No hace mucho tiempo, un chico se encontraba en el lago al que iba todas las semanas. Le gustaba ir allí porque las luciérnagas salían de noche, y realmente amaba la forma en que sus luces iluminaban el agua. 

Ese día, Jungkook notó que una pequeña luciérnaga había sido atrapada en una telaraña. La tomó con cuidado y la dejó descansar en la planta de sus manos hasta que pudiera volar y brillar nuevamente. 

Así fue como Taehyung conoció a Jungkook. 

Hay algo que los humanos no saben, y es que las luciérnagas son como las hadas: son tan pequeñas que solo pueden sentir una emoción a la vez. En algunas ocasiones, pueden ser muy malas, muy buenas o estar muy enamoradas (como nuestra pequeña luciérnaga, Taehyung, en ese momento). 

La pequeña (y muy, muy enamorada) luciérnaga usó sus alas para volar muy alto en el cielo, lejos de las otras luciérnagas. Llegó tan alto que encontró a la diosa de las estrellas sentada en una nube. En su conversación con ella, le dijo lo triste que se sentía por no poder interactuar con el chico como lo hacen otros humanos. 

La luciérnaga rogó tanto, que logró que la Diosa le concediera su único deseo: convertirse en humano (o parecerse a uno). 

Cuando Taehyung se convirtió en una persona, lo primero que hizo fue encontrar a Jungkook, se conocieron (nuevamente) y se hicieron amigos íntimos a medida que los días pasaban. 

Empezaron a pasar mucho tiempo juntos. Taehyung se sintió tan feliz, que estaba empezando a pensar que todo era un sueño, y cuando veía sus manos y piernas humanas no extrañó sus alas en lo absoluto.   

Ellos vieron las estrellas juntos, 

vieron el mar juntos, 

y con el tiempo y las experiencias vividas, ambos estaban enamorados.

y Jungkook comenzó a ver el planeta entero en Taehyung, a las estrellas en sus ojos y al océano en sus lágrimas.     

Aún así, (desafortunadamente) no todo es perfecto, y la cuestión es que la diosa solo había dado una condición: Taehyung no podía tocar a Jungkook o la pequeña ex luciérnaga desaparecería para siempre. 

Verdaderamente es una lástima, pero aquél día llegó. Al cruzar la calle, un automóvil estaba a punto de atropellar a Jungkook, era imposible no tocarlo si Taehyung quería salvarlo.  

Corrió hacia Jungkook, y lo empujó para quitarlo de la carretera antes de que el auto lo arrollara. Cuando estuvieron a salvo, luciérnagas comenzaron a salir de sus ojos, su cuerpo brillaba con fuerza  y supo que su tiempo había terminado, estaba a punto de convertirse en polvo de estrellas. Su muerte había comenzado, y miró fijamente a los ojos de Jungkook como diciéndole "adiós" con el triste brillo de sus ojos.   

Primero, Taehyung dejó de poder ver los colores. 

Más tarde, no pudo mantenerse de pie, y cayó al suelo. 

Finalmente, no pudo seguir viendo las estrellas en los ojos de Jungkook.   

Así es como una luciérnaga se convirtió en un chico, un chico se convirtió en un amante, y un amante se convirtió en polvo de estrellas. 

(y no se volvieron a encontrar, ni en esta vida, ni en la siguiente, ni en ninguna otra) 

[Fin.]