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CAPITULO 20: "Un día en la vida de Reynare."

Al entrar en el bar fueron recibidas por una Rossweisse visiblemente molesta mirando al dúo de chicas como una madre molesta. "¿Dónde estaban ustedes dos?" Golpeó el suelo con su pie de forma rítmica.

"Fuimos a dejar a issei en el aeropuerto ¿por qué preguntas?"

"Entonces lady Ravel, puedo suponer que su sirvienta se va a encargar de la tarea que se le encomendó a tu caballero". Pregunto Rossweisse entrecerrando sus ojos a la rubia.

"¿Que tarea?" Reynare miro a Ravel con una ceja levantada.

"Vigilar a Ars Hyoudou procurando que no consiga un arma o si muestras ataques de furia o perdida de sentidos". Ravel cruzo sus brazos y miro a Rossweisse ligeramente molesta por sus palabras. "Soy consiente que su trabajo era vigilar al la torre del clan Gremory pero como su rey puedo hacerme cargo de sus tareas mientras mi caballero está ocupado en sus estudios".

"Ravel-Sama me aré cargo, solo es vigilar lo". Reynare interrumpió con una sonrisa astuta.

"¿Que hay de tus tareas?" Ravel pregunto con sorpresa ante la caída que brindó su ayuda de forma tan desinteresada.

"Ningún problema, Ravel-Sama déjeme este asunto a mi". Reynare dijo actuando de forma pomposa claramente sobre actuando. Ravel solo se sintió mas confusa. '¿Desde cuándo Reynare la llamaba Ravel-sama?'. No comento nada al respecto y en cambio miro a la valkyria con una ceja levantada, claramente preguntando si había algún objeción con el curso de accion. Su firme mirada hizo que el rostro de piedra de Rossweisse mostrara grietas ante el desafío de la joven miembro del clan Phoenix solo para terminar suspirando en aceptación.

"No, supongo que no". Después esas palabras y con un asentimiento, Ravel se marcho, sabiendo al segundo piso directo a su despacho, Reynare siguió su ejemplo y de un salto se lanzó al sofá antes de encender la televisión.

"Pensé que habías dicho que ibas a vigilar a la torre del clan Gremory." Rossweisse se cruzó de brazos mientras miraba a la caída con una mirada aguda.

Tomando el control del televisor, lo apagó antes de enderezarse en su lugar. "Supongo que tienes razón, iré de inmediato, aún que será una lástima". Dejo caer su cabeza desanimada, los ojos de Rossweisse se volvieron rendijas ante la invitación a preguntar. Se planteo sobre si morder el sebo o no, pero después de unos segundos en los que Reynare no planeaba moverse decidió que era mejor no preguntar y en cambio la ignoró y dio media vuelta.

"¡Hey no me vas a preguntar que sería una pena! ¿¡No te interesa!?" Exclamó Reynare a la valkyria que tomo asiento en la barra y se estaba sirviendo un tarro enorme de cerveza.

"No, en verdad estoy bien así". Despidió la valkyria mientras observaba como la blanca espuma se derramaba por el borde del tarro, ver la sudorosa y fría taza hizo que Rossweisse sintiera su garganta seca.

"Si lo quieres hacer así, muy bien". Reynare camino con pasos rápidos y uso un círculo mágico para cubrir el tarro para evitar que la peli plateada pusiera sus labios en el líquido dorado. Rossweisse observo su tarro horrorizada que se volvió a una expresión furiosa, sus ojos se movieron a Reynare.

"¿¡Que significa esto!?" Exclamó como si le estuviera declarando la guerra. Reynare camino detrás de la barra y golpeó sus palmas en la barra con fuerza para atraer la atención de Rossweisse.

"Simple, Ravel está ocupada cumpliendo con el papeleo y tratando de crear conexiones en el inframundo que beneficiarán a Issei, y por eso yo cumplo con estúpidos contratos para sacar algo de ganancia de uno o dos vírgenes por qué sigue siendo necesario, pero cuidar de un mocoso del clan Gremory es algo que no pienso hacer. ¡Si quieres seguir tomando en este bar vas a tu lo vas a vigilar! A cambio dejare que consumas el alcohol que quieras." Rossweisse observo su tarro de cerveza y compartió una mirada con él como si le estuviera dando un consejo. Después de unos segundos considerando las palabras de la caída tarro se movió hacia arriba y abajo como si le estuviera susurrando a Rossweisse que aceptara la propuesta. Al ver esto la expresión ferros de Reynare se volvió una sonrisa que ocultaba cuchillos detrás.

Fin flashback

Ravel salió molesta parecía que en nuestra conversación le había dado mucho de que pensar, era frustrante lo codiciosa que era Ravel con respecto a su caballero, no podía decir que no a su amado por el se echó de que lo consideraba invencible, a los ojos de los demonios si consideraban a alguien fuerte caían completamente enamorados, un amor tan fuerte que caía en obedecía absoluta sin los inconvenientes de una magia de lavado de mente. Tenía juicio y para tomar la decisión que beneficiará a su amado sin ser segados por su amor o actuar de forma independiente sin orden a diferencia de alguien a quien manipulan con magia que es incapaz de pensar por si mismo o sin actuar de formas exageradas como provocaría una posición de amor. Los angeles fue mas un amor puro sin emociones fuertes pero para los angeles caídos, no compartían las cualidades de los demonios oh los angeles al haber caído, para ellos el amor fue mas parecido a interés y lujuria, siempre y cuando cumpliera con sus intereses físicos y monetarios aún que no fueran leales no eran los primeros en abandonar a su pareja al primer problemas y siempre actuarían por el beneficio de ambos. Eh issei ante sus ojos al menos tenía la promesa de cumplir con sus intereses, bastante mejor de lo que un ángel de clase media a finales de camino con más de mil años de edad y ex criminal podría conseguir, bastante mejor, razón por la que actuaba de forma dócil y obediente a las palabras de Ravel pues era lo mejor para ella y para issei, por ahora primero tendría que dejar reflexionar a Ravel, si no logro convencerla de que le permitiera acercarse tendría que tomar medidas más agresivas, no podía dejar que issei se le escapará.

