Era una noche fria en particular en el pueblo de Mandela, una pareja de padres dejaba lo que parecia ser un bebé de pocos meses de nacido.

Padre: Dejalo rápido, antes de que esas cosas salgan.

Madre: Espera, que no quiero que se despierte. Las podria atraer mas rápido.

La madre sin mucho problema lo deja en el bosque y se va con el padre lo más pronto que pueden, unos 5 minutos después un tormenta empezó a caer, los relampagos hicieron que el niño se despertara del susto, a esto empezó a llorar. En ese mismo instante, un hombre con capucha negra escucha al infante llorar. El nombre de este tipo era Intruder, este corre a dónde escucha el llanto, llendo más bien por la curiosidad. Cuando llega ve al bebé llorando, llamando a sus padres para que lo saczran de la situación que le daba miedo. Intruder lo toma con cuidado.

Intruder: Sh sh sh. Calma pequeño. ¿Dónde están los humanos que te engendraron?

Dijo esto moviendo la cabeza lado a lado para ver algún humano. El bebé para de llorar, aferrándose al sueter del alterno, mostrandole que se sentia asustado. De alguna manera algo se activó en el cerebro de Intruder, era un sentimiento de piedad. Sin dudarlo ni un segundo, intruder va a una casa bastante grande y abandonada en el bosque, se podian ver luces por dentro, intruder entra con el bebé a la casa, de ahí se dirigen a la sala.

Intruder: Uf... Gracias al cielo que no hay nadie aqui ahora.

Intruder agarra una manta vieja que tenia guardada y con eso tapa al niño, con lo cojines del sillon improvisa una cama para el pequeño, hasta que en ese momento entra Cesar a la sala.

Cesar: ¿Que haces?

Intruder: Eeeeh... Nada...

Cesar: ¿Nada?

Intruder: Nada de nada.

Cesar: Se ve muy sospechoso para "nada"-

Cesar al acercarse se sorprende al ver un bebé humano en la casa dónde se refujia junto con los demas alternos.

Cesar: Intruder... ¿Que es esta cosa?

Intruder: Un bebé, ¿no es obvio?

Cesar: Intruder, sabes muy bien lo que el jefe puede hacer si encuentra a esta cosa aqui adentro.

Intruder: Oye, no le digas así... es solo un bebito.

Cesar: Carajo, el jefe nos va a usar de tiro al blanco-

Cesar: ... ¿Esta atras de nosotros verdad?

Intruder y Cesar voltean lentamente para atras, y justamente ahi se encontraba Gabriel, con cara seria y despreocupada.

Cesar: Hola jefe...

Intruder: Buenas noches jefe...

Gabriel: ¿Se puede saber, que es lo que estan haciendo ustedes dos?

Cesar: Intruder trajo al niño, señor, yo no tube nada que ver.

Intruder: Ahg... Gracias, Cesar...

Dijo Intruder con sarcasmo.

Gabriel: Intruder, quiero que me expliques, el por que trajiste a un bebé humano a nuestra guarida.

Intruder: Lo encontre en el bosque, estaba solo y asustado, no podia dejarlo a su suerte. Podemos utilizarlo.

Gabriel: ¿Y como se te ocurre que podremos aprovechar a este humano?

Intruder: Lo criamos para que atraiga a mas niños a nosotros, haremos que sus padres caigan en el pecado y acabaremos mas rápido con ellos. Y este mundo, será suyo.

Gabriel: ...

Intruder: Piénselo.

Cesar: ...

Gabriel: Bien... pero tu te harás cargo del chamaco. No quiero desmadre en mi casa.

Intruder: Si, jefe.

Gabriel: Ustedes, tienen el privilegio de ser mis alternos de más confianza, por lo tanto, deben estar consientes de eso.

Intruder: ...

Gabriel: Ahora, vayan a trabajar. Ya casi es media noche. Me quedaré aquí,  y cuando regresen al amanecer quiero que me digan  cuanto avanzaron.

Intruder y Cesar: Si señor.

Los dos secuaces se retiraron directo al pueblo, mientras Gabriel observaba al bebé con curiosidad.

Gabriel: ¿Y que habras hecho para que te dejaran en el bosque? ¡Ya se! Vere cual es la causa.

El bebé no le respondía, solo se le quedaba viendo con curiosidad. Gabriel levanta al niño y lo carga, mirandolo como si explorara y estudiara cada centímetro del bebé.

Gabriel: Hmmm... pues no parece que tengas alguna deformidad, tienes cabello rubio sano y brillante, ojos azules, muy sanos por cierto. Tus manos... pequeñas pero se ven bien articuladas, tal vez tus pies.

Gabriel sienta al bebé en el sillón, Gabriel empieza a sentir los cinco dedos de los pies del niño, sin querer le estaba haciendo cosquillas, el bebé reía, en la mente del pequeño, su nueva mamá estaba jugando con el. El neonato empieza a hacer movimientos con sus manos, pidiendo que Gabriel lo cargara de nuevo.

Gabriel: ¿Uh? ¿Quieres que te cargue?

Gabriel carga al bebé como lo haría una madre, esto lo hacia intentado que el niño no llorara, a su vez para no aguantar lloriqueos. El bebé se acomodó en los brazos de Gabriel, a esto bosteza y se aferra a la tunica de Gabriel.

Gabriel: ¿Que haces?

Gabriel lo mira con algo de nervio, pero a su vez, sentia calma, empezó a sentir ternura por el pequeño, Gabriel se sienta en el sillón, se acomoda, usa sus alas como cortina y sin verlo venir, bosteza, empezando a dormirse.

Gabriel: ¿Ves lo que hicite-? *bostezar* Me voy a dormir por tu culpa.

Y sin mas que decir se duerme.

Cuando ya casi salia el sol, Intruder y Cesar llegan a la casa.

Intruder: Que silencio, el jefe nos estaria esperando en la puer-

Cesar: ¿Que-

Intruder: Mira eso...

Intruder: Estan durmiendo.

Cesar: ¿Crees que haya dado lata al jefe?

(En México "Dar lata" significa que estuvo molestando)

Intruder: No lo sé, por la cara del jefe no creo que el bebé haya hecho mucho desmadre, pero bueno, hay que ir a dormir, y tambien preparar algo de comida, despierta a los demás, hay que avisar sobre esto.

Cesar: Claro.

Intruder: Jefe, Jefe.

Gabriel: ¿Eh? ¿Me quedé domrido?

Intruder: Uh. Si, tenga cuidado conmlos brazos.

Gabriel: ¿Por qu-. No puede ser... me quedé dormido con esta cosas en mis brazos.

Intruder: Esta bien señor, solo démelo y lo dejaré en mi cuarto.

Gabriel: N-no.

Intruder: ¿?

Gabriel: Es el humano perfecto para quedarse con nosotros. De ahora en adelante, tendrá un nombre. Se llamará, Eddie.

Continuara...