Capítulo 16: Siendo Un Líder.
Todo era un caos en aquel evento, los encantamientos volaban por todo el lugar impactando en paredes, suelo e incluso en los magos y brujas presentes en el sitio. Spooner era escoltado por Keiran Hank abriéndose paso entre las personas para llegar hasta donde estaba Amanda Waters pero la gobernadora de Letonia estaba acorralada por aquellos dos hombres castaños los cuales eran Annika y Arya con otra apariencia.
—Ayuda a Amanda, déjame con los aurores. — ordenó Jeremy a Hank.
—Habrá que vernos en el Ministerio cuando esto termine. — contestó el pelirrojo.
Dio un par de pasos para acercarse a donde estaba la pelinegra pero un encantamiento lo lanzó al suelo rodando algunos metros.
—No van a ir a ningún lado sin pagar las consecuencias de lo que han hecho. — dijo Isaac mientras se deshacía de los aurores que escoltaban a Spooner.
Amanda levantó su varita e intentó atacar a Isaac al mismo tiempo que Spooner tomaba su varita para también atacar al hombre, sin embargo Arya se adelantó y con la magia de sus manos lanzó una cuerda hasta Isaac y tiró de ella para evitar que el encantamiento de Waters le afectara.
—Gracias… — susurró el muchacho cuando cayó al suelo.
—¿Hora del plan? — preguntó Annika tras la apariencia de Elías.
—Sí, tomen sus posiciones. — contestó Isaac quién se levantó rápidamente.
—Hagamos esto rápido. — dijo el hombre tras Arya.
El trío estaba preparado, Spooner y Waters los miraban a lo largo con caras serias, a ellos se unió Keiran.
—Matenlos a todos. — ordenó Spooner a los aurores que estaban tras ellos.
Rápidamente Isaac corrió y se lanzó contra Keiran apartandolo de Spooner y Waters, ambos comenzaron una pelea a puño limpio en el lugar.
Annika rápidamente comenzó a atacar a los aurores que intentaron ir tras Isaac mientras Arya atacó con fuertes encantamientos a Amanda y Spooner.
—¿Qué está sucediendo ahí dentro? — preguntó uno de los aurores que estaban a las afueras del lugar a uno de sus compañeros.
—Será mejor ir a ver, muchachos vamos a entrar, cubran nuestras posiciones.
—Entendido.
El par caminó hasta la entrada, abrieron la puerta y al hacerlo un encantamiento qué rebotó en las paredes del lugar impactó al auror enviándolo a volar por los aires.
—¡Están atacando el lugar, todos dentro! — exclamó el otro auror junto a la puerta.
Cómo si fuera una manada de lobos hambrientos los aurores cruzaron aquella puerta con varita en mano y comenzaron a atacar a los magos y brujas dentro del lugar.
Isaac y Keiran se pusieron de pie, estaban frente a frente, el castaño miraba con odio a su rival mientras él no quitaba aquella sonrisa maliciosa de su cara.
—Espero que ahora si tengas el valor de proteger muy bien por lo que sea que luchas y no dejes morir a tus amigas como lo hiciste con tu familia. — soltó Hank al castaño.
—Vas a morir por eso, te lo aseguro. — contestó Isaac sin más.
Keiran comenzó a reír por unos segundos y luego cesó, con su varita lanzó un encantamiento a Thargot tratando de tomarlo desprevenido pero el hombre fue rápido y lo esquivó, una batalla entre los dos se libró en el lugar combinada de golpes y encantamientos.
Del otro lado, los aurores británicos protegían a Spooner de los ataques de Arya mientras Annika había acabado con todos los protectores de Amanda Waters, rápidamente se unió a Arya para ayudarla contra aquellos dictadores.
—Yo por él y tu por ella, ¿qué dices? — preguntó Arya.
—Me parece justo, vamos.
Annika lanzó un par de encantamientos a los aurores que escoltaban a Jeremy, luego de eso se acercó a él y le habló.
—Pagarás lo que le hiciste a mi padre.
—Es curioso, la última vez que lo vi siendo joven fue en el funeral de tu madre… — contestó Spooner con una sonrisa.