Ahora solo tocaba esperar aquí mirando la televisión comiendo papás fritas, el bar no abría hasta las horas más avanzadas de la tarde y no tenía nada mejor que hacer mas que servir tragos mientras Rossweisse se encargaba de vigilar a la torre del clan Gremory.

Ting Ting

La puerta se abrió, la campana tintineo suavemente, recostada en el sofá giro su cabeza en dirección de la puerta solo para ver entrar a una estresada Rossweisse.

"Quiero un trago". Dijo mientras tomaba asiento en la barra y se estiraba para tomar una botella de cualquier alcohol.

"Hola Ross-chan, donde has estado". Pregunto Reynare desde su lugar en el sofá. Rossweisse solo le envío una mirada sucia y tomo una botella al azar que resultó ser una botella de vino, quitando el corcho con sus dientes lo escupió en dirección de Reynare antes de comenzar a beber el líquido justo como lo haría el típico pirata estereotipado.

"¿Dime tienes dinero para pagar esa botella?" Pregunto Reynare con una sonrisa en su rostro. Los ojos de Rossweisse se volvieron rendijas antes de empinar la botella aun más dejándola completamente vacía antes de estrellar la botella en la barra.

"¡Cállate! Me la he ganado". Dijo y estiró su mano antes de conseguir otra botella. "Deberían estar haciendo mi trabajo ustedes". Dijo abriendo y tomando el contenido de la botella. Sus mejillas coloreando se de un suave rosa por el alcohol rápidamente ingerido.

"Tranquila ese alcohol es fuerte".

"¡Silencio! soy una orgullosa asgardiana pudo beber barriles de aguamiel como el agua, por supuesto que no hay ningún problema con esto.... Este..... ¡Whisky! no es nada". Dijo después de unos segundos luchando por leer la etiqueta de la botella.

"Además si quieres dejar de hacer el trabajo tendrías que pagar por ese alcohol que estás bebiendo". Reynare se apoyo en el respaldo del sillón, posando su mejilla sobre sus brazos sonriendo tranquilamente encontrando que ver a Rossweisse borracha era mucho mas entretenido que ver la televisión humana. El sonrojo en el rostro de Rossweisse desapareció y como si le enseñaran a la criatura más horrenda de sus pesadillas se aferró a la botella de alcohol como lo haría a la falda de su madre. "Además de pagar la habitación en la que duermes". Volvió a decir y cambio la mejilla en la que se estaba recargando. Sus palabras fueron como una flecha invisible que voló en dirección de la valkyria que la golpeó en un costado y la hizo doblarse. "Tendrías que buscar  trabajos de medio tiempo". Una flecha metafísica la apuñaló en su espalda baja como la daga de un asesino experimentado. "No tendrás tiempo para tomar alcohol". Otra flecha la golpeó más arriba que fue como la legendaria lanza gae bolg que golpeó justo donde estaría su corazón. "Y no hablemos de tu vida amorosa". Una última flecha golpeó su nuca, como lo haría el golpe de un artista marcial experimentado y los ojos de Rossweisse se volvieron blancos.

"¡Espera eso último no tiene nada que ver!" El alma que amenazaba con salir de su cuerpo, volvió tan rápido que parecía que solo había estado fingiendo su estado de ánimo.

"Oh lo siento, se me escapó". Se encogió de hombros. Rossweisse solo bufo y volvió a dar un trago a su botella.

"Para tu desgracia se fueron".

"¿Eh? Que quieres decir con que se fueron?"

"Exactamente lo que escuchaste, el grupo Gremory se marchó al inframundo." Dijo sin otra palabra en su asiento.

"Es todo te vas a quedar ahí sin decir otra palabra y bebiendo, valkyria alcohólica". 

"Pues dime qué quieres que haga, deberías saber que no puedo entrar al inframundo así sin más, eh ir al territorio Gremory y decir, hola vengo vigilar a la torre de Rias Gremory". Rossweisse le dedicó una mirada a Reynare esperando a que sus palabras la golpearan.

"Humm." Reynare considero que tal acción no era posible, llevando su mano a su barbilla considero que se podría hacer. "¿No podrías usar alguna magia de adivinación con tu esfera de cristal o algo así?" Ofreció

"Una magia de adivinación lo suficientemente poderosa para espiar a alguien en el inframundo, necesitaría un objeto personal de quién quieres espiar". Dijo Rossweisse tomando otra botella. "Ninguna idea de donde podríamos sacar eso". Reynare apareció en un parpadeando detrás de la valkyria y tomo a la valkyria por los hombros de un movimiento rápido la hizo girar para que le diera la cara. "¿Eh? ¡eh!" El rostro de Rossweisse miro a la peli negra confundida y algo intimidada por la mirada que la ángel caída que la estaba mirando.

Ciudad de kuo
Zona recidencial

"Que estamos haciendo aquí". Pregunto al ver la pequeña mansión donde vivía los miembros restante de la familia Hyoudou, delante suyo.

"Tu misma lo dijiste, necesitabas un objeto personal, ¿No?"

"¿Y lo primero que se te ocurre es allanar la casa donde viven miembros del clan Gremory?" Rossweisse trataba de perforar la cabeza de Reynare con su mirada parada detrás de Reynare.

"Puedes irte si lo deseas, creo que Ravel y yo nos las podríamos arreglar nosotras solas, claro está que tendrías que pagar por lo que consumes". Se mostró indiferente mientras caminaba por el recibidor.

