𝐭𝐡𝐫𝐞𝐞: 𝐭𝐡𝐞 𝐤𝐚𝐧𝐢𝐦𝐚
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Últimamente en la casa Argent las cosas estaban demasiado tensas, para la familia ya era difícil aceptar que Maya además de ser una cazadora también era una loba y el hecho de que una nueva criatura estuviera atacando no mejoraba para nada la situación.
En estos momentos Maya observaba desde su ventana como su hermana Allison subía a su auto, lista para ir a ver a Scott. La ojiazul no puede evitar negar con una sonrisa, le resultaba algo tierno él como su hermana y su mejor amigo fingían que ya no estaban juntos cuando estaban en frente de sus padres, en especial de su abuelo y madre.
Maya se da la vuelta para encontrar a su abuelo observándola desde el umbral de su puerta por lo que se sobresaltó levemente al verlo ahí.
─Que susto ─susurra la menor llevando una mano a su pecho
─Lo lamento, no era mi intención asustarte ─asegura Gerard─ ¿Puedo pasar?
─Claro, adelante ─indica Maya, el sonríe ladino para pasar y observar detenidamente la habitación
─¿Estás ocupada? ─cuestiona el mayor
─La verdad no, solo pensaba en avanzar alguna tarea ─responde la Argent
─Genial, entonces podemos hablar ─dice él para acercarse a ella que asiente
Maya ve como su abuelo mete su mano al bolsillo de su abrigo y una pequeña agenda está a punto de caer de éste, por lo que ella rápidamente lo toma y se lo entrega.
─Gracias, Maya ─dice su abuelo tomándolo mientras saca un pastillero─ No puedo perderlo, sería un desastre sin él...
─Cuando tenía tú edad ni siquiera tomaba vitaminas, ahora me tengo que tomar un cóctel de pastillas tres veces al día ─bromea él para depositar pastillas en su mano y tragarlas─ Pero hago todo lo que mí médico dice, porque confío en él...
─La confianza es un privilegio que vale mucho en esta familia y eso tú ya lo sabes ─indica él mientras su nieta lo mira atentamente─ Y mí hija, tú tía Kate, murió haciendo lo que ella consideraba correcto.
─Sus intenciones puede que hayan sido un poco erróneas, pero... ─continúa Gerard
─¿Un poco? ─cuestiona Maya encarnando una ceja luego de saber todo la historia de su tía
A pesar de que ella sentía mucha tristeza debido a que su tía murió frente a sus ojos y esa definitivamente sería una imagen que nunca olvidaría. Tampoco podía olvidar lo orgullosa que fué al no pedirle perdón a Peter por todo el daño que le hizo a él y su familia; y que por esa misma razón ella terminó con una mordida que la hizo convertirse en una loba.
─Grandioso ─halaga él para sonreír─ Me recuerdas mucho a ella, también me desafiaba.
─¿Eso es lo que quieres que haga? ─cuestionó la adolescente confundida─ ¿Desafiarte?
─Quiero que confíes en mí ─aclara el mayor
─En algún momento te vas a encontrar a ti misma en una posición en la que cuestiones la confianza de las personas cercanas a ti ─indica Gerard
─Y cuando pasé, tienes que saber que de quienes nunca debes desconfiar es tú familia ─sentencia él y la ojiazul asiente levemente─ Entonces, ¿puedo confiar en ti?
─Claro ─responde Maya con simpleza
─¡No así! ─exclama él sorprendiendo a su nieta─ Dilo con convicción, sí o no.
─Sí, confía en mí ─asegura la pelinegra y su abuelo asiente satisfecho
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Al día siguiente el trío de amigos llegaba temprano a la clase de química debido a que debían vigilar a Lydia, ya que Derek y su manada pensaba que ella era el animal, conocido como Kanima, que había estado atacando últimamente.
─Acabo de hablar con mí papá, que habló con Jackson y tengo horribles, muy malas, noticias ─dice Stiles llegando a su lado
─Sí, creo que ya sabemos de qué hablas ─indica Scott para señalar a Isaac Lahey que está en su casillero
─¿Qué hace él aquí? ─pregunta Maya cargándose en su casillero
─Lo liberaron ─responde Stiles con simpleza
─Eso es obvio ─asegura Maya─ La pregunta es: ¿por qué está aquí?
