Capítulo 7: La Segunda Colisión
Jungkook despertó sintiendo un vacío en su estómago. Miró su teléfono. Eran más de la una de la tarde. Probablemente su alarma había sonado, pero él la había ignorado. De pronto tuvo conciencia de todo lo que había pasado el día anterior. ¿Había sido un sueño? Por supuesto que no había sido un sueño, pero todavía le costaba entender y aceptar todo lo que había pasado. Se levantó sigilosamente. No sabía si Jinseo o Seokjin como debía llamarlo ahora, estaba despierto. La puerta de la habitación de huéspedes estaba cerrada. Fue entonces hasta la sala y encontró a Wootteo.
—¡Saludos Jungkook! Espero que tu descanso haya sido provechoso.
Definitivamente nada había sido un sueño. Había una I.A. llamada Wootteo en medio de su sala. A Jungkook le agradaba. Tenía una voz neutra, pero agradable y su aspecto era...casi como el de un juguete de niños.
—Gracias Wootteo. Creo que dormí muy profundamente. ¿Y el Capitán Jinseo? ¿aun no despierta?
—Lo mejor será que te acostumbres a llamarlo Seokjin. Así será más fácil para él, acostumbrarse a su identidad terrana. Y no, extrañamente cuando fui a despertarlo se movió y dijo algo en solariano que no le entendí y siguió durmiendo. Asumo que la atmosfera terrestre lo afecta de alguna manera.
Jungkook esperaba que fuera sólo eso y no que tuviera alguna consecuencia por el golpe recibido. Le dio entonces las indicaciones a Wootteo acerca del funcionamiento de la ducha y dejó toallas limpias para Seokjin, mientras él entraba a su propio baño.
Mientras tanto, Seokjin despertaba un poco aturdido. Sabía que había escuchado la voz de Wootteo, indicándole que ya habían pasado las cinco horas de descanso, pero parecía como si hubiera sido un sueño. Abrió sus ojos y se encontró en un lugar completamente extraño. Claro, estaba en casa del terrano. De Jungkook. Suspiró al recordar su condición ahora. Estaba atrapado en el planeta azul, hasta que no descubrieran quien había atacado a la naves y que es lo que exactamente habían hecho.
—Saludos Seokjin. Jungkook dejó instrucciones—la voz conocida de Wootteo le trajo una cierta tranquilidad. Bajó de la cama y miró sus genitales. La erección que experimentaba en las mañanas y que sabía que era una reacción fisiológica estaba ahí como siempre, pero al pensar en su anfitrión sintió como su pene se endurecía aún más. Eso no era bueno. Los solarianos también suprimían su impulso sexual con la reprogramación. No podían reprimir los procesos fisiológicos de su cuerpo, pero no era buena señal que su pene reaccionara así, al pensar en el chico terrano.
Apenas escuchó las instrucciones de Wootteo, cuando cerró la puerta del baño. Todo era muy distinto a Solaris, por supuesto. El cuarto de aseo era pequeño y no había mando de voz. Todo debía hacerse de manera manual. Trató de no concentrarse en su pene erecto, que por primea vez incluso sentía dolor. Simplemente optó por abrir el agua fría.
Cuando Jungkook salió del baño, se dio cuenta que Seokjin había despertado. No pudo evitar pensar en el solariano desnudo en su baño de invitados. Se vistió y miró su celular. Tenía dos mensajes de Jimin.
Jiminnie-Hyung
Hola Jungkookie ¿ya despertaron? Estamos preocupado por ti y Seokjin. Taehyung y Yoongi trajeron comida. Los esperamos para comer.
Ese mensaje había sido enviado hacia quince minutos. Contestó de inmediato.
Hyung, Seokjin está en la ducha. Iremos en cuanto él esté listo. Creo que durmió buen. Wootteo dice que no lo pudo despertar más temprano...debe estar cansado...
