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Lluvia

Era domingo.

Jimin y Jungkook debían asistir al museo de artes donde presentarían los cuadros destacados de los estudiantes. Se arreglaron acorde la ocasión listos para ir, no sin antes darse unos cuantos besos por supuesto que sí.

(...)

-Ahora con ustedes el mejor cuadro para el que el modelo del pintor Jeon Jungkook colaboró-...-El presentador como se le podía ver cada vez que venían, tenía una enorme sonrisa de oreja a oreja-...-Ya había mostrado los cuadros de los ganadores anteriores hasta que llegó el turno de la colaboración de Jungkook.-

El presentador quitó la manta de color Blanco dejando expuesto el contenido del cuadro. Muchos al ver el cuadro formaron una "O" en sus bocas reteniendo el -ohhh- Por su asombro de todos los presentes. El cuadro tenía de fondo un bosque muy natural. Eran bellísimos sus colores, tonos desde los pequeños animales que consistían en aves u hormigas, hasta las magníficas flores de colores vivos y llamativos. El sillón donde había estado recostado Jungkook aquel día había sido reemplazado por un tronco de árbol caído, la flor en su boca y por supuesto, la expresión tranquila que el castaño había mantenido.

El pelinegro miró a su lado al castaño a su lado que mantenía sus brazos cruzados sobre su pecho, se le notaba tan tranquilo y sereno mientras todos lo miraban como si fuera un ser de otro mundo pero venerable. ¿Irónico no? Sus miradas eran bastante contradictorias.

-Wow veo que todos estamos muy sorprendidos con esto ¿no es así?-...-El presentador que miraba de un lado a otro los diferentes ángulos del cuadro, se podía decir que al igual que todos estaba sorprendido-...-Esto no se ve todos los días-...-Sonrió-...-Siguió leyendo el sobre en su mano. Nombrando a cada ganador.

-Y con ustedes la ganadora es la Joven Kim Yung mi-...-Todos aplaudieron al ver subir al escenario una chica con un vestido hasta las rodillas color pastel, llevaba lentes y una trenza en su cabellera rubia.-

Jungkook la reconoció al instante. *la chica de la flor* Cogió el reconocimiento en sus manos junto con un pequeño trofeo. Sonreía gustosamente. Jungkook sonrió ladino por la manera tan rara en que pasaban las cosas.

-¿La conoces?-...-Un poco de disgusto por parte del menor no se hizo esperar, pues el castaño llevaba viendo la rubia más de lo normal.-

-¿Celoso?-...-Impuso jugueteo al momento de responder-

Jimin no respondió. Le quitó la mirada viendo de nuevo al escenario donde la chica rubia ya no estaba. A Jungkook le pareció tan adorable ver la cara de Jimin. Su ceño semi fruncido, sus cachetes inflados, mordía de veces el interior de su labio. Era fascinante cada faceta suya y como poco a poco lo iba descubriendo.

-Bueno público esto es todo por hoy, Señor Jungkook-...-El mayor lo miró expectante-...-Es un gusto verle regresar-...-Señaló el cuadro. El mayor asintió una vez siendo cordial y concordando con el susodicho.-

El presentador abandonó el escenario, no sin antes hacer una leve reverencia para todos.

-Ufffs eso ha sido raro, al igual en como todos nos miran-...-El menor miró alrededor como todos mantenían sus miradas puestas en ellos (aún)-...-Es espeluznante-...-Susurró cómplice en el oído del mayor el cual al escuchar se carcajeo-...-No es gracioso-...-frunció el ceño-

-Si lo es-...-Siguió riendo pero con menos fuerza- De repente su burbuja entre ambos fue interrumpida por dos figuras que se sentaron en las sillas de enfrente en la misma mesa. Yugyeom y suga.

Jungkook y Jimin quedaron estupefactos al tener a esos dos en la misma mesa que ellos sentados sin pedir permiso, tan de repente y sin saludar. *Mal educados*

-¿Cómo te llamas?-...-Suga comenzó refiriéndose a Jimin-

-Déjalo Min-...-Interfirió Jeon-

-¿No puedo conocer tu modelo?-...-Juntó sus manos encima de la mesa-...-¿Cómo te llamas, bonito?-

Jungkook sentía que le hervía la sangre.

Hizo puños con sus manos descargando la molestia. *¿Cómo se atreve a decirle bonito a Jimin así tan de repente? Es mi modelo* *Calma, solo te está provocando* *¡Deja de míralo así!* Jungkook tenía su propio debate mental jugando con sus dientes mordiendo el interior de su labio inferior controlándose para no decir algo grosero pese a que Min merecía todas las palabras groseras del mundo entero por ser el hombre que es. 