"Si si lo entiendo, no más alcohol gratis, ¡Acabemos con esto!" Dijo y camino adentro de la casa empujando a Reynare al pasar.

"Me alegro que lo entiendas, ¿ahora que necesitas?" La oji violeta miro el interior dando un silbido ante el interior, paredes blancas, muebles de madera, una enorme sala con un televisor y un sistema de entretenimiento de primera, la mesa del comedor era bastante amplia donde podrían sentarse unas dieciséis personas sin ningún problema.

"Cualquier cosa a la que el portador de la furia de esparta esté muy apegado o haya estado mucho tiempo con él". La valkyria hablo lo suficientemente alto para ser escuchada desde el otro lado de la casa. Reynare se acercó a un clóset y lo abrió esperando encontrar un armario lleno de productos de limpieza o objetos inútiles que no era de uso diarios, solo para llevarse una sorpresa al abrir la puerta del armario que no resultó ser un armario si no 'Un jodido ascensor.'

"¿¡Por qué nosotros estamos viviendo en un bar mientras ellos viven en una maldita mansión en miniatura!?" Reynare pregunto a nadie en especial. "¿No se supone que el clan Phoenix es más rico que el Gremory?"

"¿Has escuchado que los ricos no tienen por qué aparentar ser ricos?" Rossweisse apareció con un álbum de fotografías, mientras pasaban las páginas. "La heredera Gremory antes de su compromiso con el segundo hijo de la casa Phoenix era la heredera de su casa y tenía los fondos de su casa a completa disposición. Si bien Lady Ravel pertenece a uno de los clanes más poderosos del inframundo como la tercera hija sus activos apenas se debería poder igualar con los de Rias". Levantando la mirada del álbum se lo entrego a Reynare. "Actualmente y debido a la inactividad del clan Gremory las ganancias que han obtenido el clan Phoenix deberían haber crecido pero Ravel debería saber que gastarlos en una mansión sería un desperdicio cuando sus fondos se podrían invertir de una mejor forma".

"Eres bastante talentosa en este tipo de cosas". Una sonrisa apareció en el rostro de Rossweisse halagada por las palabras de su compañera. "Pero también eres una decepcionante alcohólica". Su rostro se mostró una expresión de fastidio y sus hombros cayeron. Reynare no le dio importancia y observo las fotos. "¿Encontraste algo de utilidad?"

"Nada, todas las fotos son relativamente recientes, no son suficiente". Reynare arrojó el álbum en un estante cercano. "Lo mejor es que busquemos en su habitación para encontrar algo".

"Eso va a ser algo difícil." Fue el pensamiento de Reynare dicho en voz alta.

"¿Qué quieres decir?". Preguntó Rossweisse deteniendo su mano para llamar al ascensor.

"La forma en la que issei y sus hermanos se volvieron demonios fue tras un incendio que destruyó su hogar matando a sus padres. Eso significa que todas sus pertenencias fueron quemadas y desechadas." Reynare llamo al ascensor

"¿¡Entonces solo me arrastraste por media ciudad y me hiciste irrumpir en propiedad de demonios para nada!?" Decir que Rossweisse estaba frustrada era decir poco, estar siendo coaccionada por alguien en rangos inferiores a ella, como lo era una asgardiana guardaespaldas de Odin a una ángel caída actualmente al servicio de una tercera hija sin ningún poder verdadero, sin siquiera era la mano derecha de dicha hija.

"Eso depende."

"¿De que?" El ojo de la valkyria tenía un pequeño tic mientras la vena en su sien se comenzaba a abultar.

"¿Medio año basta para que alguien considere un objeto cercano?" Preguntó con una ceja levantada mientras la puerta del ascensor se abría. Rossweisse lo considero por un segundo pero no pudo dar una respuesta a eso. Había todo tipo de personas, algunas simplemente no podían deshacerse de casi ningún objeto por qué formaban un aprecio por él, en cambio hubo otras personas que pasaron una vida sin sentir apego a algo, ya fuera un colgante, un animalito de peluche, un frasco de perfume oh una playera simplemente los desecharon cuando se rompió, las costuras se desgastaron, estuvo vacío oh desgastado, simplemente lo reemplazaron por uno nuevo.

"¿Subes o que?" Reynare pregunto sacando a la reflexiva valkyria de su trance quien miro a la caída que esperaba dentro del ascensor. Al notar que había estado absorta en sus pensamientos el sonrojó llegó a la puntas de sus oídos y únicamente aclaró su garganta antes de entrar al ascensor sin decir una palabra.

Al llegar a la planta habitacional Rossweisse y Reynare asomaron sus cabezas del ascensor y miraron el pasillo sin saber que puerta conducía a qué habitación. "¿Cuál es la habitación de la pequeña mierda?" Pregunto Reynare algo molesta por qué incluso en los pasillos tenían una alfombra roja que parecía más cara que todo el edificio donde vivían.

"Como voy a saberlo, abre alguna puerta y vamos a averiguarlo." Reynare salió del ascensor y caminó hasta una puerta.

"Qué hay detrás de la puerta número uno." Con un gesto exagerado Reynare abrió la puerta de forma brusca. Rossweisse miró dentro y encontró una habitación sencilla, con una amplia cama y un armario integrado en la pared, a pesar de que los muebles parecían ser de alta calidad, su decoración era algo espartana sin embargo empezaba a ser llenada con algún póster y uno o dos peluches y una pequeña cantidad de maquillaje sobre una mesa con espejo en una esquina de la habitación y sobre un escritorio sus libros y cuadernos de la escuela ordenados como si hubieran terminado de hacer sus deberes antes de marcharse. "Esta debe ser la habitación de Asia."