—Jungkook...—Ahí estaba...Seokjin estaba en la puerta de su cuarto, vestido con su ropa. Unos pantalones de chándal y una camiseta negra de manga corta. Se veía diferente...Al verlo, nadie podría pensar que venía del espacio. Aun así, era extremadamente guapo. Incluso lucía más joven que con su uniforme. Su pelo estaba desordenado y no peinado hacia atrás, como hacía unas horas. Se preguntó cuántos años tendría.
—Hola hyung...Seokjin...veo que mi ropa te quedó. ¿Pudiste descansar?
¿tuviste algún inconveniente?
—Sí, descansé más de lo que había programado. Probablemente sea porque la atmósfera terrestre es un poco más pesada que la solariana. Aun debo aclimatarme. Además, los días aquí tienen veinticuatro horas. Solaris tiene veinticinco...me acostumbraré...
—Bueno, vienes de muy lejos...caíste, golpeaste tu cabeza...es normal. Hace un año fui a Estados Unidos y el jet lag casi me mata... no te preocupes, te acostumbrarás.
Seokjin intentaba seguir el ritmo de la conversación de Jungkook, Entendía la mayoría de las cosas que le decía, aunque había palabras que debía procesar. Sabía que Estados Unidos era un país del planeta. Recordó entonces que la tierra no estaba unificada...pero no entendía aquello de Jet lag...tal vez debía hacerle caso a Taehyung e implantarse el chip traductor que le permitiría entender de mejor manera los conceptos que usaban los terranos. Lo tenía guardado, porque en pocas ocasiones lo necesitaba, pues sus exploraciones eran en planetas no habitados y su vida social era mínima. Menos aún en otros planetas.
—¿Qué eso del jet lag? —preguntó finalmente. Definitivamente debería buscar ese chip.
Jungkook lo miró un poco desconcertado. "Jet lag" era un concepto demasiado terrenal pensó.
—Ya sabes... ¿trastorno por disritmia circadiana? Hobi lo ha sufrido así es que tu biología debe ser parecida a la nuestra... ¿lo es?
—Claro, ahora entiendo... probablemente esté sufriendo de algo así..y sí, nuestras biologías son similares. La capacidad física de los solarianos es un doscientos porcientos superior a la de los terranos y también nuestro cerebro está más desarrollado...somos mucho más inteligentes que ustedes.
JungKook se sintió profundamente ofendido, pero Seokjin ni siquiera lo notó. Vio el rostro apretado del chico, pero no supo interpretar que le estaba sucediendo.
—¡Eres muy presuntuoso! Dices que son más inteligentes, pero sus naves fueron saboteadas y tú te estrellaste de una manera poco elegante en mi planeta "menos inteligente". Hasta ahora no he notado esa supuesta superioridad de la que hablas...bueno excepto cuando apretaste mi cuello, pero estoy seguro que cualquier militar terrícola podría hacer lo mismo.
Seokjin observaba a Jungkook hablar y era un poco gracioso ver como sus labios se estiraban y parecía hablar entrecortadamente. Movía sus brazos exageradamente y abría sus ojos, que ya eran grandes.
—Estoy hablando objetivamente. Y no tienes por qué enfadarte. Por eso los solarianos controlamos las emociones. Cuando te arrebatas así, pierdes la objetividad y racionalidad. Ustedes los terranos son una masa de emociones incontrolables, por eso no evolucionan.
Jungkook ahora quería arrancarle la cabeza al solariano. ¡Tan superior! Y ahí estaba atascado en la tierra.
—¡No soy una masa de emociones! Se perfectamente controlarlas. No soy un tipo emocionalmente inestable ni nada de eso ¡Tengo veinticinco años y estoy a punto de convertirme en un astrónomo! Y tú sigues sin poder volver a tu maravilloso plantea, porque tus amados solarianos no fueron capaces de ver a su enemigo en sus propias narices!
Bueno, Jungkook tenía un punto. Esa era una buena argumentación, si se dejaba de lado sus comentarios absurdos sobre el amor a los solarianos.