-J-jimin-...-Desvió su mirada hacia otra mesa por la vergüenza, un sonrojo se hizo presente en sus mejillas-

-Lindo nombre-...-Acomodó con su dedo índice sus lentes que andaban un poco caídos sobre la nariz-...-Y dime jimin… El menor de todos había estado callado todo este tiempo mirando sin despegue al castaño. Pero este no se había dado cuenta por estar al pendiente de lo que Suga pretendía con Jimin. Suga miró a Jungkook con una ceja alzada y aires de superioridad. Su sonrisa socarrona era debidamente de preocuparse. -¿Que se siente ser el modelo de quién fue mi modelo?-

El menor alzó su cabeza de tope para encontrarse con los ojos felinos del piel pálida. 

-¿Qué?-

Y de pronto los recuerdos vinieron rápidamente a su memoria Cómo un disco. Recuerdos:
-"Ver personas desnudas es algo de mi rutina y parte del estilo de vida que llevo. Antes que todo, eh entregado un poco de mi infancia y toda mi juventud a esto. puedo Hasta ser yo mismo quien haga lo que haces ahora"-

-"Así que puedo mostrarme desnudo sin vergüenza"-

-"No te preocupes, además estoy acostumbrado a estos casos"-

-"Había pasado tiempo"- -Es un gusto verle regresar-...-Señaló el cuadro.-

 Para Jimin ya todo tenía sentido justo en ese mismo momento. Jimin salió del museo corriendo pasando sin permiso ni cuidado de tropezar con cuan persona hubiera en su camino. Había tenido consigo un poco de dinero en la billetera, no era mucho pero al lo menos era lo suficiente para pagar un taxi hasta la casa. Jungkook aún se encontraba adentro con Suga y Yugyeom, no obstante tenía ganas de salir tras el menor pero decidió quedarse un momento. De todas formas Jimin no iría muy lejos. O eso creía.

-Escúchame bien, Min-...-Lo señalo amenazante-...-No quiero que le dirijas la palabra de nuevo a Jimin-...-Se levantó de la silla casi haciéndola caer-...-¿Está claro?-.

El piel pálida sonrió malévolamente para levantarse acomodando el cuello de su corbata.

-¿O sino que?-...-Retó al castaño-

-Tu muy bien sabes que yo sé muchas cosas de ti-...-Echó una mirada de reojo al menor-...-Así que no estás en condiciones de provocarme. Deja de joderme la vida de una buena vez.-

Yoongi sonrió ladino sin mucha gracia y agarró de la mano a Yugyeom llevándolo consigo de nuevo a su mesa. Jungkook bufó de tranquilidad. Guardo su teléfono y sacó sus llaves para ir en busca de Jimin y contarle todo con calma. Había tenido que evitar a todos los que ocupaban el museo. Al parecer haberse dejado pintar en una universidad no pasó por alto. Todos lo perseguían pidiéndole una explicación sobre aquel lienzo pero él hacía caso omiso, pues su interés andaba en poder encontrar rápido a Jimin. Cuando por fin logró salir (a mucho esfuerzo) buscó al menor por todos lados pero no le encontró. Subió a su auto manejando a no mucha velocidad con la esperanza de que Jimin estuviera cerca. Pero no fue así.
Jeon comenzó a desesperarse. Manejó lo mas rápido que pudo pasándose unas cuantas luces rojas del Semáforo.

Le sorprendió que la policía no fuera tras el.  Se decidió por ir a casa .

Jimin agarró un taxi y dio la dirección de la casa. Cuando llego al girar la manilla recordó algo... las llaves. Golpeó su frente con la palma de su mano al igual que maldecía en sus adentros el ser tan despistado . Pero es que era lógico; Jungkook tenía las llaves y él había salido del museo sin percatarse de ese pequeño detalle. Sin mas opción se dejó caer en el suelo con su espalda en la puerta. Miró su reloj que marcaba exactamente las diez de la noche con cuarenta y siete minutos. Comenzó a pensar todo lo que había sucedido hace apenas una hora en el museo ¿por qué Jungkook no le dijo nada? ¿quién era en realidad?