El trío se miran los unos a los otros para finalmente hablar al mismo tiempo ─Lydia ─
─Exacto, ahora lo importante es ¿Cuando atacarán? ─indica la Argent
─Lo harán en química, ellos comparten esa clase con nosotros ─indica Stiles para que el timbre suene
─¿Y qué nos toca ahora? ─pregunta Scott preocupado
─Química ─responde Maya de la misma forma para comenzar a caminar hacia el salón y el dúo de chicos la sigue
─Derek no la matará, el no tiene pruebas, solo es una sospecha ─asegura Scott entrando al salón
El trío se percata de que Erica junto con Isaac entran al salón y miran a Lydia que está sentada sola, por lo que les sonríen de manera burlona, Maya frunce su ceño y negó rápidamente.
─Scott vé con Allison, yo con Lydia y Stiles, trás nosotras ─indica la pelinegra y rápidamente todos se dirigen a sus lugares
─Einstein dijo dos cosas son infinitas, el universo y la estupidez humana ─habla el señor Harris
─Y no estoy seguro del universo, yo mismo he encontrado estupidez infinita ─asegura el maestro para golpear levemente el hombro de Stiles y seguir caminando─ Y para combatir la plaga de ignorancia en mi clase, van a combinar sus esfuerzos en una ronda de experimentos en grupo.
─Así veremos sí dos cabezas son mejor que una ─indica él para mirar nuevamente al pelinegro─ En el caso del Señor Stilinski, menos de una...
─Erica vé a la primera estación, irás con... ─comienza a pensar el maestro para ver a la mayoría de estudiantes levantar sus manos como voluntarios
La rubia sonríe gustosa, mientras que Lydia rueda los ojos y por otra parte Maya niega con una sonrisa debido a la conducta de sus compañeros.
─No pedí voluntarios, bajen sus manos llenas de hormonas ─aclara el señor Harris─ Comencemos con McCall.
─La siguiente pareja será Isaac Lahey y… ─anuncia el maestro y las chicas susurran sonrientes─ la señorita Argent, Maya Argent.
Una vez las parejas son anunciadas todos comienzan a cambiar de lugar, excepto Maya que se queda justo en su puesto para que unos segundos después Isaac llegue a su lado y le de una sonrisa ladina.
Maya mirá las instrucciones del experimento dispuesta a tomar el líquido que se encuentra frente a ella, pero el chico es más rápido que ella y él vierte la medida en el vaso.
─¿Quieres hacer el siguiente pasó? ─cuestionó el rubio observándola atentamente
La pelinegra lo mirá con el ceño fruncido y niega con la cabeza debido a su amable actitud.
─En otra circunstancia creó que creería tú fachada de amabilidad, pero quieres dañar a mí mejor amiga, así que no te molestes en ser amable ─comenta la Argent para tomar el polvo frente ella y verterlo en el vaso
─Entonces, ¿no te preocupa? ─cuestionó el Lahey
─¿El qué? ─inquiere Maya para mirar directamente a sus ojos azules
─Lo que podría hacerte ─responde él─ Después de todo es un Kanima.
─Lydia es mi mejor amiga y sé que no me haría daño a mí, ni a nadie ─asegura la pelinegra
─Y además eso es solo una estúpida idea de Derek, él no tiene pruebas de que ella es el Kanima ─indica Maya con simpleza para nuevamente mirar al chico─ ¿O acaso tú también lo crees?
─Creo que las apariencias pueden engañar ─responde Isaac para guiñar el ojo a la pelinegra que lo mira atentamente y está desvía la mirada─ A veces, la gente tiene secretos oscuros.
─Isaac, si tú y Erica están planeando algo contra Lydia, será mejor que lo piensen dos veces ─susurra Maya mientras observa el libro de química─ No voy a dejar que le hagan daño.
─¿Y qué planeas hacer al respecto, Maya? ─pregunta el Lahey con curiosidad mientras se acerca levemente a ella
─Lo que sea necesario, para proteger a mí mejor amiga ─asegura la ojiazul para mirarlo fijamente y entonces la pequeña campana suena indicando que deben cambiar de pareja.
─A veces, los planes más difíciles de detener son los que ya están en marcha ─comenta él para levantarse con una sonrisa
─Habló enserio, no te atrevas a lastimarla ─indica Maya para mirarlo fijamente─ Te estaré vigilando.