—En eso tienes razón. Cometimos un error. No somos perfectos. Nadie lo es. Nadie tiene el control total de las cosas. Pero debes reconocer que yo no estoy ni medianamente alterado en cambio tú...
Jungkook sintió como la sangre subía a su cabeza, pero no quería darle la razón a Seokjin, así es que controló las ganas de cometer homicidio y simplemente fue a su cuarto.
—Hobi y Jimin nos esperan para almorzar. Iré por mis cosas—Jungkook se encerró en su dormitorio y dejó a Seokjin un poco confundido.
—Si me permites decir algo...—Wootteo había sido testigo de la conversación. Su programación le permitía medir emociones. Algo que ni siquiera Seokjin podía hacer—. Deberás aprender a decir de una manera menos directa lo que piensas. Recuerda que los humanos terranos no han limitado sus emociones, tal como dijiste..., y así como Jungkook se puede enfadar más rápidamente, también se puede sentir herido...
—No lo he atacado desde el día que desperté...
—No hablo de heridas físicas...sino emocionales...ellos hablan de herir su corazón...—Seokjin movía la cabeza, no podía entender lo que Wootteo intentaba explicar—. Los terranos sitúan sus emociones en el corazón...de un modo metafórico claro..., lo que quiero decir es que Jungkook se sintió mal, emocionalmente hablando, con la forma en que le dijiste que los solarianos eran más inteligentes que los terranos...
Seokjin miró hacia la habitación donde había desaparecido Jungkook. Si había sido así, si había "herido" al terrano, no había sido su intención. Él no sabía muy bien cómo lidiar con todo esto. En todos los planetas avanzados, las emociones estaban controladas y nadie se sentía "herido" por decir la verdad. Tal vez no entendía de emociones, pero sí de protocolo, de respeto, y al parecer ahora él había faltado a ambos.
Jungkook estaba sentado en su cama. Odiaba sentirse así. Quería llamar a su padre y contarle todo lo que había pasado. Estaba herido. Siempre imaginó que si alguna vez se encontraba con un extraterrestre, éstos serían amables y llenos de amor y luz...sí tal vez habían visto demasiadas películas..., pero Hobi era cariñoso y dulce...en cambio Seokjin...¡se sentía tan superior! Y tal vez lo era. Por supuesto que la tierra tenía tanto que evolucionar aún. Pero tampoco eran un planeta terrible. ¿Y que tenían de malo las emociones y los sentimientos? Amar era la esencia del ser humano, era lo que movía cada acción. Amor al prójimo, a tu familia, a tu pareja, a ti mismo. Amor a hacer las cosas que te gustan... Estaba dolido que Jinseo o Seokjin o como quisiera ser llamado, lo mirara como un ser inferior. Él hubiera querido ser su amigo, como lo era con Hoseok. Tal vez debería ir y preguntarle a él sobre sus dudas. Pero era Seokjin quien había viajado a través del universo. Sabía que debía recomponerse. Ya tenía varios mensajes de Hobi y Jimin preocupados y sabía que en cualquier momento aparecerían en su casa. Así es que debía salir de ahí. Abrió la puerta y se encontró con Seokjin frente a ella y con la mano lista para llamar...
—Lo siento. Creo que fui grosero antes. Wootteo dice que te duele el corazón o algo así...yo no lo entiendo, pero no quiero hacerte daño...Procuraré ser más cuidadoso...
—¿Te das cuenta de que tu I.A. es más sensible que tú? ¿No te molesta ser más frío e insensible que una máquina? ¿Eso es lo que los solariano son? ¿máquinas? Si es así, me siento feliz de haber nacido en la tierra. Yo sí quiero sentir. Yo sí quiero vivir con pasión...no sólo existir..., pero probablemente tu no lo entiendas...No importa. Debemos ir con Hoseok o vendrá aquí, pensando que algo sucedió—. Jungkook pasó por su lado y buscó una chaqueta.
