Delta
La siguiente nota no fue difícil de encontrar una vez que estuvieron en el pabellón del comedor. El lugar se hallaba algo vacío debido a la hora que era. Como el día había pasado desde el momento en el que llegó, pero todavía no era muy tarde para que el sol se pusiera—aunque sí estuviera cerca de hacerlo—, los campistas parecían estar en sus propias actividades, lejos de pensar en tomar un aperitivo tardío o una cena temprana. Por lo mismo, que ChanYeol identificara la nota amarilla que casi brillaba con algo de los haces de sol que se alcanzaban a filtrar a su alrededor no fue un gran problema.
Llegó de inmediato por ella y la tomó, con lo que solo hasta ese punto se dio cuenta de que ese era el lugar donde BaekHyun normalmente se sentaba, junto a sus hermanos de cabaña. Sonrió un poco por eso, o al menos lo que pudo, ya que sabía que luego de lo que estaba por leer en voz alta de la nota, probablemente no lo haría de la misma manera.
"Querido hijo del fuego," empezó con las primeras típicas palabras. Por una parte vio cómo SeHun decidía sentarse en la misma mesa de donde había agarrado la nota, y sin darle más preocupación como siempre que hacía al envolverse en su lectura, decidió seguir leyendo, mas, sí se sentó al borde del mismo banquillo, del lado contrario de la mesa, a diferencia de cómo SeHun estaba. "¿Te das cuenta de lo mucho que hemos avanzado hasta ahora? Hemos pasado por momentos muy importantes, la profecía está cerca de llegar a su fin, a que todos los puntos que ella te marca se vean cumplidos, y con eso..., bueno, la promesa que se te ha dicho alrededor de todas estas notas habrá de cumplirse. Supongo que debes estar un poco ansioso por eso, ¿no es verdad?"
"De cierto modo, siento que yo estoy más ansioso de lo que tú pareces," SeHun masculló por lo bajo, pero él siguió ignorándolo, ya más involucrado en su lectura.
"Sin embargo, a pesar de que las cosas parezcan estar poco a poco acercándose a su final, no podemos apresurarnos ni saltarnos algunos pasos. Como podrás recordar, el recuerdo pasado nos ha dejado un ligero sabor amargo, y puede que este no sea muy diferente, pero, tal como antes te lo dije, las dificultades que todo guerrero valiente como él que ya has demostrado ser no pueden volverse eternas. Este lugar es una muestra de lo que te digo, porque justo lo que pasó aquí, en este preciso espacio, nos puede recordar cómo esas palabras son ciertas. ¿O es que olvidas todo lo que aquel día se vivió, hijo del fuego?"
Fue su momento de detenerse, y sin importar el suspiro que de SeHun recibió por eso, ChanYeol miró a su alrededor solo para sentir cómo su memoria era refrescada con lo que había pasado ya hace... ¿qué eran ahora? ¿Seis años?
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Después de aquel incidente que ChanYeol había tenido, verdaderamente, BaekHyun había mantenido su distancia. Casi no se le había visto cerca de su cabaña. Aquella noche donde compartieron una dulce conversación frente a su ventana, rieron sin parar por haber cometido una pequeña rebeldía y hasta decidieron que podían dejar que se repitiera, se veían lejanos en este momento para ChanYeol.
No estaba realmente mintiendo al respecto, porque hablaba casi de una manera literal, era tan lejano ese momento, ya que hasta meses habían pasado de aquello. Y era que, luego de que ChanYeol hubiera terminado herido, BaekHyun se le había escapado de sus manos. No culpaba al hijo de Apolo por alejarse, ChanYeol comprendía que hubiera podido molestarse por su mal actuar de aquella misión, porque sin duda le había sacado a más de uno un gran susto, pero había algo que ChanYeol no había logrado comprender dentro de todo esto.
¿Por qué si BaekHyun había estado tan preocupado por su persona luego de casi morir, su solución había sido alejarse? Entendía que pudiera enojarse, no querer hablarle como alguna especie de castigo en su actuar tan descuidado, e incluso ponerlo a hacer muchas lecciones de estrategia con algunos de sus compañeros de distintas cabañas que pudieran instruirlo al ser más experimentados para que todos aquellos errores cometidos en aquella misión pudieran ser eliminados y suprimidos, para nunca más ser repetidos. Sin embargo, eso no había sido todo.
BaekHyun no había tenido suficiente con solo alejarse de su lado como un castigo, en realidad, había decidido no verlo más. Algo que ChanYeol no podía tolerar del todo, o al menos no al principio, ya que, tan pronto creyó que podían las cosas estar un poco más tranquilas entre ellos, ChanYeol pensó que era propicio acercarse de nuevo, hablar como antes, buscarlo para hacer algunas cuantas bromas, pasar el rato, solo al platicar o compartir un tiempo juntos en las actividades que pudieran realizar dentro del Campamento.
Jamás se imaginó, por eso, que BaekHyun fuera a alejarse de su lado. Quiso decir, no después de que ya hubiera creído que había pasado su tiempo de 'castigo', y menos de una manera tan evasiva. Había visto solo un día a BaekHyun dentro de una de sus clases de combate, y como el instructor que era para él, ChanYeol creyó que BaekHyun tomaría su puesto para apoyarlo en sus lecciones. En cambio, el chico había decidido ir con otro campista. Y no era como si ChanYeol se molestara por eso, él entendía que BaekHyun no estuviera siempre con él, pero ni siquiera lo miró aquel día, y tan pronto acabó la clase, BaekHyun había desaparecido.
La cosa no terminó ahí, en otras de sus actividades juntos, cuando decidieron hacer un típico juego amistoso de encontrar la bandera, BaekHyun había quedado en su equipo. Cosa que alegró a ChanYeol, siempre prefería estar en un mismo equipo que con el hijo de Apolo, pero grande fue su sorpresa cuando BaekHyun le pidió a su instructor si podía cambiarse de equipo. Eso casi no se veía entre los campistas, sin embargo, no pareció que fuera algo que molestara a cualquier otro ni a su mismo instructor, solo lo dejó estar y otro chico fue a su grupo en lugar de BaekHyun.
Empezaron las cosas a ponerse serias cuando, al ver ChanYeol que BaekHyun no lo buscaba más ni en los tiempos libres que tenían, ni en el pabellón del comedor, luego de la cena, en la fogata o cualquier otra hora que pudieran juntarse–ya no se dijera siquiera de las horas que antes habían compartido practicando para mejorar sus habilidades en combate, esas habían quedado en el olvido–, tuvo que hallar su propio modo de encontrarse con BaekHyun. Entonces, él fue al lugar más lógico donde creía que podría ver a BaekHyun: la enfermería.
Y lo encontró, estaba haciendo algunas actividades dentro del área, parecía que tenía algunos chicos que se habían enfermado con un estofado que DongHae preparó–cosa por lo que descubrieron que nunca era bueno que el centauro pusiera sus manos en la cocina, suerte que él no comiera nada de sus platillos–, por lo que supuso que podría acercarse como en cualquier otro día normal, solo para saludar y ver en qué lo podía apoyar, si lo necesitaba, o esperar a que terminara para charlar, como acostumbraban.
Error. ChanYeol solo recibió un grito de BaekHyun por 'haberle estado estorbando', pedirle que se saliera si no iba a hacer nada bueno por ellos ahí, y que, más tarde, en otro día que creyó que podía buscarlo en el mismo lugar para ver si ya estaba desocupado y no tan atareado, descubriera que BaekHyun había cambiado su horario con otro hijo de Apolo.
Según el chico le había dicho que BaekHyun había pedido el cambio porque estaban arreglando un nuevo horario con nuevos campistas a los que iba a enseñar tiro con arco, sin embargo, ChanYeol no lo pudo ver solo por esa parte. No lo hizo, ya que, al encontrarse en su cama aquella noche, con otra decepción de no encontrarse con el que consideraba su mejor amigo, se dio cuenta de que definitivamente BaekHyun no solo lo estaba evadiendo, sino que lo estaba alejando.
Fue difícil entenderlo. Le dolió como el infierno, porque ChanYeol solo no podía entenderlo. Se preguntaba si había sido tan malo lo que hizo en aquella misión como para que BaekHyun ya no quisiera relacionarse con él.
¿Acaso había sido tan estúpido? ¿Descuidado? ¿BaekHyun creía que había sido tan malo como para que se diera cuenta de que no valía la pena seguir pasando tiempo a su lado? Como todas esas personas en el mundo exterior, que le habían dicho cómo todo lo arruinaba, todo aquello que hacía siempre terminaba por salirle mal y por lo que no querían trabajar con él o estar cerca si no querían ser afectados por su torpeza y 'mala suerte' con todo lo que hacía.
Pareció absurdo considerar todo eso hasta cierto punto, pero traumas del pasado sobre las pocas relaciones y amistades que había conservado en su vida como mortal se rememoraron para ChanYeol con eso. BaekHyun se había vuelto de las pocas personas que había considerado cercano dentro del Campamento tan pronto, y que ahora solo decidiera alejarse de él de esa manera tan repentina... ¡no le daba mucho más para pensar!
No pudo decir que no lloró un par de noches por lo mismo. Extrañaba a su amigo, quería volver a los días de antes, donde podían reírse de las tonterías que pasaban en sus clases, burlarse de los hijos de Ares, ponerse serios cuando de practicar sus habilidades en el combate se trataban y hablar sobre sus gustos, intereses en la vida o solo de aquello que tenían en la cabeza cada día.
Sin embargo, eso no regresó pronto, según los días siguieron pasando y BaekHyun continuó sin estar a su lado o volver a buscarlo–como él tampoco ya no se animó luego de temer que pudiera ser rechazado incluso de una manera implícita que podía volver a romper su pobre corazoncito adolorido–, ChanYeol se hizo a la idea de que esa amistad se había perdido.
No fue fácil, porque, como lo había dicho, ChanYeol no era mucho de saber hacer amistades. Poco se hablaba con algunos de sus compañeros de cabaña, mayormente podía hacerlo con Raiden, y eso era porque dormían en un mismo espacio, pero las cosas solo no eran iguales a como lo fueron con BaekHyun. Nadie pudo remplazar a BaekHyun.
Si le sumaban a eso ahora ver cómo BaekHyun sí estaba pasando un gran tiempo sin él a su lado... dolía. El doble o quizá el triple, si de alguna manera podía cuantificar su estado.
La cosa no podía serle una sorpresa, si BaekHyun era un chico bastante extrovertido, fácil de tratar, y claro que tenía un tiempo de vivir en el Campamento para saber bien relacionarse con viejos y nuevos campistas. Tenía más cosas a su disposición por haberse vuelto auxiliar en la enfermería desde hace unos meses y estar activo dentro de las lecciones de tiro con arco ya hace un tiempo. Entonces, mientras ChanYeol veía cómo BaekHyun se la pasaba de lo más lindo al salir con MinSeok–aquel hijo de Poseidón con la peculiar habilidad de no solo saber manipular el agua como el elemento heredado de su padre, sino transformarla en distintos estados, como el hielo que ya hace tantos años había visto, pero con lo que, incluso así, nunca había creído saber relacionarse, por más agradable que le hubiera parecido en su momento– y JongDae–ese otro semidios, hijo de Zeus, tan parecido en personalidad a BaekHyun con su excentricidad, a cambio de él, que era... solo un pobre y tímido introvertido–, él se había encontrado un nuevo pasatiempo y lugar donde buscar su propio resguardo del malestar que ahora le provocaba el propio campamento.
Trabajar en la forja. Fue de ese modo que ChanYeol halló refugio por tanto tiempo, porque, si había logrado sobrevivir los meses siguientes a este forzado distanciamiento, sin duda había sido mediante la distracción y entretenimiento de otra actividad, que lo alejaba y desconectaba de todo y todos los demás.
Algo bueno había salido de eso, a pesar de todo, porque ChanYeol encontró sus verdaderas habilidades como hijo de Hefesto en el lugar. Había descubierto cómo hacer actuar a sus manos curiosas e inquietas en algo que pudiera manipular, moldear, y luego crear para hacer cualquier invento que solo se le hubiera pasado por la cabeza. Y no siempre salían cosas buenas, algunas veces hubo unos cuantos incidentes que lo pusieron en una grave vergüenza–más cuando descubrió que seguía sin controlar del todo su habilidad sobre el fuego–, pero había conseguido encontrar parte de su pasión, y dentro de lo mismo... los días habían pasado como el acero que se derretía sobre el fuego.
De una manera lenta, pesada y con cierto desgaste, mas, habían pasado.
Se suponía que ChanYeol estaría bien con eso luego de un tiempo. Quizá eso era lo que BaekHyun estaba esperando que pasara, pero realmente no lo fue así. Porque una noche, luego de todo ese tiempo sin que ambos volvieran a hablarse como antes, ChanYeol solo había estado en el pabellón del comedor sirviendo su cena de esa noche cuando, en la fila, había encontrado a BaekHyun y se dio cuenta de cómo el hijo de Apolo había cambiado en algo.
Sin verse un par de días había logrado que ese cambio pudiera habérsele pasado en caso de ya haber tenido un tiempo de haberse producido, pero ahora que ChanYeol lo tenía de frente, no podía dejarlo estar, no porque había sido algo que realmente lo sorprendía, y por lo mismo...
No había sido capaz de guardárselo. Con la osadía que su actuar le concebía, ChanYeol ni siquiera lo pensó, y cuando vio cómo BaekHyun iba de regreso para tomar su asiento, solo decidió salir de la fila donde esperaba para tomarlo por el antebrazo, entonces, con la forma en la que se había detenido, su mayor–ahora verdaderamente con unos centímetros de diferencia en sus estaturas; BaekHyun había crecido, a pesar de todo, y aunque ChanYeol también se había dado otra estirada, de menos se podía asegurar que su posible denominado 'hyung' todavía estaba solo un poco por debajo de su barbilla– solo lo miró y borró esa sonrisa que antes llevaba tan pronto lo vio.
No importó eso, ChanYeol igual le dijo:
"Te cortaste el cabello," y sobre lo mismo, BaekHyun lo miró, todavía con la sonrisa ligeramente perdida. Los campistas pasaban de su lado, como si no les importara realmente ver cómo algo tenso estuviera pasando entre ellos en este momento, y sin preocuparse mucho más, los mismos amigos de BaekHyun lo habían dejado atrás, por lo que ahora solo eran ellos dos en ese punto. Sin más posibles escapadas. "¿Desde cuándo...?"
"ChanYeol," sin embargo, ¿exactamente qué respuesta se esperaba de BaekHyun? Luego de meses sin hablarse, ¿cómo se imaginaba que BaekHyun solo regresaría sobre una sonrisa a saludarlo, contestarle esa sencilla pregunta, como si fuera lo más normal en su día y decidiría preguntarle cómo había estado, con todos esos meses que se habían distanciado? Obviamente BaekHyun apretó los labios, no respondió de inmediato, y un poco conflictuado, incluso lo vio fruncir el ceño, antes de que se sacudiera el brazo para deshacer el retén en el que lo tenía. No luchó contra eso, ChanYeol no era mucho de esas cosas, pero si tenía que ponerlo ahora en este contexto, tal vez algo en eso podía cambiar pronto... "¿Acaso eso importa? Metete en tus propios asuntos."
"¿Mis propios...?" el cambio fue justo que llegara en ese momento, porque sobre esa respuesta, ChanYeol no iba a poder dejar que ahora BaekHyun se fuera de lo más tranquilo, como si nada le importara. Oh, no, claro que no, no importaba cuánto se estuviera alejando ahora, ChanYeol, con su propio ceño fruncido, decidió tomarle ahora por el hombro y regresarlo sobre su mirada, solo para decirle: "¿Qué acabas de decir? Oye, BaekHyun, ¿cuál es tu problema? Yo solo te he hecho una pregunta, no había por qué ser tan grosero sobre eso."
"¿Fui grosero? Oh, disculpa, es solo que no le tomé mucha importancia, quiero decir, no es como si me preocupara..." ese encogimiento de hombros solo hizo que ChanYeol frunciera más el ceño, y por lo mismo, solo sacudió la cabeza, pero no dejó que BaekHyun se fuera, cuando el mayor intentó volver a girarse para alejarse de su lado, como antes, lo retuvo, a lo que BaekHyun sacó nuevamente su arruga entre sus cejas. "ChanYeol, ¿qué estás haciendo? Suéltame."
"¿Qué estoy haciendo? Eso mismo debería preguntarte yo a ti. Este no es el actuar que de ti conozco, ¿qué se supone que ha sido ese modo de contestar? El BaekHyun, hijo de Apolo, que yo conozco, estoy seguro de que ni siquiera hubiera sido así de rudo con cualquier mínima persona, incluso con un niño, hijo fanfarrón de Ares o cualquier otro dios. ¿Qué se supone que hice yo para que me hablaras de este modo?"
"ChanYeol..."
"No, no me intentes ignorar o callar ahora, no lo hagas, porque ya estoy harto. De verdad, harto, BaekHyun. Creí que podía dejarlo pasar porque supuse que, de cierto modo, esta había sido tu decisión, esta especie de distanciamiento. Y lo acepté, de cierto modo, lo hice, pero ya no más, porque, al final, esa no fue mi decisión, yo no sé qué te llevó a tomarla, y ahora es cuando realmente me doy cuenta de que merezco respuestas. ¿Por qué demonios te alejaste de mí, BaekHyun? ¿Qué te hice yo para que me dejaras de lado? ¿Acaso...? ¿Acaso es porque soy estúpido?"
"¿Qué? No, ¿por qué diablos dices que eres estúpido? No eres estúpido, ChanYeol."
"Entonces, ¿qué te ha hecho alejarte de mí?" preguntó, con un poco de más insistencia, pero en medio de eso, algo tenía que quebrarse en él, como hace ya tantas noches, el dolor que había estado ignorando y guardándose en sus distracciones, comenzó a burbujear en su interior, con una obstrucción en el pecho que solo lo dejó mordiendo su labio inferior antes de que, con voz temblorosa, inquiriera, en cambio: "¿Realmente fui muy descuidado? BaekHyun, si aquello que sucedió en la misión te afectó tanto, si has reconsiderado tu amistad conmigo por mi mal actuar o mi torpe forma de ser, yo de menos quisiera entenderlo... quisiera una explicación, para que pudiera sentirme un poco más tranquilo, quiero decir... no voy a decir que duela menos, pero escucharlo de tus labios lo hará más comprensible. Entonces, tendré razones para haber llorado, porque no solo creeré que me has considerado un idiota, sino que lo habré escuchado de tus labios."
"¿Por qué sigues diciendo que eres torpe o un idiota? No lo eres, no lo eres, ChanYeol, yo... espera, ¿acabas de decir que has llorado?" no tuvo cómo responder a eso, de cualquier modo, la respuesta debió quedar implícita para el chico, porque solo un suspiro vino del mayor por eso, y con lo mismo, ChanYeol perdió cierta fuerza en el retén que imponía. Fue una suerte que ahora fuera BaekHyun el que ya no quisiera irse. "ChanYeol, ¿por qué...?"
"¿Por qué más? Si eres mi único amigo aquí, BaekHyun. No soy bueno para formar relaciones tan cercanas con cualquier persona, podré hablar y conocer a un par de campistas, sobre todo con el tiempo que ya llevo viviendo aquí, pero nadie que se haga tan cercano conmigo como tú lo hiciste..." esas palabras quedaron dichas, pero no hubo mucho que se escuchara luego de ellas.
Las voces en el pabellón eran lo único que podía llenar tal momento incómodo. Los cantos que los hijos de Apolo hacían, la música que se inventaban, poesías que narraban, gritos que entre algunos chicos todavía en edad infantil lanzaban, era todo lo que a su alrededor quedaba, pero pronto...
BaekHyun volvió a suspirar, y en medio de su ceño fruncido, miró de nuevo a ChanYeol, solo para tomarle de la mano y decirle en un tono tan bajo que apenas pudo entender cómo:
"Sígueme."
Entonces, lo hizo. No era como si le hubiera dejado otra oportunidad porque igual lo jaló, y al dejar su comida en una de las mesas desocupadas del pabellón, BaekHyun tuvo oportunidad de sacarlos por una de las salidas laterales, ahora más cerca de donde se hacía la fogata. Lejos del alboroto, barullo, la luz artificial y el calor de las personas.
"BaekHyun..."
"Si alguien ha sido un idiota aquí no eres tú, ChanYeol, sino yo, así que, número uno, quiero que dejes de decirte de esa manera de aquí en adelante..."
"BaekHyun, pero–"
"Número dos..." BaekHyun continuó, sin darle oportunidad de hablar más, así que calló, y siguió escuchando al rubio, ahora de cabello corto. "Realmente me disculpo por serlo."
"BaekHyun..."
"Sé que suena tonto que lo haga hasta ahora, más con saber que realmente te he hecho daño, pero supongo que igual era importante que de mí lo escucharas. Te debo una explicación, o varias, eso es obvio, pero es que realmente no sé ni por dónde empezar..."
"Puedes empezar simplemente con decirme por qué te alejaste..."
"Claro, bueno, yo..." BaekHyun suspiró de nuevo con eso, lo vio pasar una mano por su mejilla y luego de restregar parte de su rostro y alborotar su cabello corto que ahora le dejaba la frente despejada–ChanYeol tenía que admitir, le quedaba fenomenal el corte, largo o corto, BaekHyun tenía un bonito cabello–, decidió responderle: "Tuve miedo."
"¿Miedo?" preguntó, pero más estaba buscando una confirmación, porque no podía creer que estuviera escuchando esto. Cuando vio a BaekHyun asentir mientras agachaba la cabeza, más dudas se alzaron con eso. "¿Por qué?"
"Porque pude haberte perdido, ChanYeol..." esas sencillas palabras hicieron que algo en el interior de ChanYeol se calentara. Se sintió bastante lindo, e incluso cuando hubiera estado muy molesto o angustiado por no entender en nada a BaekHyun, esa sola respuesta ya lo estaba ganando de nuevo. "Estuviste tan cerca de morir ese día, de verdad, perdiste mucha sangre, te sacamos adelante apenas, fue un alivio saber que no se perforara ninguno de tus órganos, porque eso te hubiera dado el tiro de gracia. No sé qué hubiera hecho si terminabas muerto, y peor, en mis manos."
"No habría sido tu culpa si yo muriera y, en todo caso, no lo hice. Me curaron, me salvaron... entonces, ¿por qué cuando temías perderme igual terminaste por alejarte de mí? ¿Eso no es contradictorio a lo que estás diciendo?"
BaekHyun se rio por eso, y en ese momento, ChanYeol se sintió realmente confundido. ¿Qué podía ser chistoso?
"Lo es, por eso digo que aquí el único estúpido he sido yo... porque, incluso cuando te dije hace tiempo que debíamos superar nuestros temores, cuando no quise perderte y vivir una vida sin ti, igual tuve mis propios temores presentes desde ese momento y te alejé de mí. Pero es que solo hasta ese momento me pude dar cuenta de algo que había estado negándome hace mucho tiempo..." entonces, lo miró, y ChanYeol pudo sentir que BaekHyun estaba viendo incluso más allá de su persona. "Me gustas, ChanYeol. Realmente, me gustas mucho, pero no como un amigo debería hacer."
Eso le quitó el aliento. ChanYeol quedó estático. No sabía qué había impulsado a BaekHyun para confesar aquello sin previo aviso, ni siquiera para considerar que él pudiera no corresponderle, solo lo dijo, y con eso... ChanYeol sintió sus mejillas encenderse, porque también solo hasta ese momento se podía dar cuenta de lo cierto.
"Esa es otra cosa que tenía que explicarte, pero obviamente, tan cobarde como fui, no pude hacerlo. No puedo seguir huyendo, a pesar de todo, ¿cierto? Vamos a estar mucho tiempo aquí, así que, debíamos pasar de esto en algún punto. Yo... lamento si eso cambia ahora la opinión que tenías de mí, ChanYeol, muy tarde me he dado cuenta de que esto es lo que soy. Un semidios, hijo de Apolo, enamorado de su mejor amigo, hombre... Tan repugnante y asustado por ser descubierto sobre esto, que solo pude huir en lugar de enfrentar mi propio sentir como debí en aquel día que me di cuenta del temor que me dio saber que te podía perder. Patético."
"BaekHyun," ChanYeol se acercó solo un paso, y aunque todavía tenían un metro que los separaba, luego de que BaekHyun hubiera soltado su mano al pararse en ese lugar, igual fue un acto notorio, porque se vio el titubeo del mayor sobre eso. "No eres patético, ni mucho menos repugnante."
"Lo soy, sí lo soy, esto no está bien, ChanYeol, no debería gustarme mi mejor amigo..."
"¿Realmente estás diciendo eso? ¿Tú? Un hijo de Apolo... BaekHyun, incluso tu padre debe estar enojado de escucharte decir esto ahora, cuando él es el dios más abierto en cuanto a preferencias," BaekHyun se cubrió el rostro por eso, y con sus ojos cubiertos por sus dos manos, ChanYeol tuvo la osadía de acercarse solo otro poco, para cerrar la barrera que había entre ambos. "No tiene nada de malo lo que sientes. Por todos los dioses, si Zeus tuvo relaciones siendo una hormiga y Poseidón como un caballo, ¿cuál es el problema con que un chico le guste otro chico?"
"Todo, todo es el problema, e incluso cuando no todo sea un problema con eso, no puedo tener estos sentimientos por ti, no debo, porque tú no me correspondes. Pensé que, si me alejaba de ti, tal vez podía dejar que murieran, se perdieran o desvanecieran, solo para que siguiéramos siendo amigos, como antes, pero cada día era más difícil. Cada día solo te extrañaba más, quería hablarte, y cuando te veía desde lejos, en alguna de tus clases o mientras ibas a algún lado por donde casi nos cruzáramos, solo añoraba el día en el que pudiera volver a acercarme a ti y preguntarte cómo estabas o qué estabas haciendo. Estaba bien todo eso si eras solo un amigo, pero cuando hay sentimientos de por medio, es cuando se vuelve malo. No debo, no es justo para ti, esta amistad no puede ser normal si ahora sabes que tengo sentimientos por ti, es solo que fue tan inevitable, quiero decir, eres tan divertido, increíble y guapo..."
"Eso ha sido lindo de escuchar," ChanYeol confesó, pero BaekHyun solo sacudió la cabeza, aun sin mirarlo.
"Igual no me corresponde. No te lo he dicho para te compadezcas de mí, sino porque sé que merecías la verdad, luego de escucharte decir esto, pero no tienes que sentirte obligado de decir o actuar de ninguna manera, ChanYeol, yo entenderé si tú quieres ahora alejarte de mí por un tiempo, tal vez sea lo adecuado, porque al no corresponderme–"
"Pero, realmente, ¿quién te hizo creer que no te correspondo?" sobre esa aseveración, BaekHyun bajó de inmediato sus manos de su rostro. Entonces, la sorpresa llegó, sobre todo al verlo frente a él, tan cerca, y cuando BaekHyun pareció querer alejarse como si buscara de nuevo distanciarse, ChanYeol lo detuvo, solo al tomarlo por un hombro. "No has siquiera escuchado lo que yo tengo por decirte."
"ChanYeol..."
"Si algo pude darme cuenta cuando no estuvimos juntos y nos separamos hasta por meses, eso sin duda es que yo también te extrañé mucho, BaekHyun, porque me gustas. Tal vez incluso más de lo que un amigo debería..."
"¿No estás diciendo eso para hacerme sentir mejor, verdad?" sacudió la cabeza, sincero, porque incluso cuando no lo hubiera pensado mucho, los signos estaban claros ahora, todo eso que sentía cuando veía las sonrisas de BaekHyun, la forma en la que era tan fácil tratarlo, cómo le encantaba hablar con él incluso cuando no fuera de absolutamente nada. Todo quedaba claro para él, y era que en verdad estaba cayendo por su mejor amigo. Tal vez un poco más lento de lo que BaekHyun mismo pensaba. "¿De verdad?"
"No creo que sea posible mentir al respecto, después de todo, eres muy guapo también, BaekHyun. En realidad, no sé cómo puedes creer que yo sea guapo, ¿estás de acuerdo que soy hijo de uno de los dioses más feos y deformes en el Olimpo?"
"Estoy seguro de que tu padre te va a jalar las patas en la noche por escucharte decir eso," se rio, pero se encogió de hombros, porque igual la cosa era cierta. "Aun así, ChanYeol, tú..."
"¿Sabes qué, BaekHyun? Realmente no importa el tiempo que hemos perdido lejos uno del otro. Ni siquiera me importa saber que hubiéramos dicho esta noche, por ahora yo solo quiero recuperar el tiempo y volver a algo de lo que éramos antes."
"No podemos ser como antes luego de lo que hemos dicho."
"¿Hay algún problema si no lo hacemos? Creo que podemos probarlo, BaekHyun, yo... estoy dispuesto a todo mientras sea contigo."
"ChanYeol..." sobre esas palabras, ChanYeol no se pudo resistir más, terminó por abrazar de una manera casi impulsiva a BaekHyun. Tuvo que inclinarse un poco para alcanzarlo bien, pero logró posicionar su cabeza en el hueco de su cuello y hombro, antes de rodear firmemente el torso de BaekHyun y apretar con fuerza ese agarre. BaekHyun tardó en contestar, pero cuando lo hizo, todo se sintió tan bien. "Diablos, ¿qué voy a hacer ahora contigo, manos de estómago?"
"¿Amarme?" preguntó inocentemente, y aunque eso sacó una risita por parte de BaekHyun, ChanYeol tuvo que admitir que hubo una esperanza cuando sintió los brazos del mayor rodear su propia espalda. Entonces, en esa posición, ChanYeol todavía dijo: "¿Qué es eso de manos de estómago?"
"Ah, bueno, es una forma de decirle a las personas que suelen estropear muchas cosas, ¿sabes? Como que lo descomponen, no siempre adrede, solo sucede de manera natural. Ya sabes, como el estómago, todo lo que toca termina haciéndolo caca," ante esas palabras, ChanYeol se alejó de BaekHyun, y al verlo con parte de un ceño fruncido, no pudo hacer más que reírse, porque esa comparación nunca la había razonado. "Sé que has estado creando y forjando unas cosas últimamente, también estuve al pendiente de unos cuantos incidentes que tuviste con eso, así que..." se encogió de hombros antes de completar: "El apodo solo quedó..."
"Me gusta," respondió, sin importar la comparación que le estaban dando, sabía que estaba siendo influenciado por el momento, pero dejó que una sonrisa se mostrara y con ella, BaekHyun pudo reducir parte de la tensión en sus hombros. "Todo lo que venga de ti me gusta, BaekHyun."
"Y a mí, a mí también me gusta," volvió a abrazarlo con eso, en un modo de acordar su reconciliación, y BaekHyun suspiró sobre su hombro, ahora con un par de caricias en su espalda. "También me gusta, ChanYeol."
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Un recuerdo bastante único, ChanYeol tenía que admitirlo. Ese solo fue el inicio de su relación, desde entonces, muchas de las cosas solo fueron sobre la marcha. Tal vez toda su vida se había basado en eso, pero de alguna manera le agradecía a los dioses por dejar que incluso todo eso pudiera ser realizado con BaekHyun.
Un poco repentino el asunto podía ser para muchos, pero de cualquier modo, a ellos les había funcionado. Eran jóvenes, sencillos, con suficientes problemas en sus vidas como semidioses para andar preocupándose por saber cómo podían pegarles sus emociones y sentimientos de por medio. Ellos solo dejaban que todo se les fuera viniendo encima.
Desde entonces, ChanYeol supo que sus recuerdos eran más alegres de lo que antes. Todavía unos malos por ahí, pero por un tiempo... solo fueron buenos. Justo lo que las cartas le habían indicado. Pasó por momentos difíciles, un sendero con baches, pero ahora resurgía la esperanza, el sol después de la tormenta, y aunque hubiera empezado con algo sombrío, al final, como todo, había regresado la luz, y ahora ¿qué más les quedaba por preocuparse?
Momentos que, sin duda, jamás iba a olvidar. Este hijo del sol, realmente, estaba haciéndole una grande...
"Ahora que has demostrado ser tan fuerte y valiente para recorrer estas partes tan difíciles, hijo del fuego, es momento de que regresemos a un lugar más seguro," mas, a pesar de lo que comenzaba ahora a pensar de esto, siguió leyendo su carta y la terminó para pasar al siguiente punto. "La siguiente misión que tienes y te marca la profecía tiene que ver con este mismo recorrido que llevas. Luego de haber pasado por la tormenta, llegó el sol, ¿no es verdad? Y cuando el sol llegó, el fuego solo pudo haberse avivado más. Sin embargo, antes de que se creara un completo incendio, ¿recuerdas cómo comenzó todo, hijo del fuego? ¿Recuerdas el modo en el que luego de esta angustia se pudo encender la flama? Entre el sol y el fuego... Si lo haces, te espero para tu siguiente misión en este lugar, atentamente, el hijo del Sol."
"Bueno, ahora que habla de una posible flama, comienzo a pensar que el hijo del Sol te está mandando un mensaje que tiene que ver con algo candente, ¿o no? Pero de una manera no tan literal, como una especie de metáfora que habla sobre..." SeHun perdió las palabras que tenía por decir en el momento en el que ChanYeol lo volteó a ver, con su carta guardada ahora que había tenido el tiempo suficiente de releer y pensar bien a lo que se refería. El hijo de Hermes, por su parte, llegó a ver cómo estaba haciendo un par de gestos con sus manos como si quisiera expresar algo, pero exactamente qué era, ChanYeol no lo entendía.
¿Qué se suponía que SeHun se estaba refiriendo con sus dos dedos índices pegando por las puntas y girando sin separarse? Sea lo que fuera, ChanYeol no quiso darle muchas vueltas al asunto, solo decidió ir directo con él.
"Está pidiéndome que vaya al lugar donde, luego de habernos reconciliado, empezamos a tener algo."
"Oh, ¿tú y el hijo del sol...?" SeHun preguntó, nuevamente, al solo dejar sus palabras en el aire, y ChanYeol pudo admitir en ese momento que parte de la vergüenza de lo que ahí estaba implícita lo estaba dejando con las mejillas un poco enrojecidas.
No importó, decidió hacerlo estar y se puso de pie de donde estaban. Era momento de que fueran al siguiente lugar. SeHun lo siguió por inercia.
"Sí, ahm, supongo que es algo sobre lo que piensas," resolvió, pero pudo rescatar su pobre persona avergonzada cuando, en cambio, trajo algo más en su conversación, en su camino que ahora debían llevar del pabellón del comedor hacia el lugar que estaba teniendo en mente. "Aunque, tienes suerte de seguir aquí, SeHun, porque el siguiente lugar al que iremos, imagino que te agradara."
"¿Por qué lo dices? ¿Qué lugar es ese?"
"La cabaña 10," no pudo esperarse ninguna otra reacción por parte de SeHun que la que había obtenido. El pobre chico se había terminado por detener justo en el lugar donde estaba en ese momento, y al ChanYeol girarse por darse cuenta a tiempo de que ya no tenía pasos que lo siguieran, vio con parte de una sonrisa al menor que, luego de estar tan burlón y fastidioso en ese día, por fin parecía más calmado, tímido y hasta nervioso de lo que había escuchado. Por eso regresó con él y lo tomó por un brazo para forzarlo a seguir caminando a su lado. "Es un lugar donde te encanta pasar el tiempo, ¿no es verdad, SeHunee?"
"¿Q-Qué...? No, claro que no, ¿yo por qué habría de pasar el tiempo en esa cabaña? Q-Quiero decir, ni siquiera es la cabaña que me corresponde, es más, ahm, ¿siquiera tengo idea de quién es el dios al que está dedicado esa cabaña? No, no, para nada, esa cabaña no me suena."
"¿En serio? Oh, me parece inusual, ya sabes, dado que tu cabaña está junto a esta, estaba esperando que muy bien la conocieras," bromeó al hacerse el tonto, porque bien sabía cómo SeHun mismo se lo estaba haciendo, y según fueron poco a poco llegando al lugar, apenas pudo retener un poco más su risa por la forma en la que el menor estaba conteniéndose con tanta fuerza. Seguro para no golpearlo o zafarse de su lado, ya fuera por respeto como su mayor o para guardar su imagen, no importaba, a ChanYeol le gustaba poder regresársela a SeHun al menos una vez luego de tantas que le había hecho en este día.
"¿Sabes? Creo que incluso había olvidado que esa cabaña estaba de junto a la mía."
"Ya, pero imagino que el líder de la cabaña no podría haberlo olvidado, si debe ser todo un lío tener que compartir casi un mismo espacio con una cabaña tan abarrotada como la de los hijos de Hermes debe serlo. Oh, es más, ¿por qué no se lo preguntamos? Mira, justo ahí está, fuera de su cabaña... ¡Hey, JunMyeon-hyung!"
Ante su llamado, ChanYeol recibió, por el lado donde estaba tomando a SeHun, cómo se sintió la tensión en cada uno de sus músculos, y de la otra parte, donde estaba el llamado, pudo ver cómo justamente Kim JunMyeon, hijo de Afrodita y líder de la cabaña 10, bajaba la revista de moda que estaba leyendo en ese momento, recostado en la hamaca que de alguna manera se había hecho su cabaña, tal como lo dijo, fuera del lugar.
Sobre su llamado, JunMyeon extendió su sonrisa antes de agitar su mano para saludarlos. Si algo tenía que admitir ChanYeol con respecto a algunos de los semidioses que conocía en el Campamento, podría decir que, por el lado de los hijos de Afrodita, siempre había encontrado una especial atracción. No era como si pudiera decir que alguno le hubiera gustado, pero los chicos eran bastante bellos, no estaba de más, puesto que básicamente su madre era la reina de la belleza–a palabras de otros, no las suyas–, y sobre eso mismo, no tenía modo de juzgar a todo aquel que hubiera caído por uno que otro.
Entre ellos, probablemente el hijo de Hermes que tenía a su lado y había parecido quedarse mudo desde que se le vio a JunMyeon dejar su revista de lado antes de alcanzarlos en el camino que estaban haciendo hasta el frente de su cabaña.
"Hey, ChanYeolee, ¡feliz cumpleaños!" mas, tan inconsciente como JunMyeon podía hallarse de la belleza que exudaba y que atraía a cualquiera que solo una vez lo viera, actuó de lo más natural al llegar hasta ellos, hasta el grado de obligar a que ChanYeol soltara a SeHun, puesto que su mayor estaba ahora abrazándolo con tanta efusividad, como no se esperaba ni él mismo, dado que, como lo había dicho, no era mucho de considerarse tener grandes amistades, pero quizá una que otra había establecido para con otros en el Campamento. "Estuve tanto esperando a que finalmente llegaras conmigo. Me alegra ver que lo hicieras antes de que el sol se pusiera, momento justo para que yo me vaya a tomar una ducha y ajuste mi rutina de belleza antes de ir a la cama."
"Ah, ¿sí?" respondió con parte de una risita, casi cohibida ahora que intentaba separarse de su lado, solo con la misma intención de mantener su propio espacio vital. ChanYeol no era mucho de ser una persona afectuosa, o no con todos, así que se alegró por ver que JunMyeon no le insistiera más en el gesto y lo soltara cuando justo él puso la pauta de separación. "¿Por qué lo dices? ¿Es que sabías que vendría para acá?"
"Hum, claro, si me dejaron desde temprano un pequeño regalito a tu nombre," continuó, a lo que le vio sacar de su saco–ropa que obviamente no era parte del uniforme del Campamento, pero dado que los hijos de Afrodita eran especialistas en moda y diseño, JunMyeon no podía faltar en haberse hecho algo que justamente tuviera el escudo del lugar y permaneciera con el color naranja que lo reconocía, ¡y todavía verse bien con todo combinado!– las típicas notitas amarillas del hijo del Sol. ChanYeol no se dio cuenta de cómo sus ojos brillaron con solo verla, pero por la parte de JunMyeon obviamente hubo algo ahí identificado, no por nada era hijo de la diosa del amor, así que una risita pudo liberar al entregarle lo que le pertenecía, y mientras ChanYeol ahora abría su cartita, sus propios ojos se desviaron, solo para mostrar su otro propio tipo de sonrisa al dirigirse con el que tenían de junto. "Hola, SeHunee. A ti no te esperaba por aquí."
"H-Hola, JunMyeon-hyung, ahm, no, yo no estaba pensando en venir por aquí, quiero decir, no porque no quisiera, solo no... no estaba..."
"Me ha estado siguiendo todo el día como perro faldero," ChanYeol respondió, más osado de lo que esperaba. Sus palabras obviamente tuvieron reacción sobre el fastidio que quería provocar, y al ver cómo SeHun quedaba estático sobre lo que le escuchaba decir y luego proclamaba un grave ceño fruncido al mirarlo, solo pudo extender poco más su sonrisa, antes de señalar a JunMyeon sobre lo dicho. "Supongo que nuestro pequeño campista solo no esperaba que llegáramos aquí en algún punto."
"Oh, ¿no? Bueno, qué mejor, ha sido toda una sorpresa tenerlos a los dos por aquí también para mí. Aunque, si te sientes un poco aburrido de seguir a ChanYeol todo este rato, SeHun, ahm, puedes... ya sabes, quedarte por aquí."
"Sí, por favor, hyung, llévatelo, que este mocoso solo me ha estado fastidiando todo el camino," reclamó en plan vengativo, ante lo que vio cómo SeHun abrió su boca, indignado, pero al reservarse su sonrisa divertida, vio cómo JunMyeon asentía, enérgico, sobre su más grato pedido. No importó su indignación ahora, ChanYeol estaba seguro de que SeHun se lo agradecería después. "Si me disculpan, yo iré a leer esto en otro lado."
"ChanYeol, pero–"
"Oye, SeHun, por cierto, te quería preguntar..." fue un alivio escuchar cómo JunMyeon había detenido a SeHun cuando él decidió alejarse de donde estaban.
En su lugar, ChanYeol decidió acercarse un poco más a la cabaña, y en esa misma hamaca que tenía instalada fuera, se sentó, sin preocuparse más por la parejita que había dejado a unos metros de donde ahora estaba. No importó de qué estuvieran hablando ellos dos allá ni de lo que estuvieran discutiendo, ChanYeol sonrió gustoso de no solo saber que se hubiera podido zafar de SeHun luego de tanto rato de tenerlo siguiéndolo, sino de ver cómo su menor se pusiera tan tímido como se podía poner cuando cierto hijo de Afrodita se le presentaba.
Se guardó las risas para más tarde sobre eso, porque, entonces, como lo dijo, decidió tomar en sus manos la cartita y leer, ahora para sí mismo, las palabras del hijo del Sol.
Querido hijo del fuego,
Tal como me lo esperaba, has llegado a la cabaña 10, ¿no es verdad? Bueno, si tienes esto en tus manos, seguro que así debió ser, lo cual, me causa cierta alegría. Y digo 'cierta', porque debo admitir que nunca he sido muy fanático de ese lugar. No se lo digas a los hijos de la belleza, pero, entre tú y yo, siempre hemos sabido que Afrodita nunca ha sido nuestra diosa favorita...
ChanYeol se rio en voz baja sobre lo leído. Miró al frente solo por unos segundos para ver cómo SeHun estaba platicando con JunMyeon, y vio a su mayor reírse de lo que sea que el azabache le hubiera dicho. Bueno, suponía que, contrario al hijo del Sol y él, había otros que no podían decir lo mismo. Regresó sobre eso de nuevo a su lectura.
... sin embargo, era necesario que llegaras aquí, y seguro te preguntas por qué... o no tanto, porque si llegaste debes tener consciente lo que sucedió en este lugar, ¿no es verdad? Con lo que te he dicho antes, de cómo se encendió esa chispa entre el fuego y el sol. Ahora difícil de olvidar, si a mí me lo preguntas, pero está bien, no seremos muy fanáticos de la diosa, no obstante, no podemos ignorarla, puesto que tiene una función muy importante, y si vamos por este rumbo, bueno, algo de Afrodita debíamos tomar a consideración, porque no fue cualquier chispa la que se prendió en este lugar. No, ¿cómo la llamó en ese tiempo el hijo del amor? Hum... ¿lo recuerdas tú, hijo del fuego?
Ahí se detuvo de nuevo, y sobre esa pregunta, se puso a pensar, con una sonrisa que poco a poco crepitó en su rostro, porque claro que lo recordaba. JunMyeon lo había llamado entonces...
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"¡La chispa del amor!"
"Claro... pero ¿cómo se supone que debería yo actuar en esto?" ChanYeol le preguntó a JunMyeon una vez que lo escuchó referirse de ese modo sobre lo que parecía estarse formando entre BaekHyun y él, porque, pasados algunos días de su reciente reconciliación, cuando por fin parecían estar regresando las cosas a la normalidad entre ellos, donde volvían a hablarse como antes, tratarse con la misma facilidad de antes, bromear, encontrarse en diversos lugares del Campamento solo para pasar el tiempo y estar uno junto al otro, BaekHyun había retomado en algún punto la confesión que se hicieron ya hace unos meses.
Había sido algo tan simple, estaban los dos solo acostados en el suelo, sobre el pasto y la tierra, sin ninguna molestia por suponer que pudieran ensuciarse o molestarse por los insectos cuando antes habían tenido un juego de encuentra la bandera y habían terminado más que sucios para preocuparse por estar más de lo que ya o pensar en asearse, como muchos otros de sus amigos campistas habían decidido hacer tan pronto el juego había terminado. Habían decidido juntos pasar algo de tiempo extra por su cuenta, antes de tener que inquietarse por sus responsabilidades de ese día. Y qué mejor que en medio del bosque, lejos del barullo usual del Campamento, pero todavía dentro de él, a unos cuantos metros perdidos de la barrera con el mundo mortal.
ChanYeol le había estado comentando a BaekHyun lo divertido que le habían parecido algunas de las cosas que su equipo hizo, con todos esos problemas que tuvieron, e incluso cuando hubieran perdido, se había alegrado porque el equipo contrario–el de BaekHyun en este caso– había resultado ganador. Se había estado riendo por un tiempo por su cuenta, pero en medio de eso sabía que BaekHyun lo escuchaba, lo cual lo dejaba con más cuerda para seguir hablando sin parar. Contrario a lo que ChanYeol pensaba, en realidad, no tenía idea de cómo BaekHyun estaba muy concentrado en ver su perfil mientras hablaba más hacia el cielo encima de ambos, mientras definía cada una de sus expresiones, el modo en el que sus palabras eran escuchadas sobre la tonalidad un poco más grave que finalmente había obtenido su voz, y que por eso, en lugar de seguirle en su conversación, cuando él se calló para dejar la conversación abierta entre ambos, BaekHyun decidiera decir, en cambio:
"ChanYeol..." a lo que se giró, todavía con parte de su sonrisa sobre lo que había dicho que no se imaginaba la bomba que BaekHyun habría de soltarle con su solo: "¿Quieres salir conmigo?"
Entonces, su sonrisa se había perdido por completo, pero no había sido realmente porque no lo quisiera ni porque su respuesta fuera negativa, ya que, pasado otro poco del tiempo que podían estar juntos, ChanYeol había comenzado a reconocer en su totalidad los sentimientos que estaba construyendo por BaekHyun, tal como su mayor se los confesó, incluso cuando antes no les tomara tanta importancia, ahora podía verlos con más claridad y sabía que permanecían entre ambos. Sin embargo, lejos del modo en el que se habían confesado, nada de eso se había hablado de nuevo.
La pregunta de BaekHyun en ese momento fue como si le dieran otra cubetada de realidad, y claro que podía haber estado esperando algo como esto durante ya un tiempo, mas, no se esperó que llegara solo así, sin advertencias ni más mínima reacción que BaekHyun pudiera añadir a eso. Ya que, mientras dejaban que el silencio entre ellos se extendiera, ChanYeol pudo darse cuenta de cómo BaekHyun permanecía estoico, sin ninguna risita o broma continua para asegurar que no iba en serio con esa pregunta, y tampoco un más claro gesto que le pudiera garantizar la seriedad en este gesto. Eso había sido todo, su mirada congelada en sus propios ojos, con unos labios entreabiertos que ChanYeol tuvo que dejar de ver porque el sonrojo estaba alcanzándolo ahora hasta sus orejas, y al saber que definitivamente él tendría que ser el que respondiera a esto para llenar el vacío dejado, solo pudo desviar la mirada del rostro de su mayor para preguntar, más que lleno de vergüenza.
"BaekHyun... ¿hablas en serio?"
"Sí," escuchó de inmediato, lo que solo le hizo sentir mayor vergüenza. No entendía cómo era que BaekHyun podía tomar eso con tanta simpleza. Sin embargo, cuando sus manos fueron hasta su rostro para cubrirlo, embargado por todo el temor, ansiedad y cositas que volaban en su interior, no se pudo esperar nada más que sentir cómo su mayor se movía en la posición que antes tenía y tomara en sus manos las propias para destapar su rostro, con lo que, en esa misma expresión poco interpretable, le dijera, ahora frente a su cara. "Quiero que salgas conmigo. Quiero decir... como se supone que lo hacen las personas normales. Ya sabes, para iniciar una relación y todo eso."
"Te refieres a tener citas y esas cosas..."
"Sí, una cita. Quiero que tengamos una cita," si su rostro pudiera explotar, seguro que ahora mismo lo estuvo haciendo, porque no entendía cómo era que BaekHyun podía mantener tanta calma sobre esto. ¡Le estaba pidiendo que tuvieran una cita! ¿No se suponía que eso lo dejara ahora tan atemorizado? "Sé que es algo inesperado, pero... creo que las cosas han quedado claras entre nosotros ahora, ChanYeol, y sé que, de alguna manera, puedes corresponder mis sentimientos, pero, sin importar que eso sea así, las cosas no pueden cambiar si no sabemos avanzar por nuestra cuenta. Dejé que unos días pasaran desde entonces porque sé que necesitábamos tomarnos nuestro tiempo a que las cosas volvieran a lo que antes, y cuando parecieron hacerlo, bueno, estoy seguro de que, al menos por mi parte, mis sentimientos han crecido hacia ti, así que no quiero que solo estemos saliendo como siempre, como si lo nuestro solo fuera una amistad, cuando ya hay algo más allá dicho entre ambos. Entonces, pensé que solo podíamos hacerlo oficial si tan solo lo declarábamos, ¿sabes?"
"Pero, BaekHyun..." sacudió la cabeza, y con eso finalmente se dio cuenta de cómo una expresión apareció en los gestos del hijo de Apolo. ChanYeol retomó entonces el retén que en sus manos se estaba haciendo por el mayor, solo para garantizar que las cosas estaban bien, porque temía que fuera a ver las cosas de una manera contraria. No quería que creyera que no estaba sintiéndose de la misma manera que él, era solo que esto era demasiado para él, solo hasta ahora que se lo planteaban de frente lo entendía. ChanYeol nunca había tenido una gran amistad, mucho menos una relación amorosa, cómo se suponía que esperaran que actuara o reaccionara a esto. "¿Eso significa que luego de esto tú y yo podemos declararnos... algo?"
"¿Novios? ¿Una pareja?" preguntó el rubio, a lo que ChanYeol asintió, pero, dioses, si BaekHyun sabía cómo hacerlo sonrojar. Sentía que hasta lo estaba dejando morado. "Puede ser. Podemos... ya sabes, tener cuantas citas sean necesarias para establecer eso."
"¿Y va a estar bien para ti? ¿Tú...? ¿Estás seguro de esto?"
Preguntó aquello último con cierto titubeo no porque él mismo lo tuviera, era solo que recordaba lo que había dicho la vez en que confesó sus sentimientos, el modo en el que BaekHyun había dicho que era repugnante, inadecuado. ChanYeol no podía darle esos calificativos a lo que aquí estaba pasando, pero entendía que hubiera cierto prejuicio al respecto. Por suerte, ese modo de pensar podría haberse apaciguado con el tiempo que habían vuelto a acercarse y dejar ese temor que entonces se había creado, porque, entonces, BaekHyun finalmente le sonrió y con un asentimiento, pareció dejar claro todo lo que estaba pesando en el pecho de ChanYeol.
"Lo está, o lo estará al menos hasta que aceptes esta... ahm, primera cita a la que te estoy invitando."
"Oh, ¡sí! Quiero decir... entonces, ¿vamos a tener una cita? ¿Dónde? ¿O cómo? ¿Acaso tienes algo pensado o...?" la risita de BaekHyun fue todo lo que le respondió a su nuevo titubeo, y cuando sus manos fueron soltadas, con el hijo de Apolo que regresó a recostarse a su lado, solo pudo dirigir su mirada un poco más abajo para obtener un poco más de eso. "¿BaekHyun?"
"Este sábado, en la tarde, luego de comer, paso por ti a tu cabaña. Arréglate bonito," eso sorprendió un poco a ChanYeol, pero asintió de cualquier modo, de cierta forma, le emocionaba saber que BaekHyun pudiera ya tener algo en mente, más cuando dijo: "Quiero que sea una sorpresa. Por ahora," sin embargo, no pudo disfrutar mucho de todas aquellas emociones burbujeantes porque BaekHyun se había parado poco después y le había ofrecido una mano para que lo siguiera, en su obvio comentario de añadir: "Tal vez ya deberíamos ir a tomar una ducha, realmente apestamos."
Aquel día había sido jueves por la tarde, y ahora, el mismo sábado por la mañana, ChanYeol todavía se preguntaba exactamente qué iban a hacer. No estaba para nada seguro de lo que sería, bien podía ser una simple actividad que pudieran tener ahí mismo en el Campamento, o que BaekHyun pidiera a sus espaldas el permiso para salir. Las opciones podían ir desde una cita elegante y refinada como para que llevara esmoquin y todo, o solo una salida para ver películas en la propia habitación de la cabaña 7. Claro que aquello no dejó dormir ni estar bien a ChanYeol por los días siguientes, y la cosa solo se puso más seria cuando el mismo día llegó.
No tuvo más remedio que salir y buscar ayuda, porque el tiempo se le acababa. Y por pedir ayuda, se refería a cómo se suponía que debería actuar en esta especie de cita y cómo vestir, por obvias razones, al saber que BaekHyun le había pedido que se arreglara 'bonito'.
Entonces, de una u otra manera, ChanYeol había terminado ahí en la cabaña 10, con los hijos de Afrodita a su alrededor mientras lo escuchaban platicarles sobre su situación con BaekHyun–de la que, realmente, pocos sabían, por lo mismo de que apenas si creían llamarse 'oficiales' con eso–, y pedirles justamente que lo ayudaran. Porque si de amor y bien vestirse se trataba... seguro que ellos debían tener buenas ideas al respecto, ¿no?
"Bueno, ChanYeol, querido, realmente, por lo que nos has platicado, creo que coincido en lo que JunMyeon-hyung ha querido decir. BaekHyunee-hyung y tú ya parecen tener esa chispa entre ustedes, así que no creo que haya necesidad de que te preocupes demasiado por saber que necesites actuar o comportarte de una u otra forma en esto, incluso con saber que es su primera cita," Chittaphon, otro de los chicos campistas propios de esta cabaña, le dijo en medio de su sala común, donde varios de los hijos de Afrodita se acomodaban a su alrededor, con él como el único que había optado por sentarse en el sillón principal, e incluso cuando hubiera mucho espacio, ninguno de los otros habían optado por sentarse junto a él, más bien, prefirieron acomodarse frente a él y a su alrededor, con algunas otras sillas y bancos como los auténticos chismosos que eran por querer escuchar toda su historia, sin necesariamente tener que responder a sus problemas, como al menos el líder de la cabaña y uno de sus hermanos había decidido. Hasta eso, de menos JunMyeon sí había tomado lugar a su lado, el único que igualmente ocupaba el sillón rosa de su sala... en otras tonalidades de rosa. "Es lo que todos siempre dicen, ¿no? Sé tú mismo, es mejor a tener que fingir y más adelante no poder salir de esa imagen que te has creado y no eres realmente. Un peso que nadie quiere cargar en sí mismo."
"Bueno, en eso tienes razón..." ChanYeol pensó mientras jugaba con sus dedos. Se sentía ansioso, tal vez hubiera convenido que se trajera el cubo Rubik que uno de sus compañeros de cabaña le había regalado, así siquiera se distraía con algo. En cambio, tuvo que tomar una honda respiración para sacar su propia frustración en las mismas palabras que transmitía: "Pero eso no resuelve mi otro problema. ¿Qué se supone que debería usar para esta cita? Quiero decir, no tengo ni idea de a dónde vamos a ir, y si termino por arruinar la imagen que debemos dar si solo llevo mi playera del Campamento y unos jeans conmigo..."
"Oh, no, en lo absoluto. Escucha, Chittaphon tiene razón al decir que realmente no importa cómo actúes, porque si BaekHyun ya te quiere así, pues, entonces, no hay ni por qué preocuparnos por hacer alguna especie de actuación que de ninguna manera va a funcionar. Tampoco creo que la ropa sea un gran problema para nuestro querido BaekHyun si, al final, este chico ya te ha querido con solo verte usar todos los días lo mismo..."
"Bueno, tampoco es como si use todos los días lo mismo, yo lo lavo, y luego–"
"Pero no está de más que hagamos algo de producción en eso," JunMyeon continuó en lo que decía, sin importar que interrumpiera lo que estaba diciendo, y por eso mismo, calló, solo para escuchar lo que aparentemente ahora estaban proponiéndole. "Ahí es donde realmente es un gusto que hubieras venido justo con nosotros, porque, créeme, en moda no hay nadie que supere a los hijos de Afrodita. No importa que no sepamos a dónde irás, podremos encontrar el atuendo adecuado para que vayas lo suficientemente sofisticado, relajado, semiformal y producido a esta cita sorpresa que tienes."
"¿En serio? Oh, pero mi ropa no es muy–"
"Tenemos aquí todo lo que necesitas," Chittaphon le siguió al tiempo que, en esa sonrisa que su líder ya compartía con él, le tomaba de las manos y luego se dirigía con otro de sus hermanos de cabaña para indicarles: "YongSun, Giselle, JungKook, ¿creen poder prestar algo del trabajo que estaban produciendo con sus telas?"
"¡Por supuesto, Chittaphon! Vamos con eso en seguida," YongSun respondió, igual de emocionada, a lo que tres de los hijos de Afrodita terminaron por ponerse de pie y dispersarse. A saber los dioses qué iban a hacer, pero ChanYeol no tuvo que preguntarle, JunMyeon mismo se puso de pie, y con otros cuatro chicos más indicó que irían por el maquillaje.
Chittaphon asintió a eso, y de nuevo con él, le mostró una increíble sonrisa.
"Te vamos a dejar tan encantador y guapo como ya lo eres para tu gran, especial y primera cita, ChanYeolee. Confía en nosotros."
Y vaya si lo hizo, no tuvo ninguna otra opción, claro, porque ya estaba ahí, metido hasta el cuello en eso. Los hijos de Afrodita, a pesar de todo, parecieron saber lo que hacían. Cada uno se puso sobre su propia labor, y luego de que un equipo supiera armarle un atuendo especial para la salida–con su suficiente parte de sofisticado al traer un saco verde encima, pero informal y relajado con los jeans y playera lisa que traía debajo–, pasaron a hacerle su peinado y maquillaje. Nada demasiado elaborado, si debía aclarar, lo cual le pareció justo a ChanYeol, ya que él tampoco había sido mucho de arreglarse con tanta producción, y si quería ser lo suficientemente 'él' para esto, entonces, mejor que no le pusieran mucho encima.
Nada que no terminara con una simple frente despejada, su flequillo que quedó de lado de una manera estilizada con lo que JunMyeon llamó como 'una coma', y un poco de delineador y brillo en los labios que Chittaphon garantizó le iba a dar un poco más de resalte a sus facciones tan bien marcadas.
Al final, el resultado en su totalidad había dejado realmente sorprendido a ChanYeol, porque él jamás imaginó verse de este modo en el espejo, si bien se había mantenido un poco de su esencia, lo que le habían hecho los hijos de Afrodita en su totalidad se notaba. Era algo que le gustaba, un pequeño resalte que cuando BaekHyun lo vio al buscarlo por el Campamento y descubrir en dónde se encontraba, sin duda, se mostró, porque el mismo BaekHyun también había intentado producirse a su modo.
No importaba, ambos podían admitir que se gustaban tal como eran y con cierta producción encima. De cualquier modo, su cita terminó siendo la misma. Una simple velada que BaekHyun se había hecho para ambos en el pabellón del comedor, con comida preparada por unos de los hijos de Deméter, velas que alumbraran y dieran cierta privacidad al ambiente, y que, aunque no pareciera mucho para algunos, había sido suficiente para ambos, porque fue solo el inicio de lo que entre ellos ya había.
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ChanYeol sonrió con las mejillas ligeramente sonrojadas luego de tener ese recuerdo en su memoria. Realmente se había producido una chispa en ese día, y estaba agradecido de saber que ahí no se hubiera terminado, sino que solo se había avivado. Fue un alivio, en realidad, porque él no había sabido cómo hacerlo, y conocer que BaekHyun tuvo siempre ese espíritu para salir por ambos y terminar llevándolos hasta el lugar en donde estaban...
En verdad le hacían notar a ChanYeol cómo había muchas cosas que debía agradecerles al hijo de Apolo. ¿Era eso lo que lo estaban llevando a hacer estas cartas? ¿Que se diera cuenta de cómo y qué tanto debía estar agradecido de tener a BaekHyun a su lado y en cada uno de estos momentos? Porque si lo era, vaya que lo estaba logrando, con creces, y más que eso, ChanYeol estaba muy seguro de que no podía encontrarse más agradecido que ahora.
Cómo regresarle todo esto al chico.
Sin pensar mucho más en eso porque sabía que había más por hacer, ChanYeol regresó a su lectura de carta.
Bien, si recuerdas todo esto, entonces, creo que es momento de que pasemos al siguiente punto. El siguiente aquí se va a tratar de algo mucho más especial. Es un buen momento por el que debemos de pasar, hijo del fuego, por el cual estoy seguro de que te encontraras muy grato de recordar. Quiero decir, fue algo realmente especial para ti, ¿no es verdad? Porque este siguiente momento se trata de aquella vez donde tú fuiste el que encendió esa chispa con un grato gesto. Uno solo que hizo cómo todos nuestros mundos revolucionaran, porque desde ahí todo quedó establecido. ¿Sabes a lo que me refiero, hijo del fuego? ¿Sabes de qué gesto estoy hablando? Si lo haces, te espero en el siguiente lugar para que encuentres tu próxima misión. Atentamente, el hijo del Sol.
ChanYeol tuvo que leer un par de veces más esa parte porque estaba pensando a qué se refería. No tenía ahora a SeHun consigo para que le dijera un par de pistas, el hijo de Hermes junto con el líder de la cabaña 10 habían desaparecido en algún punto donde se desconectó del mundo, y había quedado solo en estas siguientes misiones.
No era molestia, sin embargo, tuvo que pensar un poco más al respecto. Entonces, al leer un poco más aquello que estaba escrito hasta el final quizá pudo comprender a lo que se estaba refiriendo.
¡Un gesto! Un gesto que había revolucionado todo, sus vidas, y si estaban hablando más precisamente de las vidas de BaekHyun y él, en ese caso... ChanYeol ya estaba seguro a dónde tenía que dirigirse ahora.
Tenía suerte de que el lago no le quedara muy lejos de donde estaba, ¿cierto? Solo un par de pasos tendría que dar para acercarse al lugar a donde iba.
Solo, pero estaba bien, era mejor de ese modo, después de todo, había algo especial e importante que tenía que ver con este nuevo recuerdo o momento que necesitaba encontrar por lo que prefería que SeHun no se encontrara más aquí. De cierto modo, una ligera vergüenza se podía propagar con eso. Porque al lugar a donde ahora se estaba dirigiendo era donde ChanYeol sabía que había dado su primer beso.
Su primer beso con BaekHyun.
La nota la encontró pegada a una de las canoas. Fue difícil ubicarla debido a que la luz del día se estaba poco a poco perdiendo, pero agradeció que el color amarillo tuviera todavía cierto brillo identificable, porque de menos no tuvo que buscar como loco por varios minutos. Suficiente tenía con que la noche le estuviera cayendo encima. ¿Era algo por lo que quizá debería preocuparse? El tiempo que había transcurrido en esta búsqueda. ChanYeol no lo sabía, pero, si bien lo pensaba, ¿cuántas misiones más le quedaban por recorrer?
¿Cuántas llevaba ahora? ¿Nueve?
Querido hijo del fuego,
Debo admitir que, a pesar de que hemos pasado ya por tantas misiones, esta ha sido un poco difícil de escribir, al menos para mí, y no porque tenga algo malo o sea un poco complicada, sino todo lo contrario. Es una situación tan buena y gustosa que siento que tiene un valor tan importante para nuestra misión y solo pensar que yo había de dirigirte hasta acá y asegurarme de que llegaras adecuadamente para traerte a la memoria este momento me puso muy ansioso. Este lugar es especial para mí, hijo del fuego, puedo imaginar que para ti también, porque es algo que evidentemente te involucra de primera mano. Sin embargo, creo que el que estés aquí leyendo esto ya deja claro que hemos empezado bien todo esto. Ahora solo queda que te regrese a la memoria el momento que aquí ha pasado. Suficiente tengo con decir que ha sido un recuerdo único, ¿no? No sé cómo es que tú lo recuerdas, hijo del fuego, pero estoy seguro de que al menos en mi conocimiento del Oráculo puedo ver que las cosas han sido especiales, ¿o tienes alguna otra forma de llamarlo? ¿Cómo definirías tú este momento, hijo del fuego? ¿Qué te hace pensar estar en este lugar y tener en cuenta lo que aquí ha pasado? Luego de los años...
ChanYeol se detuvo en ese momento de su lectura. Miró con eso a su alrededor. La puesta del sol estaba llegando, poco a poco se estaba ocultando, y con eso las palabras de su hijo lo estaban llevando al momento que esta carta le estaban recordando. Si hubiera un modo en el que ChanYeol pudiera llamar a ese recuerdo... realmente, ¿cuál sería? Tal vez primero necesitaba traer a su memoria lo que ahí había ocurrido.
El modo en el que las cosas se suscitaron justamente en una hora similar del día, a la puesta del sol, en las canoas...
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"¿Estás seguro de que es adecuado lo que estamos haciendo?"
"Oh, sí, claro que sí, quiero decir, no dejarían canoas con la rienda suelta si no permitieran que los campistas las usaran incluso fuera de sus lecciones que las involucran, ¿no te parece?"
"BaekHyun, pero..." el hijo de Apolo, ahora en sus dieciocho, ignoró totalmente que estuviera hablando, y tan casual como podía verse, empujó con sus manos la canoa que tenían en el borde del lago para ponerla sobre el agua, entonces, con eso casi listo para partir, se volvió con él al mostrar una sonrisa que por obvias razones le estaban diciendo a ChanYeol que parecía no importar lo que dijera, su mayor solo no iba a escucharle para detenerse. Suspiró debido a ello. "Realmente nunca he visto que haya otros campistas que usen las canoas para su propio entretenimiento, y si tengo entendido, DongHae-hyung alguna vez dijo que lo que había en el Campamento no era para jugar como–"
"DongHae debe estar ahora ocupado ese otro centauro que vino el día de hoy para visitarlo, no te preocupes demasiado, ChanYeol, tampoco es como si estuviéramos haciendo algo ilegal, no salimos de la protección del lugar, estamos muy seguros en este mismo punto, ¿no? Tan solo deja que nos relajemos, hemos tenido una semana agotada. Vamos."
Al final, BaekHyun le ofreció una mano para que la tomara, mientras uno de sus pies ya estaba dentro de la canoa, pero, a pesar de eso, ChanYeol todavía titubeó, y de cierto modo lo hizo porque lo que escuchó por parte del rubio tenía algo de cierto. Habían estado bastante ocupados en esos días. Las cosas habían cambiado un poco pasado un tiempo en el Campamento, ahora que BaekHyun ya estaba rozando la mayoría de edad y se encontraba más enfocado en aquello que realmente le interesaba (que siempre había sido la parte de la salud y esas cosas), pasaba más tiempo estudiando, practicando en la enfermería. Tenía mucho que hacer por su cuenta, también estaba el hecho de que se había metido más en el trabajo con los nuevos campistas que desde hace ya un tiempo DongHae le había ofrecido.
Él, por su parte, había optado por estudiar en línea. Estaba preparándose en estos momentos para su futuro examen que tendría a finales del año, y de la misma manera ya estaba apoyando un poco a los nuevos campistas que parecían tener ciertas dificultades con algunas de sus habilidades recién descubiertas. Era curioso cómo había pasado a tener tal trabajo, él, que también había tenido sus dificultades para controlar y manejar su don, pero parecía que eso mismo lo había ayudado a hacerse una especie de experto en saber manejarlo, así que gustoso se había ofrecido a darle una mano a aquellos que podían estarla pasando tan mal como él lo hizo en algún momento.
Se habían visto de una manera muy esporádica en esos días por lo mismo, BaekHyun y él seguían manteniendo esa relación que recién comenzaba hace unos meses, pero no se veían con la misma frecuencia de antes, ya no estaban solo tonteando por ahí en el Campamento y algunas de esas cosas. Obviamente eso poco le había dejado notar sino hasta ahora cómo realmente había extrañado estar y pasar un tiempo con BaekHyun, y ahora ver cómo él se esforzaba por remediar eso con algo tan inesperado como había sido que solo lo sacara de su autoestudio que tenía en su cabaña para llevarlo hasta allá luego de una simple plática para ponerse al tanto, y llegar hasta aquí... a este momento en el que lo veía extender su mano, lo dejaba conmovido.
¿Cómo iba a poder negarse a eso al ahora tener aquello en cuenta?
"Si DongHae-hyung o alguien nos advierte y terminamos castigados, voy a echarte la culpa de todo."
"Sí, sí, tú vas a salir bien librado de esta, no te preocupes," se rio, pero tomó de igual manera la mano de ChanYeol. Entonces, un poco tambaleantes, quedaron ambos sobre la canoa, antes de tomar cada uno un par de remos que los ayudaran a moverse de la orilla y estar un poco más lejos, en un lugar relativo del lago.
Tuvieron algunas dificultades en el transcurso, porque no importaba cuántas lecciones habían tenido del canotaje, parecía que no era lo mejor que podían hacer en todas las actividades del Campamento, y su coordinación había quedado pésima, varias veces tuvieron problemas para ajustarse un mismo ritmo, lo que llevó a su canoa a dar vueltas sin ningún sentido, sin poder avanzar del todo y solo haciendo que se marearan un poco. Sobre sus risas con eso, quisieron moverse por su cuenta, pero se dieron cuenta de que también debían tener cuidado cómo se movían ellos dentro de la canoa, porque poner un poco más de peso de un lado o de otro podía hacer que se inclinaran un poco más de lo esperado y casi volcaron en alguna que otra ocasión la canoa.
Sobrevivieron y de alguna forma llegaron hasta estar en un lugar seguros del lago luego de tanto, lo que llevó que ambos se rieran de nuevo. No pudieron decir que eso fue todo lo malo que pasó en aquel momento, porque tarde notaron que tal vez tener una especie de cita no planeada en el lago no era el lugar más romántico. No con todos esos mosquitos que se alzaban en el agua, los estaban molestando, el constante cuidado que debían tener por sus movimientos en el lugar, y lo peor, ellos jamás se imaginaron cómo iba a poder apestar su alrededor. Probablemente era algo que no se esperaban, porque no era como si alguno de los dos hubiera pasado mucho tiempo en el lago.
"Pero lo bueno es que nos tenemos el uno al otro en esto, ¿no?" BaekHyun le dijo entonces, seguro por querer salvar la situación cuando sabía que eso había sido su idea. ChanYeol le dedicó una mirada molesta que, en realidad, era más fingida, porque no creía poder enojarse del todo con BaekHyun, no luego de lo que ya habían pasado, suficiente habían tenido de drama en sus vidas como para querer añadirle otro poco con esta relación que ahora tenían.
"¿Para oler el apestoso lago y soportar la nube de mosquitos que nos están atacando? Sí, claro, cuánto encanto, BaekHyun."
"Ay, vamos, ChanYeol, ¡esto es divertido!"
Divertido fue cuando ChanYeol decidió, incluso con lo asqueroso que le parecía, meter su mano en el agua y salpicar a BaekHyun con algo de ella. Del susodicho no se pudo esperar más que la indignación junto con su risa, pero obviamente tenía que buscar su venganza. Y eso mismo llegó pronto cuando también se inclinó y salpicó por su lado agua para que le llegara a su rostro. Ahora que ChanYeol había optado por hacerse otro corte y tenía la frente despejada–cortesía de los hijos de Afrodita que le habían apoyado bien en darle su debido estilo–, todo su rostro quedó empapado y unos cuantos mechones se le pegaron, lo que debía estarle dejando una pésima imagen. Pero BaekHyun igual le sonreía y se estaba riendo con su propio flequillo rubio pegado a su frente.
La batalla no terminó ahí, por obvias razones, ambos eran tan competitivos, eso debían tenerlo claro. Fue de ese modo que terminaron más que mojados, con el comienzo de una batalla que llevaron con el uso de sus dones, al menos BaekHyun por su parte, porque había manipulado algo de los rayos del sol para molestarlo y ganarse un movimiento con el que seguir fastidiándolo. Al ChanYeol no tener alguna herramienta con la que hacer rápidamente algo con lo que contraatacar–si hubiera la oportunidad, probablemente hasta armaba una pistola de agua al estilo bazuca con el que darle un K.O bien definido–, ni tampoco la facilidad de usar el fuego en su contra–al menos porque en realidad no quería matarlo y mucho menos incendiar la canoa donde estaban–, no tuvo de otra más que irse con un ataque físico.
Fue un error, solo se puso más en desventaja. BaekHyun aprovechó su movimiento hasta él para terminar por hacerle cosquillas, y tan bien como lo conocía, acertó en todos sus puntos débiles, lo que dejó que BaekHyun terminara encima de él, mientras él se movía incontrolablemente debajo, en su vago intento por escapar, pero que solo estaba dejando que más de su risa fuera la que se escapara. No podía ganar contra BaekHyun, solo no podía, era demasiado bueno y se sentía adecuado.
Sin embargo, sus movimientos incontrolables sí los llevaron a tener un par de problemas. Al principio lo dejaron pasar porque parecieron controlarlo, pero cuando una patada casi hace que su canoa se vuelque, BaekHyun se detuvo, a lo que también detuvo sus manos, todavía con parte de una larga carcajada que le había sacado de último, y luego unas respiraciones agitadas que solo lo dejaron verlo con una inmensa sonrisa mientras el mayor le decía:
"Creo que debemos detenernos ahora mismo, ChanYeol, por más romántico que pueda parecer para muchos, no quisiera que termináramos cayendo al agua en nuestra canoa. No creo que eso vaya con nuestro estilo."
"Incluso cuando ya estemos algo mojados por lo anterior, concuerdo contigo, sería terrible que termináramos en el agua por completo, con lo apestoso y sucio que está todo, no me quiero ni imaginar cómo saldríamos de aquí si quedáramos empapados de arriba abajo."
BaekHyun se rio por eso, pero cuando la risa poco a poco murió, ChanYeol todavía lo vio encima de sí, mientras se relamía los labios y se acomodaba a cada costado de su cuerpo.
"ChanYeol," entonces, le habló, y con las manos juntas entre ambos, ChanYeol solo pudo murmurar su respuesta, porque no iba a ignorar cómo en este momento se sentía algo agitado el bombear en su pecho. Estaba seguro de que él no era el único cuando BaekHyun le dijo: "¿Podemos al menos hacer una parte de lo que esas escenas románticas en canoa siempre hacen?"
"¿Exactamente qué sería esa parte... BaekHyun?" inquirió, pero cuando vio cómo BaekHyun bajaba su mirada, casi obtuvo su respuesta. Al menos sin palabras, porque no parecieron necesitarlas. BaekHyun solo cerró la brecha que los separaba, y tan lentamente como iba, ChanYeol dejó que sus ojos se cerraran.
Sintió el roce en sus labios solo por un corto tiempo. Fue como... un pico. Pero se sintió tan bien y tan lindo. BaekHyun acababa de darle un beso. Acababa de darle su primer beso.
Cuando se separó de su lado, notó el inmenso sonrojo en las mejillas de su mayor. ChanYeol estaba conmovido. Esto era tan lindo para él, todo dentro de sí estaba revolucionando, se sentían como fuegos artificiales revoloteando en su interior.
"BaekHyunee..."
"Perdona, eso ha sido muy torpe, yo... es que nunca lo había hecho y no sé... no sé qué se supone que debo hacer."
"No tienes que disculparte por eso, también ha sido mi primera vez," respondió con una risita, lo que dejó que BaekHyun lo mirara de nuevo, y con los labios relamidos, ChanYeol solo atrajo más al rubio hacia él cuando rodeó su cuello con sus brazos al ahora estar sueltos por el nerviosismo en el que había quedado BaekHyun luego del acto. "Me ha gustado. Mucho."
"A mí también," admitió, tímido su mayor, lo que solo hizo que la sonrisa de ChanYeol se extendiera tanto, estaba seguro de que su tic en el ojo había aparecido, ese que no le gustaba mucho, pero que era inevitable no sacarlo cuando estaba tan contento. "Pero puedo mejorarlo, si me permites."
"De ahora en adelante, nunca me pidas permiso para hacer algo como eso," le dijo, a lo que BaekHyun se rio, pero asintió, y con una sola mirada a sus labios supo lo que buscaba.
No hubo mucho más luego de eso, pasaron un buen tiempo juntos y, en realidad, ChanYeol y BaekHyun solo terminaron abrazados en la canoa por el resto de la tarde. Al menos hasta que la noche les cayó encima y realmente los aires fríos les dijeron que seguían algo mojados de su juego anterior, probablemente apestaban un poco, la cena se les estaba pasando, y tal vez era mejor que regresaran si querían arreglar todo eso.
Más tarde se preocuparían por mejorar ese primer acto. Pero había sido suficiente por ese día, había sido...
.
.
.
Hermoso. ChanYeol lo podía llamar ahora de ese modo. El acto había sido maravilloso, una experiencia única que se alegraba de haber pasado junto a BaekHyun y solo junto a él, porque no pudo haber nadie más que le diera una experiencia como esa.
Un recuerdo muy simple, muy corto, pero que no había necesitado siquiera tener nada más para que ya se volviera así de significativo para ambos. ChanYeol entendía lo que decían las palabras de esa carta, sabía por qué parecía tan ansioso de poder hablar sobre esto, porque traer el recuerdo a su memoria también agitaba algo en su interior con mucho gusto. Había sido una situación bastante encantadora.
Hermosa. Encantadora. Maravillosa. ¿Cuántos adjetivos más necesitaba el hijo del Sol para que la describiera?
Regresó luego de ajustar eso en su mente, de menos había podido contestarle a una de sus preguntas.
Recordar esto solo hace que me deje con un mal sabor de boca dirigirte a la siguiente misión, pero creo que es importante que también pasemos por ella, porque es un momento importante que te ha dejado crecer, hijo del fuego. Puedo recordar muy bien cómo la situación se manejó en ese día y sé que esta vez has sido tú el que más dificultades ha pasado en todo esto, pero de la misma manera has sabido crecer. Seguro ya te debes preguntar de qué estoy hablando ahora, ¿o no? Bueno, hijo del fuego, si quieres saber a qué momento me refiero en esta ocasión, entonces, solo tengo que recordarte dos sencillas personas que fueron involucradas en esto: el hijo del agua y el hijo del trueno. ¿Te suenan de algo?
ChanYeol lo pensó, pero una vez que su ceño fruncido lo alcanzó, supo a lo que se refería, porque solo podía estarse refiriendo algo este hijo del sol cuando mencionaba a esas dos personas. Oh, vaya, realmente... ¿realmente lo estaba dirigiendo ahora a eso?
ChanYeol ya comenzaba a sentir la vergüenza llegar hasta sí con solo la mención, ahora que rememorarlo...
Si es así, hijo del fuego, pues, te espero en la siguiente ubicación. Recuerda que ya estamos muy cerca de llegar a tu destino, ¡mucha fuerza en tus últimos pasos, mi gran semidios! Atentamente, el hijo del sol.
... no tuvo opción, necesitaba pasar por ese momento para poder terminar sus misiones, tal como se lo decían. Diablos, y no era que realmente esta situación lo molestara o le hiciera sentir un poco desanimado como muchos otros de los recuerdos lo hicieron, era solo que este le traía lo que más bien podía clasificar como vergüenza que, para su desgracia, no era ajena, porque había sido completamente ocasionado por su parte.
En medio de un suspiro por eso, tuvo que salir de donde estaba y se embolsó una vez más aquella carta. Bueno, suponía que era necesario continuar, entonces, porque al mal trago, era mejor darle prisa.
Hemos llegado a otra parte de esta pequeña historia, y como pueden darse cuenta... bueno, ya estamos muy cerca de llegar al final, así que, sí, es algo claro que se los diga ahora: mañana es el último capítulo de este mini-fic. Había que reconocerlo, puesto que, aunque el cumpleaños de ChanYeol es hoy en Corea, ya es mañana por el otro lado del mundo (al menos en este tiempo que la historia fue actualizada, en noviembre de 2020).
Eso solo me deja preguntarles hasta ahora: ¿qué les ha parecido esta mini historia? En realidad, cada capítulo es bastante largo, más de 10K cada uno, así que no sé si llamarla 'mini' debería ser lo adecuado 😅
¿Les ha gustado todo esto? ¿Tengo por aquí fanáticos de PJO que estén tan encantados con esto como yo? Eso espero realmente ^^
Les dejo solo una pequeña nota de algo que aquí se mencionó ahora:
• Zeus como hormiga y Poseidón como caballo: en realidad, no voy a hablar mucho sobre esto, creo que ha quedado un poco claro a lo que se refiere. Los dioses del Olimpo hacían DE TODO para coger con alguien, lo cual es bastante horroso, pero así es como fue la historia. Tiene su parte interesante igual que desagradable. Pero ¡hey! De cierto modo, gracias a esto, fue que se crearon los pegasos 😬
Y ya, no hubo muchas referencias en esta parte, según me he dado cuenta 😅
No tengo mucho que decir por eso, solo esperar que se hubieran divertido y encantado. Pasamos por algo tan bonito en esta parte, que realmente deseo les hubiera parecido tan adorable como a mí.
Recuerden darle hoy mucho amor a nuestro querido ChanYeolee, si pueden en sus redes sociales, usar los hashtag oficiales, para demostrarle cómo seguimos aquí con el apoyo y todo el amor que va de nuestra parte 🙌🏻
Por otra parte... Aquí es donde quizá les deba recordar que esta historia es versátil... no vamos a profundizar mucho en algunas cosas, pero solo para que lo tengan en cuenta 🤭
¡La siguiente parte es la última, así que no se me vayan hasta leerla! Muchas gracias por llegar hasta aquí, esperemos seguir haciéndolo en la siguiente 💙
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