
Capítulo 6 : "Fue Un Accidente"
Miles no podía creer lo que Lysa le decía, él no quería que Malena se fuera y lo dejara.
— ¡Señora ni usted ni nadie va impedir que Malena se quede conmigo! — le gritaba Miles.
Ellos estaban discutiendo cerca de una carretera, la señora Lysa quería cruzar la calle pero Miles no la dejaba, la tomaba del brazo.
— ¡Suéltame Miles! ¡Estás loco! — gritaba Lysa — ya perdiste a Malena, ¡Acéptalo! Malena desaparecerá de tu vida — gritó la señora soltándose de Miles, dio media vuelta para cruzar y al instante un carro vino a toda velocidad y la atropelló brutalmente.
Miles quedó impactado con lo sucedido, mucha gente se acercaba a auxiliar a Lysa... Miles huyó de ahí. Lysa estaba grave, tirada en el suelo con sangre.
Malena presintió que algo estaba mal.
— ¿Que tienes Malena? — preguntó Adam.
— Siento algo muy extraño — decía ella.
Minutos más tarde, llamaron a Malena y le informaron que su madre estaba grave en el hospital. Ella comenzó a alterarse, sudaba mucho, las manos le temblaban. Adam la llevó rápidamente al hospital. Mientras estaban en el auto, Malena comenzó a llorar, estaba muy asustada, Adam trataba de calmarla pero no podía.
Cuándo Malena llegó al hospital, le preguntó al doctor que tan grave estaba, lamentablemente el doctor le dijo que falleció... Falleció.
Malena quedó en shock al escuchar la noticia, se sentó en el suelo, estaba pálida, Adam le hablaba, la consolaba, pero Malena no decía ni una sola palabra, ni lloraba, sólo se quedó inmóvil.
Miles llegó a su casa, asustado, recordó que Lysa se soltó de él y en ese mismo instante el carro la atropelló, todo pasó tan rápido. A Miles no le dio tiempo de reaccionar. Se sentó en el sofá recordando una y otra vez el accidente.
— Fue un accidente... Yo no quise... No quería.. — decía varias veces. Una de las sirvientas preguntó si se sentía bien. Miles sólo la miró, se puso de pie y se fue a su habitación.
Al día siguiente... Fue el velorio y entierro de Lysa, Malena estaba desecha, acompañada de Rose y Adam. Estaban varios vecinos que estimaban a la señora. Por estar en Europa la hermana de Lysa no pudo asistir pero también llora por su muerte.
Ethan le comentó a Miles que fuera a ver a Malena porque su madre murió, a Miles se le cayó un vaso al suelo de la impresión.
— ¿Está muerta? — preguntó Miles.
— Si, ¿no vas a ir a ver a Malena? — preguntó Ethan.
— Malena... Y yo, ya nos estamos juntos. Hace 2 días que terminamos. — le manifestó Miles.
— ¿Por qué no me dijiste? — decía Ethan — hubiera podido ayudar.
— No, no hace falta.
— ¿Hay algo más que no sé? — preguntó Ethan.
— No.... No no hay nada más — dijo éste retirándose a su cuarto.
Miles se quedó horas encerrado en su habitación, la conciencia no lo dejaba tranquilo.
— No soy un asesino, no la maté... No lo hice — decía Miles.
Era de noche, Malena veía todas las fotos que tenía con su mamá, fueron a muchos lugares bonitos. Adam seguía a su lado después del entierro. Se sentó con ella en el sofá.
— Se que mi mamá dónde quiera que esté, se que está con mi papá. Se amaban mucho, éramos como la familia perfecta — decía Malena con lágrimas en los ojos.
— Se fuerte Malena, al menos pudiste despedirte de ella, debes seguir adelante — la animaba Adam.
— Todo será distinto a partir de ahora... Pero estoy segura que ella me cuidará desde el cielo — dijo Malena llorando y arrecostándose en el hombro de Adam. Cuándo hizo eso... comenzó a recordar los bonitos momentos con Miles. Ella se puso de pie.
— ¿Estás bien? — preguntó Adam.
— Si... Si no te preocupes, iré a mi cuarto a descansar — dijo Malena.
— Espera... ¿Qué va a pasar con tu viaje a Europa? — preguntó Adam.
— El viaje sigue en pie... Mi madre quiso que yo me fuera a seguir mi sueño... Y así lo voy hacer... Me voy en 5 días — habló.
— Está bien, me voy a quedar toda la noche aquí cuidándote... Si necesitas algo estoy en la sala — dijo Adam.
— Gracias... Muchas gracias amigo — se fue a dormir Malena.
En plena madrugada, Miles tenía pesadillas, despertó gritando, lloraba... Salió de su habitación, fue hasta el patio. Se arrodilló en el césped...
— ¡Ya basta! ¡Déjame en paz! ¡Por favor déjame salte de mi cabeza! ¡Déjame en paz!! — gritaba Miles con lágrimas en sus ojos.
A veces el cargo de conciencia puede ser un problema muy serio, como el caso de Miles ahora.
Ethan bajó al patio al escuchar los gritos, abrazó a su hermano fuertemente.
— ¿Que tienes hermano? ¿Que tienes? — preguntaba angustiado Ethan.
— ¡No puedo dormir! — lloraba Miles.
— ¿Por qué? ¿Te sientes mal?