Annika atacó sin pensarlo, lanzó algunas maldiciones y hechizos contra Jeremy pero él logró repelerlos con sencillez, luego contraatacó de forma rápida e impactó dos encantamientos contra Annika, uno de ellos dio en el aparato qué ayudaba a cambiar su forma, el mismo quedó destruido y la apariencia de Elías Prewett había desaparecido.
—Ahora sí daré el gusto de matarte viéndote a los ojos. — soltó Jeremy.
Annika enfureció, se puso de pie y tomó su varita con fuerza para abalanzarse contra Spooner nuevamente.
Mientras aquella batalla sucedía, Arya se las arreglaba para evitar que Waters huyera del lugar, la pelinegra había huido hasta la salida de emergencia pero las puertas se cerraron de golpe al intentar pasar por ellas.
—No hay dos opciones, Waters, deberás luchar si quieres salir de esta. — dijo Arya con su apariencia normal detrás de aquella pelinegra.
—No quieres hacer esto, Sawyer, no le temo a tus insignificantes poderes. — dijo Amanda mientras se daba la vuelta para mirar a Arya de frente.
—Pues deberías. — contestó la pelirroja.
La chica hizo un movimiento con sus manos para invocar la magia mística qué había sido heredada de su madre, un aura naranja se formó alrededor de su cuerpo y sus ojos cambiaron de verdes al mismo color naranja de su aura.
Amanda no se contuvo, lanzó varios encantamientos a la pelirroja con mucho poder pero no fueron suficientes para detener a la chica.
Antes de lograr atacar a la pelinegra, aquel grupo de aurores se hizo presente para atacar a Arya y proteger a Waters.
—¡Estoy cansada de ustedes! — exclamó Arya.
La chica comenzó a lanzar encantamientos contra los aurores para deshacerse de ellos.
—¡Waters está huyendo! — exclamó Annika mientras forcejeaba un choque de encantamientos contra Spooner. —¡Isaac, haz algo! —agregó la castaña.
Thargot se distrajo al escuchar su nombre pero volvió a la pelea al sentir un golpe fuerte en su cara por parte de Keiran.
—¡Yo estoy frente a ti, no te distraigas! — exclamó el pelirrojo.
Isaac devolvió el golpe con fuerza enviando al pelirrojo directamente al suelo, intentó acercarse para molerlo a golpes pero una explosión en el lugar había enviado a volar a todos por los aires.
El forcejeo entre Annika y Spooner había sido el causante de la explosión, la castaña se puso rápidamente de pie y tomó su varita pero al hacerlo notó que estaba rota.
—No… — susurró con algo de tristeza al ver su varita partida en dos, el último regalo que había recibido de su padre había sido destruido.
—¡Crucio! — exclamó Spooner apuntando hacia Annika, la castaña comenzó a sentir dolor por todo su cuerpo.
Keiran se había levantado primero que Isaac, el hombre sostenía al castaño de sus brazos en forma de una llave mientras lo obligaba a mirar como Spooner torturaba a Annika.
—Observalo Thargot, estas son las consecuencias de sus actos y llegó la hora de pagar. — dijo Hank.
—¡Déjala en paz, maldito, tú problema no es con ella! — exclamó Isaac hacia Spooner.
—¡Mi problema es con todos ustedes, todos los que se han entrometido en mis asuntos! Les juro que buscaré a todos y los haré pagar… y comenzaré con ustedes. ¡Crucio!
Annika soltó unos cuantos gritos de dolor mientras se revolcaba en el suelo.
—Déjala ir, déjala ir. — susurraba Isaac mientras miraba a Spooner.
El castaño soltó un grito de dolor pues Keiran había apretado aquella llave con más fuerza.
—Hazlo, señor Spooner. — dijo el pelirrojo.
—Tendrás el honor de ser la segunda Prewett a mi lista de muertes… — dijo Jeremy a Annika.
La chica se dio vuelta, intentó levantarse del suelo pero el dolor que sentía aún era intenso, solo alcanzó a mirar a Isaac a los ojos con un par de lágrimas en ellos.
—¡No lo hagas Spooner, lo pagarás, lo juro! — exclamó Isaac.
—¡Avada Kedav…!