"No nos interesa, ¡Siguiente!" Reynare cerró la puerta y camino a la puerta más cercana que por alguna razón tenía un letrero de color negro y amarillo. "Prohibida la entrada, peligro, radiactivo." Leyó Reynare no muy impresionada por el cartel de advertencia.

"Este debe ser la habitación de Ars o Katsuo, a los chicos les gusta su privacidad después de todo." Dijo la valkyria acercando su mano a la manija de la puerta

"Detrás de la puerta número dos . . ." Una habitación de color rosa de igual forma una cama bastante amplia estaba en el centro de la habitación, al frente un televisor de pantalla plana y un armario integrado en la pared, posters de chicos semi desnudos adornaban las paredes y en los estantes había DVD's yaoi junto doujinshis perfectamente ordenados al punto de ser casi obsesivo/compulsivo, a diferencia del resto de su cuarto, la cama no había sido tendida, la ropa del armario descansaba en el piso, los libros desordenados sobre el escritorio y los apuntes de los cuadernos eran inexistentes abandonados sobre el escritorio como si lo hubieran abandonado con la primera excusa para postergar las tareas.
"A la que les gusta su privacidad es a las chicas, no a los hombres. Mira la puerta de la derecha, yo la izquierda." Cerrando la puerta ambas chicas caminaron a la próxima puerta sin notar el dakimakura de un hombre musculoso con una foto de cierto castaño como rostro tirado a los pies de la cama.

"Tras la puerta número tres..."

"Olvídalo la encontré." Rossweisse trato de imitar a Reynare solo para ser interrumpida por la oji violeta. La habitación de Ars era ordenada, sus tareas parecían estar terminadas sobre su escritorio libros de matemáticas y física junto algunos porta retratos con fotos de sus padres con pequeñas marcas de quemadura que descansaban en su estante sin ninguna televisión o consola por ningún lado, pero parecía que no los necesitaba pues había algunos libros de magia con los que parecía entretenerse.

"No parece que vayamos a encontrar mucho."

"Toma cualquier cosa y vámonos." Reynare comenzó a buscar en los cajones de su escritorio.

"Cómo fue que de guardaespaldas pase a ser una simple ladrona."

"Deja de quejarte y haz algo útil, valkyria lamentable." Reynare no le dio otra palabra y se acercó al armario para buscar algún objetivo que hubieran recuperado de su antigua casa que hubiera abandonado en su armario.

"Bien bien aré lo que dices." Rossweisse miro el estante donde estaban los libros buscando con detenimiento algún libro por el que pareciera tener aprecio. Reynare dejo el armario y se acercó a su escritorio. Un escritorio simple donde un reloj digital, un porta retratos con una foto de la totalidad del clan Gremory en lo que parecía una cena por la comida abundantemente elaborada sobre la mesa. Al tomar el porta retrato vio que oculto detrás había un par de guantes de kick boxing bastante desgastados, con las costuras rotas y marcas de quemaduras y el nylon estaba desgastado, el relleno de látex escapándose del interior. "Bingo." Los ojos de la peón Phoenix brillaron. "¿Crees que esto funcione?" A pesar de su pregunta, Reynare ya intuía la respuesta, después de todo por qué mantendrías un objeto como este si no fue por qué tenías apreció.

"Lo hará." Rossweisse dejo de revisar la librería y se acercó a Reynare que sacudía los guantes como un fajo de billetes para que la valkyria los viera.

"Sabes, si sigues siendo de tan poca ayuda tal vez debería ahorrarme tu paga." La sonrisa en el rostro de Reynare que desbordaba arrogancia y superioridad hizo que Rossweisse entre cerrará sus ojos y se abstuvo de golpearla en el rostro. Reynare era fastidiosa pero había trabajado para Odin, él mayor viejo pervertido de todo Asgard, el cual se escapaba cada vez que tuvo oportunidad para ir a un burdel oh embriagarse con aguamiel en la sala del valhalla junto con los einherjer, alguna vez lo encontró en los barracones de las valkyrias robando su ropa interior y aunque nunca tuvo pruebas estaba seguro que algunas prendas favoritas habían desaparecido. Tener que soportar las extorsiones de una ángel caída no era la gran cosa, al menos no tendría que limpiar desastres por un sueldo mínimo y condiciones de trabajo lamentables, al menos para lo que debía de soportar como secretaria de Odin, ninguna cantidad de dinero parecía ser suficiente.

"Tal vez debería buscar otro trabajo o bar donde beber." Sin otra palabra salió de la habitación dejando a la peón Phoenix con una expresión en blanco.

"Pfu, dudo que haya otro lugar donde te permitan la entrada una segunda vez."

A las afueras de la ciudad

"¡Volvimos!" Llamo Reynare sin recibir respuesta.

Con su dedo Rossweisse comenzó a hacer trazos en el aire creando runas que brillaban con una luz plateada.

"Parece que aún no ha regresado Ravel, ¿Crees que se habrá metido en problemas?" Miró sobre su hombro las escaleras al segundo piso ignorando las enormes cadenas de runas y círculos mágicos que Rossweisse estaba formando con una destreza nada menos que asombrosa.

"¿Problemas? ¿En el mundo humano? ¿En territorio de demonios?, incluso si no es una luchadora, no debería haber muchos por no decir algún ser sobrenatural que puedan dañarla oh evitar que huya si de verdad está en problemas. Y en ese caso, esos problemas tendrías que buscarlos de forma vehemente, no es algo que la vea haciendo." Descarto con simpleza sin detener su magia que estaba tomando la forma de un espejo de cuerpo completo. Reynare supuso que su suposición era razonable y dejó sus preocupaciones a un lado y tomó asiento en la barra y observó a Rossweisse trabajar mientras otra cadena de runas se unía a la estructura que se asemejaba a un espejo de cuerpo completo. Al verla finalizar dos cadenas más de runas que tomaron su lugar en la construcción mágica.

