se mantenía sentado sobre la encimera mientras observaba a su amigo cocinar.

—Te ves como la mierda - el amigo de Taehyung fue el primero en hablar cuando Kook se asomó a la cocina olisqueando el aire.

Jungkook se limitó a ignorarlo y caminó hacia Taehyung para comprobar que era lo que este estaba cocinando.

—¿Tienes hambre? - la voz de Taehyung sonó dulce mientras se giraba para posar un beso sobre la mejilla de su novio.

—Hmmm, sí pero me duele la cabeza. ¿Ayer bebí mucho?

—No demasiado pero acabaste borracho de todos modos - Tae se encogió de hombros divertido - Hay analgésicos en mi cajón de las medicinas, puedes tomar los que necesites.

Jungkook asintió y hizo un gesto hacia la comida.

—Un intento de comida española - habló Baekhyun - Paella. Le sale bien así que quizás debas tomar esos analgésicos para disfrutarla, iré a comprar pan fresco.

Jungkook observó al amigo de Taehyung y al gato colarse entre las piernas de su novio para después saltar y ocupar la zona de la encimera que anteriormente había estado usando Baek como asiento. Si se paraba a pensarlo, ese apartamento tenía un aura mucho más familiar ahora que hace unos meses… Casi parecía alegre y con vida. Incluso las plantas que Tae había ido acumulando, florecían con gracia y plenitud, las goteras ya no estaban y había visto algunos cubos de pintura que prometían darle un aspecto más hogareño a las paredes cuando el jinete decidiese pintar.

—¿Baekhyun va a comer con nosotros? - preguntó aún levemente adormilado.

Taehyung asintió.

—Yugyeom también vendrá, me encontré con él en el supermercado y parecía interesado en probar la paella. ¿Te parece bien eso?

Jungkook se encogió de hombros, era extraño ver a tanta gente en su casa pero no le desagradaba tener a su mejor amigo allí, tampoco que Tae tuviese al suyo.

—Iré a vestirme y a por eso analgésicos.

Sonrió levemente y se dejó hacer cuando el jinete peinó su cabello levemente con sus grandes manos.

—Ve entonces - Taehyung posó un suave beso sobre los labios de Jungkook y sonrió - luego puedes ayudarme con esto si quieres.

Jungkook sólo asintió sintiendo la calidez de la casa envolverlo, tal vez la calidez de Taehyung. No estaba seguro de qué era.

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Capítulo corto pero necesario para el desarrollo de los sentimientos en la historia. Espero que os haya gustado y me gustaría dejaros una recomendación musical.
Se trata del grupo IZ y su canción EDEN.

Un beso, Mel 😘