Un golpe seco en el suelo interrumpió el encantamiento asesino de aquel hombre, rápidamente giró a ver de que se trataba. Amanda Waters había caído en aquel lugar, su cuerpo estaba golpeado y tenía una qué otra herida en él, la pelinegra se levantó del suelo a como pudo.
—Amanda, ¿Qué diablos…?
—Te dije que no ibas a escapar, Waters, tú te causaste esas heridas. — dijo Arya acercándose al lugar aún con aquel aura alrededor de ella, con sus manos hizo un movimiento para atraer a Annika hacia ella.
—Eres genial. — dijo la castaña con dificultad.
—Estarás bien, ahora vamos a hacernos cargo. — contestó la pelirroja.
Isaac aún seguía sometido ante la llave de Keiran pero el hombre estaba distraído mirando lo que sucedía, rápidamente el castaño echó su cabeza hacia atrás con fuerza golpeando la nariz del pelirrojo, se soltó de aquel agarre y con un movimiento de cuerpo atacó las piernas de Hank lanzandolo al suelo, Arya usó su magia para lanzarlo contra Amanda y Spooner, los tres cayeron al suelo tras aquel impacto.
—¿Y ahora qué? — preguntó la pelirroja mientras ayudaba a Annika a levantarse del suelo.
—Vayan tras Spooner y Waters, yo me haré cargo de Keiran. — dijo el castaño.
—No creo que estés a su nivel, Isaac… tal vez deberíamos hacer esto juntos y atacarlos uno por uno. — dijo Arya.
—Será inútil, sigamos el plan y no dejen que Amanda y Jeremy se separen, no saben trabajar en equipo.
—Tiene razón Arya, tú y yo podemos derrotarlos. Pero tendrás que protegerme de sus encantamientos, mi varita está rota… — dijo Annika.
—Los atacarás cuerpo a cuerpo, te abriré paso. ¿Están listos? — preguntó la pelirroja.
—Acabemos con esto. — soltó Isaac.
Keiran, Amanda y Spooner seguían en el suelo, el trío intentó ponerse de pie pero fueron tomados por sorpresa por la magia de Arya, Hank cayó casi a los pies de Thargot para separarlo de aquel otro par.
—Es hora de que se rindan, les aseguro que no obtendrán nada si siguen luchando. — soltó Arya hacia aquella pareja.
—¿Cuándo vas a usar tu máximo poder? — preguntó Spooner a Amanda, la pelinegra lo miró y luego sonrió.
Un aura color violeta rodeó a Waters similar a lo que sucedía con Arya.
—Creo que tiene tus mismos poderes… — susurró Annika.
—Eso le daría sentido a la explosión en Hogsmeade cuando chocamos encantamientos. — contestó Arya.
Waters y Spooner comenzaron a lanzar encantamientos a aquel par pero Arya logró repeler todos para que Annika se acercara a ellos, la castaña logró impactar un par de golpes en Spooner y una patada a Waters en su torso la envió al suelo. Rápidamente la pelirroja envolvió a Spooner en aquella magia para evitar que siguiera atacando.
—¡Se acabó! — exclamó la pelirroja.
Mientras Arya sometía a Spooner, la batalla entre Isaac y Keiran seguía vigente pero esta vez parecía que Isaac tenía la delantera.
—No vas a lograr nada esta noche, señor Thargot. — dijo Keiran.
—Ya lo veremos.
El castaño se acercó para golpear a Keiran, le dio un par de golpes qué lo dejaron aturdido pero logró esquivar el tercero, de su bolsillo sacó una navaja y atacó a Isaac haciéndole una herida en su brazo, el castaño se enojó y lanzó un golpe a la cara de Keiran tan fuerte que lo envió de rodillas al suelo, una vez ahí el hombre no tuvo piedad y comenzó a golpear al pelirrojo de forma brutal por todo su cuerpo.
Annika estaba distraída mirando a Spooner por los aires gracias al poder de Arya, la chica no se percató qué Waters estaba tras ella, la pelinegra soltó un golpe que la lanzó al suelo, se acercó hasta la castaña y le quitó de su bolsillo el aparato con el que había llegado a aquel universo, apretó el botón y un portal se abrió, tomó a Annika con la magia de sus manos y la lanzó por aquel portal.