Al terminar Rossweisse observó su trabajo un espejo de cuerpo completo  de un marco de color plateado marcado con runas nórdicas que brillaban con una luz violeta. "Gran árbol sagrado Yggdrasil, tú qué tus ramas se extienden por los nueve mundos. Gran dios del saber, Mimir embajador de todas las criaturas de los nueve reinos que conoces todos los idiomas, las guerras y acuerdos. Yo que comparto sangre con la gran valkiria de primera generación Gondul, pido una bendición, que la fuente de la sabiduría se aclare para mostrarme a mi objetivo." Consiguiendo los guantes los sostuvo frente el espejo, los guantes fueron envueltos en una esfera de energía azul pálido. Ruinas solitarias orbitan alrededor del espejo y ella mientras la esfera levito hasta el espejo generando una onda en su superficie como una roca golpeando la superficie de un lago. Cuando los guantes desaparecieron en su interior y las ondas que generó se calmaron, las runas que flotaban a su alrededor empezaron a brillar en dorado y su brillo se fue intensificando mientras vibraban violentamente hasta que explotaron en chispas de luz que llovieron por la habitación. Después de un momento el espejo comenzó mostrar la imagen de un chico castaño entrenando su cuerpo en un gimnasio.

"Fiu. . . Ese hechizo parece útil, podríamos usar eso para conseguir información y venderla, ¿Que piensas?" Reynare sugirió viendo potencial uso en la valkiria.

"Sabes aún que seas un demonio no significa que este bien hacer trabajos ilícitos."

"Oh vamos la alcohólica me va a dar clases sobre moralidad." Reynare hizo un ademán con sus brazos. "Solo estoy tratando de ver por los intereses de mi rey, mi deber como sirvienta de Ravel-Sama me lo exige." Rossweisse solo se cruzó de brazos con una ceja alzada sin tragarse el cuento de la caída.

"¿Tienes claro qué podría informar a Ravel o sus superiores sobre tus infracciones al vender información a terceros o intentos de espionaje? Que Ravel haya permitido que te unieras a su nobleza no significa que tú historial de terrorista se haya esfumado." No la estaba amenazando, solamente lo dijo como una ocurrencia para ver la reacción de Reynare que no pareció tan impresionada.

"Se que no lo harías." Su atención centrada en el espejo que se había movido a la pared. El menor de los Hyoudou estaba sudando como un puerco, sobre un sartén en el verano más caluroso irónicamente dentro del inframundo nada menos.

"Pareces bastante segura, tal vez hayas olvidado la tregua entre las facciones que se formó no hace mucho."

"Se que no lo harás por tres razones." Reynare levanto un puño frente la valkiria "No te vas a arriesgar de que habrá la boca con respecto a la vigilancia de la torre del clan Gremory. Los nórdicos se benefician de la información que filtre, da igual que haya un tratado o no, bajo la mesa sigue habiendo peleas por sacar el mayor provecho. Demasiado papeleo." Reynare termino y tres dedos estuvieron levantados frente Rossweisse, enfatizando su punto.

"Tsk... Razones bastante justas, si no te importa quiero usar mi cupón de bebidas gratis ahora." Su pulgar señalando el espejo con runas en la pared.

"Adelante, la barra es toda tuya, ahora tengo que ver cinco temporadas de un mal montaje de entrenamiento." Reynare apoyó su codo sobre la barra y miró el espejo. "Sabes soy la última que va a juzgar los gustos, pero la joven Asia debería mejorar sus gustos en los hombres, por qué escoger al mondadientes teniendo al Sekiryuutei en el mismo grupo."

"¿Asia? ¿Te refieres a la alfil Gremory? ¿Conoces a la monja?" El brazo que se extendía detrás de la barra se detuvo momentáneamente, antes de seguir buscando una botella de alcohol especial, la atención de la valkiria atraída por las palabras de la pelinegra.

"Hump si, la conocía antes de que se volviera un demonio, traté de matarla para obtener su engranaje sagrado." Rossweisse quedó congelada a medio movimiento de llevarse la botella a su boca.

"Puedo preguntar, ¿No planeas hacer eso, terminar el trabajo verdad? ¿Al menos mientras aún estoy aquí?"

"No, no vale la pena el problema."

"Y si no vale la pena ¿Por qué antes sí?"

"Antes fueron órdenes de Kokabiel y era una exiliada de la iglesia, su engranaje debería tener suficiente para poder elevarme a una clase alta y la curación de engranaje me haría alguien valiosa para cualquiera. Ahora es una miembro de un clan y yo libre sin cargos de nada, atacar la sería tirar mi libertad a la basura."

Bzzzt Bzzzt Bzzzt

Para alivio y salud mental de Rossweisse el teléfono del bar comenzó a vibrar sobre su base.

"Hola Devil Never Cry ¿En qué lo puedo ayudar?" Reynare llevó el teléfono a su oído con la nueva frase para generar un atractivo a sus clientes, si bien el lugar era un bar, era toda una fachada para la gente fuera de lo sobrenatural, la mayor parte del tiempo venían mercenarios buscando información o dejando encargos de criminales buscados por los que se ofrecía una recompensa, claro, solían ser magos buscados por actos atroces, desertores de alguna facción o demonios renegados de clase alta por los que se les quiere muertos a cualquier costo, no importó si fue un humano Yōkai, caído, asgardiano quien lo mato, lo querían muerto. Estos últimos tuvieron una recompensa más jugosa que los demonios deformados por la energía demoníaca que solía asesinar el clan Gremory.

"¿Reynare?" La voz al otro lado del teléfono preguntó confundiendo momentáneamente a la ángel caída.

"¿Issei?" Reynare ignoro la confusión de la persona al otro lado del teléfono y en cambio expresó la suya propia. No esperaba que su compañero demonio le llamara al menos no tan pronto, apenas después de una semana.

