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Fue justo en ese preciso momento en que lo pude ver, detrás de aquella mirada sombría, detrás de aquellas palabras frías y duras, solo se encuentra una niña atemorizada, cuando nuestros meñiques se unieron sellando nuestra promesa y una sonrisa como ninguna otra adorno su rostro, tal como un espejismo o un pensamiento fugaz, la vi, no a la intimidante persona que es, sino una joven frágil y temerosa.

Se encontraba a escasos metros delante de mi, su cuerpo temblaba por el frío del invierno, ¿Dónde estoy? creí que me encontraba en el auto, me acerque un poco más, sin embargo ella no parece verme, su cabello era pelinegro, haciendo juego con su piel tan pálida.

Tenía heridas en su cuerpo, que podían notarse tras ese ligero vestido blanco que llevaba, intente tocarla, pero esta se desvanecía en mi mano ¿un sueño? no, ¿Cómo podría serlo?, es como si viera una imagen muy joven de ella.

Su mirada estaba perdida no podía entender que miraba con tanta atención, mire hacia todas direcciones, viendo a lo lejos a lo que creo que es el emperador, alto e imponente, ¿acaso es mi padre? pero a cada paso que daba, ella retrocedía, ¿Cómo podría ella temerle?

Aquel hombre sostenía con fuerza a un pequeño niño en su mano, este lloraba mucho y se quejaba, los sirvientes atrás, portaban mascaras y su mirada estaba puesta en el piso, ¿Qué es esto?

El hombre lanzó al inocente niño en la fría nieve, me quedé estático al escucharla decir "Junghyeong-ah", ¿acaso ese hombre era mi abuelo?

— ¡Eres una desgracia!, no eres capaz de procrear aun heredero sano, sin embargo te atreves a acoger a este niño que no es mas que una vergüenza para el reino —exclamó fríamente— debí matarte cuando tuve oportunidad.

—¡Hazlo! ¡Mátame si te atreves! porqué a los ojos de todos soy solo la concubina del emperador, cada uno de los sirvientes detrás de su gran Majestad, murmura y maldice su trono, ¡Mátame! ya me haz arrebato todo, no tengo nada que perder —gritó enojada— porqué te prometo que volveré del infierno y acabaré con todo este maldito reino.

Sus palabras fueron detenidas por una bofetada, mi cuerpo temblaba y mi pecho dolía, ¿porqué me comporté de esta forma? este era su recuerdo, no es que ella siempre hubiera sido ahí, ella decidió que así fuera, solo quería ocultar que alguna vez fue feliz, quería ocultar lo miserable que había sido en el pasado y yo no hice mas que recordárselo.

Aquel hombre, que ahora se que es mi abuelo, se acerco a ella sujetándola del cuello, pese a los intentos de la versión mas pequeña de mi padre de detenerlo.

—te maldigo, Rhee Hari, vivirás atormentada por toda la eternidad, perderás la cabeza y no serás muy diferente de las bestias del campo, nadie podrá librarte de este castigo —comentó socarronamente— si en los próximos mil años, no logros coronar a un nuevo emperador, te marchitarás como una simple rosa.

lanzó su cuerpo con fuerza en el piso, arrodillándose frente a ella, colocó su mano sobre su pecho, mi estomagó dio un vuelco, cuando enterró esta, arrancándole un grito de dolor, mucha sangre tiño la nieve, no podía ni siquiera mirar, yo no podía verla en ese estado.

—Llevaré esto conmigo, querida esposa, late con fuerza de solo estar en mi mano —murmuró alegre— desde ahora mientras yo siga en este mundo, vivirás, si algún día te atreves a ir contra mi, solo basta con apuñalar tu horrible corazón.

Estaba inconsciente con ese hueco en su pecho, tomo su mano dándole una mordida, se levantó sino antes de incinerar todo ese cortejo detrás de el, los gritos desesperados, me aturdían, todo se volvía oscuro de a poco.

Me levante súbitamente todo esta completamente oscuro, mire a mi alrededor ¿acaso sigo en el auto? mi mente se sentía pesada, es como si hubiera sentido cada una de las emociones de mi maestra, su dolor y angustia eran devastadores, mi cuerpo sentía temblando de solo recordar tal escena.

Ahora puedo entender el porque su rechazo a hablarme del reinado de mi abuelo, el porqué me pidió que ni siquiera me atreva a preguntarle al respecto a mi padre, solo echaría mas leña al fuego, incluso desde niño mi padre sufrió a causa de su propio padre y mi maestra lo acogió como su hijo.

De solo pensar lo que pudo haber sentido, pese a que no mostraba ninguna reacción violenta y que respondía a cada una de mis acusaciones sobre ser "la nueva concubina de mi padre" enserio fui una basura completa.

—¿Príncipe? ¿Se encuentra bien? —una voz sonó ligeramente— parece que tuvo una pesadilla.

Mire hacia mi costado, encontrándome con su rostro preocupado, pero no puedo evitar ver su rostro lleno de dolor y amargura, como arrulla al niño que se convirtió en mi padre, no puedo evitar querer abrazarla.

—Maestra, prometo que la ayudaré...me convertiré en el rey de este imperio —murmuré, abrazándola delicadamente— todos sus esfuerzos nunca serán en vano.

—Siempre supe que lo haría, solo era cuestión de tiempo —respondió, correspondiendo finalmente a mi abrazo — eres un joven bastante obstinado, siempre fuiste así desde niño

Me separé rápidamente, mirándola fijamente ¿desde cuando haz estado conmigo? ¿Por qué no puedo recordar que siempre estuviste ahí para mi? incluso desde mi nacimiento, siempre haz sido tu.

—¿Entonces tu estuviste desde mi nacimiento? —pregunté curioso— porqué ni siquiera puedo recordar que nos hayamos visto antes, tengo buena memoria ¿sabes?

—Estuve desde el nacimiento de tu bisabuelo, de tu abuelo, de tu padre, del tuyo y estaré en los nacimientos de cada príncipe heredero de la familia Jeon —comentó seriamente— pero solo asistí el  parto del de tu padre y tuyo, en ese tiempo no fueron buenos, además si no me recuerdas es que estuve solo los primeros 100 años de tu vida, pero no pasaste tanto tiempo conmigo como para recordarme.

Entonces siempre fue así, siempre estuvo ahí, pero no pudo tener la vida que se merecía, por eso mi padre le tiene tanto aprecio, sin ella el no hubiera sido rey, ni siquiera hubiera podido tener el derecho de vivir, porque era aborrecido por el reino y por su propio padre.

 "no eres capaz de procrear aun heredero sano" esas palabras seguían rondando en mi cabeza, ¿Cuántas veces sucedió? ser maldecida y estar condenada, un sentimiento me invadió de repente ¿acaso esa criatura sanguinaria, en realidad es el antiguo emperador? claro eso explicaría porque solo la energía de ella, puede retenerla, el porqué después de tantos años sigue encerrado, si el muere, ella también lo hará.

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Z I D I A N