Seokjin sintió algo muy extraño. Como si un peso cayera sobre su pecho.
¿Sería la atmosfera de la tierra? ¿Su sol? Las palabras de Jungkook se sintieron como unas pequeñas punzadas. Él no era una máquina. Claro que tenía sentimientos. Sus padres y hermanos le importaban. Les tenía un cariño muy especial. Sentía una gran satisfacción por su profesión, le encantaba estar en el espacio... ¿no eran esas acaso sensaciones y sentimientos?
Siguió a Jungkook que había abierto la puerta principal. El sol estaba brillando. Se paró en la puerta a contemplar por primera vez una pequeña, muy pequeña parte del planeta azul o planeta tierra. Él había visto imágenes por supuesto. Sabía que los edificios sólo estaban a ras del suelo y que tampoco había vehículos en el aire. No de uso diario, al menos, como en Solaris. Se fijó que la casa de Jungkook y la de Hoseok tenían plantas y flores. Del otro lado de la calle, había más casas. Pero no había ningún otro terrano en la calle.
—¿No hay personas? —pregunto curioso, mientras atravesaban el porche de Hoseok y Jungkook introducía la clave.
—Es domingo, la gente sale temprano a comer fuera o algún lugar. Cuando haga menos calor verás niños jugando, en sus bicicletas...
Jungkook y Seokjin entraron y encontraron en la sala a Taehyung y Yoongi, conversando animadamente con Jimin.
—¡Al fin llegan! Hoseok estaba a punto de ir por ustedes. ¿Cómo pasó su noche capitán? ¿Los mareos desparecieron? Y tú Jungkook ¿lograste dormir después de descubrir toda esta locura? —Taehyung miraba a ambos con una gran sonrisa y como si los conociera de toda la vida y no sólo de hace unas horas atrás.
—Hoy no he sentido ningún mareo. Aun así, no me siento totalmente recuperado. Debo acostumbrarme a la presión atmosférica, el clima, la contaminación...supongo que por eso me siento un poco...distinto...como si tuviera una cierta presión aquí—apuntó a su pecho.
Jungkook miró a Seokjin. No le había dicho nada de aquello, pero no le sorprendía. Ya se había dado cuenta que el solariano, parecía no confiar en él. Sin contestar a Tae, fue directo a la cocina, donde Hoseok preparaba la comida para servir.
—Hyung...—su voz sonó un poco angustiada. No había tenido oportunidad de hablar con Hoseok, luego que éste le había contado la verdad. Tal vez quería asegurarse que las cosas seguían siendo igual. Que nada había cambiado entre ellos, aun cuando TODO había cambiado.
—¡Kook! —Hoseok volteó a ver a su vecino y pudo ver su cara de preocupación—¿qué pasa? ¿Por qué tienes esa cara? ¿Pasó algo con Seokjin?
—No, todo está bien, pero ¿por qué tu y él son tan diferentes? No entiendo. ¿Tú también crees que nuestro planeta es horrible?
Hoseok dejó por un momento los platos para mirar a Jungkook. Algo no estaba bien. Probablemente el choque de conocer a un solariano, uno tan frío como era Jinseo o Seokjin, había producido un segundo shock en Jungkook.
—Yo no creo que la tierra sea horrible. Yo amo este planeta, es mi hogar. Y los solarianos no odian la tierra. Al contrario se preocupan de ella igual que los otros planetas gemelos. Pero debes entender... Jinseo...digo Seokjin es un representante fidedigno de nuestra raza. Los solarianos vivimos con nuestros padres hasta los seis años. Luego nos envían a algo similar a un internado a estudiar y estudiar...sólo los vemos durante algunas épocas del año. Mientras, sufrimos las reprogramaciones.