─¿A quién estarás vigilando? ─cuestiona Erica para tomar asiento a su lado con una sonrisa inocente
Maya niega molesta para ver a Isaac tomar asiento a un lado de Lydia, y que esté se volteé a sonreírle levemente. La Argent rápidamente comparte una mirada con Stiles y Scott que miran a Isaac atentamente.
Definitivamente el dúo de betas de Derek iba a acabar con su paciencia y la de sus amigos.
─¿Entonces qué sigue en la lista? ─pregunta Erica para poner su mano en el libro y Maya rápidamente la detiene
─Seré directa contigo, ¿que le van a hacer? ─cuestionó la ojiazul para mirar a la pelirroja
─No crees que debas preguntar: ¿que nos hará ella a nosotros? ─corrige la rubia
─¿Realmente tienen un plan o solo quieren hacernos creer eso? ─cuestiona Maya mientras observa a la pelirroja atentamente
─Pienso que se ven lindos juntos ─comenta Erica con una sonrisa
─¿Disculpa? ─pregunta Maya confundida para mirarla
─Tú e Isaac ─aclara la Reyes con una sonrisa ladina
─Sí ésto es parte de su plan ─comienza a decir la pelinegra y la rubia la mira sin entender─ Ya sabes, tratar de distraernos. No está funcionando, porque no estoy interesada.
─¿Enserio? ─pregunta Erica algo sorprendida─ Porque siempre he sentido que soy un poco psíquica y cuando los ví...
─Solo pensé en que podrían ser una nueva y mejorada versión de Allison y Scott ─agrega ella con una sonrisa
─¿Y realmente crees que me interesa eso? ¿O que quiero formar alguna especie de pareja con Isaac? ─cuestiona Maya incrédula ante sus palabras
─¿Acaso preferirías que fuera yo y no él? ─pregunta la rubia de manera coqueta para poner su mano sobre el muslo de la adolescente
─Quítame la mano de encima a menos que quieras pelear ─advierte la Argent molesta
─¿Oh sabes pelear? ─pregunta Erica burlona
─Creó que lo deje claro en la pista de patinaje ─espeta Maya para rápidamente quitarle la mano de su muslo y nuevamente la campana suena
─¡Tiempo! ─anuncia el maestro─ Sí han catalizado la reacción como correspondía, deberían estar viendo un cristal
─Ahora la parte final del experimento que seguro les gustará, es que pueden comérselo ─indica el señor Harris
Maya mira su pequeño cristal y rápidamente se niega a probarlo, Scott de un momento a otro grita el nombre de la pelirroja llamando la atención de toda la clase.
La Argent rápidamente observa a su amiga para entender lo que estaba pasando, el cristal era el plan, ya que contenía el veneno que Lydia debía probar. La pelinegra niega nerviosa para finalmente ver a la pelirroja morderlo y que no le suceda absolutamente nada.
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─Derek está afuera esperando a Lydia ─indica Scott mientras entran a los probadores de lacrosse
─¿Para matarla? ─pregunta Allison
─Sí, él cree que ella es el Kanima, entonces si ─responde Maya
─Y después de lo de la alberca ─comienza a pensar Scott
─No es ella ─interrumpe el Stilinski
─Stiles, le hicieron la prueba y no pasó nada ─indica el moreno
─No importa, no puede ser ella ─asegura el pelinegro
─Pero Derek piensa que es ella, así que le probamos que está equivocado o buscamos una manera de protegerla ─sentencia la ojiazul
─No creo que vaya a hacer nada aquí, no en la escuela ─asegura Scott
─¿Y después de clases? ─cuestiona Allison y todos guardan silencio
─Entonces debemos demostrarle a Derek que se equivoca ─asegura ella
─¿Antes de las tres? ─cuestiona Stiles incrédulo
─Podría haber algo en el bestiario ─sugiere Maya
─Ah el libro de 900 páginas, escrito en latín que ninguno de nosotros puede leer ─comenta el Stilinski mirando a su mejor amiga─ Buena suerte con eso…
─¿Podrías tener algo de optimismo? ─pide la ojiazul mirándolo mal y él está a punto de protestar
─Yo sé de alguien que podría traducirlo ─interfiere Allison
─Bien, Maya y yo hablaremos con Derek ─indica Scott─ Trataremos de convencerlo de que no es ella.