—¡No! — exclamó Arya al ver aquella escena.
Waters cerró el portal, lanzó el objeto al suelo y lo destruyó con su pie al pisarlo.
—Una menos… — susurró la pelinegra.
Arya tuvo que soltar aquello flujo mágico qué sostenía a Spooner e intentó atacar a Amanda pero la pelinegra fue más rápida y lanzó una ráfaga qué aturdió a la chica, luego de eso lanzó un último encantamiento qué dejó a Arya inconsciente en el suelo.
—¿Qué estás esperando, Thargot? — preguntó Keiran al verse derrotado frente a Isaac aún de rodillas en el suelo.
El castaño no dijo ninguna palabra, le quitó aquella daga de sus manos y parecía estar preparado para apuñalar al pelirrojo pero tras algunos segundos de cuestionarselo soltó aquella arma.
—Morir es muy sencillo, por eso pagarás de otra manera. — contestó el hombre.
Keiran soltó una risa burlona y luego habló.
—Creí que ya no eran aquel debilucho, haré qué pagues las consecuencias. Asesinaré a todos tus amigos como lo hice con tu tía, no quedará nadie. — dijo Hank.
Isaac puso una cara de enojo, intentó darle un último golpe al pelirrojo pero antes de lograrlo notó como una luz verde le había impactado al hombre frente a él, luego de eso el cuerpo de Hank cayó sin vida al suelo.
Isaac volteó su mirada y vio a Spooner con la varita en mano, él había asesinado a Keiran.
—Serás el siguiente. — dijo el hombre.
Un gran grupo de aurores entró al sitio, rápidamente se dirigieron hacia Spooner y Waters para sacarlos del lugar, Isaac aprovechó para acercarse a Arya quien seguía en el suelo medio inconsciente.
—¡No se mueva o lo lamentará! — exclamó un auror apuntando a Isaac con su varita.
—La devolvieron a su mundo… nos la quitaron. — susurró Arya a Isaac.
—¿De qué hablas?
—Annika, ya no está. — agregó Arya.
Isaac se quedó en silencio al escuchar las palabras de Arya, se puso de pie lentamente mientras empuñaba su varita con fuerza.
—Arrestenlos, hay que llevarlos a Azkaban lo más pronto posible.
Un auror se acercó e intentó tomar a Isaac de su brazo pero el castaño respondió soltandose del agarré y dando un fuerte golpe en la cara del auror. Después de eso recibió una fuerte lluvia de encantamientos de la cual logró protegerse con un encantamiento.
—¡Atrapenlo, vamos! — exclamó el líder de aquellos aurores.
Isaac dio un grito de coraje y comenzó a pelear contra aquellos hombres combinando la magia con golpes y patadas pasadas de fuerza en algunos casos, en cuestión de segundos logró derrotar a todos los aurores del lugar, se encontraba exhausto por aquella hazaña.
Con sus pocas fuerzas el muchacho se acercó hasta donde estaba Arya, le ayudó a ponerse de pie y luego se eso desaparecieron del lugar tras un fuerte estruendo.
[Universo 282]
Aquella castaña se encontraba sobre el suelo de un edificio abandonado en Inglaterra, rápidamente despertó y se sentó de golpe, se levantó algo asustada y comenzó a inspeccionar todo el lugar.
—Estoy… no, no, no. — dijo para sí misma, corrió hasta una ventana cercana para mirar la ciudad, al hacerlo notó que todo estaba en ruinas y las únicas personas que se veían a lo largo eran los aurores que trabajaban para Spooner, los mismos portaban uniformes totalmente negros con detalles rojos en ellos.
La castaña se adentró más a la ciudad, se escondió tras un muro cuando escuchó a un grupo de aurores hablando entre ellos.
—Hay que informar al jefe, lo conseguimos.
—¿De qué hablan?
—Esta tarde un grupo de mis hombres y yo por fin lo logramos, “La Resistencia” cayó y ahora son solo un mito. — dijo aquel hombre.
Annika escuchó aquellas palabras y sus ojos se abrieron de forma sorpresiva, tapó su boca para no emitir ningún ruido pero las lágrimas de sus ojos evidenciaban su condición.
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