"¿Qué es eso de Devil Never Cry?"

"Oh, ¿eso? Es el nuevo nombre del bar, ¿Te gusta?" Pregunto animada casi dando un salto en en anticipación por la opinión de su compañero.

"Supongo, no está mal pero creo que puede mejorar, pero no llame para eso. ¿Se encuentra Rossweisse cerca?" Reynare paso sus ojos por la barra hasta que se toparon con una Valkiria peli plateada que se estaba tomando enserio lo de la barra libre.

"Si, aquí se encuentra." Dijo neutral mente atrayendo la atención de Rossweisse que la miraba como un joven cervatillo a los faros de un auto.

"Pon el altavoz por favor." Reynare hizo lo que dijo y presionó el botón antes de dejar el celular en la barra. "¿Rossweisse-san me escuchas?" La voz de issei se amortiguó a través del teléfono.

"Si te escucho ¿Qué-que necesitas?" Preguntó la Valkiria vacilante, insegura de qué era lo que quería el caballero Phoenix con ella, no era como si hubieran  hablado mucho antes.

"¿Qué tanto sabes sobre runas?" Sus palabras parecieron recuperar el ánimo de la Valkiria por qué de inmediato infló su pecho con orgullo.

"Mi abuela fue la discípula personal de Freya y me enseñó personalmente todo lo que se sobre las runas." Dijo con un tono jactancioso

"¿Podría decirme todo lo que puedas sobre la runa de Odin?" A las palabras de issei Rossweisse miro el teléfono celular casi como si le hubieran escupido en la cara.

"Lo siento pero no puedo hablar sobre esa runas primordiales, Odin mismo me confío el secreto sobre una runa creada por él. No voy a traicionar la confianza de Odin." Issei al otro lado del teléfono solo pudo hacer una mueca al no saber qué hacer o decir.

"¿Acaso no te abandono aquí sin dinero, hogar, trabajo o forma de volver a tu hogar?" Reynare pregunto con una ceja levantada medianamente ajena a la conversación que estaba teniendo el dúo.

"Eh bueno, eso es distinto." Rossweisse tuvo la decencia de avergonzarse, desviando su rostro, evitando la mirada de la pelinegra

"No, no lo es." Volvió a decir Reynare, encontrando interés en los diminutos vasos colocados en forma piramidal que comenzaban a acumular polvo.

Issei no hizo caso a la conversación entre la valkiria y la ángel caída y en cambio meditó que podría hacer. Podía preguntar a cualquiera en la clase de runecraft, Rossweisse no dejó de ser la mejor opción que estaba a su alcance pero hubo algo que dijo la valkiria que llamó su atención.
"¿Runas primordiales?" Interrumpió la conversación salvando a Rossweisse de responder. Su confusión fue transmitida claramente a través del teléfono, ambas chicas casi podían ver cómo el castaño levanto una ceja.

"¿No te referías a las runas primordiales?" Sus pupilas se contrajeron y parecía severamente mortificada. 

"No . . ." Hizo una inflexión en su voz.

"Je je je Si, claro ¿Como sabrías sobre la runa primordial de Odin de hecho que es eso de primordial y que son las runas?." Rossweisse pasó una mano por su nuca, nerviosa trato de ignorar la mirada que Reynare le estaba dando. Claramente issei y Reynare no se creyeron esa excusa tan débil de cualquier forma que quisieras verla y Reynare le dio una mirada en blanco. "Je je eh ¿Qué era lo que querías saber con respecto a las runas?" Trato de desviar la atención del tema de una forma para nada forzada.

" . . Runa. .Odin que es lo que puedes decirme." La neutralidad en la voz del castaño era perceptible, Rossweisse sabía que no dejaría el tema aun lado pero por ahora no hablaría de él.

"Ejem... sí, runas mundanas, runas comunes y corrientes runas... La runa de Odin es la más complicada de las veinticinco la forma de dibujarla es simple intención, querer crear una runa sin crearla."

"¿Cómo haces algo sin hacerlo?" Pregunto Reynare con una expresión de estar escuchando una tontería o algo muy absurdo.

"Es más complejo de explicar de lo que realmente es, las runas son un simple abecedario pero usando la interpretación, filosofía y ontología.

"Te refieres a usar solamente el concepto de runa únicamente dejarlo en blanco." Pregunto entre confundo y curioso. Usar alteración para agregar conceptos a un objeto lo hizo cambiar de forma, quitarlos provocó distintos cambios, desde evitar que la magia fluye por el objeto a volverlos extremadamente pesados, pero si retiraste demasiados conceptos los objetos podrían  llegar a desaparecer, por lo tanto usar únicamente el concepto de runa no duraría por mucho tiempos pero si era posible, la razón detrás era algo que issei encontró lo suficientemente interesante para investigar.

"Eso solo es la primera parte, la runa significa el todo, lo impermeable, lo desconocido, el inicio y el fin, el bien y el mal, misterio y revelación. Para dibujarla debes imprimir tu voluntad en él concepto de runa con lo que quieres lograr, es una forma de refuerzo para tu cadena de runas." Al otro lado del teléfono issei apuntó rápidamente las palabras de Rossweisse en su cuaderno mientras sus ojos se abrieron comprendiendo cómo funcionaba la runa de Odin.

"¡Muchas gracias Rossweisse-san!" Sin otra palabra issei terminó la llamada el teléfono emitiendo un pitido intermitente. Ambas chicas solo miraron el teléfono con una ceja levantada.

"Parece que tenía prisa." Rossweisse volvió a su bebida aliviada por no tener que continuar con la conversación de runas primordiales. Sabía que tendría que ser más cuidadosa de ahora en adelante y con suerte el caballero de Ravel había olvidado sus palabras cuando volviera de Londres.