─Bien, entonces tenemos un plan ─asegura Maya con una sonrisa ladina
Maya y Scott rápidamente se dirigen al campo de lacrosse para ver a Boyd, el McCall rápidamente se acerca a él mientras la pelinegra los observa desde lejos, como comienzan a pelear.
La Argent se percata de como Derek se acerca al dúo de adolescentes por lo que ella rápidamente se interpone frente a él.
─No pasó la prueba ─indica él mientras le hace un gesto a Boyd para que deje de pelear
─Eso no significa nada ─asegura Scott poniéndose de pie─ Lydia es diferente.
─Sí, lo sé ─aseguró Derek─ De noche se convierte en una serpiente asesina.
─No dejaremos que la mates ─asegura Maya para ver cómo Derek comparte una mirada sonriente con Boyd
─¿Quién dijo que yo lo voy a hacer? ─cuestiona el Hale
El dúo de amigos se observa, sabiendo que está haciendo referencia a Erica e Isaac por lo que rápidamente tratan de alejarse pero ellos los detienen.
─Suéltame ─se quejó la pelinegra una vez que Derek trata de doblar su brazo hacia atrás
─No se porque creen que deben proteger a todos ─indica el Hale soltando el brazo de Maya y está vez sujetarla para que está lo miré─ Lydia ha matado a personas, lo hará de nuevo y la próxima vez será uno de nosotros.
─Tal vez te equivocas ─indica Maya
─La mordió un alfa, es ella ─asegura Derek
─Tú viste esa cosa desde cerca y no es como nosotros ─comenta Scott aún rendido en el piso
─Claro que lo es, todos cambiamos de forma ─indica el Hale─ No sabes ni a qué te enfrentas, es raro que pasé ésto pero pasa por alguna razón.
─¿Qué razón? ─cuestiona Maya finalmente soltándose de su agarre
─A veces tú forma refleja la forma que eres ─responde Derek para ayudar a el McCall a levantarse
─¿Y sí ella es inmune? ─sugiere la ojiazul─ Que tal si tiene algo que la vuelve inmune a la mordida y por eso no se paralizó.
─Nadie es inmune, jamás lo he visto o he escuchado ─asegura el Hale─ ¡Jamás ha pasado!
─Pasó con Jackson ─le recuerda Scott
─Así que podría pasar con ella ─asegura la Argent y el alfa guarda silencio
─Por eso lo pusiste a prueba ─dice Scott entendiendo la situación─ Porque le diste lo que quería, Peter dijo que la mordida te mata o te transforma.
─Y seguro esperabas que muriera, pero no pasó nada ─continúa el moreno─ Y no tienes idea del porqué, ¿verdad?
─No ─admite Derek
─Pues yo tengo una teoría ─aseguró Scott─ Lydia es inmune y le entregó su inmunidad a Jackson.
─¡No! ─niega rápidamente el Hale
─No puedes asesinarla sí no estas seguro ─indica Maya a la defensiva
─¡Entiendan, no puedo dejarla vivir! ─exclamó Derek molesto─ Deberían saber eso...
El dúo de amigos comparten una mirada para luego sonreír levemente.
─Esperábamos convencerte, aunque no pensamos que lo lograríamos ─admite Scott con una pequeña sonrisa satisfactoria
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El tiempo pasaba y Maya comenzaba a estresarse, Scott no llegaba a casa y Derek junto a su manada podrían aparecer ahí en cualquier momento.
─Están aquí ─anuncia la ojiazul al sentir la presencia de Derek y los demás─ Llama a Scott
Allison asintió de inmediato, sus manos temblorosas al marcar el número de su novio. Stiles se frotó la cabeza, su rostro reflejando la misma preocupación que sentía en su interior, mientras el corazón de Allison latía con fuerza al ver a la manada de Derek a solo unos metros de la casa.
─¿Qué haces? ─cuestiona Maya al ver cómo su hermana observa atentamente el celular
─Creo que deberíamos llamar a papá ─sugiere ella
─¿Qué? No ─niega Maya confundida
─Pero sí te encuentra aquí, tú y Scott ─comienza a decir el Stilinski
─Lo sé ─asiente Allison mientras se vuelve hacia su hermana─ ¿Que debo hacer?
─Ellos no vienen simplemente a asustarnos, vienen a matar a Lydia ─indica ella preocupada
─Escúchame ─pide Maya poniendo sus manos alrededor de los brazos de su hermana─ Estaremos bien, sí ellos se acercan a nosotros les dispararás.
─Y sí tratan de hacerte daño a ti o a cualquiera de ustedes, no dudaré en defenderlos ─garantiza la ojiazul ocultando su nerviosismo
Allison se siente algo más tranquila y decide tomar firmemente su arco.
─Tengo una idea ─comenta Stiles─ Dispararles.
─¿Lo dices enserio? ─cuestiona la menor de ellas
─Le dijimos a Scott que podemos defendernos, adelante ─señala el Stilinski
─Creen que no pelearemos, sí les disparas a uno de ellos estoy seguro de que se irán ─comenta el pelinegro─ Solo debes hacerlo
─¿Qué opinas Maya? ─giró Allison hacia su hermana en busca de consejo.
─Stiles tiene razón, solo dispara ─comenta ella con frialdad
─¿A cuál? ─cuestiona su hermana
─A Derek, de preferencia en la cabeza ─indica Stiles
─Sí Scott pudo atrapar la flecha, entonces Derek también podrá hacerlo ─le recuerda Maya─ Debes dispararle a alguno de los otros tres.
─Más bien 2 ─corrige Allison
─¿Qué? ─cuestiona Maya para acercarse a la ventana y ver que solo están Erica y Boyd acompañando a Derek
─¿En dónde está Isaac? ─cuestiona Stiles y rápidamente alguien arroja a Allison al piso
Maya reaccionó instintivamente, empujando a Stiles para protegerlo mientras sacaba sus garras, encontrándose cara a cara con Isaac.
─¿Acaso lo del laboratorio no fue suficiente por hoy? ─cuestiona la ojiazul con una sonrisa falsa
─La verdad no ─niega el Lahey tratando de lanzarse sobre ella pero rápidamente lo esquiva
─Busquen a Lydia ─espeta la Argent para empujar al Lahey con una patada
Maya e Isaac comienzan una lucha cuerpo a cuerpo, tratando de evitar el golpe del otro. La Argent claramente llevaba una ventaja después de todo ella había entrado durante un largo tiempo.
Justo cuando la situación parecía empeorar para ambos adolescente, Scott apareció de la nada, golpeando a Isaac con tal fuerza que lo dejó inconsciente.
─Creí que necesitabas una mano ─comenta el moreno para ayudar a la chica a ponerse de pie
─Gracias ─dice ella con una leve sonrisa
Boyd esperaba junto a Derek en las afueras de la casa, escuchando los ruidos de la lucha en su interior. Un silencio repentino los hizo fruncir el ceño. De repente, la puerta principal se abrió de golpe y los cuerpos inconscientes de Isaac y Erica cayeron pesadamente a los pies de Derek.
El grupo de amigos salió de la casa, enfrentándose al dúo de lobos que aún permanecía en pie.
─Creo que finalmente entiendo por qué me rechazas, Scott. No eres un Omega, eres el Alfa de tu manada ─comenta Derek
─Pero sabes que no puedes vencerme ─agrega el con una sonrisa ladina y luego mira a la ojiazul─ Ninguno de ustedes dos puede.
─Tal vez tienes razón, pero te detendremos hasta que la policía este aquí ─señala Maya con una sonrisa falsa
Derek ladea la cabeza, escuchando el débil sonido de la sirena.
Todos los presentes escuchan el sonido de unas garras sobre ellos, por lo que rápidamente observan el techo y se sobresaltan levemente al ver la silueta del Kanima moviéndose en la oscuridad.
La criatura se detuvo en el borde del techo, emitiendo un fuerte grito antes de saltar, asustando un poco a los adolescentes.
─¡Llevátelos! ─le ordena Derek a Boyd para mirar a sus betas
─¿Alguien puede decirme qué demonios está pasando? ─cuestiona Lydia saliendo de la casa agitada
Maya soltó un suspiro de alivio al ver a su amiga. Su intuición era correcta: Lydia no era el Kanima.
Pero si no era Lydia, entonces ¿quién?
─...Es Jackson ─espeta Scott sorprendido
Voten y comenten que les pareció esté capítulo, ya que me motiva mucho a actualizar 🤍 ✨
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