Nuestro intelecto crece y nuestras emociones desaparecen. Nos convencen que vivir así, es lo mejor. Y no lo voy a negar. Se vive en paz y tranquilidad. En Solaris hay mucho para disfrutar, lugares parecidos a nuestros museos, parques para caminar y correr...los delitos casi no existen...son...una anécdota. Cualquiera querría vivir así..., pero mi abuelo me enseñó otra cara de la vida y la experimenté...y luego vine aquí y todo cobró sentido...amar no es algo a lo que quiero renunciar.., pero para un solariano que nunca ha experimentado esa pasión, esa fuerza en sus sentimientos....no lo entiende...
—Pero Taehyung...
—Soy un caso de uno en millones...—Tae había llegado a la cocina, siguiendo a Jungkook, ya que había notado que el joven no estaba bien—También operaron mi cerebro. Yo también estudié y estudie..., pero cuando comenzaron a enseñarnos de la tierra, algo en mí se removió... durante años estudié todo sobre los terranos, sus costumbres...y quería experimentar todo eso...comencé a reprogramarme menos...sólo las que te obligan por ley..., para los solarianos esto sería....casi inaceptable, como a tu Capitán..., pero no me arrepiento. Y creo que la tierra, Asia y Corea son lugares perfectos.
—Seokjin, además es un astronauta entrenando con normas militares y todo eso...papá me dijo que desde pequeño se preparó para esto...es frío como un tempano, no tiene empatía, pero te aseguro que es una buena persona. Es amable, educado...lo conocí antes de venir a la tierra.
Estaba recién comenzando, pero era brillante...
Jungkook no dudó de esto último. Seokjin se había disculpado con él, cada vez que notaba que había sido poco amable. No podía culparlo. Eran de mundos distintos. Años de civilización los separaban. Tal vez no
debería tomarse tan seriamente sus comentarios y sacar provecho de tener un hombre que había recorrido el universo.
Los tres chicos llegaron con la comida y la acomodaron en la mesa del comedor. Jungkook entones notó la presencia de Yoongi, AgustD. Ni si quiera había tenido la oportunidad de hablar con su ídolo. Taehyung siendo tan intuitivo, miró al chico y se dio cuenta que por su timidez no se acercaría a su novio.
—¡Hey Jungkook! —le habló mientras todos se sentaban en la mesa— entonces, ¿cuál es tu canción favorita de Yoongi?
Jungkook sintió como su cara enrojecía, cuando todos se volvieron a mirarlo, incluido Seokjin que miraba con ojos curiosos. Tal vez, pensó Jungkook, no tenía idea lo que era una canción o la música.
—Daechwita sin duda es una gran canción. Yo...no había tenido la oportunidad de decirle lo mucho que lo admiro Yoongi-Nim.
—Bah. Sólo Llámame Hyung. Ahora somos amigos. Puedo darte un disco firmado más tarde..., me alegro de que disfrutes mi música. Y tú Seokjin... ¿has escuchado música de la tierra? Yoongi sabía que los comerciantes llevaban música de la tierra a Solaris, según lo que le había dicho Tae.
—He escuchado música de la tierra y de otros planetas. Lamentablemente no recuerdo todo. Solaris también tiene arte musical y me gusta. Tal vez más tarde pueda escuchar algo del tuyo.
A Yoongi le causaba gracia la formalidad de Seokjin. Tae era igual cuando se conocieron y eso fue una de las cosas, entre otras que le fascinaron. Intuía que pronto el recién llegado se soltaría estando en compañía de alguien tan joven como Jungkook.
—Hyung esto no hará que te enfermes, te encantará.—interrumpió Tae, sirviendo la porción de naengmyeon (fideos fríos) —Gi y yo la compramos pensando que es suave y refrescante.
Seokjin los probó con cierta desconfianza. Él poca veces había probado comida terrana. Pero esta le pareció de buen aspecto y mejor sabor.
—Es buena. Gracias Taehyung por tu preocupación. Pero no quiero que usen esos honoríficos conmigo.
