Viernes
La semana pasa lento, para Jinsol cada día es más agotador que el anterior, pero hay una cosa que le incentiva a seguir con "buenos ánimos" al menos los mejores que tiene; ese es el viernes. Jungeun en una charla nocturna el miércoles le invita a una "salida" esa "cita" de la que alguna vez bromearon y la rubia le pidió que de verdad se hiciera.
Jinsol iba a preguntar a donde irían, a cambio recibió una negación. Jungeun dijo que iría por ella a la universidad, aprovechando que la rubia ese día salia más temprano y podría llegar a tiempo a la hora de salida de jinsol. Le dijo que ella se encargaría de la cita y lo unico que tenia que hacer era aceptar. Jinsol hace mucho tiempo que no sentía ese sacudir en su corazón esos latidos casi desenfrenados, esa sonrisa que no se borró en toda la noche después de su llamada.
Y el viernes por fin había llegado, a pesar de sus dos proyectos que presentar y uno en el que seguía trabajando, su buen humor era real ese día. Se encontró con Hyunjin antes de su primera clase, al igual que ella y todos, tenía mil proyectos y examenes que hacer, por lo tanto tenía unas notorias ojeras bajo sus ojos. Se apoyó a un lado en las taquillas continuas a la suya mientras se quejaba con un bostezo.
—Creo que podría dormir de pie, y justo aquí.—Jinsol cerró la puerta de su taquilla riéndose por su exagerada amiga que se desparramaba por las puertas de metal
—Exageras, Kim Hyunjin. Alégrate, ya es viernes.—Animó dandole n pequeño golpe en el hombro.
Hyunjin abrió sus ojos un poco solo manteniendolos entrecerrados.—¿De donde viene esa alegría?—Le preguntó con sospecha.
—¿Es viernes?
—Sí, ajá. Nunca estuviste tan feliz un viernes. Escúpelo.—Amenazó. Jinsol rodó los ojos retomando su camino en los pasillos. Hyunjin dejó los "cómodos" casilleros para alcanzar a la peliazul.—¿No vas a decirme?
—Ya lo dije, es viernes.
—Nadie aquí tiene tu alegría porque es viernes, y deja de mentir, tus orejas se ponen rojas.
Jinsol bufó moviendo su cabeza a los lados para que su cabello tapara a sus orejas traicioneras.—Bieeeeen, tengo una cita...
—¿Saldrás con Jungeun?
—¿Cómo sabes que es ella?—Preguntó rápidamente.
Hyunjin le miró incrédula.—Porque...¿es tu novia?
Oh
—Oh... S-sí. Solo estoy jugando contigo-Intentó disimular, estaba olvidando el más grande detalle. Casi destapa su mentira.—Ella vendrá por mi después de clases.—Explicó brevemente.
—Uhhh ¿Y a dónde irán?
Jinsol sonrió al recordar como Jungeun ignoraba sus preguntas en la noche para adivinar el lugar gritando "la la la" hasta que dejó de preguntar por no poder parar de reir.—No lo sé.—Se encogió de hombros.—Dijo que era una sorpresa.
—Wah ¿Quién lo diria? Yo pensé que eras tú la romántica.—Hyunjin se burló.
Jinsol miró la hora y un poco molesta por tener que dejar esa divertida conversación se fue a su primera clase. Tuvo que exponer sus proyectos, se sentía algo nerviosa, siempre se sentía así en esos días importantes, pero tenía un buen presentimiento.
Al almuerzo, ella y sus amigas se quedaron juntas en una mesa. Hyunjin ya había ido de chismosa con las demás, por lo que todas sabían de su cita con la rubia de esa tarde. Jinsol no podía sentir sus mejillas de tan tibias que estaban.
—¿P-pueden dejarme comer?—Preguntó avergonzada.
—Vamos, Jinsol. Hace mucho tiempo que no nos decías que tenías una cita, tampoco nos dijiste sobre Jungeun antes, ¿Ya no somos tus amigas o que?—Haseul dijo tocando su pecho donde el corazón se encontraba fingiendo dolor.
—No es eso... solo... no sé todas tienen sus parejas y eso..
—¿Que tiene eso? Vamos, yo te dije que me gustaba Heejin el primer día que lo asimilé.—Hyunjin dijo apuntando a la castaña a su lado que sonrió levemente por la confesión. La peliazul se sintió un poco mal, le dolía tener que mentirle específicamente a Hyunjin, habia sido su amiga, su mejor amiga y le contaba todo.
¿Cómo podía contarle que toda su relación era una farsa para no pasar más vergüenza?
—No lo sé, cuando quería contarles siempre pasaba algo y luego se me olvidaba, por eso n-nunca lo dije.—Se aseguró de tapar sus orejas para no ser delatada una vez más.
El almuerzo continuó más tranquilo una vez que Jiwoo llegó, ella tenía siempre mucho que contar, por lo que el tema de la cita, por suerte quedó en segundo plano. Su siguiente clase fue la más tranquila del día, allí no tenía nada mas que presentar por lo que se relajó hablando con la rubia por medio de mensajes mientras le contaba su dia.
Luego de todo el incidente con Sooyoung y Jungeun ambas se habían hecho cercanas, o bueno, Sooyoung practicamente perseguía a jungeun y terminaron por seguir juntandose, eso en palabras de la rubia, seguro Sooyoung tenía otra historia que contar acerca de eso.
Cuando el profesor dió la libertad para irse, Jinsol sintió su corazon latir en su garganta. Tomó todas sus cosas avisándole a la rubia que por cierto ya habia llegado, que ya se dirigía a la salida. Sus pasos eran torpes y rapidos hasta la salida.
No tuvo que mirar mucho, a unos metros justo en frente de la salida estaba Kim Jungeun con su cabello rubio brillando, o tal vez era jinsol viendolo asi de brillante, no lo sabía. Jungeun levantó su mano para saludarla y Jinsol devolvió el gesto con timidez antes de caminar hacia ella con una sonrisa.
—Hola—Saludó la rubia. Jinsol tomó el valor y se estiró a darle un beso en la mejilla como saludo.—Con eso no harás decirte a donde iremos.—Jungeun dijo escondiendo horriblemente su sonrojo.
—¿Por qué no? No me puedes decir que es una sorpresa y tengo que esperar casi tres días para eso.—Se quejó con un puchero.
Jungeun sonrió y le estiró su brazo doblado para entrelazarlos.—¿Quieres ir a ver tu sorpresa o seguir aquí?
La peliazul sonrio doblando su brazo junto con el de jungeun.—Vamos.
Ha pasado casi un año de que había actualización de esto, espero les guste ;A;
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