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Ya había pasado dos semana desde el severo castigo que me había impuesto a mi padre, así que mi madre se encargó de supervisar mi entrenamiento y contrato a varios tutores, cada uno más estricto el otro, incluso llegué a extrañar aquella pelirroja irritante.

Mi cuerpo aún no podía tolerar las jornadas largas, eventos tras eventos en tan poco tiempo,  están absorbiendo la poca energía que tengo. Hay un silencio sepulcral en todo el palacio, he visto a muchos de los guardias arrodillarse por horas frente al salón Geum, he pasado por ahí algunas veces y han dejado flores, cartas y algunas cosas como si se tratara de un altar.

Las cenas son silenciosas y cada uno por su lado, su ausencia ha dado un ambiente completamente diferente, Minho parece una viuda que ha perdido a su esposo, se encierra en su habitación a dormir, he tenido que obligarlo a que coma y muchas veces la rechaza así que nana tiene que encargarse de el, porque no me quiere ver.

Desde hace algunos días, se arrodilla frente al salón y se queda por horas mirando, sin duda creo que el ha enloquecido, intenté convencerlo miles de veces para que dejará de hacerlo y solo recibí una mirada aterradora de su parte.

Parece que me he convertido en el villano de la historia, pero aunque me cueste un poco aceptarlo, creo que en verdad merece una disculpa de mi parte, hay algo que esta carcomiendo mi corazón, algo que no me deja dormir.

Cuando la vi ser tan cercana con Minho en aquella noche, demonios no tengo que volver a pensar eso, prometí que nunca más volvería a sentirme así.

─ ¿Qué estas haciendo aquí? ─preguntó Minho, viéndome seriamente ─ tu y tu hipocresía pueden ir por otro lado.

─ hyung, eres mi mejor amigo, ¿enserio nos llevaremos así? ─respondí, pasando un brazo sobre sus hombros ─ mi maestra es fuerte ¿si? lo es incluso más que todos en el palacio o en el reino entero.

─ ¡ja! ¿Acaso estoy escuchando bien? ¿Jeon Jungkook esta elogiando a alguien que no es el mismo? ¡que novedad! ─exclamó sarcásticamente ─ eres mi amigo, pero desde que llegaste aquí, cambiaste mucho, te volviste posesivo, insolente y desagradecido, nunca pensé eso de ti.

ouch, no podía creer lo que Minho me estaba diciendo ¿Es así como me ven los demás? nana, mis padres y mis hermanos ¿pensaran lo mismo? sentí un nudo en la garganta de solo pensarlo.

Aguardé silencio, la puerta ornamentada era completamente blanca con detalles dorado, destacaba entre lo sombrío del lugar, muchas flores frescas y algunas marchitas adornaban la entrada, presentes y una pila de cartas las acompañaban, ¿Quién eres en verdad? 

Reflexione un poco más y me atreví a interrumpir el silencio, preguntando a Minho, antes de que me echará de aquí.

─ Minho... tu... ¿A que te refieres como posesivo? ─titubee antes de preguntarle.

─ Veo que no te haz dado cuenta ─murmuro para si mismo ─ dices odiarla, pero siempre cuestionas su relación con tu padre e incluso la atacaste por ser cercana a mi, a este punto creo que esos son celos ¿Realmente la odias como dices? 

─ Debes estar alucinando, no pretendí conocerla o ser cercano a ella, solo sentí que se aprovechaba de ti y de mi padre ─me excuse rápidamente ─ me sentí tan molesto que simplemente yo...

─ No entiendo como funciona en tu mundo, pero me parece que haz mesclado tus emociones amigo ─contesto tranquilamente ─ te lo dejaré en claro, yo quería saciar mi curiosidad y ella saciar su sed, a pesar que lo tenía completamente prohibido, simplemente fue algo fugaz.

Me quedé en silencio sin saber que decir, pero sin dudad Minho estaba equivocado, el es un humano ellos ponen en prioridad los sentimientos, yo solo debo aclarar esto.

No podía dejar de pensar en las palabras de Minho, caminaba de aquí para allá intentando entender, pero no lo logre.

Ignore los llamados de mis padres, hermanos y tutores que habían estado llamando constantemente a mi puerta, sin embargo no me atreví a abrir, todo me estaba carcomiendo en el interior y aunque intentaba desviar mi atención, las palabras volvían a mi como un bucle.

¿que es lo que siento por ella? La primera vez que la vi, admito haber quedado embelesado por su belleza, aunque también consternado por la relación que iba llevar de ahora en adelante.

Con el tiempo un sentimiento de aversión hacia ella, surgió agh que complicado es esto. Me deje caer sobre mi cama, observando cómo la habitación se iba sumiendo poco a poco en una intensa oscuridad.

─ hijo, ven a cenar ─llamo mi madre, sacándome de mis pensamientos─ tu padre tiene algo importante que hablar.

Iba a negarme y seguir pensando entre los 4 muros de mi cuarto, pero me detuve mordiéndome el labio como acto seguido.

─ enseguida, voy mamá ─respondí, reincorporándome en lugar.

Minho finalmente se encontraba de mejor humor, aunque aún parecía que estaba enojado conmigo. Lo único que se podía escuchar eran los cubiertos chocando contra los platos, me pregunto que es eso importante de lo que mi padre quiere hablar.

No me había atrevido a preguntar, estas semanas habían sido momentos tensos y parecía que todos estaban pasando por un tiempo que duelo, incluso la comida sabía insípida, más de lo normal.

─ Recuerdo la primera vez que mi padre me llevo al Salón Geum, fue un verdadero infierno ─habló mi padre repentinamente ─ en esa vez mi Maestra se unió a mi por casi por dos meses, mi padre estaba tan furioso que ordeno enfriar la habitación todas las noches.

─ Eras muy testarudo en ese entonces, querido ─dijo mi madre ─ tu y tus hijos son tan para cual.

─ ¿Entonces todo es mi culpa? ¿señora todo lo puedo hacer sola? ¿a quién crees que salió Kyung y Jungkook? ─preguntó burlonamente mi padre.

─ Padre, la maestra a la que te refieres...¿es a la maestra Rhee? ─me atreví a preguntar después de unos minutos.

─ ¿A quien más me podría referir hijo? mi maestra me ha acompañado desde que estaba en el vientre de mi madre, incluso creo que ya estaba e la familia desde mucho antes ─respondió mi padre, dejándome de mis palabras ─ ella en cierto punto es como mi madre; me defendía, me cuidaba, me alimentaba, me entreno y me enseño todo lo que se.

Nunca había visto a mi padre, hablar así de alguien, se veía completamente orgulloso al momento que expresaba lo que sentía, ¿Quién eres Rhee Hari?

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Z I D I A N