"Así que... ¿Runas primordiales?" Saque a flote una vez más el tema de runas, tengo la confianza para hacer hablar a la valkiria y si issei estaba estudiando las runas que mejor forma de ayudarlo que conseguir información sobre runas primordiales. No pude evitar que una sonrisa se abriera camino en mi rostro, mi mano se extendió a un de los pequeños vasos que se acomodaron en una pirámide y le serví un trago empujándolo  en su dirección.

"Oh..... No no no no no, no está sucediendo." Empujó la bebida que le ofrecí devuelta a mi,  realmente parecía firme en su decisión sobre no tomar el alcohol que le ofrecí.

"Oh vamos por qué tanto orgullo, tsk..." Pregunte pero una idea cruzó por mi cabeza. "Sabes. . por lo que se, Ravel actualmente está agobiada buscado posibles candidatos antes de que vuelva issei de su viaje..." Detuve mis palabras para que ella misma hiciera sus propias conclusiones. Vi en sus ojos como comenzaba a sospechar lo que estaba sugiriendo y cuando entre cerro sus ojos esa fue mi señal para seguir hablando. "Eras una secretaria de Odin, podrías ayudarla a buscar candidatos para su nobleza."

"¡Que te follen! ¡Era su guardaespaldas! Podría patear el trasero a demonios de clase suprema solo con mis puños además de ser una maestra de runas, sería decenas de veces mejor que cualquier humano con equipo sagrado." Se levantó de su asiento exaltada por el claro menosprecio de mis palabras.

"No estoy tan segura, puede que lo seas pero no creo que Ravel desee unir a una valkiria lamentable a su nobleza." Trate de calmarla, ya arroje el sebo, ahora solo debía recoger el señuelo lentamente.

"Claro que estaría más que dispuesta a aceptarme, estaría loca si no lo hiciera." Parecía realmente ofendida solo por la idea de ser rechazada.

Ting

La campanilla sobre la puerta sonó señalando la entrada de alguien. Cuando ambas chicas miraron en su dirección vieron a Ravel seguida por una exorcista que Reynare ya había conocido.

Reynare miro a la exorcista y de igual modo la exorcista la miro a ella. Ambas preguntándose el motivo de la presencia de la otra y esperando a que hiciera algún movimiento. Sin embargo la primera en romper el silencio fuera Rossweisse que se paró firme y encaró a Ravel.

"¡Ravel-san quiero volverme parte de su nobleza!" Exclamó de forma enérgica.

"Hump. . . he. . . Si claro, por supuesto." La confusión repentina por el pedido de Rossweisse desapareció reemplazada por una agradable felicidad al comprender lo que Rossweisse le estaba pidiendo. "Por qué no vamos a mi oficina y completamos los detalles."

"Vamos de inmediato." Rossweisse camino con paso rápido detrás Ravel, no sin dejar de una mirada de superioridad a Reynare.

Xenovia parada en la puerta miró incómoda el lugar, no era lo que esperaba de la base de demonios, el club de lo oculto de la academia kuo cumplía con sus estándares, oscuro, extremadamente elegante, pictogramas y libros de magia. Este lugar aún que era un bar parecía bastante hogareño con el suelo de madera, una sala frente la barra sobre una alfombra gris y aunque fue curioso su interés más que el lugar estuvo en la ángel caída detrás de la barra quien también la miraba.

Xenovia tomó asiento en una de los muchos bancos disponibles. "Me preguntaba qué era lo que te había sucedido, jamás pensé que te terminarías uniendo al clan Phoenix."

"Oh ... me estás abrumado con tus palabras, no pensé que te preocupabas por alguien que te dejó al borde de la muerte." Xenovia fulminó a la caída con su mirada no muy divertida por sus palabras.

"Jamás dije que me preocupara por ti, solo tenía curiosidad de por qué no terminaste encerrada en un lugar abandonado por, d." Reynare levanto una ceja, mirando de forma penetrante a la peli azul. "Ejem por Michael." Se corrigió de hombros. "Pensé que habías escapado después del asunto de Kokabiel, no fue hasta la cumbre de paz que me enteré que te habías unido al clan de Ravel-Sama."

"¿Ravel-Sama? Vaya que la muerte de dios te afecto si ahora estás adorando a un demonio." Una vez más sus ojos se entre cerraron al comentario de Reynare, sobre todo por qué de cierta forma tuvo razón.

"La llamo así por qué a partir de ahora seré parte de su nobleza como su nueva caballero, así que debería comportarme como tal y mostrar respeto a mi rey."

"Eso es una sorpresa, considerando que, ya sabes, exorcista y todo eso." Gestiono con su mano para dar un énfasis a sus palabras.

"Creo que la sorpresa es que tú de todos se haya unido al clan de Ravel-Sama."

"En realidad no es tan sorprendente, pensé que era algo bastante obvio oh probable. Hubo una razón por la que issei y yo no nos atacamos, en realidad nos ignoramos abiertamente durante los eventos de las espadas sagradas." Desestimó las palabras de Xenovia.

"Eso explicaría un poco el por qué te protegió cuando estaba al borde de la muerte, sin embargo eso me hace preguntar si ustedes dos no planean algo contra Ravel-Sama."

"¿Eh?" Fue lo único que pudo decir, su cabeza en unos perfectos 60° que reflejaron su confusión.

"Ya sabes, muy conveniente que ambos sean relativamente nuevos en su clan y que tú hayas salido impune de tus crímenes, por qué no debería pensar que estás manipulando al caballero de Ravel-Sama." La expresión de Reynare se volvió una de seriedad y la tensión comenzó a llenar la habitación. La mano de Xenovia se deslizó para tomar el mango de Durandal solo detenida por la risa de Reynare que sorprendió a la ex-exorcista, en especial por qué las veces que la había escuchado reír era de una forma recatada tratando de mantener una apariencia elegante, sin embargo ahora parecía la sonrisa de una niña inmadura sosteniendo su abdomen luchando por detener su risa. "¿Que tiene de divertido lo que dije?"

"Llegas un poco tarde exorcista." Reynare limpio una lágrima del rabillo de su ojo. "Si tuviéramos algo planeado la reunión de las facciones que salió taaan bien y sin ningún caos que nos permitiera hacer lo que nos diera la gana, habría sido el momento indicado para hacerlo, además de que no soy yo quien tiene a issei envuelto en su meñique, esa es Ravel." Xenovia considero las palabras de Reynare admitiendo a regañadientes que si tenían algo en mente habrían tenido tiempo más que suficiente antes de que ella apareciera, pero que sus amenazas hayan pasado totalmente desapercibidas no fue algo de su agrado.

"En realidad me gustaría saber tus motivos por los que te uniste al clan Phoenix." Xenovia parpadeo un par de veces y ignoró la mirada curiosa que Reynare le estaba dando.

"Estoy buscando acercarme al Sekiryuutei, ya que todos los portadores de engranajes tipo dragón son en parte dragón y quiero que mi hijo tenga fuertes genes."

"Lamento decirte que el Sekiryuutei es parte del clan Gremory no del clan Phoenix."

"Por supuesto que se eso. Pero no quiero estar bajo el control de Raizer así que decidí que me uniría a la nobleza de Ravel. Pero volviendo al tema de antes." Las palabras que dijo Reynare antes trajeron una pregunta al frente.

"¿A qué te refieres con que no eres tú quien está manipulando a issei?" La ceja de Xenovia se levantó. "¿No estabas en una relación con Hyoudou Issei?"

"Primero, solo es issei, no desea que lo relacionen con los miembros del clan Gremory y para ser sincera tampoco deseo que lo relacionen, todos los cercanos al dragón rojo y blanco terminan mal, segundo Ravel e issei se encuentran en una relación." Reynare detuvo su diatriba y considero sus propias palabras por un momento. "Aunque pensándolo bien Ravel es la que está en los laureles por su caballero." Reynare volvió a reconsiderar sus palabras una vez más. "Olvida lo que dije ambos están perdidos en el otro"

"Qué me dices de ti, por qué si no mal recuerdo pareció verte muy apegada al castaño después del ataque a la reunión de las facciones." Interrogó algo preocupada por el interés amoroso de su rey. Aunque era nueva en esto de ser una caballero estaba segura que advertir a su rey sobre las infidelidades de su amado era algo que se esperaría de su papel como caballero.

"¿Preocupada por el corazón de tu rey?" Una sonrisa se extendió en el rostro de Reynare.

"Ahora solo te estás burlando. ¿Algo que me estoy perdiendo?"

"Como es común para los demonios, se enamoran de aquellos a quienes consideran fuertes, después de que issei derrotará a su hermano. Ravel está tan enamorada de issei que incluso si le pidiera que lo dejara tener veinte mujeres ella apenas diría otra palabra." Xenovia considero las palabras de Reynare que habían puesto las cosas en perspectiva, sí lo que decía era cierto issei pareció mejor partido. Claro el Sekiryuutei tenía un poder ilimitado capaz de matar dioses pero eso estrictamente hablando del dragón galés, su portador y sus genes apenas tenían rasgos de dragón comparados a un demonio que explotó su potencial como lo fue issei, no fue muy distinto, incluso pudo ser mejor para su meta de tener a un hijo fuerte.

"¿Entonces lo estás seduciendo?" Levantó una ceja curiosa.

"Por qué piensas que lo estoy seduciendo, tal vez él se vio hipnotizado por mis encantos femeninos y no puede evitar poner sus manos sobre mi." Reynare se abrazó a si misma haciendo movimientos raros.

"Tengo ojos y contrario a lo que piensa mi madre puedo usar mi cerebro, la forma en la que lo abrazas de forma cariñosa al castaño, así que dudo que sea issei el mujeriego como Raizer." Reflexionó. "¿Lo que no veo es por qué aceptaría tenerte a su lado?"

Las palabras de Xenovia pareció presionar un botón de Reynare que pareció seriamente ofendida, pero antes de poder decir una palabra la valkiria apareció bajando las escaleras con saltitos como una colegiala.

Prácticamente Xenovia y Reynare miraron las rosas metafísicas alrededor de la valkiria que volvió a tomar asiento en la barra con su pecho inflado y su espalda recta. "¿Que decías antes? Sobre que no creías posible que Ravel me querría en su clan." Dijo Rossweisse mientras se regodeaba.

"Sí, supongo que me equivoqué." Reynare apoyo su mejilla sobre el dorso de su mano, pero con una amplia sonrisa como el gato de cheshire. "Quién habría imaginado que Ravel aceptaría a un ex-guardaespaldas de Odin maestra en runas." Xenovia puso sus ojos en blanco mirando a la peli plateada bajo una luz de respeto, asombro y admiración. "Ahora que eres parte de este clan, ¿Podemos continuar con ese tema tan interesante sobre runas primordiales?"

". . ." El rostro ligeramente sonrojado por la felicidad cambio a uno de shock, y su expresión se volvió en blanco mientras aún trataba de procesar lo que acababa de hacer de forma al reaccionar de forma tan precipitada por su orgullo lastimado.

Reynare envío su mirada a Xenovia con una sonrisa engreída. "Por eso estoy a su lado." Cualquier admiración o respeto que hubiera empezado a formarse dentro de Xenovia desapareció en ese momento. Convirtiéndose en un solo pensamiento.

'Valkiria lamentable.'

Espero que les haya gustado el capítulo, justo hasta hace unos momentos lo termine.

No los entretengo, dejen su voto y comentarios.

¡¡ADIÓS!!

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