CAPÍTULO CUATRO:
UNA RABIA ASESINA.

                    — ¿Podrías dejar de romper su nariz?—, pidió Blair Weber después que Liam rompiera la nariz de Theo por tercera vez consecutiva.

      —Gracias por defenderme, linda—, guiñó un ojo el chico, aún sobándose la nariz cuando Liam volvió a golpearle, esta vez en el estómago.

      La chica de ojos café le dedicó una mirada al castaño y él se encogió de hombros, actuando como si fuera un niño inocente —. Pediste no le rompiera la nariz, ¡y no lo hice!

      —Gracias, Liam—, le contestó con burla Blair, sonriéndole al castaño —. Entonces, ¿qué hacemos ahora?

♦

                    Un escalofrío recorrió el cuerpo de Blair de arriba a abajo cuando observó cómo todo el grupo llegaba en negras camionetas, armados como nunca antes los había visto. Pareció quedarse congelada un momento mientras los observaba, un mal presentimiento le llegó.

      —Oigan, vamos—, llamó Theo —. Se supone que somos señuelos, no tiro al blanco. ¿Sigues trabajando en tu ira?

      —Estoy bien—, contestó Liam.

      —Bueno, puedes estar enojado con Nolan y seguir vivo. Vamos—, insistió Theo, tomando por el hombro a Liam. Fue entonces cuando Blair reaccionó y se giró —. Ya sabes, mantente cerca de nosotros. Scott me matará si te pasa algo.

      —Liam, vamos—, instó Blair. El castaño le miró, pero negó antes de volver a mirar al grupo.

      —Bien, que te atrapen—, miró Theo una última vez al chico antes de mirar a la chica —. ¿Vienes conmigo o te quedas con él?

      Blair se mordió el labio inferior mientras su mirada viajaba entre ambos. Normalmente, habría optado por ir con Theo. Sin embargo, había notado cómo la manda parecía no confiar por completo en Theo y Scott le había advertido que, ante cualquier duda, siguiera a Liam.

      —Me quedó con Liam—, sentenció Blair y el mencionado se giró hacia ella.

      —Está bien—, rodó los ojos Theo antes de salir corriendo.

♦

                    Blair tomó a Liam por el cuello de su remera y tiró de él hacia detrás de la roca. El castaño le miró rápidamente y ella lo soltó —. Si sigues mirando, te verá—, señaló Theo —. Retrocede.

      Liam volvió a mirar y Blair miró a Theo, pero él sólo miraba al chico. El lobo empujó a Blair detrás de él con cuidado y se acercó de forma amenazante al castaño —. No voy a morir aquí y no voy a dejar que Blair muera porque quieres vengarte de un chico que te pateó el culo, ¿de acuerdo?

      Blair observó a Liam, esperando que respondiera, pero sólo se soltó del agarre de Theo y volvió a asomarse detrás de la roca. La chica suspiró, sabiendo que pronto los dos comenzarían a pelear en cualquier momento.

      Theo agarró a Liam del brazo y tiró de él, haciéndolo alejarse del lugar donde estaban antes e intentando llevarlo a otro lado.

      —Suéltame.

      — ¡Cálmate!

      —He dicho que me sueltes—, repitió Liam, sus ojos ahora brillaban en un tono dorado. Automáticamente, Blair dio unos cuántos pasos atrás y Theo lo soltó.

      — ¿Qué te pasa? Esto no puede ser sólo por Nolan, algo de por aquí está provocándote.

      —Estoy bien—, suspiró Liam.

      — ¿Qué es?—, insistió Theo —. ¿Los cazadores? ¿No te gustan las jaulas? ¿Miedo a las alturas?

      —He dicho que estoy bien—, repitió Liam, acercándose a Theo.

      Blair apretó la mandíbula antes de desviar su mirada del dúo y reparar en la presencia de Nolan. Ella sintió cómo si le hubieran golpeado en el estómago y le hubieran dejado sin aire —. Uhm, chicos.

      — ¡Están aquí!—, gritó Nolan, sosteniendo una ballesta entre sus brazos.

      Sin darle tiempo a reaccionar a nadie, Liam se arrojó sobre Nolan y lo empujó para que ambos cayeran al suelo. El castaño soltó un rugido, por lo que Blair entró en pánico y corrió junto con Theo, quien la mantenía siempre detrás de ella.

      La adrenalina de repente bombeaba contra los oídos de Blair y, sin pensarlo, ella iba a saltar detrás de los dos, pero Theo la tomó entre sus brazos antes que eso sucediera —. ¿Qué haces? ¡Suéltame!

      — ¿Y dejar que te rompas los huesos? Es demasiado alto para que saltes, es un riesgo—, negó la quimera —. Te dije que Scott me mataría si te pasa algo.

      —Si no haces algo tú, lo haré yo—, peleó Blair contra su agarre, pero sin éxito alguno.

      —Cuanto más rápido tú estés segura, más rápido podré evitar que Liam asesiné a Nolan—, contestó Theo y entonces Blair se quedó quieta —. ¿Me vas a seguir y no ponerte en riesgo?

      La chica asintió antes que Theo le soltará lentamente. Entonces, los dos bajaron por una rampa que quedaba a unos metros. Liam golpeaba la pared repetidas veces cuando llegaron y estaba a punto de golpear a Nolan cuando Theo le golpeó por detrás en la cabeza con una piedra.

      Nolan observó asustado a la quimera, estaba a punto de desmayarse mientras temblaba. Theo sonrió, mirándole fijamente —. Corre.

♦

                    —Tuve que golpearte.

      —Sí, ¿cuántas veces?—, preguntó Liam mientras se tocaba la cara.

      —Cinco—, contestó Theo y Blair pudo ver la sonrisa a través del espejo retrovisor, por lo que le golpeó desde el asiento trasero aunque sabía que no le dolía.

      —Casi lo maté, ¿verdad?

      —Casi—, contestó Liam y Blair volvió a pegarle —. ¿Vas a pegarme cada vez que hablé?

      —Si dices estupideces, sí. Liam, lo importante es que no pasó—, animó la morena.

      —Y te rompiste las manos intentando no matarlo—, agregó Theo.

      —Supongo que eso es algo.

      —Es algo importante, demuestra que tienes control aún aunque estés transformado—, señaló Blair y Liam se giró. El castaño la observó un momento en silencio antes de sonreírle suavemente.

      Theo notó el intercambio de miradas y se aclaró la garganta —. La próxima vez que vengas con un plan como este, elige un sitio que no desencadene una rabia asesina.

      —No sabía que esto iba a pasar—, se excusó Liam.

      —Lo quisieras o no, tú elegiste el sitio. Tú hiciste el plan. Querías que ayudara.

      Liam lo miró —. Si necesitara tu ayuda para algo, estaría lo suficientemente enojado como para matarte yo mismo.

      —Me trajiste aquí porque esta cosa que salió de la Cacería Salvaje te está afectando también, y sabías que podías dañar a Blair. Tienes que resolverlo antes de que te vuelvas completamente loco.

      —El Anuk-ite provoca miedo, no causa rabia.

      —Las personas sólo sienten una emoción a la vez, Liam. Por eso te enfadas cuando tienes miedo. Es por eso que casi le arrancaste la cabeza a Nolan—, explicó Theo.

      —Si el Anuk-ite puede hacerme esto a mí, ¿qué crees que puede hacerle a los demás?