—Debemos pensar en una historia para todo esto... ¿no crees? Eventualmente amigos, vecinos preguntarán...Tae y Yoongi son personas conocidas...y ahora además aparece Seokjin...—Hoseok había estado pensando cómo podían justificar la presencia súbita de tres personas en sus vidas, más cuando dos de ellas eran conocidas en todo Corea.
—Sabes que al menos Namjoon vendrá...no puedo simplemente desaparecer de su vida..,. iremos a su trabajo, quedamos de ir juntos a
observar el cielo...... Jungkook sufría en silencio por tener que ocultarle
algo tan maravilloso a su amigo.
Mientras la nave permaneciera oculta, Hoseok no veía daño en ello, pero si debían inventar algo que justificara la presencia de ellos.
—Podemos decir que vimos la presentación de ustedes en Seúl. Jimin dijo que estuvieron allí hace seis meses—. Tae como siempre tan imaginativo fue el primero en comenzar el hilo de la absurda historia— vinimos de vacaciones a Daejeon, los buscamos y listo. nos hicimos amigos...
—Podría funcionar...—Jimin pensaba en que no hubiera cabos sueltos—. Ustedes se quedarán sólo un par de semanas y luego se irán. Además, están en un hotel. Es la llegada de Seokjin la más problemática...
—Puedo decir que es un amigo que conocí on line. Ya sabes que tengo un grupo que es aficionado a la astronomía...son de todas partes del mundo. Podemos decir que Seokjin viene de no sé...es coreano pero viene de Estados Unidos... ¿conoces algo de ese país? —Jungkook se dirigió al astronauta que estaba muy concentrado comiendo la deliciosa comida.
—Algo..., pero Wootteo puede preparar la información. La estudiaré y en una noche la aprenderé. Se que no hablan coreano, pero eso también puedo aprenderlo fácilmente. Creo que lo que Jungkook dice puede ser creíble. Justifica porque estoy en su casa.
—Está bien, diremos que llegó de sorpresa. Papá espera que dentro de unas semanas toda la investigación termine y puedan venir a rescatar a Jinseo...digo Seokjin—Hoseok comenzaba a creerse su propia invención.
—¿Puedes fingir que eres mi amigo? Los amigos se quieren ¿sabes?
¿Salen juntos, sonríen...¿crees que tú y tu inmensa inteligencia puedan hacer eso? —Jungkook había sonado un poco agresivo tal vez, porque todos en la mesa se quedaron en silencio.
—Puedo hacerlo Jungkook...—Seokjin le dirigió entonces una mirada, que hizo a Jungkook saltar su corazón—Si dejamos los temas controversiales de lado..., podemos hacerlo. Sé lo que es la amistad. Tengo algunos amigos en Solaris. Los estimo. Y podemos empezar por conocernos. Sé que tienes preguntas y estoy dispuesto a dártelas, sin que implique algún riesgo para la tierra o solaris. Tenemos un punto en común, el espacio exterior y su estudio ocupa una parte esencial en nuestras vidas. Podemos partir por ahí ¿no crees? —Y entonces, sucedió. Seokjin esbozó una sonrisa. Era real, genuina. Hoseok Y Tae abrieron desmesuradamente sus ojos al verlo...pero Jimin y Yoongi impidieron que dijeran algo. Esa sonrisa era para y por Jungkook...
Jungkook no podía dejar de admirar la belleza de Seokjin. Así sonriendo parecía mucho, mucho menos intimidante. Al contrario, su rostro se suavizaba y se veía mucho más joven y dulce. Era...lindo.
—Está bien Seokjin. Estoy de acuerdo. Podemos intentar ser amigos.
Algo en Seokjin se removió cuando también vio la sonrisa de Jungkook. Él tenía algo en el labio que no entendía que era. Una especie de adorno, que hacía que sus labios lucieran...especiales y al sonreír, sus dientes frontales salieron y eran...especiales...y todo el rostro del joven Jeon Jungkook...era...especial.
Tal vez Wootteo más tarde podría ayudarlo a encontrar una palabra para definir "eso especial".
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