— Si... Siii, los pensamientos con Malena no me dejan dormir — decía éste cansado de gritar.
— Hermanito cálmate... Vamos a tu cuarto — dijo levantando a su hermano.
— Si quieres me quedo aquí sentado hasta que te duermas — decía Ethan.
— No... No soy un niño. — respondió Miles.
— ¿Qué te atormenta? ¿En serio es por Malena? — preguntó sospechoso.
— Malena se va a ir a Europa. Se va y no se por cuánto tiempo.
— Wow... No sabía eso Miles, pero tranquilo, así vuelva o no, tú tienes que seguir — le aconsejaba Ethan.
— Si esta bien hermano, lo tomaré en cuenta. Ya puedes irte. — dijo Miles.
— ¿Seguro vas a estar bien?
— Si Ethan no te preocupes, estaré bien.
Cuando Ethan se retiró, Miles se quedó mirando por la ventana. Miraba el cielo, ya casi estaba amaneciendo.
— Malena es mía señora Lysa, y aunque ésta vez estemos separados... Pronto estaremos juntos otra vez, se lo juro señora Lysa — dijo Miles mirando al cielo con una mirada frívola.
Los días pasaron, Miles se sentía mejor, volvió a ser el mismo de antes. Matthew y Noah fueron a visitarlo.
— La verdad que triste para los dos, tú te quedaste sin Malena, y ella se quedó sin su madre — decía Noah. ¿Miles por qué terminaron?
Miles y Matthew se miraban las caras, pero Miles le dijo a Noah que no quiere hablar del tema. Lo que no sabía Noah era sobre la aventura de Miles con la subdirectora.
Mientras tanto en el hospital donde trabaja Ethan con su padre, estaban conversando en su receso sobre Miles.
— ¿Estaba llorando? Me sorprende, tu hermano ha sido una de esas personas fuertes... Me atrevería a decir que tú Ethan eres más sensible que él — decía Bill.
— Lo sé papá, pero conozco a Miles, si él llora es porque no le salió algo cómo él quería o es porque pasó un gran susto — dijo Ethan.
— Por cualquiera de los dos, tu hermano tiene que madurar, él no puede esperar que todo le salga bien, además sus problemas no son tan graves, cuando esté trabajando, ahí es dónde va a saber que son los problemas — dijo Bill muy serio.
— Deberías hablar con él — decía Ethan.
— No tendría caso, cada vez que hablo con él terminamos peleando. Miles siempre ha sido así... Pero tras la muerte de su madre, su comportamiento ha empeorado — habló Bill sin buscar algún remedio para ésta situación.
Mientras tanto, Malena salía de su casa con su maleta, se iba a Europa. Adam la acompañó al aeropuerto.
— ¿Vas a estar bien? — preguntó Adam.
— Si... Mi tía es muy buena, estoy segura que estaré bien, ¿tú vas a estar bien?
— Te voy a extrañar Malena, desde que éramos niños jamás nos distanciamos tanto como ahora, así que espero que esta separación valga la pena, y espero verte pronto - dijo Adam.
— Yo también espero volverte a ver, cuídate Adam — dijo ella despidiéndose mientras entró al avión.
Ya sentada esperando a despegar, tenía consigo la foto de su madre, y para sorpresa, también una foto de Miles... Ella lo seguía amando.
— Espero y pueda olvidarte Miles — decía ella en su interior.
El avión despegó... Y Malena se fue lejos.
1 día después, Miles pasó con su auto por la casa de Malena, bajó y fue a tocar la puerta, para su sorpresa, Adam se acercaba a la casa de su amiga también.
— ¡¿Tú que haces aquí?! — dijo Adam empujándolo.
— No vengo a pelear, sino a ver a Malena — dijo Miles.
— Eres un descarado, te atreves a venir a pesar de que la engañaste — decía Adam con ganas de golpearlo.
— Cuídate de mí Adam, ya sabes lo que pasó en la comisaría — amenazaba Miles.
— ¡No te tengo miedo! Y para que lo sepas, Malena se fue ayer, se fue a Europa.
Miles quedó mudo ante la noticia.
— Se... ¿Se fue? — él estaba en shock.
— Si. Se fue por su sueño, y se que lo logrará, y también te va olvidar a ti — dijo Adam.
— Dudo mucho que eso pase, Malena me ama, y yo a ella — decía Miles — Y no importa cuánto tiempo pase... Malena y yo volveremos a estar juntos.
Miles se subió a su auto y se fué.
Por otro lado, Gwen, Noah y Matthew estaban en una cafetería.
— ¡Si Miles está soltero, tengo oportunidad con él por fin! — decía Gwen muy feliz.
— No te adelantes Gwen — la interrumpió Noah — Miles necesita tiempo para olvidar.
— No creo que eso pase, Miles es terco, y cuándo tiene a alguien en su cabeza, no descansa hasta tenerlo — dijo Matthew.
Miles regresó a su casa, se encerró en su habitación. Se acostó en su cama... Miraba el techo por varios minutos.
— Malena... Malena... Vas a regresar a mí... Yo te voy a esperar... — decía éste esperanzado.
A pesar de todo, Miles seguiría con su vida, y piensa progresar en su carrera como actor. Y mientras crecía como profesional, esperaría a Malena... Porque sabe... Que regresará.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro