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Capítulo 2 | Jungkook y Taehyung

❥Dieciséis besos y Doce Candelabros

Dieciséis besos

-Pide un deseo Koo -Jungkook sopló las velas cerrando sus ojitos, apretando sus manos juntas en su pecho mientras soplaba.

Todo realmente empezó cuando él recién cumplía catorce. Tenía tan solo catorce y ya lo sabía, se había dado cuenta. Sabía muchas cosas y sabía por sobre todo lo mucho que amaba a Taehyung, una clase de amor que era más allá de la hermandad. Los dos se reunieron secretamente en el jardín para celebrar su cumpleaños. Jungkook le había prácticamente rogado a Taehyung que lo llevara lejos de esa absurda fiesta elegante que sus padres habían organizado.

-Se está haciendo tarde, deberíamos volver -susurró Taehyung.

-¿Desde cuando el paranoico eres tú? -Jungkook jaló la camisa de Taehyung para acercarlo y se trepó en su regazo -Hmm... Yo no quiero volver realmente. Mamá ha estado observándome extraño. Solo quiero que deje de hacerlo.

-Jungkook -llamó Taehyung, sonaba más como un regaño. El príncipe volteó su rostro hasta enterrarlo en el cuello de Taehyung y aspirar su aroma. Dios, olía demasiado bien, muy fresco, a hierbas.

-No. -Jungkook pudo sentir a Taehyung tensarse bajo él- No planeo ir. No iré. -el aliento de Jungkook le rosó la piel, haciéndole temblar. Podía sentir toda su respiración pegada a su cuello, olfateando como cachorro.

Taehyung se resignó, suspirando y paseando sus dedos por el cabello de su pequeño príncipe. Cristo, literal era un gran bebé en el cuerpo de un mocoso puberto y Taehyung era el culpable de haberlo hecho tan malcriado. Un Jungkook muy caprichoso y mimoso; arrasando con él y su juicio sin importar la situación en la que se encontraran. Las cosas con Jungkook siempre fueron así, desde niños, si Jungkook quería algo lo conseguía y Taehyung prácticamente lo premiaba por cada cosa que hacía. En las noches, después de un largo día de aprender el oficio de ser de la realeza, Jungkook se escabullía en los pasillos hasta llegar al cuarto de Taehyung y colarse en su cama para dormir.

-Jungkook, esto es muy tonto hasta para ti. -Taehyung quería. Realmente quería alejar a Jungkook de su regazo y hacerlo reaccionar. No pudo. Tenerlo así era muy reconfortante. Agradable.

-Me voy a quedar aquí.

-Jungkook... -reprochó Taehyung.

-Buenas noches -Jungkook se acomodó más en sus brazos y dejó caer todo su peso en él. Taehyung rodó los ojos y sin vacilar empezó a acariciar la espalda baja de Jungkook con suavidad, dando cariñitos por todos lados, estaba cansado.

Cansado de esto. Su corazón estaba con Jungkook en todo momento, pero no solo con Jungkook. No era solo de Jungkook. Su fatiga era más evidente conforme el tiempo pasaba. Jungkook estaba en edad de comprometerse. Maldición. Jungkook iba a comprometerse con alguien pronto y eso era algo inevitable.

Estaba siendo muy exasperante esperar a que el rey y la reina decidieran la doncella o caballero con el cual se comprometería. No es que estuviera ansioso; todo lo contrario. No quería que Jungkook tuviera una prometida o prometido. Estaba asfixiándose al imaginarlo tener una familia con alguien más. Imaginar a su pequeño Jungkook casarse e ir al altar y que alguien más pusiera sus manos sobre él lo tenía muy mal a estas alturas. Era un pensamiento que quería eliminar de su mente por completo, pero eso ya no se lo sacaba de la cabeza y menos ahora; verlo dormir como el ángel que era en sus brazos. Nadie debía tener ese privilegio. Nadie más que él.

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-No me gusta. Lo aborrezco. -Jungkook se lanzó a la cama de Taehyung exasperado. Había conocido a Yugyeom, su prometido.

-No puedes hablar en serio. Lo acabas de conocer -Taehyung siguió escribiendo en el papel lo que fuera que estuviera escribiendo en el suelo; ignorando a Jungkook un poco.

-Si puedo hablar en serio, no lo has visto, es guapo, pero, no quiero tener hijos con él, ¿sabes? No es como que la idea me emocione-Jungkook frunció el ceño en desaprobación. Su prometido era realmente guapo en muchos aspectos, era elegante también. Solo que realmente no quería casarse con él -¿Qué haces con eso? -Taehyung volteó a verlo con una sonrisa en su rostro.

-Estoy escribiendo una carta. Jimin me pidió que lo hiciera y bueno lo estoy haciendo-Jungkook se tensó ante la mención del niño con cabellos anaranjados.

El príncipe se deslizó por las cobijas y se acercó a Taehyung con cautela. Gateó hasta quedar a su lado, acurrucándose realmente pegado a él, frotándose como un pequeño animal, rodeando los hombros de Taehyung con sus brazos. Taehyung podía sentir la presión de los brazos de Jungkook alrededor suyo; como sus bracitos trataban de acaparar todo. Unos cuantos segundos después Jungkook miró fijamente la mejilla de este y Taehyung seguía trazando líneas por doquier. Jungkook acercó su cara lo suficiente para rozar la piel de Tae, presionó sus labios en el pómulo de Taehyung con suavidad, dando un largo beso.

Las manos de Taehyung soltaron el lápiz de carbón. Todos sus pensamientos tenían el beso impregnado. Olvidando un rato la carta.

-¿Te gusta? -preguntó el pequeño príncipe a su lado, que ahora susurraba con aliento caliente en la oreja de Taehyung y este sentía todo tan extraño ahora. ¿Que si le gusta? Definitivamente si. Le gusta. Le gusta mucho, Jungkook besándolo le gustaba mucho. No lo admitía nunca, pero tener a Jungkook con él, casi encima, lo hacía sentir muy bien.

Oh. Definitivamente le gusta.

-Si... -Jungkook no se atrevió a verlo a los ojos pero sabía muy bien que Taehyung le estaba viendo. Jungkook no quería verlo porque sabía que Taehyung le diría "lindo" y el que le dijera lindo hacía que su corazón saltara.

-¿Otro? -dijo con suavidad. Taehyung asintió con la cabeza y Jungkook repartió un beso más cerca de los labios de Taehyung. Tan cerca.

-Jungkook... -Jungkook se estremeció cuando Taehyung de un jalón lo puso debajo de él, encimandose y después abrazándolo, toda su cabeza recargada en el pecho de Jungkook y sus brazos aferrados a la ropa del príncipe

-Taehyung -llamó Jungkook. Las manos de Jungkook levantaron el rostro de Taehyung de su pecho -Quiero ser el primero

-¿Qué?

-¿Has besado a alguien? ¿Aquí?-Jungkook se recargó en sus codos, señalando sus labios.

-No -respondió Taehyung.

El príncipe sonrió sonrió ante la respuesta y se levantó del suelo junto con Taehyung.

Había pasado estos meses imaginándolos a Taehyung y a él abrazados mientras se daban un beso inocente. Tenía algo de miedo de decirle, si era honesto, quería decirle algo. Había estado leyendo varios libros en la biblioteca acerca de leyendas de princesas y todo eso. Había leído cosas interesantes en los libros. Los personajes siempre se daban un beso al final o siempre daban un beso como muestra de gratitud. Incluso tenían que darse besos si se querían. Jungkook quería a Taehyung demasiado y tal vez por eso quería que ambos compartieran un beso. Ellos ya se habían dado besos en las mejillas y Taehyung había besado sus manos. Pero no quería eso. Jungkook quería saber cómo sería darle un beso en los labios.

El pequeño príncipe jaló de la manga de Taehyung a la cama y se sentaron los dos en ella muy nerviosos

-Bésame -Jungkook no tuvo esa conexión boca-cerebro cuando lo dijo. Tal vez estaba enloqueciendo. Tal vez estaba deseando demasiado el tener a Taehyung para sí mismo y nadie más pusiera un ojo en él. Así nadie se lo quitaría. Sus ojos fijos en la pared de enfrente.

"Egoísta. Egoísta. Egoísta."

Taehyung no dijo nada por unos segundos. Como si se hubiera enmudecido de repente, ni siquiera se movía, estaba como una estatua, y finalmente dijo:

-Si.

Taehyung miró a Jungkook fijamente, sostuvo su mirada por unos tortuosos dos minutos y luego agarró el cuello de Jungkook para acercarlo hacia él con lentitud. Cada centímetro era devorado por ansias. Sus narices se rozaron y después sus labios. Con suavidad, Taehyung estampó ambas bocas juntas, así, sin movimiento, sin nada. Solo un beso inocente. Jungkook puso sus manos en el pecho de Taehyung, jalando más cerca. Ambos estuvieron pegados así por varios segundos. Tan correcto.

Taehyung no podía dejar de pensar en lo hermoso que Jungkook se veía desesperado por contacto. Podía prácticamente ver todo el cuerpo de Jungkook acalambrado con necesidad de cariño. Jungkook era el ser más apapuchable que había visto jamás.

-Jungkook... -dijo cuando se separó un poco -Otro. - Taehyung lamió entre los labios de Jungkook. Estaba experimentando mariposas en el estómago. Taehyung se movió un poco hacia Jungkook y lamió de nuevo. Era torpe y desastroso, nada experimentado.

Jungkook dejó a Taehyung hacer lo que él quisiera, enrollándose como koala al cuerpo de Taehyung. El beso era muy torpe y ciertamente poco limpio, pero se sentía muy bien, no sabía cómo mover su boca y solo dejó todo en manos de Taehyung.

-Te quiero mucho -susurró cariñoso después de separarse.

-Te quiero aún más.

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Jungkook caminó de puntitas por el pasillo. Evitó a los guardias y como siempre lo hacía, escurridizo, entró al cuarto de Taehyung. Abrió las cobijas y se coló por ellas hasta llegar a su acompañante de vida y aferrarse a él en muchos sentidos. Taehyung sintió el fuerte abrazo de Jungkook rodearlo y supo de inmediato que algo andaba mal. Su Jungkook nunca hacía eso a menos que hubiera discutido con sus padres. Estos últimos dos años su relación con el rey y la reina era así. Jungkook se negaba rotundamente a salir del palacio o estar en el mismo cuarto con quien sería su futuro esposo y eso solo hacía que las cosas se complicaran para el rey y la reina. Las cosas se complicaban con su alianza del reino vecino y eso era algo que Jungkook estaba provocando.

-¿Jungkook? -se levantó un poco y abrió perezosamente sus párpados, el muchacho se apretó más contra él -¿Qué dijeron esta vez? -contestó Taehyung.

-Quieren que vaya a una reunión con la familia de Yugyeom en una semana. Voy a empezar con mis votos. Tae, no quiero, Yugyeom es amable; me gusta, pero no de esa forma. Quieren que empiece a persuadir a sus padres de la unión y los beneficios. No estoy listo -Taehyung tomó el mentón de Jungkook y lo obligó a levantar la vista.

-Escucha Koo, tienes que ir. Tienes dieciséis ahora. Es tu prometido, algún día crecerás y entonces ambos tendrán una familia muy hermosa -Jungkook se estremeció en sus brazos.

-Me quiero casar contigo -Jesús. Jungkook estaba siendo tan serio con el asunto, tan pegajoso con él justo ahora. Podía casi sentir que Jungkook lloraría en cualquier momento. No. Ellos no debían seguir así. No debían. Jungkook ya estaba comprometido; Jungkook estaba prácticamente tomado. Y Taehyung no podía hacer nada al respecto. Dolía como el infierno. -Quiero tener hijos contigo. Vivir lejos de aquí contigo. Taehyung, quiero estar contigo.

El muchacho no podía contestar a eso. No solo porque no podían desposarse. Realmente Jungkook no era el único en su mente si de eso se trataba y bueno, no pueden culparlo. Ha estado viviendo con dos hermosas personas desde que tiene uso de razón. No puede realmente saber lo que quiere. No puede hacerles esto; ya era suficiente con todo esto y estaba siendo algo que lo tenía muy mal. Realemte mal.

-Durmamos por ahora. Has tenido un día muy agotador. -Jungkook se encimó en Taehyung y susurró suavecito.

-Un beso. Por favor -Taehyung lo empujó mucho más cerca y lentamente besó los labios del príncipe; empezó a morder el labio del príncipe y un lloriqueo lo aturdió un poco. Jungkook estaba siendo agresivo. Taehyung tomó las caderas de Jungkook y lo apretó contra si mismo.

-Abre la boca -jadeó. Puso su lengua en la boca del príncipe y probó. Dios. Estaba tratando de controlarse para no hacer esto aún más indecente. Taehyung siguió con el beso, presionando sus estómagos juntos. Jungkook gimió. El aliento de Jungkook chocó en su boca y Taehyung instintivamente empezó a frotarse fuerte en los muslos de Jungkook. El gimoteo de Jungkook se ahogó en su garganta cuando Taehyung bajó y chupó su cuello.

Esto estaba consumiendo lentamente todo.














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( ͡° ͜ʖ ͡°)

©N0CHUSHI

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