[Universo 282, 1991]

El viento soplaba fuerte en la ciudad de Nueva York, un viento de nostalgia y tristeza pues la ciudad no parecía estar en sus mejores condiciones. Edificios destruidos y en llamas, solitario y muy lejos de ser llamativo para las personas.

A lo largo, subido entre los escombros de un edificio viejo, un hombre apreciaba la destrucción de aquel lugar.

—¿Me dirás que ahora sientes nostalgia por lo que hemos hecho? — preguntó una voz femenina.

—No es la primera ciudad que hemos destruido, querida, ni tampoco la última...

—Entonces hay que volver, hemos esperado demasiado para lograr hacernos con ese universo, estos entrometidos que han aparecido no volverán a aparecer en un buen tiempo. — dijo aquella mujer acercándose al hombre.

—Amanda Waters y Jeremy Spooner, los amos de los universos... me gusta como suena. — dijo el sujeto con una sonrisa.

—Con el nuevo aparato que nos dio Keiran, ya no necesitaremos este... sucio e inútil artefacto. — dijo la mujer pelinegra para luego soltar un pequeño artefacto tecnológico que tenía en su mano.

Activó el otro artefacto que tenía en su mano y junto a Spooner desaparecieron del lugar tras una pequeña espiral de color azul que se abrió tras ellos.

[Universo Principal, 019 - 1982]

Waters y Spooner aparecieron en la oficina del máximo cargo del Ministerio de Magia Británico, puesto que desempeñaba Spooner.

—Haz los preparativos y llama a Hank, tenemos que ser rápidos pero precavidos.

—Estoy en eso, tú relájate.

Waters salió por la puerta principal mientras guardaba aquel artefacto en uno de sus bolsillos secretos.

[Universo 282]

Aquel dúo había desaparecido hace algunos segundos de donde estaban, la ciudad seguía silenciosa hasta que aquella ausencia de ruido fue interrumpida por los pasos de una persona sobre los escombros.

—Te tengo... — susurró una voz femenina mientras tomaba aquel viejo artefacto que Waters había lanzado al piso.

Aquella mujer castaña de ojos claros activó el aparato y fue transportada al mismo universo que Waters y Spooner.