La situación lo lleno un poco de miedo conforme a eso. Aunque por otro lado tenía la certeza que el mayor no era malo, pues sus razones había de tener para no decirle nada pero Jimin se resintió porque Jungkook nunca desaprovechaba la oportunidad para decir uno que otro insulto en el nombre de Min Yoongi, hablando de rivalidades y demás cosas que llevaron a Jimin a pesar que estas personas no tenían ningún vínculo. Se sintió realmente ridículo cuando Yoongi le confrontó hace rato y él no pudo hacer nada más que quedarse callado.  No era la obligación de Jungkook decirle nada... pero a Jimin le hubiera gustado que fuera así, pero ya no tiene caso. A Jimin se le derramaron dos lágrimas debido a lo revuelta que tenía sus ideas, la confusión y la expectativas de saber quién era Jungkook ¿Un modelo o un pintor? Joder, esto es complicado.

Limpió rápidamente las gotas saladas con su antebrazo. Hacía mucho frío esa noche, demasiado frío a decir verdad.

Comenzó a caer una llovizna leve a lo que menor se levantó yendo a acostarse en el pasto con algunas gotas de lluvia en el suelo y otras empezaban a mojar su cuerpo ¿Por qué hacer eso? Pues Jimin amaba la lluvia, le traía recuerdos de cuando sus padres y él salían a jugar en el patio cuando llovía y ahora, solo y admirando la noche fría pudo sonreír gracias a los recuerdos. Se sentía tan bien. La lluvia paró pero Jimin no quería levantarse ya que al parecer la pereza pudo mas que el. Se hizo bolita en el suelo sin esperar a Jungkook y de una manera extraña se durmió. .

Jungkook llegó a casa estacionando el auto y así bajarse como mas rápido pudiese. abrió la puerta principal encontrándose con el menor hecho bolita en el pasto. Corrió hacia él para levantarlo poniéndose de rodillas sin importar si su pantalón se mojaba por el suelo. Solo que al estar lo suficientemente cerca notó que el menor estaba empapado de pies a cabeza como si acabara de salir de la ducha, al igual que notó como este temblaba. Jungkook se asustó por completo. 

Colocó su mano en la frente contraria percatándose de la calentura que este tenía.

-Estas ardiendo-...-Susurró el castaño-

Quitó su chaleco para ponerlo en el cuerpo de Jimin. Sacó sus llaves para proceder a abrir la puerta de la casa. Se devolvió al patio para cargar al menor como novia y adentrarlo a casa. No fue difícil cargarlo, pues el menor no pesaba tanto que digamos.
Subió con Jimin en brazos hasta su cuarto abriendo la puerta con cuidado, pasar con el pelinegro y posicionarlo en la cama. Jungkook sacó los zapatos mojados y sus pantalones, quitar la camisa fue un verdadero reto pero lo logró. Jimin abrió sus ojos con dificultad y lo primero que vio fue al mayor quitando su ropa. Joder empezaba a tener un buen sueño y a Jungkook se le ocurre despertarlo. Aguafiestas.

Jungkook trajo muchas sabanas para echarlas encima del menor.

-Tengo frio-...-El menor abrazaba su propio cuerpo con su ceño fruncido, sus ojos cerrados y sus labios temblaban al igual que su cuerpo.-

-Lo sé, Jimin-ssi--...-Pasó su mano por la frente del menor-...-Llamaré a un médico, no tardo-...-Jungkook se disponía a ir pero una mano en su brazo no le dejó-...-¿Qué ocurre?-...-Miró al menor el cual se aferraba a su brazo.-

-No te v-vayas-...-Lo miró-...-Por favor-

-Solo llamaré al doctor-...-Dijo tranquilo.- El menor negó varias veces con una mirada suplicante.

-Duerme conmigo-...-Sus palabras salían con dificultad-

El mayor asintió. Una vez le dijeron que el calor corporal quitaba el frío, a pesar que Jimin tuviera fiebre lo intentaría. No había doctor y debía buscar una solución. Sacó rápidamente su ropa dejándola en el suelo quedando solo en bóxer, se metió bajo las sabanas justo al lado del menor para poder pegar sus cuerpos expuestos en un abrazo. Volteó al menor con cuidado haciendo que este acurrucarse su cabeza en hueco de su cuello.

Jimin sintió ese calor ajeno cubrirlo, sabía que era Jungkook el que lo abrazaba y sin más se dejó. Porque Jimin confiaba profundamente en Jungkook.

Esa noche no hubo perversión, morbosidad, coqueteo ni nada parecido a lo anterior. Solo hubieron abrazos, calor, besos tiernos y comprensivos por parte del mayor de ambos hombres que empezaban a quererse un poco más.

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