05
Una gata moteada entró a la guarida de los aprendices, caminó entre los lechos sin hacer el menor ruido hasta llegar a uno en el que descansaba una gata bicolor.
"Zarpa de Fauces" susurró moviendola lentamente con una pata, la aprendiza bostezó y la miró.
"Hola Flor de Loto" saludo la aprendiza levantándose de su lecho "¿qué haremos hoy?"
"Hoy te enseñaré algunos movimientos simples para empezar, luego iremos a cazar" Flor de Loto la guió a la salida y fueron a la pila de presas. "Come algo antes de irnos"
Zarpa de Fauces asintió y tomo un rollizo conejo, empezó a comerlo con hambrientos mordiscos, se limpió las patas y busco a su mentora, en el camino se topó con su hermano.
"Hola Zarpa de Alerce" maulló sonriente, el aprendiz le devolvió la sonrisa.
"Busco a Liebre, ¿lo has visto?" preguntó Zarpa de Alerce, justo en ese momento divisó la figura color arena de su mentor "olvidalo, allí está" se despidió y fue trotando junto al guerrero.
Zarpa de Fauces fue corriendo junto a Flor de Loto cuando vio que la llamaba, salieron del campamento en dirección a un claro en el bosque, ella miró a su mentora, esperando la primera lección.
"Bien, Zarpa de Fauces" Flor de Loto caminó al centro del claro, luego señaló una roca con la pata "intenta saltar sobre esa roca, luego gira y derribame"
La aprendiza tomo impulso y salto, iba a girar pero pisó mal y calló al suelo, se levantó y volvió a intentar el movimiento, está vez lo logró, en cuestión de segundos había derribado a su mentora.
"Bien hecho" la felicito "nada mal para la primera vez"
"Gracias" dijo sonriente, se apartó para que Flor de Loto pudiera levantarse "¿que sigue?" Pregunto animada.
"Fingamos que soy un tejón" maullo, poniéndose en posición de ataque
"Muestrame que harías" dijo la gata "y mantén las garras envainadas, no quiero un arañazo" añadió en tono bromista, aunque Zarpa de Fauces sabía que hablaba en serio.
"Esta bien" dicho eso sin previo aviso salto sobre uno de los costados de la gata, puso todo su peso en ese ataque, logró derribarla, Flor de Loto creó una nube de arena al caer, ubicó las patas delanteras en los hombros de la gata, evitando que se levantara.
"Bastante rápido" Flor de Loto se levantó y se sacudió la arena del pelaje "ahora otro movimiento..."
•••☆•••
Las dos gatas volvían al campamento cargando dos ratones y una paloma, habían pasado todo el día entrenando y cazando, debían de capturar la mayor cantidad de presas posible porque la estación de la caída de la hoja se acercaba, Zarpa de Fauces dejó un ratón en la pila de presas, le avisó a su mentora que saldría del campamento, caminó por el bosque en busca de un arroyo, cuando lo encontró se acercó y se agachó para beber.
"¿hum...?" la aprendiza se confundió al ver el reflejo de una gata blanca de ojos azules, levantó la cabeza y se encontró con Zarpa Brillante, una de las aprendizas de su clan, la gata era una luna mayor que Zarpa de Fauces.
"Hola" saludo Zarpa Brillante, sonriente.
"Hola Zarpa Brillante" respondió la aprendiza animada, un pequeño rubor se hizo visible en sus mejillas.
"Estoy patrullando con mi mentor, Kuro y Ojos de Cobra, ¿vienes?" Le pregunto Zarpa Brillante, levantándose de su lugar.
"Por supuesto" imitó a su amiga y caminó junto a ella, a unos pocos zorros de distancia se encontraban los tres gatos que la aprendiza había nombrado, apresuraron el paso para alcanzarlos.
"¿huelen eso?" Pregunto un atigrado dorado de patas blancas, mirando hacia todos lados.
"¿que cosa Raya Fugaz?" Pregunto Kuro, el cual estaba observando los alrededores igual que el atigrado.
"Clan del Río" respondió con asco el guerrero, a lo lejos se encontraba un pequeño grupo de tres guerreros del clan del río.
"¡Oigan, están en el territorio del clan de la Flama, largo de aquí!" Les grito Ojos de Cobra, acercándose con las garras desenvainadas, tras el, los otros cuatro gatos lo seguían.
"No por mucho tiempo" le respondió un gato tricolor con malicia, mostrando los colmillos.
"Cierra el hocico, cagarruta de zorro" le bufó Raya Fugaz, devolviendole el gesto, un brillo de ira apareció en sus ojos al ver que traían presas consigo "¿como se atreven a robar nuestras presas?" Sacó las garras, listo por si una pelea fuera necesaria.
"No las robamos" una delgada aprendiza atigrada se acercó, Zarpa de Fauces le gruño, esa gata no le llegaba ni a los hombros a Raya Fugaz. "Corrieron hacia aquí desde nuestro territorio y las seguimos"
"Ahora están en nuestro, así que dejen esas presas justo allí y lárguense" Zarpa Brillante sacudía la cola de un lado a otro como si de un látigo se tratará.
"O los sacaremos a la fuerza" añadió Kuro, dándoles una mirada de asco a los gatos del clan del río.
"Tendrán que pelear si quieren esto" un gato blanco salto sobre Kuro y le dio un manotazo, el aprendiz bufó y le dio un zarpazo en el ojo.
"¡No toques a Gaviota!" Le grito la aprendiza atigrada, lanzándose sobre el, Ojos de Cobra chocó contra el costado de la gata, tirándola lejos del alcance de su aprendiz, luego se abalanzó contra Gaviota y le enterró los colmillos en una pata, el gato chillo de dolor y soltó a Kuro, preocupándose por quitarse a Ojos de Cobra de encima.
Zarpa de Fauces salto al costado del gato tricolor, el cual estaba enzarzado en una pelea con Raya Fugaz, lo empujó y le dio varios zarpazos.
"¡piedad, piedad!" Gritó desesperado, le dio una patada y se levantó, la aprendiza había logrado que una buena cantidad de sangre se escurriera por las heridas del guerrero, Zarpa de Fauces se miró las patas, estaban manchadas del líquido rojizo, ella se obligó a no gritar horrorizada.
"retirada!" Ordenó Gaviota, antes de irse volteó a ver a la aprendiza "Estrella de Otoño sabrá de esto" dijo lanzándole una mirada filosa, luego corrió tras sus compañeros en dirección a su clan.
"¿Flor de Loto te enseño eso?" Preguntó Raya Fugaz, mirando a la aprendiza la cual no respondió, el gato gruñó.
"No vuelvas a hacer eso, un guerrero no necesita matar para ganar" maulló con un tono frio, la aprendiza asintió sin decir nada, no quería hacer enfadar más al gato, los demás tomaron las presas y se dirigieron al campamento.
Zarpa de Fauces los seguía a paso lento, pensando en las palabras que el guerrero del clan del río había dicho, ¿locos?, ellos no estaban locos, ella lo había hecho para defender a su clan, si Estrella de Diablo permitía que los aprendices aprendieran esos movimientos debería ser por algo, ¿verdad?.
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